Consideraciones generales

El primer aspecto que comprende el fenómeno sucesorio, es el deceso

del causante.
El final de esta tramitación ocurre con la efectiva transmisión de los
bienes, derechos y obligaciones de aquel hacia sus sucesores, es decir,
los herederos.
Sin embargo, entre ese inicio y esa conclusión, que conlleva un cierto
tiempo, se han identificado doctrinariamente cuatro fases distintas
para la adquisición de los derechos sucesorios.
Al llamamiento que debe hacerse de quienes serán los sucesores del
causante, se le conoce en doctrina como la dinámica del proceso
sucesorio y se compone de cuatro fases.
 • Apertura de la sucesión.
1.

• Vocación hereditaria.
2.

• Delación de la herencia.
3.

• Adquisición de la herencia.
4.
● Es importante tomar en cuenta que,
como afirman Baqueiro Rojas y
Buenrostro Báez, la “apertura,
delación, vocación y adquisición de
los derechos sucesorios se dan de
manera simultánea a la muerte del
autor”.
 01
Apertura de la sucesión o
de la herencia

Primera fase
La apertura de la herencia es el momento en
que se inicia el procedimiento de liquidación
del patrimonio del difunto mediante el juicio
sucesorio o, en su caso, el trámite notarial.
Este momento es el de la muerte del autor
de la sucesión o el de la fecha en que se
presume su muerte. Baqueiro Rojas y
Buenrostro Báez.
 Prueba del fallecimiento del causante
• Lo primero que ha de demostrarse para radicar un
proceso hereditario, es que el causante ha fallecido.
• Atendiendo a la base legal, esto se encuentra previsto
en el Código Procesal Civil, Decreto Ley 107,
específicamente en la siguiente norma:
• Artículo 450. Sin perjuicio de que los interesados
obtengan la declaración judicial de otros derechos que
pudieran haber emanado del fallecimiento de
causante, suo de su muerte presunta, el proceso
determinará, cuando menos: 1º. El
fallecimiento
sucesorio del causante o su muerte presunta…
 02
Vocación hereditaria o
de la herencia

Segunda fase
Una vez aperturada la herencia, se presenta
la siguiente fase: la vocación de la herencia o
hereditaria.
La vocación puede ser testamentaria
o
intestada.
El término vocación originalmente proviene
del latín vocatio, que significa llamar.
Se refiere, pues, al llamamiento que se
realiza a toda persona que pueda tener
interés legítimo en llegar a ser sucesor del
causante.
Este llamamiento es
Según Rojina Villegas: “La
abstracto, pues se
vocación legítima o testamen-
realiza sin
taria es el llamamiento virtual
quiénes saberconcreto
en a
que por ministerio de la ley se
pueda asistir el
hace a todos los que se crean
derecho, y general, ya
con derecho a una herencia
que se convoca a
en el instante preciso en que
todos los que pudieran
muera el autor de la misma o
poseer un interés
al declararse la presunción de
legítimo.
muerte del ausente”.
Posibles personas con vocación hereditaria en un proceso sucesorio
testamentario
1. Herederos
testamenta-
rios
Estado y 2. Herederos
universida- legítimos
des del país

Posibles sujetos
con vocación
hereditaria en la
sucesión
testamentaria

5. Acree- 3. Legatarios
dores

4. Sucesores
por
representaci
ón
 20.
Estado 1. Hijos 2. Hijos
y uni-
versi- adopti-
19.
dades vos. 3. Cón-
Acree-
yuge.
dores. 4.
18.
Convi-

1er descendiente
Tíos
abue- viente
los de
he-
17. cho 5. Hijo
póstu
Primos mo
Posibles
sujetos con
vocación
16. 2do 6. Nie-
Tíos
3er colateral hereditaria descendiente tos
en la
sucesión
15. intestada
Sobri- 7. Bis-
nos
nietos nietos

3er ascendiente
8.
14. So-
Tatara-
nietos
brinos
13.
9.
Her-
12. Padres
manos 10.
Tata- 11. Abue-
rabue- Bisa- los
los buelos
 03
Delación de la herencia

Tercera fase
La tercera fase dentro de la
dinámica sucesoria es la delación
de la herencia.

La delación de la herencia
consiste en el ofrecimiento
concreto se hace a una
persona
que para que suceda a un
causante, con base en lo
establecido en el testamento, o
bien, en la ley.
 DELACIÓN
DE LA
Es elHERENCIA
llamamiento
efectivo del sucesor y
puesta de la herencia a
disposición del llamado
para que la acepte o
repudie. Díez Picazo.
De este modo, la herencia es deferida u ofrecida a una o
varias personas.
Esto ocurre, en lo que se refiere a la tramitación del
proceso, en la junta de herederos.
La persona llamada a la delación de la herencia posee la
facultad de aceptarla o no, debido a que en el Derecho
moderno es un principio el que nadie puede ser obligado a
ser sucesor (heredero o legatario) de otra persona.
 Plazo para aceptar o renunciar a la herencia
La regulación legal civil establece un plazo para que se pueda dar
la aceptación de la herencia, así:
Artículo 1031. El término para aceptar la herencia es de seis
meses a contar de la muerte del testador, si el heredero se
encuentra en el territorio de la República y de un año si está en el
extranjero…
También define un plazo para el repudio de la herencia:
Artículo 1034. El término para renunciar la herencia es el mismo
que el de la aceptación. La renuncia debe ser expresa y hacerse
por escrito ante el juez o por medio de escritura pública.
 04
Adquisición de la
herencia

Cuarta fase
 Fase del proceso
sucesorio que ocurre
como consecuencia de la
Esta fase se cumple luego de la aceptación de la herencia,
aceptación de la herencia. mediante la cual
Mediante ella, la persona que ha persona la
aceptado la herencia adquiere la calidad adquiere la
calidad de heredero, con lo cual heredero, plena de
logra la titularidad del activo y del asumir la pudiendo así
titularidad
pasivo del causante, operándose sobre el patrimonio del
así la sustitución en los bienes, causante.
derechos y obligaciones de aquél.
En el Código Civil se prescribe lo siguiente en el art. 918, cuyo epígrafe reza
Transmisión de la herencia: Los derechos a la sucesión de una persona se
transmiten desde el momento de su muerte…
Por tanto, de acuerdo a lo establecido en la ley, los derechos del heredero
para efectos de la transmisión patrimonial, se retrotraerán al momento del
deceso del causante, no obstante que, en la realidad, ha mediado un tiempo
entre las diferentes fases del fenómeno sucesorio, es decir, entre la apertura,
la vocación y la delación de la herencia, hasta la última que es, precisamente,
la de la adquisición de la herencia.
Como lo ha señalado Rojina Villegas: la herencia se adquiere ipso iure, desde el
día y hora de la muerte del de cujus; pero sujeta a la condición de que no se
repudie.