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preces vocacionales i

ORDEN DE LA MERCED

Oremos con fe a Dios nuestro Padre, antes de participar de la mesa que Él


nos prepara.

Cuida, Señor a todos nuestros hermanos Mercedarios, y haz que su


fidelidad y vida sirvan de testimonio para muchos jóvenes. Roguemos al
Señor.

Pastor bueno, que congregas a tu pueblo en medio del mundo, suscita en


nuestras comunidades vocaciones a la vida consagrada en la Orden de la
Merced. Roguemos al Señor.

Tú, que quisiste estar cerca de los pequeños, conserva a nuestros niños y
jóvenes en tu amistad para que escuchen tu llamada a la vida consagrada y
la sigan con docilidad. Roguemos al Señor.

Anima, Señor, en el corazón de los jóvenes, el deseo de ofrecer su vida


siguiendo tu llamada. Roguemos al Señor.

Envía, Señor, servidores a tu Iglesia, para que tu Nombre sea conocido en el


mundo. Roguemos al Señor.

Padre de Bondad, que aceptaste la ofrenda de tu Hijo, suscita, en nuestras


casas, jóvenes dispuestos a dar su vida en el servicio de los cautivos.
Roguemos al Señor.

Escucha, Señor, estas peticiones que te hemos presentado. Ven junto a


nosotros, y renueva con tu amor nuestros corazones.
Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
preces vocacionales ii
ORDEN DE LA MERCED

Oremos a Dios, nuestro Padre, por Jesucristo, su Hijo amado, nuestro


hermano.

Te pedimos, Señor por nuestros hermanos que están en formación inicial,


que vivan con gozo y generosidad este tiempo de discernimiento y gracia.
Roguemos al Señor.

Dios misericordioso que entregaste a tu Hijo único para salvar a los


hombres, suscita generosidad en el corazón de los padres, para que con
gozo acompañen a sus hijos en el camino a la vida consagrada. Roguemos al
Señor.

Señor Jesús, que con tu muerte y resurrección purificas y elevas el amor


humano, haz que en nuestras comunidades fomentemos con nuestro
testimonio la cultura vocacional. Roguemos al Señor.

Señor, a los jóvenes que llamas a dejarlo todo por Ti, sostenlos con tu gracia
en su propósito de entrega. Roguemos al Señor.

Que seamos dóciles a las inspiraciones de tu Espíritu, para acompañar a los


jóvenes en su camino de discernimiento. Roguemos al Señor.

Que nuestras acciones estén todas inspiradas en tu vida y en tu palabra,


para que los jóvenes reconozcan tu presencia en medio nuestro. Roguemos
al Señor.

Escucha, Padre, nuestras oraciones. Escúchalas por Jesucristo, tu Hijo,


nuestro hermano, que vive y reina contigo por los siglos de los siglos.
preces vocacionales iii
ORDEN DE LA MERCED

El camino de Jesús conduce a la salvación y a la vida. Oremos ahora para


que esta vida llegue a todos los hombres.

Concede, Señor, a nuestras comunidades el verdadero espíritu de familia, y


haz que muchos jóvenes, compartiendo en nuestras comunidades, se
animen a conocer y seguir la vocación a la vida consagrada mercedaria.
Roguemos al Señor.

Tú que por amor abrazaste la cruz por todos los hombres, haz que muchos,
siguiendo tus huellas, entreguen su vida por los hermanos. Roguemos al
Señor.

Señor, danos fidelidad a quienes te seguimos en obediencia, pobreza,


castidad y el cuarto voto de la Merced, para que nuestro testimonio sea
creíble, y sean muchos los jóvenes que experimenten tu amor por medio
nuestro. Roguemos al Señor.

Aumenta, Señor, el número de los miembros de la familia mercedaria, para


que tu Reino sea conocido por los hombres, especialmente por los jóvenes.
Roguemos al Señor.

Señor, concédenos la gracia de ser auténticos profetas, testigos y


servidores y da fecundidad a nuestra labor apostólica, suscitando en los
jóvenes el servicio a los hermanos. Roguemos al Señor.

Ilumina, Señor, a nuestros jóvenes en el discernimiento de su vocación para


que sigan su camino con generosidad y constancia. Roguemos al Señor.

Padre, mira bondadoso nuestras oraciones, y concédenos lo que te


pedimos con fe.
Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
preces vocacionales iv
ORDEN DE LA MERCED

Fieles a las palabras de Jesús, que nos invita a orar siempre sin
desanimarnos, presentemos al Padre nuestras peticiones.

Que estemos atentos y disponibles, Señor, para acompañar, guiados por tu


Espíritu, a los jóvenes que manifiestan el deseo de un mayor compromiso
por el Reino. Roguemos al Señor.

Señor, aumenta en nosotros la unión contigo, para que nuestra caridad sea
auténtica, alegre y creativa. Roguemos al Señor.

A quienes llamaste a tu servicio, concédeles, Señor, un corazón sabio y


generoso, que ayude a cada hermano a descubrir y realizar su vocación.
Roguemos al Señor.

Te pedimos Señor, por todos los jóvenes, y haz que, a quienes invitas a
seguirte de modo especial, te respondan con corazón sincero. Roguemos al
Señor.

Concédenos, Señor, crecer en clima de confianza y de mutuo perdón, para


que muchos jóvenes, viendo nuestro testimonio, decidan seguirte.
Roguemos al Señor.

Tú que nos diste a san Pedro Nolasco como padre y maestro, haz que
siguiéndolo, sepamos acompañar a los jóvenes por el camino al que los
llamas. Roguemos al Señor.

Escucha, Padre, las oraciones que te hemos presentado, Tú que eres


nuestro auxilio. Atiende nuestros anhelos, y danos tu Espíritu Santo.
Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
preces vocacionales v
ORDEN DE LA MERCED

Guiados por el Espíritu que Dios nos ha dado, presentemos nuestras


peticiones.

Danos, Señor, tu luz, para acompañar prudentemente a los jóvenes que han
escuchado tu voz y se disponen a seguirte. Roguemos al Señor.

Concede, Señor, a los padres de los jóvenes que llamas, el don de


comprender la vocación de sus hijos, y acompañar con fe su discernimiento
y decisión. Roguemos al Señor.

Que sepamos, Señor, acompañar a los jóvenes en el discernimiento


vocacional con delicadeza y respeto, mediante el diálogo personal.
Roguemos al Señor.

Señor, Tú que nos envías a ser servidores entre los hombres, especialmente
en medio de los cautivos, haznos testigos vivos de las bienaventuranzas.
Roguemos al Señor.

Señor, Tú que eres la vid verdadera que nos da el fruto de la vida, haz que
junto con los jóvenes que nos confías, permanezcamos siempre en Ti y
demos fruto abundante. Roguemos al Señor.

Que los jóvenes, Señor, descubran la fuerza de tu llamada y, contemplando


tu rostro, especialmente entre los pobres y abandonados, se dispongan a
servirte en medio de ellos. Roguemos al Señor.

Danos, Señor, tu paz, y que tu Espíritu descienda sobre nosotros y sobre


todos los hombres de la tierra.
Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
preces vocacionales vi
ORDEN DE LA MERCED

Guiados por el Espíritu que Dios nos ha dado, presentemos nuestras


peticiones.

Despierta, Señor, en las familias cristianas el amor a tu Iglesia, para que no


pongan obstáculo cuando Tú llames a uno de sus hijos. Roguemos al Señor.

Que los que hemos sido llamados a participar de tu espíritu redentor en la


Orden mercedaria, sepamos atraer, con nuestra alegría y trabajo, nuevos
miembros que se consagren a tu Reino. Roguemos al Señor.

Acrecienta, Señor, la piedad en nuestras comunidades y suscita vocaciones


capaces de dejar los bienes de este mundo para consagrarse enteramente a
Ti. Roguemos al Señor.

Te pedimos, Señor, por los que dudan o no se atreven a responder a tu


llamada, haz que sientan en su corazón la urgencia del Evangelio. Roguemos
al Señor.

Por las familias cristianas, para que el Señor Jesús les dé la abundancia de
su vida y sean fervorosas en la fe, favorables en el nacimiento y el
desarrollo de nuevas vocaciones. Roguemos al Señor.

Por los religiosos mercedarios y, en especial, por los que atraviesan


situaciones difíciles, para que la protección de María, nuestra Madre, les
aliente en la adversidad. Roguemos al Señor.

Escucha, Señor Jesús, nuestras peticiones. Danos tu mano, danos tu luz. Y


haz que te sigamos siempre en tu camino. Tú que vives y reinas por los
siglos de los siglos.
preces en celebraciones marianas
ORDEN DE LA MERCED

Presentemos humildemente nuestras peticiones a Dios Padre


todopoderoso, por intercesión de María santísima, que, asociada a Cristo
su Hijo, participa en la historia de salvación.

Por el Papa, los obispos, sacerdotes y diáconos, religiosos y religiosas, para


que cuiden el rebaño a ellos encomendado y busquen a los descarriados.
Roguemos al Señor.

Que muchos jóvenes sientan tu llamada y respondan con fe y confianza


como María. Roguemos al Señor.

Tú que nos diste por medio de san Pedro Nolasco a María como Madre,
concédenos por su intercesión, valentía y delicadeza para proponer con
claridad el camino de seguimiento a los jóvenes. Roguemos al Señor.

Que, como María, seamos dóciles y valientes para responder con fidelidad a
la vocación que Dios nos llama. Roguemos al Señor.

Tú nos llamas, Señor, a vivir y trabajar juntos: que, como María, seamos
fuente y signos de comunión permanente. Roguemos al Señor.

Que en los momentos de dificultad, seamos, como María, ejemplos de


esperanza y fe. Roguemos al Señor.

Da fidelidad, Señor, a quienes te siguen en obediencia, pobreza, castidad y


el cuarto voto propio de la Orden de la Merced, para que su testimonio sea
creíble, y sean muchos los jóvenes que experimenten tu amor por medio
suyo. Roguemos al Señor.

Dios, Padre nuestro. Tú nos has dado en María un modelo de fidelidad al


Evangelio y una luz de esperanza en el camino hacia ti. Escucha nuestra
oración y haz que, como ella, te amemos siempre de todo corazón, y
amemos también muy de verdad a nuestros hermanos.
Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
preces para el tiempo de cuaresma
ORDEN DE LA MERCED

Oremos a Dios, que quiere salvar a todos los hombres y los llama a la
sincera conversión.

Concédenos un verdadero espíritu de conversión, a fin de que nuestra


comunidad sea testimonio transparente de tu amor. Roguemos al Señor.

Perdona, Señor, nuestra pereza y dejadez y danos un corazón atento y


laborioso para acompañar a los jóvenes en el camino de santidad.
Roguemos al Señor.

Perdona, Señor, nuestra indiferencia y aumenta nuestro deseo de


acompañar a los jóvenes en su proceso vocacional. Roguemos al Señor.

Perdona, Señor, el no ser testimonios claros de un alegre seguimiento de


tus pasos, concédenos ser, día a día, signos y portadores de tu amor.
Roguemos al Señor.

Mira, Señor, nuestro corazón arrepentido y, por tu misericordia,


concédenos ser instrumentos de tu llamada a los jóvenes. Roguemos al
Señor.

Convierte, Señor, nuestra vida en fiel reflejo de tu amor y predilección por


los pequeños y los pobres. Roguemos al Señor.

Escucha nuestras súplicas, Señor: mira con clemencia a los que se acercan
a ti con corazón arrepentido y purifícanos de nuestros pecados.
Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

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