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FUNDAMENTOS DE

REDACCIÓN
SEMANA 1
ORGANIZAR LAS
IDEAS
 Cuando una persona habla o escribe
debe desarrollar cuatro propósitos:
1. Saber exactamente lo que quiere
expresar (Tema)
2. Expresarlo con un tono adecuado para
que el otro lo acepte (Tono).
3. Irlo diciendo de manera que el otro lo
entienda a medida que lo oye o lee
(Estilo).
4. Expresarlo de manera que las palabras
respondan exactamente al
pensamiento, es decir, manifestar
correctamente lo que se pretendía
expresar (Adecuación).
 A menudo sabemos de qué queremos escribir (el tema) y
sabemos también qué queremos conseguir (el propósito).
Eso no quiere decir que sepamos escribir las cosas de tal
manera que nos permita alcanzar el propósito. No
sabemos cómo escribir con eficiencia.
 Cuando se escribe necesitamos saber lo que se va a
expresar. No se puede ir tanteando o divagando poco a
poco para construir las ideas.
 No podemos estar seguros de lo que queremos escribir
hasta tener un conjunto de palabras con sentido
completo que resuma nuestro pensamiento, es decir,
una oración.
 La oración completa es la expresión
satisfactoria de nuestra idea. Pero esa
idea tenemos que comunicarla,
transmitirla a los demás y que sea
entendida de la mejor manera posible.
 Si se quiere llegar eficazmente a las
personas necesitamos encontrar el tono
adecuado. No el tono de sonido, sino el
tono psicológico, moral.
 ¿Cuántas veces no hemos abierto un e-
mail y con las palabras escritas en el
mismo detectamos si nuestro
interlocutor está triste, alegre o molesto
con nosotros? Ese es el tono del escrito.
 El tono no es más que la regulación
entre el sentimiento y la expresión,
entre lo que sentimos y lo que decimos.
 El itinerario de la expresión –
comprensión obedece a los
siguientes pasos:
1. Imaginación de una idea.
2. Sentimientos despertados por la
idea imaginada.
3. Tono en que se expresan tales
sentimientos.
4. Lenguaje, arropado por el tono,
expresivo de las ideas.
 Si ya se tiene claro de QUÉ se quiere
hablar y se ha escogido el TONO acorde
a la situación, ahora lo importante es
no perder la atención del lector. Ello
conlleva a desarrollar el ESTILO. Uno de
los genios de la literatura española,
José Martínez Ruiz, Azorín, dio hace
décadas el secreto de la sencillez en la
expresión:
 “…Haga lo siguiente y habrá alcanzado
de golpe el gran estilo: coloque una
cosa después de otra. Nada más; eso es
todo. ¿No ha observado el defecto de un
escritor cuando coloca unas cosas
dentro de otras mediante paréntesis,
guiones o incisos? Pues bien, lo
contrario es colocar las cosas, ideas,
sensaciones unas después de otras”.
 Hay un último obstáculo y es estar seguro si se
está expresando correctamente lo que se
quiere decir. ¿Mi texto manifiesta realmente lo
que quiero expresar? ¿Es posible saber lo que se
quiere expresar y no encontrar palabras para
escribirlo? La clave está en encontrar las
palabras exactas que nos permitan escribir con
claridad lo que queremos.
 Si conocemos lo que escribimos, lo vivimos,
sentimos, comprendemos, las palabras acuden
fácilmente porque el recuerdo está fresco, la
idea es clara. Lo importante es no perder de
vista la idea o realidad de la que estamos
hablando. Pensar en lo que decimos es el
camino más corto para decir efectivamente lo
que pensamos.
La narración
 La narración es el relato de unos hechos
que llevan a cabo individuos en
circunstancias precisas de tiempo, modo
y lugar como consecuencia de unas
causas con determinados objetivos o
finalidades, todo ello juzgable explícita
o implícitamente.
 Las fases de su proceso son las
siguientes:
1. Recogida de datos (constatación del
hecho).
2. Organización de los datos (plan
esquemático narrativo).
3. Relación de los datos (Narración
propiamente dicha.
 La diferencia esencial entre narración y descripción
surge fundamentalmente de la oposición de HACER
frente a SER. Mientras la primera se interesa por el
hacer, la segunda se preocupa por el ser de las
cosas.
 El siguiente se considera que es el marco teórico de
la narración:
1. Decisión previa: aspecto que nos interesa de los
hechos.
2. Desarrollo del contenido narrativo: se busca
despertar el interés objetivo del relato mediante una
introducción rápida, una exposición no demasiado
explícita y un final algo suspensivo. También se
busca que el relato brille por su autenticidad y
verosimilitud en la exposición de los hechos.
3. Captar y mantener la atención del lector: mediante
la concreción de aspectos principales; graduando la
intensidad de la exposición; y finalmente, salpicando
el relato con algunos incidentes secundarios.
La descripción
 Todos describimos sin darnos cuenta, todos
los días y muchas veces en el día. Y a
menudo lo hacemos bastante mal, con
imprecisión, con desorden.
 El proceso de la descripción es el
siguiente:
1. Recogida de los datos (Observación).
2. Organización de los datos (Plan
esquemático descriptivo).
3. Exposición de los datos (Descripción
propiamente dicha).
 Cuantos más datos recojamos de la persona, el objeto o el
hecho que vamos a describir, más rica, más completa será
la descripción.
 Puede efectuar algunos ejercicios de redacción orientados
a fortalecer sus competencias descriptivas. Empiece por
describir temas estáticos, como su casa, un paisaje, un
modelo de automóvil, etc.; luego avance a hacer lo mismo
pero con temas dinámicos como un viaje en carro, un
partido de fútbol, una fiesta, etc.; finalmente, haga la
descripción de una persona. En esta última es fundamental
que incluya los rasgos físicos, como actúa o cómo se
mueve, además de sus características psicológicas, como
su carácter, sus sentimientos, sus ideas, etc.
 Cuando termine la descripción, compárela con el tema
descrito. Es posible que haya olvidado detalles de interés.
Cuando termine de agregar esos rasgos y quede satisfecho,
someta su descripción a alguna persona de su confianza. El
punto de vista ajeno puede descubrir nuevos datos.

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