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Muestra Tema 43 PDF
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1. Introducción.
2. Tipos de fuerzas inter moleculares. Fuerzas de Van der Waals.
3. Interacciones dipolares.
3.1.Fuerza dipolo instantáneo-dipolo inducido.
3.2.Atracciones dipolo-dipolo.
3.3.Atracción dipolo-dipolo inducido.
3.4.Otras fuerzas de interacción inter moleculares.
4. Cristales moleculares.
5. Enlaces de hidrógeno.
6. El agua
6.1.composición del agua.
6.2.Estructura electrónica del agua.
6.3.Propiedades físicas y químicas (justificación de las propiedades anómalas).
6.4.Hidratos.
7. Importancia del agua para la vida.
7.1.Ciclo del agua.
7.2.Agua pura, agua pesada y agua natural.
7.3.Agua dura y su depuración.
7.4.Balance de oxígeno en aguas naturales.
7.5.Aguas potables.
8. Conclusión.
9. Tratamiento didáctico.
1. Introducción.
Los átomos se unen entre sí para formar moléculas y redes cristalinas, según sea el tipo
de enlace que tiene lugar entre ellos. Los enlaces ionicos dan lugar a redes cristalinas
tridimensionales. Los enlaces covalentes da lugar a moléculas discretas. Las fuerzas
inter moleculares son fuerzas de atracción y repulsión que se ejercen las moléculas entre
sí. Cuando las moléculas están separadas se atraen con mayor o menor fuerza en
función la distancia, y cuando están demasiado juntas se repelen, siendo la fuerza de
repulsión función de la distancia. Estas fuerzas son mucho más débiles que las intra
moleculares, por lo tanto no mantienen a las moléculas unidas fuertemente. De hecho,
las combinaciones moleculares, forman en estado sólido redes moleculares. Como estas
fuerzas de atracción entre las moléculas son bastante débiles en general, los cristales
moleculares son bastante blandos y pueden evaporarse por un aumento suave de la
temperatura. Los puntos de fusión y ebullición proporciona una información útil acerca
de la mayor o menor magnitud de las fuerzas inter moleculares: cuanto más bajos son
aquellos, menores son las fuerzas.
Las fuerzas inter moleculares se pueden dividir en dos tipos: fuerzas de corto alcance y
de largo alcance. Las fuerzas de corto alcance aparecen cuando las moléculas están tan
cercanas que sus nubes electrónicas solapan. Éste tipo de fuerzas es de naturaleza
repulsiva. Las fuerzas de largo alcance, llamadas también de Van der Waals, son más
fáciles de calcular. Estas fuerzas se pueden formar por varios tipos de contribuciones:
contribuciones electrostáticas, contribuciones de inducción y contribuciones de
dispersión. Todas estas contribuciones dependen de la naturaleza de las moléculas. Son
fuerzas más débiles que las que se presentan en los compuestos ionicos y en todas ellas
intervienen siempre dipolos. Se produce un dipolo químico cuando existe una
distribución desigual de cargas en la molécula. En una molécula diatómica el dipolo
surge como consecuencia de la diferencia de electronegatividad de ambos átomos. En
una molécula poli atómica es necesario que los enlaces sean polares y que estos dipolos
de enlace no se anulen entre sí por simetría molecular. Así pues, un dipolo es una
molécula en la que un extremo de la misma posee una carga positiva y el otro una carga
igual, pero negativa. La magnitud de este dipolo se expresa en función del momento
dipolar, es decir, del producto de la carga por la distancia entre los centros de carga. La
existencia de dipolos permite que moléculas, que aparentemente son neutras, actúen
atrayendo iones y otras moléculas.
3. Interacciones dipolares.
3.1.Fuerza dipolo instantáneo-dipolo inducido.
Son llamadas también fuerzas de dispersión de London. Todas las moléculas incluso
aquellas que no tienen momento dipolar permanente, se pueden atraer unas a otras. Esto
lo interpretó London diciendo que, aunque para un intervalo de tiempo amplio debe
establecerse que cada átomo tiene momento dipolar medio cero, pueden caracterizarse
momentos bipolares instantáneos. Una molécula polar o moléculas que no tiene
momento molecular permanente en el movimiento desordenado de sus electrones, en un
distante lado, la mayor parte de ellos pueden estar en un extremo de la molécula. Es
extremo, en ese instante, queda con más densidad electrónica, al mismo tiempo que el
extremo opuesto tiene carga positiva. La molécula así constituida en un dipolo
instantáneo, va a crear en otra molécula, suficiente mente próxima, un dipolo inducido.
Entre ambos dipolos se establecen fuerzas de atracción eléctrica, debido a la carga
positiva en un extremo de una de ellas y a la carga negativa del extremo de la molécula
que está enfrente, que constituyen este tipo de enlaces inter moleculares. La energía de
atracción es directamente proporcional al cuadrado de la polarizabilidad, e inversamente
proporcional a la sexta potencia de la distancia inter molecular.
Estas fuerzas son muy débiles. Estas fuerzas son tanto más grandes cuanto mayor es la
superficie de la partícula, ya que en este caso aumenta la posibilidad de polarización de
las mismas por parte de las partículas vecinas. Estos dos factores (aumento de tamaño y
aumento de la posibilidad de polarización) explican el aumento de la intensidad de las
fuerzas de Van der Waals con el aumento de la masa atómica o moléculas. Las
partículas mayores tienen siempre superficies mayores.
Por otra parte, poseerán electrones que se mueven a mayores distancias de su propio
núcleo, y por lo tanto quedarán unidos a este tipo de fuerzas más débiles y serán más
fácilmente desplazables.
Estas fuerzas aumentan al aumentar la masa atómica o molecular de las partículas inter
moleculares ya que aumenta el número de electrones. De ahí, se explica el aumento del
punto de fusión y ebullición de los halógenos, gases nobles e hidrocarburos saturados
lineales, que aumentan a medida que lo hace la masa molar de éstos.
3.2.Atracciones dipolo-dipolo.
El dipolo de una molécula puede polarizar los electrones de una molécula vecina e
interaccionar con esta molécula. Los electrones de la segunda molécula quedan, como
consecuencia, desplazados, y de esta forma interactúan con el dipolo de la primera
molécula y dan origen a un efecto de atracción. En 1920, Debye demostró que para un
par de moléculas con un momento bipolar μ y polarizabilidad α, la energía potencial de
atracción que resulta de la interacción dipolo-dipolo inducido, llamado también efecto
de inducción es: Uinduccion = -2αμ2/r2
Dentro de las interacciones entre moléculas de una misma sustancia hay que considerar
el llamado enlace de hidrógeno, explicaré un poco más adelante.
4. Cristales moleculares.
Son cristales en general muy débiles ya que las fuerzas que mantienen a estas moléculas
juntas en un cristal son las fuerzas de London. Por ello los cristales son muy blandos
que tienen puntos de fusión muy bajos. No son conductores de la corriente eléctrica, ya
que no contienen partículas cargadas que puedan quedar libres y desplazarse es bajo la
influencia de un campo eléctrico. Las formas sólida y líquida de estas sustancias poseen
elevadas volatilidades y los líquidos tienen puntos de ebullición muy bajos. Los líquidos
tampoco son conductores eléctricos. Como las debidas fuerzas de Van der Waals, entre
moléculas a polares, son fáciles de romper, dicha sustancia suelen representarse
generalmente en estado gaseoso, en forma de moléculas aisladas, no asociadas.
Sustancias moleculares polares: como las sustancias moleculares polares poseen fuerzas
inter moleculares que son más intensas que las establecidas entre las sustancias
moleculares a polares, las sustancias moleculares polares, no sólo forman cristales más
duros, sino que además, poseen volatilidades menores, tienen puntos de fusión más
elevados y puntos de ebullición más altos, que las sustancias moleculares a polares. Los
líquidos polares tienden a ser buenos disolventes para los sólidos ionicos a causa de los
valores elevados de sus constantes di eléctricas y momentos dipolares.
5. Enlaces de hidrógeno.
Como consecuencia del enlace del hidrógeno aparecen ciertas propiedades anómalas en
los compuestos. La presencia de enlaces de hidrógeno es responsable, por ejemplo, de
las desviaciones en los puntos de fusión de los Hidruros covalentes simples de los
elementos más electronegativos. Los valores de estas propiedades físicas para el
fluoruro de hidrógeno, agua y amoníaco, son anormalmente altos comparados con los
de otros elementos de sus grupos respectivos, debido a la asociación molecular creada
por los enlaces de hidrógeno.
Los que son menos meta y para no poseen estructuras que permitan la formación de
enlaces de hidrógeno en toda la molécula, pero sí pueden formar enlaces de hidrógeno
inter moleculares, por lo que serán menos volátiles que el isomero orto.
Para poder justificar la existencia de los enlaces de hidrógeno, debemos considerar las
posibles contribuciones debidas a comparencia, resonancia y atracción electrostático e
intentar una evaluación de la importancia de cada una de ellas.
La resonancia que sólo de importancia para las uniones muy cortas y muy fuertes.
Todo esto lleva indicar que los enlaces de hidrógeno son probablemente de carácter
esencialmente electrostático. El hidrógeno utiliza su electrón el enlace R-H y, por lo
tanto, la densidad electrónica entre el protón y R será pequeña. Sólo el hidrógeno es
capaz de formar este enlace, ya que su pequeño radio hace que la densidad de carga
positiva se elevará, creándose un poderoso campo electrostático, capaz de dar
interacciones coulombianas grandes con el par de electrones no enlazante de R, ya que,
por el carácter electrón negativo de R, éste normalmente poseerá una carga negativa de
tipo dipolar.
6. El agua.
El agua, compuesto que cubre casi tres cuartas partes de la superficie terrestre, es la
única sustancia que existe naturalmente en los tres estados de la materia: sólido, líquido
y gaseoso. Todas las formas de vida dependen del agua y, en mayor o menor grado
están compuestas por ese líquido.
Desde el punto de vista químico la importancia del agua reside en que casi la totalidad
de los procesos químicos que ocurren en la naturaleza, no sólo en los organismos vivos,
sino en la superficie de la tierra, así como los que se llevan a cabo en el laboratorio y en
la industria, en el lugar en disolución acuosa.
El agua también desempeña un papel de vital importancia en todos los sistemas
ecológicos, tanto en la movilización y transporte de nutrientes, como la producción
fotosintética de materia para las plantas.
Los antiguos consideraron el agua como uno de los cuatro elementos, siendo los
restantes el aire, la tierra y el fuego. Hasta una época reciente no se