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EL PAPEL DE LA FAMILIA Y LA ESCUELA EN EL DESARROLLO COGNITIVO

DESARROLLO COGNITIVO:

El desarrollo cognitivo, es la base de una de las cinco perspectivas del desarrollo humano
y se centra en procesos de pensamiento y en la conducta que refleja estos procesos. Se
inicia con una capacidad innata de adaptación al ambiente por parte del niño que se
esfuerza por adaptarse al medio que lo rodea, dando lugar al desarrollo humano.

Según Jean Piaget, el desarrollo humano parte en función de los reflejos arcaicos es decir;
el niño nace con esquemas básicos que le sirven para entrar en relación con el medio. (El
primer esquema básico del hombre, es el acto de chuparse el dedo pulgar dentro del vientre
materno), con esto se da origen al nacimiento del Desarrollo Cognitivo.

Podemos identificar de acuerdo a lo anterior que en este proceso de desarrollo cognitivo el


ser humano desde su nacimiento, entra a un medio en el cual hay actores que lo rodean para
formar parte de este proceso fundamental a lo largo de la vida.

ACTORES QUE INCIDEN EN EL PROCESO DE DESARROLLO COGNITIVO.

Los actores que forman parte de este del desarrollo cognitivo y por ende del desarrollo
humano son:

 LA FAMILIA: Según la Declaración Universal de los Derechos Humanos, es el


elemento natural y fundamental de la sociedad y tiene derecho a la protección de la
sociedad y del Estado.

 LA ESCUELA: El término escuela deriva del latín schola y se refiere al espacio al


que los seres humanos asisten para aprender.

Dos entes importantes que forman la sociedad donde el niño se muestra personal y
culturalmente.

EL PAPEL DE LA FAMILIA Y LA ESCUELA EN EL PROCESO DE DESARROLLO


COGNITIVO.

Tradicionalmente se han separado las capacidades formadoras de la familia y la escuela,


generando así una división artificial en cuanto a qué le corresponde a cada uno de estos
sistemas. Se ha atribuido en exclusividad a las familias el rol de satisfacer las necesidades
biológicas, afectivas y de formación valórica. A la escuela, en cambio, se le ha considerado
una institución destinada a la satisfacción de necesidades intelectuales y académicas
(Arancibia, Herrera, Strasser, 1999). Por el contrario, es necesario asumir que ambos
sistemas tienen un impacto directo y potente en el logro de todas las dimensiones de la
formación integral, las familias sí influyen en el logro de mejores resultados académicos y
las escuelas tienen una responsabilidad importantísima en la adquisición y despliegue de
habilidades sociales, valores y formas de convivencia sana, entre otras áreas de las
dimensiones socio afectiva y ética.

Por una parte, la familia es el primer contexto social del niño y la vida cotidiana del hogar
el marco en el cual se aprenden los primeros comportamientos interpersonales, los padres,
los hermanos y otros adultos significativos cumplen el rol de primeros modelos,
fundamentales en la formación socio afectiva, por esta razón decimos que inician en el
desarrollo cognitivo del niño, apoyados en la teoría de Piaget donde dice que el ser humano
llega al mundo con una herencia biológica, de la cual depende su inteligencia.

Por lo anterior es importante que los niños crezcan en un clima familiar acogedor,
respetuoso, afectivo, tolerante y democrático, en donde prime la autoridad y no el
autoritarismo, en donde se conozcan los límites y se permita el diálogo como puerta al
conocimiento del medio que lo rodea. Los padres no pueden olvidar que cuando el niño
inicia la etapa escolar el desarrollo cognitivo no es responsabilidad única y exclusivamente
de los docentes, por el contrario ellos siguen formando parte activa e importante de este
proceso, solo que pasan a tener un apoyo en la formación integral del niño.

Por otra parte, cuando comienza el año escolar los maestros y maestras entran en la tarea de
ayudar y acompañar al grupo de niños que tienen a su cargo en el proceso de maduración,
desarrollo y educación, emprendiendo como primer paso la aventura de conocer a sus
estudiantes desde los numerosos rasgos que lo conforman: emocional, afectivo, intelectual,
social y académico. Partiendo de la base de que la familia es para el niño el entorno
educativo por excelencia, Por ese motivo las vías de colaboración entre estas dos entidades
comienzan por el conocimiento mutuo ya que ambos son contextos sociales dinámicos, en
continua transformación de sus características y necesidades.

Estudios por la UNICEF han destacado que la participación activa de los padres en el
desarrollo cognitivo escolar, se logra a través de la información continua que se maneja en
el ámbito escolar, y que este contexto genera que los niños puedan expresar y experimentar
sus sentimientos y conocimientos en forma completa y consciente.

Por tal motivo, los padres, en primer lugar; la escuela y los profesores, en segundo lugar,
son entes importantes para ayudar en las necesidades emocionales de los niños:
conocimiento de uno mismo, control del comportamiento impulsivo, motivación, empatía,
y habilidades sociales de respeto y cooperación, ya que estas necesidades aparecen en el
desarrollo humano y forman parte del desarrollo cognitivo.

En el ámbito escolar es necesario puntualizar que los niños aprenden a expresar sus
emociones observando cómo lo hacen los adultos más cercanos, tanto los padres como los
profesores. Entonces, la competencia cognitivo – afectiva del profesor modela e influye en
el crecimiento intelectual de sus alumnos. Aquí surge el tema del clima escolar y del clima
del aula, que debe ser un espacio acogedor, de mutua aceptación; un medio apropiado para
el desarrollo y expresión de las emociones. Se trata, según el biólogo y epistemólogo
chileno Humberto Maturana, del espacio relacional propio de la especie humana: el
fenómeno humano se da en el amor, que surge de los entrelazamientos entre el conversar y
el emocionar: sólo en ese ámbito relacional se puede generar un auténtico aprendizaje en
todas las áreas del desarrollo humano.

Podemos concluir que el principal objetivo del buen desarrollo cognitivo del ser humano
nos lleva a la Formación Integral definida, como el proceso continuo, permanente y
participativo que busca desarrollar armónica y coherentemente todas y cada una de las
dimensiones del ser humano (ética, espiritual, cognitiva, afectiva, comunicativa, estética,
corporal, y socio-política), a fin de lograr su realización plena en la sociedad. Es decir,
vemos el ser humano como uno y a la vez pluridimensional, bien diverso como el cuerpo
humano y a la vez plenamente integrado y articulado en una unidad.
WEBGRAFIA

http://www.rieoei.org/deloslectores/3377Aguado.pdf

http://www.campus-oei.org/celep/celep6.htm

http://www.educativo.utalca.cl/medios/educativo/articulosydoc/familia_escuela_ambiente_
emocionalidad.pdf

http://es.wikipedia.org/wiki/Desarrollo_cognitivo

http://www.ucc.edu.ar/portalucc/archivos/File/VRMU/Mision_VRMU/formacionintegral.pdf

http://www.unicef.cl/archivos_documento/199/Manual%20profesores%20jefe%20conchali
%20.pdf

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