Está en la página 1de 19

NORMAS, LIMITES Y

CONSECUENCIAS

Programa de Integración Escolar (P.I.E)


Objetivos del taller
 Toma de conciencia de la importancia de los límites en la educación.
 Analizar qué aspectos de la vida de nuestros hijos creemos que tienen
que estar limitados.
 Reflexionar sobre la manera adecuada de poner límites.
 Cómo actuar cuando se transgreden los límites marcados.
 Ventajas y desventajas de los premios y castigos.
 Reflexionar sobre cómo marcar consecuencias.
Aspectos positivos del uso de límites

Los límites son necesarios desde edades


tempranas y tienen como meta favorecer la
seguridad, bienestar y desarrollo de los hijos.
Proteger a los hijos del daño psicológico
Promover una adecuada
autoestima
 El establecimiento de los límites fomenta la mejora de la autoestima de un modo
indirecto
 El que un hijo sepa a qué atenerse va a ir conformando una imagen de él mismo
como alguien que hace las cosas de manera adecuada o inadecuada.
Promover su aprendizaje y desarrollo.
 El establecimiento de límites ayuda al desarrollo social y moral.
 Vivir en sociedad conlleva saber respetar unos límites de
convivencia y respeto.
Cuando no existen límites o estos son muy blandos o
inconsistentes.
 A. Existe el riesgo de que los hijos desarrollen desajustes del
comportamiento.

 B. Los hijos ignoran o están en desacuerdo con las demandas


de sus padres y no se responsabilizan de su comportamiento.
Concepto de autoestima

 Capacidad de establecer una identidad y darse un valor positivo.

 Es imprescindible para la supervivencia psicológica


¿QUÉ ASPECTOS DE LA VIDA DE NUESTROS
HIJOS DEBEN ESTAR LIMITADOS?
 Padres democráticos: alto afecto y alto control
y exigencia
 Padres permisivos: alto afecto y bajo control y
exigencia
 Padres autoritarios: bajo afecto y alto control
y exigencia
 Padres indiferentes: bajo afecto y bajo control
y exigencia
Cómo poner límites. Aspectos a tener en cuenta.
 Primer paso: “limitar los límites”.
No hacer normas por hacerlas.
Centrarnos en los límites realmente importantes. Elegir con qué conflictos
pelearnos.

 Segundo paso: “Establecer límites razonables”


Poner límites que se puedan cumplir, adaptados a la edad y capacidades.
Si no son razonables, se pueden desarrollar bajos niveles de autoestima.
 Tercer paso. “Cómo establecer los límites”.
Que sean claros y específicos.
Formulados de manera positiva.
Ser firme. No variar el límite en poco tiempo.
Ser consistente.
Negociar los límites.

 Cuarto paso. “Si los límites son ignorados”


Ignorar en la medida de lo posible las rabietas, las llamadas de atención,...
retirando la audiencia.
Da instrucciones precisas, dando opciones de cumplimiento siempre que sea
posible, elogiando el acuerdo o advirtiendo de las consecuencias del no cumplimiento.
Examinar los propios límites.
Consecuencias: premios y castigos
 Las normas y los límites abordan situaciones que requieren ser reguladas; y estas
van perfilando el carácter y la manera de funcionar de los hijos…

 Además de las normas y límites, hay gran cantidad de estímulos que un día tras
otro son recibidos por los adolescentes y van configurando también un estilo.

 Estos estímulos son los premios y castigos, los cuales son utilizados conscientes o
inconscientemente por padres y educadores. Esa cara que ponemos, el tono de voz,
esa recompensa…..
PREMIOS
 “Se repite aquello que da satisfacción” Si premias una conducta de tu hijo que
sea gratificante y satisfactoria para él, es muy probable que la vuelva a repetir.

 Priorizar las recompensa sociales a las materiales.


Recompensa materiales: Dinero material deportivo o juguetes.
Recompensas sociales: atención, elogios, que les hacen sentirse más a gusto con
ellos mismos.
Recompensas sociales
 Frases de ánimo y felicitación: bien, así da gusto…
 Un beso, un abrazo.

Castigos
 Una forma de eliminar un comportamiento inadecuado es pasarlo por alto
continua y permanentemente, sin recompensarlo nunca ni siquiera con la atención.
 El castigo es una forma de cortar un comportamiento que no se puede pasar por
alto.
 No hay que utilizar el castigo como medio habitual para corregir al hijo/a.
Buen uso del castigo
• Es el último recurso y no debe ser la manera habitual de actuar.
• Establecer prioridades sobre lo que es más importante, de este modo no se
castigará todo.
• Es inmediato, sin aplazamientos innecesarios.
• Ocurre siempre que se comete la falta sin depender del buen o mal humor
del momento.
• Ofrece al hijo una alternativa. No solo se castiga si no que se explicita lo
que se espera de él y el modo en que puede realizarlo
• Permanece intacto el respeto por la persona, sin que sufra la autoestima. Son
las acciones las que son correctas o incorrectas.
• NO utilizar: eres un inútil
• eres un vago
• Utilizar : eso lo has hecho mal
• no estudias lo suficiente...
¡Gracias por su asistencia y atención!

Equipo de Integración Escolar

También podría gustarte