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La prueba de Apgar

La prueba de Apgar es un examen rápido que se realiza al primer y quinto minuto después del
nacimiento del bebé. El puntaje en el minuto 1 determina qué tan bien toleró el bebé el proceso de
nacimiento. El puntaje al minuto 5 le indica al proveedor de atención médica qué tan bien está
evolucionando el bebé por fuera del vientre materno.

En casos raros, el examen se terminará 10 minutos después del nacimiento.

Virginia Apgar, MD (1909-1974), comenzó a utilizar el puntaje Apgar en 1952.

Forma en que se realiza el examen


La prueba de Apgar la realiza un médico, una enfermera obstétrica (comadrona) o una enfermera.
El proveedor examina en el bebé:

• Esfuerzo respiratorio

• Frecuencia cardíaca

• Tono muscular

• Reflejos

• Color de la piel

A cada una de estas categorías se le da un puntaje de 0, 1 o 2 según el estado observado.

Esfuerzo respiratorio:

• Si el bebé no está respirando, el puntaje es 0.

• Si las respiraciones son lentas o irregulares, el puntaje del bebé es 1 en esfuerzo respiratorio.

• Si el bebé llora bien, el puntaje respiratorio es 2.

La frecuencia cardíaca se evalúa con el estetoscopio. Esta es la evaluación más importante.

• Si no hay latidos cardíacos, el puntaje del bebé es 0 en frecuencia cardíaca.

• Si la frecuencia cardíaca es menor de 100 latidos por minuto, el puntaje del bebé es 1 en frecuencia
cardíaca.

• Si la frecuencia cardíaca es superior a 100 latidos por minuto, el puntaje del bebé es 2 en
frecuencia cardíaca.

Tono muscular:
• Si los músculos están flojos y flácidos, el puntaje del bebé es 0 en tono muscular.

• Si hay algo de tono muscular, el puntaje del bebé es 1.

• Si hay movimiento activo, el puntaje del bebé es 2 en tono muscular.

Respuesta a las gesticulaciones (muecas) o reflejo de irritabilidad es un término que describe la


respuesta a la estimulación, como un leve pinchazo:

• Si no hay reacción, el puntaje del bebé es 0 en reflejo de irritabilidad.

• Si hay gesticulaciones o muecas, el puntaje del bebé es 1 en reflejo de irritabilidad.

• Si hay gesticulaciones y una tos, estornudo o llanto vigoroso, el puntaje del bebé es 2 en reflejo de
irritabilidad.

Color de la piel:

• Si el color de la piel es azul pálido, el puntaje del bebé es 0 en color.

• Si el cuerpo del bebé es rosado y las extremidades son azules, el puntaje es 1 en color.

• Si todo el cuerpo del bebé es rosado, el puntaje es 2 en color.

La Pirámide de Maslow
La Pirámide de Maslow, o jerarquía de las necesidades humanas, es una teoría
psicológica propuesta por Abraham Maslow en su obra: Una teoría sobre la motivación
humana de 1943, que posteriormente amplió. Maslow formula en su teoría una jerarquía
de necesidades humanas y defiende que conforme se satisfacen las necesidades más
básicas (parte inferior de la pirámide), los seres humanos desarrollan necesidades y
deseos más elevados (parte superior de la pirámide).
La escala de las necesidades de Maslow se describe a menudo como una pirámide que
consta de cinco niveles: los cuatro primeros niveles pueden ser agrupados como
«necesidades de déficit (primordiales); al nivel superior lo denominó «autorrealización»,
«motivación de crecimiento», o «necesidad de ser». “La diferencia estriba en que
mientras las necesidades de déficit pueden ser satisfechas, la necesidad de ser es una
fuerza impelente continua”.
La idea básica de esta jerarquía es que las necesidades más altas ocupan nuestra
atención sólo cuando se han satisfecho las necesidades inferiores de la pirámide. Las
fuerzas de crecimiento dan lugar a un movimiento ascendente en la jerarquía, mientras
que las fuerzas regresivas empujan las necesidades prepotentes hacia abajo en la
jerarquía. Según la pirámide de Maslow dispondríamos de:

Necesidades básicas
Son necesidades fisiológicas básicas para mantener la homeostasis (referente a la
salud); dentro de estas, las más evidentes son:
• Necesidad de respirar, beber agua, y alimentarse.
• Necesidad de mantener el equilibrio del pH y la temperatura corporal.
• Necesidad de dormir, descansar y eliminar los desechos.
• Necesidad de evitar el dolor y tener relaciones sexuales.

Necesidades de seguridad y protección


Estas surgen cuando las necesidades fisiológicas se mantienen compensadas. Son las
necesidades de sentirse seguro y protegido, incluso desarrollar ciertos límites en cuanto
al orden. Dentro de ellas encontramos:
• Seguridad física y de salud.
• Seguridad de empleo, de ingresos y recursos.
• Seguridad moral, familiar y de propiedad privada.

Necesidades de afiliación y afecto


Están relacionadas con el desarrollo afectivo del individuo, son las necesidades de:
• Asociación
• Participación
• Aceptación
Se satisfacen mediante las funciones de servicios y prestaciones que incluyen
actividades deportivas, culturales y recreativas. El ser humano por naturaleza siente la
necesidad de relacionarse, ser parte de una comunidad, de agruparse en familias, con
amistades o en organizaciones sociales. Entre estas se encuentran: la amistad, el
compañerismo, el afecto y el amor. Estas se forman a partir del esquema social.
Necesidades de estima
Maslow describió dos tipos de necesidades de estima, una alta y otra baja.
• La estima alta concierne a la necesidad del respeto a uno mismo, e incluye
sentimientos tales como confianza, competencia, maestría, logros,
independencia y libertad.
• La estima baja concierne al respeto de las demás personas: la necesidad de
atención, aprecio, reconocimiento, reputación, estatus, dignidad, fama, gloria,
e incluso dominio.
La merma de estas necesidades se refleja en una baja autoestima y el complejo de
inferioridad.
El tener satisfecha esta necesidad apoya el sentido de vida y la valoración como
individuo y profesional, que tranquilamente puede escalonar y avanzar hacia la
necesidad de la autorrealización.
La necesidad de autoestima, es la necesidad del equilibrio en el ser humano, dado que
se constituye en el pilar fundamental para que el individuo se convierta en el hombre de
éxito que siempre ha soñado, o en un hombre abocado hacia el fracaso, el cual no
puede lograr nada por sus propios medios.

Autorrealización o autoactualización
Este último nivel es algo diferente y Maslow utilizó varios términos para denominarlo:
«motivación de crecimiento», «necesidad de ser» y « autorrealización».
Es la necesidad psicológica más elevada del ser humano, se halla en la cima de las
jerarquías, y es a través de su satisfacción que se encuentra una justificación o un
sentido válido a la vida mediante el desarrollo potencial de una actividad. Se llega a
ésta cuando todos los niveles anteriores han sido alcanzados y completados, o al
menos, hasta cierto punto.

Hermanos: El Orden de Nacimiento y la Personalidad

septiembre 19, 2016 Ley de la Atracción Positiva Tests de Personalidad 0

Algunos expertos tienen la teoría de que el orden de nacimiento es una herramienta importante
para predecir la conducta de un adulto. Y de determinar la forma de sentir y percibir al mundo.

El Psiquiatra Alfred Adler (1870-1937) propuso por primera vez una teoría sobre el efecto del
orden de nacimiento en la personalidad. Otros teóricos como Frank Sulloway y Delroy
Paulhus también escribieron sobre el tema.

En general, se cree que el orden en que las personas nacen es tan importante como el género y casi
tan importante como la genética. No existen dos niños que tengan los mismos padres, aunque
pertenezcan a la misma familia, ya que los padres son diferentes con cada uno de sus hijos.

Las siguientes categorías se ajustan a estas teorías


El hijo mayor: líder y responsable
En líneas generales suelen ser:

▪ Seguros
▪ Concienzudos
▪ Tienden a ser estructurados
▪ Son cautelosos
▪ Controladores
▪ Triunfadores
▪ Responsables
▪ Saben comportarse
▪ Reflejan una versión en miniatura de sus propios padres.

Frecuentemente, los hijos mayores tienen más cosas en común con otros hijos mayores que con
sus propios hermanos. Al haber sido los primeros, sus padres pusieron tanta atención sobre ellos
cuando eran los únicos niños en la casa, que tienden a ser mucho mas responsables, cuidadosos,
equilibrados y confiables que sus hermanos. Son, en cierta, forma, una proyección de sus padres.

Por lo general, son personas que logran muchas cosas y buscan la aprobación de los demás, pero
por otro lado son dominadores y perfeccionistas. Generalmente, se desarrollan mejor en carreras
de liderazgo tales como leyes, medicina o como gerentes. Con sus hermanos actúan como si fuesen
mini-padres, por lo cual intentan dominar a sus hermanos acostumbrándose a ser guías de los
demás desde que asumieron ese papel con sus hermanos.

El gran problema que experimentan los hermanos mayores es que cuando llega el próximo
hermano pueden experimentar un sentido de pérdida, ya que serán destronados de ese lugar
especial que les daba el ser el único. Toda la atención, que antes era exclusivamente suya, ahora
debe ser compartida con su hermano. Este sentimiento de pérdida puede dar lugar a una cierta
propensión a desarrollar un carácter melancólico.

Generalmente, los primogénitos son exigentes, personas precisas, les encanta prestar atención a
los pequeños detalles y tomar el mando. Están orientados hacia objetivos, quieren el control total y
tienen la necesidad de ganar y salir victoriosos en todo.

El hijo del medio: social y negociador


El hijo del medio a menudo se siente relegado por pensar que la atención de sus padres
está dedicada al hijo mayor o al bebé (hijo menor) de la familia. Este tipo de pensamientos puede
dejar huellas que terminan generando este tipo de características:

▪ Son personas que quieren agradar


▪ Un poco rebeldes
▪ Tienen un círculo social grande
▪ Son pacificadores
▪ Comprensivos
▪ Cooperativos
▪ Flexibles
▪ Competitivos.
▪ Les cuesta poner límites.
Los hijos del medio sienten que no han recibido la cantidad de atención necesaria de parte de sus
padres y, debido a esto, tratan de compensar este déficit con su grupo de amigos.Es por esto
que los hijos del medio se caracterizan por tener un círculo de amigos muy cercano, al cual sienten
como si fuese una parte adicional de su familia. En este grupo de amigos intentan lograr la
atención que probablemente no sintieron recibir de su familia.

El rasgo de personalidad que define a los hijos del medio es justamente opuesto al del hermano
mayor o menor. Para evitar el conflicto y la competencia directa, un hijo del medio a menudo va en
una dirección marcadamente opuesta a la de sus hermanos. Tienden a ser complacientes con la
gente y por lo general odian la confrontación, generando una gran capacidad de negociación. Esta
habilidad la van desarrollando desde pequeños, una vez que entienden lo que tienen que hacer
para ganar la atención de sus padres. Son expertos en ver los dos lados de un problema y siempre
tienen ganas de hacer felices a todos.

Como su vida social se ha desarrollado mejor que la de sus hermanos, tienden a relacionarse mejor
con la gente, no tienen dificultades para actuar en equipo, son confiables, constantes y leales.

El hijo menor: simpático y seductor


Los hijos menores tienden a ser los más independientes y libres de espíritu, ya que sus padres al
tener más experiencia y menos tiempo para brindarles atención, también les imprimen
menos responsabilidades.

Por tal motivo, presentan las siguientes caracteristicas:

▪ Adorables
▪ No tienen complicaciones
▪ Manipuladores
▪ Egocéntricos
▪ Autónomos
▪ Sociables

Los hijos menores se encuentran con padres que ya han obtenido la suficiente experiencia y
confianza en sus roles como padres, por lo cual éstos tienden a ser menos exigentes y
relajados con los menores, ya que no se alarman tanto por las cosas innecesarias como lo hacían
con los hermanos mayores. Debido a esto, son mas libres y, al haber sido el “bebe” de la familia,
han tenido menos responsabilidades, por lo cual tienden a generar un estilo más creativo y
relajado.

La experiencia de los padres hace que no estén tan pendientes de las acciones del menor; es por
esto que los más chicos tienen más libertad que sus hermanos, por lo cual van desarrollando una
personalidad más independiente. Pero al mismo tiempo, tratan de llamar la atención
permanentemente, generando una personalidad llena de carisma y simpatía. Generalmente, son
los peores alumnos, los payasos de la clase y el alma de las fiestas. Si bien son personas alegres y
extrovertidas, tienden a aburrirse rápidamente y poseen un fuerte miedo al rechazo y poca
capacidad de atención. Debido a sus habilidades con la gente, los nacidos al último pueden ser
muy buenos manipuladores.

Generalmente los hijos menores optan por la actuación, la música, el diseño o afines.
El hijo único
Ser hijo único es una posición compleja en una familia. Sin hermanos que compitan con él,
acaparará toda la atención y recursos de sus padres, pero no sólo durante la infancia sino durante
toda su vida.

Se caracterizan con los siguientes rasgos:

▪ Maduros para su edad


▪ Perfeccionistas al extremo
▪ Híper-responsables
▪ Diligentes
▪ Líderes
▪ Se sienten más cómodos con adultos que con otros niños

Los hijos únicos, al crecer rodeados de adultos, son más verbales y generalmente más maduros.
Esto puede permitirles que desarrollen más su intelecto, ya que al haber pasado tanto tiempo
solos, van generando ciertas habilidades como el ingenio y la creatividad. En muchos aspectos, los
hijos únicos son muy similares a los primogénitos, pero llevan sus cualidades al extremo. Son
líderes natos y tienden a ser muy perfeccionistas, conservadores y organizados. Son difícíles de
manejar. Suelen ser implacables, muy exigentes y odian admitir que están equivocados y por lo
general no aceptan bien las críticas.

DEFINICIÓN DE PSIQUE
El diccionario de la Real Academia Española (RAE) indica que el
término psique se refiere al alma humana. La noción procede de la lengua
griega y está relacionada a desarrollos conceptuales de los filósofos de
la Antigüedad.
La psique se vinculaba a una especie
de energía del ser humano que estaba
asociada al cuerpo terrenal y que, tras el
fallecimiento, se separaba de éste. A partir de
esta idea, comenzó a representarse la psique
como algo autónomo de la persona.
Los griegos cuando pensaban en la psique, como ese elemento que se
separaba del cuerpo físico al morir, como alma, la identificaban de una
manera muy clara. La asociaban a una figura alada, de apariencia
antropomórfica y que acababa marchándose al Hades, donde permanecía
para siempre adoptando una forma fantasmal.

Muchos fueron los autores de aquel momento que no dudaron en expresar


sus propias ideas respecto a esa psique. Este sería el caso de Homero, que
llegó a determinar que para él la misma salía de la boca del fallecido.

Con el tiempo, el concepto se alejó de la filosofía y se acercó a lo que hoy


conocemos como psicología. En la actualidad, suele entenderse que la
psique es aquello formado por los fenómenos y los procedimientos
que ocurren en la mente.
La psique, en este sentido, permite que el ser humano se adapte al entorno
a través de un proceso de aprendizaje. Si el individuo no cuenta con una
psique saludable, dicha adaptación será defectuosa y la persona sufrirá
diversos trastornos.
Varias funciones son desarrolladas por la psique: aquello que se piensa, se
siente y se percibe surge de ella. Puede decirse que, en el plano físico, la
psique está regulada por el cerebro. De este modo, a diferencia de lo que se
creía en tiempos remotos, ahora se vincula la psique al organismo: es decir,
no se trata de una dimensión autónoma que pueda escindirse del cuerpo
humano.
Cabe destacar que, más allá de lo físico, las personas cuentan con métodos
internos de defensa para proteger la psique, como la negación,
la sublimación, la represión y otros fenómenos psicológicos.
Es importante que conozcamos que dentro de la mitología griega existía una
figura que precisamente respondía al nombre de Psique. Esta era una
divinidad que se identificaba con la personificación del alma.

En concreto, ella fue la hija menor de tres hijas de un rey de Anatolia.


Destacaba por su belleza, por lo que despertó los celos de Afrodita, que quiso
tomar cartas en el asunto. Por eso, ordenó a Eros, su hijo, que le lanzara una
de sus flechas para que así se enamorara del hombre más ruin que
encontrara a su paso, pero él nada más verla se enamoró perdidamente y eso
hizo que la raptara.

Desde entonces vivieron un amor escondido, que sufrió numerosos avatares,


que les separó y que hizo que Psique tuviera que jugarse la vida en varias
pruebas para poder recuperar a su amado. Y lo consiguió, logrando al mismo
tiempo el consentimiento de Afrodita y de Zeus, que la hizo inmortal. Fruto
de esa relación nació una hija a la que llamaron Placer.

Sigmund Freud -padre del psicoanálisis- describió a la mente como un aparato


psíquico y postuló en una de sus teorías que la mente está compuesta por
diferentes órganos o piezas -como todo aparato-. Este formuló dos tópicas
para describir este aparato psíquico -la mente-.

Según la primera tópica freudiana el aparato psíquico está compuesto por tres
elementos: consciente, preconsciente e inconsciente.

Consciente
Freud describe a la mente consciente como una composición de todos los
procesos mentales de los cuales somos conscientes. La misma
(mente consciente) se sitúa en el presente y es quien le permite al sujeto
tener percepción de la realidad.
La consciencia es el conjunto de vivencias de las cuales el individuo es consciente
de ellas en el mismo instante en el que están ocurriendo.En la mente consciente,
el sujeto presenta conciencia de sí mismo y del mundo que le rodea.

Según Freud, el estar consciente es lo que le permite al sujeto pensar y


comunicarse de forma racional.
La consciencia está relacionada con la memoria a corto plazo y está limitada
en términos de capacidad.

Preconsciente
En la mente preconsciente se encuentra lo que no está en la consciencia pero
tampoco en el inconsciente. En ese lugar se sitúan los sentimientos y
pensamientos de los cuales el sujeto no es consciente en el mismo
instante en el que ocurren, pero cuando lo desea puede traerlos a la
consciencia.

El preconsciente comprende pensamientos, saberes y vivencias que no se


encuentran conscientes en la actualidad. En el mismo se produce una
recuperación de la memoria, sacando a flote algunos recuerdos requeridos
por la mente consciente.

A diferencia de los pensamientos y sentimientos que se encuentran en el


inconsciente, los que se encuentran en el preconsciente no están reprimidos, por
lo que podemos decir que se encuentran en una ”sala de espera” de la cual
saldrán cuando la consciencia centre su atención en ellos.

Un ejemplo de mente preconsciente puede ser un sujeto volviendo a su casa,


donde el mismo no tiene el recorrido que debe hacer en su consciencia, sin
embargo, al dirigirse a su casa esa información guardada en el preconsciente
surge inmediatamente.

En ocasiones algunas experiencias emocionales pueden permanecer dentro


de las emociones negativas preconcientes, pero a veces, algunas
experiencias traumáticas que se encontraron por un tiempo en el
preconsciente pasan a ser reprimidas y enviadas al inconsciente, por lo tanto
ya no estarán disponibles en el preconsciente.

Inconsciente
Para Freud, la mente inconsciente comprende los procesos mentales que
son inaccesible a la consciencia. Para él, el inconsciente es la fuente primaria
de la conducta humana.

En el inconsciente se encuentran deseos instintivos y primitivos que han sido


reprimidos.

La información que se encuentra reprimida en el inconsciente, se encuentra


encerrada mediante los mecanismos de defensa. Estos mecanismos tienen la
función de retener los eventos traumáticos o acontecimientos altamente
negativos para que queden fuera del alcance de la consciencia.

Podemos comparar las dos tópicas freudianas de esta manera: el ello se


encuentra dentro del inconsciente y el consciente y preconsciente hacen
referencia al superyó. Los pensamientos y sentimientos inadecuados para el
individuo (de acuerdo a la sociedad) son enviados al inconsciente, estos
pensamientos son impulsados por el ello y a la vez son reprimidos por el superyó.

Las cosas que están ocultas a la conciencia, para Freud, son las que
ejercen la mayor influencia sobre nuestras personalidades y
comportamientos, por tanto afirma que lo que se encuentra en el
inconsciente son fuerzas que impulsan nuestro comportamiento y
definen nuestra personalidad.
1. El Ello
Freud proponía que el Ello o Id es la estructura de la psique humana
que aparece en primer lugar. A diferencia de lo que ocurre con el Yo y
el Superyó, está presente desde que nacemos, y por lo tanto durante los
primeros dos años de nuestras vidas es la que manda a lo largo de ese
periodo de tiempo.
El Ello se mueve a partir del principio del placer inmediato, y por eso
lucha por hacer que las pulsiones primarias rijan la conducta de la
persona, independientemente de las consecuencias a medio o largo
plazo que eso pueda conllevar. Por ello se suele considerar que el Ello
es "la parte animal" o "instintiva" del ser humano.

2. El Yo
Esta instancia psíquica surgiría a partir de los dos años y, a diferencia del
Ello, se regiría por el principio de la realidad. Eso significa que el Yo está
más enfocado hacia el exterior, y nos lleva a pensar en las
consecuencias prácticas de lo que hacemos y los problemas que puede
generar una conducta demasiado desinhibida. Esto hace que se enfrente
al Ello para aplacar las pulsiones que emanan de él, para lo cual utiliza
los mecanismos de defensa.

3. El Superyó
El Superyó aparecería a partir de los 3 años de vida, y es consecuencia
de la socialización (básicamente aprendida a través de los padres) y
la interiorización de normas consensuadas socialmente. Es la instancia
psíquica que vela por el cumplimiento de las reglas morales. Es por eso
que el Superyó presiona para realizar grandes sacrificios y esfuerzos con
tal de hacer que la personalidad de uno mismo se acerque lo máximo
posible a la idea de la perfección y del bien.
Como el Ello rechaza totalmente la idea del sometimiento a la moral y el
Yo, a pesar de tratar de frenar las pulsiones, también se mueve por
objetivos egoístas centrados en la supervivencia y lo pragmático de
adaptarse al entorno, El Superyó se enfrenta a ambos.

El equilibrio entre las fuerzas


Freud creía que todas estas partes de la psique existen en todas las
personas y, a su modo, son parte indispensable de los procesos
mentales. Sin embargo, también creía que la lucha entre el Ello, el Yo y
el Superyó en ocasiones puede generar descompensaciones que
producen sufrimiento y la aparición de psicopatologías, por lo que se
debía tratar de re-equilibrar la correlación de fuerzas a través del
psicoanálisis.

La sexualidad según Freud


Para Freud, la sexualidad humana es una de las principales
vertientes de la energía vital que mueve el comportamiento del ser
humano. Esta energía, a la que se le puso el nombre de libido, es la
fuente de los impulsos que para el padre del psicoanálisis hacen que
tendamos hacia ciertos objetivos a corto plazo y, a la vez, obligan a otras
instancias de nuestra psique a reprimir estas tendencias para no
ponernos en peligro o no entrar en conflicto con el entorno en el que
vivimos.
La energía vital que se expresa a través de la sexualidad, según Freud,
está presente ya desde las primeras semanas de nuestra vida, lo cual
significa que nuestra vertiente sexual no nace en la adolescencia, tal y
como muchos investigadores de su época sostenían.
Pero las repercusiones de esto no tienen que ver simplemente con
localizar el inicio de nuestro desarrollo sexual en uno u otro punto de
nuestro calendario vital. Tiene implicaciones profundas en el modo en el
que freud relacionaba nuestra personalidad con nuestra vertiente
íntima, afectiva y basada en impulsos.

El desarrollo del inconsciente


Una de las ideas esenciales detrás de la teoría del desarrollo psicosexual
de Freud es que el modo en el que gestiona la satisfacción de la libido
durante la infancia deja unas huellas en nuestro inconsciente que se
harán notar durante la vida adulta.
Así, si los factores externos a un niño hacen que no pueda satisfacer
estas tendencias tal y como se desearía (por ejemplo, a causa de las
reprimendas de sus padres), esta angustia se traduce en una fijación que
tiene que ver con ideas relacionadas a una zona erógena en concreto
(que no tiene por qué estar en el área genital). Para Freud, por tanto, en
el desarrollo psicosexual interviene tanto la biología como la
crianza.
Otros seguidores de la corriente psicodinámica terminaron rechazando la
visión determinista de Freud, según la cual la parte inconsciente de
nosotros mismos nos manipula constantementesin que podamos hacer
demasiado al respecto. Sin embargo, esta forma de pensar hizo que
Freud crease la teoría del desarrollo psicosexual, una de mas más
recordadas en la historia de la psicología.

Las etapas del desarrollo y sus fijaciones


A partir de los diferentes modos en los que la etapa de crecimiento de los
menores condiciona la aparición de uno u otro tipo de fijación, Sigmund
Freud formuló la teoría que uniría la sexualidad con el desarrollo del
inconsciente freudiano.
En ella, se propone que en los primeros años de nuestras vidas
atravesamos distintas etapas de desarrollo vinculadas a la sexualidad y a
distintas fijaciones, y que lo que ocurra durante ellas influirá en el modo
en el que el inconsciente condicione a la persona una vez haya llegado a
la adultez. Es decir, que cada una de las etapas del desarrollo
psicosexual marcarían los tempos que delimitan qué tipo de acciones son
necesarias para expresar la líbido de manera satisfactoria y cuáles
pueden llegar a crear conflictos que queden enquistados en nosotros de
manera inconsciente.

Las fases pulsionales del desarrollo


psicosexual
Según la teoría freudiana, las etapas de desarrollo psicosexual y sus
características son las siguientes.

1. Etapa oral
La etapa oral ocupa aproximadamente los primeros 18 meses de
vida, y en ella aparecen los primeros intentos por satisfacer las
demandas promovidas por la libido. En ella, la boca es la principal zona
en la que se busca el placer. También es la boca una de las principales
zonas del cuerpo a la hora de explorar el entorno y sus elementos, y esto
explicaría la propensión de los más pequeños a intentar "morderlo" todo.
Si se impide tajantemente que los bebés utilicen su boca para
satisfacerse, esto podría producir un bloqueo que haría que ciertos
problemas quedasen fijados en el inconsciente (siempre según Freud).

2. Etapa anal
Esta etapa se produciría desde el fin de la etapa oral y hasta los 3
años de edad. Se trapa de la fase en la que se empiezan a controlar el
esfínter en la defecación. Para Freud, esta actividad está vinculada al
placer y la sexualidad.
Las fijaciones relacionadas con esta fase del desarrollo psicosexual
tienen que ver con la acumulación y con el gasto, vinculadas con el
espíritu ahorrador y la disciplina en el primer caso, y con la
desorganización y el derroche de recursos en el segundo.
3. Etapa fálica
Esta fase pulsional duraría entre los 3 y los 6 años, y su zona
erógena asociada es la de los genitales. De este modo, la principal
sensación placentera sería la de orinar, pero también se originaría en
esta fase el inicio de la curiosidad por las diferencias entre hombres y
mujeres, niños y niñas, empezando por las evidentes disimilitudes en la
forma de los genitales y terminando en intereses, modos de ser y de
vestir, etc.
Además, Freud relacionó esta fase con la aparición del "complejo de
Edipo", en el que los niños varones sienten atracción hacia la persona
que ejerce el rol de madre y sienten celos y miedo hacia la persona que
ejerce el rol de padre. En cuanto a las niñas que pasan por esta etapa
del desarrollo psicosexual Freud "adaptó ligeramente la idea con
Complejo de Edipo para que englobas a estas, a pesar de que el
concepto había sido desarrollado para que cobrase sentido
principalmente en los varones. Fue más tarde cuando Carl Jung propuso
el complejo de Electracomo contraparte femenina al Edipo.

4. Etapa de latencia
Esta fase empieza hacia los 7 años y se extiende hasta el inicio de la
pubertad. La etapa de latencia se caracteriza por no tener una zona
erógena concreta asociada y, en general, por representar una
congelación de las experimentaciones en materia de sexualidad por parte
de los niños, en parte a causa de todos los castigos y amonestaciones
recibidas. Es por eso que Freud describía esta fase como una en la que
la sexualidad queda más camuflada que en las anteriores.
La etapa de latencia ha estado asociada a la aparición del pudor y la
vergüenza relacionada con la sexualidad.

5. Etapa genital
La etapa genital aparece con la pubertad y se prolonga en adelante.
Está relacionada con los cambios físicos que acompañan a la
adolescencia. Además, en esta fase del desarrollo psicosexual el deseo
relacionado con lo sexual se vuelve tan intenso que no se puede reprimir
con la misma eficacia que en etapas anteriores.
La zona erógena relacionada con este momento vital vuelve a ser la de
los genitales, pero a diferencia de lo que ocurre en la fase fálica, aquí ya
se han desarrollado las competencias necesarias para expresar la
sexualidad a través de vínculos de unión de carácter más abstracto y
simbólico que tienen que ver con el consenso y el apego con otras
personas. Es el nacimiento de la sexualidad adulta, en contraposición
a otra ligada solo a las simples gratificaciones instantáneas y obtenidas
mediante actividades estereotípicas.

La teoría freudiana, en contexto


La teoría del desarrollo psicosexual puede llevar a producir cierto
alarmismo si se piensa que una mal gestión de la educación de los
menores durante estas fases puede dejarles con traumasy todo tipo de
trastornos si no se entienden bien las ideas de Freud. Sin embargo, hay
que tener en cuenta que esta teoría durante fue formulada y
desarrollada en un punto en el que la psicología acababa de nacer.

Origen del Complejo de Edipo

El complejo de Edipo es un término acuñado por Sigmund Freud en su teoría de las


etapas psicosexuales del desarrollo para describir sentimientos de deseo de un niño
por su progenitor del sexo opuesto, y los celos y la ira hacia el progenitor de su mismo
sexo. Básicamente se refiere a que el niño siente que está compitiendo con su padre
por la posesión de su madre, mientras que una chica siente que está compitiendo con
su madre por el afecto de su padre.

Según Freud, los niños ven su padre del mismo sexo como un rival para la
atención y el afecto del padre del sexo opuesto.

Freud propuso por primera vez el concepto del complejo de Edipo en su libro de
1899 La interpretación de los sueños, a pesar de que no comenzó formalmente el
uso del término complejo de Edipo hasta el año 1910.
¿De dónde sale el nombre de Edipo?

Freud pone este nombre al complejo a raíz del personaje de Sófocles de la mitología
griega, que mata al rey Edipo, que es su padre y se casa con su madre. En la
leyenda, Edipo es abandonado al nacer y por lo tanto no sabe quiénes son sus padres.
Es sólo después de que ha matado a su padre para casarse con su madre, que
descubre sus verdaderas identidades.

¿En qué consiste el complejo de Edipo de Freud?

En la teoría psicoanalítica, el complejo de Edipo se refiere al deseo del niño de tener


una relación sexual con el padre del sexo opuesto, pero sobre todo se refiere a la
atención erótica de un niño varón hacia su madre. Este deseo se mantiene en
el inconsciente a través de la represión, pero Freud creía que este sentimiento todavía
ejerce una fuerte influencia sobre el comportamiento del niño y juega un importante
papel en el desarrollo infantil.

Freud afirmaba que el complejo de Edipo tenía un papel importante en la etapa


fálica del desarrollo psicosexual, entre los 3 y los 5 años. También creía que la
finalización con éxito de esta etapa consistía en la identificación con el padre del
mismo sexo, que en última instancia conduce al desarrollo de una identidad sexual
madura.

Según Freud, el niño desea poseer a su madre y reemplazar a su padre, pues lo ve


como un rival en el logro del afecto de la madre.

Algunas manifestaciones del comportamiento de este complejo podrían implicar que


un niño exprese posesión hacia la figura de su madre, diciéndole a su padre que no
abrace o bese a su madre. Las niñas a esta edad pueden decir que planean casarse
con sus padres cuando sean mayores.
Complejo de castración
El complejo de castración es un concepto perteneciente al psicoanálisis y refiere a
una estructura que irrumpe en el psiquismo humano a edad temprana, en íntima relación con
el complejo de Edipo (tres a cinco años aproximadamente). Básicamente, se trata en el varón
del miedo a la pérdida del falo (más allá del pene, en tanto representación de poder,
superioridad y posibilidad de reunificación con la madre) a manos de su padre, y en la mujer a
la constatación de que "ha sido castrada". El concepto fue descrito por Sigmund Freud por
primera vez en 1908 en el texto Sobre las teorías sexuales infantiles, aunque había sido
previamente referido ambiguamente en 1900 en La interpretación de los sueñoscomo
amenaza de castración.
Tanto en la mujer como en el varón se establece la premisa fálica: suponen que todo y todos
poseen falo. Pero la diferencia anatómica entre los sexos es una realidad objetiva y contradice
constantemente ese supuesto. Sin embargo, al menos por un tiempo las racionalizaciones de
los niños les hacen creer que la diferencia se debe a que "es más pequeño y no se ve" o "ya
crecerá".
En el caso del niño varón, la amenaza de castración que los padres hacen pender sobre él,
que por su hacer onanista, resignifica la vista de los genitales femeninos, o bien la amenaza
es resignificada por su visualización; la pérdida de los propios genitales se ha hecho entonces
representable. Este temor objetivado implica para el varón la salida del complejo de Edipo, y
un menosprecio que perdurará hacia la criatura castrada.
Para la mujer, en cambio, el complejo de castración marca el ingreso al Edipo. Se sabe ahora
castrada, el tiempo le ha develado que no tiene falo y que nunca crecerá, y culpa de ello a su
madre, pues es quien la ha "fabricado mal".
La articulación con el complejo de Edipo es clave en ambos casos, y la posición tomada por el
sujeto ante el complejo de castración tendrá gran influencia en la vida psíquica futura, además
de estar íntimamente relacionado con el fenómeno de la angustia.

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