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CARLOS
febrero al 16 de septiembre de 2018) MUAC, Museo Universitario Arte Contemporáneo.
UNAM, Universidad Nacional Autónoma de México, Ciudad de México.
Textos
Dawn Ades, Carlos Amorales
AMORALES
Maria Barnas, Cuauhtémoc Medina ∙ MUAC, IIE-UNAM
Traducción
Jaime Soler Frost
Dirección editorial
—
Ekaterina Álvarez Romero ∙ MUAC
Coordinación editorial
Ana Xanic López ∙ MUAC
Asistencia editorial
Adrián Martínez Caballero
Maritere Martínez Román
AXIOMAS PARA LA ACCIÓN
Corrección
Ekaterina Álvarez Romero ∙ MUAC, Ana Xanic López ∙ MUAC
Christopher Fraga, Jaime Soler Frost
Diseño
Cristina Paoli ∙ Periferia
Asistencia en formación
Krystal Mejía
Lista de obra 30
—
CARLOS AMORALES
Semblanza 197
Créditos 198
A pesar de la intensidad con que en las últimas décadas las
Esta muestra es una prácticas artísticas han pugnado por desechar su antiguo
disfraz, a veces sorprende lo convencionales que son nues-
máscara: Axiomas para tras exhibiciones y narrativas sobre los artistas. Exposiciones
fundamentadas en géneros como la retrospectiva, los
la acción (1996-2018) conceptos político-geográficos, la proximidad generacional,
la técnica o la iconografía, siguen proveyendo los modelos
— dominantes que organizan nuestro consumo artístico, casi
CARLOS AMORALES como si fueran tan irremediables como las fases del relato
CUAUHTÉMOC MEDINA de la tragedia aristotélica. No obstante, también es bien
sabido que el corsé al que sometemos a obras, artistas
y públicos está lejos de ser cómodo. Es archiconocida la
alergia que la mayoría de los artistas sienten ante la pers-
pectiva de ser envasados para el consumo público bajo el
modelo cronológico-mitológico de la retrospectiva, y no
sólo por la sensación de entierro en vida que esa clase de
muestras provoca. Forzar una obra a servir al anticuado
dogma romántico de la unidad de obra y vida quizá sea
responsable de mantener viva la mitología del genio y el
sufrimiento de las películas y las telenovelas, pero oscurece
los conceptos que ordenan una producción y la posibilidad
de su experiencia. Ofrecen una rutina en la que podría
expresarse la inventiva de la cultura.
Sería del todo contrario al espíritu del trabajo de un
artista autodenominado como “Amorales” quedar sujeto a
una forma de narración temporal, progresiva y persona-
lista. Entre otras cosas, la fijeza de la retrospectiva apa-
rece evidentemente contraria al universo de posibilidades
que esa identidad fabricada ha llegado a contener, y la cro-
nología es con frecuencia irrelevante para un mapa concep-
tual que se relaciona en saltos y ecos a lo largo del tiempo.
Con ello en mente, una muestra que aluda a la lógica del
trabajo que Amorales representa debe ser también un
mapa cambiante, un juego de máscaras, una corriente de
ideas y acciones.
Axiomas para la acción reemplaza la narrativa por
una exhibición itinerante y transformable. Propone a las
instituciones y curadores que desean adoptarla la expe-
riencia de revisar más de dos décadas de la carrera de
Carlos Amorales interpretando, en una variedad de mues-
tras diferentes, los principios con que este trabajo opera,
más que una colección determinada de obras específicas.
19
El núcleo de cada una de esas muestras es un texto teórico
del artista titulado “Axiomas para la acción”, el cual define
los ejes que han constituido su obra como una investigación
orgánica, a pesar de su expresión multiforme. Ese programa
mental y anímico viene acompañado por una amplia lista
de obra que, a modo de un menú, puede usar cada institu-
ción y curador para escenificar de modo variable el trabajo
y texto de Amorales. Las muestras resultantes, además de
un ejercicio de interpretación y una acción en sí mismas,
permitirán mostrar este trabajo en una variedad de escalas
y posibilidades materiales, arquitectónicas y organizativas.
En ese sentido, cada muestra será una interpretación de la
matriz del trabajo del artista y su estudio, al mismo tiempo
que un compendio de su obra.
Esta publicación ofrece, además de los instrumentos
de esa propuesta de exhibición transformable, una serie de
textos del artista que brindan también cortes y vistas
al desarrollo de la espiral de sus obras y pensamiento,
lo mismo que textos de un puñado de autores que se
sumergen, también a su modo, tanto en ríos y cavernas,
como en las mirillas que, perversamente, nos invitan a
atisbar entre los muros.
23
1.
1. Primer conjunto de axiomas. Es la generación de una forma Axiomas para la acción 1.1
de interfaz a partir del Yo del artista, para articular la acción en Elaboración de un formato escrito que posibilita la permutación
el espacio localizado entre lo privado y lo público, en particular entre el afuera y el adentro del mundo del arte, a través de la
entre el espacio del mundo del arte y el de otras industrias. identidad.
La interfaz es un objeto que supone el anonimato de sus usua-
rios, escondidos tras un alias (Amorales). Axiomas para la acción 1.2
Dada la permutación escrita, el artista sale del mundo del arte
2. Segundo conjunto de axiomas. Es la exploración para para observar y documentar la realidad de otras industrias.
activar la interfaz en el espacio público, mediante performances La documentación de estas acciones podría llegar al mundo
que definen las características de la interfaz (la amoralidad) y del arte.
la paulatina desaparición del artista.
Axiomas para la acción 1.3
3. Tercer conjunto de axiomas. Se genera un espectáculo pro- El artista comisiona a un artesano la confección de un objeto
fesional de lo privado en lo público. A los conceptos dialécticos que lo representa (una interfaz), y lo entrega a un no-artista
del espectáculo (el bien contra el mal) se suma el concepto de para que lo use como si fuera el artista.
“lo amoral”, suspendiendo la narrativa clásica en favor de la
forma. La interfaz gana independencia conforme el artista Axiomas para la acción 1.4
la diluye entre múltiples usuarios. El artista retorna al mundo del arte y duplica el objeto que lo re-
presenta (la interfaz), estableciendo la posibilidad de multiplicar
4. Cuarto conjunto de axiomas. La interfaz deviene lenguaje. su identidad. Se otorga un nombre a la interfaz-personaje.
El artista desarrolla una plataforma de trabajo que utiliza
herramientas, con las cuales genera contenidos enmascarados, Axiomas para la acción 1.5
que se diseminan en la sociedad. Después, se voltea la interfaz-personaje de adentro hacia afue-
ra, mostrando que es un recipiente: el objeto se hace evidente
como artificio (vemos sus costuras). La representación visual
de la interfaz deviene herramienta.
La máscara de Amorales
Retrato del artista comisionado a un fabricante de máscaras y
entregado a un escritor para que lo usara en su ausencia en una
academia de arte.
Archivo de diapositivas
Registro del proceso de construcción del personaje a partir de
las preparaciones del primer viaje en el que el artista usó la
cámara como una máscara y fotografió lugares y personas de su
vida privada.
Interim performance
Sobre una plataforma cuadrada, instalada en una feria para
artistas jóvenes, se presentó un personaje enmascarado, que
representaba al artista, hablando al micrófono. El personaje
se autonombró “Amorales”, y posteriormente introdujo a
varios de los artistas como si fueran retadores para un comba-
te. Mediante este gesto, se hizo hincapié en la competencia
entre artistas al mismo tiempo que se presentaba al personaje
por primera vez en público. Esta acción fue filmada por el artis-
ta, quien circulaba alrededor de la plataforma, ubicado entre el
público y el personaje.
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Amorales interim máscara, al no tener facciones faciales, frustraba el contacto
Sobre una plataforma cuadrada, el Amorales prestó un par de visual con el performer, estableciendo una distancia irónica.
máscaras de él mismo a algunos artistas para que se enfrentaran
cuerpo a cuerpo en un juego inventado consistente en sacar al Los mutantes
otro del encuadre de la cámara. Propuesta para utilizar conceptos y estrategias del arte en el
trabajo con niños de la calle. En colaboración con Joan Jonas,
Ray Rosas (Fragmentos de una conversación) artista estadounidense, se indagó sobre la forma en cómo uno
Durante la confección de la máscara, el artista realiza una entre- es visto por los demás, asesorando a los niños para que se vis-
vista al creador, un ex luchador que cuenta la historia de su vida en tieran de turistas y visitaran los lugares típicos en donde piden
relación con las máscaras y los personajes ficticios que encarnó dinero. Se pidió a los niños que tomaran la responsabilidad
en el mundo de la lucha libre. Conforme el artista se prueba la de enseñarle a hablar español a Michael Blum, artista francés,
máscara, ésta toma forma, mientras que oculta paulatinamente invirtiendo los papeles de dar y recibir. Este proyecto buscó es-
su identidad, al tiempo que la entrevista revela momentos cada tablecer, mediante la experiencia, un precedente personal en la
vez más íntimos. memoria de los niños, para ser usado en su favor.
Never Say in Private What You (Won’t) Say in Public Fantasía de Orellana
Libro, editado por Carlos Amorales e Isaac Olvera, diseñado por Cortometraje, hecho en colaboración con Julián Lede, que
Iván Martínez y Laura Pappa, y publicado por One Star Press; registra las sombras, proyectadas sobre una pantalla, del com-
que recopila el procedimiento intelectual para la realización de positor experimental guatemalteco Joaquín Orellana y sus
la película El hombre que hizo todas las cosas prohibidas (2014). instrumentos musicales, mientras dirige una versión propia, co-
Estructurado en ocho partes, incluye bocetos gráficos, mensajes misionada por el artista, del tema “El aprendiz de brujo” de la
de correo electrónico, conversaciones durante los ensayos, el película Fantasía, de Walt Disney.
manifiesto del “cubismo ideológico”, así como intervenciones
en la prensa. El aprendiz de brujo
Se fotocopió sucesivamente la secuencia completa de “El
Buró fantasma aprendiz de brujo” de la película Fantasía, de Walt Disney, para
Aprovechando la escasa capacidad del periódico Excélsior, de proyectarla, partida por la mitad, en una secuencia animada.
circulación nacional en México, para llenar los espacios de algu-
nas de sus secciones, se realizaron inserciones secretas y anóni- Constelación triangular
mas, en complicidad con el editor, de artículos que mezclaban La escultura móvil consiste de 16 triángulos de acero cromado,
ficción y realidad. Para escribir estas notas se creó una agencia adheridos a un eje de 15 barras de acero interconectadas y
de noticias, basada en el grupo de escritores liderado por Sal- pintadas de negro mate. Los triángulos decrecen en tamaño
vador Novo: El Buró Fantasma. Los artículos han alimentado la progresivamente, de arriba hacia abajo. El triángulo de la punta,
investigación para proyectos fílmicos y performáticos del artista. suspendido a tres metros del suelo, se puede tocar. La obra crea
una idea visual del sonido, susceptible de activarse físicamente:
Psicofonías en ocasiones especiales, la escultura será percutida.
Esta doble proyección despliega imágenes desde un programa
de computadora que interpreta la estructura digital de dibujos
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Primera parte Leí este libro meses antes de viajar al norte de México para
visitar a mi abuela. El año anterior ella había sufrido un
ataque al corazón. Después de eso, su salud no se recuperó
del todo y los días anteriores a mi visita se había sentido mal
nuevamente. Viajé con mis hijos, quienes en ese entonces
tenían dos y cuatro años; deseaba que la conocieran y la
recordaran por su propia cuenta. También viajé para despe-
dirme: posiblemente sería la última oportunidad para verla.
Mientras estuvimos ahí, una noche que no lograba
dormir visualicé una imagen: una bóveda infestada de
mariposas negras, completamente saturada. Es raro que yo
trabaje imágenes mentales de ese estilo, que se me ocurran
Acabo de leerles un fragmento de Austerlitz, la última y las trate de materializar; pero esta imagen era diferente,
novela que escribió el alemán W.G. Sebald, antes de morir algo era muy claro en ella.
en un accidente automovilístico. El libro narra la vida de un
niño en la segunda guerra mundial, quién es separado de
sus padres y llega refugiado a Gales a vivir en la casa de un
predicador y su mujer. La problemática del protagonista se
basa en la memoria: el primer recuerdo que posee es su
llegada a una estación de tren, olvidó el resto de su infancia.
La prosa es densa y oscura, una descripción minuciosa de
diversos temas y escenarios que se suman a otros recursos,
aparentemente inconexos, entre ellos una serie de foto-
grafías que se insertan entre pasaje y pasaje. Es solo a
partir de la segunda mitad del libro cuando el lector puede
inducir que las referencias visuales representan la búsqueda Cuando regresé a mi estudio en la Ciudad de México,
del recuerdo perdido o “reconstruyen” esa ausencia de describí esta imagen al equipo y comenzamos a pensar en
recuerdos para el personaje. cómo realizarla. Lo primero que hicimos fue compilar un
archivo fotográfico de una variedad de especies de palo-
millas nocturnas. Generalmente baso mis dibujos digitales
en fotografías que, por razones intuitivas y personales, voy
recopilando para luego trazar su silueta sobre ellas.
Segunda parte
El conjunto:
Tercera parte
En el lobby de un edificio:
Fue por esos días cuando una amiga, quien leía Austerlitz, me
mostró en el libro la fotografía de una mariposa negra que
acompañaba la descripción con la que inicia esta conferencia. Un final feliz
Ideales que año tras año nos impulsan a lograr los objetivos
FIN
Dibujos: Enrique Arriaga Celis, Javier Barrios, Iván Chávez Reyes, Carolina
Fusilier, Gabriela Galván Hernández, Oscar Garduño y Elsa-Louise Manceaux.
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Terre,1 curada por Jean-Hubert Martin, donde por primera atributos que eran atípicos en la sociedad europea: lo
vez se incluía en una exposición de gran escala el trabajo colorido, lo surrealista, lo salvaje, lo mágico, lo infantil y lo
de artistas no-occidentales y se mostraba equitativamente ingenuo. Todos estos atributos se han sustentado histórica-
junto con obras de artistas occidentales de la misma gene- mente en las artes visuales, desde la fascinación dadaísta
ración. Esta exhibición se planteó como un contraargu- por el arte negro a principios del siglo XX, y más tarde
mento a las exposiciones etnocentristas, alejándose del recuperados por el movimiento Cobra, hasta las imágenes
modelo colonialista establecido en el siglo XIX pero que literarias producidas por los escritores latinoamericanos
aún existía en 1984, como en la exposición Primitivism in del realismo mágico. Desde esta lógica, yo quería distan-
20th Century Art: Affinity of the Tribal and the Modern2 que ciarme radicalmente de dichas representaciones folclóricas,
se llevó a cabo en el MoMA de Nueva York y que, como su puesto que me identificaba con una estética postpunk (09),
título evidencia, aún perpetuaba la mentalidad colonialista que para mi generación ya suponía un deseo por un len-
en la era posmoderna. guaje internacional. Al ser un artista joven, evidentemente
Les Magiciens de la Terre es significativa para mi anhelaba aprender de la cultura del lugar al que había
generación porque creó la percepción de que los artistas llegado, pero en este nuevo contexto se me exigía que
no occidentales podíamos participar en el mundo del arte. produjera obras acorde con la fantasía que se tenía sobre
Pese a las buenas intenciones del curador, su visión no mi cultura. En el campo del arte se había establecido una
alcanzó a reconocer la realidad moderna de los países no- dinámica en la cual el intercambio cultural se basaba en la
occidentales, y por lo tanto generó una lectura exotizante representación de la identidad cultural.
de la obra “de la periferia”. Según esta persistente narra- Cuando se integra, el extranjero pierde su colorido
tiva colonial, este tipo de arte existe fuera de la historia, en y se torna gris. Para un artista joven, esto es un problema
el terreno de la magia, sin tomar en cuenta que en muchos de supervivencia: necesita hacer un tipo de arte que a su
países no-occidentales la modernidad y sus corrientes esté- vez sea colorido y gris. A mediados de la década de los años
ticas se enraizaron temprano y florecieron en abundancia. noventa, debido a la incipiente masificación del internet y
A pesar del gesto incluyente, la gran mayoría de a los medios digitales que comenzaban a implementarse en
los artistas no-occidentales invitados a Les Magiciens las instituciones educativas, el término “interfaz” se volvió
de la Terre volvieron a la oscuridad, excepto unos cuantos importante, en su acepción de “interfaz de usuario”, el cual
cuya obra no era exótica al ojo occidental y que con el se refiere al dispositivo que permite la interacción entre
tiempo fue asimilada por el gusto occidental. No obstante personas y computadoras mediante metáforas gráficas
sus carencias, la exposición contribuyó enormemente a que representan objetos o lugares cotidianos para activar
que las instituciones artísticas europeas y norteamericanas funciones digitales de una manera sencilla. Las metáforas
abrieran sus puertas a artistas árabes, africanos, asiáticos gráficas son una serie de iconos que sirven para operar
y latinoamericanos, conformado así el primer esbozo de lo entre el adentro y el afuera de la máquina, posibilitando la
que más tarde se transformaría en el mundo del arte con- interacción entre ambos espacios. A estos iconos, que sig-
temporáneo globalizado. nifican y a la vez funcionan como herramientas, les llamaré
Durante mi larga estancia en Ámsterdam, la menta- “herramientas-signo”.
lidad del mundo del arte europeo cambió gradualmente. Otro aspecto de las “interfaces de usuario”, en cuanto
Pasó del chovinismo a la fascinación por la imagen exótica a su funcionamiento en la pantalla de la computadora, es
de la “otredad”, proyectando en los artistas no occidentales que se despliegan superponiéndose capa sobre capa, como
sucede cuando abrimos varias ventanas en el navegador de
internet o tenemos diferentes programas abiertos simul-
1— Disponible en: <https://magiciensdelaterre.fr/>.
táneamente. Ocurre de una manera similar a la forma en
2— Disponible en: <https://www.moma.org/calendar/exhibitions/1907>. la que en las casas tradicionales japonesas se divide el
20— Carlos Amorales, Never Say in Private What You (Won’t) Say in Public,
19— Disponible en: <http://www.museoreinasofia.es/en/exhibitions/colectivo-ac- París, One Star Press, 2014. Disponible en: <http://www.onestarpress.com/
ciones-arte-cada-1979-1985>. files/2016-03/amorales-carlos-never-say.pdf>.
22— Ronald Kay, “Vivimos un tiempo sin futuro”. Disponible en: <http://www.
nuestro.cl/notas/perfiles/ronald_kay3.htm>. 23— Disponible en: <http://www.mnba.cl/617/w3-article-8965.html>.
Páginas 132-133: Las masas, 2017. Concierto de Cyclops en colaboración con Philippe
Eustachon y Enrique Arriaga. Cabaret Voltaire, Zürich, 2016. Video HD, blanco/negro
y color con sonido. Duración 47’. Foto: Estudio Amorales. Archivo del artista 135
La casa vacía La casa perdida
¿Importa en absoluto qué agrego Sólo cuando olvido todas las intenciones
a este documento? ¿Alteraría de escribir algo digno de mi bicicleta
en algo si no firmé el contrato y tomo una pluma para disparar palabras al oficial
13 6 MARIA BARNAS LA MATERIA DEL LENGUAJE VISTA DESDE TRES DE MUCHAS CASAS 137
La casa imaginada
13 8 MARIA BARNAS
Black Cloud, 2007. 40,000 polillas de papel, dimensiones variables de
acuerdo al espacio. Foto: Bill Orcutt. Colección Diane and Bruce Halle
Dark Mirror, 2008. Resina y pintura automotiva. 400 × 245 × 40 cm
Foto: Stephen Brayne. Colección Boris Hirmas
Discarded Spider, 2008. Still. Cortesía del artista y kurimanzutto
El estudio por la ventana, 2010. Foto: Diego Pérez. Colección Jumex
Páginas 148-151: Naturaleza Negativa 01-04, 2012
14 8 Foto: Didier Barroso. Cortesía del artista y kurimanzutto 149
15 0 151
Un aspecto inusual de las obras y prácticas extraordinaria-
Carlos Amorales desde mente diversas de Carlos Amorales es su referencia insis-
tente, explícita y entusiasta a lo que se ha dado en llamar
una perspectiva dadaísta vanguardia histórica. En el punto de encuentro entre lo
político y lo estético, los movimientos de la primera parte
— del siglo XX —el cubismo, el futurismo, el constructivismo
DAWN ADES y, sobre todo, el dadaísmo— fueron rupturas sucesivas con
la tradición. La creciente “desterritorialización” de la van-
guardia, especialmente con el movimiento internacional
dadaísta en sus manifiestos, tan distintos como sus manifes-
taciones entonces en, por ejemplo, Zúrich y Berlín, ha sido un
factor clave en sus historias.1 Frente a los modos de expre-
sión arraigados en el arte y la literatura, los movimientos de
vanguardia deshicieron esas certezas y encontraron medios
alternativos de creación. Pero el despliegue de objetos ready-
made y encontrados, de todo tipo de materiales no artísticos,
el uso del collage, el azar y los procedimientos automáticos
con los que gente como Marcel Duchamp y Hans Arp recha-
zaron la pintura moderna, se han integrado tanto en el arte
contemporáneo y han pasado por tantas iteraciones que su
desafío original a la capacidad del arte para comprometerse
de manera crítica con la modernidad podría quedar olvidado.
Amorales alude no sólo al dadaísmo, sino también al
cubismo y el suprematismo. “Aludir” es probablemente
una palabra demasiado débil para su interés voraz y sin
inhibiciones, cuya fuerza radica en gran medida en la
ausencia de paralelos o referencias visuales directas en
su propia obra, mientras que arroja una nueva luz sobre,
por ejemplo, las obras de Hans Arp, uno de los dadaístas
“nucleares” en Zúrich y Colonia, viéndolos desde una pers-
pectiva diferente que los desempolva y les da vida.
Comparte, también, una actitud escéptica hacia el arte.
Su pregunta tautológica: “¿Existe el arte fuera del mundo
del arte?”, tiene un paralelo definitivo con la pregunta que
se planteó Duchamp, que resume su meditación sobre la
naturaleza y el estado del arte alrededor de 1914: “Com-
ment faire un œuvre qui n’est pas d’art?” Esto condujo a
Duchamp a un concepto que tiene —ya sea que se le celebre
El no me mires, 2015. Película digital en color y con sonido. Duración 50’. Cortesía del artista y kurimanzutto 153
o reproche— una gran influencia en el arte contemporáneo: apoyan un arte o una poesía socialmente comprometidos y
el ready-made. La influencia del puñado de objetos manufac- aquellos que los niegan, le parecieron “como las múltiples
turados ready-mades que Duchamp escogió, dándoles una perspectivas de un cuadro cubista”.4
“nueva intención”, ha superado gradualmente los medios Entre las contradicciones y disonancias dentro del
tradicionales de creación como la pintura y —junto con el dadaísmo se encuentran las actitudes hacia la abstrac-
objeto surrealista, siempre hecho de materiales cotidianos ción frente a la calle y lo popular como materia prima.
existentes— ha transformado la producción del “arte”. La abstracción, el azar, el automatismo y la eliminación
El “mundo artístico” con el que tiene que vivir Amo- de las barreras entre lo visual, lo verbal y lo auditivo esta-
rales no existía antes de la segunda guerra mundial, pero llaron espontáneamente como nuevas herramientas con el
las preguntas acerca del papel del arte en la sociedad eran dadaísmo en Zúrich. Hugo Ball escribió: “El hecho de que
igual de apremiantes. La idea, por ejemplo, de que el arte la imagen del hombre esté desapareciendo poco a poco de la
existía para apuntalar el honor y el Estado-nación, en medio pintura de esta época y que todas las cosas ya no aparezcan
de la primera guerra mundial, era totalmente inaceptable más que en estado de descomposición es otra prueba de lo
para el dadaísmo. Así Tristan Tzara, en uno de sus muchos desagradable y manido que se ha vuelto el rostro humano y
manifiestos, señaló: “El arte es una PRETENSIÓN calentada lo abominable de cada uno de los objetos de nuestro entorno.
en la TIMIDEZ del orinal, la histeria nacida en EL ESTUDIO”. La poesía ya está casi decidida a abandonar el lenguaje por
Hugo Ball, fundador del dadaísmo en Zúrich en 1916, planteó razones análogas”.5 Ball mismo ideó un nuevo lenguaje
la pregunta de otra manera: “No puedo encontrar acuerdo poético con palabras sin sentido, y señaló: “hemos llevado
alguno entre el socialismo y el arte. ¿Dónde está el camino la plasticidad de la palabra hasta un punto que difícilmente
que une el sueño con la realidad y, además, el sueño más podrá ser superado”.6 Con los poemas fonéticos de Ball y de
remoto con la realidad más banal? ¿Dónde está el camino Hausmann en el dadaísmo berlinés, se exige una dimensión
hacia una productividad social de este arte en particular; una visual, de manera que se pone énfasis y se amplían las letras
aplicación de sus principios que sea más que un arte?”2 El individuales, como en el “Poema optofonético” de Hausmann.
dadaísmo, en efecto, era una masa de contradicciones, como Para su fmsbw, Hausmann hizo una plantilla de enormes
la vida. “El dadaísta […] sabe que la vida se afirma en la con- letras en un papel de tamaño cartel y lo declamó.
tradicción y que su época tiende a la aniquilación del impulso Arp atribuyó sus collages de papel recortado, geomé-
generoso como ninguna otra anteriormente. Por ello, da por tricos como son, a operaciones del azar; luego comenzó a
bienvenido cualquier tipo de máscara, cualquier juego del hacer dibujos “automáticos” basados en las formas aleatorias
escondite al que vaya aparejada una potencia de engaño. En de piedras, madera de deriva, hierbas, a su vez las fuentes de
medio de esta enorme anti-naturaleza directo y primitivo le las formas orgánicas abstractas de sus xilografías y relieves
parecen lo sobrenatural mismo”.3 Haciendo a un lado la cues- en madera. Amorales tiene una visión original de las ope-
tión de las máscaras, que para Amorales también han sido raciones de Arp con estas formas, desde la perspectiva de
un recurso vital, las contradicciones dentro de la vanguardia, su propia exploración de códigos y alfabetos inventados, así
mientras exploraba su historia reciente en Chile, lo llevaron como de su vasto atlas de siluetas digitales, Archivo líquido.
a idear el término “cubismo ideológico”, para expresar la Le da crédito a Arp, sin duda con razón, por inventar un
colisión de perspectivas ideológicas, políticas y poéticas. medio de hacer arte en una escala prácticamente industrial.
Izquierda y derecha, anarquistas y fascistas, aquellos que Arp tenía experiencia en procesos de impresión mientras
2— Hugo Ball, La huída del tiempo, Roberto Bravo de la Varga (trad.), Titivillus, 4— Carlos Amorales, “Una máscara toca la flauta”, en esta misma publi-
entrada del diario 5.III, p. 83. Disponible en: <http://assets.espapdf.com/b/ cación, p. 72.
Hugo%20Ball/La%20huida%20del%20tiempo%20(13383)/La%20huida%20
del%20tiempo%20-%20Hugo%20Ball.pdf>. 5— Ball, op.cit., entrada del diario 5.III, p. 55.
3— Hugo Ball, op.cit., entrada del diario 12.VI, p. 59. [traducción modificada] 6— Ball, op.cit., entrada del diario 18.VI, p. 61.
7— Carlos Amorales, “Una máscara toca la flauta”, en esta misma publi- 8— T. J. Clark, “Reinstall the footlights (T.J. Clark on the art of the Russian Rev-
cación, p. 72. olution)”, London Review of Books, 16 de noviembre de 2017, pp. 10-12.
Useless Wonder, 2006. Animación. Color con sonido. Duración 8’36” 175
su estudio de trabajo en el espacio de exhibición (Natura- de identidades podía convertirse en un medio de interven-
leza negativa, 2012-2018), al evocar el proceso por el cual ción artístico. Como es bien conocido, se propuso inventar
ese espacio de trabajo sirve como estación temporal de una un personaje de lucha libre cuyos rasgos estaban basados
constante migración de plataformas y signos culturales, en su apariencia física: una máscara del anonimato y la
haciendo del estudio una interfaz más. neutralidad emocional, una especie de signo vacío del catá-
No sólo es que los caminos que las obras de Amorales logo de personajes y gestos de fantasía que dan cuerpo a
recorren una diversidad de apariencias y referentes, geo- los héroes del ring. La máscara de Amorales permitió al
grafías y emociones, signos y temporalidades, más radical artista explorar, en los siguientes años, toda una gama de
es que suponen de un modo u otro la creación de disposi- situaciones sociales y artísticas, mediante un instrumento
tivos, agentes, códigos y procedimientos que sabotean toda que era una duplicación irónica de su persona. Por un lado
costumbre de identificación, y desplazan la invención hacia ofrecía la posibilidad de la multiplicación de su presencia,
una estructura e identidad fabricadas. En ese sentido, en una puesta en acto del círculo vicioso de su identidad.
“Amorales” es al mismo tiempo un símbolo, una marca, un Pero también, de modo más ambicioso, la intervención
actor y un gerente de una variedad de agenciamientos del espacio profesional de la lucha a la vez que el del
artísticos: es el punto de convergencia de un teatro de per- performance global, en términos de escenificaciones y
petua escenificación. entrevistas, diálogos y videos formalizados, basados en su
La suya es una obra sistemáticamente mediada por lo artificio post-popular. El proyecto demostró ser una matriz
que el artista llama interfaz,3 un artefacto de artefactos, continua de ideas, choques sociales y experiencias: el desa-
una producción del productor, la actuación sobre el agente, rrollo de todo un repertorio de variaciones y perversiones
la representación del medio de representación. “Amorales” de roles sociales teatralizados y de las posibilidades de la
no es un individuo ni únicamente su rostro público: es el experiencia enmascarada de la cultura.
campo de operación de una serie de actos que constituyen El distanciamiento e instrumentación de la producción
formas de relación social y estética. artística que Amorales designa como “interfaz” en términos
El punto de irradiación de esos episodios de maquina- de la superficie de comunicación e inscripción, comercio
ción cultural es, de hecho, un trastocamiento de la identidad y representación, contacto e interacción entre individuos,
personal y uno de sus principales vehículos, el nombre dispositivos sociales, artefactos, aparatos e imágenes,4
propio. En 1996, el joven Carlos A. Morales tuvo un par de esa doble cara interna donde operan sus dispositivos sociales
iluminaciones acerca del poder que el control de la iden- e imágenes, ha demostrado a cada paso una productividad
tidad representa en el campo de posibilidades del escenario formidable. La multitud de acciones y obras que el artista
urbano: la experiencia de ver un puesto de venta de más- hizo emerger de insuflar de vida y leyenda al luchador
caras de luchadores en el centro de la Ciudad de México lo Amorales por media década,5 vino a continuarse en la
indujo a realizar un proyecto en el que disfrazó a jóvenes máquina de imágenes y relatos animistas derivados de alre-
depauperados para aparecer como turistas y experimentar dedor de cuatro mil dibujos vectoriales del Archivo líquido,
su entorno desde una posición social empoderada. Com-
probar cómo los poderes de transformismo que la lucha
4— Esta noción de punto de contacto involucra tanto el uso generalizado de la
libre escenifica semana a semana podían interferir la per- noción de interfaz para describir el ambiente y lenguaje que permite la interacción
cepción de los individuos sobre sí mismos, y su rango en las entre computadoras y usuarios, como el significado más amplio del término como
interacciones con los demás, le mostró que la construcción lo consigna el diccionario: “Conexión física o funcional entre dos aparatos o sis-
temas independientes”, Diccionario de la Real Academia española, vol. 6, p. 874.
CARLOS AMORALES
(Ciudad de México, 1970) Artista multidisciplinario que explora
los límites del lenguaje y los sistemas de traducción cultural.
Emplea la producción gráfica como herramienta para el desa-
rrollo de estructuras lingüísticas que dan pie a nuevas formas de
interpretación y a modelos de trabajo alternos que promueven
la colectividad. Su práctica se extiende a diversos medios como
dibujo, pintura, escultura o collage; así como performance, insta-
lación, animación, sonido, cine y escritura, entre otros formatos
no tradicionales.
Las investigaciones más extensas en su trabajo comprenden
Los Amorales (1996-2001), Archivo Líquido (1999-2010), Nuevos
Ricos (2004-2009), y una exploración tipográfica en el cruce con
el cine (2013-presente).
Entre sus numerosas exposiciones individuales se encuen-
tran: Black Cloud, Power Plant, Toronto (2015); El esplendor
geométrico, kurimanzutto, México (2015); Germinal, Museo
Tamayo, México (2013); Nuevos Ricos, Kunsthalle Fridericianum,
Kassel (2010); Four Animations, Five Drawings and a Plague,
Philadelphia Museum of Art (2008); Discarded Spider, Cincinnati
Art Center (2008).
De sus exposiciones colectivas destacan: Under the Same
Sun. Art from Latin America Today, Guggenheim Museum,
Nueva York (2014); New Perspectives in Latin American Art,
MoMA, Nueva York (2007); Mexico City: an Exhibition about the
Exchange Rate of Bodies and Values, MoMA PS1, Nueva York
(2002), entre otras.
También ha participado en bienales como Manifesta 9,
Bélgica (2012); Bienal de la Habana, Cuba (2015 y 2009); Performa,
Nueva York (2007); Bienal de Berlín (2001 y 2014); Bienal de
Quebec (2017); y la Bienal de Venecia (2003 y 2017).
Izquierda: El estudio por la ventana, 2010. Detalle. Foto: Diego Pérez. Colección Jumex 197
CRÉDITOS DE EXPOSICIÓN AGRADECIMIENTOS
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Concepto de la exposición Conservación y registro El Museo Universitario Arte Contemporáneo, MUAC, agradece
Carlos Amorales Julia Molinar a las personas e instituciones cuya generosa colaboración hizo
Cuauhtémoc Medina posible la muestra de la exposición Carlos Amorales. Axiomas
Juan Cortés
Claudio Hernández para la acción.
19 8 199
CARLOS AMORALES. AXIOMAS PARA LA ACCIÓN se terminó
de imprimir y encuadernar el 7 de febrero de 2018 en los talle-
res de Offset Rebosán S.A. de C.V., Acueducto 115, col. Huipulco,
Tlalpan, Ciudad de México. Para su composición se utilizó la
familia tipográfica Linotype Centennial, diseñada por Adrian
Frutiger. Impreso en papel Bond blanco 120 g y Domtar Lynx
216 g. Diseño y supervisión de producción Periferia. El tiraje
consta de 700 ejemplares.
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MUAC 062