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Apuntes de Psicología

Colegio Oficial de Psicología de Andalucía Occidental,


V. Escuredo La creación de la alianza terapéutica en la Terapia Familiar
2009, Vol. 27, número 2-3, págs. 247-259. Universidad de Cádiz, Universidad de Huelva y
ISSN 0213-3334 Universidad de Sevilla

La creación de la alianza terapéutica en la


Terapia Familiar
Valentín ESCUDERO CARRANZA
Universidad de A Coruña

Resumen
Este artículo trata de las dificultades y estrategias específicas que se dan en el con-
texto de la terapia familiar para la creación de colaboración entre terapeuta y clientes.
A partir de la revisión del concepto de alianza terapéutica en psicoterapia, tanto desde
la perspectiva teórica como desde el plano de la investigación, se analiza cómo pueden
integrase los conocimientos derivados de la psicoterapia individual en el marco particular
de la terapia familiar. Se describe además un modelo específico (SOATIF) para la eva-
luación de la calidad de la alianza terapéutica, durante el proceso de la terapia familiar,
que se compone de cuatro dimensiones que configuran en conjunto la alianza terapéutica:
Enganche en el proceso terapéutico, Conexión emocional con el terapeuta, Seguridad
dentro del sistema terapéutico y Sentido de compartir el propósito en la familia.
Palabras clave: alianza terapéutica, investigación de proceso, factores comunes.

Abstract
The specific difficulties and strategies to create collaboration between therapist
and clients in the context family therapy are analyzed. A review of the research and
theoretical literature on the concept of therapeutic alliance is used to analyze how the
knowledge from the individual psychotherapy can be applied to the particular context of
conjoint family therapy. Additionally, a specific model for the evaluation of the quality
of the therapeutic alliance (SOATIF) in the process of family therapy is described. The
four dimensions that compoun the SOATIF model are: Engagement in the therapeutic
process, Emotional connection with the therapist, Safety within the therapeutic system,
and Shared Sense of Purpose within the Family.
Key words: Therapeutic Alliance, Process Research, Common Factors.

Dirección del autor: Departamento de Psicología, Facultad de Ciencias de la Educación, Campus de Elviña, Univer-
sidad de A Coruña. 15071 A Coruña. Correo electrónico: vescudero@udc.es

Recibido: mayo 2009. Aceptado: julio 2009.


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La relación terapéutica en el trabajo se enfrente a la complicada y ardua labor de


con familias: un sistema complejo y establecer un contexto de colaboración con
dinámico el grupo de personas que asisten a la sesión,
para lo cual tiene que establecer una alianza
El trabajo terapéutico con una pareja con cada individuo y con el conjunto de todos
o familia parte de una complejidad inicial ellos. Incluso en ocasiones en las que los
que lo hace diferente de otros tipos de tera- motivos para buscar ayuda pueden parecen
pias individuales: la creación de la relación a primera vista similares o por lo menos
terapéutica implica múltiples niveles de re- congruentes (una pareja en la que ambos
lación que el terapeuta tiene que considerar desean fortalecer su matrimonio en crisis
y manejar adecuadamente. La familia G. es después de años de convivencia armoniosa,
un ejemplo típico: acuden a un terapeuta fa- una madre y un hijo adolescente que acuden
miliar por “prescripción” del colegio al que al terapeuta preocupados por el régimen de
acude su hijo adolescente después de meses visitas al padre establecido por el juez, una
de mucha conflictividad en todos los frentes, pareja preocupada por los comportamientos
dos expulsiones del colegio, una fuga de su disfuncionales que no saben cómo manejar
casa después de una violenta discusión entre en su hija recientemente adoptada, etc.), no
el adolescente y su padre, amenazas por parte es infrecuente que el terapeuta se encuentre
del hijo y de los padres de acudir a realizar en las primeras sesiones con situaciones o
una denuncia en el servicio de protección de motivaciones muy contrapuestas cuando
menores. Su situación ha movilizado a algu- no conflictivas (la mujer no lo sabía pero el
nos familiares pero también ha traspasado el marido tuvo una aventura, el hijo en realidad
ámbito familiar y ya el colegio “recomienda” prefiere pasar más tiempo con su padre, uno
acudir a un servicio público para el tratamien- de los padres adoptivos tuvo siempre dudas
to familiar al tiempo que hace ver a la familia sobre la adopción y está muy inseguro).
que “desde el colegio no queremos cursar Tanto la investigación como la experiencia
ningún tipo de denuncia sino simplemente clínica reflejan que el establecimiento de la
ayudar a que la familia reciba ayuda para alianza terapéutica en la terapia de familia
que el chico se estabilice…”. Hay muchos representa un reto no solo por el número de
otros perfiles, algunos menos extremos pero personas involucradas, sino también por la
otros incluso más conflictivos y de mayor complejidad y diversidad (a veces contra-
crisis, de entrada de una familia en la terapia, dicción) de las motivaciones y expectativas
pero es muy común que el inicio tenga este sobre la terapia.
tipo de características: la relación entre los El conflicto en los motivos y expectativas
miembros de la familia es conflictiva y hay de la terapia no son tampoco algo circunscrito
un clima emocional negativo, hay miembros a la propia familia, hay ocasiones en las que el
de la familia que ven en la terapia una posi- contexto de derivación es vivido por la fami-
bilidad valiosa de ayuda pero otros vienen lia como una intrusión, por ejemplo por parte
sin ganas o incluso sintiéndose obligados y de los Servicios de protección a la infancia,
“acusados” de algo. o de los Juzgados de Familia, o del sistema
En este tipo de situaciones es común escolar. Las condiciones para la creación de
que concurran motivos en conflicto (Beck, una buena relación terapéutica pueden estar
Friedlander y Escudero, 2006) y el terapeuta dañadas de antemano por una situación de

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coerción que la familia va a proyectar en su bargo, en la terapia familiar, cada miembro


relación inicial con el terapeuta. de la familiar no puede controlar lo que otros
Dentro de la complejidad de la dinámica decidan decir y cada uno de los participantes
de relaciones iniciales que afectan a la crea- está expuesto a lo que otros decidan desve-
ción de una buena relación terapéutica con la lar. Al igual que los miembros de la familia
familia hay dos aspectos de gran relevancia: no puede esquivar un secreto vergonzoso
(1) la estructura de poder de la familia, que cuando alguno de ellos decide destaparlo, el
puede hacer vulnerables a determinados terapeuta tampoco puede controlar totalmen-
miembros de la familia (con mucha fre- te que esto se produzca y tenga efectos no
cuencia los menores, y también las mujeres deseados sobre el clima más adecuado para
respecto a los hombres), y esta vulnerabilidad la colaboración de todos. Ese clima está de-
puede en ser extrema si aquellos que hacen terminado por la creación de Seguridad, una
uso de ese poder son abusivos; (2) el con- de las características esenciales de la alianza
flicto en crisis, expresado en el hecho de que terapéutica (que definimos más abajo). Sin
muy a menudo las familias buscan –o son duda la necesidad de seguridad dentro del
remitidas- la terapia cuando hay un conflicto entorno terapéutico es una característica
agudo entre sus miembros. necesaria del tratamiento con familias (Frie-
Es obvio que en la terapia de formato y dlander, Escudero y Heatherington, 2009).
enfoque individual también el conflicto está Aunque el cliente de la terapia individual
presente, el cliente individual puede acudir también necesita sentirse seguro, él y el tera-
a terapia por un conflicto en relación con peuta tienen más control de lo que se dice y
personas significativas para él, por ejemplo de la oportunidad y ritmos para ir tratando as-
con miembros de su familia. Pero en ese pectos que resultan difíciles para el cliente o
caso es el cliente quién decide cómo revelar que pueden perturbar la relación terapéutica.
la naturaleza y el alcance de ese conflicto En definitiva, la situación, frecuente
y la dinámica del conflicto no tiene por en la terapia familiar, de que los miembros
qué contaminar la relación inicial con el de la familia tengan motivos contrapuestos
terapeuta. En la terapia familiar conjunta, al o en conflicto para querer (o, en algunos
acudir el cliente a la terapia con las personas miembros, rechazar) la terapia, requiere de
que mantienen el conflicto, lo que sucede en la creación de un contexto seguro para to-
la sesión no sólo puede estar contaminado dos. Esta es por lo tanto una tarea esencial y
del conflicto en sí, sino que lo que acontece primaria del proceso de terapia que algunos
en la sesión tiene consecuencias en la vida autores consideran incluso una precondición
cotidiana (Friedlander, 2000). para un posterior desarrollo adecuado de
Otro corolario del conflicto es que en la terapia (Escudero, Friedlander, Varela y
muchas ocasiones los secretos van unidos al Abascal, 2008).
conflicto (Imber-Black, 1993). Y los secretos La comunicación entre terapeuta y fa-
también tienen una influencia diferenciada en milia está enmarcada a su vez en el tipo de
la terapia familiar conjunta, con consecuen- comunicación que tienen los miembros de la
cias particulares en el establecimiento de un familia entre ellos. Podemos afirmar que, al
clima de colaboración y alianza de trabajo igual que pasa en una terapia individual, es
con el terapeuta. En la terapia individual el esencial la forma en la que el terapeuta cons-
cliente elige qué va a revelar y qué no; sin em- truye la historia y la definición del problema,
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a partir de las quejas y demandas de ayuda de El vínculo que establece el terapeuta


los clientes. Sin embargo, no es infrecuente con el cliente tiene un foco claro en el caso
que en la terapia familiar algunos miembros de la terapia individual, pero es multifocal y
de la familia comiencen la terapia menos inte- complejo en el caso del tratamiento de una
resados en el punto de vista del terapeuta que familia. Ese vínculo tiene que ser fuerte con
en cómo van a definir el problema los otros todos los miembros de la familia, no única-
miembros de la familia. En aquellas familias mente con los que acuden a todas las sesio-
en las que hay poca comunicación (por un nes, sino también con miembros de la familia
clima emocional distante y frío, o bien muy que tienen un rol más indirecto en el sistema
conflictivo y cargado de agresividad) lo más terapéutico (Pinsof, 1995), por ejemplo, un
común es que un cliente no tenga una idea padre que acude de vez en cuando pero que
correcta de cómo le ve su pareja, o sus hijos, tiene una gran influencia en las decisiones, o
o sus padres o hermanos. La ansiedad está una abuela que apenas conoce personalmente
presente en la relación terapéutica como el terapeuta pero que se ocupa muchas horas
una consecuencia de la relación familiar. El del cuidado de un niño.
terapeuta tiene que estar preparado (desde Un fenómeno característico únicamente
un punto de vista teórico y también en su de la terapia de familia es la “alianza di-
formación práctica) para afrontar esta ansie- vidida” (Muñiz de la Peña, Friedlander y
dad adecuadamente y crear un clima seguro Escudero, 2009). Ese patrón en la relación
y de alianza terapéutica (Carpenter, Escu- terapéutica se da cuando uno de los miembros
dero y Rivett, 2008; Friedlander, Escudero de la familia se siente mucho más vinculado
y Heatherington, 2009). La preparación del emocionalmente al terapeuta que otro. Una
terapeuta tiene que servir para que sea capaz forma de alianza dividida es aquella situación
de mostrar receptividad a las preocupacio- en la que algunos miembros de la familia son
nes de todos los miembros de la familia, ya neutrales en relación con el terapeuta (no
que esa receptividad puede determinar la muestran ninguna señal verbal o no verbal de
motivación de éstos para comprometerse buena conexión con el terapeuta, pero tampo-
con el tratamiento más allá de la primera co hay indicios de mala relación) y en cambio
sesión (Shapiro, 1974). La complejidad del otros son claramente positivos. Sin embargo,
tratamiento conjunto de una familia reside la alianza dividida de tipo “severo” (Muñiz
en que cada miembro no sólo le expresa de la Peña, Friedlander y Escudero, 2009) es
(verbal y no verbalmente) al terapeuta sus la más perniciosa para el proceso de terapia
sentimientos y reacciones, sino que expresa ya que predice el abandono del tratamiento;
también en cierta manera (generalmente este tipo de alianza dividida se da cuando
indirecta) los sentimientos y reacciones de los sentimientos positivos de alguno de los
todos los demás que están en la sala (Pinsof clientes hacia el terapeuta (buena conexión
y Catherall, 1986; Rait, 1988). Un estudio emocional) se contraponen al claro y patente
(Quinn, Dotson y Jordan, 1997) sobre tera- antagonismo hacia el terapeuta por parte de
pia conjunta reflejó bien esta idea al apuntar otros miembros de la familia.
que las mujeres tendían a ser más sensibles En cierto nivel, la dificultad para es-
a la percepción que tenían los demás del tablecer una relación de alianza de trabajo
terapeuta, especialmente sus maridos, que a con todo el sistema familiar es endémica al
su propia percepción del terapeuta. tratamiento familiar conjunto, ya que hay

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factores relacionados con la propia naturaleza La alianza terapéutica: definición e


y dinámica del sistema familiar que explican investigación
que resulte más fácil (o más espontánea) la
relación del terapeuta con algunas partes El uso del término alianza en psico-
de la familia que con otras. Por ejemplo, el terapia ha tenido una larga y significati-
terapeuta es un adulto, y por ello los niños va historia. Fue originalmente planteado
y especialmente los adolescentes tienden a por Freud (1912-1959) diferenciando la
percibirle inicialmente como un aliado de ‘alianza’ de la ‘transferencia’: en contraste
sus padres. Si se trabaja con una pareja hete- con los sentimientos «reales» del paciente
rosexual, el género del terapeuta es el mismo hacia el analista, la transferencia se refiere
que el de uno de los dos clientes y opuesto al el desplazamiento hacia el analista de los
del otro. sentimientos, impulsos y necesidades del
El trabajo del terapeuta familiar para paciente relacionados con otras personas
crear un sistema terapéutico caracterizado significativas para él. La alianza de trabajo
por las alianzas debe sustentarse en aspectos estaría relacionada en esta visión psicoana-
tanto técnicos como teóricos (Carpenter, lítica con la transferencia «no objetable» o
Escudero y Rivett, 2008). Es importante que «positiva» (Freud, 1940), entendida como el
el terapeuta entienda bien el concepto de afecto y la confianza del paciente en relación
alianza terapéutica y que tenga un modelo con el terapeuta, es decir, aspectos que no son
claro de qué aspectos o dimensiones esen- objeto del análisis, y que proporcionan la base
ciales configuran la alianza terapéutica en el y la motivación para el trabajo terapéutico
tratamiento conjunto de parejas o familias (Muran y Safran, 1998).
(Friedlander, Escudero y Heatherington, Entre la conceptualización psicoanalítica
2006). Desde el plano técnico hay una orien- y la actual definición de la alianza terapéu-
tación básica: el terapeuta tiene que prestar tica ha habido muchas aportaciones valiosas
atención simultánea a las necesidades del (puede verse una revisión completa en Cor-
sistema, entrelazándolas de una forma que bella y Botella, 2003; y también Friedlan-
tenga sentido para todos mediante el “re- der, Escudero y Heahterington, 2006, cap.
encuadre” del problema. Dicho re-encuadre 1). Entre ellas, de Bibring (1973) y Sterba
suele incluir señalar las buenas intenciones de (1934), psicólogos del Yo (Ego Psychology)
todos (Pittman, 1987), así como enfatizar los que argumentaron y fundamentaron objecio-
valores comunes y las fortalezas del conjunto nes al principio de las relaciones objetales,
(Coulehan, Friedlander y Heatherington, por el cual todo lo que un cliente siente en
1998). El trabajo de re-encuadre inicial del relación con el terapeuta es una reacción
problema es básico porque la creación de una transferencial. Estos autores aportaron una
buena alianza con el sistema familiar en su perspectiva nueva centrando su atención en
conjunto y entre los miembros de la familia la adaptación del paciente a la realidad y en
exige muchas veces transformar las metas los aspectos positivos y no trasferenciales
individuales en metas del grupo, de forma de la relación terapéutica. Aparece así un
que la terapia sea experimentada por cada reconocimiento nuevo del rol que juega la
miembro de la familia como “nuestra terapia” persona del terapeuta, más allá de una con-
y no como “tenemos que venir a la terapia de ceptualización rígida en la que el terapeuta
nuestro hijo”. era únicamente un lienzo en blanco donde se
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plasmaban las distorsiones (transferencia) del el a veces arduo trabajo que representa el
paciente. Muran y Safran (1998) consideran cambio terapéutico. De manera que a partir
que el reconocimiento de que la alianza de de esa conceptualización, la alianza terapéu-
trabajo era tan importante como el trabajo tica representa la cualidad y la fortaleza de
sobre la transferencia hizo posible que al- la relación de colaboración entre el cliente y
gunos terapeutas psicodinámicos iniciaran el terapeuta incluyendo “los lazos afectivos
intervenciones distintas de la interpretación entre ambos, tales como la confianza mutua,
de la transferencia y se planteasen adoptar el consenso en el respeto y el interés…, un
una posición terapéutica que no fuera la de compromiso activo con las metas de la tera-
la estricta neutralidad. pia y con los medios para alcanzarlas…, y
En 1973 H. Strupp hizo una contribu- un sentido de asociación” (Horvath y Bedi,
ción muy importante al fundamentar la idea 2002, pág. 41).
de que la alianza terapéutica es decisiva no Actualmente el reconocimiento de la
solamente en el contexto de la psicoterapia importancia de la relación terapéutica y su re-
psicoanalítica, sino en todos los modelos lación con la eficacia del tratamiento es muy
de terapia. Strupp describe la alianza como general en todos los modelos de psicoterapia,
un constructo que traspasa diferentes mo- incluso en aquellos tradicionalmente más in-
delos teóricos y que influye en la eficacia teresados en los mecanismos específicos del
de cualquier terapeuta aunque use técnicas cambio que en la propia relación terapéutica.
diferentes (analíticas, de modificación de Por ejemplo, puede argumentarse que las
conducta, Gestálticas, etc.). Durante todo terapias cognitivo-conductuales, aunque no
el desarrollo teórico del concepto de alianza hayan integrado de forma explícita el concep-
terapéutica, desde su aparición en la literatura to de alianza terapéutica en su argumentario
sobre psicoterapia en 1930, se han definido teórico, son intrínseca y explícitamente
muchos aspectos que influyen en la creación terapias de colaboración. Forma parte de
de la alianza (por ejemplo, la capacidad del los protocolos de intervención cognitivo-
cliente para conectar con el terapeuta, o las conductual el proporcionar a los clientes
características personales del terapeuta, el una razón convincente acerca de las metas
compromiso del cliente con los objetivos del del tratamiento y de las tareas que requerirá
tratamiento, etc.), pero fue E. S. Bordin al alcanzar tales objetivos.
final de los años 70 el autor que consiguió una La alianza terapéutica es una variable del
definición global que incorporaba las contri- proceso de la terapia. Y la investigación de
buciones teóricas previas. La conceptualiza- proceso-resultado, es decir, la investigación
ción de la alianza hecha por Bordin (1979) es orientada a estudiar que aspectos del proceso
el modelo de alianza más heurístico, el que de terapia predicen un buen resultado de los
ha tenido mayor influencia en la psicotera- tratamientos ha sido muy consistente sobre
pia individual. Bordin definió la alianza de la importancia de la alianza terapéutica: la
trabajo sobre la base de tres componentes: alianza es predictiva del resultado para una
(1) el acuerdo entre el terapeuta y el cliente variedad de enfoques terapéuticos (indi-
acerca de las metas del tratamiento, (2) el viduales) cuando se mide al principio del
acuerdo de ambos sobre las tareas necesarias tratamiento, y especialmente cuando se mide
para conseguir esos objetivos, y (3) los lazos desde la perspectiva del cliente -es decir, en
afectivos necesarios entre ellos para sostener base a los auto-informes del cliente- (Caston-

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guay, Constantino y Holtforth, 2006; Horvath de los aspectos irresueltos de la investigación


y Symonds, 1991). Vamos de forma muy re- es conocer cómo es la asociación entre la
sumida algunos de los principales resultados alianza terapéutica y el resultado de la terapia,
de la investigación. algo que requiere diseños de investigación
En 1996, una revisión amplia de la in- que despejen la duda de que la percepción
vestigación sobre Depresión del NIMH en de los clientes (y de los terapeutas) sobre la
Estados Unidos (National Institute of Mental alianza en fases intermedias o avanzadas del
Health Treatment of Depression Collaborati- tratamiento se hallen influenciadas por los be-
ve Research Program) arrojó sorprendentes neficios ya experimentados en el tratamiento.
resultados sobre la importancia de la alianza Es decir, despejar la duda de que sea el resul-
en relación con el resultado del tratamiento, tado de la terapia el que esté influyendo en
en una comparación a gran escala de diversos la percepción de la alianza y no al revés. De
tipos de terapia: interpersonal, terapia cogni- hecho, algunos autores (DeRubeis y Feeley,
tivo-conductual y farmacoterapia (Krupnick, 1990; Feeley, DeRubeis y Gelf, 1999) han
Stosky, Simmons, Moyer, Elkin, Watkins advertido que no se debe afirmar que una
y Pilkonis, 1996). Se vio que aproximada- alianza terapéutica fuerte causa la mejora del
mente el 21% de la varianza en el éxito de cliente a menos que la investigación evalúe
la terapia era atribuible a la percepción que claramente los beneficios de la terapia en un
el cliente tiene de la alianza con el terapeuta, punto temporal muy posterior a la evaluación
sin importar demasiado el enfoque o modelo de la alianza y controle otros aspectos del
de tratamiento. progreso terapéutico.
La investigación mediante técnicas Como hemos argumentado al inicio de
de meta-análisis también ha confirmado la este artículo, la alianza terapéutica tiene ca-
importancia de la relación entre la alianza racterísticas diferenciales cuando hablamos
terapéutica en el proceso y el resultado final de la terapia familiar, y esas características
del tratamiento. Un meta-análisis (Horvath hacen necesaria una ampliación de la defini-
y Symonds, 1991) que incluyó 20 estudios ción de este constructo y también marcan unas
diferentes (con terapeutas experimentados diferencias en los diseños de investigación.
de formación principalmente psicodinámica, En la tradición de la terapia familiar sistémica
experiencial y cognitivo-conductual) mostró el tratamiento y la importancia otorgada a la
una medida de efecto combinada de 0.26, alianza terapéutica es muy dispar. Rait (1988)
«moderada, pero fiable» (Horvath y Sy- describió un continuo de posturas teóricas
monds, 1991, pág. 139). Un meta-análisis to- sobre la relación terapéutica organizado en
davía más amplio que analizó 79 estudios con dos polos extremos. En un extremo se sitúan
mayor amplitud en cuanto al tipo de terapia, las terapias experienciales (por ejemplo, Sa-
tipologías de pacientes y de problemas clíni- tir), donde destaca la persona del terapeuta, y
cos (Martin, Garske y Davis, 2000), encontró donde la calidez, el apoyo y la colaboración
una medida de efecto ligeramente más baja mutua son características fundamentales. En
pero todavía significativa de 0.22. No obstan- el otro extremo del espectro están las terapias
te, en una revisión actualizada de Horvath y multigeneracionales que tienen una influen-
Bedi (2002) incluyendo estudios de terapias cia psicodinámica (por ejemplo, Bowen),
para el tratamiento de drogadicción, volvió a donde el terapeuta se mantiene a distancia de
encontrar una medida de efecto de 0.25. Uno la transferencia para así permanecer objetivo
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y diferenciado. También hacía ese extremo dado al concepto de alianza terapéutica, un


puede situarse el modelo de Milán (Selvini, grupo de trabajo compuesto por investiga-
Palazzoli, Boscoso, Cecchin y Prata, 1978), dores de España y Estados Unidos iniciamos
donde la estricta neutralidad y las interven- el desarrollo de un modelo de evaluación de
ciones prescriptitas de tipo paradójico no la alianza terapéutica que incluyese específi-
contemplan la importancia del vínculo con camente las características diferenciales de la
el terapeuta. terapia sistémica con parejas y familias pero
Sin duda W. Pinsof ha sido un autor integrando también las características comu-
clave en la conceptualización sistémica y nes a cualquier modalidad de psicoterapia
en la investigación de la alianza terapéutica (colaboración del cliente y lazos afectivos
en el marco de la terapia de pareja y familia entre éste y el terapeuta) que fueron clara-
(1994, 1995; Pinsof y Catherall, 1986). Este mente definidas por Bordin (1979). Dicho
autor fue el primero en describir la causalidad modelo y los instrumentos de evaluación
recíproca en la alianza, haciendo ver que la que lo componen (Friedlander, Escudero y
simple operación de sumar la relación de cada Heatherington, 2006, 2009) se han desarro-
cliente con el terapeuta no sirve para valorar llado simultáneamente en español -SOATIF
la alianza «en su conjunto»; muy al contrario, -(Sistema de Observación de la Alianza
las alianzas de cada miembro de la familia Terapéutica en Intervención Familiar) y en
con el terapeuta, y las del terapeuta con cada inglés -SOFTA- (System for Observing Fa-
subsistema familiar (por ejemplo, su alianza mily Therapy Alliances).
con los padres diferenciada de su alianza con Las tres directrices que guiaron la crea-
los hijos) y la alianza global del terapeuta con ción del SOATIF fueron: (1) la aplicabilidad
todo el grupo familiar, afectan a todos entre sí trans-teórica de la alianza, de forma que el
y generan un complejo sistema de influencias modelo y los instrumentos de evaluación
recíprocas. Otra de las aportaciones relevan- reflejasen la alianza como factor común de
tes de Pinsof (1994, 1995) es la definición la psicoterapia y no un enfoque terapéutico
de una nueva dimensión interpersonal de la particular; (2) la importancia de las conductas
relación terapéutica: la alianza intra-sistema, del cliente, dando protagonismo a los indica-
que se refiere a las alianzas en el seno de la dores conductuales que en transcurso de una
familia (entro todos los miembos y subsiste- sesión de terapia reflejan aspectos positivos
mas, al margen del terapeuta) y también a las y negativos de la alianza, especialmente en
alianzas intra-sistema del terapeuta (alianzas lo concerniente a las alianzas intra-familia
dentro del entorno profesional al margen de la reflejadas en interacciones entre los miem-
famlia: terapeuta y co-terapeuta, terapeuta y bros de la familia presentes en la sesión; y
supervisor, o terapeuta y otros profesionales (3) la superposición conceptual y empírica
que trabajan con la familia). entre metas y tareas de la terapia que se había
encontrado en la investigación previa (Hor-
SOFTA-SOATIF: un modelo para la vath y Bedi, 2002), de manera que una sola
evaluación y mejora de la relación
terapéutica
. Toda la documentación y los instrumentos
de observación, autoinformes, y formatos de
Sobre la base de los fundamentos teóri-
entrenamiento y supervisión clínica, están dispo-
cos y de la relevancia que la investigación ha nibles de forma gratuita en www.softa-soatif.net
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Implicación eficiente del cliente


en las tareas de la terapia

Enganche en Conexión
el proceso emocional con
terapéutico el terapeuta
Implicación
Implicación
cognitivo-conductual
afectiva de cada
de cada cliente
cliente en la terapia
en la terapia
Compartir el
Seguridad en
propósito de la
el sistema
terapia en la
terapéutico
familia

Relación de cada cliente


con el sistema familiar

Figura 1. Representación del modelo SOATIF.

dimensión integrase aspectos relacionados compartir el propósito en la familia) son más


con las tareas y las metas de la terapia. diferenciales de la terapia de pareja y familia;
El proceso empírico de desarrollo y vali- la tercera tiene que ver con la necesaria crea-
dación del SOATIF (Friedlander, Escudero et ción de un contexto seguro para la apertura
al., 1996) concluyó en un modelo de cuatro emocional y psicológica de cada miembro
dimensiones que configuran en conjunto la de la familia en presencia de los otros; y la
alianza terapéutica (Figura 1): Enganche en cuarta dimensión se refiere específicamente
el proceso terapéutico, Conexión emocional a lo que Pinsof (1995) definió como alianza
con el terapeuta, Seguridad dentro del sis- intra-sistema, en este caso la alianza dentro
tema terapéutico y Sentido de compartir el de la familia en relación con acudir y utilizar
propósito en la familia. de manera conjunta la terapia.
La primera de esas cuatro dimensiones El SOATIF incluye dos instrumentos
refleja aspectos relativos a la colaboración de evaluación de cada una de las cuatro
en la definición de objetivos y metas de la dimensiones de la alianza: un sistema de
terapia entre terapeuta y clientes. La segunda observación, SOATIF-o, aplicable durante
dimensión refleja un componente clásico en las sesiones de terapia o a sesiones graba-
la literatura sobre la alianza, el vínculo per- das en video, y un autoinforme, SOATIF-s,
sonal entre cliente y terapeuta, pero estudiado (para todos los participantes en una sesión,
en el contexto de la terapia familiar. Las otras incluido el terapeuta) aplicable al término
dos dimensiones (Seguridad, y Sentido de de una sesión de terapia. El manual de uso
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del SOATIF-o proporciona directrices para Conclusión


realizar inferencias acerca de la fortaleza
de las cuatro dimensiones subyacentes, a Si bien la complejidad de los múltiples
partir de las observaciones de las conductas niveles de motivación y expectativas sobre
del cliente y del terapeuta. Cada dimensión, la terapia hace que la creación de una buena
basada en el tipo, frecuencia, e intensidad de alianza terapéutica sea una tarea delicada y a
los indicadores observados en una sesión de- veces ardua en el tratamiento psicoterapéuti-
terminada, se puntúa en una escala ordinal de co de familias y parejas, las contribuciones
7 puntos que va desde -3 (muy problemática) teóricas procedentes de la psicoterapia indivi-
a +3 (muy fuerte). La puntuación central de dual y la propia investigación emergente en el
las escalas dimensionales (0 = no reseñable/ contexto de la terapia familiar aportan ideas
neutra) indica que o bien no hay conductas en de gran utilidad clínica. En un momento en
esa sesión que sugieran que el enganche, la que las diferentes modalidades de psicotera-
conexión emocional, la seguridad o el sentido pia, incluida por supuesto la terapia familiar,
de compartir el propósito sean excepcional- se ven ante la presión de ser validadas me-
mente fuertes o débiles; o bien la frecuencia y diante ensayos clínicos con grupo de control
la naturaleza de la conducta del cliente, tanto que demuestren su eficacia (para entrar en la
positiva como negativa, se compensan, con el lista de tratamientos conocidos como trata-
resultado de una puntuación neutra. En cuanto mientos con apoyo empírico TAE), hay voces
al cuestionario de auto-informe (SOATIF-s) que, con criterios muy razonables, advierten
se derivan directamente del instrumento ob- de que, en contraste con el mundo real de la
servacional y se compone de 16 items de fácil práctica clínica, estos ensayos se llevan a
aplicación con clientes mayores de 13 años. cabo con controles muy estrictos, criterios
El SOATIF ha sido utilizado con fiabi- de exclusión imposibles en el marco clínico,
lidad en la investigación de procesos en la y dentro de esquemas temporales estandari-
terapia familiar conjunta (Beck, Friedlander zados, y por ello no pueden proporcionar un
y Escudero, 2006; Escudero, Friedlander, Va- criterio estricto e inequívoco de efectividad
rela y Abascal, 2008; Friedlander, Lambert, y eficacia. Otro argumento crítico de gran ca-
Escudero y Cragun, 2008; Muñiz de la Peña, lado entre los clínicos afecta directamente al
Friedlander y Escudero, 2009), también ha estudio de la alianza terapéutica: puesto que
mostrado utilidad para el entrenamiento y la los ensayos para demostrar eficacia se centran
supervisión de terapeutas familiares en sus en la técnica, se corre el riesgo de perder de
comienzos profesionales (Carpenter, Escu- vista la importancia de la relación terapéutica.
dero y Rivett, 2008). La forma de uso del De hecho, las listas de los TAE y la mayor
instrumento puede variar dependiendo del parte de las guías para la práctica terapéutica
objetivo particular del usuario: un terapeuta o dan preponderancia a las técnicas que se han
un supervisor puede analizar la fortaleza de la de aplicar y por lo tanto describen terapeutas
alianza terapéutica en una sesión determinada impersonales que aplican procedimientos de
o a lo largo de todas las sesiones, centrando el forma escrupulosa.
análisis en una, varias, o las cuatro dimensio- Todo lo que se ha revisado en este artí-
nes de la alianza, focalizando la observación culo acerca de la importancia de la alianza
en un miembro de la familia, o en la familia terapéutica -tanto en el tratamiento fami-
como grupo. liar como individual- está ausente de ese

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V. Escuredo La creación de la alianza terapéutica en la Terapia Familiar

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la persona del terapeuta es secundaria en el 32, 355-368.
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del paciente no son tan relevantes como los psychoanalysis, International Journal of
síntomas y el diagnóstico. Sin embargo, tal Psychoanalysis, 18, 170-189.
y como hemos intentado demostrar en la re- Bordin, E.S. (1979). The generalizability of
visión de la literatura sobre la alianza como the psychoanalytic concept of the working
factor común, la importancia predictiva de alliance, Psychotherapy, 16, 252-260.
la alianza terapéutica está claramente respal- Capenter, J., Escudero, V. y Rivett, M.
dada por la investigación empírica. Factores (2008). Training family therapy students
comunes como la instalación de esperanza, in conceptual and observation skills
aceptación y consideración positiva, catarsis, relating to the therapeutic alliance: an
exploración de aspectos emocionales, partici- evaluation. Journal of Family Therapy,
pación y colaboración del cliente… aparecen 30, 411-424.
como variables de peso en la investigación Castonguay, L.G., Constantino, M.J. y Holtfor-
de proceso-resultado. th, M.G. (2006). The working Alliance:
En prácticamente cualquier relación Where are we and where should we go?
de factores comunes la alianza terapéutica Psychotherapy: Theory, Research, Prac-
ocupa un lugar fundamental. Una caracte- tice, Training, 43, 271-279.
rística esencial, aunque no la única, de una Corbella, S. y Botella, L. (2003). La alianza
buena terapia de cualquier orientación, es la terapéutica: historia, investigación y
fortaleza de la alianza, que predice el éxito evaluación. Anales de Psicología, 19,
del tratamiento y explica su fracaso. Con 205-221.
las limitaciones lógicas de espacio para este Coulehan, R., Friedlander, M. L. y Heathering-
articulo, hemos querido presentar un modelo ton, L. (1998). Transforming narratives:
transteórico de alianza terapéutica aplicable A change event in constructivist family
en formatos de terapia individual y familiar: therapy. Family Process, 37, 17-33.
Como modelo, el SOATIF es el resultado de De Rubeis, R.J. y Feeley, M. (1990). Deter-
un proceso de investigación para desarrollar minants of change in cognitive therapy
y validar un conjunto de instrumentos, al- for depression. Cognitive Therapy and
gunos observacionales (SOATIF-o) y otros Research, 14, 469-482.
de autoinforme (SOATIF-s), que permitan Escudero, V., Friedlander, M.L., Varela, N. y
incluir la medición de la calidad terapéutica Abascal, A. (2008). Observing the thera-
en la valoración de los factores que hacen peutic alliance in family therapy:associa-
de una terapia un tratamiento con eficacia tions with participants’ perceptions and
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