Está en la página 1de 16

Minería Responsable

La industria minera desde sus albores, hace aproximadamente 3000 años, ha


legado problemas socio ambientales que en muchos casos son difíciles de
solucionar. Se ha comprobado que el desarrollo de actividades ligadas a la
exploración y explotación minera y de hidrocarburos genera una liberación,
dispersión y deposición de productos químicos y residuos de diversa naturaleza,
tales como cianuro de sodio, plomo, arsénico, uranio, mercurio y otros metales
pesados. La minería, además de creciente productora de desechos contaminantes
de gran toxicidad, es gran consumidora de agua y energía, factores estos últimos
que se suman a los otros impactos ambientales propios de esta actividad. La
minería responsable, en términos generales, aborda los temas ambientales, de
desarrollo humano, y sociales asociados y los productos provenientes de ella, y
busca promover buenas prácticas en el sector.

Biblioteca del Congreso Nacional. Contacto: Julio Vega Pais


Departamento de Estudios, Extensión y Publicaciones
Email: jvega@bcn.cl, Anexo: 1779, 21-09-2012
Serie Informes Nº 57-12
i

Tabla de Contenido

I. Antecedentes generales............................................................................1
II. Los Impactos Ambientales de la Minería......................................................2
2.1 Minería, Impactos en el agua..............................................................2
2.2 Pasivos Ambientales...........................................................................6
2.3 La política ambiental y el tema de los Pasivos Ambientales en Chile.......10
III. Eficiencia Energética en la Minería............................................................11
3.1 La Mesa Minera de Eficiencia Energética (MMEE)..................................11
3.2 Horno Convertidor El Teniente...........................................................14

Índice de Cuadros y Figura

Cuadro 1. Disponibilidad de Agua Dulce en el Mundo...........................................3


Cuadro 2. Balance de los recursos hídricos en Chile por regiones..........................3
Cuadro 3. Cuencas Críticas y Operaciones Mineras..............................................6

Figura 1. Distribución regional de las Faenas Mineras Abandonadas / Paralizadas. .10


1

I. Antecedentes generales

La industria minera desde sus albores, hace aproximadamente 3.000 años, ha


legado problemas socio ambientales que en muchos casos son difíciles de
solucionar. Clark y Cook Clark1 (2005) indican que en contraste a los procesos
industriales de la minería actual, la actividad minera en tiempos previos a la
revolución industrial solo buscaba recuperar minerales de altas leyes y para ello
normalmente necesitaron reducidos procesos de excavación y procesamiento. Como
tal, debido al exiguo nivel de perturbación y potencialmente la cantidad reducida de
desechos mineros, los efectos ambientales y sociales fueron localizados, con menor
significado y cuantía.2

La minería consiste en la extracción y procesamiento de recursos no renovables, y,


por este solo hecho, no puede dejar de generar impactos ambientales irreversibles y
duraderos. Es decir, el desarrollo de cualquier proyecto minero sostenible, más que
otros proyectos industriales, tiene un hándicap en su punto de partida. Con esta
carga negativa inicial, la minería responsable debe procurar generar los menores
impactos negativos sobre el medio ambiente y sobre los sectores sociales ligados a
su desarrollo. Por lo tanto, el uso de la mejor, y menos contaminante, tecnología
disponible debiera ser una regla, no solo por razones de productividad y rentabilidad
de la inversión.

Se ha comprobado que el desarrollo de actividades industriales para la exploración y


explotación minera y de hidrocarburos genera una liberación, dispersión y
deposición de productos químicos y residuos de diversa naturaleza, tales como
cianuro de sodio, plomo, arsénico, uranio, mercurio y otros metales pesados. Ellos
contaminan directamente, o por infiltración, los recursos hídricos (glaciares, lagos,
ríos y el agua en el subsuelo), el aire y el suelo. En muchos casos las descargas
contaminantes generan pasivos ambientales que perduran por miles de años,
provocando graves enfermedades, e incluso mutaciones genéticas. Este hecho,
sumado a la destrucción de suelos (lixiviación) y de paisajes –que para algunas
comunidades indígenas son considerados sagrados-, perjudica sensiblemente la
calidad de vida tanto de las personas como de animales y plantas.3

Como resultado de un llamado de las ONGs, comercializadores, inversionistas,


aseguradores, y expertos técnicos que trabajan en el sector minero-metalúrgico
para crear las bases para el desarrollo de políticas responsables en la compra e
inversiones en el sector se ha elaborado una propuesta de marco básico para una
minería responsable. El marco básico describe en términos generales los temas
1
Clark, A.L., Cook Clark, J. (2005) An international overview of legal frameworks for mine closure.
Chapter IV. 11 pp.
2
“La Minería Responsable: ¿Realidad o Mito?”, Dr. Edgardo, Alarcón León, 28/08/09,
http://www.ecoportal.net/Temas_Especiales/Mineria/la_mineria_responsable_realidad_o_mito
3
Industrias extractivas (minería e hidrocarburos), problemática de los recursos naturales no renovables
en América Latina y la Misión de la Iglesia, 06/07/11 Por Departamento de Justicia y Solidaridad del
Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM),
http://www.ecoportal.net/Temas_Especiales/Mineria/Industrias_extractivas_mineria_e_hidrocarburos_pr
oblematica_de_los_recursos_naturales_no_renovables_en_America_Latina_y_la_Mision_de_la_Iglesia
2

ambientales, de derechos humanos, y sociales asociados con la minería y los


productos provenientes de ella, y explora la situación actual de las mejoras sociales
y ambientales, brindando recomendaciones para comercializadores y otros que
buscan una responsabilidad en sus inversiones y en la compra de productos
mineros, así como la regulación y la promoción de prácticas mineras responsables. 4

El documento citado: Marco Básico para una Minería Responsable, es un primer


borrador propuesto por los autores, abierto al debate y discusión. Los autores
animan a una retroalimentación y esperan que este documento pueda ser mejorado
con los aportes de nuevos actores.

II. Los Impactos Ambientales de la Minería

Desde el año 1985, en que el sector minero contribuía con un 10,5% al Producto
Interno Bruto (PIB) chileno, el PIB minero fue reduciéndose hasta llegar a 7,9% en
1993, tras lo cual comenzó a materializarse el boom minero de fines de la década
de los ‘90. Con ello, el PIB minero remontó desde dicha cifra hasta 10,25% en el
año 1999.5

En Chile la actividad minera se encuentra concentrada en las regiones de Arica-


Parinacota, Tarapacá, Antofagasta, Atacama y Coquimbo. En las regiones más
nortinas, caracterizadas por la gran escasez de agua dulce, los impactos
ambientales son considerables y el uso y contaminación de este elemento es fuente
de conflictos no sólo con los pueblos originarios de la zona sino con todas las otras
actividades humanas.

Por otra parte, la minería chilena tiene una larga historia de generación de residuos
tóxicos, y solo en las últimas décadas aparece la preocupación por minimizar los
impactos ambientales que la actividad genera y por inventariar los pasivos
ambientales históricos y por la búsqueda de una solución a este problema.

2.1 Minería, Impactos en el agua

América Latina y el Caribe son regiones que tienen abundancia de recursos hídricos.
Si se comparan los datos de los recursos y de población para las diferentes regiones
del mundo, se encuentra que nuestra región tiene dotaciones de agua dulce per
cápita superiores a otras regiones.

4
“Marco Básico para una Minería Responsable: Una Guía para la
Mejora de Estándares “, Marta Miranda, David Chambers, y Catherine Coumans, 19 de Octubre de 2005,
www.frameworkforresponsiblemining.org/
5
“Minería y desarrollo económico en Chile, avances hacia el desarrollo sustentable”, Gustavo Lagos,
Revista Ambiente y Desarrollo / VOL XVIII / Nº 2-3-4 / 2002
3

Cuadro 1. Disponibilidad de Agua Dulce en el Mundo

En particular Chile es un país con abundantes recursos de agua dulce, aún cuando
cabe destacar que estos recursos se encuentran muy mal repartidos entre un Norte
desértico y un Sur con enormes reservas de agua.

Cuadro 2. Balance de los recursos hídricos en Chile por regiones

Se puede apreciar la enorme diferencia de dotación per capita de agua dulce entre
las regiones de Antofagasta y de Aysén, con 71 M 3/habitante/año y 3.816.502
4

M3/habitante/año respectivamente, así como la gran diferencia en la pluviometría


entre las regiones desérticas o semidesérticas del norte y las regiones lluviosas del
sur.

Según datos de Aquasat6, la disponibilidad de agua dulce a nivel mundial es de


7.000 m3/hab/año. En América Latina y en Chile estos valores son 28.000
m3/hab/año y 63.000 m3/hab/año respectivamente.

El agua es especialmente gravitante en los proyectos mineros. La contaminación


química y térmica del agua en algunos de estos procesos atentan contra la
conservación de la calidad de la misma y del medioambiente donde finalmente es
vertida el agua contaminada.

Al evaluar ambientalmente los proyectos mineros (u otros) es necesario tener muy


presente que una suma de proyectos pueden tener sinergias tanto positivas como
negativas, y que no pueden calificarse adecuadamente los impactos ambientales
(negativos o positivos) de un proyecto limitándose al análisis aislado del mismo.
Desde esta óptica, el perfil, o “vocación”, definido consensualmente para un
territorio entre sus autoridades y sus habitantes, debiera ser el marco adecuado
para el estudio de un proyecto y de sus impactos económicos, sociales y
medioambientales. El espacio territorial definido por una cuenca hidrográfica es
considerado, hoy día, la unidad que mejor se adapta a la gestión del territorio.

Otro aspecto que tiene relación directa con el desarrollo de proyectos mineros, tiene
relación con los derechos de agua.

La escasez de agua en la zona norte del país, y las inapropiadas regulaciones sobre
el acceso y propiedad de las aguas, han confrontado en las últimas décadas, a las
comunidades locales indígenas y campesinas y las zonas urbanas con las empresas
mineras. De no solucionarse estos conflictos en los próximos años, cuando se prevé
mayor precio del cobre y por tanto mayor expansión minera, ciertamente se
agravarán los impactos que hoy afectan a Arica, Tarapacá, Antofagasta, Atacama y
Coquimbo, impactando también a las comunidades indígenas que habitan por
milenios en esas frágiles regiones7.

Un reciente estudio de la Dirección General de Aguas (DGA) 8 sobre la situación del


agua entre las regiones de Tarapacá en el norte, y del Maule en el centro-sur del
país, muestra una situación deficitaria extrema en la región de Antofagasta y un
déficit decreciente desde Atacama hacia el sur; un conflicto frontal entre la
agricultura y la minería y fuerte competencia entre la minería y las demás
actividades productivas.

6
AQUASAT es un sistema de información global sobre el uso del agua en la agricultura y el medio rural,
desarrollado por la División de Fomento de Tierras y Aguas de la FAO.
7
Gran parte de los datos y textos de este capítulo ha sido sacado del libro: “Conflictos por el Agua en
Chile: Entre los derechos humanos y las reglas del mercado” de Sara Larraín y Pamela Poo del Programa
Chile Sustentable.
8
Dirección General de Aguas, 2008.
5

Según la DGA, se requerirá una optimización de consumos e importación de


recursos hídricos. La situación de escasez, que afecta a las cuencas de los ríos Loa y
Copiapó es terminal; y se extenderá a otras cuencas del norte y centro del país
debido a la expansión de la minería y los impactos previstos para la zona debido al
Cambio Climático 9.

En los próximos años, se proyecta un importante incremento en la industria minera


en la II Región de Antofagasta, y por tanto un aumento en el consumo de agua
entre un 66% y un 72% en los próximos 25 años. En tanto se prevé una
disminución en el consumo de agua potable desde un 4% a un 3% en el mismo
periodo. En la III Región de Atacama también se constata un aumento en el
consumo de agua por parte de la industria minera entre 9,8% de consumo actual, a
un 25,4% en 25 años. En cambio, en el sector agropecuario se produce una
disminución, desde el consumo actual de 74%, a un 53% en el mismo periodo10.

Este fuerte aumento en la demanda de agua por la industria minera en los próximos
años, generará situaciones críticas para algunas regiones del país, según un
reciente estudio realizado por la Corporación Chilena del Cobre (COCHILCO) el año
2009, donde se destaca que en la II Región de Antofagasta se espera una situación
deficitaria extrema en términos de consumo de agua al año 2025.

En el caso de la III Región de Atacama, se espera un déficit creciente de agua para


el año 2025, con una fuerte competencia entre la minería y la agricultura. Ello
obligará a la industria minera a optimizar sus procesos productivos, usar agua de
mar, o importar agua desde otras regiones para prevenir mayores problemas
ambientales y resolver sus conflictos con el resto de los usuarios del agua,
especialmente con el sector agrícola.

En las 4 regiones del norte de Chile, Cochilco identifica ocho cuencas críticas,
respecto a la situación del recurso hídrico: el Salar del Huasco, y los sistemas
hídricos Michincha y Coposa en la I Región; el río Loa y el Salar de Atacama en la II
Región; los ríos Copiapó y Huasco en la III Región; y los ríos Choapa y Limarí en la
IV Región de Coquimbo como las cuencas más críticas y donde además operan las
principales faenas mineras de esas regiones.

Cuadro 3. Cuencas Críticas y Operaciones Mineras

9
IPCC-Grupo Trabajo III, V/A -(2007) y Departamento de Geología y Geofísica, Universidad de Chile,
2007.
10
Sara Larraín y Pamela Poo, Programa Chile Sustentable, “Conflictos por el Agua en Chile: Entre los
derechos humanos y las reglas del mercado”, marzo 2010.
6

Sin embargo, ni desde la política pública, ni desde la gestión empresarial se


vislumbran soluciones a esta situación en los próximos años. Por el contrario, dada
la expansión proyectada de la inversión minera, especialmente en los sectores oro y
cobre, en los próximos años se prevé un agravamiento de los conflictos por el agua
en dichas regiones.

2.2 Pasivos Ambientales11

La noción de Pasivo Ambiental es relativamente reciente en la legislación y las


políticas públicas de medio ambiente a nivel mundial. Se la define como una
situación ambiental generada por la actividad humana, y de manera progresiva a lo
largo del tiempo, que tiene un impacto negativo sobre el ambiente, la salud y la
calidad de vida de las personas12. Dada la lentitud con que se regeneran los suelos
y, en general, los ecosistemas, estos conservan las huellas que van dejando ciertas
malas prácticas de explotación humana en su entorno natural. Existe un gran
número de actividades que han originado pasivos ambientales, entre ellas, la
minería, la extracción de hidrocarburos y la producción de energía, la industria
manufacturera, la pesca, la agricultura, y la disposición de residuos domiciliarios
urbanos.

Esos pasivos ambientales han sido producidos, en términos generales, por una
amplia gama de actividades humanas13 que se realizaban, y se siguen realizando, en
el contexto de uso de tecnologías que hoy se consideran inadecuadas, de un
conocimiento científico menos desarrollado, y de marcos normativos permisivos.
Además, en ocasiones se han debido a la sobreexplotación, a prácticas negligentes,

11
Gustavo Lagos, “Minería y Valor Agregado”, Boletín N° 1233, SONAMI.
12
SNMPE, Pasivos Ambientales, Informe Quincenal de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y
Energía (SNMPE), Lima, Noviembre II-2004, http://www.snmpe.org.pe/pdfs/Informe_Quincenal/EEES-
IQ-07-2004-IA.pdf [acc. 10/11/08].
13
Por ello, se dice que tienen un origen antrópico.
7

o la ocurrencia de accidentes en el manejo de ciertos materiales peligrosos o


contaminantes. Por último, esos pasivos se acentúan por la presencia de
instalaciones abandonadas o zonas ambientales degradadas que quedan sin una
gestión adecuada para evitar su impacto negativo para el ambiente y las personas.

Por lo tanto, cuando se habla de pasivos ambientales se hace referencia a procesos


acumulativos, de largo recorrido histórico, que implican daños para el medio
ambiente que tienden a persistir y agravarse, convirtiéndose en crónicos. De ese
modo, se pueden diferenciar de los posibles riesgos y daños ambientales que se dan
en el presente (o que pudieran producirse a futuro), y que hoy día pueden
enfrentarse a través de medidas de prevención y control del impacto de las nuevas
actividades y proyectos. En consecuencia, como resultante de las situaciones de
“pasivo ambiental”, se pueden ver afectados los cursos de agua, superficiales y
subterráneos, como también los suelos, el aire, la cubierta vegetal y la fauna, la
salud humana, las infraestructuras y el ambiente en general.

Finalmente, en relación a los pasivos ambientales es importante reflexionar sobre


qué actores tienen la responsabilidad por los mismos. Ello es significativo, en primer
lugar, para incrementar la conciencia ambiental de los diversos agentes de forma
que tomen en cuenta que su comportamiento puede tener impactos negativos, que
pueden perpetuarse en el tiempo. Pero, fundamentalmente, es relevante determinar
las responsabilidades de aquellas empresas o personas que originaron el pasivo y
que, por ende, deben reparar esos daños y contribuir decisivamente a la
rehabilitación de ese entorno natural. Como se reconoce en distintos estudios, la
identificación de los responsables de hacerse cargo de un pasivo ambiental resulta
controversial, y tiene diferentes soluciones legales, en los diferentes países14.

En todo caso, tanto a nivel internacional, como en el derecho comparado, está cada
vez más ampliamente reconocido en ese sentido el principio “quien contamina,
paga”, de tal forma que, siempre que sea posible, el titular u operador que ha
producido un daño ambiental debe correr con los costos del saneamiento de forma
justa y equitativa. Sin embargo, en aquellos casos en que no es posible
individualizar al o los responsables, se torna más problemática la cuestión, y
corresponde al Estado asumir la responsabilidad de rehabilitar ambientalmente ese
entorno. En el caso de Chile, por lo demás, el Estado estaría respondiendo al
imperativo constitucional de garantizar el derecho de todas las personas a vivir en
un medio ambiente libre de contaminación (art. 19, nº 8, de la Constitución
Política).

Según información de 2008, la Comisión Nacional del Medio Ambiente (CONAMA),


percibe la existencia de pasivos ambientales en todas las regiones del país, los que
abarcan un amplio espectro de problemas ambientales. Más aún, destaca que se
constata una correlación entre los impactos ambientales negativos de larga data y

14
Yupari, Anida, Pasivos Ambientales Mineros en Sudamérica, Informe elaborado para la CEPAL, el
Instituto Federal de Geociencias y Recursos Mineros, BGR, y el SERNAGEOMIN, s.d., pp. 19-22,
disponible en línea:
http://www.eclac.org/drni/noticias/seminarios/4/13604/Informe%20Pasivos%20Ambientales%20Mineros
%20en%20Sudam%C3%A9rica.pdf [acc. 10/11/08].
8

las actividades económicas más características de cada región 15. Ahora bien, dado
que la minería ha marcado la historia del país y la economía chilena, no es de
extrañar la incidencia decisiva de los pasivos ligados a la actividad minera en el
fenómeno de la degradación medioambiental en Chile.

Dentro de la actividad económica nacional, la explotación minera industrializada ha


jugado un papel de primer orden durante más de un siglo y medio, con la
explotación de la plata, el salitre y, sobre todo, el cobre. De hecho, la industria
cuprífera ocupa un lugar de privilegio no sólo dentro de la actividad minera chilena,
sino en el conjunto de su actividad económica y de sus exportaciones 16. En las dos
últimas décadas, la producción minera ha experimentado un acelerado crecimiento
que es atribuible, principalmente, a una legislación favorable que resulta altamente
atractiva para los inversionistas, como también a las ventajas naturales de poseer
una proporción significativa de las reservas mundiales de minerales importantes
como el cobre (31%), molibdeno (12,8%), oro (1%) y plata (0,5%)17.

En el transcurso de todo este tiempo, se ha ido acumulando un considerable


volumen de pasivos ambientales asociados a la minería, con especial énfasis en las
regiones del norte del país. En efecto, se trata de una de las actividades que genera
mayor cantidad de desechos, sobre todo si se tiene en cuenta que del total del
mineral que se extrae de una mina, sólo un 2%, o menos, responde al mineral
deseado18. El resto es descartado en forma de diferentes tipos de desechos; en la
medida en que los nuevos yacimientos que se explotan están a mayor profundidad,
y que son de más baja ley (menor calidad del mineral), se incrementa la cantidad
de desechos que se genera. Los riesgos de los pasivos mineros para la población y
el medio ambiente radican en la toxicidad de las sustancias contenidas en éstos
(arsénico, azufre, mercurio, etc.), el arrastre de polvo, el peligro de derrumbe de
grandes tranques de relaves19 y el potencial de aguas ácidas. Por último, existen un
potencial peligro en los socavones que han quedado abiertos y desprotegidos, así
como otras instalaciones abandonadas, propias de una faena minera.

Los impactos dejados por la minería obedecen, en gran medida, al uso de


tecnologías obsoletas y tipos de desarrollo ligados a las características propias de la
actividad minera ya señalados, que además implica ciertos problemas futuros que
no están totalmente resueltos, como el de la restauración del terreno tras el
agotamiento de una mina y el procedimiento para el cierre de una faena minera. En

15
CONAMA, Aspectos a considerar en la Gestión de Pasivos Ambientales, Departamento de Control de la
Contaminación – Comisión Nacional del Medio Ambiente (CONAMA), Santiago, mayo de 2005, disponible
en línea: http://www.eclac.org/drni/noticias/seminarios/5/21295/AndreaMu%C3%B1oz.pdf [acc.
10/11/08].
16
Cabrera, Paula; Parra, Tomás; y Villagrán, Cristián, El sector minero en Chile. Antecedentes para su
análisis, Serie Informes Nº 55-08, Departamento de Estudios, Extensión y Publicaciones – BCN,
Santiago, 6 de noviembre de 2008.
17
Compendio de la Minería Chilena 2008. Minería Chilena 25 años. Información Confiable y Oportuna.
18
A este respecto, López, Patricio; Ainzúa, Sebastián; Zolezzi, Cristóbal; y Vasconi, Paola, “La minería y
su pasivo ambiental”, Análisis de Políticas Públicas (Publicaciones Terram), nº 24, diciembre 2003,
disponible en línea: http://www.navarro.cl/defensa/Royalty/APP24%20relaves.pdf [acc. 10/11/08].
19
Desechos o material de descarte que consiste en lodos compuestos por fragmentos de roca
previamente molida, y que contienen sustancias tóxicas.
9

todo caso, el desarrollo reciente de la actividad minera que se ha dado muchas


veces de la mano de inversionistas extranjeros, a veces vino acompañado de ciertos
modelos de trabajo y tecnologías más adaptadas a la protección medioambiental y,
por ende, más afines a ciertas preocupaciones de la nueva normativa nacional.

No obstante, en la evaluación del desempeño ambiental chileno, la Organización


para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) señala que, pese a los
indudables avances, existen carencias en cuanto a un “monitoreo sistemático” de la
calidad de las aguas en relación al “drenaje ácido de las minas” y las emisiones de
azufre de las fundiciones de cobre “siguen siendo muy elevadas en relación con los
estándares de la OCDE”. Además, con respecto a la incidencia de las instalaciones
mineras abandonadas, destaca que “la historia de la minería del país ha dado origen
a un conjunto de sitios abandonados […] Se debería evaluar la contaminación
proveniente de faenas mineras abandonadas, incluidos sus tranques de relave, y
preparar un plan nacional de remediación para los sitios contaminados” 20.

Como forma de comenzar a enfrentar la problemática ligada a los pasivos


ambientales mineros, en particular en lo relativo a faenas abandonadas, el Servicio
Nacional de Geología y Minería (SERNAGEOMIN) ha realizado una identificación
preliminar de las mismas21. Así, a través de proyectos resultante de convenios de
cooperación internacional con Alemania y Japón, ha establecido un catastro de
faenas mineras abandonadas o paralizadas que muestra su distribución regional en
la geografía de Chile. De un total de más de 200 faenas, la mayor parte se
encuentra en las regiones de la zona norte del país, tal como se aprecia en el
gráfico que sigue:

20
OCDE, Evaluaciones del desempeño ambiental: Chile, OCDE / Naciones Unidas-CEPAL, Paris /
Santiago, 2005, pp. 167-170.
21
SERNAGEOMIN, Catastro de Faenas Mineras Abandonadas / Paralizadas (FMA/P), Página Institucional
del Servicio Nacional de Geología y Minería – Gobierno de Chile, http://www.sernageomin.cl/index.php?
plantilla=detalle&option=com_content&task=view&id=123&Itemid=98&sectionid=10&sectionitemid=5&c
ontenidopadre=0 [acc. 10/11/08].
10

Figura 1. Distribución regional de las Faenas Mineras Abandonadas / Paralizadas

Fuente: SERNAGEOMIN

2.3 La política ambiental y el tema de los Pasivos Ambientales en Chile

En Chile, como en la mayoría de los países de América Latina, las dos últimas
décadas han sido testigos del desarrollo de un conjunto de leyes y reglamentos que
constituyen el marco legal ambiental. A su vez, esas normas establecen la
responsabilidad del Estado en la protección y promoción del medio ambiente y los
recursos naturales, creando, a la vez, la estructura institucional encargada de
implementar las políticas ambientales nacionales. La aprobación, en forma unánime,
de la Ley de Bases Generales del Medio Ambiente (Ley nº 19.300), en marzo de
1994, vino a dar una estructura única al sistema normativo ambiental chileno. Por
otra parte, significó la creación de la máxima autoridad pública en materia
ambiental: la Comisión Nacional del Medio Ambiente (CONAMA), que cuenta con
servicios descentralizados en regiones (COREMAS). Actualmente, el diseño
institucional se encuentra en una transición hacia la implementación de un
Ministerio de Medio Ambiente y una institucionalidad más compleja que recoge la
experiencia acumulada en estos años.

En el cumplimiento de su responsabilidad institucional, corresponde a este Ministerio


y a la Comisión Nacional del Medio Ambiente (CONAMA) dependiente de él, la
función de proponer e implementar políticas ambientales, así como coordinar a la
administración pública en lo relativo a la gestión de las políticas ambientales 22.
Asimismo, tiene competencia para administrar uno de los principales instrumentos
para prevenir el deterioro ambiental: el Sistema de Evaluación de Impacto
Ambiental (SEIA). Este procedimiento constituye la herramienta más destacada con
que cuenta CONAMA, y sin duda la más novedosa, en su labor de gestión
22
En relación a las líneas institucionales de acción, ver la información de CONAMA, Sitio Institucional de
la Comisión Nacional de Medio Ambiente, http://www.conama.cl/ [acc. 15/04/08].
11

ambiental, siendo obligatorio este estudio para implementar toda actividad


productiva, de acuerdo con el Decreto nº 30 de 1997 que reglamentó la ley.

III. Eficiencia Energética en la Minería

Los impactos ambientales negativos de la minería se multiplican si se considera los


impactos generados por las plantas de generación eléctrica directamente
desarrollados para sustentar la actividad minera.

De acuerdo con datos presentados el 20 de noviembre de 2010 por el señor


Ferruccio Medici, Presidente de la Mesa Minera de Eficiencia Energética (MMEE), la
minería consume el 13% del total de la energía nacional y el 36% del consumo
eléctrico nacional. Por otra parte, la minería representa el 37% del consumo de
energía del sector industrial y minero y el 55% del consumo eléctrico de este sector.

El Programa País de Eficiencia Energética, actual Agencia de Eficiencia Energética


dependiente del Ministerio de Energía, impulsó desde sus inicios programas
orientados a diferentes sectores de la economía nacional. Entre estos, no podía
faltar el sector minero por su gravitación tanto en el PIB como en el consumo de
energía.

3.1 La Mesa Minera de Eficiencia Energética (MMEE)

Uno de los antecedentes en el tema de la Eficiencia Energética en el sector minero


constituyó un taller organizado sobre este tema en el marco del Foro de
Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), realizado los días 21 y 22 de octubre
de 2004. A este Taller asistieron representantes de gobiernos, industria y sector
académico de las economías de la región.23

Las principales conclusiones y líneas de acción acordadas se resumen en los


siguientes puntos relativos a eficiencia energética en la minería.

1.- Dar continuidad al trabajo al interior de APEC relacionado con el mejoramiento


de la eficiencia energética en la industria minera.

2.- Se considera que mejorar la eficiencia energética en minería es una tarea que
requiere una continuidad en su desarrollo, congruencia de objetivos y actividades, y
acciones en las cuales se requiere la participación conjunta de los actores de la
industria: gobiernos, industria y sector académico.

3.- En lo inmediato, se identificaron dos áreas de trabajo:

 Armonización de los indicadores de eficiencia energética que son utilizados


en los diferentes países de APEC.
 Identificar proyectos relacionados con el uso de “mejores prácticas en
eficiencia energética en la industria minera de APEC”.

23
www.prien.cl/seminarios/taller_apec/index.htm
12

4.- Seguridad energética y derecho al uso eficiente de la energía.

 Del Taller se concluye que la eficiencia energética es un bien público de


carácter global, por ser esencialmente contributiva al medioambiente. Se
trata de examinar y resolver la ecuación entre intensidad energética y
desarrollo, relacionando el mejoramiento de la eficiencia energética con el
concepto de seguridad energética y desarrollo en términos integrales

5.- Generación de políticas relacionadas con la eficiencia energética en la minería


como parte de la contribución de la minería al crecimiento y desarrollo sustentable.
El Taller considera relevante que el concepto de mayor eficiencia energética sea
incorporado en la política pública, tanto en el sector minero, como en el energético,
y en el de la sustentabilidad ambiental.

6.- Investigación y desarrollo en materia de eficiencia energética. El Taller considera


que la Investigación y desarrollo energético es una llave para dar mayor
sustentabilidad a la industria minera.

7.- Tomando en cuenta los buenos resultados obtenidos en el Taller, se considera


indispensable que el Grupo Experto en Minería, Exploración y Desarrollo Energético
del Foro Económico del Asia-Pacífico, APEC (GEMEED-APEC) dé continuidad a este
trabajo. Para ello, se recomienda:

 Continuar el desarrollo de proyectos y programas de trabajo relacionados


con la minería y la eficiencia energética, cumpliendo con su mandato de los
términos de referencia.
 Potenciar del mejor modo posible la participación de los tres estamentos
involucrados en el presente Taller: industria, sector académico y gobierno.

Con posterioridad, el año 2006 se constituyó en Chile la Mesa Minera de Eficiencia


Energética24 como una agrupación técnica voluntaria, integrada por los líderes de las
áreas energéticas nacionales incluyendo:

 Empresas de la Gran Minería (públicas y privadas)

 Minería no metálica de Chile

 ENAMI

 Programa País de Eficiencia Energética

 Subsecretaría de Minería

Su primera reunión se realizó el viernes 28 de julio del año 2006, con el apoyo del
Programa País de Eficiencia Energética (PPEE), la Subsecretaría de Minería, la
International Copper Association (ICA/ProCobre) y el Programa de Estudios e
24
www.mesaminera.cl/
13

Investigaciones en Energía de la Universidad de Chile (PRIEN). Participan varias


empresas de la gran minería chilena, incluyendo a CODELCO.

En ese entonces, se acordó que el objetivo principal de la MMEE sería que las
empresas mineras gestionaran el uso de la energía; intercambiaran experiencias;
estudiaran la aplicación de indicadores de eficiencia energética que pudieran ser
apropiados para las empresas y generaran proyectos asociativos de innovación.

Se busca que la MMEE sea el punto de referencia de proyectos y programa de


Eficiencia Energética en el sector minero, y un ente proactivo que impulse dichas
iniciativas a través de líneas de trabajo estratégicas y coyunturales.

La Mesa Minera de Eficiencia Energética funciona como una organización horizontal


no jerárquica, donde las empresas asumen tareas en forma voluntaria. No dispone
de recursos financieros centralizados, y su trabajo es financiado por las empresas e
instituciones integrantes, que cubren los gastos de sus participantes y financian
consecutivamente de anfitriones.

En el período transcurrido desde su creación, la MMEE ha obtenido resultados


concretos, producto de la interacción de los diferentes participantes.

Algunos de éstos son:

 Intercambio de experiencias entre las empresas del sector, lo que ha


permitido avanzar en la aplicación de prácticas y medidas orientadas a la
reducción del consumo energético.

 Contacto entre compañías mineras y proveedores de clase mundial, en el


ámbito de equipamiento y maquinarias.

 Elaboración de un plan de trabajo de la MMEE, a partir del año 2008

 Proyecto sectorial para el reemplazo de motores eléctricos por motores


eficientes, en el que participan directamente ICA/ProCobre, Anglo American,
CODELCO, ENAMI y Minera Escondida, proveedores de motores eficientes, el
PPEE y la Subsecretaría de Minería.

El documento más reciente publicado en la página web de la MMEE se hace una


proyección de la demanda de energía de la minería de cobre y solo se hace
referencia a la eficiencia energética al estimar la tasa de incremento de la demanda
de 2009 en adelante (hasta el 2020) igual a la mitad de este coeficiente para el
período 2001-2008. Esta disminución en la tasa de crecimiento de la demanda se
justifica al considerar el efecto combinado, tanto el deterioro esperado en las
condiciones minero-metalúrgicas en las operaciones vigentes, como a las mejoras
esperadas en las tecnologías de los nuevos proyectos y de los programas de ahorro
14

energético que las compañías mineras supuestamente debieran ir incorporando. 25 Es


decir, no se explicitan políticas activas respecto del tema.

3.2 Horno Convertidor El Teniente

Un aporte precursor al consumo eficiente de la energía en la minería en Chile ha


sido la incorporación de la tecnología desarrollada por CODELCO conocida como
Horno Convertidor El Teniente.

El Convertidor Teniente es un horno basculante de fusión en baño de concentrado


desarrollado y patentado por la División El Teniente de CODELCO. La idea principal
del desarrollo del Convertidor Teniente fue emplear el calor generado por oxidación
de la carga para fundir concentrado en un convertidor convencional modificado. 26 En
palabras más simples, aprovechar el poder de combustión del azufre de los
minerales sulfurados que representan la parte más abundante de los minerales de
Cu.

Se originó en la década de 1970 en la fundición Caletones producto de la


investigación de Hermann Schwarze.

En el último tiempo, y por razones ambientales, las fundiciones de cobre incorporan


plantas de ácido sulfúrico. El consumo unitario de combustible es bastante alto:
entre 2.200 MJ/ton de concentrado fundido (7.100 MJ/ton de Blister). La
incorporación de tecnologías más eficientes ha permitido reducir el consumo unitario
en Chile en un 14% en el quinquenio 1995-2000.

Desde el punto de vista de la energía eléctrica, su uso ha sido creciente debido a la


incorporación del uso de oxígeno en el Horno Flash y en el Convertidor Teniente. Los
hornos flash son los más eficientes en el uso de la energía térmica liberada durante
la oxidación de los sulfuros, este último proceso genera la mayor parte del calor
requerido para calentar y fundir la carga.27

En los últimos 5 años, al menos en Chile, se ha medido una disminución tanto del
consumo unitario de combustibles (alrededor de un 16%) como de electricidad
(alrededor de un 40%).

25
“Demanda Energía Eléctrica año 2020 en la Minería del Cobre”,
http://www.mesaminera.cl/index.php/documentos/estudios
26
“Desarrollo de un Programa Código Abierto Para la Fusión de Concentrado en El Convertidor Teniente”,
Trabajo de Titulación, Rodolfo Alejandro Berríos Arce, Santiago-Chile, 2010
27
Análisis comparativo sobre el uso eficiente de la energía en la minería de la APEC, Benchmarking de
países de la APEC.
http://www.natlaw.com/interam/ch/eg/sp/spcheg00004.pdf

También podría gustarte