Este documento discute el derecho a la identidad étnica y cultural reconocido en la Constitución peruana de 1993. Explica que este derecho protege la diversidad étnica y cultural del país y garantiza que las personas puedan usar su propio idioma ante las autoridades a través de un intérprete. También analiza los conceptos de identidad étnica y cultural, y cómo el reconocimiento y respeto de las diferencias culturales es importante para sociedades plurales.
Este documento discute el derecho a la identidad étnica y cultural reconocido en la Constitución peruana de 1993. Explica que este derecho protege la diversidad étnica y cultural del país y garantiza que las personas puedan usar su propio idioma ante las autoridades a través de un intérprete. También analiza los conceptos de identidad étnica y cultural, y cómo el reconocimiento y respeto de las diferencias culturales es importante para sociedades plurales.
Este documento discute el derecho a la identidad étnica y cultural reconocido en la Constitución peruana de 1993. Explica que este derecho protege la diversidad étnica y cultural del país y garantiza que las personas puedan usar su propio idioma ante las autoridades a través de un intérprete. También analiza los conceptos de identidad étnica y cultural, y cómo el reconocimiento y respeto de las diferencias culturales es importante para sociedades plurales.
19. A su identidad tnica y cultural. El Estado reconoce y protege la pluralidad tnica y cultural de la Nacin.
Todo peruano tiene derecho a usar su propio idioma ante cualquier autoridad mediante un intrprete. Los extranjeros tienen este mismo derecho cuando son citados por cualquier autoridad.
El reconocimiento de estos derechos es un aporte novedoso de la Constitucin de 1993. La Carta de 1979 no consign estos asuntos como derechos formales. Cada persona tiene un conjunto de caractersticas propias que constituyen su identidad, es decir, lo que ella siente ser y la define como un ser nico en relacin a los dems. Algunos elementos de la identidad son individuales y exclusivos de la persona (sus rasgos genticos, su apreciacin de los valores, sus preferencias en todos los mbitos de la vida, sus convicciones, etc). Otros son elementos de su identidad que comparte con otros seres humanos y que la hacen formar parte de grupos ms amplios. Tales los casos de su identidad tnica y de su identidad cultural.
La identidad tnica se refiere a los rasgos de raza que son propios del sujeto y que comparte con los dems que pertenecen a ella. Desde luego, tambin las razas se entremezclan y entonces aparecen muchas personas que tienen pertenencia tnica a diversas formas de mestizaje. La raza mestiza particular ser tambin la identidad cultural de quien pertenece a ella.
El concepto de identidad tnica tiene dos componentes fundamentales.
el primero consiste en que cada ser humano tiene derecho a mantener sus rasgos tnicos como un valor propio, tanto en s mismo como en relacin a todos los dems seres humanos que los comparten El segundo, es que tiene derecho a que su etna sea considerada como un valor particular y distinto, perteneciente al acervo de valores de la humanidad, tanto en la sociedad en la que vive como en el mundo entendido globalmente.
La primera dimensin de la identidad tnica es de contenido correspondiente a quienes la comparten: es subjetiva de cada uno de ellos.
La segunda est referida al respeto que los dems deben tener de las etnas a las que no pertenecen y est muy conectada al principio de no discriminacin tambin contenido en la Constitucin 126.
La identidad cultural es anloga a la identidad tnica, pero se refiere esta vez a la pertenencia cultural de la persona, es decir, a su cosmovisin de la vida. La cultura es en definitiva la manera de vivir y, como tal, forma parte esencial de la persona, de su libertad de opinin y de expresin, as como tambin de la cabal formacin de su personalidad. Como hemos dicho ya al comentar otras disposiciones constitucionales, existen diversos conceptos de cultura. Para los efectos de su inclusin como asunto constitucionalmente reconocido y protegido, debe entenderse como la visin global de la vida y del entorno que rodea a cada persona, contribuyendo a definir elementos bsicos de su identidad personal y de su armnica inclusin social.
La cultura se hace en la historia y su acumulacin es bsicamente social. Es la sociedad a la que pertenecen los individuos; cada cual recibe y toma los elementos que contribuyen a su identidad, razonabilidad y socializacin.
En esa perspectiva, identidad nacional y cultura son dos cuestiones intrnsecamente (bsico) vinculadas. Son las diversas aportaciones populares surgidas en un espacio comunitario las que van configurando, en el tiempo, la identidad nacional. La solidez de sta guarda relacin directa con los grados y formas de adhesin y reconocimiento a los productos culturales que vienen de la creacin individual y grupal, siendo aceptados como elementos de comn identidad 127.
Establecida esta concepcin global, consideramos que lo dicho sobre la identidad tnica es correspondiente a la identidad cultural: la dimensin subjetiva que pertenece a cada uno de quienes comparten dicha cultura, y la del respeto de los dems para cada cultura a la que no pertenecen, lo que a su vez tiene conexin con el principio de no discriminacin establecido constitucionalmente.
El Per es un pas pluritnico y pluricultural desde su nacimiento republicano, y los elementos esenciales de esta conformacin los hered ya desde la Colonia espaola. En su formacin participaron y participan an activamente varias tradiciones culturales provenientes de diversos pueblos nativos, del espaol y de otros que, como la poblacin africana y la china, inmigraron en diversas pocas.
Durante siglos, nuestro pas ha sufrido fenmenos de discriminacin tnica y racial y, si bien en los ltimos aos se notan procesos sociales tendientes a superar este fenmeno, estudios recientes demuestran que el racismo est an presente en nuestro medio con mucha fuerza y que, por la configuracin particular de nuestra sociedad, racismo significa simultneamente discriminacin tnica y cultural.
Gonzalo PORTOCARRERO sostiene que en el Per el racismo engloba dos hechos concretos: la desvalorizacin de las culturas no occidentales y la deshumanizacin de las personas de color.
En esa medida, "el prejuicio etnocntrico est mucho ms extendido que el racismo, y no se refiere a la inferioridad de una raza sino a la superioridad de la cultura moderna-occidental: mientras que el prejuicio racial reproduce la desintegracin social, el etnocntrico puede llevar a la fusin de grupos en un contexto de subordinacin o desaparicin de las culturas tradicionales"128.
Los estudios sobre pacificacin en esta materia recogen como opcin ms adecuada para el desarrollo de sociedades plurales en tnia y cultura, el lograr una convivencia de mutuo respeto a las diferencias l29. No se debe pretender que un da todos y cada uno de los peruanos compartan la misma raza y la misma cultura, sino que respetando diferencias, se interacte creativamente, produciendo nuevas sntesis que enriquezcan a la sociedad peruana y por ende a la humanidad.
Debe tenerse presente para este punto dos documentos internacionales de vigencia incontestable. El primero de ellos es la Declaracin sobre la raza y los prejuicios raciales, aprobada por la Conferencia General de la UNESCO el27 de noviembre de 1978, cuyo arto 2.1. afirma: "Toda teora que invoque una superioridad o inferioridad intrnseca de grupos raciales o tnicos que d a algunos el derecho de dominar o eliminar a los dems, presuntos inferiores, o que haga juicios de valor basados en una diferencia racial, carece de fundamento cientfico y es contraria a los principios morales y ticos de la humanidad" 13.
El segundo documento es la Declaracin sobre las personas pertenecientes a minoras nacionales o tnicas, religiosas o ligsticas, aprobado por la Asamblea General de las Naciones Unidas en su Resolucin 47/135 del 18 de diciembre de 1992. El art. 1 de la Declaracin dice a la letra: "Los Estados protegern la existencia y la identidad nacional o tnica, cultural, religiosa y lingstica de las minoras dentro de sus territorios respectivos y fomentarn las condiciones para la promocin de esa identidad"131.
En este contexto, resulta acertada la norma que dice: "El Estado reconoce y protege la pluralidad tnica y cultural de la Nacin". Que el Estado la reconozca quiere decir que acepta su valor como un aporte a la sociedad en su conjunto. Que la proteja quiere decir que debe desarrollar polticas de diverso tipo que permitan, precisamente, que todos alcancen un plano de igualdad y de mutuo respeto en los ms diversos terrenos de la vida social.
La segunda parte del inciso bajo comentario contiene una norma prctica y de justicia, consistente en que todo peruano tiene derecho a utilizar su propio idioma ante cualquier autoridad mediante un intrprete. Es una norma importante porque permite que la persona se exprese y comprenda, de la mejor manera, en la relacin con las autoridades del Estado. Por otro lado, es un refuerzo a los criterios constitucionales que proclaman la igualdad ante la ley y que prohiben cualquier tipo de discriminacin. Tambin es una garanta de trato justo, pues impedir que la incomprensin lingstica pueda conducir a perjuicios para quien no sabe expresarse adecuadamente en castellano o en el idioma oficial del lugar.
Hay que recordar que el artculo 48 establece que son idiomas oficiales el castellano y, en las zonas donde predominen, tambin lo son el quechua, el aimara y las dems lenguas aborgenes, segn lo establezca la ley. No obstante, debe recordarse que este importante dispositivo no se cumple cabalmente. La dominacin del castellano es un hecho del cual derivan situaciones de desventaja para quienes no hablan este idioma.
En el caso de los extranjeros se les permite utilizar su propio idioma mediante intrprete, pero slo cuando son citados por la autoridad132. El beneficio no est extendido, como en el caso de los peruanos, para cuando ellos recurran voluntariamente a la autoridad.