Un día Doña Eremita paseaba en su bicicleta y Mambrú corría a su lado

En eso, un erizo se cruzó en el camino.

¡Tring! ¡Tring! Doña Eremita tocó su timbre.
- Lo que esta bicicleta necesita – se dijo
Doña Eremita – es una bocina bien ruidosa
Doña Eremita compró 3 bocinas.
Todas eran muy ruidosas.
¡Biip! Biip!
¡Jonk! ¡Jonk!
¡Pajiiiijajuuuurrrr!
Doña Eremita tocaba feliz sus bocinas.
Entonces se le soltó la cadena.
Cuando Doña Eremita terminó de arreglarla, tenía las manos negras y grasientas.
Lo que esta bicicleta necesita - se dijo – es algo para lavarse las manos
Así que buscó un balde de agua y una toalla, un jabon y una jabonera, y los colgó en su
bicicleta. Y siguió su camino con las manos lindamente limpias.
Lo que esta bicicleta necesita- se dijo Doña Eremita por el camino – es una caja completa
de herramientas para que esté bien mantenida.
Asi que buscó una caja de herramientas con llaves, y destornilladores, y martillos y latas
de aceite. La instaló en la parte trasera de la bicicleta y siguió su camino.
Entonces Doña Eremita comenzó a pensar en comida – Lo que esta bicicleta necesita – se
dijo – es un lugar para llevar la merienda.
Así que buscó una bandeja para poner manzanas y bananas y sándwiches de tomate y
queso, una botella de limonada y un termo con chocolate, y una cesta especial con huesos
y galletas de perro para Mambrú. Acomodó todo en la bicicleta y siguieron su camino.
Pero el pobre Mambrú iba muy cansada corriendo al lado de la bicicleta. Se notaba porque
tenía la lengua afuera y jadeaba.
- Lo que esta bicicleta necesita – se dijo Doña Eremita – es algo para llevar a un perro
fiel.

Asi que buscó unos soportes de hierro, tuercas y pernos, unos cojines y le hizo un asiento
a Mambrú y siguieron su camino.
Estaban sentados a la orilla de la carretera comiendo sándwiches y galletas de perro
cuando comenzó a Llover.
- ¡Cielos! – dijo Doña Eremita -. Mambrú lo que esta bicicleta necesita es algo para
resguardarse de la lluvia
Así que buscó 2 paraguas, uno grande y otro pequeño los acomodó en la bicicleta y
siguieron su camino.
Pedaleando bajo la lluvia. Doña Eremita empezó a sentirse triste.
- Lo que esta bicicleta necesita – se dijo – es un poco de música alegre.

Asi que buscó un radio reproductor y varios casettes de música alegre y una armonica
para acompañar la música, y los acomodó en la bicicleta. Y siguieron su camino.

Doña Eremita pedaleaba tan rápido y soplaba la armonica tan fuerte que pronto se sintió
muy cansada.

- Lo que esta bicicleta necesita - se dijo Doña Eremita – es un poco mas de potencia.
Asi que buscó madera, unas cuerdas y una lona.
Contruyo un mástil unas banderitas y un ancla.
Y siguieron su camino, viento en popa, mas y mas rápido hasta que…
CRAAAAC!!
CRUUJ¡
CLANG!
PUM!
CATAPLUM!
PAJIIIJAJUURR!!!
- Mambrú lo que esta bicicleta necesita ahora- dijo Doña Eremita mientras se sacudía del
choque – es ir al basurero.
Y lo que necesito yo es…
YIIIIPIIIII!!!!!
Pero estos patines necesitan – se dijo Doña Eremita – lo que estos patines necesitan es…
FIN