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Copyright © Grupo Ars XXI de Comunicación, S.L. Periodontology 2000 (Ed Esp), Vol.

l. 9, 2005, 165-203 Copyright © Blackwell Munksgaard


PERIODONTOLOGY 2000 (Ed Esp) PERIODONTOLOGY 2000
ISSN 1695-1808 ISSN 0906-6713

Diagnóstico, pronóstico y toma


de decisiones terapéuticas de las lesiones
periodontales-endodóncicas
combinadas
ILAN ROTSTEIN Y JAMES H.S. SIMON

La pulpa y el periodonto están estrechamente rela- neral y el 25% de los dientes anteriores en particular
cionados. A medida que el diente se desarrolla y se (132). Además, el mismo diente puede tener una UAC
forma la raíz, se crean tres vías principales de comu- con diferentes características, con exposición den-
nicación: los túbulos dentinarios, los conductos late- tinaria en un lado, mientras que otras zonas están
rales y accesorios y el agujero apical. cubiertos por cemento (162). Estos aspectos son im-
portantes al valorar la progresión de patógenos en-
dodóncicos (fig. 2), los efectos del raspado y alisado
Consideraciones anatómicas radiculares en la integridad del cemento y la reabsor-
ción radicular inducida por el blanqueamiento tras el
Túbulos dentinarios uso de peróxido de hidrógeno al 30 % (50, 78, 153,
154).
Los túbulos dentinarios expuestos en áreas de ce-
Otras zonas de comunicación dentinaria pueden ser
mento denudado pueden servir como vías de comu-
a través de los surcos del desarrollo, tanto palatogin-
nicación entre la pulpa y el ligamento periodontal (fig.
givales como apicales (173).
1). La exposición de los túbulos dentinarios puede de-
berse a defectos del desarrollo y enfermedad o trata-
mientos periodontales. En la raíz, los túbulos denti- Conductos laterales y accesorios
narios se extienden desde la pulpa hasta la unión entre
la dentina y el cemento (73). Su trayecto es relativa- Los conductos laterales y accesorios pueden pre-
mente recto y su diámetro de 1-3 µm (126). El diá- sentarse en cualquier lugar a lo largo de la raíz (fig. 3).
metro de los túbulos disminuye con la edad o como Su prevalencia y localización han sido bien docu-
respuesta a estímulos continuados de baja intensidad, mentadas, tanto en dientes humanos como de ani-
debido a la aposición de dentina peritubular altamente males (26, 44, 69, 101, 115, 141, 155).
mineralizada. El número de túbulos dentinarios varía Se estima que el 30-40 % de los dientes tienen con-
de aproximadamente 8.000/mm2 en la unión cemen- ductos laterales o accesorios y la mayoría de ellos se
todentinaria, a 57.000/mm2 en el extremo pulpar (126), encuentran en el tercio apical de la raíz (73). DeDeus
en el área cervical de la raíz hay unos 15.000/mm2 (73). (44) halló que el 17 % de los dientes tenían conduc-
Estos túbulos pueden ser denudados de su cobertura tos laterales en el tercio apical de la raíz, alrededor del
de cemento como resultado de enfermedad perio- 9 % en el tercio medio, y menos del 2 % en el tercio
dontal, procedimientos quirúrgicos, o durante el de- coronal. No obstante, parece que la prevalencia de en-
sarrollo cuando el cemento y el esmalte no se en- fermedad periodontal asociada con conductos latera-
cuentran en la unión amelocementaria (UAC), dejando les es relativamente baja. Kirkham (101) estudió 1.000
así áreas de dentina expuesta. Los pacientes que ex- dientes humanos con extensa enfermedad periodon-
perimentan hipersensibilidad dentinaria cervical son tal y sólo encontró un 2 % con conductos laterales lo-
un ejemplo de este fenómeno. calizados en la bolsa periodontal.
Estudios mediante microscopía electrónica de ba- Los conductos accesorios en la furca de los mola-
rrido han demostrado que la exposición de dentina res pueden ser una vía directa de comunicación en-
en la UAC se produce en el 18% de los dientes en ge- tre la pulpa y el periodonto (69, 115). La presencia de

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Rotstein y Simon

(A) (B)

Fig. 1. A) Imagen con microscopio electrónico de barrido aumento. Adviértase la ausencia de odontoblastos.
que muestra túbulos dentinarios abiertos. B) Vista a mayor

conductos accesorios varía entre el 23 y el 76 % (26, (64). Seltzer y cols. (163) observaron que la inflama-
64, 101). Estos conductos accesorios contienen tejido ción pulpar puede causar una reacción inflamatoria
conectivo y vasos que se conectan el sistema circula- en los tejidos periodontales interradiculares. La pre-
torio de la pulpa con el del periodonto. Sin embargo, sencia de conductos accesorios es una vía potencial
estos conductos no se extienden a través de toda la de diseminación de productos bacterianos y tóxicos,
longitud entre la cámara pulpar y el suelo de la furca que originan un proceso inflamatorio directo del li-
gamento periodontal (fig. 4).

Agujero apical
El agujero apical es la vía de comunicación prin-
cipal y más directa entre la pulpa y el periodonto. Los
productos bacterianos e inflamatorios pueden esca-
par libremente por el agujero apical y ocasionar pa-
tología periapical. El ápex es también el portal de en-
trada de productos de la inflamación procedentes de
bolsas periodontales profundas hacia la pulpa. La in-
flamación o necrosis pulpares se extienden a los te-
jidos periapicales provocando una respuesta local in-
flamatoria acompañada de resorción ósea y radicular
(fig. 5). El tratamiento endodóncico tiene como ob-
jetivo eliminar los factores etiológicos intrarradicu-
Fig. 2. Microfoto de bacterias en túbulos dentinarios abier- lares y permitir la curación de los tejidos periapica-
tos. les.

166
Lesiones periodontales-endodóncicas combinadas

en la pulpa es degenerativo por naturaleza, con au-


mento de la calcificación, fibrosis y resorción del co-
lágeno, así como un efecto inflamatorio directo (108,
118).
Al parecer, la pulpa no suele resultar directamente
afectada por la enfermedad periodontal hasta que la
retracción gingival ha abierto un conducto accesorio
hacia la cavidad oral. En esta etapa, patógenos que
penetran desde la cavidad oral, a través de los con-
ductos accesorios, hasta la pulpa pueden causar una
reacción inflamatoria crónica y necrosis pulpar. No
(A) obstante, en tanto los conductos accesorios estén pro-
tegidos por cemento sano, no suele producirse ne-
crosis. Además, si la microvascularización del agujero
apical permanece intacta, la pulpa mantendrá su vi-
talidad (108). El efecto del tratamiento periodontal so-
bre la pulpa es similar durante el raspado y alisado o
la cirugía periodontal si los conductos accesorios son
seccionados y/o abiertos hacia la cavidad oral. En ta-
les casos pueden presentarse invasión microbiana y
necrosis secundaria de la pulpa.

Factores etiológicos
(B) Patógenos vivos
Fig. 3. A) Radiografía postoperatoria que muestra múltiples Entre los patógenos vivos encontrados en una pulpa
conductos laterales en un segundo molar inferior con ra- enferma y los tejidos periapicales hay: bacterias (fig.
diotransparencias apicales y furcal. B) Radiografía de se- 6), hongos (fig. 7) y virus (fig. 8). Estos patógenos y sus
guimiento al cabo de 1 año que revela reparación ósea. productos pueden afectar al periodonto de muchas
formas y deben ser eliminados durante el tratamiento
de los conductos radiculares.
Enfermedad endodóncica
y periodonto Bacterias
Cuando la pulpa se necrosa, hay una respuesta in- La enfermedad endodóncica es causada por bacte-
flamatoria directa del ligamento periodontal al nivel rias (58, 93, 146). Los tejidos periapicales son afecta-
del agujero apical y/o de la salida de conductos acce- dos cuando las bacterias invaden la pulpa, provocando
sorios (164) (figs. 4 y 5). Productos inflamatorios de necrosis total o parcial. La relación entre la presencia
origen pulpar pueden deslizarse a través del ápex, los de bacterias y las enfermedades pulpar y periapical
canales laterales y accesorios y desencadenar una res- fue demostrada por el clásico trabajo de Kakehashi y
puesta vascular inflamatoria en el periodonto. Entre cols. (93). En este estudio, se expuso pulpa de ratas
éstos hay patógenos vivos, como bacterias y sus toxi- normales al medio oral. Como consecuencia se pro-
nas, hongos y virus (14, 40, 49, 70, 88, 91, 187). Mu- dujo necrosis pulpar, seguida de inflamación periapi-
chos de ellos son similares a los patógenos hallados cal y formación de lesión. Sin embargo, cuando el
en las infecciones periodontales. En ciertos casos, la mismo procedimiento se aplicó a ratas sin gérmenes,
enfermedad pulpar estimulará un crecimiento epite- no sólo las pulpas permanecieron vitales y relativa-
lial que afectará la integridad de los tejidos perirradi- mente no inflamadas, sino que los sitios expuestos
culares (136, 170). fueron reparados por dentina. Así, este estudio de-
El efecto de la inflamación periodontal sobre la mostró que, sin bacterias y sus productos, no se pro-
pulpa es un tema polémico, y abundan los estudios ducen lesiones periapicales de origen endodóncico.
con resultados contradictorios (2, 3, 17, 18, 38, 63, 122, Möller y cols. (127) confirmaron estos hallazgos en
163, 183, 199). Se ha sugerido que la enfermedad pe- monos. Observaron que el tejido pulpar necrótico no
riodontal no tiene efecto sobre la pulpa, al menos hasta infectado no inducía lesión periapical o reacción in-
que afecta al ápex (38). Por otra parte, varios estudios flamatoria. No obstante, una vez que la pulpa se in-
sugieren que el efecto de la enfermedad periodontal fectaba, aparecían lesiones periapicales e inflamación

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Rotstein y Simon

(A) (B)

Fig. 4. Corte histológico de un incisivo lateral superior, tin- ducto accesorio y la respuesta inflamatoria resultante en el
ción con tricrómica de Masson, con una pulpa necrótica ligamento periodontal. B) Vista a mayor aumento, que
asociada a proceso lateral inflamatorio en el ligamento pe- muestra la inflamación crónica con epitelio proliferativo.
riodontal. A) Son evidentes el conducto principal, el con-

de los tejidos apicales. Korzen y cols. (105) obtuvieron cientes más propensos a periodontitis y con signos de
resultado similares, y sugirieron que las infecciones fallo del tratamiento endodóncico, tenían un aumento
pulpares son habitualmente infecciones mixtas por del triple de pérdida de hueso marginal que los pa-
naturaleza. cientes sin infección endodóncica. Jansson y Ehnevid
Blomlöf y cols. (22) crearon defectos en las superfi- (86) investigaron también el efecto de la infección en-
cies radiculares de dientes de monos, extraídos in- dodóncica en la profundidad de sondaje periodontal
tencionalmente, con ápices abiertos o inmaduros. Los y la presencia de afectación de la furca en molares in-
canales fueron infectados o rellenados con hidróxido feriores y constataron que la infección endodóncica
de calcio y reimplantados en sus alvéolos. A las 20 se- en molares estaba asociada con mayor pérdida de in-
manas, se observó crecimiento apical del epitelio mar- serción en la furca. Estos autores sugirieron que la in-
ginal en la superficie de dentina denudada de los dien- fección endodóncica en molares, asociada a enfer-
tes infectados. Jansson y cols. (86) comprobaron los medad periodontal, podía aumentar la progresión de
efectos de los patógenos endodóncicos en la curación la periodontitis por la diseminación de patógenos a
de las heridas periodontales marginales de superficies través de los canales accesorios y los túbulos denti-
de dentina denudada rodeadas de ligamento perio- narios.
dontal sano. Sus resultados mostraron que en los dien- Las bacterias proteolíticas predominan en la flora
tes infectados, los defectos fueron cubiertos por un de los conductos radiculares, cambiando con el tiempo
20 % más de epitelio, mientras que los dientes no in- hacia una microflora más anaerobia (55, 179). Rupf y
fectados mostraron sólo un 10 % más de recubrimiento cols. (156) estudiaron los perfiles de los patógenos
por tejido conectivo. Jansson y cols. (87) concluyeron periodontales en los dientes con enfermedad perio-
que los patógenos en los conductos radiculares ne- dontal y pulpar asociadas. Se utilizaron métodos es-
cróticos podían estimular el crecimiento apical epite- pecíficos de PCR para detectar Actinobacillus acti-
lial a lo largo de la superficie de dentina denudada nomycetemcomitans,Tannerella forsythensis,Eikenella
con comunicaciones marginales y así aumentar la en- corrodens, Fusobacterium nucleatum, Porphyromonas
fermedad periodontal. El mismo grupo de investiga- gingivalis, Prevotella intermedia y Treponema denti-
dores (89), en un estudio retrospectivo radiográfico de cola. Estos patógenos se encontraron en los dientes
3 años, evaluaron 175 dientes monorradiculares con con periodontitis apical crónica y periodontitis cró-
tratamiento endodóncico en 133 pacientes. Los pa- nica del adulto. Concluyeron que los patógenos pe-

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Lesiones periodontales-endodóncicas combinadas

campo oscuro y electrónico, análisis de hibridación


en mosaico de ADN-ADN y perfiles genéticos ARNr16S
(24, 39, 40, 91, 92, 129, 150, 174).
Las diferencias en la prevalencia de espiroquetas
asociadas con enfermedad endodóncica observadas
por varios autores pueden atribuirse a diferencias en
la metodología utilizada. Estudios recientes han indi-
cado que las especies de espiroquetas encontradas
con mayor frecuencia en los conductos radiculares
son T. denticola (150, 174) y Treponema maltophilum
(92). El mayor factor de virulencia de T. denticola con-
siste en moléculas expresadas en la superficie con ac-
tividades citotóxicas, como las proteínas principales
(A) de superficie y el complejo de las proteasas similares
a la quimotripsina, enzimas hidrolíticas y proteolíti-
cas asociadas a la membrana y metabolitos (56). Es-
tos microorganismos poseen un conjunto de factores
de virulencia asociados con la enfermedad periodon-
tal y pueden también participar en la patogenia de la
enfermedad perirradicular (150). Treponema maltop-
hilum es pequeño y móvil y presenta dos flagelos
periplásmicos. Aunque los factores de virulencia de
estos microorganismos no se han estudiado comple-
tamente, se ha propuesto que la movilidad de T. mal-
tophilum, debida a la rotación de sus flagelos peri-
plásmicos, puede contribuir a su patogenicidad (81).
Se ha aislado T. maltophilum con frecuencia en pa-
(B) cientes con formas de periodontitis rápidamente pro-
gresivas (131).
Fig. 5. A) Imagen con microscopio electrónico de barrido También se ha sugerido que las bacterias en forma
del tercio apical de una raíz asociado con una lesión infla- de «L» tienen un posible papel en la enfermedad pe-
matoria periapical. Son evidentes múltiples áreas de re- riapical (172). Algunas cepas de bacterias pueden su-
sorción radicular inflamatoria externa. B) Corte a través del frir una transición morfológica a su forma en «L» tras
ápex de un incisivo central superior, con necrosis pulpar y
la exposición a ciertos agentes, particularmente peni-
lesión periapical. Obsérvese la apertura del conducto ac-
cesorio y la resorción dentinaria de la superficie interna del cilina (96). La forma de «L» y la bacteria pueden apa-
agujero. recer individualmente o juntas y transformarse de una
variante a otra, con numerosas etapas de transición
intermedias de formas en «L». Esto puede ocurrir es-
riodontales a menudo acompañan a las infecciones pontáneamente o por inducción en una forma cíclica.
endodóncicas y apoyaron la idea de que las interrela- En ciertas condiciones, dependiendo de los factores
ciones endoperiodontales son una vía crítica para am- de resistencia del huésped y la virulencia bacteriana,
bas enfermedades. la forma en «L» revierte a su forma bacteriana pato-
Las espiroquetas son otros microorganismos aso- génica original y puede ser responsable de exacerba-
ciados tanto con enfermedad periodontal como con ciones agudas de las lesiones apicales crónicas (172).
enfermedad endodóncica. Las espiroquetas se en-
cuentran con mayor frecuencia en la placa subgingi-
Hongos (levaduras)
val que en los conductos radiculares. Varios estudios
revelaron una gran diversidad de treponemas orales La presencia de hongos asociados a la enfermedad
presentes en los biofilms subgingivales de las bolsas endodóncica está bien documentada (49). Se ha de-
periodontales (29, 45, 95). mostrado colonización asociada con patología radi-
Se ha sugerido que la presencia o la ausencia de es- cular en caries radiculares no tratadas (85, 198), en tú-
piroquetas orales puede utilizarse para diferenciar en- bulos dentinarios (42, 99, 166), en tratamientos fallidos
tre los abscesos de origen periodontal y endodóncico de conductos (128, 134, 142, 180), en ápices de dien-
(187). Hoy en día está bien documentada la presencia tes con periodontitis apical asintomática (114) y en te-
de espiroquetas en el sistema de los conductos radi- jidos periapicales (186). Muchos estudios comunica-
culares, que se ha demostrado mediante diferentes ron que la prevalencia de hongos en sistemas de cultivo
técnicas de identificación, como el microscopio de de los conductos radiculares varía de 0,5 a 26 % en con-

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Rotstein y Simon

(A) (B) (C)

(D) (E) (F)

Fig. 6. Infección periapical por Actinomyces. Este caso mues- con la lesión. D) Las colonias de Actinomyces en la luz de la
tra gráficamente el crecimiento de bacterias más allá del agu- lesión son evidentes. E) A mayor aumento, se observan gran-
jero apical y la invasión del cemento apical y de los tejidos des colonias de Actinomyces. F) Macrófagos espumosos ata-
periapicales. A) Radiografía de un incisivo central superior cando a las bacterias. G) Borde de la megacolonia bacteriana,
con pulpa necrótica, que muestra una gran lesión periapical. donde se comprueba la ausencia de células inflamatorias, in-
B) A pesar del tratamiento endodóncico no quirúrgico reali- capaces de penetrar en la colonia. H) Colonia bacteriana a
zado,el diente continuó siendo sintomático.C) Se llevó a cabo mayor aumento. I) Centro de la colonia, libre de células in-
cirugía apical. La microfotografía muestra parte de la raíz, flamatorias. J) Bacterias viables en el cemento apical.

ductos radiculares no tratados (15, 65, 85, 98, 110) y de (144). También se detectaron otras especies, como Can-
3,7 a 33 % en caso de conductos tratados previamente dida glabrata, Candida guillermondii, Candida incos-
(85, 128, 180, 186, 191). Varios estudios han demos- picia (191) y Rodotorula mucilaginosa (49).
trado una prevalencia superior al 40-55 % (137, 166). Los factores que influyen en la conductos de los
La mayoría de los hongos eran Candida albicans (191). conductos pulpares por hongos no son bien conoci-
Ésta se ha detectado en el 21 % de los canales radicu- dos. Al parecer, sin embargo, entre los factores pre-
lares infectados, utilizando cebadores ARNr 18S diri- disponentes a este proceso están las enfermedades
gidos a especies específicas (15). Candicans albicans que afectan la inmunidad, como el cáncer (42), cier-
mostró también capacidad para colonizar las paredes tos medicamentos intracanaliculares (85), los anti-
de los conductos y penetrar en los túbulos dentinarios bióticos locales y sistémicos (121, 198) y el tratamiento

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Lesiones periodontales-endodóncicas combinadas

(G) (H) (I)

(J)

Fig. 6. Continuación

endodóncico sin éxito (176, 180). Se ha planteado la tas observaciones destacan aún más la importancia
hipótesis de que la reducción de cepas específicas de de utilizar técnicas de endodoncia y periodoncia asép-
bacterias en los conductos radiculares durante el tra- ticas, mantener la integridad de los tejidos dentales
tamiento endodóncico puede permitir el sobrecre- duros y cubrir la corona del diente tan pronto como
cimiento fúngico en un ambiente con escasos nu- sea posible con una restauración permanente bien se-
trientes (176, 180). Otra posibilidad es que los hongos llada, para prevenir filtraciones coronales.
ganen acceso desde la cavidad oral durante el trata-
miento, como resultado de mala asepsia. Se ha cons- Virus
tatado que aproximadamente el 20 % de los pacien-
tes con periodontitis crónica albergan también Cada vez hay más pruebas de que los virus desem-
levaduras subgingivales (41, 178). Al igual que en la peñan un papel importante en las enfermedades pe-
infección endodóncica, C. albicans fue también la es- riodontal y endodóncica. En pacientes con enferme-
pecie de hongo aislada con mayor frecuencia (71). dad periodontal, el virus del herpes simple se detecta
Recientemente, se ha demostrado que la presencia con frecuencia en el líquido crevicular y en las biop-
de hongos en los conductos radiculares está directa- sias gingivales de las lesiones periodontales (32, 34).
mente asociada con su presencia en la saliva (49). Es- El citomegalovirus humano se encontró en aproxi-

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Rotstein y Simon

(A) (B) (C)

(D) (E) (F)

Fig. 7. Presencia de hongos en una lesión periapical per- paciente aún presenta síntomas y la radiotransparencia es
sistente. A) Radiografía de un incisivo lateral superior con mayor. D) Imagen con microscopio electrónico de trans-
pulpa necrótica y radiotransparencia periapical. B) La ra- misión que muestra el crecimiento de las hifas de un hongo.
diografía inmediata postoperatoria muestra un tratamiento E) Imagen de las hifas a mayor aumento, que muestra la
no quirúrgico adecuado. C) En el control a los 3 meses el pared celular. F) Esporas reproductoras de los hongos.

mádamente el 65 % de las muestras de bolsas perio- en las lesiones perirradiculares (51). Sin embargo, no
dontales, y en alrededor del 85 % de las muestras de se ha establecido que el VIH pueda ser causa directa
tejido gingival (34). El virus de Epstein-Barr de tipo I de enfermedad pulpar. El virus del herpes simple se
se detectó en más del 40 % de las muestra de bolsas, ha estudiado también en relación con la enfermedad
y en alrededor del 80 % de las muestras de tejidos gin- endodóncica. Sin embargo, a diferencia de su papel
givales (34). Los herpesvirus gingivales se asociaron a en la enfermedad periodontal, parece que el virus del
un aumento de la presencia de P. gingivalis, T. forsyt- herpes simple no está asociado a la enfermedad en-
hensis, P. intermedia, Prevotella nigrescens, T. denticola dodóncica (79, 148, 158). Por otra parte, datos recien-
y A. actinomycetemcomitans, sugiriendo que podrían tes sugieren que otros tipos comunes de virus huma-
desempeñar un papel en la promoción del sobrecre- nos pueden estar involucrados en la enfermedad
cimiento de bacterias periodontales (33). pulpar y el desarrollo de lesiones periapicales. Sabeti
En endodoncia, la presencia de virus en la pulpa y cols. (157) suponen que el citomegalovirus y el vi-
dental se constató por vez primera en un paciente de rus de Epstein-Barr tienen un papel en la patogenia
SIDA (62). El ADN del VIH también se ha detectado de las lesiones periapicales. Al parecer, la infección ac-

172
Lesiones periodontales-endodóncicas combinadas

organismos, algunos fallos del tratamiento pueden ex-


plicarse por la presencia de ciertas sustancias extrañas
in situ, fragmentos de dentina y cemento (83, 200),
amalgamas (61, 104, 200), material de relleno de cana-
les radiculares (61, 97, 104, 200), fibras de celulosa de
puntas de papel absorbente (53, 103, 104), hilo retrac-
tor gingival (57), alimentos leguminosos (125) y depó-
sitos similares a cálculo (72). La respuesta a un cuerpo
extraño puede ocurrir con cualquiera de estas sustan-
cias y la reacción clínica puede ser aguda o crónica. Por
lo tanto, estas situaciones pueden ser sintomáticas o
asintomáticas. Microscópicamente, en estas lesiones se
demuestra la presencia de células gigantes rodeando el
material extraño en un infiltrado inflamatorio crónico.
Generalmente el tratamiento de elección es la elimi-
nación quirúrgica de los cuerpos extraños.
Fig. 8. Imagen con microscopio electrónico de transmisión
del núcleo de un macrófago en una lesión periapical, que
sugiere una posible infección vírica. Agentes extrínsecos
Colesterol

tiva puede ocasionar la producción de una serie de ci- La presencia de cristales de colesterol en la perio-
tocinas con capacidad para inducir inmunodepresión dontitis apical es un hallazgo histopatológico fre-
local o destrucción tisular (31). La activación de her- cuente (20, 25, 135, 167, 189). Con el tiempo, los cris-
pesvirus en las células inflamatorias periapicales tales de colesterol se disuelven y el colesterol se
puede alterar los mecanismos de defensa del huésped elimina, dejando como resultado el espacio que ocu-
y dar lugar al crecimiento aumentado de bacterias, paba en forma de vacuolas. La prevalencia de vacuo-
como ocurre en las lesiones periodontales. La inmu- las de colesterol en la enfermedad periapical oscila
nodepresión mediada por herpesvirus puede empeo- entre el 18 y el 44 % (25, 167, 189). Se ha sugerido que
rar las infecciones periapicales debido a que las res- los cristales pueden formarse a partir del colesterol li-
puestas del huésped ya están afectadas en el tejido berado por la desintegración de eritrocitos de vasos
granulomatoso (119). sanguíneos sangrantes en el interior de las lesiones
Las alteraciones entre los períodos prolongados de periapicales (25), linfocitos, células plasmáticas y ma-
latencia del herpes virus, interrumpida por períodos crófagos, que mueren en gran cantidad y se desinte-
de activación, puede explicar algunos brotes de epi- gran en las lesiones crónicas periapicales (189), o a
sodios sintomáticos en la enfermedad periapical (158). partir de los lípidos plasmáticos circulantes (167). Sin
La reactivación frecuente del herpesvirus periapical embargo, es posible que todos estos factores contri-
puede ser el soporte de una destrucción periapical rá- buyen a la acumulación y concentración de coleste-
pida. La ausencia de infección por herpesvirus o re- rol en una lesión periapical (fig. 11).
activación vírica, puede ser la razón de que algunas Se ha planteado que la acumulación de cristales de
lesiones periapicales permanezcan clínicamente es- colesterol en los tejidos periapicales inflamados puede
tables durante largos períodos de tiempo (158). ser una de las causas de fallo del tratamiento endo-
dóncico (133, 135). Al parecer, los macrófagos y las cé-
lulas gigantes multinucleadas que se reúnen alrededor
Agentes etiológicos inertes de los cristales de colesterol no son suficientemente efi-
cientes para destruir completamente los cristales. Ade-
Dependiendo de su origen y naturaleza, los agen- más, la acumulación de macrófagos y células gigantes
tes etiológicos inertes pueden ser extrínsecos o in- alrededor de las vacuolas de colesterol en ausencia de
trínsecos. otras células inflamatorias, como neutrófilos, linfocitos
y células plasmáticas, sugiere que los cristales de coles-
terol induce una reacción típica de cuerpo extraño (133).
Agentes extrínsecos
Cuerpos extraños Cuerpos de Russell
Los cuerpos extraños se encuentran con frecuencia Los cuerpos de Russell están presentes en la ma-
asociados a inflamación de los tejidos perirradiculares yoría de los tejidos inflamados del cuerpo, incluidos
(figs. 9 y 10). Aunque las enfermedades endodóncica y los tejidos perirradiculares (fig. 12). Son acumula-
periodontal se relacionan con la presencia de micro- ciones de sustancia eosinófila, pequeñas y esféricas,

173
Rotstein y Simon

(A) (B)

(C) (D)

Fig. 9. Partículas de cuerpo extraño en una lesión peria- extraños y células gigantes. C) Partículas de cuerpo ex-
pical. A) Radiografía de un incisivo central superior sin- traño y células gigantes a mayor aumento. D) Parte del
tomática con una gran lesión periapical. Se había efec- cuerpo extraño. La observación con luz polarizada reveló
tuado tratamiento endodóncico 27 años antes. B) Tras la la presencia de material vegetal. El diagnóstico se con-
cirugía apical se envió el tejido apical para análisis histo- firmó al penetrar con una punta de papel más allá del agu-
lógico. La microfotografía muestra partículas de cuerpos jero apical.

localizadas dentro o cerca de las células plasmáticas completamente la prevalencia de cuerpos de Russell,
y otras células linfoides. La presencia y la incidencia el mecanismo de producción y su papel exacto en la
de cuerpos de Russell en los tejidos orales y las le- inflamación pulpar.
siones periapicales están bien documentadas (60,
113, 120) Cuerpos hialinos de Rushton
Varios estudios han indicado la presencia de cuer-
pos de Russell en el 80 % de las lesiones perirradicu- La presencia de cuerpos hialinos de Rushton (CHR)
lares. Recientemente se han encontrado también gran- es un rasgo exclusivo de algunos quistes odontóge-
des cuerpos de Russell intracelulares y extracelulares nos. Su frecuencia varía entre el 2,6 % y el 9,5 % (4).
en el tejido pulpar inflamado de dientes primarios con Los CHR aparecen generalmente en el recubrimiento
caries (181). Se ha planteado la hipótesis de que los epitelial o la luz del quiste (fig. 13) y sus formas mor-
cuerpos de Russell se deben a la síntesis de un exceso fológicas son variadas: lineales (rectas o curvas), irre-
de proteínas secretoras normales en ciertas células gulares, redondeadas o policíclicas o con aspecto gra-
plasmáticas involucradas en la síntesis activa de in- nular (4, 52).
munoglobulinas. El retículo endoplásmico se dis- La naturaleza exacta de los CHR no se conoce bien.
tiende y forma grandes inclusiones eosinófilas ho- Se ha postulado que son de naturaleza queratínica
mogéneas (35). Sin embargo, aún no se conoce (167), de origen hematógeno (82), que son un pro-

174
Lesiones periodontales-endodóncicas combinadas

(A) (B)

(C) (D)

(E) (F)

Fig. 10. Múltiples razones etiológicas para la falta de cica- material extraño no identificado de color púrpura y tejido
trización del área más allá del agujero apical. A) Radiogra- muscular necrótico («granuloma de carne muerta»). D) Un
fía que muestra el fracaso del tratamiento en el segundo área diferente de la lesión muestra músculo necrótico con
premolar superior. El diente se trató mediante la reim- colonias de bacterias. E) Músculo necrótico infectado por
plantación intencional, durante la cual se eliminó la lesión bacterias y presencia de granos de lenteja. F) Radiografía
apical. B) Microfotografía de la lesión que revela la pre- al año de seguimiento. El diente es asintomático y la cura-
sencia de material extraño. C) A mayor aumento se observa ción del hueso es evidente.

ducto de secreción especializada del epitelio odonto- Cristales de Charcot-Leyden


génico (130), o hematíes degenerados (52). Algunos
autores creen que los CHR son material residual de Los cristales de Charcot-Leyden (CCL) son cristales
una cirugía previa (124). No está clara la razón por la piramidales hexagonales que se forman naturalmente
que los CHR se forman principalmente en el epitelio. y que derivan de los gránulos intracelulares de eosi-

175
Rotstein y Simon

(A) (A)

(B)

Fig. 11.Vacuolas de colesterol en una lesión periapical. A) Mi- (B)


crofotografía teñida con tricrómico de Masson de un quiste
con gruesa pared fibrosa. Embebida en la pared se observa Fig. 12. A) Microfotografía de una lesión periapical que re-
una gran colección de vacuolas de colesterol. B) Imagen a vela la presencia de cuerpos de Russell. B) Imagen con mi-
mayor aumento que muestra vacuolas vacías donde el co- croscopia electrónica de transmisión que muestra la forma
lesterol se disolvió durante la preparación histológica. redondeada amorfa de estos cuerpos.

nófilos y basófilos (1, 182, 195). Su presencia se rela- CCL (169). Además, la presencia de CCL puede detec-
ciona sobre todo con el aumento de eosinófilos en tarse en una lesión periapical que no se resuelve tras
sangre periférica o tejidos en enfermedades parasita- tratamiento convencional (fig. 14). Aunque el papel bio-
rias, alérgicas e inflamatorias (1, 109, 195). lógico y patológico de los CCL en la enfermedad en-
Los macrófagos activados parecen tener un papel dodóncica y periodontal es aun desconocido, puede es-
importante en la formación de los CCL en varios pro- tar asociado con algunos casos de fallo del tratamiento.
cesos patológicos (48, 109). En el interior de macró-
fagos se han observado CCL y eosinófilos dañados,
junto con sus gránulos (27, 48, 109). Se ha propuesto Epitelio
que, tras la desgranulación de los eosinófilos, las pro-
teínas de los CCL podrían ser fagocitadas en lisoso- Entre los componentes normales del ligamento pe-
mas acidificados ligados a la membrana (109). En al- riodontal apical y lateral están los restos epiteliales de
gún momento, las proteínas de los CCL empezarían a Malassez. El término «restos» es inadecuado, puesto
cristalizar formando pequeñas partículas que con el que evoca la imagen de islotes sueltos de células epi-
tiempo aumentarían en volumen y densidad. Final- teliales. Se ha demostrado que estos restos son en rea-
mente, estos cristales se liberarían a través de exoci- lidad un retículo de células epiteliales, en forma de red
tosis fagosómica o por perforación a través de la mem- de pescar, tridimensional e interconectado. En muchas
brana del fagosoma y el citoplasma del macrófago, lesiones periapicales, el epitelio no está presente y por
quedando libre en el tejido del estroma. lo tanto se supone que ha sido destruido (165). Si que-
Hallazgos recientes apoyan la teoría de que los ma- dan restos, éstos pueden responder a un estímulo con
crófagos activados tienen un papel en la formación de proliferación para emparedar los irritantes que llegan

176
Lesiones periodontales-endodóncicas combinadas

miento epitelial que rodean la luz del agujero apical,


pero esta luz está comunicada con el sistema de con-
ductos radiculares a través del agujero apical (fig. 15).
Por otra parte, un quiste «verdadero es una lesión epi-
telial proliferativa completa». Se trata de una cavidad
tridimensional recubierta de epitelio, sin comunica-
ción con la luz del agujero ni con el sistema de cana-
les radiculares (fig. 16). Cuando se estudian las lesio-
nes periapicales en relación con el canal radicular, hay
que distinguir estas dos entidades (136, 170).
Se plantea cierta confusión en el diagnóstico cuando
las lesiones se estudian sólo en material de biopsia ex-
traído con cucharilla. Como el diente no esta adhe-
(A)
rido a la lesión, se pierde su orientación con respecto
al ápex. Por lo tanto, el criterio utilizado para diag-
nosticar un quiste es el epitelio que recubre la cavi-
dad. Es evidente que, al extraerlos mediante raspado,
el quiste «bahía» y el verdadero pueden llevar al mismo
diagnóstico microscópico. Un quiste «bahía» puede
seccionarse de tal modo que se parezca o dé la im-
presión de ser un quiste verdadero. Esta distinción en-
tre quiste «bahía» y quiste verdadero es importante
desde el punto de vista del tratamiento y la resolución
de la lesión (37). Es posible que los quistes deban eli-
minarse quirúrgicamente, pero los quistes «bahía» que
comunican con el conducto radicular pueden resol-
verse con el tratamiento no quirúrgico del conducto.
(B)
Como el tratamiento endodónico puede llegar direc-
tamente a la luz del quiste «bahía», el cambio am-
biental puede conllevar a la curación de la lesión. El
quiste verdadero es independiente del sistema de con-
ductos radiculares; por lo tanto el tratamiento endo-
dóncico convencional puede no afectar la lesión.
La formación de un quiste y su progresión desde
quiste «bahía» hasta quiste verdadero es una cuestión
de tiempo. En un estudio en monos, Valderhaug (190)
mostró que la formación de quiste no se produce hasta,
como mínimo, 6 meses después de la necrosis del con-
tenido del conducto radicular. Por lo tanto, cuanto
más tiempo esté presente la lesión, mayores posibili-
dades hay de que se convierta en un quiste verdadero.
(C) No obstante, la incidencia de quistes verdaderos es
probablemente inferior al 10% (170).
Fig. 13. A) Microfotografía que muestra cuerpos hialinos
de Rushton en el recubrimiento epitelial de un quiste pe-
riapical. B y C) Imágenes a mayor aumento que ponen de
manifiesto el pleomorfismo de estos cuerpos. Factores contribuyentes
Tratamiento endodóntico deficiente
Los procedimientos y técnicas endodóncicos co-
a través del agujero apical. El epitelio está rodeado de rrectos son factores clave en el éxito del tratamiento.
inflamación crónica y se denomina granuloma epiteli- Es imperativo limpiar completamente, ensanchar y
zado. Si esta lesión no se trata, el epitelio continúa pro- obturar el sistema de conductos para favorecer un
liferando en respuesta a las bacterias y productos in- buen resultado. Desgraciadamente, a menudo se en-
flamatorios que llegan a través del agujero apical. cuentran tratamientos endodóncicos deficientes aso-
Se ha introducido el término quiste «bahía» debido ciados a inflamación perirradicular. Un tratamiento
a la presentación microscópica de esta situación (170). endodóncico deficiente permite la reinfección del con-
Es una lesión crónica inflamatoria con un recubri- ducto que puede llevar a fallo del tratamiento (143).

177
Rotstein y Simon

(A) (B)

(C) (D)

Fig. 14. Cristales de Charcot-Leyden en una lesión periapical. lesión. La microfotografía con tinción de hematoxilina-eo-
A) Incisivo lateral superior con pulpa necrótica y lesión pe- sina muestra sólo un infiltrado inflamatorio agudo y crónico.
riapical. B) Nueve meses después del tratamiento endodón- D, F y H) La tinción de May-Grunwald-Giemsa revela la pre-
cico el diente es síntomatico y la lesión es mayor. C) Se efec- sencia de cristales de Charcot-Leyden. E y G) La luz polari-
tuó cirugía apical y se realizó un análisis microscópico de la zada muestra refracción de los cristales de Charcot-Leyden.

El fracaso del tratamiento endodónico se asocia ha- tos radiculares pueden recontaminarse por microor-
bitualmente a signos y síntomas clínicos, así como a ganismos debido a un retraso en la colocación de una
signos radiográficos de lesiones perirradiculares. restauración coronal y fractura de la restauración co-
Los fracasos endodóncicos pueden corregirse me- ronal y/o del diente (160). Madison y Wilcox (116) cons-
diante retratamiento, con buenos índices de éxito (figs. tataron que la exposición de los conductos radicula-
17 y 18). Al parecer, la tasa de éxito es similar a la del res al medio oral permitía que se produjesen
tratamiento convencional endodóncico, si la causa del filtraciones coronales, y en algunos casos a lo largo de
fracaso se diagnostica apropiadamente y se corrige (19). toda la longitud del conducto radicular. Ray y Trope
En los últimos años, las técnicas de retratamiento han (147) observaron que las restauraciones defectuosas
mejorado de forma espectacular debido al uso de mi- con obturación correcta del conducto tenían mayor
croscopio en clínica y al desarrollo de un nuevo ar- incidencia de fracasos que los dientes con tratamiento
mamento. endodóncico inadecuado y restauraciones correctas.
Los dientes en los cuales la endodoncia y las restau-
Restauraciones defectuosas raciones eran correctas presentaban sólo un 9 % de
fracasos, mientras que éstos alcanzaban el 82 %
Las filtraciones coronales son una causa importante cuando ambos procedimientos eran inadecuados
de fracaso del tratamiento endodóncico. Los conduc- (147).

178
Lesiones periodontales-endodóncicas combinadas

(E) (F)

(G) (H)

Fig. 14. Continuación.

Saunders y Saunders (159) demostraron que el fil- tras completar el relleno de los conductos, no sellaba
trado coronal era un problema clínico significativo en estos conductos. Por lo tanto recomendaban eliminar
molares endodonciados. En un estudio in vitro ob- los excesos de relleno de gutapercha hasta el nivel de
servaron que el empaquetamiento de excesiva guta- los orificios de los conductos y proteger el suelo de la
percha y sellado sobre el suelo de la cámara pulpar,

Fig. 16. Microfotografía de un verdadero quiste inflamato-


rio teñido con tricrómico de Masson, que muestra una le-
Fig. 15. Microfotografía que muestra un quiste «bahía» aso- sión tridimensional recubierta de epitelio sin conexión con
ciado a un conducto radicular que se abre directamente en el sistema de conductos radiculares y el agujero apical en
la luz de la lesión. secciones seriadas.

179
Rotstein y Simon

(A)
(A)

(B)

(B)

(C)

Fig. 17. Falta de resolución de la lesión debido a prepara-


ción insuficiente de los conductos y obturación en un se-
gundo premolar superior. A) Radiografía que muestra una (C)
radiotransparencia periapical asociada al diente afectado.
B) Radiografía postoperatoria inmediata después del tra- Fig. 18. Falta de resolución de la lesión debido a prepara-
tamiento endodóncico. C) Radiografía a los 2 años de se- ción insuficiente de los conductos y obturación en un se-
guimiento que muestra signos de reparación ósea. El diente gundo molar inferior. A) Radiografía que muestra una gran
se restauró con un poste y corona. radiotransparencia periapical y furcal. B) Radiografía pos-
toperatoria inmediata después del tratamiento endodón-
cico no quirúrgico. C) Radiografía a los 3 años de segui-
miento que muestra signos de reparación ósea.
cámara pulpar con un material de restauración bien
sellado (159).
Las restauraciones coronales son la principal ba-
rrera frente al filtrado coronal y la contaminación bac- cluso los materiales de restauración permanente ha-
teriana del tratamiento endodóncico. Por ello es esen- bituales no siempre pueden evitar la filtración coro-
cial proteger el sistema de conductos radiculares por nal (197). Coronas completas cementadas (68, 196),
una buena obturación endodóncica y una restaura- así como coronas adheridas a la dentina (140) tam-
ción coronal bien sellada (fig. 19). Sin embargo, in- bién presentaron filtraciones.

180
Lesiones periodontales-endodóncicas combinadas

• La preparación del espacio para el poste y el ce-


mentado deben hacerse con aislamiento mediante
dique de goma.
• El espacio para el poste se debe preparar con un ob-
turador caliente.
• En la preparación debe quedar un mínimo de 3 mm
de relleno del conducto radicular.
• El espacio para el poste se debe irrigar y recubrir
durante el tratamiento del conducto radicular.
• Se debe colocar una restauración a prueba de fil-
trados tan pronto como sea posible tras el trata-
(A) miento endodóncico.
• El retratamiento endodóncico se debe considerar en
dientes con un sellado coronal afectado durante más
de 3 meses.

Traumatismos
Los traumatismos de los dientes y del hueso alveo-
lar pueden afectar a la pulpa y el ligamento perio-
dontal, directa o indirectamente. Las lesiones denta-
les pueden ser diversas, pero en general se clasifican
en fracturas del esmalte, fracturas de la corona sin
afectación pulpar, fracturas de la corona con afecta-
ción pulpar, fractura de la raíz corona, y la fractura de
(B)
la raíz, luxación y avulsión (11). El tratamiento de las
lesiones dentales traumáticas varía según el tipo de
lesión y determinar el pronóstico de reparación del li-
gamento periodontal y la pulpa (10).
La fractura del esmalte afecta sólo a éste e incluye
descascarillados y fracturas incompletas o fisuras. Ge-
neralmente el tratamiento consiste en limado y pu-
lido de los bordes irregulares o restauración de la es-
tructura del esmalte que se ha perdido. En los casos
en que sólo se afecta el esmalte, la pulpa suele man-
tener su vitalidad y el pronóstico es bueno.
La fractura de la corona sin afectación pulpar es
una fractura sin complicaciones que afecta al es-
malte y la dentina, sin exposición de la pulpa. El tra-
(C) tamiento puede incluir restauración conservadora
con composite o reinserción de los fragmentos se-
Fig. 19. Sellado coronal deficiente en un segundo premolar parados. Se ha comunicado que la reinserción de
superior. A) Radiografía que muestra la restauración coro- fragmentos de dentina y esmalte de la corona es una
nal y el tratamiento del conducto radicular inadecuados. posibilidad conservadora para la restauración de la
Obsérvese la lesión apical lateral asociada al diente afec- corona.
tado. B) Radiografía postoperatoria inmediata después del
La fractura de la corona con afectación pulpar es
retratamiento endodóncico. La vieja restauración se eli-
minó y el sistema de conductos se preparó de forma ade- una fractura complicada que afecta al esmalte y la
cuada y se obturó. C) Radiografía a los 5 años de segui- dentina, con exposición de la pulpa. La extensión de
miento que muestra signos de reparación ósea. El diente se la fractura ayuda a determinar el tratamiento pulpar
restauró adecuadamente con un poste y corona. y restaurador necesarios (11). Una fractura pequeña
puede ser indicativa de tratamiento de pulpa vital, se-
guido de restauración adhesiva de composite. Una
Heling y cols. (80) realizaron una extensa revisión fractura más extensa puede requerir de tratamiento
de la bibliografía para determinar los factores asocia- del conducto. La etapa de madurez del diente es tam-
dos con el pronóstico a largo plazo de los dientes con bién un factor importante en la elección entre pulpo-
tratamiento endodóncico y llegaron a las siguientes tomía y pulpectomía (11). El tiempo transcurrido
conclusiones: desde el traumatismo suele afectar al pronóstico pul-

181
Rotstein y Simon

par. Cuanto antes se trate el diente, mejor será el pro- tamiento. Si hay mucha movilidad, se debe estabilizar
nóstico. el diente.
Las fracturas de la corona y la raíz son generalmente En las luxaciones con extrusión los dientes se des-
oblicuas y afectan a la corona y la raíz. Incluyen el es- plazan parcialmente de su alveolo y hay un aumento de
malte, la dentina, el cemento y, a veces la pulpa. Las movilidad. Las radiografías muestran desplazamiento.
fracturas de corona y raíz a menudo se presentan en La pulpa no suele responder a las pruebas de vitalidad,
molares y premolares, pero los dientes anteriores tam- y cuando se diagnostica pulpitis irreversible se requiere
bién pueden verse afectados. La fractura de una cús- tratamiento del conducto (11). El diente requiere reco-
pide que se extiende subgingivalmente es un hallazgo locación y ferulización durante 2-3 semanas.
frecuente y suele ser un reto diagnóstico y clínico (11). En las luxaciones laterales, el diente se desplaza en
El tratamiento depende de la gravedad de la fractura el sentido de su eje longitudinal, Puede haber sensi-
y puede variar desde la eliminación sólo del fragmento bilidad a la percusión o no. Un sonido metálico a la
fracturado del diente y su restauración, hasta el tra- percusión indica que la raíz ha sido forzada dentro del
tamiento endodóncico, periodontal y/o quirúrgico. A hueso alveolar (11). El tratamiento consiste en reco-
veces, el pronóstico es malo y se debe extraer el diente. locación y ferulización. Las luxaciones laterales que
Debido a la complejidad de este traumatismo, se re- incluyen fractura ósea suelen requerir 8 semanas de
comienda un tratamiento en equipo, que incluya en- ferulización. Sólo se debe hacer tratamiento endo-
dodoncista, periodoncista, ortodoncista y prostodon- dóncico cuando se ha establecido el diagnóstico de
cista (11). pulpitis irreversible o de necrosis pulpar.
Las fracturas radiculares afectan al cemento, la den- En las luxaciones con intrusión, los dientes son for-
tina y la pulpa y pueden ser horizontales o transver- zados en el interior de sus alvéolos en dirección axial.
sales. Clínicamente, las fracturas radiculares se aco- La movilidad disminuye y parece una anquilosis (11).
mañar a menudo de movilidad del diente afectado y El tratamiento depende de la madurez de la raíz. Si la
dolor al morder. Con frecuenia, un defecto periodon- raíz no está completamente formada y tiene un ápex
tal o un conducto sinusal se asocian con la raíz frac- abierto, el diente puede volver a erupcionar. En tales
turada. Radiográficamente, una fractura radicular sólo casos no es necesario el tratamiento del conducto, y
se verá si el haz de rayos X pasa a través de la línea de la pulpa puede revascularizarse (6). Si el diente está
fractura. Las fracturas horizontales y oblicuas son más totalmente desarrollado, está indicada la extrusión ac-
fáciles de detectar radiográficamente, mientras que el tiva. En tales casos está indicado el tratamiento en-
diagnóstico de las fracturas verticales es más compli- dodónico, puesto que en casi todos los casos se pro-
cado. duce una necrosis pulpar (6).
El tratamiento, cuando es posible, suele consistir en Se considera avulsión cuando el diente se desplaza
la recolocación del segmento coronal y la estabiliza- totalmente de su alvéolo. Si el diente se reimplanta
ción mediante ferulización (11). Una ferulización fle- enseguida tras la avulsión, el ligamento periodontal
xible con hilo de nylon o alambre de ortodoncia y una tiene buenas posibilidades de repararse (11). El tiempo
resina adherida por ácido durante períodos de hasta fuera del alvéolo y el medio utilizado para conservar
12 semanas aumentarán la reparación pulpar y pe- el diente durante el transponte son factores críticos
riodontal (8). Los dientes con raíces fracturadas no re- para el éxito de la reimplantación. El grado de repa-
quieren necesariamente tratamiento de los conduc- ración de las células del ligamento periodontal deter-
tos si se curan sin signos de enfermedad pulpar (201). mina el éxito a largo plazo.
Las luxaciones incluyen varios tipos de desplaza-
mientos del diente, como concusión, subluxación, lu- Resorciones
xación con extrusión o con intrusión. Generalmente,
cuanto más grave es la luxación, mayor es el daño al La resorción radicular es una efección asociada con
periodonto y a la pulpa (11). un proceso fisiológico o patológico que provoca pér-
En la concusión, el diente es sensible a la percu- dida de dentina, cemento y/o hueso (5). La resorción
sión. No hay aumento de la movilidad ni cambios ra- puede comenzar en el periodonto y afectar inicial-
diográficos. La pulpa puede responder normalmente mente a las superficies externas del diente (resorción
a las pruebas de vitalidad y no suele necesitarse tra- externa) o empezar en el espacio pulpar y afectar so-
tamiento inmediato (11). bre todo a las superficies internas de la dentina (re-
En las lesiones de subluxación, los dientes son sen- sorción interna). Si no se diagnostica y trata, la resor-
sibles a la percusión y tienen también un aumento de ción externa puede invadir el cemento, la dentina y,
movilidad (11). A menudo hay sangrado sulcular, que finalmente, el espacio pulpar. En casos de resorciones
indica lesión del ligamento periodontal. Los hallazgos internas no tratadas, el proceso puede avanzar y per-
radiográficos son poco notorios y la pulpa puede res- forar hasta la superficie radicular externa.
ponder normalmente a las pruebas de vitalidad (11). La resorción radicular externa se divide en tres ca-
En las subluxaciones menores no suele requerirse tra- tegorías principales (185):

182
Lesiones periodontales-endodóncicas combinadas

hasta imágenes de bordes irregulares. Una línea ra-


diopaca característica suele separar la imagen de la le-
sión de la del conducto radicular, porque la pulpa queda
protegida por una delgada capa de predentina hasta
las últimas etapas del proceso (74).
La etiología de la resorción invasiva cervical no es
bien conocida. Sin embargo, los factores predispo-
nentes son, al parecer, los traumatismos, el trata-
miento ortodóncico y el blanqueamiento intracoro-
nal con peróxido de hidrógeno al 30 % (75, 153). El
tratamiento de esta afección plantea problemas clíni-
cos porque el tejido resortivo está muy vascularizado
y la hemorragia resultante puede impedir la visuali-
zación y comprometer la colocación de la restaura-
Fig. 20. Microfotografía de un diente con una lesión peria-
pical que muestra múltiples áreas de resorción, infiltrado
ción (76). El éxito del tratamiento depende de la eli-
inflamatorio y osteoclastos. minación completa o la inactivación del tejido
reabsortivo, lo cual es difícil de conseguir en las le-
siones más avanzadas, caracterizadas a menudo por
1) Resorción progresiva inflamatoria. una serie de pequeños conductos interconectados con
2) Resorción invasiva (no inflamatoria). el ligamento periodontal apical a la lesión principal.
3) Resorción por sustitución (no inflamatoria). En muchos casos, para tener acceso al defecto reab-
La resorción progresiva inflamatoria se debe a estí- sortivo, se requiere cirugía que puede causar pérdida
mulos como la infección pulpar y la infección sulcu- de hueso y de inserción periodontal. La aplicación tó-
lar. Puede producirse a continuación de lesiones trau- pica de una solución acuosa de ácido tricloroacético
máticas con desplazamiento, tumores, quistes, ciertas al 90 %, el raspado y el sellado del defecto han de-
enfermedades sistémicas y enfermedad periodontal, mostrado ser efectivos en la mayoría de los casos (76).
o como resultado de la inflamación pulpar y necrosis. Los defectos grandes asociados con las etapas avan-
Prácticamente todos los dientes con periodontitis api- zadas de esta afección tienen un mal pronóstico.
cal exhibirán cierto grado de resorción radicular in- Tras necrosis extensas del ligamento periodontal
flamatoria (fig. 20). Ésta puede localizarse en los as- puede producirse resorción de sustitución o anquilo-
pectos apical o lateral de la raíz, pero es más frecuente sis, con formación de hueso en un área denudada de
en el ápex. Aunque en las etapas iniciales la resorción la superficie radicular (185). Esta afección es más fre-
no se detecta radiográficamente, es evidente en los cuente como complicación de lesiones de luxación,
costes histológicos. Si progresa, el proceso resortivo especialmente en dientes avulsionados que han es-
puede destruir toda la raíz. Si se detecta y se trata tado fuera de sus alvéolos en condiciones de seque-
pronto, el pronóstico es bueno. El tratamiento de elec- dad, durante varias horas (fig. 22).
ción es la eliminación del tejido pulpar inflamado y Ciertos procedimientos periodontales han sido in-
la obturación del sistema del conducto radicular (36, criminados en la resorción radicular de sustitución
177). (117). La capacidad de resorción de sustitución se re-
La resorción invasiva de la raíz, denominada tam- laciona también con la cicatrización de las lesiones
bién como resorción invasiva cervical, es una forma periodontales (94). El tejido de granulación derivado
relativamente infrecuente de resorción radicular ex- del hueso o del tejido conectivo pude inducir la re-
terna (74-76). Se caracteriza por su localización cervi- sorción de la raíz y su anquilosis (23). Al parecer, la
cal y su naturaleza invasiva (fig. 21). La invasión de la causa es la falta de capacidad para establecer una in-
región cervical de la raíz es predominantemente pro- serción de tejido conectivo en la superficie radicular
ducida por tejido fibrovascular derivado del ligamento denudada. Las únicas células del periodonto que pa-
periodontal. El proceso reabsorbe progresivamente el recen tener esta capacidad son las del ligamento pe-
cemento, el esmalte y la dentina y más tarde puede riodontal (23). En general, si menos del 20 % de la su-
afectar a la pulpa. Puede no haber signos ni síntomas, perficie radicular presenta anquilosis, puede ser
a menos que se asocie a infección pulpar o periodon- reversible (7). De lo contrario, los dientes anquilosa-
tal. La invasión bacteriana secundaria del interior de dos se incorporan al hueso alveolar y forman parte del
la pulpa o del espacio del ligamento periodontal pro- proceso normal de remodelación del hueso. Éste es
voca inflamación de los tejidos, acompañada de dolor. un proceso gradual, en el cual la velocidad a la que el
Con frecuencia, sin embargo, el defecto de resorción diente es sustituido por hueso varía dependiendo so-
se detecta en una exploración radiográfica sistemática. bre todo del metabolismo del paciente. En la mayo-
Donde la lesión es visible, las características clínicas ría de los casos pueden pasar años hasta que la raíz
varían desde radiotransparencias bien delimitadas se resorbe completamente.

183
Rotstein y Simon

(A) (B)

(C) (D)

Fig. 21. Resorción radicular invasiva en un incisivo lateral fías de un corte horizontal del área de resorción. Obsérvese
superior. A) Radiografía que muestra un gran defecto re- las múltiples bahías resortivas y el material similar a hueso
sortivo y difuso en la región cervical. Se extrajo el diente y depositado directamente sobre la dentina (anquilosis). Ad-
se remitió para análisis microscópico. B-D) Microfotogra- viértase también la ausencia de inflamación.

Clínicamente, la resorción radicular de sustitución toblástica y la predentina están afectadas o ausentes


se diagnostica por la falta de movilidad de los dientes (185, 194).
anquilosados (7). Los dientes tienen también un so- Las causas de resorción interna suelen ser trauma-
nido metálico a la percusión y, tras un período de tismos, pero las bacterias pueden también tener un
tiempo, estarán en infraoclusión. Radiográficamente papel (193). Los factores traumáticos pueden ser me-
es evidente la ausencia del espacio del ligamento pe- cánicos, químicos o térmicos. El calor extremo se ha
riodontal, y el crecimiento del hueso hacia el interior planteado como posible causa de este tipo de resor-
de la raíz da un aspecto de «apolillado» (185). ción (188). Por lo tanto, el clínico debe usar suficiente
La resorción radicular interna se produce como con- solución irrigadora cuando efectúa el raspado radi-
secuencia de la actividad de las células gigantes mul- cular con ultrasonidos, así como cuando se hacen cau-
tinucleadas en la pulpa inflamada (fig. 23). El origen terizaciones durante los procedimientos quirúrgicos.
de esta afección no se comprende completamente, La resorción radicular interna suele ser asintomática
pero parece estar relacionado con la inflamación pul- y se diagnostica en una exploración radiográfica siste-
par crónica asociada a un espacio pulpar coronal mática. El diagnóstico precoz es crítico para el pronós-
infectado (193). La resorción interna sólo ocurre en tico (fig. 23). Cuando se diagnostica en una etapa tem-
presencia de tejido de granulación y si la capa odon- prana, el tratamiento endodóncico de estas lesiones

184
Lesiones periodontales-endodóncicas combinadas

El pronóstico del tratamiento de las perforaciones


radiculares depende del tamaño, localización, tiempo
del diagnóstico y tratamiento, grado de lesión perio-
dontal, así como de la capacidad de sellado y la bio-
compatibilidad del material de reparación (59). Se ha
establecido que el éxito del tratamiento depende prin-
cipalmente del sellado inmediato de la perforación y
del control apropiado de la infección. Entre los mate-
riales que se han recomendado para sellar las perfo-
raciones radiculares están el agregado mineral de trió-
xido, Super EBA, material restaurador intermedio,
Cavit®, cementos de ionómeros de vidrio, composites
y amalgamas (12, 43, 90, 112, 139, 149).

Malformaciones congénitas
Los dientes con malformaciones congénitas tien-
den a no responder al tratamiento cuando están di-
rectamente asociados a una invaginación o a un surco
radicular vertical congénito. Estas afecciones pueden
llevar a una afección periodontal no tratable. Estos
surcos suelen empezar en la fosa central de incisivos
centrales o laterales superiores, cruzan sobre el cín-
gulo y continúan apicalmente por la raíz con longitu-
des variables. Estos surcos se deben probablemente
al fracaso del germen dentario para formar otra raíz.
Mientras el epitelio de inserción permanezca intacto,
el periodonto estará sano. No obstante, una vez que
esta inserción se escinde y el surco se contamina con
bacterias, puede formarse una bolsa infraósea a lo
Fig. 22. Radiografía que muestra la resorción radicular de
largo de toda su longitud. Este conducto, similar a una
sustitución en un incisivo central superior avulsionado que
permaneció 2 horas fuera de su alvéolo. fisura, da lugar a un nicho de acumulación de biofilm
bacteriano y una vía para la progresión de la enfer-
medad periodontal. Radiográficamente, el área de des-
trucción del hueso sigue el curso del surco.
suele ser sencillo (fig. 24). La apariencia radiográfica del Desde el punto de vista del diagnóstico, el paciente
defecto de resorción consiste en una distorsión de la puede presentar síntomas de absceso periodontal o
silueta del conducto radicular. Suele haber un ensan- varias condiciones endodóncicas asintomáticas. Si la
chamiento oval o redondo del espacio del conducto ra- afección es puramente periodontal, puede diagnosti-
dicular. En muchos casos, la resorción del hueso adya- carse a simple vista siguiendo el surco hasta el bor-
cente se produce sólo si se infectan grandes fragmentos den gingival y sondando la profundidad de la bolsa,
de pulpa. Histológicamente, suele haber tejido de gra- que suele ser de forma tubular y localizada en esa área,
nulación pulpar, con células gigantes multinucleadas y en contraposición a los problemas periodontales más
necrosis pulpar coronal. generalizados. El diente responderá a las pruebas pul-
pares. La destrucción ósea que sigue verticalmente el
Perforaciones surco puede ser evidente en la radiogría. Si esta enti-
dad se asocia a enfermedad endodóncica, el paciente
Las perforaciones de la raíz son complicaciones clí- puede presentar cualquiera de los síntomas del es-
nicas que pueden provocar fracasos del tratamiento pectro endodóncico.
(184). Cuando se producen perforaciones radiculares, El pronóstico del tratamiento de estos conductos es
las comunicaciones entre el sistema del conducto ra- reservado, dependiendo de la extensión apical del
dicular y los tejidos perirradiculares o la cavidad oral surco. El odontólogo debe buscar el surco, pues éste
pueden a menudo empeorar el pronóstico del trata- puede haber sido alterado por un acceso previo o por
miento. Las perforaciones radiculares pueden deberse una restauración colocada en la cavidad de acceso. La
a caries grandes, resorciones o errores del operador apariencia en forma de lágrima en la radiografía debe
cometidos durante la instrumentación del conducto despertar sospechas inmediatamente. El surco con-
radicular o pospreparación (106, 184). génito puede ser también visible en la radiografía. Si

185
Rotstein y Simon

(A) (B)

(C) (D)

(E)

Fig. 23. Resorción radicular interna en un incisivo central sorción interna en la corona y el área cervical. El defecto
superior. El paciente refirió que se le había diagnosticado ha perforado hacia el ligamento periodontal de alrededor.
una lesión pequeña 2 años antes, que no se había tratado. C-E) Corte histológico de la resorción interna en el que se
A) Aspecto clínico. Obsérvese la «mancha rosada» en la co- observa tejido conectivo crónicamente inflamado y resor-
rona. B) Radiografía que muestra un gran defecto de re- ción de la dentina por células gigantes multinucleadas.

es así, aparecerá como una línea vertical oscura. Esta tos del hueso y el tratamiento quirúrgico de los teji-
afección debe diferenciarse de la fractura vertical, que dos blandos y el hueso subyacente. Los surcos radi-
puede tener una apariencia radiográfica similar. culares pueden dar lugar a bolsas infraóseas que se
El tratamiento consiste en la eliminación o reduc- perpetúan por sí solas, por lo que el raspado y el ali-
ción del surco en lo posible, la colocación de sustitu- sado radicular no serán suficientes. Aunque la natu-

186
Lesiones periodontales-endodóncicas combinadas

Fig. 24. A) Radiografía que muestra un


defecto inflamatorio interno resortivo
en el tercio coronal del conducto radi-
cular de un incisivo central superior. El
diente dio positivo en las pruebas de sen-
sibilidad pulpar. B) La radiografía pos-
toperatoria muestra la obturación del
(A) (B) conducto radicular y el defecto de re-
sorción.

raleza aguda del problema puede aliviarse inicial- presencia de conductos laterales que se extienden
mente, el origen de la inflamación aguda o crónica se desde una pulpa necrótica al área de furcación.
debe erradicar mediante cirugía. En ocasiones, el Las enfermedades endodóncicas primarias suelen
diente necesita ser extraído por su mal pronóstico. remitir tras el tratamiento de los conductos radicula-
res (fig. 25). El trayecto de la fístula hacia el surco gin-
gival o el área de furcación desaparece pronto, una vez
Diagnóstico diferencial que se ha eliminado la pulpa necrótica y se han se-
llado bien los conductos radiculares (fig. 26). Es im-
Para el diagnóstico diferencial de las lesiones en- portante saber que cualquier tratamiento periodontal
dodónicas-periodontales lo mejor es clasificarlas fallará si no se ha diagnosticado una pulpa necrótica
como enfermedades endodóncicas, periodontales o y no se ha realizado tratamiento endodóncico.
combinadas (171). También pueden clasificarse según
las modalidades de tratamiento necesarias: endo- Enfermedad periodontal primaria
dóncico, periodontal o combinados. Estas afecciones
comprenden: enfermedad endodóncica primaria, La enfermedad periodontal primaria se debe sobre
enfermedad periodontal primaria, y enfermedades todo a los patógenos periodontales. En este proceso,
combinadas. Las enfermedades combinadas son: en- la periodontitis crónica progresa apicalmente a lo largo
fermedad endodóncica primaria con afectación pe- de la superficie radicular. En la mayoría de los casos,
riodontal secundaria, enfermedad periodontal pri- las pruebas pulpares indican una reacción pulpar nor-
maria con afectación endodóncica secundaria, y mal (fig. 27). Suele haber acumulación de placa y cál-
enfermedades combinadas verdaderas. culo, y las bolsas son más anchas.
El pronóstico depende de la etapa de la enferme-
dad periodontal y la eficacia del tratamiento perio-
Enfermedad endodóncica primaria dontal. El odontólogo debe conocer el aspecto radio-
Una exacerbación aguda de una lesión apical cró- gráfico de la enfermedad periodontal asociada a las
nica con pulpa necrótica puede drenar coronalmente anomalías radiculares del desarrollo (fig. 28).
a través del ligamento periodontal al surco gingival.
Esta situación puede asemejarse clínicamente a un Enfermedades combinadas
absceso periodontal. En realidad, es un trayecto fis- Enfermedad endodóncica primaria con afectación
tuloso de origen pulpar que se abre a través del área periodontal secundaria
del ligamento periodontal. Para el diagnóstico, es im-
perativo que el clínico inserte una punta de gutaper- Si una enfermedad endodóncica supurante perma-
cha en el trayecto de la fístula y tome una o más ra- nece sin tratar durante cierto tiempo, puede provocar
diografías para determinar el origen de la lesión. destrucción periodontal secundaria (fig. 29). Se forma
Cuando se sonda la bolsa, es estrecha y no tiene an- placa en el borde gingival del trayecto de la fístula,
chura. Una situación similar se observa cuando el dre- que produce una periodontitis inducida por placa en
naje desde el ápex de un molar se extiende coronal- esa área. Cuando se detecta placa o cálculo, el trata-
mente al área de furcación. Esto puede pasar en miento y el pronóstico del diente difieren de los de los

187
Rotstein y Simon

(A) (B)

Fig. 25. Enfermedad endodóncica


primaria en un primer molar infe-
rior con pulpa necrótica. A) Radio-
grafía preoperatoria en la que se
observan radiotransparencias peria-
pical e interradicular. B) Radiografía
tomada al terminar el tratamiento
de conductos. C) Radiografía a los 2
(C) años de seguimiento, con signos de
reparación ósea.

dientes que sólo presentan enfermedad endodóncica ración apropiado. En perforaciones más profundas, o
primaria. En estos casos, el diente requerirá trata- en el techo de una furca, la reparación inmediata de
miento endodóncico y periodontal. Si el tratamiento la perforación tiene un mejor pronóstico que el trata-
endodóncico es adecuado, el pronóstico dependerá miento de una infectada. El uso de agregado mineral
de la gravedad de la periodontitis inducida por placa trióxido permite la curación del cemento siguiendo la
y de la eficacia del tratamiento periodontal. Con tra- reparación inmediata (145).
tamiento endodóncico solo, se solucionará parte de Las fracturas radiculares pueden también presen-
la lesión hasta el nivel de la lesión periodontal se- tarse como lesiones endodóncicas primarias con afec-
cundaria. En general, puede preverse la curación de tación periodontal secundaria. Esto ocurre habitual-
los tejidos dañados por la supuración procedente del mente en dientes con tratamiento endodóncico, a
espacio endodóncico. menudo con poste y corona. Los signos pueden osci-
Las lesiones endodóncicas primarias con afectación lar desde una bolsa periodontal local profunda hasta
periodontal secundaria pueden producirse también la formación de un absceso periodontal agudo. Las
como resultado de la perforación de la raíz durante el fracturas radiculares son un problema en aumento en
tratamiento de conductos, o de la colocación inco- los molares tratados mediante resección radicular (107,
rrecta de postes o pins durante una restauración de 151).
corona. Los síntomas pueden ser agudos, con forma-
ción de abscesos periodontales asociados a dolor, in- Enfermedad periodontal primaria
flamación, pus o exudado, formación de bolsas y mo- con afectación secundaria de la pulpa
vilidad del diente. A veces puede presentarse una
forma más crónica sin dolor, que produce la aparición La progresión de una bolsa periodontal puede con-
súbita de una bolsa con sangrado en el sondaje o exu- tinuar hasta afectar los tejidos apicales. En estos ca-
dado de pus. Cuando la perforación de la raíz está si- sos, la pulpa puede necrosarse como resultado de la
tuada cerca de la cresta alveolar, puede levantarse un infección que penetra por los canales laterales o el
colgajo y reparar el defecto con un material de obtu- agujero apical. En un diente monorradicular el pro-

188
Lesiones periodontales-endodóncicas combinadas

(A) (B)

(C) (D)

Fig. 26. Enfermedad endodóncica primaria en un primer un defecto periodontal estrecho. Obsérvese la inflamación
molar inferior con pulpa necrótica. A) Radiografía preo- gingival. C) Radiografía al año de seguimiento que mues-
peratoria que muestra una gran radiotransparencia peri- tra la resolución de la radiotransparencia ósea. D) Clíni-
rradicular, asociada con una transparencia en la raíz dis- camente, el defecto vestibular había curado y el sondaje
tal y la furca.B) Clínicamente se podía sondar por vestibular era normal.

nóstico suele ser malo. En los molares puede ser me- los estudios que constataron crecimiento bacteriano
jor, puesto que, como no todas las raíces suelen sufrir en el 87 % de los dientes, las muestras de tejido pul-
el mismo grado de pérdida de tejidos de soporte, puede par y dentina radicular de dientes humanos afectados
considerarse como alternativa la resección radicular. de periodontitis (2, 3).
Hay controversia sobre el efecto de la progresión de El tratamiento de la enfermedad periodontal puede
la periodontitis crónica en la vitalidad de la pulpa (2, provocar también afectación endodóncica secunda-
3, 108). Si el aporte de sangre que circula a través del ria. Los conductos laterales y los túbulos dentinarios
ápex está intacto, la pulpa tiene buenas expectativas pueden abrirse en la cavidad oral por el raspado y ali-
de supervivencia. Se ha observado que los cambios sado radiculares o por cirugía de colgajo. Es posible
pulpares debidos a enfermedad periodontal son más que un vaso sanguíneo de un conducto lateral se rompa
probables cuando está afectado el agujero apical (108). en el raspado y los microorganismos entren en esa
En estos casos, las bacterias que se originan en la bolsa zona durante el tratamiento, provocando inflamación
periodontal pueden ser una fuente de infección de los y necrosis de la pulpa (fig. 30).
conductos radiculares con mayor facilidad. Se ha cons-
tatado una correlación significativa entre la presencia Enfermedad combinada verdadera
de microorganismos en los conductos radiculares y su
presencia en las bolsas periodontales de la periodon- La enfermedad endodóncica periodontal combinada
titis avanzada (100, 102). Este concepto es avalado por verdadera es menos frecuente que las otras afecciones

189
Rotstein y Simon

(A) (B)

(C) (D)

Fig. 27.

endodónicas-periodontales. Se produce cuando la en- dodóncico. Sin embargo, los tejidos periodontales pue-
fermedad endodóncica progresa coronalmente y se une den no responder bien al tratamiento, lo cual depen-
a una bolsa periodontal infectada que progresa apical- derá de la gravedad de la enfermedad combinada.
mente (163, 171). El grado de pérdida de inserción en El aspecto radiográfico de la enfermedad endo-
este tipo de lesión es siempre considerable, y el pro- dóncica y periodontal combinada es similar al de un
nóstico, reservado (fig. 31). Esto es particularmente diente con fractura radicular vertical. Una fractura que
cierto en dientes monorradiculares (fig. 32). En mola- ha invadido el espacio pulpar, con la necrosis resul-
res puede considerarse como alternativa la resección ra- tante, puede también considerarse una verdadera le-
dicular, si todas las raíces no están muy afectadas. A sión combinada, pero no es candidata a un tratamiento
veces son necearlos procedimientos quirúrgicos com- exitoso. Si hay un trayecto fistuloso, puede ser nece-
plementarios (fig. 33). En la mayoría de los casos puede sario levantar un colgajo para determinar la etiología
preverse una curación periapical tras el tratamiento en- de la lesión.

190
Lesiones periodontales-endodóncicas combinadas

(A) (B)

(C) (D)

(E) (F)

Fig. 28. Enfermedad periodontal primaria en un segundo C) Aspecto del diente extraído, con la lesión. Obsérvese el
premolar superior. A) Radiografía que muestra pérdida de profundo surco del desarrollo por mesial. D) Microfoto-
hueso alveolar y lesión periapical. Clínicamente se observó grafía del ápex del diente, con la lesión. E y F) Imagen a
una bolsa estrecha y profunda en la cara mesial de la raíz. mayor aumento que muestra la lesión inflamatoria, la re-
No había signos de caries y el diente respondía normal- sorción de dentina y cemento, y osteoclastos. G y H) Cor-
mente a las pruebas de sensibilidad pulpar. B) Radiogra- tes histológicos de la cámara pulpar que muestran la pulpa
fía que muestra el trayecto de la bolsa hasta el área apical no inflamada, la capa odontoblástica y la predentina in-
con una punta de gutapercha. Se decidió extraer el diente. tacta.

Procedimientos de diagnóstico clínico fermedad endodóncica y periodontal. Los tejidos ex-


traorales e intraorales se han de explorar para detec-
tar cualquier anomalía o enfermedad. Una sola prueba
Las pruebas clínicas son imperativas para el co- no suele ser suficiente para establecer un diagnóstico
rrecto diagnóstico y para la diferenciación entre en- concluyente.

191
Rotstein y Simon

(A) (B)

Fig. 28. Continuación.

Examen visual más adelante «Determinación del trayecto de la fís-


tula»).
Debe hacerse sistemáticamente una exploración Se exploran los dientes para buscar anomalías, como
cuidadosa de labios, mejillas, mucosa oral, lengua, caries, restauraciones defectuosas, erosiones, abra-
paladar y músculos. Simultáneamente ha de reali- siones, fisuras, fracturas y decoloraciones. Un diente
zarse una palpación digital de los mismos tejidos. Se permanente decolorado a menudo se asocia a necro-
examinan la mucosa alveolar y la encía adherida, sis pulpar. Una «mancha rosa» detectada en la corona
buscando ulceraciones o fístulas. A menudo, la pre- de un diente puede indicar un proceso interno activo
sencia de una fístula se asocia a necrosis pulpar (v. de reabsorción. No es posible establecer el diagnós-

Fig. 29. Enfermedad endodóncica pri-


maria con afectación periodontal se-
(A) (B) cundaria en un primer molar inferior
con pulpa necrótica. A) Radiografía
preoperatoria que muestra un defecto
interradicular que se extiende a la re-
gión apical de la raíz mesial. B) Ra-
diografía tomada al completar el
tratamiento de los conductos. C) Ra-
diografía al año de seguimiento que
muestra resolución de la mayor parte
de la lesión perirradicular, aunque
queda un defecto óseo en el área de la
furca. Adviértase que el tratamiento
endodóncico solo no ha conseguido la
curación completa del defecto. Es ne-
cesario el tratamiento periodontal
para la curación más completa de la
(C) zona de la furca y los tejidos gingiva-
les inflamados.

192
Lesiones periodontales-endodóncicas combinadas

(A)
Fig. 31. Enfermedad combinada endodóncica y periodon-
tal verdadera en un primer molar inferior. La radiografía
muestra la progresión de la enfermedad endodóncica y pe-
riodontal por separado. No se había tratado el diente y, en
consecuencia, las dos lesiones se juntaron.

contra la cortical del hueso subyacente. De esta forma


se detectarán anomalías perirradiculares o zonas «ca-
lientes» que originan una respuesta dolorosa a la pre-
sión digital. Una respuesta positiva a la palpación
puede indicar un proceso de inflamación perirradi-
cular inflamatoria. No obstante, esta prueba no indica
si el proceso inflamatorio es de origen endodóncico o
periodontal. Al igual que en otras pruebas clínicas, la
respuesta debe compararse con la de los dientes de
(B)
control.
Fig. 30. Enfermedad periodontal primaria con afectación
secundaria endodóncica en un premolar superior. A) Ra- Percusión
diografía en la que se observa la pérdida de hueso en un
tercio de la raíz y la radiotransparencia periapical separada. La percusión se realiza golpeando suavemente so-
La corona estaba intacta, pero la sensibilidad pulpar era bre la superficie incisal u oclusal de los dientes, ya sea
negativa. B) Radiografía tomada al término del tratamiento
con el dedo o con un instrumento romo, como el ex-
endodóncico. Se observan que el canal lateral estaba ex-
puesto al medio oral debido a la pérdida de hueso. El canal
tremo del mango de un espejo. La corona del diente
lateral expuesto es una de las posibles vías de infección del se golpea vertical y horizontalmente. Aunque esta
conducto radicular. prueba no pone de manifiesto el estado de la pulpa,
indica la presencia de inflamación perirradicular. Una
repuesta anormal positiva indica inflamación del li-
tico concluyente de enfermedad pulpar mediante el gamento periodontal, que puede ser de origen pulpar
examen visual, de manera que debe acompañarse de o periodontal. La sensibilidad de las fibras propio-
otras pruebas. ceptivas en un ligamento periodontal inflamado ayu-
La exploración visual mejora notablemente si se uti- dará a identificar la localización del dolor. Esta prueba
lizan amplificación e iluminación. Las lupas de au- debe realizarse suavemente, sobre todo en dientes sen-
mento y el microscopio se usan mucho en la práctica sibles. Se ha de repetir varias veces y comparar con
dental (fig. 34). Estos accesorios facilitan la localiza- los dientes de control.
ción de cálculo, caries, fracturas coronales y radicula-
res, defectos congénitos, y áreas de dentina denudada, Movilidad
principalmente en la unión amelocementaria.
Para comprobar la movilidad, pueden usarse los
mangos de dos espejos, uno a cada lado de la corona.
Palpación
Se aplica presión en sentido vestibulolingual, y verti-
La palpación se lleva a cabo mediante una presión cal y se registra la intensidad de la movilidad. La mo-
digital firme sobre la mucosa que cubre las raíces y vilidad dentaria es directamente proporcional a la in-
los ápices. Se presiona la mucosa con el dedo índice tegridad del aparato de inserción o a la extensión de

193
Rotstein y Simon

Fig. 32. Enfermedad combinada endo-


dóncica y periodontal verdadera. A)
Radiografía que muestra pérdida de
hueso en los dos tercios de la raíz, con
cálculo presente y una radiotranspa-
rencia periapical separada. B) La ex-
ploración clínica revela cambio de co-
lor del diente afectado y exudado de
pus que fluye a través del surco gingi-
val. La prueba de sensibilidad pulpar
(A) (B) era negativa, indicando necrosis pul-
par.

la inflamación del ligamento periodontal (30). Los ósea perirradicular de origen endodóncico quedan
dientes con movilidad extrema tienen poco soporte confinadas al hueso esponjoso. Por lo tanto, no es po-
periodontal, indicando que la causa primaria es la en- sible detectarlo, a menos que la cortical también esté
fermedad periodontal. afectada (16, 111). Asimismo, algunas características
Las raíces fracturadas y los dientes con traumatis- radiográficas pueden interpretarse de múltiples for-
mos recientes a menudo presentan gran movilidad. Sin mas (66, 67). Por otra parte, la enfermedad periodon-
embargo, una movilidad similar se debe con frecuen- tal que provoca pérdida de hueso alveolar se detecta
cia a abscesos perirradiculares de origen pulpar, lo que muy bien radiográficamente. Para el diagnóstico di-
puede verificarse sólo si otras pruebas indican necro- ferencial, se deben tomar radiografías periapicales y
sis pulpar o si la movilidad mejora al poco tiempo de de aleta de mordida desde varios ángulos. A veces se
acabar el tratamiento endodóncico. La presión ejercida precisan otros tipos de radiografías.
por un absceso apical agudo puede provocar movili- Hay una serie de lesiones radiopacas y radiolúcidas
dad transitoria (84). Esto puede reunir también como que no son de origen endodóncico ni periodontal,
resultado de movimientos ortodóncicos y necrosis pul- pero pueden tener una apariencia radiográfica simi-
par de un diente previamente traumatizado (152). lar. Por lo tanto, junto con la evaluación radiográfica,
han de tenerse en cuenta los signos y síntomas clíni-
Radiografías cos, así como los resultados de otras pruebas clínicas.

Las radiografías son esenciales para la detección de


Pruebas de vitalidad pulpar
puntos de referencia anatómicos y diversos estados
patológicos. Además, las radiografías revisten la má- Estas pruebas están dirigidas a evaluar la respuesta
xima importancia para la documentación y para asun- de la pulpa a diferentes estímulos. Una respuesta anor-
tos legales. La exploración radiográfica ayuda a de- mal puede indicar cambios degenerativos en la pulpa.
tectar lesiones de caries, restauraciones defectuosas, En general, la falta de respuesta indica necrosis pul-
pulpotomías, tratamientos endodóncicos previos y par, y la respuesta moderada transitoria indica pulpa
posibles defectos de éstos, estadios de la formación vital normal. Una respuesta dolorosa rápida puede ser
de la raíz, obliteración de conductos, resorción radi- signo de pulpitis reversible, y una respuesta dolorosa
cular, fracturas radiculares, radiotransparencias peri- prolongada indica pulpitis irreversible. Como algunas
rradiculares, ligamento periodontal ensanchado y pér- de estas pruebas provocan una reacción dolorosa, se
dida de hueso alveolar. deben hacer con precaución y explicar al paciente su
La integridad de la pulpa dental no puede deter- naturaleza e importancia. Cuando se realizan bien y
minarse mediante radiografías. Los cambios radio- se interpretan adecuadamente, estas pruebas son fia-
gráficos se detectan cuando la inflamación o los pro- bles para diferenciar entre enfermedad pulpar y pe-
ductos bacterianos originados por la pulpa dental riodontal. Las pruebas de vitalidad pulpar de uso más
causan suficiente desmineralización de la cortical del común son: prueba del frío, prueba eléctrica, prueba
hueso. A menudo, las fases iniciales de la resorción del flujo sanguíneo y prueba de la cavidad (192).

194
Lesiones periodontales-endodóncicas combinadas

(A) (B)

(C) (D)

(E)

Fig. 33. Enfermedad combinada endodóncica y periodon- meses de seguimiento que revela la ausencia de curación.
tal verdadera en un primer molar inferior. A) Radiografía La punta de gutapercha aparece insertada en el surco gin-
preoperativa que muestra radiotransparencias periapica- gival vestibular. D) Fotografía clínica que muestra el trata-
les. Las pruebas de sensibilidad pulpar eran negativas. B) miento de las superficies radiculares y la eliminación de la
Radiografía postoperativa inmediata después del trata- lesión perirradicular. E) Radiografía de seguimiento al año
miento endodóncico no quirúrgico. C) Radiografía a los 6 que muestra la remisión del proceso.

Prueba del frío hielo, cloruro etílico, dióxido de carbono (hielo seco)
y refrigerantes como el diclorodifluormetano (DDM).
Se aplica una sustancia o agente frío sobre una su- El dióxido de carbono (– 78 °C) y el DDM (– 50 °C) son
perficie bien aislada del diente. Para aislar los dien- extremadamente fríos y se usan sólo cuando la pulpa
tes, se secan las superficies de la corona con rollos de no responde a agente menos fríos. Los agentes muy
algodón, gasa y un chorro muy suave de aire. Se uti- fríos pueden provocar agrietamiento y líneas de frac-
lizan varios métodos de aplicación de frío: barritas de tura incompleta en el esmalte.

195
Rotstein y Simon

Fig. 35. Ejemplo de un aparato para la comprobación de la


vitalidad pulpar. Produce una corriente eléctrica de baja in-
tensidad para estimular las fibras sensitivas de la pulpa.

Fig. 34. El microscopio en la clínica permite mayor ilumi- Al interpretar los resultados, el odontólogo clínico
nación y aumento del campo de trabajo. Se utiliza para el debe tener en cuenta los falsos positivos y falsos ne-
diagnóstico y tratamiento. gativos de esta prueba (144). Las causas más comu-
nes de falsos positivos son la necrosis pulpar parcial
y el contacto involuntario con restauraciones metáli-
cas. En cuanto a los falsos negativos, las causas más
Los dientes con pulpa vital reaccionan al frío con
frecuentes son: canales pulpares obliterados, dientes
un dolor agudo y breve, que suele durar unos segun-
con traumatismos recientes, dientes con ápices in-
dos. Una respuesta dolorosa y prolongada suele indi-
maduros, pacientes que toman fármacos que elevan
car cambios anormales de la pulpa y pulpitis irrever-
el umbral de dolor y mal contacto entre el electrodo
sible. La falta de respuesta puede ser signo de necrosis
y el diente. No obstante, en general las pruebas pul-
pulpar. Cuando se hacen bien, estas pruebas son muy
pares eléctricas son fáciles de realizar y determinan
útiles para determinar si la pulpa ha sufrido un daño
adecuadamente la necrosis pulpar en dientes adultos.
irreversible. No obstante, pueden producirse falsos po-
sitivos y falsos negativos, especialmente en dientes
multirradiculares en los que no todas las raíces está Prueba del flujo sanguíneo
afectadas o en dientes con los conductos radiculares Esta prueba determina la vitalidad de la pulpa mi-
calcificados. diendo la tasa de flujo, más que la respuesta de las fi-
bras sensitivas. Se han desarrollado diferentes siste-
Prueba eléctrica mas, como espectrofotometría de doble longitud de
onda, oximetría pulsátil y láser Doppler, para medir
Se aplica un estímulo eléctrico al diente mediante la oxihemoglobina, las bajas concentraciones de san-
un aparato especial de prueba de la vitalidad pulpar. gre o el pulso de la pulpa (46, 54, 138, 161). Se aplican
Primero se limpia, seca y aísla el diente. Se pone un sensores a las superficies externas de la corona y se
poco de dentífrico en el electrodo del aparato, que registra el flujo sanguíneo de la pulpa, que se com-
luego se coloca en contacto con la superficie limpia para con los controles. El procedimiento es no inva-
del diente. Sólo se debe poner en contracto con su- sivo e indoloro. Estas pruebas son relativamente nue-
perficies dentales limpias. Se aplica la corriente gra- vas y no se usan de forma sistemática.
dualmente hasta que el paciente percibe una sensa-
ción. En la actualidad se dispone de diferentes
Prueba de la cavidad
aparatos; todos son efectivos y se usan de forma si-
milar (fig. 35). El propósito de la prueba es estimular Esta prueba es muy fiable para determinar la vitali-
las fibras nerviosas sensitivas de la pulpa para produ- dad de la pulpa. Básicamente consiste en hacer una ca-
cir una respuesta. La ausencia de respuesta suele in- vidad en el diente sin anestesia. Suele usarse la turbina
dicar necrosis pulpar. La repuesta positiva puede in- con una fresa nueva muy aguda. La respuesta positiva
terpretarse como reflejo de una pulpa vital intacta o indica presencia de tejido pulpar vital, mientras que la
parcialmente necrótica. Sin embargo, la prueba eléc- negativa indica claramente necrosis pulpar. Cuando no
trica no proporciona información sobre el estado del hay respuesta, la cavidad se extiende hasta la cámara
aporte vascular a la pulpa. pulpar para iniciar el tratamiento endodóncico.

196
Lesiones periodontales-endodóncicas combinadas

Esta prueba no ha de practicarse de forma siste- y estructuras de menor resistencia y abrirse en cual-
mática, puesto que puede ser dolorosa si la pulpa es quier punto de la mucosa oral o la piel facial. Dentro
vital. Se debe limitar a los casos en que todas las otras de la boca, suele verse el orificio de apertura en la en-
pruebas no han sido concluyentes y no se puede es- cía insertada vestibular o en el vestíbulo. Fuera de la
tablecer un diagnóstico definitivo del estado de la boca, la fístula puede abrirse en cualquier sitio de la
pulpa. cara o el cuello, aunque es más frecuente en la meji-
lla, la barbilla o el ángulo de la mandíbula y, en oca-
Pruebas en dientes restaurados siones, en el suelo de la nariz (78). Si la etiología es pul-
par, suele responder bien al tratamiento endodóncico.
Los dientes con restauraciones coronales extensas La identificación visual de la fístula no indica ne-
son más difíciles de evaluar con respecto a la vitali- cesariamente el origen del exudado inflamatorio o el
dad pulpar. Cuando sea posible, se debe quitar la res- diente afectado. A veces, el exudado se abre camino
tauración para facilitar la prueba pulpar. Si esto no es por el ligamento periodontal, asemejándose a una
factible, se abre un pequeño acceso a través de la res- bolsa de origen periodontal. La identificación del ori-
tauración hasta llegar a estructura dental sana. Los re- gen de la inflamación siguiendo el trayecto de la fís-
sultados más fiables se consiguen mediante la prueba tula suele ayudar a diferenciar entre enfermedades de
del frío y de la cavidad. En la mayoría de los casos, la origen endodóncico o periodontal.
prueba pulpar eléctrica no es útil. El trayecto de la fístula se determina insertando un
A través de coronas completas de oro suele ser po- material radiopaco semirrígido en la fístula hasta que
sible el acceso sin afectar la resistencia y estabilidad se encuentra resistencia. Suelen usarse puntas de gu-
de la restauración. El orificio se repara con amal- tapercha o puntas de plata previamente reblandeci-
gama u otro material de obturación permanente das. Se toma entonces una radiografía, que revela el
(123). También es posible hacer pruebas pulpares a curso del trayecto de la fístula y el origen del proceso
través de restauraciones de porcelana. En tales ca- inflamatorio.
sos, el acceso se hace lentamente con abundante
irrigación de agua.
Pruebas en dientes fisurados
Sondaje de bolsas Transiluminación

El sondaje periodontal es una prueba importante que Esta prueba sirve para ayudar a identificar fisuras y
debe practicarse cuando se intenta diferenciar entre fracturas de la corona. Se utiliza una fibra óptica co-
enfermedad periodontal y endodóncica. Se utiliza una nectada a una fuente de luz de alta intensidad para
sonda periodontal calibrada para determinar la pro- iluminar la corona y el surco gingival. El contraste en-
fundidad de sondaje y el nivel de inserción. Puede usarse tre el tono oscuro de la fractura y el tono claro del te-
también para determinar el trayecto de una fístula re- jido circundante revela claramente el tamaño y la
sultante de una lesión periapical inflamatoria que se orientación de la línea de fractura. Si hay restaura-
extiende cervicalmente a través del espacio del liga- ciones puede ser necesario eliminarlas para aumen-
mento periodontal. Una bolsa solitaria y profunda en tar la visibilidad.
ausencia de enfermedad periodontal puede indicar le-
sión de origen endodóncico o fractura vertical de la raíz.
Mordida
El sondaje periodontal sirve para el diagnóstico y el
pronóstico (192). Por ejemplo, el pronóstico de un Esta técnica ayuda a identificar fracturas de corona
diente con pulpa necrótica que ha desarrollado una o de corona y raíz. Tales fracturas producen una res-
fístula es excelente tras el tratamiento adecuado de puesta dolorosa en el paciente cuando mastica. Du-
conductos radiculares. Sin embargo, el pronóstico del rante la prueba se indica al paciente que muerda so-
tratamiento endodóncico en un diente con enferme- bre un bastoncito de algodón u otro material firme y,
dad periodontal grave depende del éxito del trata- de esta forma, se crean fuerzas. Esta prueba es muy
miento periodontal. Por lo tanto, la identificación co- fiable para identificar un solo diente que provoca do-
rrecta de la etiología de la enfermedad, sea ésta lor durante la masticación. Muchas de estas fracturas
endodóncica, periodontal o combinada, determinará afectan sólo a la corona del diente y acaban en la cá-
el curso del tratamiento y el pronóstico a largo plazo. mara pulpar. Tales casos se tratan bien con tratamiento
endodóncico.
Determinación del trayecto de la fístula
Tinción
Tanto la enfermedad periodontal como la endo-
dóncica pueden provocar una fístula. Los exudados in- La tinción identifica líneas de fractura en la corona
flamatorios pueden abrirse camino a través de tejidos y la raíz y suele usarse en combinación con la prueba

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Rotstein y Simon

de mordida. Se seca la corona y se aplica a la super- medad endodóncica primaria sólo se debe tratar con
ficie oclusal un algodón empapado en azul de meti- tratamiento endodóncico y tiene buen pronóstico. La
leno. Se indica al paciente que haga movimientos la- enfermedad periodontal primaria sólo se debe tratar
terales de mandíbula. De esta forma el tinte penetra mediante terapia periodontal. En este caso, el pro-
bien en la zona de fractura. Luego se aclara con agua nóstico dependerá de la gravedad de la enfermedad y
la superficie y se hace un examen visual con lentes de de la respuesta del paciente. La enfermedad endo-
aumento o microscopio. La fractura se identifica como dóncica primaria con afectación periodontal secun-
una línea oscurecida por el tinte. daria debe tratarse primero mediante endodoncia. Los
resultados del tratamiento se evaluarán a los 2-3 me-
Prueba de la anestesia selectiva ses y sólo entonces se considerará el tratamiento pe-
riodontal. Esta secuencia de tratamiento permite de-
Esta prueba se usa cuando no se sabe de qué ar- jar tiempo para la curación inicial de los tejidos y una
cada procede el dolor. La desaparición del dolor des- mejor evaluación del estado periodontal (28, 141).
pués de anestesia troncular mandibular confirma el También reduce el riesgo potencial de introducir bac-
origen mandibular del dolor. A menudo se usa la in- terias y sus productos durante la fase inicial de la cu-
yección en el ligamento periodontal para limitar la ración. Al respecto, se ha sugerido que la curación
zona en cuestión; sin embargo, no es posible aneste- periodontal es afectada negativamente por la elimi-
siar un solo diente sin afectar a los adyacentes (47). nación enérgica del ligamento periodontal y el ce-
En la arcada superior, la prueba debe dirigirse más mento subyacente en el ínterin del tratamiento en-
hacia un diente específico, inyectando un poco de dodóncico (21). El pronóstico de la enfermedad
anestesia en dirección anteroposterior al nivel del ápex endodóncica primaria con afectación periodontal se-
radicular. Esta prueba no sirve para diferenciar entre cundaria depende de la gravedad de la afectación pe-
enfermedad periodontal y endodóncica. riodontal, del tratamiento periodontal y de la respuesta
del paciente.
La enfermedad periodontal primaria con afecta-
Toma de decisiones terapéuticas ción endodóncica secundaria y la enfermedad com-
y pronóstico binada verdadera requieren ambos tratamientos, en-
dodóncico y periodontal. Se ha demostrado que la
La toma de decisiones terapéuticas y el pronós- infección pulpar tiende a promover el crecimiento
tico dependen fundamentalmente del diagnóstico epitelial a lo largo de la superficie de dentina denu-
de la enfermedad periodontal o endodóncica espe- dada (22). Además, los defectos periodontales indu-
cífica. Los factores principales que se han de consi- cidos experimentalmente alrededor de los dientes
derar son la vitalidad pulpar y el tipo y extensión del infectados se asocian con un 20 % más de epitelio
defecto periodontal. El diagnóstico de enfermedad que lo no infectados (88). Los dientes no infectados
endodóncica primaria o periodontal primaria no muestran un 10 % más de recubrimiento de tejido
suele plantear dificultades clínicas. En la enferme- conectivo que los infectados (88). El pronóstico de la
dad endodóncica primaria la pulpa está infectada y enfermedad periodontal primaria con afectación en-
no es vital. En la enfermedad periodontal primaria dodóncica secundaria y de la enfermedad combinada
la pulpa es vital y responde a las pruebas. Sin em- verdadera depende de la gravedad de la enfermedad
bargo, la enfermedad endodóncica primaria con periodontal y la respuesta al tratamiento periodon-
afectación periodontal secundaria, la enfermedad tal. Los casos de enfermedad combinada verdadera
periodontal primaria con afectación endodóncica suelen tener un pronóstico más reservado que los
secundaria, y las enfermedades combinadas verda- otros tipos de problemas endodóncicos periodonta-
deras, son clínica y radiográficamente muy simila- les. En general, si el tratamiento endodóncico es co-
res. Si una lesión se diagnostica y trata como enfer- rrecto, lo que sea de origen endodóncico se curará.
medad endodóncica primaria debido a falta de Por lo tanto el pronóstico de las enfermedades com-
pruebas de periodontitis inducida por placa, y se ob- binadas dependerá de la eficacia del tratamiento pe-
serva curación de los tejidos blandos en el sondaje riodontal.
periodontal y reparación del hueso en la radiografía
de control, puede hacerse un diagnóstico retros- Periodontology 2000, Vol. 34, 2004, 165-203
pectivo válido. El grado de curación conseguido tras
el tratamiento de conductos determinará la clasifi- Bibliografía
cación de forma retrospectiva. En ausencia de cura-
ción adecuada, estará indicado el tratamiento pe-
riodontal.
El pronóstico y el tratamiento de cada tipo de en-
fermedad endodónica-periodontal varían. La enfer-

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