Historia Militar Universal

Afanador cardona samuel

Betancur Muñoz Julián
Abella Cocama Carlos
Daza Aguirre pablo

GUERRAS DE LOS 7
AÑOS

BATALLA DE PRAGA
 Contexto de la Guerra de los 7 años

La Guerra de los Siete Años fue un conflicto global

que tuvo lugar entre 1756 y 1763. Se desarrolló
principalmente en Europa, América del Norte,
América del Sur, África, India y en los océanos
Atlántico e Índico. Fue un conflicto complejo que
involucró a varias potencias europeas y sus
colonias, y tuvo importantes implicaciones
políticas, económicas y territoriales.
 Origen de la Guerra

El conflicto se originó en disputas territoriales,

rivalidades coloniales y conflictos económicos entre
las principales potencias europeas de la época,
especialmente entre Gran Bretaña y Francia. En
América del Norte, la guerra se conoce como la
Guerra Franco-Indígena, ya que involucró a las
colonias británicas y francesas, así como a las
poblaciones indígenas que estaban aliadas con uno u
otro bando.
El tratado de Aix-la-Chapelle de 1748 no logró
resolver las tensiones entre las potencias
europeas, y en 1756 estalló la guerra
nuevamente. La guerra tuvo importantes
batallas y teatros de operaciones en Europa,
como la batalla de Plassey en la India y el
conflicto en América del Norte conocido como
la Guerra Franco-Indígena.
 Termino

El conflicto finalmente terminó en 1763 con la

firma del Tratado de París. El tratado tuvo
consecuencias significativas, reconfigurando
el equilibrio de poder en Europa y llevando a
cambios territoriales y coloniales. Francia
cedió Canadá y la mayor parte de Luisiana a
Gran Bretaña, mientras que España cedió
Florida a cambio de Luisiana. Además, la
guerra dejó a las potencias europeas con
deudas significativas y contribuyó a la
acumulación de tensiones que eventualmente
desencadenarían en eventos como la
Revolución Americana y la Revolución
Francesa.
 Federico ll

Federico II, también conocido como Federico el Grande

(Frederick der Große en alemán), fue el rey de Prusia desde
1740 hasta 1786. Nació el 24 de enero de 1712 y fue
miembro de la dinastía Hohenzollern. Es conocido por su
habilidad militar, su gestión eficiente del gobierno y su
apoyo a la Ilustración.
Federico II asumió el trono de Prusia en 1740 y rápidamente
se vio involucrado en la Guerra de Sucesión Austriaca
(1740-1748). A lo largo de su reinado, llevó a cabo reformas
en el ejército prusiano, convirtiéndolo en una de las fuerzas
militares más eficientes y disciplinadas de la época.
Participó en varias guerras, incluida la Guerra de los Siete
Años, donde se destacó por su habilidad táctica y
estratégica.
 Su participación en la Guerra

La participación de Federico II de Prusia en la

Guerra de los Siete Años (1756-1763) fue
significativa y se destaca por sus habilidades
militares, estrategias y contribuciones al
conflicto. Aquí hay algunos aspectos clave de su
participación:

- Alianza con Gran Bretaña

- Campañas Militares
- Crisis Militar y Diplomática
- Tratado de Hubertusburg
 Objetivo Definido

Antes de emprender cualquier

operación militar, es crucial tener un
objetivo claro y definido. Esto ayuda
a concentrar los esfuerzos y los
recursos en la consecución de
resultados concretos.
 Ofensiva

•La iniciativa es fundamental en el

campo de batalla. Tomar la
ofensiva permite dictar el ritmo de
la acción y mantener a la fuerza
enemiga bajo presión constante.
Economía de
Fuerzas
•Los recursos militares son
limitados, por lo que es esencial
utilizarlos de manera eficiente y
efectiva. Concentra tus fuerzas en
los puntos clave y evita
dispersarlas en áreas menos
importantes.
Maniobra

•La capacidad de maniobrar es

crucial para obtener ventaja sobre
el enemigo. Busca explotar las
debilidades del adversario y
mantener la flexibilidad para
adaptarte a los cambios en la
situación del campo de batalla.
Unidad de
Propósito
•En el ámbito militar, la cohesión y
el trabajo en equipo son
fundamentales. Todos los
miembros de una unidad deben
trabajar hacia un objetivo común,
siguiendo las órdenes y
apoyándose mutuamente.
 Seguridad

•La seguridad de las fuerzas

propias es una prioridad en
cualquier operación militar. Esto
implica protegerse contra las
amenazas del enemigo, así como
garantizar la integridad de las
comunicaciones y la logística.

PRIMERA CARGA
Cuando Federico, que había liderado el
avance de la derecha, llegó a Sterbohol, le
expresó a Schwerin su preocupación por
este ataque prematuro y aislado. Schwerin
trató de tranquilizar a Federico y luego
cabalgó hacia la caballería del ala izquierda
para ordenar que atacara a la caballería
austriaca.
CARGA PRUSIANA DE
CABALLERIA
SEGUNDA CARGA
Tan pronto como se habían reunido, los
coraceros de Schönaich renovaron su
ataque, apoyados esta vez por las 20 EDs
de la segunda línea y por la BRH de von
Stechow con el RH-4 de Puttkamer (10 EHs)
y el RH-3 de Wartenberg (10 EHs) enviados
por Federico desde su reserva.
 Ataque de infantería prusiana al norte de
Sterbohol

Durante este tiempo, alrededor de la 13:00

horas, el ataque de la infantería prusiana al
norte de Sterbohol también había fallado. Las 14
BIs que formaban el ala izquierda y el flanco
habían avanzado con los mosquetes contra las
posiciones austriacas a pesar de la fatiga de la
marcha nocturna y el terreno pantanoso y difícil
por el que tenían que moverse. Quedaron bajo
el fuego de las baterías austriacas sin el apoyo
adecuado de su propia artillería.
 ATAQUES PRUSIANOS EN EL CENTRO

De todos modos, las DIs de Baden-

Durlach y Arenberg (10) desplegadas
más a la izquierda tenían que
enfrentar otra amenaza. De hecho,
Hautcharmoy con 4 BIs de su BRI (RIs
Hautcharmoy y Schultze) y Lestwitz
con otros 4 BIs de su BRI (RIs Tresckow
y Meyerinck), de la derecha prusiana,
avanzaban contra sus posiciones.
Ataques finales prusianos

Durante los intensos

combates alrededor de
Sterbohol y Unter Michelup,
los austriacos maniobraron
tropas en su ala derecha
para formar un ángulo por
temor a ser atacados en el
flanco y la retaguardia
Batalla de Praga
Los prusianos consiguieron la victoria pagando un alto precio. El número de bajas varía según las
fuentes entre los 10 000 hombres​y los 18.000, aunque el número real debe estar más cerca de las
14.300 bajas entre muertos y heridos. La muerte más sentida fue la del Mariscal Schwerin, pero otros
muchos oficiales murieron.
Por el lado imperial, aunque también varían las fuentes, parece acertado decir que hubo alrededor de
12.000 bajas (muertos y heridos) entre los que se encontraba el Mariscal Browne, que fue herido de
gravedad. Más de 4000 soldados imperiales fueron hechos prisioneros y cerca de 50.000 soldados se
vieron encerrados en Praga sin más posibilidad de socorro que la del Mariscal Daun.
Los prusianos también capturaron 240 piezas de artillería, varios estandartes y las vituallas del
ejército imperial.
Tras la batalla Federico II se entretuvo bombardeando Praga, perdiendo la opción de avanzar con
parte de sus tropas en territorio austriaco.
Poco después el ejército de Daun socorrió a Praga y levantó el asedio tras vencer a Federico II en la
batalla de Kolin, poniendo a Prusia en un gran peligro.
 Antecedentes de la batalla

María Teresa I de Austria no abandonaba la esperanza de recuperar Silesia. Conociendo la inquietud

que habían levantado las grandes victorias de Federico II de Prusia durante la
Guerra de Sucesión Austriaca, se esforzó en formar una alianza contra él.
Llegó a un acuerdo con Isabel I de Rusia, y con la ayuda de Wenzel Anton Graf Kaunitz consiguió
convencer a Francia que se uniese a la alianza.
La alianza del Sacro Imperio Romano Germánico y Francia (que hasta entonces habían sido
enemigos) hizo que Gran Bretaña decidiese aliarse con Prusia.
Federico II era consciente de las intenciones de Austria y de que era una cuestión de tiempo el que
Francia y Rusia le declarasen la guerra, así que decidió que lo mejor sería atacar.
federico en los Últimos años
En 1785, Federico II firma un tratado de amistad y comercio con los Estados Unidos de América, el
reconocimiento de la independencia del nuevo país. El acuerdo incluye una cláusula novedosa, en el que
los dos líderes de los poderes ejecutivos de ambos países garantizan un especial trato humano en la
detención de los prisioneros de guerra.65​Cerca del final de su vida, Federico se vuelve cada vez más
solitario. Su círculo de amigos en Sanssouci muere poco a poco y sin reemplazos, y Federico se convierte
cada vez más en alguien crítico y arbitrario, por la frustración de la administración pública y su cuerpo de
oficiales. La población de Berlín siempre anima al rey, cuando regresa a la ciudad desde giras provinciales
o revistas militares, pero Federico no disfruta del placer de ser popular entre la gente común, ya que
prefiere la compañía de sus mascotas, sus galgos italianos,66​a quien se refiere como sus "marqueses de
Pompadour", como una burla a la majestad de la realeza francesa.67​Federico muere en un sillón de su
estudio en el Palacio de Sanssouci, el 17 de agosto de 1786.
VESTIMENTA