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Amparo Indirecto Por Notificación Ilegal
Amparo Indirecto Por Notificación Ilegal
H E C H O S:
1.- Con fecha viernes veintitrés de mayo del año dos mil catorce, por
investigaciones propias, nos enteramos que existe el juicio Ejecutivo Mercantil XXX20XXXque
se tramita en el Juzgado Especializado en Asuntos Financieros del Distrito Judicial de Puebla,
Puebla con domicilio en Ciudad Judicial siglo XXI, de Cholula, Puebla dentro del cual se dice
fuimos emplazados. Cosa que nos sorprendió ya que en ningún momento tuvimos
conocimiento del mismo.
2. Con fecha veinticinco de febrero de dos mil once, el ciudadano Juez titular del
Juzgado Especializado en Asuntos Financieros del Distrito Judicial de Puebla, Puebla, dictó
acuerdo, dentro del juicio ejecutivo Mercantil número 368/XXXX, para que se nos requiriera de
pago, en caso de negativa se embargaran bienes y se nos emplazara en términos de Ley.
4.- Con fecha diez de marzo del año dos mil once manifiesta la Diligenciaria Non
Adscrita al Juzgado Especializado en Asuntos Financieros del Distrito Judicial de Puebla,
Puebla que: “La suscrita ejecutora impar adscrito Juzgado Especializado en Asuntos
Financieros Licenciada María Gómez Salazar, en cumplimiento al auto de fecha veinticinco de
febrero de dos mil once, con fundamento en los artículos 1393 del Código de Comercio
vigente, 310 y 311 del Código Federal de Procedimientos Civiles, de aplicación supletoria
conforme a los artículos 1054 y 1063 del Código de Comercio vigente, me constituyo asociado
de la parte actora Licenciado Fernando Martínez Norato, por su representación, en el domicilio
ubicado en la casa habitación marcada con el número oficial diez mil novecientos cuarenta y
cinco de la calle tres sur, tipo “2P-65” de la unidad habitacional Loma Bella, de esta ciudad de
Puebla, Puebla. Me cercioro en forma previa y plena de ser el domicilio señalado en autos, y
además que corresponde a los demandados Raúl Navarro Reyes y María Dorantes de Reyes,
por los siguientes medios de convicción: Primero hago constar que me constituyo en la Unidad
Habitacional Loma Bella, asimismo al recorrer la Unidad Habitacional localizo en la esquina de
una calle una placa metálica con la leyenda que dice “Calle tres sur”, lo cual al recorrer la calle
localizo el número oficial diez mil novecientos cuarenta y cinco sobre un portón de herrería de
color blanco que pertenece a una casa de dos niveles de color azul, con cochera, un timbre,
una malla ciclónica, un pequeño pario y dos medidores de luz número “6L58P9” y R13K68”;
sigue manifestando la ejecutora que ”Enseguida toco el timbre de la casa y después de una
breve espera, sale una persona de sexo masculino de aproximadamente cincuenta y cinco
años de edad, de piel blanca, cabello corto cano con bigote, de complexión delgada y de una
estatura aproximada de un metro con setenta centímetros, haciéndole saber el motivo de
nuestra presencia, identificándome como ejecutora del juzgado especializado en asuntos
financieros de la ciudad de Puebla, preguntándole su nombre respondiendo llamarse Ricardo
Navarro Reyes, quien no se identifica por no tener a la mano con que hacerlo. Asimismo, le
pregunto si este domicilio corresponde a los demandados Raúl Navarro Reyes y María
Dorantes de Reyes y al que en autos e indica, manifestando que sí y dice saberlo puesto que
ahí habita, asimismo le pregunto si conoce a los demandados Raúl Navarro Reyes y María
Dorantes de Reyes y si este es sus domicilio, respondiendo que los conoce por ser hermano y
cuñado de los demandados, quien me confirma el domicilio con correspondencia postal a
nombre de dichas personas buscadas, acto seguido le pido llame ante mi presencia a los
demandados Raúl Navarro Reyes y María Dorantes de Reyes, manifestando que no se
encuentran en este momento. En seguida y toda vez que los demandados Raúl Navarro
Reyes y María Dorantes de Reyes, no se encuentran presentes no obstante estar citados,
como quiera que sea la diligencia debe continuar por ello les notifico el auto de fecha
veinticinco de febrero de dos mil once, mediante instructivos que contienen copia autorizada
integra del auto que dejo en poder con quien entiendo la diligencia Ricardo Navarro Reyes,
agregando al expediente una copia de la notificación para constancia de su legalidad…”.
Articulo 311.- Para hacer una notificación personal, y salvo el caso previsto
en el artículo 307, se cerciorara el notificador, por cualquier medio de que la persona
que deba ser notificada vive en la casa designada, y, después de ello, practicara la
diligencia, de todo lo cual asentara razón en autos.
PRIMER AGRAVIO.- Ahora bien, de las constancias que obran dentro del juicio
368/2011, respecto al citatorio de fecha nueve de marzo del años dos mil once, que se tramita
en el Juzgado Especializado en Asuntos Financieros del Distrito Judicial de Puebla, Puebla, se
desprende que la Diligenciaria Impar adscrita al mismo juzgado, solo se percató de que en el
domicilio ubicado en calle tres sur número diez mil novecientos cuarenta y cinco de la Unidad
Habitacional Loma Bella de la ciudad de Puebla, Puebla, según dice vivía Ricardo Navarro
Reyes y preguntó al aludido lo siguiente: “Si este domicilio corresponde a los demandados
RAUL XXXXXXXXXX y MARÍA XXXXXXXXXX, y al que en autos indica, manifestando que sí,
y dice saberlo puesto que ahí habita. Asimismo, le preguntó si conoce a los demandados
RAUL XXXXXXXXXXXXX y MARÍA DORANTES XXXXXXXXXXXXXXX, y si este es su
domicilio, respondiendo que los conoce por ser hermano y cuñado de los demandados, quien
me confirma el domicilio con correspondencia postal a nombre de dichas personas buscadas”.
Ahora bien, es cierto que el inmueble ubicado en calle tres sur número diez mil
novecientos cuarenta y cinco de la Unidad Habitacional Loma Bella de la ciudad de Puebla,
Puebla es nuestro domicilio convencional señalado dentro del contrato de Apertura de Crédito
con Garantía Hipotecaria de fecha tres de marzo de mil novecientos noventa y tres y
Convenio Modificatorio al contrato de Apertura de Crédito con Garantía Hipotecaria de fecha
quince de noviembre de mil novecientos noventa y seis, firmado entre los suscritos y Banco
Nacional de México, Sociedad Anónima; sin embargo, nuestro domicilio para todos los efectos
señalados por la ley, para ser emplazados, está ubicado en veintisiete poniente número
trescientos treinta de la colonia Insurgentes Chula Vista de la ciudad de Puebla. Domicilio en
el cual se nos debió haber emplazado. Al no habérsenos notificado de manera personal se
nos deja en estado de indefensión, lo cual nos causa agravio en nuestras garantías
contenidas en los artículos 14 y 16 constitucionales.
Se tiene, entonces, que la ley atribuye una actividad positiva al notificador, ya que
debe cerciorarse fehacientemente de que a quien va a notificar, efectivamente, habita el
domicilio y no suponer dogmática o mecánicamente que, el domicilio señalado en autos, es
donde vive a quien debe emplazarse, tal y como ocurrió en el caso concreto que nos ocupa;
ya que se limitó la ejecutora a preguntar por el domicilio y no si ahí vivíamos y ni siquiera hizo
que, quien se ostentó como Ricardo Navarro Reyes diera la razón de su dicho de manera
clara. Sigue diciendo la autoridad ejecutora que le mostró, con quien practicaba el citatorio,
correspondencia postal de manera genérica a nombre de los quejosos, sin especificar qué
clase de correspondencia en particular se trataba y si en ella estaban nuestros nombres. Es
evidente que la hoy, autoridad ejecutora no distingue claramente la diferencia entre los
conceptos de domicilio genérico y domicilio concreto en donde vivimos los suscritos y esto se
traduce en dejarnos en estado de indefensión ya que al no conocer el juicio que se seguía en
nuestra contra no estuvimos en aptitud de defendernos en términos de ley.
Si bien es cierto que dentro del contrato de Apertura de Crédito con Garantía
Hipotecaria de fecha tres de marzo de mil novecientos noventa y tres y Convenio Modificatorio
al contrato de Apertura de Crédito con Garantía Hipotecaria de fecha quince de noviembre de
mil novecientos noventa y seis señalamos como domicilio convencional, no menos cierto es
que nuestro domicilio lo tenemos en la veintisiete Poniente número trescientos treinta, colonia
Insurgentes Chula Vista, de esta Ciudad, Ahora bien, para efectos de cobro, efectivamente, se
nos debió haber requerido el pago en dicho domicilio, pero para efectos procesales se nos
debió haber emplazado en nuestro domicilio ubicado en calle veintisiete poniente número
trescientos treinta de la colonia Insurgentes Chula Vista de la ciudad de Puebla, dado que el
emplazamiento debe ser personal para no quedar en estado de indefensión, lo cual ocurre en
el presente caso.
Es evidente que me causa agravio ya que se nos viola en nuestro perjuicio las
garantías contenidas en el artículo 14 de nuestra Carta Magna, es decir, las garantías de
audiencia y certeza jurídica.
Si bien señala el artículo 311 del Código Federal de Procedimientos Civiles, para
fundar su actuación se desprende no la motiva la misma ya que no despliega la mínima
actividad mental cognitiva para llegar a cerciorarse de que el domicilio en que estaba
practicando la notificación era el que los suscritos habitábamos. Es decir, no basta con que la
funcionaria haya aplicado el artículo en cita sino que debió haber manifestado las causas
concretas del por qué la realidad concreta estaba en concordancia con la norma general.
CAPÍTULO DE SUSPENSIÓN
D E R E C H O:
SUSPENSIÓN.- Son aplicables los artículos 125, 128 y demás relativos de la Ley
de Amparo vigente.
SEGUNDO.- Tener por señalado domicilio para recibir todo tipo de notificaciones y
por autorizados a los profesionistas nombrados para los efectos señalados.
MARIA XXXXXXXXXXXXXX