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El pastel de la escuela sabática

¡Hola! Me alegra que estén aquí. Los invito a pasar a la cocina, que es más acoge -dora, ¡allí
conversaremos un poco mientras mezclamos los ingredientes! Es que estoy preparando un pastel
de Escuela Sabática, ¡uno que a mi tía le encantaba, y es muy fácil e hacer!

Tres cuartos de taza de azúcar


Tomemos tres cuartos de taza de azúcar, recordando aquel verso que dice: ¡Rojas son las rosas,
Azules las violetas,
Dulce es el azúcar,
Igual que tú!
El azúcar representa al pueblo de Dios, es decir, a ti y a mí. Si no estuvieras presen-te, no sería tan
dulce como lo es ahora.
¿Alguna vez han visto un grano de azúcar al microscopio? ¡Es hermoso! Sin embargo, está lleno de
bordes afilados y de puyas. Los hijos de Dios, con todo y su dulzura, a veces también pueden
causar fricciones.
El azúcar es como la arena que traba el funcionamiento de un mecanismo delicado. Muchas veces
pasa eso cuando el dulce pueblo de Dios se reúne. ¡Nos hacemos daño con los bordes filosos de los
demás, y sin darnos cuenta terminamos discutiendo!

Un cuarto de taza de aceite


Si esperamos que la Escuela Sabática no resulte áspera, sino suave, debemos mezclar el azúcar
con el Espíritu Santo. ¡Qué distinto es cuando él tiene el control de nues tras vidas! Derrite los
bordes ásperos, y así permite que nos unamos sin fricciones dañinas. El Espíritu Santo nos ayuda a
amar a quienes nos han ofendido. Nos vuelve cálidos y amigables hacia los extraños. Mezcla
nuestras vidas en una hermosa unidad.
En esta mañana, demostremos la acción mezcladora del Espíritu Santo saludando a quienes nos
rodean y dándoles la bienvenida a esta Escuela Sabática.

Media taza de leche

La leche debe añadirse de a cucharadas. En el pastel de la Escuela Sabática, la leche representa a la


palabra. Voy a necesitar su ayuda en esto. Por cada promesa bíblica que citen, añadiré una
cucharada.
¡Vamos! ¡Ayúdenme! ¡Citen o lean un versículo! (Dé tiempo a la audiencia para que respondan.
Añada una cucharada de leche a la vez.) (1/2 taza = 8 cucharadas)

Un huevo, sin batir

El huevo es un símbolo de vida, de esperanza; ya que a través de él nace una nueva generación. En
nuestro pastel de Escuela Sabática el huevo representa la vida eterna, la bendita esperanza. ¿Qué
sería de nosotros sin ella? Esta esperanza une a nuestra Escuela Sabática con todas las demás
alrededor del mundo. (Dé aquí un testimonio de dos minutos de lo que representa para usted la
bendita esperanza, o tenga a alguien listo para responder.)
Una cucharadita de vainilla

Pongámosle sabor al pastel de Escuela Sabática alabando a nuestro Dios por todo lo que ha hecho.
Cantemos "A Dios sea la gloria" (Himnario adventista, n° 141). ¡Qué insípida sería la vida si no
existiera la música!

2 1/2 cucharaditas de polvo para hornear

Jesús dijo: "El reino de los cielos es semejante a la levadura que tomó una mujer y escondió en tres
medidas de harina" (Mateo 13: 33).
La levadura es la que hace que el pastel se levante, que crezca. Solo mediante la predicación del
evangelio lograremos que la iglesia crezca a nivel mundial. Tampoco podemos dejar de echarle
polvo para hornear misionero a nuestro pastel de Escuela Sabática.
El misionero de hoy nos informará cómo está obrando esta levadura en algún lugar del mundo.

Vierta 1 1/4 taza de harina

La harina representa nuestras oraciones. Aunque no sepamos cómo orar debidamente, el Espíritu
Santo se vierte en nuestras palabras e interpreta los deseos más pro-fundos de nuestro corazón.
(Vierta la harina en la batidora y mézclela mientras habla.)
La oración debe formar parte activa de la Escuela Sabática. Arrodillémonos para orar. (Oración.)

Media cucharadita de sal


Jesús dijo: "Vosotros sois la sal de la tierra". La sal representa el alcance evangelizador de nuestra
División: las escuelas bíblicas de verano, los clubes bíblicos vecina -les, los días de visita, los
programas para atraer a ex miembros de iglesia o la Escuela Sabática filial. Mediante estos
programas, ayudamos a muchas personas a comproba r por sí mismos lo bueno que es nuestro
Señor.

(Bata vigorosamente con una cuchara hasta que la mezcla este suave, luego viértala en el
molde.)
La cuchara representa a los líderes de nuestra iglesia. Su función es la de sacudir a los santos,
levantarlos de sus asientos, hacer que participen en los programas de la iglesia y que testifiquen
para el Señor a través del evangelismo. Colocaremos ahora la mezcla en el molde de la División
Interamericana, lista para ser horneada. ¡No se vayan! ¡Ya regresamos! (Llévese la mezcla
consigo.)
Pastel terminado. Se soplan las velitas.
¡Aquí tenemos nuestro pastel de Escuela Sabática!

Hoy estamos celebrando a cada uno de ustedes, quienes dan lo mejor de cada uno para cumplir la
misión que Cristo nos encomendó. Esperamos ansiosos el día en que nos reunamos en el cielo para
celebrar la mayor y más gloriosa Escuela Sabática de todas, a los pies de Jesús.
A continuación, el hermano pedirá un deseo en nombre de todos y soplará las velitas. (Se soplan
las velas.)
¡Muy bien! ¡Las apagó todas! ¿Podemos saber ahora cuál fue su deseo? (É1 responderá: "Deseé
que rindiésemos el cien por ciento en nuestro estudio diario de la Escuela Sabática cada
semana".)

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