Vibración inducida por flujo

Cap 3 : Vibración inducida por flujo

El derramamiento de la estructura de vortices en un flujo subsónico. Las vórtices de la calle

tienden a ser muy similares independientemente de la geometría de la estructura. A medida
que los vórtices se desprenden de un primer lado y luego del otro, se imponen presiones
superficiales sobre la estructura como se muestra en la figura 3-1

Las presiones oscilantes hacen que las estructuras elásticas vibren y generen sonidos
aeroacústicos llamados tonos eólicos (Capítulo 9). La vibración inducida en las estructuras
elásticas por el desprendimiento de vórtices es de importancia práctica debido a su efecto
potencialmente destructivo sobre brigas, pilas, torres, tuberías marinas e intercambiadores de
calor

3.1 ESTELA DE VORTICE DE UN CILINDRO CIRCULAR ESTACIONARIO

Desde tiempos antiguos, se ha sabido que el viento causa la vibración inducida por el vórtice
de los cables tensos de un arpa eólica. Según los registros rabínicos, el rey David colgó su
kinnor (kithara) sobre su cama por la noche, donde sonaba en la brisa de medianoche. En el
siglo XV, Leonardo da Vinci esbozó una hilera de vórtices a raíz de una acumulación en un
arroyo (Lugt, 1983). En 1878, Strouhal encontró que los tonos eólicos generados por un
alambre en el viento eran proporcionales a la velocidad del viento dividida por el grosor del
alambre. Observó que el sonido aumentaba mucho cuando los tonos naturales del alambre
coincidían con los tonos eólicos. En 1879, Lord Rayleigh encontró que una cuerda de violín en
un tiro de la chimenea vibraba principalmente a través del flujo, más bien que con el flujo. La
periodicidad de la estela de un cilindro se asoció con la formación de vórtices por Benard en
1908 y con la formación de una calle estable de vórtices escalonados por von Karman en 1912
(Capítulo 2, Fig. 2-8).

A medida que una partícula fluida fluye hacia el eje principal de un cilindro, la presión en la
partícula fluida sube desde la presión de la corriente libre hasta la presión de estancamiento.
La alta presión de fluido cerca del eje principal impulsa el flujo alrededor del cilindro cuando
las capas límite se desarrollan alrededor de ambos lados.

Sin embargo, la alta presión no es suficiente para forzar el flujo alrededor de la parte posterior
del cilindro con números de reynolds altos. Cerca de la sección más ancha.
Fig. 3-1 Una secuencia de campos simultáneos de presión superficial y formas de estela en Re = 112000
durante aproximadamente un tercio de un ciclo de desprendimiento de vórtices (Drescher, 1956).

Cerca de la sección más ancha del cilindro, las capas límite se separan de cada lado de la
superficie del cilindro y forman dos capas de corte que se deslizan hacia popa en el flujo y
unen la estela. Puesto que la parte más interna de las capas de cizalladura, que está en
contacto con el cilindro, se mueve mucho más lentamente que la parte más externa de las
capas de cizallamiento, que está en contacto con el flujo libre, las capas de cizallamiento ro; en
la estela cercana, donde se doblan entre sí y se aglutinan en remolinos discretos (Perry et al.,
1982; Williamson y Roshko, 1988). Un patrón regular de los vórtices, llamado una calle del
vórtice, rastros detrás en la estela (capítulo 2, figura 2-8). Los vórtices interactúan con el
cilindro y son la fuente de los efectos llamados vibración inducida por vórtices.

Vórtice derramamiento de un cilindro liso, circular en un flujo subsónico estable es una función
del número de Reynolds. El número de reynolds se basa en la velocidad de la corriente libre U
y el diámetro del cilindro D,

Donde v es la viscosidad cinemática del fluido. Los principales regímenes de Reynolds de

vórtice que se desprenden de un cilindro circular liso, resumido por Lienhard (1996), se dan en
la Figura 3-2. A números de reynolds muy bajos, por debajo de aproximadamente Re = 5, el
flujo de fluido sigue los contornos del cilindro. En el intervalo 5 ≤ Re ≤ 45, el flujo se separa de
la parte posterior del cilindro y se forma un par simétrico de vórtices en la estela cercana. La
longitud de onda de los vórtices aumenta linealmente con el número de Reynolds, alcanzando
una longitud de tres diámetros del cilindro en un número de Reynolds de 45 (Nishioka y Sato,
1978). A medida que aumenta el número de reynolds, la estela se vuelve inestable (Huerre y
Monkewitz, 1990) Y uno de los vórtices se rompe (Friehe, 1980). Se forma una estela laminar
periódica de vórtices escalonados de signo opuesto (Vortex street). Roshko (1954) encontró
que entre Re = 150 y 300, los vórtices que se separan del cilindro se vuelven turbulentos,
aunque la capa límite del cilindro permanece laminar

El rango de reynolds 300 <Re <(1,5 * 10 ^ 5) se denomina subcrítico.

En este intervalo, las capas límite laminares se separan a aproximadamente 80 grados hacia
popa de la nariz del cilindro y el desprendimiento del vórtice es fuerte y periódico. En el
intervalo de transición, la capa límite del cilindro se vuelve turbulenta, los puntos de
separación se mueven a popa a 140 grados y el coeficiente de arrastre del cilindro cae a 0,3
(Farell, 1981, Capítulo 6, Fig. 6-9). En el intervalo de transición, las burbujas de separación
laminar y los efectos tridimensionales interrumpen el proceso de desprendimiento regular y
amplían el espectro de frecuencias de desprendimiento para el cilindro de superficie lisa
(Bearman, 1969, Jones y otros, 1969, Farell y Blessmann, 1983, Achenbach y Heinecke , 1981).

En el rango supercrítico de Reynolds, Re> 3,5 * 10 ^ 6, vórtice regular

Fig. 3-2 Regímenes de flujo de fluido a través de cilindros circulares lisos (Lienhard, 1996)
En el rango supercrítico de Reynolds, Re> 3.5 * 10 ^ 6, el desprendimiento regular del vórtice
se restablece con una capa límite turbulenta del cilindro (Roshko, 1961). Las fotos satelitales
de los patrones de vórtices de las nubes accionadas por el viento a la intemperie de las islas
demuestran que el desprendimiento de vórtices persiste en el número de Reynolds tan alto
como Re = 10 ^ 11 (Griffin, 1982; Nickerson y Dias, 1981).

von Karman (1912) encontró que la relación entre el desplazamiento longitudinal y el

desplazamiento lateral de una calle de vórtice ideal, escalonada era h / l = 0,281 (Capítulo 2,
Fig2-8). Investigaciones más recientes han demostrado que el espaciamiento lateral se reduce
al mínimo a unos pocos diámetros aguas abajo del cilindro y luego aumenta (Scheafer y
Eskinazi, 1959). Griffin y Ramberg (1975) encontraron una relación de espaciamiento de 0,18
en Re = 100 a 500. La relación entre la separación longitudinal (l) y el diámetro del cilindro (D)
es casi constante en la mayoría de las calles de vórtice (Sarpkaya, 1979). Griffin et al. (1980)
encontraron 4.8 <l / D <5.2 y que típicamente los vórtices están espaciados cinco diámetros de
cilindro detrás de uno otro. Griffin y Ramberg también encontraron que la circulación de los
vórtices de la vertiente fue 1,75 <Γ / (UD) <3,2, donde la circulación Γ está definida por la Ec. 2-
24. Estos valores se aplican relativamente cerca del cilindro. En sentido descendente,
disminuye la vorticidad (Sarpkaya, 1979) y el patrón de vórtice escalonado se expande
lateralmente de acuerdo con las leyes asintóticas de los despertares turbulentos (Cimbala et
al., 1988; Rhodi, 1975).

Estudios adicionales de la dinámica de la estela del vórtice son dados por lim y Sirovich (1988),
Saffman y Schatzman (1982), Aref y Siggia (1981) y Griffin (1981) - véase también la sección
2.4. Griffin (1985), Farell (1981), Sarpkaya (1979, King (1977), Barnett y Cermak (1974), Marris
(1964), Morkovin (1964), Bearman (1984), y Mair y Maull (1971), Lugt (1983 y Swift et al (1980)
describen los vórtices en conductos y entradas El modelo de vórtices discretos se discute en el
Capítulo 2, Sección 2.4

3.2 NÚMERO OFICIAL

strouhal (S) es la constante de proporcionalidad adimensional entre la frecuencia

predominante de desprendimiento de vórtices y la velocidad de flujo libre dividida por la
anchura del cilindro,

donde "fs" es la frecuencia de desprendimiento del vórtice en unidades de hertzio (Ciclos por
segundo), U es la velocidad de flujo libre que se aproxima al cilindro y D es el diámetro del
cilindro. U y D deben tener unidades consistentes. Es decir, si D está en metros, entonces U
debe estar en metros por segundo, o si D está en pulgadas, entonces U debe estar en pulgadas
por segundo, y así sucesivamente.

Para los cilindros inclinados al flujo, Ramberg (1983) y King (1977) encontraron que la
frecuencia de desprendimiento varía como fs (tetha) = fs (tetha = 0) cos (tehta), donde tetha es
el ángulo de inclinación del eje del cilindro de ser perpendicular al flujo, para ángulos de hasta
30 grados. En ángulos mayores, los efectos finales se vuelven cada vez más importantes. Los
experimentos muestran que las oscilaciones en la fuerza de elevación
(fuerza perpendicular al flujo) se producen en la frecuencia de desprendimiento, pero las
oscilaciones en la fuerza de arrastre (fuerza paralela al flujo) se producen al doble de la
frecuencia de desprendimiento. Esto es una consecuencia de la geometría de la calle del
vórtice; ver las figuras 3-1 y 3-8.

El número strouhal de un cilindro circular estacionario en un flujo subsónico es una función del
número de reynolds (Eq 3-1) y, en menor medida,

Figura 3-3 relación de número número-reynolds strouhal para cilindros circulares (Lienhard, 1966;
Achenbach y Heinecke, 1981). S semejant 0,21 (1-21 / Re) para 40 <Re <200 (Roshko, 1955)

de la rugosidad de la superficie y de la turbulencia del flujo libre, como se muestra en la Figura

3.3. El número de Strouhal sigue los regímenes de flujo numérico de Reynolds de la Figura 3-2.
En el intervalo de transición, Achenbach y Heinecke (1981) encontraron que los cilindros de
superficie muy lisos tenían una estela caótica, desorganizada, de alta frecuencia y números
Strouhal tan altos como 0,5, mientras que (rugosidad superficial e / D = 3 * 10 ^ -3 o mayor,
donde e es una rugosidad superficial característica), se han organizado, periódicamente se
despierta con números Strouhal de S semejant o igual 0.25. En el régimen de transición de
Reynolds, la vibración inducida por vórtices de los cilindros generalmente ocurre en S semejant
0.2 en lugar de los números de Strouhal más altos sugeridos por la Figura 3-3 (Coder, 1982). La
turbulencia de la corriente libre hasta aproximadamente el 10% del flujo medio tiene
relativamente poco efecto sobre el coeficiente de elevación oscilante o la vibración inducida
por vórtice de los cilindros circulares, aunque puede desplazar los regímenes de flujo hacia
abajo similarmente a un aumento del número de Reynolds (Torum y Anand , 1985, Gartshore,
1984, Fage y Warsap, 1929, Barnett y cermack, 1974).

El derramamiento del vórtice ocurre de múltiples cilindros y de un cilindro cerca de una

superficie. Studie de Torum y Anand (1985), Jacobsen et al. (1984) y Tsahalis (1984) muestran
que el vórtice que se desprende de un cilindro sobre una superficie plana paralela al flujo (por
ejemplo, una tubería justo por encima del lecho marino) persiste para espacios entre el
cilindro y el plano tan pequeños como 0,5 diámetro. Bearman y Zdravkovich (1978) y Buresti y
Lanciotti (1979) encontraron que lagunas menores de 0,3 de diámetro suprimen el
desprendimiento de vórtices. De manera similar, Kiya et al. (1980) descubrieron que el
derramamiento de vórtices de un par de cilindros ocurre detrás de cada cilindro
individualmente cuando el espacio entre los dos es mayor que 0,4 de diámetro (distancia entre
centros de más de 1,4 diámetros), pero para huecos más pequeños el par de cilindros se
comporta como un solo cuerpo con respecto al vertimiento del vórtice. El desprendimiento de
vórtices ocurre en grupos de unos pocos cilindros (Vickery y Watkins, 1962, Zdravkovich, 1985)
y en grandes matrices de cilindros (Weaver y Adb-Rabbo, 1985, capítulo 9, Fig. 9-14). La
compilación de Fitzhugh (1973) de números de Strouhal para el flujo dentro de arreglos de
cilindros, tales como matrices de tubos intercambiadores de calor, se da en las Figuras 3-4 y 3-
5. Estos números de Strouhal se basan en el diámetro del tubo y la velocidad media del flujo a
través del área mínima entre los cilindros. Estos números de Strouhal caracterizan el pico en el
espectro de turbulencia dentro de la matriz. En matrices de tubos muy estrechamente
espaciadas con una separación entre centros del tubo de menos de aproximadamente 1,5
diámetros, la frecuencia distinta asociada con el desprendimiento se descompone en
turbulencia de banda ancha; véase Fitzpatrick y Donaldson (1980), Fitzpatrick y otros (1988),
Murray et al. (1982), Price y Paidoussis (1989), Weaver et al. (1986) y las secciones 7.3 y 9.3.

Secciones no circulares vórtices. Las Figuras 3-6 y 3-7 dan los números de Strouhal para
secciones no circulares y algunos cuerpos tridimensionales.

Incluso un perfil aerodinámico formará una estela de vórtice con un número Strouhal de

Fig. 3-4 Números de Strouhal para arrays de cilindros en línea (Fitzhugh, 1973) ..
Fig. 3-5 Números de Strouhal para conjuntos de cilindros escalonados (Fitzhugh, 1973).

Fig. 3-6 Números de Strouhal para secciones no circulares. Flow es de izquierda a derecha
(Roshko, 1954, Wardlaw, 1966, Mujumdar y douglas, 1973, Vickery, 1966, Gerlach, 1972,
Toebes y Eagleson, 1961, Okajima, 1982, Achenbach y Heinecke, 1981).
Fig. 3-7 Número de Strouhal para una placa plana inclinada (Novak, 1973).

Incluso un perfil aerodinámico formará una estela de vórtice con un número de Strouhal de
aproximadamente 0,2 basado en la anchura D de las capas límite en el eje de arrastre (Figura
2-8 (c), Stuber, 1988, Parker y Stoneman, 1985).

Calle de vortices despiertas tienden a ser muy similares, independientemente de la geometría

de la estructura de disparo. Comparar las Figuras 2-8 (b), 2-8 (c) y 9-13. Roshko (1954, 1961),
Griffin (1981) y otros (Sarpkaya, 1979) han sugerido que es posible definir una " universal
"número Strouhal para cualquier sección de farol basado en la distancia de separación entre
las capas de corte. En cualquier caso, si la dimensión característica D en la Ec. 3-2 se define
como la anchura entre los puntos de separación, entonces el número de Strouhal es
aproximadamente 0,2 sobre amplios rangos de número de Reynolds independientemente de
la geometría de la sección. Esta consistencia del número de Strouhal ha permitido que el
desprendimiento de vórtices sea utilizado como base para el diseño de medidores de flujo de
fluidos (Miller, 1989; Yeh et al., 1983).

Las descripciones de derramamiento de vórtices presentadas hasta ahora pueden dar la

impresión de que votex derramamiento es un constante, armónico, proceso bidimensional.
Lamentablemente esto no es completamente cierto. El vórtice que se desprende de un cilindro
estacionario en el rango de números de Reynolds más alto no se produce a una sola frecuencia
distinta, sino que se desvía sobre una banda estrecha de frecuencias con un rango de
amplitudes y no es constante a lo largo del intervalo (Blevins, 1985; , 1983, Jones et al., 1969).
Por ejemplo, la Figura 3-8 (b) muestra gráficas de tiempo-historia de cuatro anemómetros de
película de descarga montados en un cilindro y un micrófono vecino. El cilindro está expuesto
a un flujo de aire en Re = 4 * 10 ^ 4. El flush está espaciado a lo largo
Fig. 3-8 Parcelas de tiempo-historia de sensores de película caliente en un cilindro de 0.75in
(1.9cm) de diámetro expuesto al flujo de aire a 33 m / seg (a) con sonido aplicado (300 Pa, 375
Hz) y (b) sin Re = 42000 (Blevins, 1985). Obsérvese que el aspecto irregular de los ciclos de
desprendimiento de vórtices.

Las películas flash están espaciadas a lo largo del cilindro a intervalos de dos diámetros,
Obsérvese la falta de correlación en el espacio y la aparición irregular de los ciclos de
desprendimiento del vórtice.

Cuando se aplica un sonido intenso a la frecuencia nominal de desprendimiento en la figura 3-

8 (a), el desprendimiento se hace en fase y bidimensional a la frecuencia del sonido, pero el
latido irregular de amplitud persiste.

La tridimensionalidad del desprendimiento de vórtices puede caracterizarse por una longitud

de correlación en sentido longitudinal; los valores típicos para los cilindros estacionarios varían
desde 100 o más diámetros para las calles de vórtice laminar en Re = 60 a 20 diámetros en Re
= 100 y 5 diámetros para las calles de vórtice totalmente turbulentas en Re = 10 ^ 4 (Friehe,
1980; Las células coherentes de desprendimiento de vórtices, de tres a cuatro diámetros de
extensión, se desarrollan en el número transicional de Reynolds (Humphreys, 1960). Si la
velocidad del flujo de la corriente libre varía a lo largo de la extensión del cilindro, estas células
también se desarrollan y la frecuencia de desprendimiento del vórtice varía discretamente en
pasos escalonados a lo largo del tramo con cada paso, extendiéndose alrededor de cuatro
diámetros (Griffin 1985, Rooney y Peltzer, 1981). Véase también la Fig. 3-32.

Flujo interno a través de la vibración y el sonido inducidos por el fuelle a la frecuencia fs = SU /

D, donde S se dice que está entre 0,18 y 0,22 si D se define como el ancho de convolución, es
decir, la anchura de un único pliegue y U es la velocidad de flujo promedio a través del fuelle
(Johnson et al., 1979; Gerlach, 1972). Dos métodos para eliminar estas vibraciones inducidas
por el vórtice son (1) humedecer externamente las vibraciones convolutas o (2) proporcionar
un revestimiento continuo, anclado en el extremo aguas arriba, para aislar el flujo de alta
velocidad de las convoluciones (Weaver y Ainsworth, 1988, Gerlach, 1972). Hay un juguete en
el cual el vórtice que arroja el tubo acanalado (fuelle) induce los tonos acústicos. Vórtice que
arroja la vibración inducida en grupos de cilindros y arreglos de pilas; ver Vickery (1981), King y
Johns (1976), y Capítulo 5. El derramamiento de vórtices puede estar asociado con la oscilación
ovalada de grandes torres de enfriamiento hiperbólicas (Paidoussis et al., 1982; Uematsu y
Uchiyama, 1985) y la vibración del puente (secciones 3.7 y 4.4).

El énfasis de este capítulo está en predecir la vibración inducida por vórtices de los cilindros.
Sin embargo, del mismo modo que el vertido de vórtice impone una fuerza sobre el cilindro,
por lo que el cilindro impone una fuerza sobre el fluido. Este último produce un sonido
aereoacústico con un tono casi puro en la frecuencia de desprendimiento del vórtice, como se
discutió en el Capítulo 9, Una superficie de fluido libre responderá al derramamiento de
vórtices en el fluido de abajo. Rhode (1979) ha realizado un extenso estudio de ondas
transversales de deslizamiento en canales abiertos inducidas por conceptos de
desprendimiento de vórtices a sistemas hidráulicos y oceánicos. La vibración inducida por
vórtices de los cilindros también se produce en flujos oscilatorios tales como los inducidos por
las olas oceánicas sobre pilotes y tuberías. Estas vibraciones se tratan en el capítulo 6, sección
6.4.