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EL FINALISMO Y LA CONCEPCIÓ N DEL

DELITO
• El Finalismo: el actuar humano se determina desde el fin
perseguido por el autor sobre la base de su experiencia
causal.
• Concepción del Delito: es definido como una conducta,
acción u omisión típica (tipificada por la ley), antijurídica
(contraria a Derecho), culpable y punible.
La teoría finalista significó un progreso esencial y significativo respecto del
sistema clásico del delito, pues eliminó estos problemas. Esta teoría dio a
conocer que lo injusto del hecho no depende solamente de elementos
objetivos, sino también de la predisposición de un fin (el dolo) del autor.

La teoría de la acción final ataca el fundamento del sistema causal, su


concepto de acción. Para ella, la acción es final y no causal. La
característica final de la acción se basa en que el hombre, gracias a su
saber causal, puede prever, dentro de ciertos límites, las consecuencias
posibles de su actividad, proponerse, por tanto fines diversos y dirigir su
actividad, conforme a su plan.

Esta teoría, tiene en cuanto a la imprudencia, y la omisión otros puntos de


vista. En cuanto a la imprudencia, afirma que es la inobservancia del
cuidado exigible y, concibe el delito de omisión como forma especial del
hecho punible.
CRÍTICA DE LA TEORÍA
FINALISTA.
• Puede aceptarse que, siendo acertada la descripción del finalismo
en cuanto a las acciones voluntarias anticipadas mentalmente, de
carácter consciente, no todas las acciones se basan en estas
acciones anticipadas mentalmente.
• La imprudencia consiste en la ejecución descuidada de una acción
final, pero el carácter descuidado de la ejecución no es
precisamente, momento alguno de su finalidad. La infracción de la
norma de cuidado no puede equipararse a la acción final, pues el
juicio de incorrección puede formularse sólo a la vista del resultado
que había que evitar
Lo que interesa dentro del mundo jurídico, es la acción
típica, es decir, la conducta descrita en la ley. Para superar
la polémica entre la teoría finalista y la causalista, surgió la
teoría social de la acción en esta última se destaca la
relevancia social del comportamiento humano: sólo
atendiendo a la voluntad final se puede determinar el
sentido social de la acción.

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