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SEMANA 1
Las empresas que entienden el
profesionalismo en un sentido amplio
logran un entorno de mayor
productividad, concordia y bienestar. Por
el contrario, cuando no existe calidad
profesional, la imagen de la entidad se
resiente, el entorno de trabajo se va
dificultando, falla la cooperación, los
empleados se desmotivan, hay una alta
rotación en los puestos y se incrementa
el ausentismo laboral.
Posibilidad de crecimiento, desarrollo profesional y apertura a las
nuevas ideas son algunas de las condiciones laborales que buscan los
recién egresados universitarios en las empresas. Este grupo de jóvenes,
mejor conocidos como millennials, buscan líderes y compañías con alto
impacto social y económico en su país, que además de ser flexibles, les
permitan obtener un balance entre su vida privada y su crecimiento
laboral.
Lo cierto es que en su afán por
encontrar el trabajo ideal,
muchos jóvenes saltan de un
empleo a otro, sin desarrollar su
talento potencial, lo que genera
pérdidas económicas y de
capital humano para las
empresas.
De acuerdo con datos entregados por el Observatorio Laboral para la
Educación, en su encuesta a empleadores, muchas de las competencias
destacadas tienen que ver con la formación personal, seguidas por
otras relacionadas con el desempeño laboral.
De un listado de 25, a continuación se menciona en un cuadro
informativo, cuáles son las 10 más destacadas por los empresarios.
¿Puedes trabajar en
equipo, tomar
decisiones y resolver
problemas?
Ésas son las habilidades que los empleadores buscan más cuando
están decidiendo a qué recién graduados contratar.
La siguiente habilidad más importante: la capacidad de comunicarse
verbalmente con la gente dentro y fuera de una organización.
Asi mismo, los empleadores quieren que sus nuevos empleados
tengan conocimientos técnicos relacionados con el trabajo, pero eso
no es tan importante como un buena capacidad para el trabajo en
equipo, la toma de decisiones y las habilidades de comunicación, y la
capacidad de planificar y priorizar el trabajo.
La Asociación Nacional de Universidades y Empleadores (NACE), una
organización sin fines de lucro estadounidense que vincula a las
agencias de empleo de las universidades con los empleadores, realizó
una encuesta entre agosto y octubre de 2014, en la que preguntó a
los gerentes de recursos humanos qué habilidades tienen previstas
priorizar al momento de reclutar a la clase 2015 en las universidades y
escuelas de posgrado.
Aunque la muestra de la encuesta es pequeña —NACE recoge las
respuestas de sólo 260 empleadores—, las respuestas son muy
valiosas.
Los recién graduados deben prestar atención. (La mayoría de los
encuestados trabaja en grandes compañías como Chevron, IBM y
Seagate Technology.)
10 habilidades que los empleadores dicen buscar
• Capacidad para trabajar en una estructura de equipo
• Capacidad para tomar decisiones y resolver problemas
• Capacidad de comunicarse verbalmente con la gente dentro y fuera de una
organización
• Capacidad para planificar, organizar y priorizar el trabajo
• Capacidad para obtener y procesar información
• Capacidad para analizar datos cuantitativos
• Conocimiento técnico relacionado con el trabajo
• Dominio de paquetería de software específica
• Capacidad para generar y/o editar informes escritos
• Posibilidad de vender e influir en los demás
Es importante demostrar que tienes esas habilidades en tu carta
de presentación, tu currículum vitae y tu entrevista.
Recuerda los proyectos escolares en los que fuiste miembro del
equipo o líder y los empleos en los que has tenido que planificar y
priorizar.
Describe las habilidades específicamente en tu currículum y en tu
entrevista de trabajo.
“Un titulo universitario ya no tiene
la misma garantía. Por el hecho de
que el mercado laboral es cada vez
más competido y tan cambiante,
por lo que resuta tan importante
que las personas que egresan de
una licencitura y van a construir
una carrera profesional, lo hagan
de una manera informada, con
datos a la mano acerca del
panorama económico para las
distintas áreas profesionales”
Destrezas, habilidades, actitudes y aptitudes que conforman a un
candidato o trabajador en la empresa, constituyen lo que
conocemos como competencias laborales. Naturalmente y con el
paso de los años, estas cambiarán según las exigencias del contexto.
Se sabe que al momento de realizar una selección de personal, no
solamente es suficiente ver sus competencias respecto al puesto de
trabajo. Sino que además, es de vital importancia que posean el
desarrollo de otras competencias laborales o habilidades asociadas.
Hoy más que nunca podemos afirmar
que de hecho son estas capacidades
las que resaltan al momento de
seleccionar personal.
Con el auge del teletrabajo o home
office, ha cambiado por completo lo
que entendíamos acerca del mundo
laboral.
Y con ello, también cambió aquello
que debemos esperar de nuestros
empleados.
Las competencias laborales son un
conjunto de capacidades, que son
necesarias por parte de un
trabajador para desarrollarse en un
determinado rol.
Se puede entender que son las
responsables de marcar una
distinción al momento en el que una
persona ejecuta una labor específica,
respecto a los conocimientos
técnicos que pueda poseer.
• Por ejemplo, una empresa podría encontrar fácilmente un grupo de
20 o 50 candidatos para convertirse en programadores de su empresa
en solo un par de horas. Pero únicamente un par de ellos o ellas,
serán aptos para adaptarse a la cultura de dicha organización.
• El concepto de “competencias” aplicado al mundo laboral, fue
desarrollado por varios autores e investigadores, pero fue el psicólogo
David McClelland en los ’70 quien logró popularizar el término. La
definió como las características propias de una persona, las cuales
están causalmente relacionadas con los comportamientos y la acción
exitosa en su actividad profesional.
Es muy habitual que las personas
a cargo de emprender un proceso
de búsqueda en Recursos
Humanos se encuentren con la
gran dificultad de elegir qué tipo
de competencia será la que
prioricen en esta instancia.
Por ello, es importante entender
los distintos tipos de
competencias profesionales que
existen:
• Competencias básicas y de comportamiento: se relaciona con
aquellas aptitudes más suaves que se requieren para un trabajo. Se
enfocan en el aprendizaje adquirido desde la niñez hasta la adultez y
se relacionan con la conducta y la manera de relacionarse con los
demás.
• Competencias técnicas: son aquellas referidas al uso eficaz de los
sistemas, herramientas o mecanismos, exclusivamente necesarios
para el puesto. Son adquiridas a lo largo de la vida profesional y
mediante formaciones especializadas en el área.
• Competencias de liderazgo: se trata de las cualidades que
conforman la capacidad y disposición para la conducción de
grupos, que es además plausible de ser medida. Esta competencia
se enfoca en conocer la gestión eficiente del equipo de trabajo y en
su mayoría se relaciona con cargos de gerencia.
Las competencias profesionales
se relacionan directamente con
actuar eficientemente frente a
nuestras actividades a nivel
profesional.
Para entender un poco más
acerca de la clasificación de las
competencias laborares, a
continuación se detallan algunos
ejemplos por cada grupo:
Un trabajador competente será la
persona ideal para ser parte de un
equipo eficiente de trabajo en la
empresa, porque tendrá tanto el
conocimiento como las competencias
necesarias que requiere el puesto.
El departamento de Recursos Humanos
siempre identificará a las personas que
más a fin se encuentren con los valores
de la empresa y que cumplan con las
habilidades requeridas.
A menudo y erróneamente, existe una
tendencia a interpretar estos conceptos
como intercambiables. A pesar de que en
ciencias sociales no hay verdades
absolutas, lo cierto es que competencias y
habilidades son dos ideas diferentes que
comparten ciertas similitudes.
Las habilidades son destrezas o
conocimientos específicas y necesarios para
realizar un trabajo puntual. Estas se
clasifican en dos grupos:
• Las habilidades duras son las más técnicas, propias de una disciplina
(por ejemplo: uso de planillas de cálculo para contabilidad).
• Las habilidades blandas son más generales y hacen al desempeño de la
persona (por ejemplo: manejo de tiempo o comunicación verbal).