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LICENCIATURA EN DERECHO

ÉTICA

Licenciatura en Derecho
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Marina delPilar Olmeda García

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Olmeda García, Marina del Pilar.
Ética profesional en el ejerticio del
derecho/ Marina del Pilar Olmeda García.
-- México: Universidad Autónoma de Baja
California; Miguel Ángel Porrúa, Librero
Editor, 2007.

405 p. ; I4 x 2l cm. -- (Selección anual para


el libro universitario 2004-2005).
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I. Abogados -- Ética profesional. 2. Derecho
y ética. 3. Etica legal. L Universidad
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Autónoma de Baia Califomia. II.. t.
BIs5 oss 2005 FAI4/amm/l90106
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@D.R. 2007 Marina del Pilar Olmeda García

Las carac¡erísticas de esta publicación son propiedad de la


Universidad Autónoma de Baia California.
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Col. Nueva. Mexicali, Baja California, México.
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Segunda edición, mayo del año 2007

a 2005-2007 @ 2007
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Arnargura 4, San Ángel, Álvaro Obregón, OlOOO 1\4éxico, D.F
CAPÍTULO V
DOCTRINAS ÉTICAS

Las doctrinas éticas se han ido desarrollando en diferentes épocas


y sociedades mediante una vinculación estrecha entre los conceptos
morales y la realidad humana, sujeta históricamente a cambio. Por
ello, como todo en la historia, las doctrinas éticas no pueden ser
consideradas aisladamente, sino dentro del proceso de cambio de Ia
vida social, con su historia propia.
La descripción de las doctrinas éticas que se presentan en esta
obra, son sólo una breve reseña de las teorías que consideramos
más importantes y con mayor aceptación en el mundo occidental.
Se exponen en esta obra, en forma resumida, las grandes ideas
que han aportado los f,lósofos en torno a los problemas de la ética;
se toma en consideración la investigación, quc a través de la his-
toria, han realizado los pensadores acerca de la existencia humana
y de sus fines.
La importancia de las doctrinas éticas tiene su fundamento en
la convicción de que en filosofía la consideración histórica es fun-
damental, ya que la historia de la filosofía es distinta a la de la
ciencia. En ésta, las teorías pasadas y abandonadas ya no tienen
MARINA DEL PILAR OLMEDA GARCÍA
Doctmsas É'rtcas

significado vital alguno; por el contrario, en f,losofía se considera


un error abandonar el pasado, porque es una fuente permanente esta teoría se basa en los viajes de varios fllósofos, como Pitágo-
de
enseñanza y de vida. Para fundamentar nuestra opinión ras, Demócrito y el proPio Platón.
citaremos
al maestro Nicolás Abbagnano, quien afirma que La filosofía oriental fue diferente a la griega. El propio Platón
contrapone el ospíritu científico de los griegos al afin de lucro de
los fenicias y egipcios, para excluir la posibilidad de que en las
en la filosofÍa del pasado se ha encarnado y expresado la persona
del filósofo, no sólo en el que le era más propio, en la singularidad concepciones de estos pueblos se pudiera encontrar inspiración
de la experiencia de su pensamiento y de su vida, sino en sus para la f,losofía (Platón; 1978: 127\.
rela_
ciones con los otros y con el mundo en que vivió.... la historia El fundamento de la filosofía oriental es la tradición, mientras
de ra
filosofía es un entramado de relaciones humanas que se mueven que el de la filosofía griega es la investigación. La sabiduría orien-
en
el plano de una disciplina común de investigación, y así trascien_ tal es esencialmente religiosa y estaba encomendada a una casta
den los aspectos contingentes o insignificantes para asentarse
en sacerdotal, que la defendía y se preocupaba por trasmitirla en toda
los que son esenciales y consecutivos. (Obra citada; 197g: vu). su pureza.
En el desarrollo de la f,losofía griega se distinguen cinco pe-
Para la presentación de ras doctrinas éticas, en esta obra se ríodos:
siguió un criterio cronológico, sereccionando los autores más . El período cosmológico, que comprende las escuelas preso-
representativos de las doctrinas a través de la historia de la filo- cráticas; con excepción de los sofistas, este periodo está dorni-
sofía' se inició con la ñlosofía griega para continuar con Roma nado por el problema de descubrir la unidad que garantiza el
y el cristianismo, pasando a ra época moderna, y concluir con orden del mundo y la posibilidad del conocimiento humano.
la
época contemporánea. . El período antropológico que comprende a los sofistas y a
Sócrates, se centra en el problema de hallar la unidad del
hombre en sí mismo y respecto de los demás hombres, como
Gnscm fundamento y posibilidad de la formación del individuo y de
la armonía de la vida en sociedad.
En la tradición de los filósofos judaicos de Arejandría, se afirma
. El período ontológico, que comprende a Platón y a Aristóte-
que la f,losofía procede de oriente. Esta afirmación sostiene que les; este período se ve dominado por el problema de rastrear
la filosofía griega tomó de las doctrinas orientares, no sóro sus en la relación entre el hombre y el ser, la condición y la po-

descubrimientos científicos, sino también sus concepciones filo-


' sibilidad del valor del hombre como tal y de la validez del
sóficas más personales. Entre estas doctrinas orientares se ser como tal. Este período, que es el de la plena madurez del
encuen-
tran la hebraica, egipcia, babilónica e hindú. La sustentación
'' pensamiento griego, replantea en síntesis los problemas de
de
los dos períodos precedentes.
MARINA I)EL PILAR OLMEDA GARCÍ^ t'( I -illtNAS ÉTICAS

. El período ético, que abarca al estoicismo, al epicureísmo,


al En su reflexión sobre las doctrinas éticas fundamentales, Adol-
escepticismo, y al eclecticismo, se centra en el problema
de lir Sánchez Yázquez (1999: 218) af,rma que "la doctrina sofista no
la conducta humana y está caracterizado por la disminución
pcrsigue un conocimiento doctrinario, sino práctico, tendiente a
de la conciencia der varor teorético de la investigación.
influir en la vida pública, por esta razón,los sofistas se convierten
' El período religioso, que comprende las escuelas neoplatóni-
cn maestros que enseñan principalmente el arte o retórica"'
cas y sus flnes, está dominado por el problema de
encontrar Sobresalen, dentro del terreno de la ética, dos sofistas: Protá-
el camino de la reunión del hombre con Dios, considerándo_
goras y Calicles, cuyas tesis examinaremos por separado'
lo como único camino de salvación.
Protágoras es famoso por su célebre sentencia: "El hombre es
Nicolás Abbagnano sostiene que ,.estos períodos no represen_
la medida de todas las cosas..." Esta frase se puede interpretar de
tan divisiones cronológicas rígidas: no sirven más que para
dar varias maneras; fundamentalmente expresa la excelencia del hom-
un cuadro de conjunto y recapitulación del nacimiento,
desarrollo bre, la superioridad del ser humano en toda la creación; pero hay
y decadencia de las investigaciones filosóflcas en ra Grecia
anti- que tener cuidado, para algunos comentaristas se trata simplemen-
gua". (Obra citada;1978: tomo I, tx).
te de la exaltación de la naturaleza humana. Sin embargo, tal como
la entendió Protágoras (según lo relata Platón), es una expresión
lapidaria del relativismo moral, tesis que implica la muerte de la
Los sortsres
ética como ciencia. Estudiemos estas dos interpretaciones'
Dada la expresión metafórica de la tesis de Protágoras, se po-
Los sofistas crearon en Grecia un movimiento intelectual en er
dría interpretar en un sentido positivo, completamente válido y
siglo v a. C. Integraban un grupo de maestros ambulantes, muy
de acuerdo con las ideas ya explicadas acerca de la materialidad
preparados, sabios, que se interesaban en los temas humanísticos.
del valor moral.
El vocablo sofista significó originarmente maestro, sabio, como lo
El hombre es la medida de todas las cosas' Esto es cierto' pero
demuestra su relación semántica con la palabra griega .,sofía,, que
a condición de entenderlo así: la naturaleza humana es el funda-
significa sabiduía.
mento próximo de moralidad (es decir, la base o "medida" para
Es muy conocido también el sentido peyorativo que tiene la
juzgar la conducta humana). Nótese que no se habla ahora de un
palabra sofista; "designa a todo aquel que propone lo farso
como hombre en particular como juez absoluto de todos los valores,
verdadero, que engaña con astucia y cinismo y que se jacta
de po_ sino de la naturaleza humana, de aquello que hace al hombre lo
der defender el pro y el contra de cualquier proposición" (Gutiénez
que es, del conjunto de cualidades que dan al hombre el nivel su-
Sáenz, Raúl;2000: 228).IJn sofista, sostiene pedro
Chávez Calde_ perior que posee entre los demás seres. En efecto, la naturaleza
rón (200 1 : 1 73), "es un argumen to falaz,es decir, un argumento
que humana es la base de comparación, la piedra de toque (funda-
tiene la apariencia de correcto pero que en realidad no lo
es,,. mento próximo de moralidad) por la cual podemos iuzgar buena
\RI\A I)E¡ PTLAR OLMI',DA LARCiA I¡f X II{INAS É]'ICAS

o mala una conducta humana. si protágoras


hubiera entendido Lo positivo del relativismo es la explotación (aunque exage-
así su famosa tesis, no hubiera sido el sofista es la norma sub-
que atacó pratón en I rrda) de una gran verdad, a saber: la conciencia
el diálogo Teetetes. jt:tiva de moralidad Es decir, cada hombre debe regirse por su
Según Platón (Didlogos; 1975: lI4), normar la conducta de
elsenrido que dio protá- ¡rropia conciencia. Inclusive, es obligatorio
goras a su tesis es el siguiente:
Icuerdo con eljuicio de la propia conciencia. si una persona cree
sinceramente que debe actuar en determinado sentido, así debe
cada persona es juez absoluto de ra verdad
y de Ia moral. Todo ¡rroceder, aun cuando los demás piensen
de otro modo' En este
hombre puede y debe juzgar, por sí mismo y sin referencia a nin- scntido es verdad que cada hombre es juez y rector de su propia
guna otra base objetiva, lo que es verdadero
y lo que es bueno. Si conducta y de los valores que le atañen. Hasta aquí estamos de
una personajuzga que algo es bueno, entonces,
sin más, es definiti- rcuerdo con las tesis del relativismo moral, sin embargo, el rela-
vamente bueno; y si otra lo juzga malo, entonces
también es malo. rivismo es una forma de soberbia humana. Es la proclamación del
Esto es, en pleno, el relativismo moral.
hombre como absoluto entre los demás seres, es la sobrevalora-
ción de sus facultades, conocimientos y criterios. Lo que necesita
La tesis sostenida por el relativismo moral se puede el relativista es un buena dosis de humildad, que lo capacite para
expresar
en los siguientes términos: toda ra verdad y
todo varor deplnden someter su razón al imperio de verdad, basada en lo real y lo abso-
de cada persona y de su criterio. La verdad y
el valor son relati_ luto, que es independientemente de Ia medida humana' El hombre
vos a cada sujeto; éste tiene la úrtima parabraen
lo que se refiere es, pues, medida, pero también debe ser medido'
al juicio sobre el mundo, las cosas y los
valores. No se puede dar La tesis de Calicles: (que algunos atribuyen más bien a otro
una verdad y un valor moral absoluto, válido para sofista llamado Trasímaco) es la siguiente: La ley es más fuerte.
todos, inmu_
table a través del tiempo; la verdad y el valor con ello se quiere significar que la autoridad corresponde al que
cambian según Ias
épocas y los lugares. se sobrepone a los demás, al que efectivamente puede dominar al
El relativismo moral es, de hecho, una tesis a la que resto a base de energía, no sólo física, sino aun en la palabra, en
se recurre
con frecuencia, que algunos utilizan cuando quieren el pensamiento, en la influencia, en el mando. Como comentario
eludir una
responsabilidad y obligación. si er criticar da crítico, esta tesis es verdadera de hecho, pero es falsa de derecho.
un aire de suficien-
cia, el criticarlo todo como carente de varidez parece Efectivamente, es verdadera de hecho, puesto que así suele su-
ra máxima
aflrmación de la propia personalidad: nada vale, ceder. La realidad de la historia universal no puede contradecir-
yo soy quien da
valor a las cosas; yo soy la medida de todas las la; el gobemante, la autoridad, el jefe, suelen imponerse con la
cosas. El marxis-
mo moderadamente y, sobre todo, el existencialismo
de sartre, fierza. Y decimos que la tesis de Calicles es falsa de derecho, lo
tienen ciertas expresiones que, si no son relativismo cual signifrca que, aunque así suela suceder, no es lo que debería
puro, es por
el esfuerzo que han hecho algunos de sus seguidores. suceder. La autoridad, el director, el jefe, tienen que cumplir con
MARINA DEL PILAR OLMEDA GARCiA rr tr ¡¡{INAS ETICAS

ciertas condiciones para que su actuación esté de acuerdo


con ra A este pensador se le considera como el fundador de la ética,
naturaleza de su función. No todo el que se impone por la
fuerza tlcbido a su insistencia en temas como: ¿cuál es la esencia de la
ante los demás es por eso er jefe nato. claro está que debe
saber virtud?, ¿de la bondad?, ¿de la santidad?, ¿de la justicia? Tenía
gobernar, dirigir a los demás e incluso imponerse energéticamente
r'orno lema la frase del oráculo de Delfos: Conócete a ti mismo, y
en ciertos casos; pero en la base de todo esto hay una cualidad
que llamó poderosamente la atención sobre la importancia del cono-
es la que define a la autoridad: saber captar y promover
el bien cimiento personal, en contraposición al conocimiento del mundo
común. Quien llene este requisito, tiene cualidades para ejercer
t:xterno, que era el tema principal de los filósofos anteriores a é1.
correctamente el cargo de autoridad y legislador. La conclusión
El concepto universal es una de sus principales contribuciones
es que la ley no es del más fuerte, sino del que sepa conocer
y r¡l mundo de la filosofía. En efecto, con sus preguntas inducía a su
realizar el bien de los demás.
interlocutor al encuentro de una esencia universal (de virtud, por
c.lemplo), válida para todas las virtudes; no se contentaba con una
rnera descripción externa de lo que podría llamarse los accidentes
Sócrurrs de la virtud. De esta manera, con la universalidad del concepto,
cn cuanto a su aplicación a todos los seres de la misma especie,
La filosofía, tal como se entiende en sentido amplio, nació en
Gre- y también en cuanto a su comprensión por todas las personas con
cia, cinco o seis siglos antes de Jesucristo. y, entre los firósofos
uso de razón, contrasta con el relativismo de los sofistas.
que inician el periodo de esprendor griego dentro del pensamien-
Del pensamiento moral socrático destaca su teoría sobre la vir-
to, se encuentra Sócrates.
tud, expuesta por Platón (Diálogos; 1975:219) en el famoso diá-
sócrates vivió del 470 ar 4N a. c. Fue maestro de pratón y no logo de Menón o de la virtud:
escribió ningún libro. Murió condenado a muerte, acusado de co-
ffomper a la juventud y de no creer en los dioses de la ciudad. Es Consideremos ahora las cualidades del alma. ¿No hay cualidades
famoso por su método de enseñanza llamado mayéutica (parto
de que llamas templanza, justicia, fortaleza, penetración de espíritu,
los espíritus), basado en preguntas que obligan a sus discípulos sabiduría, elevación de sentimientos y otras semejantes?... Mira
a
pensar por cuenta propia y encontrar la solución a los problemas, cuáles de estas cualidades te parece que no son objeto de una cien-
principalmente de índole morar, que res pranteaba en las plazas pú- cia, y sí otra cosa. ¿No son tan pronto dañosas como proYechosas?

blicas. comenzaba afirmando "sólo sé que no sé nada,', para luego Lafortaleza, por ejemplo, cuando está destituida de prudencia, es
burlarse irónicamente del interlocutor que presumía saber todo. simplemente audacia. ¿No es cierto que si somos atrevidos sin pru-
dencia, esto viene en perjuicio nuestro, y que sucede lo contrario
con sus preguntas lograba primero hacer caer en contradicciones a
cuando la prudencia acompaña al atrevimiento?..' Asimismo, la
su discípulo, y enseguida, de un modo positivo, lo iba conducien-
templanza y la penetración de espíritu ¿no son útiles cuando se las
do, siempre basado en preguntas, por el camino de la verdad.
aplica y pone en ejercicio con prudencia, y dañosas cuando ésta
MARINA I)EI- PILAR OLMEDA CARCÍA I'r x llllNAS FTI(IAS

falta?... Si la virtud es una cualidad del alma, y si es indispensable llbles, imperecederos, subsistentes e inmateriales. Las matemáti-
que sea útil, es preciso que sea la sabiduría misma. Porque en el
t:as y las ideas pertenecen a este mundo.
supuesto de que todas las demás cualidades del alma né son por sí
Para Platón, el hombre se integra de alma y cuerpo. De estas
mismas útiles y dañosas, sino que se hacen lo uno o lo otro, según
tlos partes, la principal es el alma, que preexiste al cuerpo. El alma
que las acompaña la sabiduría o la imprudencia, resulta de aquí
que la virtud, siendo útil, debe ser una especie de sabiduría. l)crtenece al mundo inteligible, donde tuvo oportunidad de con-
tcmplar directamente las ideas y se dio cuenta de que la principal
cra la idea del bien, que todas las demás se subordinan a ella.
En Platón (La República;1978:28-29), el hombre integral es el
Puróu scr humano como individuo y como ciudadano. El hombre no actúa
como individuo en algunos momentos y como ciudadano en otros,
Nació en Atenas en el año 427 y munó en el año 347 a.C. En cuan- sino que es uno sólo; por esüa razón, la ética platónica comprende
to a las obras de Platón, la tradición ha conservado una Apología por igual al individuo y al miembro de la polis. El Estado es un
de Sócrates, treinta y cuatro diálogos y trece cartas.
El gramático instituto de educación, preocupado por el bien común e individual.
Trasilo, que vivió en los tiempos del emperador Tiberio, adoptó y Si el hombre es a la vez individuo y ciudadano, al actuar como ciu-
difundió (gracias a una alusión de Terencio Varrón, parece que ya dadano forma parte de la república; en consecuencia, tiene que estar
era conocido) el orden de estas obras en nueve tetralogías, en las integrado en uno de los estamentos o clases en que ella se divide.
cuales la Apología y las Cartas ocupan el lugar de dos diálogos.
Tetralogías de Trasilo: 1. Eutifrón, Apología, Critón, Fedón; 2. En la República hay ffes esratos sociales: el de los arcontes, el de
Cratilo, Teetetes, Sofista, Político; 3. Parménides, Filebo, Ban. los soldados y el de los trabajadores. La función de los arcontes es
quete, Fedro; 4. Alcibíades I, Alcibíades II, Hiparco, Amantes; 5. gobemar; la misión de los soldados es proporcionar seguridad a los
Teages, Cármides, Laques, Lisis; 6. Eutidemo, Protágoras, Gor- ciudadanos y defender la república; el papel de los trabajadores es
gias, Menón; 7. Hipias mayor, Hipias menor, Ioh, Menexeno; 8. procurar el alimento. Como la República o Estado es conno un hom-
Clitofón, República, Timeo, Critias; 9. Minos, Leyes, Epinomis, bre gigante (macroantropos), en ella existen las tres partes básicas:
Cartas (Abbagnano, Nicolás; 1978: 7 6). la prudencia, la valentía y la moderación o templanza. La primera es

La ética de Platón se basa en las doctrinas metafísicas y psico- la virtud propia de los arcontes; ellos son prudentes cuando gobier-
nan con sabiduría y honestidad. La valentía es la virtud específica
lógicas de este filósofo. Él opina que la realidad total se integra
de los soldados o guardianes del orden. Ellos son valientes cuando
con dos mundos: el inteligente y el sensible. El mundo sensible,
hacen la defensa con valor, pero también con honradez. La tercera
que es donde nos movemos, se percibe mediante los sentidos y los
virtud es la templanza; ésta pertenece a los agricultores o a los pro-
seres que en él existen son cambiantes y perecederos. El mundo
ductores en general, quienes la poseen cuando producen moderada
inteligible, sólo accesible a la inteligencia, es el de los seres inmu-
y honestamente. (Platón; 197 8: 261-21 8).
MARINA DEL PILAR OLMEDA GARCÍÁ I'r ¡r I I(INAS ETIQ{S

Como en el individuo, también en el Estado se puede presentaf l'ara concluir estas breves reflexiones sobre la obra de Platón,
una cuarta virtud: la justicia. Iros remitimos a Nicolás Abbagnano (obra citada: 105-106) quien
ulirma que
Ésta no se persigue directamente, sino que aparece cuando existen
las oúas tres. Hay justicia en el Estado cuando el gobernante dirige ,
cl bien no es una súper-sustancia, sino la forma de vida propia del
con prudencia, el soldado se conduce con valentía y el productor hombre; y la búsqueda del bien es la investigación de cuál sea esta
modera su actividad. Cada virtud es un camino hacia el bien, que lbrma de vida. Según Platón, Ia vida del hombre no puede ser sólo
es el ideal no sólo del mundo inteligente, sino también del hombre, una vida fundada sobre el placer; una vida así es una vida propia
quien lleva en sí un parte de ese mundo. La actividad virtuosa del del animal, pero no del hombre. Tampoco puede ser una vida de
hombre como individuo y como ciudadano lo acerca también a la pura inteligencia, que sería divina, pero no humana. Por lo tanto,
felicidad. (Platón; I97 8: 27 8-286). ha de ser una vida mixta de placer y de inteligencia. Lo importante
cs determinar la justa proporción en que deben mezclarse el placer
Para Platén, la virtud es la práctica del bien y el medio y la inteligencia para constituir la forma perfecta del bien. Al llegar
obtener la felicidad. La virtud se relaciona con las tres partes aquí, el problema del bien se convierte en un problema de medida,
alma: la racional, la concupiscible y la irascible. A veces, a de proporción, de convivencia: la investigación moral se transfor-
una de estas tres partes también se le considera como un ma en un indagación metafísica de fondo matemático,

de manera que, en este supuesto, en el hombre hay en


tres almas. Sean tres almas o tres partes de una sola, a cada Platón se une con Pitágoras y recurre a los conceptos pitagóri-
le corresponde una función diferente: a la parte racional, le toca eos del lírnite y de lo ilimitado. Toda mezcla bien proporcionada
conocer y gobernar al conjunto-hombre; las otras dos actúan está constituida por dos elementos. Uno es lo ilimitado, como
el control de la primera. ¡lr ejemplo, el calor, el frío, el placer o el dolor y, en general,
En el hombre, mediante su actuación correcta orientada al bien, Irdo lo que es susceptible de ser aumentado o disminuido hasta
se proclucen tres virtudes básicas y una cuarta como resultado do el infinito. El otro es el límite, es decir, el orden, la medida, el
las otras. Las tres virtudes básicas son: la prudencia, la valentía y rrúmero, que intervienen en la determinación y deñnición de lo
la templanza o moderación. La primera es la virtud propia del alma ilimitado. La función del límite consiste en reunir y unificar lo
racional, la segunda corresponde a la parte irascible y la tercera t¡ue está disperso, en dar número y medida. Ahora bien, la unión
la virtud propia de la pafe concupiscible. Si cada parte d€l alma de tlc lo ilimitado y del límite es el género mixto al que pertene-
un individuo cumple co:l la función que le corresponde, es decir, si ecn todas las cosas que tienen proporción y belleza; la causa
en el hombre se dan las tres virtudes mencionadas, entonces espon' tlol género mixto es la inteligencia, que por lo tanto viene a ser,
tiíneamente aparecerá una cuaf¿ virtud: la justicia' El hombre justo con lo ilimitado, el límite y el género mixto, el cuarto elemento
es tal porque al mismo tiempo es prudente, valiente y moderado. t'onstitutivo del bien.
I I I( ]'I'RINAS ETIC]AS
MARINA DEL PIL\R OLMEDA GARCÍA

Antsrórarss Llegada la reflexión a este punto, el filósofo se formula la siguien-


tc cuestión: ¿cuál es o en qué consiste el bien supremo? Para Aristó-
ioles, la felicidad es el bien supremo. Todos los hombres queremos
Nació en Estagira, Macedonia, en los años 384-322 a.C. La obra
ser felices. Efectivamente, todos queremos ser felices; pero ¿en qué
escrita de Aristóteles es monumental, sus tratados se encuen-
tran estructurados por áreas: lógica, escritos de física, historia consiste la felicidad? Aristóteles descarta varias tesis respecto de la

natural, matemáticas, psicología, economía, política y retórica. l'clicidad; por ejemplo, la felicidad no puede consistir en el placer,
Para efectos de este estudio nos interesan sus obras sobre éti- ¡ruesto que aun los hombres peores pueden disfrutar a veces de algu-
nos goces, sin que esto quiera decir que sean dichosos. De igual ma-
ca integrada, además de sus reflexiones en otras materias, por
los tratados: Ética nicomaquea, Ética eudemia y la Gran ética r¡ora, la felicidad no puede basarse en la foftuna o en los honores.

(Aristóteles; 1981: xvt). Para concluir este apartado sobre Aristóteles transcribo textual-
rrrente breves párrafos de los dos primeros libros dela l4tica nico-
La teoría ética de Aristóteles se sustenta en la concepción del
hombre y en la doctrina teleológica de este f,lósofo. La concep- nrca:Del bien humano en general y de la virtud en general:
ción aristotélica del hombre entiende a éste como un compuesto Todo arte y toda investigación científica, lo mismo que toda acción
sustancial de cuerpo y alma. Esto quiere decir que alma y cuerpo y elección parecen tender a algún bien; y por ello definieron con
forman una sola sustancia: el hombre. El alma es principio vital. toda pulcritud el bien los que dijeron ser aquello a que todas las
En el hombre, hay tres niveles de vida: vegetativa, sensitiva y ra- cosas aspiran... Si existe un fin de nuestros actos querido por sí
cional; pero no hay tres almas sino una sola, que es la racional. mismo, y los demás por él; y si es verdad también que no siempre
Según su doctrina teleológica, toda actividad humana tiene un elegimos una cosa en vista de otra tanto como remontar al
-sería
frn: por ejemplo, el arte de la medicina tiene como fin la salud, err infinito, y nuestro anhelo seía vano y miserable-, es claro que
tanto que el arte de la estrategia, la victoria. Toda empresa que sq ese fin último será entonces no sólo el bien, sino el bien sobera-

inicia persigue un fin, el cual es un bien para ella. Como nuestros no. Con respecto a nuestra vida, el conocimiento de este bien es
cosa de gran momento, y teniéndolo presente, como los arqueros el
actos buscan fines y actuamos constantemente, todos esos fines en
blanco, acertaremos mejor donde conviene. Y si así es, hemos de
realidad son medios para lograr otros fines; pero es necesario de.
intentar comprender en general cuál pueda ser, y la ciencia teórica
tener en cierto momento esta enorme cadena de fines y medios;,es
o práctica de que depende. (Aristóteles; 1981: 3-18).
decir, que tendamos hacia un fin último o absoluto, que ya no se&
medio. Al perseguir un fin, lo hacemos porque consideramos ese
fin como un bien; por tanto, afirmar la necesidad de pretender un flrrce cRrsrrANA
fin absoluto que dé sentido a la cadena de medios y fines equivale
ljl cristianismo nació sobre las ruinas de la sociedad antigua. Des-
también a suponer la existencia de algo que tenga la propiedad de
ser un bien absoluto o supremo. ¡rués de una larga y sostenida lucha, la religión católica se con-
MAIIINA I)EL PILAR OLMEDA CARCíA ¡ X)CTRINAS ETICAS

vierte en la religión of,cial de Roma, en el siglo IV, para extender Las obras de los padres apostólicos son sencillas y didácti-
su inflcuencia sobre la humanidad. Con mayor o menor fuerza en cas, exhortan a perpetuar la fe y las costumbres cristianas. Entre
las diferentes sociedades y regímenes, se encuentra un contenido cstos destacan Clemente Romano, San Policarpo, San Papías
rellgioso en todas las manifestaciones de la vida humana' y Justino, a quien se le reconoce como el verdadero fundador
Nicolás Abbagnano expone que, de la patrística. Entre los padres apologistas se encuentran Ta-
ciano, Tertuliano, Atenágoras, Minucio Félix, Egesipo y San
el predominio del cristianismo en el mundo occidental deter- Irineo, entre otros.
minó una nueva orientación de la filosofía. La religión parte de La patrística de los padres catequistas se encamina hacia una
creencias que no son fruto de una investigación con fundamentos interpretación más científica; entre ellos destaca Clemente Ale-
científicos; es la adhesión a una verdad que el hombre acepta iandrino. A principios del siglo lv la actividad emprendida por
en virtud de una fuerza superior. Reconocida esta verdad en su los padres catequistas se consolida para dar paso a la edad de
valor absoluto, surge la exigencia para cada hombre individual oro de los padres de la iglesia. La f,losofía patrística en los si-
de comprenderla en su auténtico significado; esta exigencia sólo glos rtt y Iv está representada por Clemente de Alejandría, Basi-
puede satisfacer la investigación filosófica. (Abbagnano, Nico-
lio el Grande, Gregorio Nazianceno, Gregorio de Niza, Epifanis
lás; 1999:226).
obispo de Constanza, Macario obispo de Magnesia, Juan Cri-
sóstomo y Ambrosio obispo de Milán.
De la religión cristiana nace así la filosofía cristiana, con la mi- Otra etapa de la patrística es la que se conoce como filo-
sión de proporcionar a la humanidad la comprensión de la verdad sofía escolástica, que se designa así a la filosofía cristiana
revelada por Cristo. de la Edad Media. El origen y el desarrollo de la escolástica
El pensamiento cristiano es amplísimo y profundo, como los (scholasticus), se relaciona estrechamente con la función de la
evangelios y las cartas de San Pablo; a esta etapa se le llama cris- cnseñanza, que determinó la forma y método de la actividad li-
tianismo primitivo o ética pastoral cristiana, ya que aquí se en- teraria de los escritos escolásticos. En esta etapa de la filosofía
cuentran mayormente especulaciones f,losóficas. quedan comprendidos, entre otras, las aportaciones filosóficas
A medida que el cristianismo se difunde, se convierte en tema de Enrique y Remigio de Auxerre, Juan Escoto Eriugena, An-
de reflexiones y debates cada vez más profundos, por lo que es selmo de Aosta, Pedro Abelardo, Gilberto de la Porrée, Juan
necesario crear un cuerpo doctrinal capaz de defender y explicar de Salisbury, Amalrico de Bena, David de Dinant, Bernardo
los dogmas de la iglesia; a esta etapa se le llama la patrística o de de Claraval, Hugo de San Víctor, Pedro Lombardo, San Bue-
los padres de la iglesia. naventura, San Alberto Magno, Rogerio Bacon, Juan Duns Es-
Luego evoluciona en la filosofía cristiana en varias etapas: la de los coto, Marsilio de Padua, Guillermo de Ockham y Santo Tomás
padres apostólicos, de los apologistas y de los padres catequist¿s. de Aquino.
MARINA I)EL PILAR OLMEDA CARCÍA ¡)( X]'IR]NAS E'IICAS

La ética cristiana la fllosofía cristiana en general- .\¡¡,t AcusriN


-como
parte de un conjunto de verdades reveladas acerca de Dios, las
relaciones del hombre con su creador y el modo de vida práctico
San Agustín (354-430) es uno de los filósofos más importantes de
que aquél ha de seguir para salvarse en el otro mundo.
la patrística. Nació el 13 de noviembre del año 354 en Tegaste,
Paralareligión, Dios, creador del mundo y del hombre, es con-
Numidia, lo que hoy es Argelia. Su padre, Patricio, era violento y
cebido como un serpersonal, bueno, omnisciente y todopoderoso.
un pagano (más tarde se convirtió al cristianismo); su madre, Mó-
El hombre, como criatura divina, tiene su fln último en Dios, que rrica, era una devota cristiana que dedicó su vida a la conversión
es para él el bien más alto y el valor supremo. Dios reclama su
de su hijo; fue canonizada por la iglesia católica romana.
obediencia, y la sujeción a sus mandamientos, que tienen en este
Entre las principales obras de San Agustín f,guran: Contra
mundo hurnano terreno el carácter de imperativos supremos.
ttcadémicos, Soliloquios (diálogos del alma con Dios), De la vida
La doctrina cristiana de las virtudes expresa también esta su- lteata, De h trtnidad, Del libre arbitrio, De la inmortalidad del
perioridad de lo divino. Hace suyas como virtudes cardinales: la
ttlma, l,as confesiones, La ciudad de Dios (primera ñlosofía de la
prudencia, fortaleza, templanza y justicia, ya proclamadas por
historia desde el punto de vista cristiano). (Abbagnano, Nicolás;
Platón, y que son las propiamente morales; admite además unas
t989:275-277).
virtudes supremas o teologales: fe, esperanza y caridad. Mien-
Como escritor San Agustín ftie prolífico, convincente y un
tras las cardinales regulan las relaciones entre los hombres y son
brillante estilista. Su obra más conocida es su autobiografía, Las
por ello virtudes a escala humana, las teologales regulan las re-
confesiones (en el año 400) donde narra sus primeros años y su
laciones entre el hombre y Dios, y son, por ende, virtudes a la
conversión al cristianismo. San Agustín rebate el pensamiento
medida divina.
tradicional, el cual planteaba que el mal ocurre en el mundo por
El cristianismo pretende elevar al hombre del orden terreno a
rnedio del azar. Él define al mal como la carencia, falta de bon-
un orden sobrenatural en el que pueda vivir una vida plena, feliz
«lad debida, falta de ser. Desarrolló la teoría sobre la solidaridad
y verdadera, sin las imperfecciones, desigualdades e injusticias
humana; afirmo también que todos los hombres nacemos del
terrenas. Al proponer la solución de graves males mundanos en
pecado transmitido por Adán. Otros males aflrma que no son
un más allá, el cristianismo introduce una idea de una enonne
tales, sino una falta de perspectiva nuestra para reconocerlos
riqueza moral: la de la igualdad de los hombres. Todos los hom-
como un bien.
bres sin distinción y libres, cultos e ignorantes- son De singular importancia son /-¿s confesiones, obra que consta
-esclavos
iguales ante Dios y están llamados a alcanzar la perfección y la
de trece libros. En estos libros San Agustín relata su conversión al
justicia en el mundo sobrenatural.
cristianismo, ya que antes había sido pagano. San Agustín afirmó:
Los dos exponentes máximos de la filosofía cristiana están re-
"No salgas de ti mismo, en tu interiorreside la verdad", por elio
presentados en San Agustín y Santo Tomás.
ha sido llamado, con justa razón, el filósofo de la interioridad: el
MARINA DEL PILAR OLMEDA GARCÍA lx x ttRtNAs ÉTICAS

interior del hombre es semejante a un templo, en el cual uno debe y toda solución de esos problemas es siempre justificación de la
contemplar la luz de Dios" (San Agustín;2001: Libro x, 203). investigación humana que conduce a ella. (San Agustín; 200l:Lí-
San Agustín se convirtió en un ardiente buscador de la verdadi bro vIII, 135-154).
su inspiración fue Cicerón. En el neoplatonismo, se encontró con lq
idea de que toda la existencia tiene una naturaleza divina. Para é1, San Agustín ha recogido lo mejor de la especulación patística
precedente a su tiempo; y los conceptos teológicos fundamentales,
el alma inmortal y espiritual del hombre es la imagen de la trinidad; ya entonces adquiridos por la especulación y aceptados por la lgle-
sólo en el interior del alma se halla toda la verdad como producto .
sia, tienen en su obra desarrollos sustanciales, que se enriquecen
de una iluminación divina. La vida del hombre es una prolongada
con un calor y un significado humano que antes no poseían, se con-
lucha entre la gracia y el pecado. (Santa Mónica; 2000: 35-49).
vierten en elementos de vida interior para el hombre. San Agustín
consigue unir los conceptos teológicos a las inquietudes y a las du-
La éticade San Agustín está inspirada, como todo su pensa-
das, a la necesidad de amor y felicidad que son propios del hombre,
miento, en la f,losofía platónica. Considera que el alma contiene
l'undamentándolos mediante la investigación. Ésta halla en larazón
una nonna divina (especie de idea platónica), que le guía hacia la
su disciplina y su rigor sistemático. San Agustín presenta en la es-
beatitud; mas no basta conocer esta no[na divina, es necesario ser'
peculación cristiana la exigencia de la investigación, con la misma
movido hacia ella por medio del amor; por eso el imperativo ético
l'uerzacon que Platón la había presentado en la filosofía griega.
fundamental del obispo de Hipona es: Ama y hazlo que quieras.
En la personalidad de San Agustín, la especulación cristiana
El centro de la investigación agustiniana coincide verdadera-
realiza su pleno y auténtico significado humano. La investigación
mente con el centro de su personalidad:
teológica ces aparuél de ser puramente objetiva, como había ocurri-
do aun en las más poderosas personalidades de la patrística griega,
la actitud de la confesión no está limitada sólo a su famoso escrito,
para hacerse más interior y acomodarse al mismo hombre que la
sino que es la posición constante del pensador y del hombre de
realiza. El problema teológico en San Agustín es el problema del
acción que, en todo lo que dice o emprende, no tiene otra finalidad
hombre Agustín: el problema de su dispersión y de su inquietud, el
que la de ponerse en claro consigo mismo y de ser lo que debe
ser" por eso declara que no quiere conocer otra cosa que el alma y
problema de su crisis y de su redención, el problema de su razón es-

Dios, y se mantiene constantemente fiel a este programa. El alma, peculativa y de su obra de obispo. Lo que San Agustín nos dio a los
esto es, el hombre interior, el yo en la simplicidad y verdad de su demás es lo que él conquistó para sí mismo. San Agustín afirmó:
naturaleza. Dios, esto es, el ser en su trascendencia y en su valor
normativo, sin el cual no es posible admitir la verdad del yo. Por la sugestión y lafuerza de su enseñanza, que no han disminuido a
esto los problemas teológicos estiín siempre en él sólidamente uni- través de los siglos, aunque hayan cambiado los términos del pro-
dos al problema del hombre, que los hace objeto de investigación; blema; surgen precisamente del hecho de que en toda referencia
MARINA DEL PILAR OLMEDA GARCÍA 1,, u ililNAS ETICAS

inmediata, la vida no ha buscado y conseguido más que la claridad lrrrmación. De los 27 alos 31 años, fue designado para enseñar
sobre sí mismo y sobre su propio destino, el significado auténtico
en París, que era entonces el centro intelectual de la cristiandad.
de su vida interior. (San Agustín;20CIl: Libro x, 181-200).
l)o sus 31 a sus 34, fue admitido al magisterio. De sus 34 a sus
,1.1,a petición del papa (siempre fue obediente y fiel hijo de la
A diferencia de la platónica, la investigación agustiniana radica
iglesia y, de modo particular, del papa y de los superiores de su
en el terreno de la religión: Dad quod iubes et iube quod vis. Sólo
or«len), Santo Tomás retorna a Italia para cumplir las funciones
Dios determina y guía la investigación humana, sea como espe- rlc Lector de la Curia.
culación, sea como acción. Así, para San Agustín la especulación Sus mejores obras son: la Suma contra los gentiles, Comen-
es, en su verdad fe en la revelación, y la acción es en su libertad,
Mrio a las sentencias,la Suma teológica y la Perfección de la
gracia concedida por Dios.
vida espiritual.
Tomás de Aquino, citado porJ. L. Martín del Campo (1992:92),
hasa su teoría ética en las afirmaciones siguientes, que comenta y
S¿,¡'tro Totw¡s DE AeuINo lruta de demostrar con un sistema:

Uno de los mayores exponentes de la ética cristiana es Santo To' El hombre, compuesto sustancialmente de cuerpo y alma racional,
más de Aquino, filósofo y teólogo del siglo xI[, quien sigue las es un ser libre por naturaleza; existe Dios, entendido como acto
tesis principales de Aristóteles en esta materia. Nació en Rocase- puro o ser perfectísimo; el orden moral carece de sentido si no se
cca, Italia, entre 1224 a 1226 (no hay acuerdo entre los autores) admite la libertad humana. El hombre, como cualquier otro ser,
y murió en 1274. tiende hacia lo que para él es un bien. La diferencia con otros seres

Santo Tomás de Aquino nació probablemente en 1225 en estriba en que muchos de éstos lo hacen sin saberlo o con un cono-
cimiento moral instintivo y, por lo mismo, necesario; el hombre,
el castillo de Roccasecca, cerca de la ciudad de Aquino, en el
en cambio, en la mayoría de los casos, está en posibilidad de saber
entonces Reino de Nápoles. Formaba parte de una familia de
qué le conviene y decidir libremente. Una persona, de manera libre
nobles, aliada al emperador y fiel a su causa. De los 14 a los
pero también de acuerdo con su naturaleza, procura aplicar en ac-
19 años, Santo Tomás termina su formación literaria y empieza
tos sus capacidades, sobre todo las específicas. A cada realización
sus estudios de filosofía en Nápoles, en donde tiene, de manera de la capacidad humana, la naturaleza anexa determinada satisfac-
particular, como maestros a Martín de Dacia y a Pedro de Irlan- ción. Según Tomás de Aquino, lo valioso del acto moral depende
dés. En 1244, a sus cerca de 20 años, el joven Tomás toma el de su contenido, pero también de los motivos. No es posible cali-
hábito de los predicadores en el convento de Santo Domingo de ficar como bueno un acto que solamente sea bueno en uno de los
Nápoles. De los 20 a los 27, es muy probable que haya seguido dos aspectos; por ejemplo, asesinar con buena intención o ayudar
a su maestro Alberto Magno a Colonia, en donde terminó su al prójimo con propósitos egoístas.
MARINA DEL PILAR OLMEDA C]ARCJÍA l,( ( I'RINAS E|ICAS

Santo Tomás marca una etapa decisiva de la escolástica. Él con- rlt: Dios. Estas dos condiciones están ligadas entre sí, puesto que

tinúa y lleva a término la obra iniciada por San Alberto Magno. lilosofía y teología no pueden estar separadas una de otra, sino
Gracias a la especulación tomista, el aristotelismo se hace flexible tlclimitados sus objetos respectivos; y la filosofía no puede ser
a las necesidades de la explicación dogmática, mediante la aplica- ¡rrcparadora y auxiliar de la teología, que es su verdadera culmi-
ción de una lógica rigurosa en todas sus partes. rurción, si no incluye y hace válido en sí misma el principio que

Santo Tomás se vale de un talento filológico nada común: el ¡ustif,ca precisamente esta función suya preparatoria y subordi-
aristotelismo ya no es para é1, un todo confuso en el que se han rrlda: la diferencia que hay entre el ser creado y el ser de Dios.
integrado tanto las teorías originales como las diversas inter- liste principio es la clave de la bóveda del sistema tomista. Es
pretaciones de los filósofos musulmanes. Trata de establecer el rl que ayudará a Santo Tomás a determinar las relaciones entre
r irzón y fe, y a establecer la re gula
verdadero signif,cado del aristotelismo, tomándolo de los textos fidei; a centrar alrededor de la
del estagirita; de los intérpretes islámicos se vale como fuentes lunción de la abstracción la capacidad de conocer,del hombre; a
independientes, cuya f,delidad a Aristóteles examina cuidadosa lr¡rmular las pruebas de la existencia de Dios; aaclarar los dogmas
y críticamente. Aristóteles es para Santo Tomás el fln último de Ir¡ndamentales de la fe. Santo Tomás enunció este principio en
la investigación f,losófica. El estagirita llegó hasta donde podía srrprimer trabajo, De ente et essentia, como distinción real entre
llegar la razón', más allá, sólo hay la verdad sobrenatural de la rscncia y existencia; pero también está expuesto en la fórmula de
fe. Fundir la filosofía con la fe, la obra de Aristóteles con las lrr analogía del ser, que a la vez uiliza ampliamente.
verdades que Dios ha revelado al hombre y de las que la Iglesia Aflrma Gutiérrez Sáenz (obra citada:246-247) que
es depositaria: ésta es la labor que se propone Santo Tomás con
en esta teoría, el fin último no radica en la felicidad, sino en la
toda claridad.
realización de lo específicamente humano. El ser humano viene de
Para llevar a cabo esta tarea son necesarias dos condiciones
Dios, es criatura divina; y su fin es también Dios. La contempla-
fundamentales: la primera es separar claramente la filosofía de ción eterna de Dios es la beatitud o felicidad sobrenatural, que en-
la teología, la investigación racional, guiada y sostenida tan sólo contrará el hombre honesto después de la muerte... Dios es un bien
por principios evidentes de la ciencia, cuyo supuesto previo es la objetivo, absoluto, perfecto. Por tanto atrae a la voluntad humana
revelación divina. En efecto, solamente mediante esta clara sepa- de un modo irremisible.... Este es elfin operaris del hombre.
ración, la teología puede servir de complemento a la filosofía, y la
filosofía servir de preparación y auxiliar de la teología. La segun- La filosofía cristiana sostiene además que el alma es inmortal.
da condición es hacer válido, dentro de la investigación filosófica, lista circunstancia, si acaso, permitiría una mejor realización del
como criterio de dirección y norma, un principio que indique la lrombre, porque él podría captar la verdad plena y el bien en sí
disparidad y separación entre el objeto de la filosofía y el objeto rrrismo, y se satisfarían cabalmente sus dos potencias racionales:

de la teología, como él decía, entre el ser de las criaturas y el ser lrr inteligencia y la voluntad.
MARINA DE,L PII,AR OLMEI)A GARCÍA ooctRtN¡s Étrc¡s

De esta etapa fllosófica se exponene a continuación las teorías


Euce MoDERNA
de Immanuel Kant, y Carlos Marx.

La filosofía moderna se inició en el siglo xvII y siguió hasta el si-


glo xx; algunos de los f,lósofos de esta etapa son: Renato Descar-
tes, Francis Bacon, Juan Locke, David Hume, Benito de Spinoza, Iuut¡,¡uar Kt¡,tr
Godofredo Guillermo Leibniz, Immanuel Kant, Jorge Guillermo
Federico Hegel, Carlos Marx y Augusto Comte. El autor del formalismo moral es el fllósofo alemán Immanuel
En la ética modema la atención quedará centrada en las dis- Kant, quien nació en Konigsberg, Prusia en 1724 y murió en 1804
.1

putas filosóficas de la corriente empirista contra la racionalista. *l en esa misma ciudad. Este autor es uno de los más importantes
iJ

Sobresale el racionalismo de Descartes, prolongado, entre otros, filósofos de la historia universal; su pensamiento es comparable
por Spinoza y L,eibniz. al de Platón, Aristóteles, Santo Tomás de Aquino y Hegel. Este
En esta etapa de la fllosofía florece principalmente en trnglaterra autor consagró su vida entera, austera y metódica, a la ciencia y a
el empirismo, siendo sus principales autores F. Bacon, J. Locke, la filosofía, a la enseñanza, ala creación y publicación de uno de
Berkeley y D. Hume. los más originales sistemas filosóf,cos.
En el siglo xvIII surge la teoría de Immanuel Kant, como un in- *. Las obras más importantes de Immanuel Kant son: Crítica de
tento de sÍntesis entre racionalismo y empirismo. A su genio siguie- ,s
§ la razón pura, Crítica de la razón práctica, Crítica del iuicio,
ron los tres idealistas gerrnanos más importantes: Fichte (idealismo fr Fundamentación de la metafisica de las costumbres y L,ct religión
*
subjetivo), Schelling (idealismo objetivo) y F. Hegel (idealismo ab- # dentro de los límites de la nueva razón.
;¡,

soluto). Estos autores representan la cumbre de la especulación filo- ;l


Según Kant, los actos buenos proceden de la voluntad, sostiene
sófica. Raúl Gutiérrez Sáenz (2001: 27) afirmó en este sentido que que ni en el mundo ni en general tampoco fuera del mundo, es
"el análisis, la profundidad, la complejidad de expresión y el espíritu ,, posible pensar nada que pueda considerarse como bueno sin res-
Él
*l
sistemático son las características del genio germano idealista". s tricción, a no ser tan sólo una buena voluntad. Para reafirmar lo
En el siglo xlx se desarollan dos teorías frlosóficas críticas de
# anterior procedemos a leer el siguiente pasaje de Kant, tomado de
Federico Hegel, que son: Kierkegaard, precursor del existencialis- su obra Fundamentación de la metafisica de las costumbres:
mo y Carlos Marx, exponente del materialismo dialéctico. En esta
#
etapa de la filosofía se encuentra también la teoría de Federico Nie- # La buena voluntad no es buena por lo que efectúe o realice, no es
#
tzsche, con su teoría del superhombre considerada como el antece- buena por su adecuación para alcanzar algún fln que nos hayamos
dente del estudio de los valores con enfoque f,losófico. Esta etapa propuesto; es buena sólo por el querer, es buena en sí misma...
se cierra con Schopenhauer con la teoría del pesimismo absoluto y Una acción hecha por deber tiene su valor moral, no en el valor
Augusto Comte, con su teoría de la ciencia. que por medio de ella se quiere alcanzar, sino en la máxima por
MARINA DEL PII.{R OLMEDA tx x il(¡NAS ETICAS

la cual ha sido resuelta... El valor moral tiene que ser determinado Yo denomino al ideal del bien supremo la idea de esa inteligencia
por el principio formal del querer en general. (Kant Immanuel; . en que la voluntad moralmente más perfecta, combinada con la fe-
1983:21). licidad suprema, es la causa de toda felicidad en el mundo, en cuan-
to ésta está eshe€hamente relacionada con la moralidad (como lo
Respecto de los fundamentos de la moralidad de Kant, que hace digno de ser feliz). Por consiguiente, solamente en el ideal
Gutiérrez Sáenz (2000: 252-253) afirma que tlel bien supremo originario puede la razón pura encontrar el funda-
mento del enlace prácticamente necesario entre ambos elementos
para Kant nadie se puede poner de acuerdo cuál es el objeto efec. clel bien supremo derivado, es decir, de un mundo inteligible o sea
tivamente bueno al que debemos tender. Unos creen que es la,i moral. Ahora bien, como mediante la razón tenemos que represen-
felicidad, otros dicen que es el placer, o las riquezas, etcétera.,., tarnos necesariamente como pertenecientes a un mundo de esta ín-
Fundamentar la ética en un fin bueno cuya posesión nos perfec- dole, aunque los sentidos no nos expongan más que un mundo de
cione y haga felices, equivale a errca:uzaÍ al hombre por el camino fbnómenos, tendremos que suponer que aquél es consecuencia de
del egoísmo y de la tendencia a su propio bien. Pero eso lo hace nuestra conducta en el mundo de los sentidos, como éste no nos
el hombre por instinto. No hay necesidad de darle obligaciones en ofrece ese enlace, tendremos que suponer que es un mundo futuro
tal sentido; tales objetivos quedan todavía por debajo del plano para nosotros. Por lo tanto Dios y una vida futura son dos supues-
moral. Por lo tanto, el nivel moral debe estar colocado en un hori- tos que no pueden separarse de la obligación que larazínpr¡ra nos
zonte superior al de los bienes empíricos, en un plano puramente impone según principios precisamente de la misma razón.
racional y a priori que se va a ver. Para Kant el fundamento de
moralidad es el puro respeto al deber. Esto significa que una per-','
La teoría moral de Kant se centra en el imperativo categórico:
sona adquiere valor moral no tanto por lo que hace, sino por la
obra de modo que tu máxima pueda valer siempre como principio
intención con que lo ejecuta, y que en todo caso, ha de ser el puro
tlo una legislación universal. La idea que orienta este imperativo
respeto al deber.... No basta cumplir materialmente con el deber
es determinar si la adopción universal de una ley es coherente o
sino que debe cumplirse única,y exclusivamente motivado por el
puro respeto a dicho deber.... Si una persona cumple con su deber compatible con los fines de la propia persona. Un obrar que supere
alcanza el nivel legal; pero si además cumple con su deber movido,,r esta prueba es moralmente permisible, mientras que la que no la
sólo por el respeto o sumisión voluntaria a ese deber, entonces §upere está moralmente prohibida.
alcarva un nivel moral. Una noción clave en la teoría moral de Kant es la de la auto-
nomía, entendida ésta como la capacidad que tiene la voluntad de
Respecto al ideal supremo, Kant expone en su Crítica de la ra. nornarse a sí misma, de elegir soberanamente con independencia,
zón pura (1965: 384-385), en la sección tI, capítulo u del ideal del incluso, de los deseos surgidos de la propia naturaleza humana.
bien supremo como fundamento de determinación del fin último Adicionalmente, la moralidad enffaña para Kant no solarnente
de la razón pura, lo siguiente: run imperativo categórico (ley) y la autonomía de la voluntad, sino
MAI{INA DEL PILAR OLMEDA GARCÍA IIX IIIINASÉTICAS

también un objeto: el fln último hacia el cual toda acción está diri- ¿Que es primero, la materia o el espíritu? La filosofía idealista
gida. Este objeto es caracterizado como el bien supremo, mediante ¡rlantea que el espíritu es primero y la materia es producto del
la unión perfecta de virtud y felicidad. es¡ríritu. El materialismo, por su parte, sostiene que la materia es
Se encuentra en la teoría de Kant un riguroso concepto de mora- Io ¡rrimero y que el espíritu es un producto ref,nado de la materia.
lidad, su concepción del valor moral sólo se da cuando la persona l,os marxistas no niegan el pensamiento, la cultura, labelleza y la
cumple con su deber motivado por el respeto a ese deber, es decir, irrtcligencia, pero consideran que lo espiritual es un derivado de
con la intención de cumplirlo. Así, el fundamento de moralidad es l¡r rnateria. Materia: es el ser objetivo, que existe independiente-
para Kant el deber por el deber mismo. rucnte de la conciencia, se capta por los sentidos y produce nues-
lros conocimientos. Esta reducción de todo el ser a la calidad de
l¡r materia es la teoría monista del marxismo. La conciencia y el
C¿,nros M¿,nx ¡rcnsamiento son calificados como inmateriales, pero en el fondo,
t'onstituyen una propiedad y un producto de la materia.
Carlos Marx nació en Tréveris, Alemania, en 1818 y murió en Los marxistas rechazan la teoría idealista que postula la exis-
Londres en 1883. , It rrcia de un espíritu puro (Dios). Postulan que no es Dios quien ha
Se considera como las obras más importantes de Marx: El ca- croado la materia, sino que es el cerebro humano (materia) el que
pital, El manifiesto del Partido Comunista,ln ideología alemana, hl creado la idea de Dios.
La sagrada familia y Es c ritos económic o -filosófico s. El materialismo es una teoría que propone a las estructuras econó-
El pensamiento de Marx tiene una clara influencia de Hegel, Feuer- rrricas (materiales) como la base y raíz de las superestructuras cultu-

bach y Saint rulr:s e ideológicas, comoel derecho,la filosofía, lamoral, lareligión,


-Simon. De Hegel tomó de su f,losofía el método dia,
léctico, aplicado a la materia y no al espÍritu; de Feuerbach tomó el ln política y el arte y su aplicación a las cuestiones económicas.
materialismo; y de Saint-Simon tomó las ideas sobre el socialismo La dialéctica. La influencia de Hegel sobre Marx se percibe sobre
Aunque Marx no escribió ninguna obra de género ético, la ética Itrlo en el método dialéctico, que utiliza éste como ley fundamental
marxista debe entenderse por sus postulados: la liberación del de- rlcl devenir de la materia.La dialectica es la ley del cambio de la
terminismo económico, la desaparición de clases, la eliminación de rt:ulidad, y esta evolución tiene lugar de acuerdo con las ffes etapas
la propiedad privada sobre los medios de producción. En este sen- Ircgelianas, que son: a) Tesis, que es la primera etapa de cualquier
tido Erich Fromm afirmó que "el fin de Marx era la emancipación llr()ceso evolutivo, pero allí mismo está contenido en un contrario:
espiritual del hombre, su liberación de las cadenas del determinis- /r) Antítesis; enseguida la lucha entre esos dos contrarios provoca
mo económico, su restitución a su totalidad humana, el encuentro rura lercera etapa: c) Síntesis. La aplicación nriís importante de es-
de una t¡nidad y armonía con sus semejantes y con la naturaleza. t¡rsctapas dialécticas está en la interpretación del devenir histórico
(Fromm, Erich; 1998: 15). r'orno una continua lucha de clases.
MARINA DEL PILAR OLMEDA GAR(]ÍA

En su obra El capital, Carlos Marx expone que "la explota-


ción por la cual el trabajador es menospreciado en sus derechos,
y obligado a vivir materialmente infrahumano, es la alineación
económica". Postula Marx que:

el precio de una mercancía está medido en función del trabajo hu-


mano allí plasmado. Que en el sistema capitalista el trabajador es
quien no posee nada; recibe un salario reducido, quedando el pro-
ducto en poder del empresario, quien lo vende con un precio que
incluye una plusvalía o utilidad del capitalista, es decir, un salario
no pagado. El origen del capital es, pues, el ahorro forzado que ha
sufrido el trabajador. Por lo tanto, expropiar al capitalista, no equi-
vale a una usurpación de bienes, sino que es un acto dejusticia, por
el cual se le devuelve a los obreros el salario no pagado, o plusvalía
del capitalista. (Marx, Carlos; 1994:40-44).

De acuerdo con la concepción materialista del marxismo, los


fines de un movimiento de clase están determinados por el con-
junto de relaciones de producción que esta clase está en posición
de establecer y defender.
El marxismo postula que la sociedad futura asistiría a la abo-
lición de la propiedad privada de los medios de producción y
de las clases sociales. Que la sociedad comunista eliminaría las
causas de las desigualdades sociales y de impedimento a la rea-
lización humana.
De los postulados básicos de la teoría marxista se configuran
sus convicciones morales: la prioridad de lo colectivo sobre lo in-
dividual, el interés por la clase obrera, la importancia del trabajo,
la socialización de los medios de producción y la preocupación
por la mejor distribución de la riqueza.

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