LA POESÍA

EN LA PEDAGOGÍA DE LA LECTURA
¿Cómo mediar experiencias con
textos poéticos?
◦ ¿Por qué nos hacemos esta pregunta?
◦ ¿Qué lugar tiene la poesía en las aulas de literatura?
◦ ¿Qué lugar tiene en nuestra biografía lectora?
◦ ¿A qué tipo de experiencias abre la lectura de poesía?
◦ ¿Se deben aplicar estrategias diferentes a las de la
mediación con otros géneros literarios?
◦ La contundencia de la poesía. Sus efectos:
¿qué hacemos con lo que la poesía provoca,
con lo que deviene al leer el poema?
Efectos
◦ Más que otros géneros, la poesía evidencia los efectos que en nosotros/as
provoca el lenguaje.
Selección del corpus
◦¿Cómo elegir un corpus de poesía para
compartir?, ¿a partir de qué criterios hacerlo?
Formas de empezar y avanzar sobre el
poema
◦ Relación canción – poema / música-poesía
◦ Musicalidad del poema
◦ Uso del lenguaje (dilucidar procedimientos a partir de los
efectos de lectura)
◦ No buscar “explicaciones” de esos efectos sino partir de
sentimientos, asociaciones
◦ Relación forma – Contenido
POEMAS
 Ya no
Ya no será
Ya no Ya no
no viviremos juntos Idea Vilariño
no criaré a tu hijo (Uruguay)

no coseré tu ropa
no te tendré de noche
no te besaré al irme
nunca sabrás quién fui
porqué me amaron otros.
No llegaré a saber
por qué ni cómo nuca
ni si era verdad
lo que dijiste que era
ni quién fuiste
 ni quién fui para ti
ni cómo hubiera sido
vivir juntos
querernos
estar.
Ya no soy más que yo
para siempre y tú
ya
no serás para mí
más que tú Ya no estás
en un día futuro
no sabré dónde vives
con quién
ni si te acuerdas.
No me abrazarás nunca
como esa noche
nunca.
No volveré a tocarte.
El fondo de las cosas es opaco. Claudia Masin
No está allí la preciosa (Chaco)

serenidad que prometiste.

Hay quienes no formamos parte de la especie
más que como el error, la anomalía que confirma la precisión La luz de la
y el equilibrio de las cosas. Como las crías enfermas, luna
defectuosas, que las perras apartan alzándolas del cuello con la boca,
no se espera de nosotros ninguna fortaleza ni coraje. La mayoría de las veces Claudia Masin

no hace falta matarnos: el cuerpo vaciado del amor

y del deseo de los otros pasa rápido. Una mancha en el cielo
que pocos llegar a ver antes de que se apague
a miles de años luz, sin poder hacer contacto con la tierra,
sin que nadie la extrañe. Pero algunas veces,
contra todas las posibilidades, una raíz crece desaforada,
sostenida en el aire hasta clavarse en la materia
arrastrada por un deseo salvaje, por el empuje de la vida
que resiste aunque sepa que ese esfuerzo descomunal corre el riesgo de
quebrarse. Dejá
que tu cabeza descanse en mis manos, me dijiste, prometo
no soltarte. Y yo, que lo único que sabía
era que había que escapar del amor como quien escapa
de una pedrada en el pecho, un golpe bien dado en el lugar
más vulnerable, me quedé
sin embargo en ese abrazo y fui curado
de las enfermedades de los otros, de lo que hicieron conmigo
para salvarse. No hizo falta que nadie más me tocara. Un cuerpo
sostenido en otro cuerpo se vuelve una casa.
A la hora de poner la mesa, éramos cinco:
mi padre, mi madre, mis hermanas
10
y yo. Después mi hermana mayor se casó
José Luis
después mi hermana menor se casó
Peixoto
después mi padre murió. Hoy
a la hora de poner la mesa, somos cinco,
menos mi hermana mayor que está
en su casa, menos mi hermana menor
que está en su casa, menos mi padre,
menos mi madre viuda, cada uno de ellos
es un lugar vacío en esta mesa en donde
como solo, pero van a estar siempre aquí.
a la hora de poner la mesa, seremos siempre cinco.
mientras uno de nosotros esté vivo, seremos
siempre cinco.
Viste que hay personas
que tienen el corazón como un hogar Vos ahora voz
que aún sin creer en la palabra
Franco Rivero
hogar
ese corazón te gusta

bueno
eso
así de simple.
la armonía es escuchar que un grillo
no se superpone a un sapo
ni a una rana
y uno entiende Pulso
sin dificultad Franco Rivero
sapo
rana
grillo
yo
que no tengo armonía
algo que hago siempre
es acostarme de noche
boca arriba en la ruta
casi nadie pasa aquí
pero no hay silencio

y sobra vía láctea Pulso

acostado así Franco Rivero

entonces mi corazón
late pequeño entre todo
y soy un anfibio
un insecto más
que entona
por instinto
mi soledad me vuelve afín
me pone en la misma dirección
que el campo
Pulso
pulso del mundo Franco Rivero
suena tan bien (Corrientes)

lato tan bien de anfibio

o de insecto
en el mundo.
Se abre el cuerpo
como una flor fresca. Osvaldo Bossi
Te lo entrego otra vez. Yo (Argentina)

no aprendí nada de la vida.

 XII

Hilda Hiltst
Tu gesto de alegría Baladas
nunca sería para mí. (Brasil)

Tu conflicto nocturno
ése sí
Se posará en mi cara.
Arde el campo en el sol al mediodía
Aquí todas las cosas se disponen
a renacer
12
Y entonces, de repente, José Emilio Pacheco
todo el jardín se yerque entre las piedras: (México)
nace el mundo de nuevo ante mis ojos.
Tuyo es el tiempo cuando tu cuerpo pasa
con el temblor del mundo,
el tiempo, no tu cuerpo.
Tu cuerpo estaba aquí, tendido al sol, soñando,
se despertó contigo una mañana
cuando quiso la tierra. Lo nuestro
Eugenio Montejo
Tuyo es el tacto de las manos, no las manos;
(Venezuela)
la luz llenándote los ojos, no los ojos;
acaso un árbol, un pájaro que mires,
lo demás es ajeno.
Cuanto la tierra presta aquí se queda,
es de la tierra.

Sólo trajimos el tiempo de estar vivos

entre el relámpago y el viento;
el tiempo en que tu cuerpo gira con el mundo,
el hoy, el grito delante del milagro;
la llama que arde con la vela, no la vela,
la nada de donde todo se suspende,
—eso es lo nuestro.