Está en la página 1de 7

COMPORTAMIENTO DESVIADO Y

AUTORITARISMO
El término "comportamiento desviado" se refiere a
acciones o conductas que se apartan de las normas
sociales, legales o morales establecidas en una sociedad.
Estas conductas desviadas a menudo se consideran
inapropiadas o perjudiciales y pueden variar en gravedad.
Algunos ejemplos de comportamiento desviado incluyen
el vandalismo, el robo, el consumo excesivo de drogas, la
violencia, el acoso, la corrupción, la delincuencia juvenil,
entre otros.
Es importante señalar que lo que se considera
"comportamiento desviado" puede variar según la cultura,
el tiempo y la perspectiva individual. Lo que es
considerado desviado en una sociedad puede no serlo en
otra, y las normas culturales y sociales evolucionan con el
tiempo. Además, en algunos casos, las conductas
desviadas pueden ser el resultado de factores subyacentes,
como problemas de salud mental, adicciones o desafíos
sociales.
En el ámbito legal, el comportamiento desviado puede
llevar a consecuencias legales, como arrestos, juicios y
condenas. En algunos casos, las personas que se
involucran en comportamientos desviados pueden ser
remitidas a programas de rehabilitación o tratamiento para
abordar las causas subyacentes de su conducta.
El autoritarismo es un sistema de gobierno o un
estilo de liderazgo en el cual se concentra el poder en
un individuo o un grupo pequeño de personas, y se
caracteriza por la falta de participación significativa
o control por parte de la población en general. En un
régimen autoritario, el líder o el grupo en el poder
tiende a tomar decisiones unilaterales y a ejercer un
control estricto sobre la sociedad, a menudo con un
énfasis en la obediencia y la disciplina.
• Concentración del poder: En un sistema autoritario, el poder se concentra en un líder o en una élite
política, y estos individuos toman decisiones importantes sin consultar a la población.

• Falta de participación democrática: En contraste con los sistemas democráticos, en los regímenes
autoritarios no hay elecciones libres y justas en las que los ciudadanos tengan la oportunidad de elegir a
sus líderes.

• Control de los medios de comunicación: Los regímenes autoritarios a menudo ejercen un fuerte control
sobre los medios de comunicación para limitar la difusión de información crítica o independiente.

• Represión política: Puede haber represión de opositores políticos, activistas y críticos, así como
limitaciones a la libertad de expresión y de reunión.

• Leyes y regulaciones restrictivas: El gobierno puede promulgar leyes y regulaciones que limiten las
libertades civiles y restringan las actividades de la sociedad civil.

• Falta de rendición de cuentas: En un régimen autoritario, los líderes a menudo no están sujetos a un
sistema de rendición de cuentas efectivo, lo que puede dar lugar a la corrupción y el abuso de poder.
El autoritarismo puede manifestarse en diferentes grados y estilos
en diversas partes del mundo. Algunos ejemplos históricos de
regímenes autoritarios incluyen el nazismo en la Alemania de
Hitler, el régimen de Joseph Stalin en la Unión Soviética y el
gobierno de Saddam Hussein en Irak. Sin embargo, también
existen formas más sutiles de autoritarismo en las que las
elecciones se celebran, pero se manipulan, o en las que se utiliza
un control más encubierto sobre la sociedad.

También podría gustarte