EFECTO de la

DESOBEDIENCIA a
DIOS:
Entra la AMARGURA
 Un indicador del grado de
insatisfacción: La amargura
• Definición: La amargura es un
profundo sentimiento de
descontento, de desilusión o
de frustración que nos hunde
en el abatimiento y la
desesperación.
 SEÑALES Y
MANIFESTACIONES
DE LA AMARGURA
 Señales y manifestaciones de
la amargura:
amargura
• El resentimiento que se experimenta
corresponde al recuerdo de antiguas ofensas
que decidimos conservar y rumiar, que se
mantiene porque rehusamos perdonar a
alguien.
• El rencor: es una forma de amargura
voluntaria y tenaz que se desarrolla después
de una injusticia, de un perjuicio padecido o
de un desengaño.
 Violencia verbal

• Salen de nuestra boca palabras

malas, hirientes y caústicas

(censurado)
 EFECTOS Y
CONSECUENCIAS
DE LA AMARGURA
Se esconde a menudo la amargura
detrás de…
• La culpabilidad no tratada - o mal tratada.
Único tratamiento: el arrepentimiento y
la confesión (Sal 32.1-5);
• El orgullo que intenta compensar un golpe
bajo mal digerido figiendo la indiferencia;
• La impaciencia: no soportamos ni las
debilidades de otros , ni las circunstancias
adversas;
Se esconde a menudo la amargura detrás de…
• Un estado de abatimiento interior: Jonás
postrado ante la calabacera seca, cae en
depresión (Jon 4);
• Una actitud de desconfianza total por
haber sido desilusionado o repetidamente
“engañado”. Por temor a una nueva herida, se
concede la confianza al cuenta-gotas.
• Un espíritu de juicio y de crítica sobre
todo lo que toca al ofensor. La crítica
delata a menudo una herida no
curada.
Se esconde a menudo la amargura detrás de…
• Una dureza y una notoria insensibilidad
ante las necesidades o los sentimientos del
ofensor. Ya ha pagado suficiente el ofendido, ya
no cabe la piedad. Su “venganza de frialdad” es
una justa compensación por los daños pasados.
• Una actitud de obstinación de arrogancia,
de autosuficiencia y un espíritu de
egocentrismo: cegado por nuestra amargura
no somos objetivos. Como un desequilibrado
mental somos víctimas de nuestra ceguera y
disparamos sobre todo lo que se menea.
• AMARGURA, Griego: PIKRIA (N.T. 4x: Hec 8.23; Rom
3.14; Ef 4.31; Heb 12.15)
• Una sensación de escozor picante y
penetrante al nivel de la conciencia.
• La amargura es un mal inútil que nos hacemos
a nosotros mismos, antes de infligirlo a otros,
¡cuando ni nosotros ni ellos nos lo
merecemos!
• Cuando el problema de la amargura no se
trata bien, tal un absceso escondido que
supura en secreto, las consecuencias y los
daños son dramáticos para todos, incluyendo
para las arcas de la seguridad social.
• La amargura nos hace susceptibles e
hipersensibles: nos lleva a reaccionar de
mala manera con los demás. Nos hace
desconfiados y agresivos como forma
de autoprotección.
 Consejería aconsejable pero…

• Es muy difícil relacionarse con personas

amargadas, pues no permiten que se les
acerca, menos que se les trata su herida.
Quedan amarradas a su estado de
sufrimiento interior por la “gravedad del
daño” que el ofensor le causó.
 I CONTAGIO
• La amargura nos lleva a arrastrar a los
demás en una actitud de hostilidad hacia
nuestro ofensor, y a hacerles compartir así
nuestra amargura.
• Acaba por hacer que nos parezcamos al
ofensor que tanto criticamos. Los que nos
rodean lo perciben y nos rechazan,
acusándonos de ello.
 Altísimo
precio

• El deudor despiadado (Mat 18.21-35) –

que sin embargo benefició de una
importantísima cancelación de su deuda
- que rehúsa cancelar la deuda
insignificante de su compañero- al final
padece un grave daño:
daño su amo exigirá
que pague, hasta el último céntimo, su
deuda astronómica!
SOLEMNE ADVERTENCIA DE JESÚS

“Así también mi padre celestial

hará con vosotros si no
perdonáis de todo corazón
cada uno a su hermano sus
ofensas.”
ofensas
(Mat 18.35)
 Comportamiento suicida

• Rehusar perdonar equivale a no tratar una llaga

abierta. La infección amenaza introducirse y
generalizarse.
• No perdonar = autolesionarse = reactivar heridas
 Puerto hurraco

Algunas personas carcomidas por este “cáncer

de los huesos” gastan una energía fenomenal,
pero inútil, prolongando un combate que
hubieran tenido que acabar 10 o 20 años
antes… y que puede terminar en
tragedia.
 RETRATO DEL AMARGADO
alguien carcomido por la amargura:
pierde toda objetividad en sus relaciones
personales: exagera los defectos de los demás,
desarrolla falsas ideas y prejuicios
sobre otros que acusa de de intenciones
malvadas…
• Su memoria es prodigiosa hacia las faltas por
acción u omisión de los demás,
• Su lenguaje es mordaz, irónico y caustico.
 RETRATO DEL AMARGADO
una persona carcomida por la amargura:
• apunta escrupulosamente todas las deudas
(morales, afectivas, materiales, financieras…)
de otros que se van acumulando sin nunca
“remitirles” ninguna…

• Se siente incomprendida, rechazada y

se presenta como una gran víctima de las
mayores injusticias cometidas en este mundo.
Una persona carcomida por la amargura:

• Tiene problema para recibir el perdón de lo alto

(que tanto necesita), le cuesta todavía más
ofrecerlo a los demás, lo que la convierte en una
persona más rencorosa y prisionera de ella
misma.
 Dramático

Llega a ser víctima de su propia desgracia

que sólo empeora y amplifica.
De hecho tomó partido por el rencor
antes que por el perdón, y cava su propia
tumba, se entierra viva, a diez pies bajo
tierra…
¡qué tragedia, qué desperdicio!
 Daños dramáticos y a veces…
irreparables
• Un enamorado rechazado: crimen pasional.

• Ambiente familiar enrarecido

• Reputación ensombrecida
• Testimonio cristiano afectado
• “El rencor es un gasto improductivo” (V.Hugo)
Repercusiones en la vida espiritual
El no querer perdonar a alguien que
nos ofendió puede llevar a un
relajamiento espiritual:
–leer menos la Biblia,
–orar poco,
–poco testimonio,
–poca involucración en la iglesia
local.
 La tiranía de la amargura

• La amargura es tenaz y voraz: cuando te ha

agarrado ¡no te deja! Te coge por la
garganta, aprieta fuerte y te ahoga. Cava un
pozo sin fondo, en el que te precipita.
• La primera víctima de la amargura es
siempre la persona que es culpable de
tolerarla y de no cortarla.
 ADVERTENCIA DIVINA

“Mirad bien, no sea que alguno

deje de alcanzar la gracia de
Dios; que brotando alguna raíz
de amargura (pikria), os
estorbe, y por ella muchos
sean contaminados”
contaminados
(Heb 12.15)
 ADVERTENCIAS DIVINAS

• “Maridos , amad a vuestras mujeres,

y no seáis ásperos (pikrainesthe) con
ellas” (Col 3.19)

• “Quítense de vosotros toda

amargura (pikria), enojo, ira…”
(Ef 4.31)
 VENCER
LA AMARGURA
 CON GRAN DETERMINACIÓN
DESTERRARLA
• Tener buena voluntad y gran determinación (no se
improvisa)
• Muchas personas viven (o sobreviven) con una
amargura enterrada dentro de ellas…
CON HONESTIDAD Y HUMILDAD
• No es posible guardar amargura escondida y
permanecer con una buena salud mental, física y
emocional.
emocional
• La llaga contagiosa y llena de pus acabará por
aparecer a la luz del día.
Para vencer el gigante amargura
de la amargura hace falta
las piedras del perdón
y del amor.
 El perdón: un poder que libera
Ef 4.31-32

“Quítense de vosotros toda

amargura (pikria), enojo, ira, gritería
y maledicencia, y toda malicia.
Antes sed benignos unos con otros,
misericordiosos, perdonándoos
unos a otros, como Dios también
os perdonó a vosotros en Cristo”
 ÚNICA CONDICIÓN
• La liberación sólo vendrá cuando
tomamos la decisión de perdonar a
los que nos han hecho sufrir y que han
pisoteado nuestros derechos.
Sufría la tenía todas las razones
mayor del mundo
de las para rebelarse y amargarse
injusticias
NO LO HIZO

CRUZ = PERDÓN

al contrario declaró:

“Padre perdónales,
no saben lo que hacen.”
 UN CAMBIO DE ACTITUD

• Hacia el que nos ofendió

• Decidir soltar la deuda

• Considerar su ofensa con otra perspectiva

• Determinado a tomar una actitud positiva hacia él

 
 LO IMPORTANTE

No es la ofensa que nos

hizo daño
sino la manera con la que
decidimos reaccionar
ante el que nos ofendió.
 DOS POSIBILIDADES

• Según la reacción que decidiremos

adoptar, la ofensa será un
obstáculo, o un catalizador.
• Un instrumento que el Señor
empleará para hacerme crecer y
progresar en mi caminar con él, o un
freno y una piedra de tropiezo
para mí.
 EL EJEMPLO DE JOSÉ, víctima…
• de los celos despreciativos de sus
hermanos
• de la calumnia escandalosa de la mujer
de su amo
• del olvido de un compañero de cárcel que
había ayudado
la copa estaría más que llena para que termine
su vida en el fango
de la auto-compasión
“No temáis; ¿acaso estoy yo en lugar de Dios?
Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios
lo encaminó a bien, para hacer lo que vemos
hoy, para mantener en vida a mucho pueblo.
Ahora pues no tengáis miedo; yo os
sustentaré a vosotros y a vuestros hijos.
Así los consoló, y les habló al corazón.”
(Génesis 50.19-21)
 PERDONAR ES…
• Rehusar mantener al día su contabilidad
personal, para dejar al Señor el cuidado de
mantener la suya y ajustar Él las cuentas;
• Amar a Dios de todo su corazón y a su
prójimo como a sí mismo;
• Aceptar de devolver bien por mal;
• Renunciar a sus derechos para cumplir su
deber;
• Asemejarse a su Padre celestial, caminando
de una manera digna de la vocación en Cristo;
 PERDONAR ES…
• Romper el círculo vicioso del pecado que
reclama una venganza personal,
• Querer guardar la conciencia pura;
• Creer lo mejor en los demás;
• Entrar en el plan de Dios, darle la razón y
desbaratar el plan del adversario;
• Salvaguardar su salud mental y asegurarse
una buena higiene de vida.
 DEUDA DE AMOR
Romanos 13.8

• Somos grandes deudores

ante Dios y ante nuestro prójimo:

“No debáis a nadie nada,

sino el amaros unos a otros;
porque el que ama al
prójimo, ha cumplido la ley”
 La insatisfacción se sitúa en
relación con Dios
• Blas Pascal: “en el corazón del hombre,
hay un vacío que tiene la forma de Dios”.

• Sólo Dios quien nos creó puede

colmarlo de manera satisfactoria, pues
sabe de qué somos hechos y lo que
necesitamos.
 Búsqueda equivocada: Jer 2.13
“Porque dos males
ha hecho mi pueblo:
me dejaron a mí, fuente de agua
viva,
y cavaron para sí cisternas, cisternas
rotas que no retienen agua”. ¡Qué
contraste con…
 FUERA DE TI NADA DESEO EN LA TIERRA
(73.25b)
SALMO 37.3-5:

“Confía en el Señor, y haz el bien…

Deléitate asimismo en el Señor, y él
te concederá las peticiones de tu
corazón.
Encomienda al Señor tu camino,
Y confía en él; y él hará.”