Está en la página 1de 12

Beneficios y obstáculos de la

Tutoría
El siguiente documento es una serie de síntesis y opiniones basados
en diferentes bibliografías, con la finalidad que exista una mejor
comprensión en el actuar de la tutoría, además de identificar como es
observado el tutor partiendo de varios puntos de vista.

Elaboró: L.C.P Ana Bertha Serratos


Hernández
 Lucas (2000) describió ciertos beneficios que obtienen tanto
tutorados como tutores de su interacción. Entre los beneficios
que reciben los primeros se encuentran: participar en
obtención de becas, colaboración en la investigación, soporte,
protección, conocimientos, consejos, altas probabilidades de
éxito ocupacional y experiencia.
 Por otra parte, Lucas divide los beneficios que reciben los
tutores en extrínsecos e intrínsecos. A través de los
primeros, los tutores reciben asistencia e incrementan sus
niveles de productividad; los tutorados pueden fortalecer sus
carreras generando nuevas ideas e incrementando la
profundidad del conocimiento; renuevan el sentido de
entusiasmo por el trabajo y contribuyen a realzar sus niveles de
poder, estatus profesional e ingresos. Con los segundos, los
tutores pueden disfrutar del trato con sus alumnos y sentir
satisfacción personal, sabiendo que con la tutoría contribuyen al
éxito de aquellos.

Elaboró: L.C.P Ana Bertha Serratos


Hernández
 Lyons y Scroggins (1990) señalan que el estudiante no
sólo recibe todos los beneficios, ya que un tutorado
prometedor favorece la carrera del tutor.
 Los estudiantes actúan como catalizad ores para
construir eslabones nuevos entre colegas y contribuir
al propio desarrollo del tutor. Permiten liberarlos de
las tareas más rutinarias (por ejemplo, trabajo de
laboratorio) para dar tiempo a cuestiones más
creadoras.
 El tutor, al tomar interés por el progreso del
estudiante, puede mejorar su experiencia académica.
Según los autores referidos, aquellos estudiantes que
se sienten tutorados son participantes más activos en
el mundo profesional o en la investigación.

Elaboró: L.C.P Ana Bertha Serratos


Hernández
 D. Campbell y T. Campbell (2000) realizaron una investigación
para identificar los beneficios que perciben los participantes
de la tutoría. El grupo de tutorados señaló como beneficios:
consejo, guía, información, amistad, apoyo, ayuda académica
así como en problemas personales, confianza y
oportunidades para conocer puntos de vista diferentes. Por
su parte, el grupo de tutores advirtieron como beneficios:
interactuar de manera personal con estudiantes, adquirir
satisfacción y experiencia en lo compartido, sentirse en
contacto con estudiantes y aprender de ellos.
 En cuanto a los retos y dificultades de la tutoría, se
encuentran: poca disponibilidad en cuanto a tiempo por
parte del tutor, problemas interpersonales, falta de
compromiso y expectativas diferentes entre tutor y tutorado
(Ehrich, Hansford y Tennet, 2003).

Elaboró: L.C.P Ana Bertha Serratos


Hernández
 En cuanto a los retos y dificultades de la tutoría, se
encuentran: poca disponibilidad en cuanto a tiempo por
parte del tutor, problemas interpersonales, falta de
compromiso y expectativas diferentes entre tutor y tutorado
(Ehrich, Hansford y Tennet, 2003).

Elaboró: L.C.P Ana Bertha Serratos


Hernández
 Hasta aquí hemos tratado de resaltar algunos
aspectos que de manera recurrente se han descrito y
analizado en la literatura sobre tutoría. Estos aspectos
se han expuesto con la finalidad de ubicar los puntos
en que se sostiene el abordaje teórico y la práctica
tutorial presentes en literatura revisada. Como
conclusión preliminar, podemos afirmar que la
dispersión de conceptos y su congruencia minimiza la
claridad de los objetivos y resultados de la tutoría.
 En el siguiente apartado abordaremos algunas de las
limitantes propias de la investigación sobre tutoría,
pues consideramos que nos puede abrir
oportunidades para visualizar retos y tareas por
resolver.

Elaboró: L.C.P Ana Bertha Serratos


Hernández
Investigaciones sobre tutoría
Descripción de investigaciones sobre tutoría

 Es posible clasificar los artículos obtenidos en descriptivos y en


empíricos. A continuación detallamos dicha categorización.
 Las referencias nominadas como descriptivas las dividimos en tres
bloques: política educativa, especificaciones prescriptivas y textos
anecdóticos.
 En la política educativa sobre tutoría existen documentos donde se
describen los requisitos establecidos por diversas instituciones de
educación superior en sus legislaciones, reglamentos, programas de estudio
y cualquier otro documento generado con la intención de especificar los
requisitos de ingreso y permanencia para ejercer la tutoría en recintos
universitarios.
 En las especificaciones prescriptivas se ubican textos donde se aborda el
deber ser del tutor, por ejemplo: "un tutor debe ser capaz de guiar a los
alumnos en sus procesos formativos" o "un tutor debe animar a sus
alumnos cuando el proyecto de investigación se ve interrumpido por
cuestiones financieras y proponer alternativas de solución".
 Por último tenemos a los textos anecdóticos donde los participantes de la
tutoría narran sus experiencias.

Elaboró: L.C.P Ana Bertha Serratos


Hernández
 Las referencias clasificadas como
investigaciones empíricas se pueden
catalogar según la metodología empleada, el
diseño y los sujetos cuestionados. En cuanto
al tipo de metodología existen tanto
cualitativas como cuantitativas.
 En las cualitativas utilizan como principales
técnicas entrevistas a profundidad,
semiestructuradas o no estructuradas, los
tipos de estudio son narrativos, de casos o
exploratorios.
Elaboró: L.C.P Ana Bertha Serratos
Hernández
 Y en las cuantitativas utilizan, como principales instrumentos,
cuestionarios, escalas, entrevistas estructuradas y el análisis de los
datos se realiza con estadística descriptiva y análisis factoriales. En
cuanto a los diseños de las investigaciones se localizaron:
retrospectivos, transversales y longitudinales, En cuanto a los sujetos
cuestionados se ha trabajado con tutorados, tutores o ambos
grupos cuyas respuestas suelen contrastarse.

Elaboró: L.C.P Ana Bertha Serratos


Hernández
Antes de continuar, es preciso aclarar los siguientes aspectos:
 1. La educación en su conjunto entabla retos y cambios urgentes para
adecuarse a la dinámica de la sociedad del conocimiento.
 2. La educación superior, al ubicarse en el nivel más alto de la formación,
resulta la más idónea para comenzar a gestionar cambios (curriculares,
prácticas, vinculación con el entorno) que paulatinamente permitan
enlazarse con la sociedad del conocimiento. La educación superior, al tener
como propósito la creación y difusión del conocimiento, puede plantear
alternativas que propicien la creatividad, la innovación, la multi y
transdisciplina así como la transferencia del conocimiento a múltiples
escenarios y contextos.
 3. La tutoría es una función docente que resulta muy útil para transitar de
modelos centrados en la enseñanza, hacia modelos centrados en el
aprendizaje. El énfasis está en desarrollar las capacidades, habilidades, valores
y actitudes de los estudiantes mediante el contacto con tutores, quienes
pueden brindarles experiencias de aprendizaje que los incorporen a la
gestión del conocimiento. Es decir, la tutoría en la sociedad del
conocimiento tendría como propósito propiciar que los estudiantes
adquieran, mediante la ayuda de los tutores, capacidades abiertas y
transferibles para confrontarse a una multitud de situaciones complejas e
inciertas, tales como las que plantea la sociedad actual.

Elaboró: L.C.P Ana Bertha Serratos


Hernández
 Ehrich, L, Hansford, B. y Tennet, L. (2003). "Mentoring in medical context" Texto presentado en la British
Educational Research Association Annual Conference, 11–13 Septiembre, Heriot Watt University,
Edinburg. [ Links ]
 Fagenson– Eland, E., Marks, M. y. Amendola, K. (1997). "Perceptions of mentoring relations hips" en
Journal ofVocational Behavior, Vol. 51, pp. 29–42. [ Links ]
 Fresko, B. (1997). "Attitudinal change among university student tutors" en Journal of Applied Social
Psychology,Vo\. 27, núm. 14, pp. 1277–1301. [ Links ]
 Fullerton, H. (1996). "Facets of mentoring in higher education" en Assessment y evaluation in Higher
education, Vol. 21, núm. 4, pp. 382–384. [ Links ]
 Grant–Vallone, E. y Ensher E. (2000). "Effects of peer mentoring on types of mentor support, program
satisfaction and gradúate student stress: A dyadic perspective" en Journal of College Student
Development, Vol. 42, núm. 6, pp. 637–642. [ Links ]
 Hadden, R. (1997). "Mentoring and coaching" en Executive Excellence; Vol. 14, núm. 4, pp. 17–19. [
Links ]
 Hagevick, S. (1998). "What's a mentor, who's a mentor?" en Journal of environmental health, Vol. 61, núm.
3, pp. 59–60. [ Links ]
 Haksever, A y Manisali, E. (2000). "Assessing supervisión requirements of PhD students: the case of
construction management and engineering in the UK" en European Journal of Engineering Education,
Vol. 25, núm. 1, pp. 19–32. [ Links ]
 Hartung, P. (1995)."Assessing career certainty and choice status" en ERIC Digest ED 391107. 4 pp.
[ Links ]
 Janasz, S. y Sullivan, S. (2004). "Múltiple mentoring in academe: developing the professorial network", en
Vocational Behavior, Vol. 64, pp. 263–283. [ Links ]

Elaboró: L.C.P Ana Bertha Serratos


Hernández
 Referencias
 ANUIES (2000). Programas Institucionales de Tutoría. Una propuesta de la ANUIES para su organización y
funcionamiento en las instituciones de educación superior, México, Colección Biblioteca de la Educación
Superior, Serie Investigaciones, ANUIES. [ Links ]
 Adams, H. (1993). "Mentoring an essential factor in the doctoral process for minority students" en ERIC
Digests ED 358 769. [ Links ]
 Anderson E. y Shannon A. (1988). "Toward a conceptualization of mentoring", en Journal of Teacher
education, January–February, pp. 38–42. [ Links ]
 Bedy, L. (1999). Mentoring in medicine, architecture and teaching. Thesis PhD. Syracuse University. [
Links ]
 Berger, S. (1990). Mentor relationship and gifted learners. ERIC_NO ED32 24512, Digest # E486, 5 pp.
[ Links ]
 Bey, T. (1995). "Mentorships" en Education y Urban Society, Vol. 28, núm. 1, pp. 11–19. [ Links ]
 Brown II, C., Davis, G. y McClendon, S. (1999). "Mentoring gradúate students of color: myths, models, and
modes", en Peabody Journal of Education, Vol. 74, núm. 2, pp. 105–118. [ Links ]
 Campbell, D. y Campbell T. (2000). "The mentoring relationship: differing perceptions of benefits", en
College Student Journal, Vol. 34, núm. 4, pp. 516–523. [ Links ]
 Collis, B. (1998). "News didactics for university instruction Who and how?", en Computers y Education, Vol.
31, pp. 373–393. [ Links ]
 Conley, K. (2001). Investigation of the dimensions of mentoring. Thesis of PhD. University of Kansas. [
Links ]
 Dolmas, D. (1994). ''A rating scale for tutor evaluation in a problem–based curriculum: validity and
reliability" en Medical Education, Vol. 28, pp. 550–558. [ Links ]
 Doreen, K. (1997). The perceptions of effectiveness of mentoring relationships in higher education. Thesis
of PhD. Florida Atlantic University. [ Links ]
 Douglas, B., Diehr, S., Morzinski, J. y Simpson D. (1998). "Support–challenge–vision: a model for faculty
mentoring" en]

Elaboró: L.C.P Ana Bertha Serratos


Hernández

También podría gustarte