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Cuando Dios Despierta nuestro Espíritu

¿Qué significa Despertar?


ûr «despertar, despertarse, remover, provocar». El vocablo se
halla tanto en el hebreo antiguo como en el moderno y se encuentra unas 80
veces en el
Antiguo Testamento hebreo. La idea principal es “abrir los ojos”
La idea principal es de provocar a la acción.
(Zec 9:13 RV 1960) Porque he entesado
para mí a Judá como arco, e hice a Efraín su flecha, y despertaré a tus hijos, oh
Sion, contra
tus hijos, oh Grecia, y te pondré como espada de valiente.
Solamente Dios puede despertar tu espíritu
para edificar su Iglesia.
Esta profecía del profeta Hageo, fue en el contexto del retorno del pueblo de
Israel a reconstruir el
templo y los muros de Jerusalén. Ellos regresaron con gran entusiasmo, con
grandes planes para
reedificar el templo. Pero se encontraron con obstáculos gigantes que
requerían esfuerzos y sacrificios
enormes. Después de haber pasado por ese tiempo de carencia, de arduo y
valeroso trabajo, el pueblo
comenzó a desanimarse y a perder interés al intentar reedificar el templo.
Las dificultades crecían cada
día y parecían que no tenían una solución.
Así comenzaron a posponer el trabajo y a justificar porque
habían abandonado la construcción del templo, al grado de decidir que no era el tiempo de
reedificación.
En otras palabras, el pueblo judío trató de justificar que por motivo de las dificultades que
enfrentaban,
no era Dios quien deseaba que realizasen esa tarea. Aunque ya habían colocado los
fundamentos del
templo, pero la oposición de los Samaritanos era tan fuerte que simplemente pararon todas
las obras
con la siguiente excusa "bueno, todavía no ha llegado el tiempo apropiado". Por mucho tiempo
abandonaron el templo, y se dedicaron a edificar casas para ellos, y a establecerse en la tierra,
y al mismo
tiempo abandonaron la obra de Dios.
La Palabra Profética de Dios nos desafía
Hageo 1:1-15
1:1 En el año segundo del rey Darío, en el mes sexto, en el primer día del mes,
vino palabra de Jehová por medio del profeta Hageo a Zorobabel hijo de
Salatiel, gobernador de Judá, y a Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote,
diciendo:
1:2 Así ha hablado Jehová de los ejércitos, diciendo: Este pueblo dice: No ha
llegado aún el tiempo, el tiempo de que la casa de Jehová sea reedificada.
1:3 Entonces vino palabra de Jehová por medio del profeta Hageo, diciendo:
1:4 ¿Es para vosotros tiempo, para vosotros, de habitar en vuestras casas
artesonadas, y esta casa está desierta?
1:5 Pues así ha dicho Jehová de los ejércitos:
Meditad bien sobre vuestros caminos.
El pueblo de Dios que había regresado 1:6 Sembráis mucho, y recogéis poco; coméis, y no
del cautiverio no se interesaba por la os saciáis; bebéis, y no quedáis satisfechos; os
casa de Dios. Ellos solamente se vestís, y no os calentáis; y el que trabaja a jornal
recibe su jornal en saco roto.
preocupaban por su bienestar personal.
Eran judíos, pero 1:7 Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Meditad
sobre vuestros caminos.
solamente de nombre porque su corazón 1:8 Subid al monte, y traed madera, y reedificad la
no estaba en la reedificación del templo. casa; y pondré en ella mi voluntad, y seré
Es como glorificado, ha dicho Jehová.
el creyente que solamente asiste, pero no 1:9 Buscáis mucho, y halláis poco; y encerráis en
está dispuesto a participar de la casa, y yo lo disiparé en un soplo. ¿Por qué? dice
edificación del Jehová de los ejércitos. Por cuanto mi casa está
desierta, y cada uno de vosotros corre a su propia
“nuevo templo de Dios”. casa.
Cuando Dios está a punto de despertar nuestro espíritu, él pone una
inquietud e inconformismo sobre la condición de nuestra vida.
Específicamente
en estas áreas:
i. No hay fruto o muy poco fruto en lo que hago. V.6
ii. A pesar de que tengo todo lo necesario, no me siento conforme. V.6
iii. No me alcanza lo que tengo, ya sea espiritualmente, o materialmente.
b. Tu bendición personal o familiar está conectada a la bendición de su casa.
Si
su casa es bendecida, tu familia será bendecida.
1:10 Por eso se detuvo de los cielos sobre vosotros la lluvia, y la tierra detuvo sus frutos.
1:11 Y llamé la sequía sobre esta tierra, y sobre los montes, sobre el trigo, sobre el vino, sobre
el aceite, sobre todo lo que la tierra produce, sobre los hombres y sobre las bestias, y sobre
todo trabajo de manos.
1:12 Y oyó Zorobabel hijo de Salatiel, y Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote, y todo el resto
del pueblo, la voz de Jehová su Dios, y las palabras del profeta Hageo, como le había enviado
Jehová su Dios; y temió el pueblo delante de Jehová.
1:13 Entonces Hageo, enviado de Jehová, habló por mandato de Jehová al pueblo, diciendo:
Yo estoy con vosotros, dice Jehová.
1:14 Y despertó Jehová el espíritu de Zorobabel hijo de Salatiel, gobernador de Judá, y el
espíritu de Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote, y el espíritu de todo el resto del pueblo; y
vinieron y trabajaron en la casa de Jehová de los ejércitos, su Dios,
1:15 en el día veinticuatro del mes sexto, en el segundo año del rey Darío.
Dios despierta al rey Ciro
Esdras 1
1:1 En el primer año de Ciro rey de Persia, para que se cumpliese la palabra de Jehová
por boca de Jeremías, despertó Jehová el espíritu de Ciro rey de Persia, el cual hizo
pregonar de palabra y también por escrito por todo su reino, diciendo:
1:2 Así ha dicho Ciro rey de Persia: Jehová el Dios de los cielos me ha dado todos los
reinos de la tierra, y me ha mandado que le edifique casa en Jerusalén, que está en Judá.
1:3 Quien haya entre vosotros de su pueblo, sea Dios con él, y suba a Jerusalén que está
en Judá, y edifique la casa a Jehová Dios de Israel (él es el Dios), la cual está en
Jerusalén.
1:4 Y a todo el que haya quedado, en cualquier lugar donde more, ayúdenle los hombres
de su lugar con plata, oro, bienes y ganados, además de ofrendas voluntarias para la
casa de Dios, la cual está en Jerusalén.
1:8 Los sacó, pues, Ciro rey de Persia, por
mano de Mitrídates tesorero, el cual los dio
1:5 Entonces se levantaron los jefes de las casas por cuenta a Sesbasar príncipe de Judá.
paternas de Judá y de Benjamín, y los 1:9 Y esta es la cuenta de ellos: treinta
sacerdotes y levitas, todos aquellos cuyo tazones de oro, mil tazones de plata,
espíritu despertó Dios para subir a edificar la veintinueve cuchillos,
casa de Jehová, la cual está en Jerusalén.
1:10 treinta tazas de oro, otras
1:6 Y todos los que estaban en sus alrededores cuatrocientas diez tazas de plata, y otros
les ayudaron con plata y oro, con bienes y mil utensilios.
ganado, y con cosas preciosas, además de todo 1:11 Todos los utensilios de oro y de plata
lo que se ofreció voluntariamente. eran cinco mil cuatrocientos. Todos los hizo
1:7 Y el rey Ciro sacó los utensilios de la casa de llevar Sesbasar con los que subieron del
Jehová, que Nabucodonosor había sacado de cautiverio de Babilonia a Jerusalén.
Jerusalén, y los había puesto en la casa de sus
dioses.
Te has preguntado que Dios quiere despertar en tu
vida
¿Qué es lo que Dios necesita despertar en ti?
¿Qué es lo que Dios te ha llamado a servir en esta
casa?
¿Qué cosas necesitas despertar en tu familia?

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