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Signos de puntuación

Lengua Española I
¿Qué son los signos de puntuación?
Delimitadores principales (organización sintáctico-semántica):
punto, coma, punto y coma, y dos puntos.

Indicadores de modalidad (entonación): signo de pregunta,


exclamación y puntos suspensivos.

Indicadores de segundo discurso (información complementaria):


paréntesis, corchetes, comillas y rayas.
El punto: usos lingüísticos
El punto (.) señala de manera gráfica la pausa que marca el final de un enunciado
—siempre que este no sea interrogativo o exclamativo—, de un párrafo o de un
texto.
El punto puede ser punto (y) seguido o punto y aparte.
Se escribe siempre detrás de las comillas, de los paréntesis y de las rayas de
cierre; sin embargo, no debe escribirse un punto después de los signos de
interrogación o de exclamación.
Tampoco debe escribirse un punto cuando el punto de una abreviatura coincide
con el final de un enunciado ni después de los puntos suspensivos.
El punto: usos no lingüísticos
Se usa —al igual que los dos puntos— para separar los números que expresan las
horas y los minutos. Por ejemplo, 20.30 h.

Se usa —al igual que el guion o la barra— para separar los números que expresan las
fechas. Por ejemplo: 21.03.1985.

Se usa — al igual que el símbolo con forma de aspa (×)— para indicar multiplicación.
Por ejemplo, 8 · 4 = 32.

Se usa para separar la parte parte entera de la parte numeral de los números, a pesar
de que la normativa internacional establece el uso de la coma para esta función.
El punto: usos incorrectos
No debe utilizarse tras los títulos y subtítulos de libros, artículos, capítulos, obras de arte.

No debe utilizarse tras los nombres de autor en cubiertas, portadas, prólogos, firmas de
cartas y otros documentos

No debe utilizarse tras las unidades de millar en la expresión numérica de los años, ni en la
numeración de páginas, portales de vías urbanas y códigos postales, ni en los números de
artículos, decretos o leyes.

No debe utilizarse para separar los millares, millones, etc. Para facilitar la lectura de estos
números, es recomendable separarlos con espacios por grupos de tres, contando de derecha
a izquierda.

No debe utilizarse tras los símbolos.


La coma: usos lingüísticos
1. Ana, cansada de trabajar, decidió tomarse un descanso.

2. Pedro, el más pequeño de la familia, los llena de alegría.

3. Necesitaremos una cebolla, una cucharada de aceite, ajo, laurel y tomates.

4. Nunca, Mabel, creas todo lo que dicen. / ¡Feliz día, abuela!

5. ¡Ay, no lo puedo creer!

6. Algunos emigraron a Brasil; otros, a Argentina.

7. Algunos se dirigieron hacia el norte, otros decidieron quedarse.


La coma: usos lingüísticos
8. Estaba nublado, pero/ aunque/ y nunca llovió.

9. Con el objetivo de participar, se preparó todo el año.

10. Si llueve, saldremos más tarde.

11. Los lápices, los papeles, los pinceles, etc., se encontraban desparramados.

12. Honestamente, no creo que podamos arreglarlo.

13. Córdoba, 21 de marzo de 2022.


La coma: usos no lingüísticos
Se usa para separar la parte parte entera de la parte numeral de los números,
tal como lo indica la normativa internacional. Sin embargo, el uso del punto
en estos casos también es aceptado.
La coma: usos incorrectos
No debe utilizarse la coma para separar el sujeto del verbo de una oración. Por
ejemplo: Mi madre, mis hermanas, mis amigas me acompañaron ayer.

Excepciones: Los lápices, los papeles, los pinceles, etc., se encontraban desparramados
sobre el mueble; Mi hermana, como ya sabés, es una deportista sobresaliente.

No debe la coma delante de la conjunción que cuando esta tiene sentido consecutivo
y va precedida de tan(to) o tal: Estaba tan escondido que no lograron hallarlo.

No debe utilizarse la coma antes de porque cuando este indica causa pura o real.
Para conocer más al respecto, pueden hacer clic en este enlace.
La coma: usos incorrectos
No debe utilizarse coma detrás de pero cuando este precede a una oración
interrogativa o exclamativa: Pero ¿qué vas a hacer ahora?

No debe utilizarse coma delante de pero cuando este se ubica entre adjetivos: Parecía
lindo pero bruto.

No debe utilizarse coma antes de sino cuando este funciona como adverbio de modo y
significa «solamente» o «tan solo»: No le pido sino que los escuche.

No debe utilizarse coma en las reduplicaciones (enfáticas y expresivas) de sustantivos,


adjetivos, adverbios: Es muy muy fácil; Me gusta el café café; Casi casi que no aprueba.

No debe utilizarse coma cuando se anteponen el complemento directo, el


complemento indirecto, el complemento de régimen, el atributo o el predicativo.
El punto y coma: usos
El punto y coma (;) señala una pausa mayor la coma y menor que el punto.

La primera palabra posterior al punto y coma se escribe con minúscula, pero, en


obras de contenido lingüístico, se utiliza punto y coma para separar enunciados
independientes que funcionan como ejemplos y que, naturalmente, comienzan
con mayúsculas. Por ejemplo: No debe utilizarse coma en las reduplicaciones
(enfáticas y expresivas) de sustantivos, adjetivos, adverbios: Es muy muy fácil; Me gusta
el café café; Casi casi que no aprueba.

Se utiliza para separar los elementos de una enumeración complejas que ya


incluye comas: Cada equipo entrenará en un lugar diferente: el primero, el parque; el
segundo, en el gimnasio; el tercero, en el patio.
El punto y coma: usos
Se utiliza para yuxtaponer oraciones sintácticamente independientes entre las
que existe una relación semántica estrecha: Lo ha hecho por el bien de la
familia; no puede reprochársele nada.

Se utiliza delante de conectores adversativo, concesivo o consecutivo (pero,


mas, aunque, sin embargo, por tanto, por consiguiente, etc.) cuando encabezan
oraciones de cierta longitud. De lo contrario, se prefiere el uso de coma. Por
ejemplo: Muy fugaz resultó el fulgor de nuestra estrella del ciberespacio; pero,
mientras duró, el presidente del país nos exhortó a todos seguir su ejemplo.
El punto y coma: usos
Se utiliza al final de cada uno de los elementos de una lista cuando se
escriben en líneas independientes y se inician con minúscula:

Existen tres grupos de perífrasis verbales en español:

❏ las perífrasis verbales de infinitivo;


❏ las perífrasis verbales de participio;
❏ las perífrasis verbales de gerundio.
La raya
Signo de puntuación representado por un trazo horizontal (—) de mayor
longitud que el correspondiente al guion (-).

Se utilizan para encerrar aclaraciones o incisos, ya que pueden usarse, en su


lugar, las comas o los paréntesis. No obstante, los incisos entre rayas
suponen un aislamiento mayor con respecto al texto en el que se insertan
que los que se escriben entre comas, pero menor que los que se escriben
entre paréntesis.

Cabe destacar que la raya de cierre en los incisos no se suprime aunque


detrás de ella deba aparecer un punto o cualquier otro signo de puntuación:
Esperaba a Emilio —un gran amigo—. Lamentablemente, no vino.
La raya
En la reproducción escrita de un diálogo, la raya precede a la intervención de
cada uno de los interlocutores, sin que se mencione el nombre de estos:

—¿Cuándo volverás?

—No tengo ni idea.

Como se ve en el ejemplo, no debe dejarse espacio de separación entre la


raya y el comienzo de cada una de las intervenciones.
La raya
En textos narrativos, la raya se utiliza para introducir o enmarcar los comentarios
y precisiones del narrador a las intervenciones de los personajes. En este uso
debe tenerse en cuenta lo siguiente:

—Espero que todo salga bien —dijo Azucena con gesto ilusionado.

—Lo principal es sentirse viva —añadió Pilar—. Afortunada o desafortunada, pero viva.

—¡Qué le vamos a hacer! —exclamó resignada doña Patro.

—¿Puedo irme ya? —Se puso en pie con gesto decidido.

—Anoche estuve en una fiesta —me confesó, y añadió—: Conocí a personas muy
interesantes.
Los dos puntos
Los dos puntos representan una pausa mayor que la de la coma y menor que la del punto. Detienen el discurso
para llamar la atención sobre lo que sigue, que siempre está en estrecha relación con el texto precedente.

Se utilizan ante una enumeración de carácter explicativo, precedida de un elemento anticipador. Por ejemplo: Ayer
me compré dos libros: uno de Carlos Fuentes y otro de Cortázar.

No se utilizan ante enumeraciones que carecen de un elemento anticipador. Por ejemplo: * Me gusta mucho: leer,
escuchar música y cocinar.

No obstante, sí pueden usarse los dos puntos cuando los elementos de la enumeración se colocan en forma de
lista.

Me gusta mucho:
—leer
—escuchar música
—cocinar
Los dos puntos
Se utilizan para separar una ejemplificación del resto de la oración. Por ejemplo: De vez en cuando tiene algunos
comportamientos inexplicables: hoy ha venido a la oficina en zapatillas.

Se utilizan también para conectar oraciones relacionadas entre sí sin necesidad de emplear otro nexo. Son varias
las relaciones que pueden expresar:

a) Causa-efecto. Se ha quedado sin trabajo: no podrá ir de vacaciones este verano.

b) Conclusión, consecuencia o resumen de la oración anterior. El arbitraje fue injusto y se cometieron


demasiados errores: al final se perdió el partido.

c) Verificación o explicación de la oración anterior, que suele tener un sentido más general. La paella es
un plato muy completo y nutritivo: tiene la fécula del arroz, las proteínas de sus carnes y pescados, y la fibra de sus
verduras.
Los dos puntos: usos incorrectos
No se deben colocar dos puntos después de una proposición, del conector como,
de una forma verbal, de una conjunción.
*Esta comida aporta: vitaminas, minerales y otros nutrientes.
*El curso consta de: un módulo de normativa, un módulo de gramática y un
módulo de maquetación.
*Las autoridades decidieron que: no habrá clases la semana que viene y se
tomarán exámenes finales.

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