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El cuento narra la historia de Amanda, una niña que se siente feliz e ilusionada después de preparar con éxito un queque para compartir con los niños de un jardín infantil. Cuando llega al jardín, un niño le pide un pedazo del queque, y después de comerlo con deleite la abraza con una gran sonrisa, haciéndola sentir una alegría máxima. Desde entonces, el queque fue llamado "El queque de la máxima felicidad".
El cuento narra la historia de Amanda, una niña que se siente feliz e ilusionada después de preparar con éxito un queque para compartir con los niños de un jardín infantil. Cuando llega al jardín, un niño le pide un pedazo del queque, y después de comerlo con deleite la abraza con una gran sonrisa, haciéndola sentir una alegría máxima. Desde entonces, el queque fue llamado "El queque de la máxima felicidad".
El cuento narra la historia de Amanda, una niña que se siente feliz e ilusionada después de preparar con éxito un queque para compartir con los niños de un jardín infantil. Cuando llega al jardín, un niño le pide un pedazo del queque, y después de comerlo con deleite la abraza con una gran sonrisa, haciéndola sentir una alegría máxima. Desde entonces, el queque fue llamado "El queque de la máxima felicidad".
Recordemos 1. ¿Qué emociones hemos trabajado? 2. ¿Qué emoción representa la imagen? AMANDA
Cuento de la abuela Estrella
Amanda estaba muy ocupada. Junto a sus compañeros de curso irían a un Jardín Infantil para jugar y cantar con los niños. Además, llevarían un desayuno muy rico. La profesora había encomendado una misión a cada miembro del curso, y a Amanda, le había tocado preparar un rico queque. Por esta razón, ahora ella no se separaba del horno. Mamá, insistía una y otra vez: ¿no le habrá faltado polvos de hornear?, ¿estará bueno nuestro horno?, ¿estás segura que la harina era la correcta? Pasados los 45’ de cocción, y luego de esperar se enfriara, pudieron madre e hija admirar un precioso queque, digno del mejor de los chefs. ¡Qué bien se sentía Amanda ante tal éxito! Y ,dejándose llevar por el aroma, por fin se sentó a descansar. Estaba feliz e ilusionada. Al día siguiente, algunas mamás que se habían ofrecido, trasladaron al 2º básico al Jardín de niños.
Allí fueron recibidos con mucho cariño,
rápidamente se pusieron a preparar la mesa mientras el otro grupo cantaba, y el resto organizaba los diferentes juegos. De pronto, Amanda sintió que le tiraban suavemente del uniforme. Al darse vuelta, ve un niño de un precioso pelo crespo y negro, y que la miraba con ansiedad. Con su dedito índice le señala el queque que ella había preparado. -La celebración es en un rato más- le dijo. Pero el niño no se movió. -Dame un poquito- le suplicó. No resistiendo tanta dulzura, Amanda, un poco a escondidas, le convidó un trozo. El niño literalmente se lo tragó y luego, dibujando una sonrisa enorme en su rostro, la abrazó hasta casi hacerla caer. -Estaba riiicoooo - le dijo. -El corazón de la niña se hinchó de alegría. Desde entonces ese pastel fue llamado: “El queque de la máxima felicidad”. Ticket de salida