(AC - S04) Semana 04 - Tarea: Ensayo del oncenio de Leguía (PA)
INTEGRANTE:
1. GÓMEZ ARCE, Lucero del Rosario Cod. 22202863
Ica, 17 de Abril del 2024
EL ONCENIO DEL PRESIDENTE LEGUÍA
El oncenio de Leguía fue un gobierno que impactó profundamente en nuestra historia
del siglo XX. Este gobierno se basa en dedicarse y depender en su totalidad del capital extranjero de países como Estados Unidos, de altos niveles de corrupción, del autoritarismo y del atropello a las instituciones del Estado.
El carácter autoritario del Oncenio de Leguí
El gobierno de Leguía, conocido como oncenio, fue un periodo en la historia del Perú en donde se implantó una dictadura cívica siendo manejada por Leguía. En esa época, el civilismo dejó de ser la fuerza política predominante y ese gobierno se caracterizó por ser de un estilo dictatorial y populista. El presidente Augusto B. Leguía gobernó el Perú por 11 años consecutivos, por eso su gobierno es conocido como Oncenio. Este gobierno es un ejemplo de autoritarismo y permanencia en el poder, ya que Leguía cancelaba las propuestas y las organizaciones no se relacionaban con su gobierno, hacía obras sin tomar en cuenta los medios ni los precios, haciendo todas esas obras con el fin de ganarse una buena imagen y no por los ciudadanos. Todos estos hechos nos dan a conocer sobre el carácter autoritario de este gobierno.
Las políticas de Leguía respecto a los sectores populares y clases medias
Leguía favoreció a la clase media y los sectores célebres, debido a que dichos incrementaron y deseaban una sección del poder, ser parte del Estado. Los que pertenecen a la clase media, son los expertos, escritores, periodistas, pequeños comerciantes entre otros, dichos llegan a consolidarse en las localidades, sobre todo en la costa donde había más grandes perspectivas de desarrollo y más grandes maneras de colaboración política. La clase media alcanzó a transformarse en una clase pensante y dominante, debido a que cada vez los adolescentes tenían más grandes modalidades de entrar a una enseñanza universitaria, ha sido así cómo se convirtieron en un conjunto bastante crítico y no ha sido, mayormente, radical de derecha ni de izquierda. En conclusión, si bien al comienzo los intelectuales y políticos de clase media se beneficiaron del entorno conveniente gubernamental de Leguía, secundando sus medidas, en la segunda fase se fueron bastante críticos de su régimen, debido a que consideraban que aquel tipo de modernización que se estaba generando, implicaba la subordinación de la economía al imperialismo norteamericano y, con ello, la desnacionalización de los medios de producción y de la cultura.
El papel del capital norteamericano durante el régimen de Leguía
Durante el gobierno de Leguía se llevó a cabo: “La expansión del Estado y la creciente llegada del capital extranjero, principalmente estadounidense” (Pease & Romero, 2014, p.71). El capital norteamericano ha lanzado un nuevo crecimiento económico. Las importaciones norteamericanas significaron consumo interno gracias a inversiones en minería y petróleo, préstamos a bancos, provisión de sistemas de crédito y reembolsos. “Lima fue priorizada y se vio beneficiada por la modernización” (Pease & Romero, 2014, p. 72), por la infraestructura local, obras y actividades en provincias. Mientras tanto, los estados aumentaron su deuda con los Estados Unidos. Patria Nueva sabía que los bancos norteamericanos estaban en auge y listos para garantizar la inversión extranjera, lo que aumentó su deuda externa con Estados Unidos. En 1929, el colapso de la Bolsa de Valores de Nueva York desencadenó la Gran Depresión. Esto ha resultado en el colapso de las economías latinoamericanas, incluido Perú. Por esa razón las exportaciones peruanas cayeron y como resultado las inversiones de capitales norteamericanos dejaron de llegar al Perú.