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Al director:
Este programa es en forma de diálogo. En él intervienen una Señora y una joven. Puede usar un
narrador que lea las virtudes cristianas en el momento en que se va: a hablar de cada una de ellas.
Para ilustrarlo pueden hacerse letreros en colores con los nombres de las virtudes cristianas,
abreviadas, tales como: Gozo, Oración, Agradecimiento, Espíritu Santo, Profecía, etc.
La plataforma debe estar decorada en forma de tienda o boutique con diferentes prendas.
A de vestir y adornos personales. La señora irá mostrando la prenda o adorno a la joven, en ocasiones
ella puede ponerse la prenda o ponérsela a la joven, ésta puede hacer algunas exclamaciones, si
desea y da la introducción a cada parte que viene.
Los participantes entrarán en el momento de desarrollar su parte y se van. En la plataforma debe
haber una mesita con los respectivos letreros.
Si piensa que le va a ser difícil preparar el diálogo, cada participante puede subir usando su prenda
respectiva, y dando la introducción a su parte. En este caso no necesita preparar la plataforma como
una tienda. Puede haber un letrero colgante donde se lea: "Los Adornos del Cristiano".
DRAMA:
(Joven contemplando las cosas de la tienda)
Joven: ¡Cuánta ropa y adornos bonitos tienen esta tienda! Me gustaría comprar muchos de ellos,
pero no tengo dinero para hacerlo. qué lástima!
(Señora cercana a ella que la observa y escucha)
Señora: Sabe usted joven, que hay adornos muchos más hermosos que éstos que usted ve aquí, los
cuales no le cuestan absolutamente nada y nunca se les gastan, si los sabe usar bien.
Joven: ¡Fantástico! ¿Qué clase de adornos son ésos y cómo puedo obtenerlos?
Señora: Pues le voy a explicar inmediatamente. Estos adornos no solamente la embellecerán, sino que
le ayudarán a vivir una vida mejor.
Joven: ¡Cada vez estoy más interesada en conocer esos adornos!
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Señora: Esos adornos no son exteriores, sino interiores. Los adornos exteriores se gastan y se rompen,
pero los interiores cada día se hacen mejores. Ahora le voy a explicar todo con detalles:
1- ESTAD SIEMPRE GOZOSOS. (Tomando en sus manos la caja de cosméticos que se exhiben y
luego el letrero "GOZO")
Señora: Es cierto que un grado moderado de algún cosmético nos pueden hacer lucir bien, pero le
aseguro que no hay nada que embellezca más el rostro que la sonrisa. En Proverbios 15:13, leemos:
"El corazón alegre hermosea el rostro". Por eso debemos estar siempre gozosos. El gozo del corazón
reflejado en el rostro, es mejor que cualquier cosmético. Una de las cosas que de-muestra más
nuestro estado de ánimo es nuestro rostro. Cuando estamos felices y gozosos, muchas veces lo
demostramos con un canto en el corazón y en los labios. Debemos estar siempre gozosos.
Señora: A muchas personas les gusta adornarse con gafas o espejuelos obscuros, pero éstas no le
dejan ver las cosas con claridad. Por medio de la fe podemos ver con claridad aunque todo parezca
obscuro, lo contrario de las gafas que hacen ver obscuro todo lo que es claro. Según "la fe es la
sustancia de las cosas que se esperan y la demostración de las cosas que no se ven". Podemos ejercer
nuestra fe por medio de la oración. La oración nos eleva a Dios y nos santifica. La paz que
experimentamos se refleja en nuestro rostro y en todo nuestro cuerpo. Cuando oramos con fe. Dios
contesta nuestras peticiones. Usando siempre el lente de la fe. Podemos vivir una vida victoriosa. La
oración es uno de los más hermosos adornos que podemos llevar, por eso debemos orar sin cesar
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