Miguel Hernández en 48 estampas

Miguel Hernández en 48 estampas

Pedro Villar Sánchez
Ilustraciones de Pedro Villarejo

COLECCIÓN LIJ LDN

Dirigida por Ana Lorenzo

Texto: Pedro Villar Sánchez

Imágenes: Pedro Villarejo

Tipografías: Delicious (www.josbuivenga.demon.nl)

Charis SIL (scripts.sil.org/CharisSILFont)
Asociación Comunidad Librodenotas, octubre de 2010
www.librodenotas.com
Versión digital de la edición en papel con ISBN 978-84-937053-3-6
Licencia Creative Commons
(Reconocimiento – No comercial – Sin obras derivadas)

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A mi padre. Dondequiera que esté.
Pedro Villarejo
En mil novecientos diez
en la ciudad de Orihuela
nacía Miguel Hernández,
un futuro, una promesa.

10 11
Era de humilde familia
su padre no fue a la escuela,
el comercio del ganado
era su única riqueza.

12 13
Iniciaba el bachiller
y estudia en Santo Domingo,
recita y declama versos,
siente amor hacia los libros.

14 15
Abandona los estudios,
tuvo que dejar las aulas
por ayudar a su padre
a pasturar con las cabras.

16 17
En el color de los campos
vive la naturaleza,
en la flor del azahar
y entre las altas palmeras.

18 19
Y entre lectura y lectura
la vida le hizo poeta
entre los surcos del frío
y mirar a las estrellas.

20 21
Es muchacho observador,
abierto y muy receptivo,
lee y escribe a escondidas
con esfuerzo y sacrificio.

22 23
Su afición a los poemas
no veía bien su padre
pues dice que no era oficio
ni trabajo respetable.

24 25
Escribe emotivos versos,
cantos del hombre a la tierra
o de tema pastoril
inspirados en la huerta.

26 27
El aroma del naranjo
con el alma de la sierra
marca los años, la infancia,
las soledades primeras.

28 29
Con Ramón Sijé y Fenoll
participa en reuniones
al fondo de la tahona
que llenan sus ilusiones.

30 31
Forman un grupo de teatro,
recitan versos y poemas,
son sus primeros escritos
que aparecen en la prensa.

32 33
Hizo un viaje hacia Madrid
estuvo seis largos meses
busca la fama y trabajo
pero encontrarlos no puede.

34 35
Una carta a Juan Ramón,
varias recomendaciones,
Madrid no es como soñaba,
lleva muchas decepciones.

36 37
Y regresa a su Orihuela
cansado de sinsabores,
lleno de ecos y palabras
de los grandes escritores.

38 39
Se prepara duramente
y retoma la escritura,
en el año treinta y tres
publica Perito en lunas.

40 41
Inicia el segundo viaje
y vuelve a la capital,
en Cruz y raya publica
un auto sacramental.

42 43
Conoce a Pablo Neruda
el gran poeta chileno
que le ofrece su amistad
y descubre un mundo nuevo.

44 45
Su poesía se humaniza
una nueva era comienza;
los versos, más generosos
y de par en par las puertas.

46 47
En el año treinta y seis
en El rayo que no cesa
sonetos hablan de amor
a Josefina Manresa.

48 49
Una batalla entre hermanos
trajo la guerra civil,
la crueldad de la lucha
comenzaba ya a sentir.

50 51
Tuvo que tomar partido
y se alista voluntario
con las gentes más humildes
junto a los republicanos.

52 53
Y como humilde soldado,
de dolor y rabia grita
con la fuerza del poema
que en las trincheras recita.

54
Comisario de cultura
por sus versos y experiencia,
es la poesía social
la que ahora manifiesta.

56 57
Y será Viento del pueblo
su poesía de combate,
los versos comprometidos
palabra viva que late.

58 59
Un corazón dolorido
es su libro El hombre acecha,
el amor, la vida y muerte
en la crueldad de la guerra.

60 61
Con Manuel, su primer hijo,
su ilusión se ve truncada
pues de golpe y de repente
llegó la muerte temprana.

62 63
Y empieza a escribir los versos
del Romancero de ausencias,
son hondas las reflexiones,
la muerte como presencia.

64 65
Nacía Manuel Miguel
finalizando la guerra,
su pequeña flor de almendro
que alivia todas sus penas.

66 67
Lleva la imagen del niño
que aletea en el recuerdo,
el tiempo pasa despacio
y así se va consumiendo.

68 69
En el bando perdedor
terminada la contienda,
camino de Portugal,
lo paran en la frontera.

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Lo llevaron a prisión,
siente el dolor, la impotencia,
la nostalgia, el sufrimiento,
la soledad de la celda.

72 73
Para poder liberarlo
le piden que se arrepienta
que reniegue de sus libros,
o vivirá en la miseria.

74 75
En la cárcel de Alicante
lejos del agua y del río,
muy enfermo está Miguel,
sombra helada, viento frío.

76
Pájaro negro, la muerte,
acecha con su crujido,
hay señales en la aurora
que alertan a los heridos.

78 79
Con treinta y un años muere
de una cruel enfermedad,
con los ojos muy abiertos
y el alma de par en par.

80 81
—Llevad a mi hijo la luna
que le quise regalar
y los potros de madera
en un barco hacia la mar.

82 83
Se nos fue Miguel Hernández
nos quedaron sus poemas
que llevan la voz alada
del hombre y de sus tristezas.

84 85
Tienes el barro en las manos
para moldear palabras,
llevas la luz en los versos
y en la sombra, la esperanza.

86 87
Vuelvo de nuevo a escuchar
tu llanto sobre la tierra,
hoy los hombres jornaleros
tu gran corazón recuerdan.

88 89
Gorriones de los tejados
que surcáis todos los vientos
proclamad en las esquinas
canto a canto, verso a verso.

90 91
Que su obra no se olvida,
que sus libros permanecen
que sólo se irán muriendo
cuando ya no se recuerden.

92 93
Caballitos de madera,
materia de la ilusión
realizados con sus manos
para su hijo con amor,

94 95
en un vuelo que no cese
haced de los muros, alas,
que lleven, entre palmeras,
a su corazón, palabras.

96 97
Dejad que el poema fluya
olvidado de banderas
para volver a entregar
su canto sobre la tierra.

98 99
Tus ojos llevan el agua,
la voz de los oprimidos,
eres poeta del pueblo,
fruto del árbol nacido.

100 101
Entre el limón y el olivo,
entre la luna y la higuera
se abrirán surcos de amor
en tu tierra de Orihuela.

102 103
Ruiseñores y naranjos,
llevadle la luz más pura
al poeta universal
de la huerta del Segura.

104 105
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