La contaminación, un problema urgente para el planeta

La contaminación de nuestro medio ambiente es uno de los hechos más preocupantes y la vez polémicos.

La Tierra es un planeta único en el sistema solar. Con una diversidad de vida increíble, el hombre no se da
cuenta que posee un regalo irrepetible en donde desarrollar su existencia.

El tema de la contaminación de nuestro planeta no es algo nuevo, pero se podría afirmar que hoy día su
estudio requiere una especial importancia. ¿Porque? Simplemente porque ahora más que nunca el hombre
está contaminando.

Varios estudios realizados por expertos han demostrado que la contaminación del aire, del suelo y del mar
en los últimos cien años ha sido mayor que lo producido en varios siglos de la historia.

Otra de las conocidas consecuencias, es el fenómeno conocido como cambio climático. Al respecto, señala
la Unión Europea, "El cambio climático es uno de los mayores desafíos a que deberá responder la
humanidad en los próximos años. Incremento de las temperaturas, deshielo de los glaciares, multiplicación
de las sequías y de las inundaciones: todo apunta a que el cambio climático ha comenzado. Los riesgos
son inmensos para el planeta y las generaciones futuras, lo que nos obliga a actuar de forma urgente"

La falta de conciencia y responsabilidad

El planeta tierra es el hogar de la humanidad. Lo lógico será que se procure cuidar, como toda persona lo
hace, de su propia casa. Sin embargo, está claro que no es esto lo que está ocurriendo actualmente.

Cada día, vemos a personas de todas las edades tirar a la calle sus desperdicios.

¿Qué evidencia eso? Evidencia una falta de educación.

El mundo está cambiando. La crisis económica, ambiental y social son diferentes manifestaciones de un
modelo de desarrollo insostenible basado en los principios de explotación de los recursos para extraer el
máximo beneficio en el menor tiempo posible, sin considerar el impacto que esto genera en los ecosistemas
y las poblaciones.

La responsabilidad es un sentido de conciencia. En otras palabras “es darse cuenta”. Comprender que
debemos ciertas actitudes, ciertas opciones.

Al ser responsable, comprendemos que una situación determinada, requiere a su vez de una acción
concreta que vaya acorde a las características de esa situación.

Esta capacidad de poder ver y comprender, debe ser estimulada desde temprana edad. Si a un niño no se
le enseña determinados valores a la edad adecuada, es muy probable que ya no los aprende en el futuro,
o que sea mucho más difícil que los asimile.

Un grano de arena para un cambio radical

Una creencia común es que, lo que hace una sola persona, no tiene peso o influencia alguna. Tal
razonamiento carece de fuerza. Es esta forma de pensar lo que realmente frena la expansión de una mayor
conciencia ciudadana en lo que respecta al cuidado del medio ambiente.

La organización, Greenpeace, por ejemplo, realiza varias actividades invitando siempre a las personas a
ser partícipes de campañas que buscan crear ese sentido de responsabilidad hacia el planeta. Una manera
de aportar seria participando en ellas.
Hay cosas que la gente acostumbra a tomarse a la ligera. Cosas que aún ser de vital importancia, pasan
desapercibidas para la mayoría de la gente. O quizás es simplemente que no quieren verlas por miedo a
que les estorben. En mi opinión, este es el caso del medio ambiente.

Durante generaciones enteras, la mayoría de las personas no ha tenido en cuenta la salud de nuestro
planeta, y sin ninguna especie de escrúpulo, han contaminado todo a su paso, destrozando los hábitats
de las demás especies; agotando los recursos naturales sin sostenibilidad alguna, y echando residuos a
la atmósfera sin tener en cuenta el futuro que estaban creando.

Hoy en día, empezamos a notar las consecuencias de esas acciones, pero sin embargo, parece que aún
son pocos los que se preocupan por el bienestar del planeta.

Hay muchas personas que no se dan cuenta de la importancia que tiene cuidar del medio ambiente.
Muchas personas que piensan que quizás no es su problema. Y muchas otras que ni siquiera se han dado
cuenta de los efectos que ya empiezan a acecharnos.

La situación medioambiental es más grave que nunca, y lo único que sabemos hacer es quedarnos de
brazos cruzados., mientras los gobiernos y las empresas solo piensan en ganar más y más dinero, sin
respetar las normas de contaminación. Nos limitamos a observar, quizás pensando que es inútil luchar
contra ellos, que no conseguiremos nada. O quizás pensando que tampoco es para tanto. Pero la cuestión
es que, en comparación con toda la población mundial, son muy pocos los que defienden el medio
ambiente. Un interés que en realidad es común para todos, pero apreciado por escasos.

Y eso tiene que cambiar.

Es por eso que tenemos que concienciarnos. Aprender a respetar el planeta, a quererlo, y a cuidarlo.
Reciclando, reutilizando y ahorrando, podemos ayudar a no empeorar situaciones como el cambio
climático o acabar con la lluvia ácida. ¿ Y por qué debemos hacerlo?

La respuesta a esa pregunta es sencilla: Para proteger nuestro futuro y el de las demás especies que
conviven con nosotros. Así como nuestro planeta y el medio ambiente en general.

Porque ahora mismo, el cambio climático es la causa principal de las sequías que arrasan con media
África; los incendios que devastan las selvas y los bosques, y el deshielo progresivo de los polos. Y si
seguimos así cada año será peor. Poco a poco irá aumentado la temperatura y se desvanecerán muchas
cosas que ahora calificamos de imprescindibles: como el agua. Los polos seguirán deshaciéndose y
empezará a subir el nivel del mar… Sí, ¿supongo que muchos de ustedes ya habrán oído esas teorías
no? Pues seguir así implica la posibilidad de que algunas de ellas se cumplan.

La sobreproducción de bienes insostenible es la principal causante del agotamiento de recursos naturales

como la madera, y el consecuente empobrecimiento de las zonas afectadas. Y si seguimos produciendo
tanto, pronto nos quedaremos sin nada. Solo ahorrando y reutilizando algunas cosas podemos parar un
poco esa producción, y ayudar así a reducir el impacto que esta provoca.

La contaminación de los mares y las aguas está propiciando la extinción de muchísimas especies que
nosotros, los humanos, ni siquiera sabíamos que existían. Y seguirán desapareciendo cada vez más
especies si no se establecen unos límites de contaminación y unas leyes fuertes que los regulen para
cumplirlos. Así se podrá parar la destrucción de los hábitats marinos y acuáticos en general.

El derroche de agua es la causa principal de las sequías extremas en las que viven muchos países. Y
seguirá causando estragos en la vida de mucha gente si no tomamos conciencia de ello y empezamos a
regularla y ahorrarla.

La mentalidad consumista y materialista, es la que está aumentado las desigualdades sociales y la

explotación de los trabajadores en países del tercer mundo, así como también la exagerada contaminación
por gases, mil veces superior a la que se causaría produciendo únicamente lo imprescindible. Y eso
continuará aumentando la capa de gases invernaderos y empeorando los efectos del cambio climático, en
caso de que no hagamos nada. Tan solo comprando las cosas que vayamos a usar de verdad y
aprovechándolas al máximo ya conseguiremos reducir notablemente esa contaminación.

El abandono de residuos peligrosos y radioactivos en lugares no adaptados esta provocando la

contaminación de las aguas y los suelos que ayer eran fértiles, sembrando el hambre y la sed por lugares
antaño hermosos; y seguirá destruyendo otras zonas si no lo paramos. Apoyando y investigando las
energías renovables por ejemplo, podemos ayudar a reducir en un futuro los residuos radioactivos de las
centrales nucleares.

Podría escribir cien hojas como esta enumerando una a una las razones por las que deberíamos aprender
a velar por el bienestar medioambiental, haciendo simples acciones como reciclar o reutilizar. Pero espero
que de momento esas sean suficientes para mostrar la verdadera situación del planeta, y los efectos que
conlleva una mentalidad consumista e irrespetuosa con la naturaleza.

Porque el planeta es de todos, y todos tenemos derecho a disfrutarlo en su total plenitud, y por eso
debemos cuidarlo.

Y porque hay muchas cosas que la gente acostumbra a tomarse a la ligera. Y el medio ambiente no
debería ser una de ellas.