Fases del VIH/SIDA

Fase Inicial

Fase
Asintomática

Fase
Sintomática

Fase SIDA
 Fase Inicial (Infección Aguda)

En esta etapa el individuo se ha SEROCONVERTIDO, llamada también

“Periodo de Ventana”. Es la fase de incubación del virus y no se le
detecta con ninguna prueba.
Algunas personas en este periodo desarrollan una infección gripal leve
de 2 a 6 semanas después de la exposición al VIH, que pueden
confundir con otras enfermedades y no sospechar que están infectado
con el virus, pero la mayoría no desarrollan síntomas en esta fase.
Aunque existen algunos malestares que se pueden manifestar durante
esta etapa.
 Fase Inicial

Fiebre Dolor de Cabeza Ganglios Inflamados Cansancio

Dolor de Garganta Coyuntura y

Músculos Doloridos
 Fase Inicial

Estos síntomas pueden o no desaparecer al cabo de una o dos

semanas.
El virus del VIH se multiplica a gran velocidad sufriendo diversas
mutaciones genéticas y los individuos son altamente contagioso
durante esta fase, en esta fase no se detecta el virus.
Fase Asintomática
• El portador es conocido “Potador Sano” o
Asintomático.
• En esta fase no hay síntoma que
caracterice a la enfermedad, porque el
portador no siente ningún malestar, y no
sabe que es portador hasta que se le haga
la prueba.
• Esta fase puede durar 5, 10, 20 ó más de
30 año tras la primera entrada del virus en
el cuerpo de los adultos, o dos años en los
niños nacidos con una infección por el VIH.
 Fase Asintomática
• Este período "asintomático" de la infección
es variable de una persona a otra, porque el
virus sigue multiplicándose e infectando y
matando células del sistema inmunológico,
células T CD4+ ó T4, que son los
luchadores clave de la infección en el
sistema inmunológico.
• El virus inicialmente desactiva o destruye
estas células sin causar síntomas, pero el
portador transmite el virus a otros.
 Fase Sintomática
• En esta fase el sistema inmunológico se deteriora y empiezan a aparecer las
complicaciones o síntomas más comunes y leves de esta enfermedad. Sin
embargo, cada persona puede experimentarlos de una forma diferente:
• Diarrea.
• Pérdida de peso.
• Fiebre y fatiga.
• Escalofríos y sudoración nocturna.
• Nódulos linfáticos inflamados.
• Tos y dificultad para respirar.
• Irritación de la garganta.
• Dolor de cabeza.
• Rigidez muscular.
 Fase Sintomática
• Nódulos linfáticos que permanecen aumentados de tamaño
durante más de tres meses.
• Falta de energía.
• Pérdida de peso.
• Frecuentes fiebres y sudores.
• Infecciones por hongos frecuentes o persistentes (orales o
vaginales).
• Erupciones de la piel persistentes o piel escamosa.
• Enfermedad inflamatoria pélvica que no responde a tratamiento.
• Pérdida de la memoria a corto plazo.
• Ulceras bucales, incluyendo infección por cándida.
 Fase SIDA

• Es la Fase Final o Terminal de la enfermedad.

• Además de los síntomas que presentan en la Fase Sintomática, estas personas
desarrollan infecciones frecuentes y severas por el virus herpes que causan úlceras
dolorosas en la boca, en los genitales o en el ano, o una enfermedad de los nervios
muy dolorosa conocida como herpes zoster, diferentes tipos de cánceres, como el
Sarcoma de Kaposi y una infección oportunista por Pneumocystis carinii que causa
neumonía.
• Los niños podrían tener un retraso del desarrollo o dificultades para desarrollarse.
• Con estos síntomas más serios llenamos los requisitos de la definición oficial del
SIDA, según los Centros de Control y Prevención de la Enfermedad (CDC).
 Fase SIDA
• Linfocitos CD4 menos de 200 (normal: 600 a 1,000).
• Cuando se desarrolla el SIDA, la persona está susceptible a infecciones
oportunistas con los siguientes signos y síntomas:
• Sudoración nocturna
• Escalofríos y fiebre por semanas
• Tos seca y dificultad para respirar
• Diarrea crónica
• Lesiones blancas en la lengua y boca
• Dolor de cabeza
• Visión borrosa y alterada
• Demasiada pérdida de peso
• Durante el transcurso de la infección por el virus VIH, la mayoría de las personas
experimentan una disminución gradual en el número de células T CD4+, aunque
algunas personas pueden tener una caída abrupta y dramática del número de
células T CD4+.