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Centauros en Astrología

El Valor de la Transformación

Octavio Déniz
Centauros en Astrología. El Valor de la Transformación © de Octavio Déniz, 2021.

Imagen de portada: "Viejo centauro molestado por Eros". Copia romana de un original griego del siglo
II a. C. Museo del Louvre, París. Licencia de dominio público.

Primera Edición, 23 de febrero de 2021

Todos los derechos reservados. Ninguna parte de esta obra puede ser reproducida, incluso en Internet,
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Índice
Introducción
El descubrimiento de los centauros
Mitología del centauro
Los centauros en astrología
Quirón
Folo
Neso
Asbolo
Cariclo
Hilónome y Cílaro
Los centauros en la Carta de Jiddu Krishnamurti
Apéndice. Obtener tu Carta Natal con los Centauros
Bibliografía
Introducción
Quirón y el resto de los centauros forman parte de la nueva constelación de planetas que están entrando
con fuerza en el mundo de la astrología contemporánea. Esta nueva categoría de cuerpos celestes
presenta características astronómicas comunes, y por este motivo se les ha bautizado con el nombre de
unas criaturas mitológicas muy especiales.

Los centauros del mito griego son seres que poseen un cuerpo de caballo sobre el que emerge un torso
humano dotado de cabeza y brazos. La parte animal del centauro representa la naturaleza, el instinto y
la fuerza de un animal; mientras que su mitad humana, es capaz de razonar, de hablar y de ejecutar
acciones que requieren habilidad y destreza.

Según el mito, existieron, como veremos, centauros de sexo masculino y otros femeninos, quienes
reciben la denominación de centáurides. Algunos centauros fueron sabios y bondadosos, como Quirón,
su esposa Cariclo, Folo o Asbolo. Otros, en cambio, actuaron de formas menos honorables, como Neso.
Por fin, otros se hicieron célebres por su fidelidad hasta la muerte, como la pareja de Hilónome y
Cílaro.

Los centauros astronómicos, descubiertos a partir de 1977, revelan un simbolismo que, como mostraré
a lo largo de este libro, resulta importante para el momento actual, para los hombres y mujeres que
vivimos en estas primeras décadas del siglo XXI.

Como corresponde al mito, los centauros astronómicos son cuerpos de doble naturaleza, y lo son por un
doble motivo. En primer lugar, porque sus órbitas se encuentran "a caballo" entre las de los planetas
gigantes, sin pertenecer completamente a ninguna. En segundo lugar, porque su propia esencia parece
combinar los elementos de un pequeño planeta con las de un cometa.

Esta naturaleza dual y paradójica resulta muy importante a la hora de analizar el simbolismo astrológico
de estos cuerpos, como ya veremos. De alguna manera, ellos revelan, mejor que otros planetas, el paso
de la conciencia más baja a la más alta, desde la parte animal e instintiva, a la parte humana y racional.
Son planetas astrológicos que nos hablan de la evolución de la conciencia, y por ese motivo, resultan de
un enorme interés para cualquier persona interesada en la astrología humanista o evolutiva.

Los cuerpos que analizaré en este volumen son siete: Quirón, Folo, Neso, Asbolo, Cariclo, Hilónome y
Cílaro.

La elección de estos centauros, por encima de las varias decenas de ellos que han sido descubiertas
hasta la actualidad, se debe a un factor esencial. La mayor parte de los centauros que se mencionan en
los mitos no son más que nombres arrojados al azar por algún autor del pasado y carentes del menor
soporte argumental. Existen muy pocas historias míticas que involucren a estos seres y de las que
podamos extraer algún simbolismo que resulte interesante para nosotros.

De este modo, entre todos los centauros descubiertos, necesariamente tenemos que seleccionar a
aquellos que sí tienen un mito de cierta importancia que avale su relevancia astrológica. A partir de esas
historias míticas, podemos hilvanar su significado y descubrir así cómo integrarlos en el análisis de la
Carta Natal.
Este es un libro para personas con conocimientos, al menos básicos, de astrología. Está destinado a
aquellos que quieran profundizar en el mundo fascinante de los nuevos planetas astrológicos,
continuando la serie que inicié con mi obra "El retorno de las Diosas. Asteroides en Astrología", cuya
lectura es complementaria a este volumen.

Para comenzar este viaje presente, analizaremos de forma sucinta, cómo fueron descubiertos los
centauros. Se aportarán algunos datos acerca de su realidad astronómica, que nos pueden ayudar a
entender mejor su naturaleza.

Continuaremos con un análisis más pormenorizado del ámbito mitológico general en que estos seres
han surgido. Dedicaré un espacio a los mitos relacionados con el caballo, ya que tienen una gran
importancia en la psique humana. Los mitos ecuestres hunden sus raíces en los miles de años de
estrecha relación del ser humano con estos hermosos animales. Aún hoy, los caballos siguen
apareciendo en nuestros sueños, y el ser que se deriva de él, el centauro, posee un rico arsenal de
historias que necesitamos analizar a fondo.

Además, no podemos olvidar la conexión entre el caballo y el mundo de los chamanes, los antiguos
sanadores que están en la raíz de la espiritualidad humana. La relación del chamán, el caballo y el
centauro como ser herido que busca la curación, es una de las claves para entender la importancia de
símbolos como Quirón en la Carta Natal.

Después de analizar las implicaciones y el mejor uso de los centauros en el horóscopo, entraré a
estudiar, uno por uno, los siete centauros que componen el corazón de esta obra. Para cada uno de ellos,
explicaré sus mitos particulares, así como el simbolismo astrológico que se puede derivar de dichos
mitos. Esto nos permitirá trazar su significado en el contexto de la Carta Natal y en relación a tránsitos,
eclipses y sinastrías.

Estudiaremos también los centauros de la Carta Natal del líder espiritual Jiddu Krishnamurti, lo que nos
permitirá tener una visión panorámica acerca de cómo deben ser analizados estos cuerpos en el
contexto de una natalidad.

Para finalizar, se aporta un apéndice con información precisa para que cada cual calcule las posiciones
natales de sus propios centauros de manera gratuita a través de Internet.

Te invito, por tanto, a que comiences este recorrido por el mundo de los centauros astrológicos, con la
esperanza de que te sean de utilidad y con la certeza de que estos hombres y mujeres caballo, te
aportarán una nueva perspectiva sobre nuestro antiguo arte, la Astrología.
El descubrimiento de los centauros
El 1 de noviembre de 1977 el astrónomo Charles T. Kowal hizo un descubrimiento importante. Desde
su telescopio de Pasadena (California), y sobre las 10 de la mañana, pudo reconocer, entre imágenes
tomadas el 18 de octubre anterior, un cuerpo que llamó su atención.

Los cálculos acerca de su órbita revelaron que dicho cuerpo, bautizado provisionalmente con el poco
imaginativo nombre de "1977 UB", se movía entre las órbitas de Saturno y Urano. En realidad, este
astro ya había sido fotografiado con anterioridad en 1895, pero en aquella ocasión había pasado
desapercibido.

En un primer momento, la prensa dio una gran importancia al hallazgo, como ya se había hecho tiempo
atrás con el descubrimiento de Ceres. A este nuevo cuerpo se le denominó el "décimo planeta" y
astronómicamente fue incluido, en un primer momento, en la categoría de los asteroides. Al analizarlo
con más cuidado se observó que, tanto su extraña órbita, como el hecho de que se le detectara una cola
similar a la de los cometas, sugería la creación de una nueva categoría de cuerpos celestes.

Felizmente, este pequeño planeta recibió un nombre de amplias resonancias mitológicas, Quirón, y la
categoría de cuerpos a la que dio origen, pasó a denominarse, "centauros".

Durante unos años, la categoría de los centauros sólo incluía a Quirón, lo cual no es extraño, puesto que
él era el más importante de todos los hombres-caballo. Pero con el descubrimiento de Folo en 1992 y
de Neso en 1993, esta familia empezó a poblarse con nuevos miembros.

Astronómicamente, los centauros son objetos cis-neptuanianos, es decir, que se encuentran incluidos
dentro de la órbita de Neptuno. Como veremos, los centauros se caracterizan por moverse en un
territorio que abarca las órbitas de varios planetas. Es esta cualidad, la de atravesar las órbitas de otros
cuerpos, lo que ha servido para dar nombre a todo el conjunto.

Los centauros son cuerpos menores del Sistema Solar. Otros objetos menores serían los asteroides,
algunos planetas enanos, como Ceres, y los asteroides denominados "troyanos", que se encuentran
dentro de la órbita de los planetas gigantes.

Todos los centauros conocidos se desplazan entre las órbitas de Neptuno y Júpiter, lo que abarca
amplias zonas del sistema solar. Algunos, incluso, rozan la órbita de Marte.

Una característica de todos los centauros es que poseen órbitas bastante inestables, debido a que sufren
la acción gravitatoria de planetas gigantes como el propio Júpiter. Por eso, conocemos sus movimientos
en tiempos recientes, pero resulta algo más complicado averiguar por dónde se desplazaban en tiempos
remotos. De hecho, se piensa que todos ellos se han originado en el Cinturón de Kuiper (una zona
ubicada entre la órbita de Neptuno y que abarca hasta las 50 Unidades Astronómicas). Estos cuerpos
lejanos habrían sido atraídos al interior del sistema solar por la acción de los planetas, y algunos de
ellos acabarán siendo capturados por ellos en el futuro. Se convertirán así, en satélites de los gigantes
gaseosos.

Como los centauros del mito, estos cuerpos participan de una naturaleza doble, pero no sólo por el
hecho de "cabalgar" entre diferentes órbitas planetarias, sino incluso por la doble esencia de algunos de
ellos. Por ejemplo, en Quirón se ha observa la presencia de una "cola", que en el argot astronómico se
denomina "coma". Así que, además de ser una especie de asteroide, Quirón es también un cometa. La
cola, que es característica de los cometas, se produce cuando un cuerpo se aproxima al Sol y los vientos
magnéticos de nuestro astro provocan el desprendimiento de nubes de gas y polvo.

Este mismo comportamiento cometario se ha observado en un pequeño centauro denominado Echeclus.


Es posible que haya otros centauros que se muevan seguidos de una cola.

Hasta el momento no tenemos imágenes cercanas de ningún centauro, ya que ninguna sonda espacial se
ha acercado a ellos lo suficiente. Se supone que una luna de Saturno, Febe, puede ser un centauro
capturado por el gigante gaseoso. También hay sospechas de que el asteroide Ceres pueda haber sido
un centauro en el pasado.

Debido a su pequeño tamaño, carecemos de buenas imágenes lejanas de cualquiera de los centauros.
Pero por el espectro de color se pueden reconocer algunas de sus características, composición e incluso
origen.

Algunos centauros, como Folo, presentan un color rojizo, que los convierte en aún más raros dentro del
conjunto. Pero la mayoría de ellos tiene un color azul grisáceo, como es el caso del propio Quirón.

Quirón
Descubierto en 1977
Orbita entre Saturno y Urano
Periodo orbital (años): 50,41
Folo
Descubierto en 1992
Orbita entre Saturno y Neptuno
Periodo orbital (años): 91,72
Neso
Descubierto en 1993
Orbita entre Saturno y Neptuno
Periodo orbital (años): 121,1
Asbolo
Descubierto en 1995
Orbita entre Júpiter y Neptuno
Periodo orbital (años): 76,15
Cariclo
Descubierto en 1997
Orbita entre Saturno y Urano
Periodo orbital (años): 62,63
Hilónome
Descubierto en 1995
Orbita entre Urano y Neptuno
Periodo orbital (años): 126,14
Cílaro
Descubierto en 1998
Orbita entre Urano y Neptuno
Periodo orbital (años): 133,44

Tabla 1. Los centauros estudiados en este libro


Mitología del centauro
El caballo y los centauros en la mitología
Para entender la naturaleza arquetípica de los centauros, tenemos que hacer una indagación acerca de
las raíces míticas de este símbolo, y para ello debemos recurrir a la mitología griega.

En muchas representaciones artísticas, observaremos a los centauros en lucha contra otros individuos.
Estas obras recuerdan la discordia que existía entre la tribu de los lápitas y los centauros, que llevó a
varias guerras entre ellos. Pero es interesante recordar que tanto lápitas como centauros se sentían
descendientes de Ixión. Así que empezaré contando la historia de este personaje.

Ixión era hijo de Flegias, un rey de la tribu lápita, que decidió tomar como esposa a Día, la hija del rey
Deyoneo. Para obtener la mano de la joven, Ixión prometió a Deyoneo ricos regalos, y le invitó a un
banquete. Pero el malvado Ixión, que no quería entregar la dote de la novia, preparó en cambio una
trampa con un gran fuego dentro. Así logró que el confiado Deyoneo cayera en ella y se quemara vivo,
lo que provocó un gran escándalo entre los dioses.

Pero Zeus, que también era capaz de hacer cualquier cosa con tal de conquistar a una mujer, sintió que
debía perdonar la falta de Ixión, y no sólo eso, también le invitó a comer a su mesa.

Ixión, que además de avaro y cruel, era desagradecido, se fijó en la bella esposa de Zeus, Hera, quien
era famosa por soportar las continuas infidelidades de su marido. De modo que pensó que ella estaría
dispuesta a vengarse de Zeus, yaciendo con él.

En este punto del relato, no sabemos si Zeus se dio cuenta de todo, o bien fue la propia Hera quien
avisó a su marido de las intenciones de Ixión. Sea como sea, el dios tomó una nube y le dio la forma de
su esposa. Ixión, que estaba embriagado, tanto por el vino de Zeus como por la lujuria, no notó la
diferencia. Así que se lanzó sobre la nube y la poseyó.

Zeus le sorprendió en el acto y ordenó a su fiel Hermes que tomara preso al desagradecido. El castigo
que cayó sobre Ixión fue el de ser azotado sin piedad hasta que dijera en voz alta: "los benefactores
merecen ser respetados". Después de esto, como la cólera de Zeus no estaba satisfecha, ordenó que
Ixión fuera atado a una rueda de fuego que rodaría de manera incesante por todo el firmamento. De este
modo, el castigo a Ixión sería visible para todos.

Pero el asalto sexual de Ixión tuvo consecuencias importantes en el relato mitológico. A la nube en
forma de mujer, se le dio el nombre de Néfele, puesto que quedó embarazada. A su debido tiempo, dio
a luz a un niño que sería proscrito entre los dioses, Centauro.

Fue este Centauro, quien procreó a toda la raza que lleva su nombre, engendrando a los hombres-
caballo a través de sus relaciones sexuales con yeguas salvajes de la región de Magnesia. Al parecer,
este mito se refiere a una antigua creencia, según la cual, las yeguas quedaban preñadas por la acción
del viento más que por la cópula con los machos de su especie.

Aun así, hay autores que derivan toda la raza de los centauros directamente de Néfele e Ixión, dando a
entender que la relación entre ambos provocó en ella un embarazo múltiple que dio nacimiento a todos
los hombres-caballo. También hay que señalar que algunos centauros famosos no proceden de la raza
de Ixión, sino que fueron engendrados por otros padres. El ejemplo más claro es Quirón, quien nació de
la unión entre Cronos, con forma de caballo, y la ninfa del tilo, Fílira.
Conocemos el nombre de algunos centauros destacados, así como su genealogía y hechos. Pero la
mayor parte de ellos son sólo una denominación en alguna de las fuentes de la mitología clásica. De
este modo, al hacer nuestro análisis astrológico de esta familia de cuerpos, nos centraremos en aquellos
que han sido designados con el nombre de algún centauro famoso, ya que del resto no tenemos ninguna
información mitológica que nos permita desentrañar su simbolismo.
Sobre el símbolo del Caballo
El simbolismo del caballo es bastante complejo y existen algunas dudas acerca de cuáles han sido las
representaciones mentales de este animal a lo largo del tiempo. No cabe duda de que el caballo, como
el perro, es un animal que sentimos muy próximo a nosotros, puesto que es una de las especies que nos
acompañan desde hace miles de años.

Aunque los caballos surgieron como especie en América, se extinguieron allí de forma natural hace
unos diez mil años. La domesticación del caballo se produjo hace más de cinco milenios en una zona
que actualmente se corresponde con la República de Kazajstán, aunque desde mucho antes, su carne era
consumida por nuestros antepasados.

El caballo es un antiguo compañero de la especie humana, y por ese motivo, es un animal que se ha
adaptado a nosotros, del mismo modo que nuestros ancestros hicieron un uso extensivo de su fuerza y
su velocidad.

Según la hipótesis de los kurganes, postulada por la arqueóloga Marija Gimbutas, el continente europeo
fue invadido por diversas tribus caucásicas a través de diversas oleadas. Esta invasión, que en algunos
casos sería violenta y otras veces pacífica, se produjo entre el cuarto milenio y el año 500 antes de
Cristo.

Estos invasores, que acabaron con la estructura de la Antigua Europa, según Gimbutas, se desplazaban
con rapidez sobre carros de dos ruedas. Se trataba de guerreros hábiles, que usaban armas más
perfeccionadas que las de los pueblos invadidos, y que acabaron por imponer sus costumbres y su
lengua indoeuropea, de la cual proceden casi todos los idiomas actuales del continente, incluyendo el
nuestro.

Entre estos pueblos, el caballo era un símbolo importante, puesto que era el signo de su supremacía. El
nombre de "cultura de los kurganes" proviene de la denominación moderna de los túmulos donde eran
enterrados sus líderes. Estos túmulos suelen ser estructuras funerarias complejas, con diferentes
habitaciones en las que se guardaban las ofrendas rituales y el ajuar del difunto. Con frecuencia, los
jefes guerreros se enterraban con sus caballos, sacrificados para la ocasión, así como con sus carros y
sus armas.

De este modo, el gran estudioso de la mitología comparada, Mircea Eliade, sostiene que el caballo es
un símbolo ctónico o funerario, que está impreso en nuestra memoria ancestral desde esos tiempos
remotos.

El sacrificio del caballo es algo que se extiende por muchas culturas antiguas. Así, se cuenta que, entre
los antiguos habitantes de Rodas, se sacrificaba anualmente una cuadriga de caballos arrojándolos al
mar. En Esparta también se sacrificaban caballos en la cumbre del Taigeto, desde donde se divisa la
puesta de sol. Para James Frazer, este tipo de rituales se relaciona con la idea de que el dios sol se
mueve por el cielo montado en un carro. De este modo, el sacrificio le provee de nuevas monturas con
las que realizar su viaje por el firmamento.

Algunos autores ven al caballo como un símbolo del renacimiento cíclico, lo cual no es sino una
ampliación de su sentido primordial como animal relacionado con los ritos funerarios. Por ese motivo,
entre los antiguos anglosajones, se le veía como un presagio de muerte y renacimiento.
En líneas generales, el caballo suele ser un símbolo de los instintos, es decir, de la parte no desarrollada
del ser humano. Por supuesto, el caballo necesita ser domado por el hombre y guiado por su mano. De
este modo, se vuelve útil y manejable, y se aleja de sus instintos más primarios.

Para Jung, el caballo es un símbolo muy evidente del inconsciente, del mundo inferior, que también
tiene una relación con las aguas. Así es como se entiende la asociación entre Poseidón-Neptuno y los
caballos. Aunque también Hades-Plutón, el dios del mundo inferior, es conocido por tener un carro
tirado por caballos. No en vano, cabalgó sobre ese carro para raptar a Proserpina.

Jung también entiende que puede haber una asociación entre el caballo y la "madre en nosotros", que es
otra forma de referirse a su conexión con el inconsciente.

Por su velocidad, los caballos se asocian también con el viento o con la espuma del mar (de nuevo,
Neptuno). También se les asemeja a aspectos veloces de la naturaleza, como el fuego o la luz.

Por su conexión con lo instintivo y lo inconsciente, se considera que el caballo tiene poderes
adivinatorios, de manera que suele prevenir a su jinete de cualquier peligro que esté al acecho. Esto no
es extraño, ya que cualquier persona que haya montado a caballo puede atestiguar la inteligencia de
estos animales. Quizá de ahí venga la asociación entre la herradura y la buena suerte, ya que ésta parece
derivar del propio carácter mágico del caballo.

En la antigüedad, se consideraba que el caballo se relacionaba con los dioses de la guerra, puesto que es
un animal que se ha empleado habitualmente en la batalla. Soñar con un caballo o encontrarse con uno,
se consideraba presagio de lucha, o de contratiempos que obligarán a emprender algún tipo de batalla.

En la antigua Roma, cada 15 de octubre se celebraba una carrera de caballos en el Campo de Marte. Del
carro que resultaba victorioso, se seleccionaba al caballo que estaba situado más a la derecha y se le
hería mortalmente en el cuello. El objetivo de este sacrifico consistía en honrar al dios Marte, lo que
refuerza la idea del caballo como instrumento de la guerra.

Pero el sacrificio anual no termina ahí, sino que incluye un interesante colofón. Junto a la cabeza del
caballo se colocaba una ristra de panes que eran objeto de disputa entre los asistentes. Aquel que
obtenía los panes, tenía el privilegio de ornamentar algún lugar importante de su barrio con la cabeza.

La conexión del caballo con el pan parece algo extraña, pero no lo es en absoluto. En ciertas zonas de la
antigua Inglaterra e incluso de Germania, era costumbre asociar al trigo con el caballo. De manera que
a las gavillas se les llamaba "yeguas", y se hacían con ellas ciertas fiestas populares.

El trigo es un antiguo símbolo de la muerte y el renacimiento, puesto que, siendo el alimento más
importante en occidente, su grano debe morir en la oscuridad de la tierra para renacer como una nueva
planta. Así que el caballo, que también tiene relación con el tránsito entre esta vida y la otra, está unido
al trigo y todos los rituales de la agricultura. Ese es el motivo de que el caballo sacrificado a Marte por
los antiguos romanos fuera también un símbolo de abundancia y de prosperidad. Su sangre se empleaba
para bendecir al ganado.

Entre los pueblos celtas, el caballo era un animal totémico muy importante. El culto a Epona, la gran
diosa yegua de los galos, no es sino una forma de culto a la diosa madre. Epona es sinónimo de
fertilidad, de prosperidad y de todos los bienes que trae la maternidad. Pero también se la asocia a las
aguas, a la curación de las enfermedades e incluso a la muerte. Esto se debe a que, también entre los
celtas, el caballo era el intermediario entre este mundo y el otro.

Roma adoptó el culto a Epona, y se sabe que la caballería romana le rendía tributo como protectora de
los caballos, hasta el punto de tener imágenes suyas en los establos. También recibía veneración en los
hogares, como dispensadora de prosperidad. En la antigua Hispania hay varias inscripciones dedicadas
a la diosa, lo que evidencia que su culto estaba muy extendido. En Roma se instituyó un día de fiesta
para ella, el 18 de diciembre.

En Irlanda, Epona se transformará en Edain, mientras que en Gales se convirtió en Rhiannon.

Rhiannon es la esposa de Pwyll (se pronuncia "piul"). Su obligación consistía en conducir a aquellos
que visitaban el palacio de su marido montados sobre su espalda. Pwyll era el dios del mundo inferior,
una especie de Plutón, que tenía en común con la deidad grecorromana, el rasgo de ser muy astuto. Hay
quien dice que posteriormente, Rhiannon se casó con Manawydan, un dios cuyo nombre tiene una
antigua asociación con el mar, aunque él mismo no es un dios marino.

De Rhiannon se decía que cabalgaba sobre una yegua blanca, aunque en ocasiones, ella misma se podía
transformar en este animal. A veces, y esto es especialmente importante para el tema que se tata en este
libro, Rhiannon tomaba una forma mixta, con cuerpo de mujer y cabeza de caballo. Su especialidad era
la magia, los encantamientos y la fertilidad. Gobernaba con su esposo en el mundo inferior, y además
de estar relacionada con el caballo, también se la asociaba con las aves.

Rhiannon tiene también un aspecto seductor, ya que solía atraer a los hombres gracias a su
extraordinaria belleza. En algunos casos, Rhiannon se desvanecía en el viento después de haber
satisfecho su deseo. Pero en otras versiones, conducía a sus amantes a la muerte al mostrarles su
verdadero rostro de yegua. Sea como sea, el relato asocia de nuevo al caballo con el viento y también
con la muerte.

Snorri Sturluson, un compilador de la mitología nórdica que vivió en entre los siglos XII y XIII, nos ha
dejado un relato muy vívido acerca de las remotas tradiciones míticas que aún permanecían vivas en la
Islandia de su tiempo. Gracias a su libro, la "Edda Menor", tenemos noticia de los nombres de los
caballos de los dioses nórdicos.

El más importante de estos animales era el caballo del dios principal, Odín. Sleipnir, el caballo de Odín
era el más rápido de su especie. Se cuenta que puede superar cualquier obstáculo y que atraviesa tanto
la tierra como el mar. Se le asocia con el viento, lo que establece un interesante paralelismo con la
figura de Centauro.

El nacimiento de Sleipnir es una historia interesante, que resumiré a continuación. Se cuenta que los
dioses estaban preocupados por las invasiones de los gigantes de las montañas y de la escarcha. De
manera que pidieron a un maestro de obras que les construyera una muralla lo bastante alta y fuerte
como para contenerlos. El maestro accedió, pero pidió a cambio que se le entregara a la diosa Freya, así
como al sol y a la luna en pago por su trabajo. Por consejo de Loki, el dios de los problemas, se accedió
a su petición, siempre que las obras acabaran antes del inicio del verano.

El maestro trajo consigo a su caballo para que acarreara las piedras necesarias para la obra, la cual
avanzaba diligentemente. Así que los dioses pronto se encontraron con un problema. ¿Estarían
dispuestos a entregar el pago al finalizar el contrato? Pronto encontraron al culpable de todo, Loki, así
que le exigieron que encontrara una solución.

Loki usó a una yegua en celo para distraer al caballo, que pronto se perdió con ella en los bosques.
Enfurecido, el maestro de obras se enfrentó a los dioses, quienes llamaron a Thor, el cual, con su
martillo, le partió el cráneo.

De los amores entre la yegua de Loki y el caballo del maestro de obras, nació un potro de color
plateado y con ocho patas, Sleipnir. Como vemos, en su nacimiento se resalta la parte animal e
instintiva de estos animales.

Resulta interesante que Sturluson nos cuente que el caballo del dios Balder es cremado junto a su dueño
a la muerte de éste. Cuenta el mito que la esposa de Balder, presa del dolor, se arrojó voluntariamente a
la pira funeraria, esperando renacer con su marido tras el acontecimiento que seguirá a estos hechos, la
muerte de todos los dioses. De nuevo, el caballo es un intermediario entre esta vida y la otra.
El caballo en el chamanismo
Las prácticas chamánicas, que se hallan extendidas en muchos pueblos tradicionales de todo el planeta
aún en la actualidad, representan una serie de creencias y rituales que se basan en la conexión directa de
ciertos individuos con el mundo espiritual. Estas personas, reconocidas por sus comunidades como
verdaderos especialistas, son los chamanes.

El término "chamán" procede de ciertas lenguas habladas en Siberia, y sustituye a otras que pueden
entenderse de manera peyorativa, tales como "brujo" o "hechicero". Esta palabra se ha popularizado a
través de la obra de algunos antropólogos, que estudiaron por primera vez este tipo de prácticas
espirituales entre ciertos pueblos siberianos.

El chamán accede al mundo espiritual a través de una serie de prácticas que, estudiosos como Mircea
Eliade, denominan "trance". El trance es un estado de conciencia ampliada, al que se accede a través de
ciertos sonidos, bailes, rituales o mediante la ingesta de algunas plantas u hongos que pueden modificar
el funcionamiento normal del cerebro.

La finalidad última del trance chamánico, del viaje a la otra realidad, suele ser la de ayudar en la
sanación de las personas. También se puede llevar a cabo para obtener poder o conocimiento. A través
del trance, el chamán establece una relación particular con los espíritus o los dioses que habitan en la
realidad paralela, convirtiéndolos en aliados suyos. También puede combatir contra ellos, en el caso de
que se le presenten de manera hostil.

El chamanismo es la forma de espiritualidad más antigua que conocemos. Autores como Jean Clottes
han sugerido que el arte prehistórico se relaciona con la plasmación de trances chamánicos sobre las
paredes de las cuevas. De hecho, la capacidad de la mente humana de entrar en trance a través de
ciertos estímulos, es un hecho conocido desde tiempos muy remotos.

Dentro del complejo de creencias y prácticas chamánicas, el caballo es uno de los animales que tienen
importancia por su capacidad simbólica para transportar al chamán a otras dimensiones. Esto es
especialmente cierto en el chamanismo siberiano, ya que no en vano, el caballo es un animal muy
importante en las culturas del centro de Asia.

Jeremiah Curtin, en su obra póstuma de 1909, "Un viaje por el Sur de Siberia", relata cómo es testigo
del sacrificio de un caballo en un ritual buriato que presenció en el verano de 1900. Por su parte, otro
investigador, M. A. Czaplicka, explica el uso que hacen los chamanes de todo lo relacionado con el
caballo, incluyendo sus crines, que pueden tener un significado mágico.

Entre los yakutes, la capa del chamán, que es de gran importancia dentro de los rituales, se denomina
"el caballo del chamán".

Por otra parte, dentro de los rituales se emplean figuras alusivas al caballo que son similares a los
caballitos de madera infantiles. Estos caballos de madera actúan como representantes del animal real
que, en este caso, llevan al alma de viaje al mundo de los espíritus. Según la tradición, se realizan con
madera de abedul y se fabrican con gran cuidado ya que, sin ellos, el chamán no puede realizar ningún
ritual. Este caballo de madera se sustituye en ocasiones por una suerte de bastón o muleta, que también
se asocia al caballo.

Entre algunos pueblos, se cree en la existencia de dos tipos de chamanes. Los blancos, que tienen el
poder de sanar, y los negros, que pueden traer la enfermedad y la muerte. En este contexto, el caballo
de madera del chamán recuerda inmediatamente a una imagen arquetípica que todos tenemos en nuestra
mente, la de la bruja cabalgando sobre su escoba mágica.

Margaret Murray, en sus imprescindibles obras "El culto de las brujas en Europa Occidental" y "El dios
de los brujos" manifiesta una teoría que ha calado entre muchos estudiosos. Para ella, la brujería no es
otra cosa que la pervivencia de la antigua religión pagana precristiana. Las ideas de Murray, que
también han recibido fuertes críticas, resultaron atractivas para muchas personas, puesto que mostraban
una religiosidad donde la mujer tenía un grado de libertad muy amplio y donde la sexualidad se vivía
de manera opuesta a la represión obligada por la Iglesia.

Es cierto que algunas de las ideas que Murray expone en sus libros son dudosas a la luz del
conocimiento que se tiene en la actualidad, pero la idea de que ciertos ritos ancestrales sobrevivieran a
la imposición del cristianismo, es algo que no se puede negar. Basta con presenciar algunas fiestas
populares europeas para observar cómo, bajo la ortodoxia cristiana, se esconden muchas prácticas
antiguas propiciadoras de la fertilidad y la buena suerte.

Sea como sea, la imagen de la bruja cabalgando sobre su escoba ha quedado grabada tanto en el arte
más serio tanto como en la imaginería popular. Sobre el origen de esta práctica, tanto Murray como el
estudioso español Julio Caro Baroja, aportan una explicación farmacológica, ya que ciertas pócimas
mágicas contienen plantas alucinógenas, como el beleño o la belladona. Estos autores apuntan a que,
impregnando un palo con los jugos de estas plantas y cabalgando sobre ellos, los alcaloides que
contienen eran absorbidos por las mujeres por vía vaginal, lo que provocaba alucinaciones de vuelo.

Pero más allá de estas explicaciones, no podemos dejar de lado que la escoba es una representación más
del caballo. Así que si las prácticas brujeriles son el recuerdo de alguna religión primordial, nos
encontramos una vez más con el uso simbólico del caballo como animal que transporta a la persona al
mundo de los espíritus.

Chamanes y sacrificio
Un aspecto central del culto chamánico, y también de sus derivadas posteriores, es la idea de
"sacrificio". Hoy en día, el concepto del sacrificio no resulta muy agradable a nuestros oídos, ya que
vivimos en un tiempo donde la gratificación del ego se ha convertido en un objetivo prioritario para
casi todas las personas.

Pero realmente el sacrificio forma parte de nuestra experiencia humana y, hasta cierto punto, es algo
necesario. Es verdad que algunos sacrificios pueden ser innecesarios o denigrantes, pero otros no lo
son. Por ejemplo, ciertas partes de nuestra individualidad se sacrifican a la hora de poder convivir en
sociedad, o de formar una pareja, o de aspirar a un futuro laboral. Constantemente tenemos que limar
algunos aspectos de nuestro ser para poder encajar dentro de las estructuras que forman parte de nuestra
realidad.

Dentro del mundo chamánico, la idea de sacrificio es algo muy presente. En muchas tradiciones, el
chamán debe pasar algún tipo de ritual sacrificial antes de poder acceder al conocimiento que está
buscando. Los espíritus reclaman un pago a cambio de sus enseñanzas, y el chamán debe ofrendarles un
poco de sangre, sacrificios animales, tabaco o comida.

Por muy desagradables que puedan parecer estas imágenes a algunas personas, obedecen a un aspecto
muy importante de la vida que no se puede pasar por alto. Para tener algo, tienes que entregar algo a
cambio, y cuando más valioso sea lo que deseas, más alto será el precio. Nada es gratis.

Cuando analicemos la mitología de los centauros, veremos que muchos de ellos deben realizar algún
tipo de sacrificio a cambio de los aprendizajes que reciben. En algunos casos, el precio es la muerte,
como sucede con Folo, Neso, Asbolo y con la pareja de Hilónome y Cílaro. Más duro es el caso de
Quirón que, como veremos, tiene que renunciar a su inmortalidad para alcanzar la paz.
El símbolo del Centauro
Juan Eduardo Cirlot, en su extraordinario "Diccionario de Símbolos", aporta la idea de que el centauro
es lo contrario del caballero, puesto que el elemento inferior (los instintos, el inconsciente), dominan a
la fuerza superior. Como hemos visto a través de la mitología griega, esto es así en el caso de la
mayoría de los centauros, aunque esta observación no es válida para Quirón.

El cristianismo convirtió al centauro en un símbolo de la lucha entre el bien y el mal, simplificando en


exceso su simbolismo. Pero en esencia, el centauro muestra la lucha entre la parte inferior y la superior,
entre lo animal y lo humano.

Mitológica y astrológicamente podemos distinguir dos tipos de centauros. El primer grupo es el de los
centauros "comunes", descendientes de Ixión y Día, que son la mayoría. En estos, la parte instintiva
parece predominar sobre la humana. Entre ellos podemos citar a Neso, así como a la pareja de
Hilónome y Cílaro.

El segundo grupo de centauros sería el de los "sabios". En este caso, nos encontramos con seres de
diversa genealogía, en cuyo nacimiento ha intervenido algún dios que ha adoptado temporalmente la
forma equina. Aquí están los centauros más conocidos y en éstos predomina la parte humana sobre la
animal.

Sea cual sea su grupo, en todas las historias de los centauros existen varios elementos comunes. Uno es
la citada dualidad animal-humana, que ya hemos explicado suficientemente y que se observa, en mayor
o en menor grado, en todas las historias. Otro aspecto común en todos ellos es el tema simbólico de la
"herida".

Casi todos los centauros tienen una historia acerca de su muerte, que viene precedida por algún tipo de
herida. En algunos casos, como en el de Quirón, hay un cierto tono trágico asociado a su dolor. En
otros, como en el caso de Neso, la herida parece merecida, pero no por ello es menos espantosa.
Cariclo, la esposa de Quirón, no muere en el mito, pero también soporta una herida dolorosa
relacionada con sus hijos.

La muerte, que como hemos visto, conecta a estos seres con el simbolismo primordial del caballo, se
tiene que entender aquí como un tránsito en la conciencia. Pasar de un estado a otro, despertar a una
nueva realidad.

Vistos desde una cierta altura de conciencia, los centauros son sanadores por derecho propio. Cada uno
de ellos trae para nosotros importantes lecciones acerca de cómo curar nuestras propias heridas físicas o
emocionales. Cada cual nos puede enseñar la mejor manera de descubrir los por qués y los para qués
del sufrimiento que podamos padecer a lo largo de nuestra vida. Todos ellos simbolizan algún tipo de
sacrificio o de aprendizaje que es necesario para la evolución del ser humano. En este sentido, son
elementos muy interesantes para ser estudiados desde el punto de vista astrológico.
Los centauros en astrología
En astrología conviene distinguir entre los planetas tradicionales, que son conocidos por la humanidad
desde el principio de los tiempos, ya que son fácilmente visibles en el cielo nocturno, de aquellos otros
cuerpos que sólo han podido ser descubiertos con la ayuda del telescopio. De estos últimos, conocemos
su fecha de descubrimiento, las historias que acompañan a su hallazgo y el nombre de aquellos que
fueron capaces de verlos por primera vez a través de la lente de sus aparatos, o reflejados en placas
fotográficas.

Al principio, los nuevos planetas planteaban dudas y no fueron acogidos por los astrólogos de su
tiempo, tal como sucede hoy en día con los nuevos cuerpos que se están descubriendo en nuestro
sistema solar. Quienes aceptan con normalidad a Urano, Neptuno y Plutón en sus cálculos, también
deben comprender que es cuestión de tiempo que otros cuerpos se vayan incorporando al conocimiento
astrológico.

Usar ciertos asteroides, e incluso Quirón, se está volviendo una práctica común en el mundo de la
astrología. Pero para que nuestro arte progrese, tenemos que ser capaces de ir un paso más allá y abrir
la mente a más posibilidades. Esto debe ser así, incluso aunque nos podamos equivocar en algunas de
nuestras apreciaciones iniciales. Creo que este es un riesgo que se debe correr si queremos progresar y,
en todo caso, pienso que los errores de juicio no serán demasiado grandes si ajustamos el nuevo
conocimiento a los conceptos que la astrología ha mantenido como seguros durante sus miles de años
de antigüedad.

Siguiendo la norma de que los nuevos planetas son descubiertos en el momento en el que la conciencia
humana está preparada para aceptar su simbolismo, los centauros han surgido ante nosotros en el
momento preciso para que los podamos aceptar y utilizar.

Quirón, como ya hemos visto, fue descubierto en 1977. Resulta interesante observar que fue a partir de
ese año cuando se describieron los primeros casos de una extraña enfermedad que anulaba el sistema
inmunitario de las personas. Este mal, que en un primer momento se asoció con homosexuales y
toxicómanos, fue lo que posteriormente hemos conocido como el sida.

El síndrome de inmunodeficiencia humana adquirida ha provocado la muerte, de manera directa o


indirecta, de unos 33 millones de personas hasta la fecha. Fue la primera gran plaga de nuestro tiempo.
Al mismo tiempo, esta desgracia provocó en un primer momento la estigmatización de los colectivos
que fueron más afectados al principio de la epidemia. Pero a la larga es posible que su efecto sobre
estas personas haya sido paradójico, ya que frente al ataque de algunos sectores de la sociedad, hubo
muchos individuos que salieron en su defensa.

Destaca aquí el concepto de Quirón como aquel que trae la enfermedad, pero también la curación. En
esto, todos los centauros actúan de un modo similar. Por un lado, todos ellos tienen algún tipo de
herida, alguna historia desgraciada que conoceremos al estudiar su simbolismo. Pero por otro, todos
tienen alguna historia de redención, o al menos, sirven como aviso a navegantes. Asteroides como Neso
o Asbolo nos muestran que no debemos actuar como ellos si no queremos tener su mismo final.

La idea de que la curación trae consigo un concepto más elevado de la salud puede parecer extraña a
algunas personas. Pero hay que tener en cuenta que, cuando exploramos nuestras heridas y buscamos
un bálsamo que nos cure, si además somos capaces de alzar la mirada y observamos lo que nos ocurre
desde otra perspectiva, pronto descubrimos que los males traen regalos insospechados.

Gran parte de los sanadores, de los cuidadores, son personas que han sufrido la enfermedad en carne
propia. Buscando el remedio para sus dolencias, aprendieron lo suficiente como para poder ayudar a
otros. Además, en el proceso, desarrollaron la compasión necesaria para entender que el sufrimiento
debe ser paliado, que una palabra de consuelo en un momento de oscuridad, es muy valiosa.

La década de 1970 es un momento donde comienzan a emerger diversas técnicas complementarias de


salud. Algunas, como la milenaria acupuntura china, empezaron a ser conocidas a nivel mundial. Otras
nacieron de la mente de personajes geniales, que aportaron nuevas técnicas basadas en los conceptos de
holismo e integración. Hastiados de la medicina científica convencional, muchas personas despertaron
del sueño de que todo se podía curar con la química y descubrieron nuevos caminos para la curación.

Como ya sabemos, esos nuevos caminos no eran tan novedosos, sino que en realidad, eran el
redescubrimiento de antiguas formas de sanación que hunden sus raíces en el chamanismo ancestral,
con el que Quirón tiene mucho que ver.

Pero el descubrimiento de Quirón no fue sino el primer paso en el encuentro del ser humano con estos
cuerpos que denominamos centauros. A partir de la década de 1990 y hasta la actualidad, otros
pequeños astros se han añadido a la lista de los centauros, tomando diversos nombres de la mitología
griega. Sería imposible analizar las circunstancias que acompañan a cada descubrimiento, porque, al ser
tantos y tan seguidos en el tiempo, podemos cometer errores de juicio. Además, al ser descubrimientos
tan cercanos, carecemos una perspectiva global sobre la cuestión.

Ahora bien, creo que de manera general sí se puede enmarcar toda esta serie de descubrimientos dentro
de la misma tendencia que se originó en torno a Quirón. A fin de cuentas, él es el primero y el más
importante de todos los de su especie.

Desde un punto de vista simbólico, los centauros representan patrones de cambio, de evolución
personal y colectiva. Todos ellos tienen una mitad menos desarrollada, más primitiva, que se ajusta a la
parte animal e instintiva de su naturaleza. Pero también tienen una mitad más evolucionada, que
manifiesta la humanidad que reside en ellos. Todos ellos nos invitan a morir a algo para renacer de otra
manera.

No es casual que estos cuerpos se hayan descubierto en un momento donde existe un auge de todo lo
que se relaciona con el desarrollo personal, el autodescubrimiento y la búsqueda del bienestar
psicoemocional. Nunca en toda la historia ha habido tantas personas hambrientas de conocimiento,
deseosas de despertar. Nunca ha habido tantos libros a disposición de la sociedad, tantos cursos, tantos
maestros.

Esto, por supuesto, ha propiciado la aparición de muchos estafadores o falsos gurús. También la
proliferación de publicaciones que no aportan nada de valor, o que incluso están concebidas para
engañar al público. Pero al final, todo lo que tiene calidad sobresale por sí mismo, y como dice la frase,
no se puede engañar a todo el mundo todo el tiempo. Poco a poco, se establece una criba entre lo que
aporta claridad y esperanza, y lo que no es más que negocio y manipulación.

Los centauros han venido a nosotros en el momento preciso en que estamos dispuestos a entender que
la astrología no es un arte que nos dice cómo somos, sino que en realidad es una herramienta de
transformación que nos dice cómo podemos llegar a ser. Entre otros planetas, estos cuerpos están aquí,
no para enseñarnos a ser mejores que los demás, sino cómo ser la mejor versión de nosotros mismos.
Cómo usar los centauros
Los centauros conocidos son decenas de cuerpos planetarios que se mueven entre las órbitas de los
grandes planetas del sistema solar, pero como es imposible estudiarlos todos y tampoco resultaría
práctico, debemos reducir nuestra búsqueda a aquellos que sean significativos. El criterio que se ha
seguido en este libro es tomar a esos centauros que cuentan con buenas referencias mitológicas, puesto
que éstas serán la clave para descifrar sus enigmas.

La conciencia humana no está separada de la realidad, sino que forma parte de ella. De este modo, el
nombre que recibe un cuerpo, por más que pueda parecer casual, es muy importante. Aunque los
astrónomos no tengan, por lo general, conocimientos de astrología, no están fuera de la conciencia
global. Los nombres que escogen para las categorías de cuerpos, y para cada cuerpo en concreto, son
los correctos. Esto es algo que se observa una y otra vez, a medida que nuevos cuerpos van siendo
descubiertos y van recibiendo su nombre.

Ahora bien, una vez que hemos delimitado el objeto de nuestro análisis a los pocos centauros que
tienen una historia conocida, una vez que asimilamos su nombre con su mito, extrayendo conclusiones
acerca de su posible significado astrológico, surge la duda esencial: ¿cómo usarlos?

La Carta Natal ya está repleta de planetas, a los que hay que sumar ejes y diversos puntos de mayor o
menor importancia. Así que, ¿cómo podemos encajar la información que nos proporcionan los
centauros sin que el conjunto se convierta en una nube de datos imposible de abarcar?

Como sucede con los asteroides, los centauros deben ser analizados como elementos muy concretos
ligados a un simbolismo muy específico. No tienen la profundidad simbólica de los planetas, y no se les
puede dar la misma importancia que a éstos.

A la hora de estudiar los centauros conviene fijarse, en primer lugar, en aquellos que tengan una
posición destacada en la Carta Natal. Por ejemplo, los que estén próximos a los ejes de la natalidad, que
son el horizonte, el meridiano, el eje nodal e incluso el vértex. Así, cualquier centauro que esté cerca
del ascendente, por citar un ejemplo muy claro, tiene gran importancia.

También conviene observar a aquellos que tienen cercanía con alguno de los planetas de la Carta,
especialmente los más destacados. Tanto los aspectos por conjunción como por oposición deben ser
analizados. Por supuesto, usaremos orbes muy estrechos, menores de cinco grados de separación.

El tercer elemento de análisis que puede hacer que un centauro destaque es que, simplemente, nos
interese analizar su simbolismo en nuestra Carta. Por ejemplo, si una persona tiene interés por conocer
algunos detalles sobre sus dotes intuitivas, deberá buscar la posición de Asbolo y analizarla con
cuidado.

Por supuesto, siempre hay que tener en cuenta que, si la interpretación de un centauro contradice el
tono general de una Carta Natal, conviene prestar más atención al todo que a la parte. Es decir, que si
bien esa interpretación puede ser interesante para definir una zona muy concreta de la experiencia de la
persona, siempre tendrá más peso el conjunto de la natalidad.

En astrología, el todo siempre es más importante que las partes constituyentes, puesto que cualquier
horóscopo no es otra cosa que un sistema, y sólo puede ser cabalmente comprendido con una
mentalidad sistémica. Por supuesto, podemos lanzarnos a analizar todos nuestros centauros y dejarnos
impregnar por sus enseñanzas, pero conviene que todo ese conocimiento se integre dentro de la
totalidad de la Carta Natal u horóscopo.

Las interpretaciones que se dan acerca de los centauros no son un dogma de fe, ni se pretende que lo
sean. Estamos ante un conocimiento que está en evolución y que, con el paso de las décadas, será
afinado y perfeccionado. Esto es algo que ya hemos hecho los astrólogos al ir aprendiendo las
particularidades de los planetas transpersonales (Urano, Neptuno y Plutón). No hay, por tanto, reglas
inmutables, sino conocimiento en transformación. Algo que precisamente concuerda con la propia
naturaleza de los centauros.
Los centauros en la Carta Astral
En las páginas siguientes, iniciaremos el análisis de los siete cuerpos seleccionados para este volumen:
Quirón, Folo, Neso, Asbolo, Cariclo, Hilónome y Cílaro.

Para cada uno de los centauros, analizaremos en primer lugar el mito en el que están inscritos, dando
relevancia a todos los detalles que puedan ser de interés para el análisis astrológico. Como se verá, las
historias de los centauros suelen ser simples, por lo que se ha hecho el mayor esfuerzo en escudriñar
todas las fuentes posibles en busca de cualquier rastro de información que sea de utilidad.

A continuación, se analizará el simbolismo de cada cuerpo desde una perspectiva astrológica, poniendo
énfasis en todo aquello que nos ayude a trasladar la historia original a nuestra propia vida. Cada relato
tiene grandes enseñanzas que se verán reflejadas en el análisis que debemos hacer con nuestros propios
centauros natales.

Para cada uno de los centauros se realizará un estudio a través de las posiciones por signo y por casa,
como es común en los textos de astrología. Las interpretaciones que aquí se dan deben ser tomadas
como sugerencias, para que cada cual desarrolle la que mejor se ajuste a su caso. Como es de suponer,
resulta imposible analizar todas las posibilidades, ya que esto es algo que sólo se puede lograr teniendo
delante la Carta Natal de la persona.

Debido a la amplitud de sus órbitas, algunos centauros tienen un movimiento muy lento, que sobrepasa
el término medio de una vida humana. Estos cuerpos, en su paso por los signos, ejercen una influencia
más generacional que personal, como ya se explicará. Así que serán mejor individualizados si se
analizan en su posición por casa. Los cuerpos que reciben este tratamiento son: Folo, Neso, Hilónome y
Cílaro.

El análisis de los aspectos de los centauros a los planetas natales sirve tanto para estudiar cuál es su
influencia en la Carta Natal, como también sus efectos por tránsito. En todo caso, conviene analizar
sólo los aspectos mayores (conjunción, oposición, cuadratura y trígono), y en el orbe más corto que sea
posible. Este orbe, idealmente, debería ser menor a cinco grados de exactitud. En el caso de un tránsito,
será adecuado seguir la regla de un grado de orbe.

Centauros en tránsito
Desde el punto de vista de la astrología (geocéntrico), los centauros presentan órbitas muy elípticas, que
los llevan a pasar mucho tiempo en determinados sectores del cielo y relativamente poco en otros. Esto
tiene su importancia a la hora de analizar el paso de estos cuerpos en tránsito por determinadas zonas de
la Carta. Así, dependiendo de dónde se encuentre el centauro, puede estar durante décadas transitando
una determinada casa astrológica, o en cambio resolver el trámite en pocos años.

A la hora de analizar el paso de estos cuerpos por su posición natal (revolución), es evidente que
aquellos cuyo ciclo sobrepasa los cien años de duración no serán experimentados dentro del ámbito de
una vida humana común. En estos casos, lo que se debe estudiar es la mitad de su ciclo, que
corresponde con el aspecto de oposición al lugar natal. Las cuadraturas, sobre todo la primera, también
pueden ser de interés.

Debido al movimiento tan irregular de estos cuerpos, conviene calcular estos tránsitos de un modo
preciso. Por ejemplo, no se puede esperar que un cuerpo como Neso, con un período orbital medio de
122 años, llegue a la oposición exacta a nuestros 61 años de edad. La realidad es que este tránsito se
puede dar unos años antes o después de ese momento.

En todo caso, el tránsito de un centauro, sea por conexión con un planeta natal, sea porque realiza un
período de revolución sobre sí mismo, es un fenómeno que merece la pena experimentar de un modo
consciente. El más conocido de todos, la revolución de Quirón en torno a los 50 años de edad, supone
un tiempo de cierta crisis, que suele afectar a la salud, pero que también supone, para ciertas personas,
una apertura de conciencia muy importante. Como sucede con todos estos cuerpos, sus tránsitos nos
permiten despertar ciertas zonas dormidas de nuestra psique, dando la oportunidad de cambiar algunos
hábitos o de salir de la zona instintiva para acceder a un nivel superior de conciencia.

Centauros en sinastría
Los centauros pueden tener cierta importancia a la hora de analizar un horóscopo comparado o
sinastría. Esto es debido a que, como hemos visto, una parte de su simbolismo tiene que ver con las
heridas esenciales que todos portamos. Estas heridas psicológicas son muy relevantes a la hora de vivir
nuestras relaciones personales

Una persona que no es consciente de sus heridas intentará buscar remedio a través de la relación con
otro ser humano. Pero tenemos que entender que nadie está en el mundo para resolver nuestros
conflictos. En el mejor de los casos, la función del otro es ayudarnos a estar mejor, del mismo modo
que nosotros le ayudamos a él. Ni siquiera un terapeuta debería ejercer como tal en una relación, ya que
cualquier vínculo sentimental debe partir de la base de una igualdad entre las personas y de un correcto
equilibrio entre lo que se da y lo que se recibe.

El motivo profundo por el que muchas relaciones fallan, no es porque no exista amor entre las
personas, sino porque éstas acuden a la relación con demasiadas heridas no reconocidas y, por tanto, no
sanadas. Estas heridas suponen un lastre para el vínculo.

Una de las grandes enseñanzas de los centauros consiste en entender que cada ser humano debe hacerse
responsable de sí mismo, buscando ayuda profesional cuando sea preciso, pero tomando las riendas de
su propio desarrollo interior. Sólo entonces puede relacionarse con otros sin verter sobre ellos su basura
psicológica, esperando que el otro la recicle y quejándose porque no sabe, no puede o no quiere
hacerlo.

Analizando nuestros centauros natales, descubrimos no sólo dónde están nuestras heridas, sino el mejor
remedio para curarlas. Estudiando los centauros de nuestra pareja, podemos ayudarle a abrir los ojos
acerca de su verdad interior.

Sin duda, aquellas relaciones donde los centauros natales están muy conectados con planetas
importantes de la Carta de la otra persona, son vínculos donde la sanación puede ser realizada de
manera conjunta. Pero en esto, como en todo, se requiere un alto grado de conciencia e implicación por
ambas partes. En caso contrario, lo que ocurrirá es que las heridas de cada cual serán amplificadas a
través de la relación y sólo se obtendrá dolor y frustración.

Resulta imposible, en un volumen como éste, analizar todas las posibles combinaciones que se pueden
dar entre todos los cuerpos planetarios y los centauros, y para ello se puede recurrir al apartado de los
aspectos, mencionado más arriba. Pero la idea esencial es que estos cuerpos, nos pueden ayudar a tener
una conciencia más profunda, no sólo de nuestros conflictos interiores, sino de la forma en que
podemos convertirlos en elementos que nos ayuden a sanar y a elevar la conciencia. Esto es algo que
podemos hacer en soledad, o en compañía de otras personas.
Quirón

Nombres Astronómicos: (2060) Chiron y 95P/Chiron

Categoría: Centauro y cometa

Región: Entre las órbitas de Saturno y Urano

Descubierto por: C. T. Kowal, el 1 de noviembre de 1977, en Monte Palomar (California, Estados


Unidos)

Distancia al Sol (unidades astronómicas): 8,431 - 18,865

Período orbital (años): 50,42

Diámetro (km): 206

Notas sobre el descubrimiento: Quirón fue descubierto gracias a imágenes obtenidas el 18 de octubre
de 1977. Con posterioridad se han encontrado huellas fotográficas de este cuerpo que datan de 1895,
aunque entonces no había sido reconocido. Es el primer centauro y ha creado una categoría para todos
los cuerpos que se mueven entre varias órbitas planetarias. Se ha observado comportamiento cometario
en él, y es posible que también tenga anillos como el cuerpo que lleva el nombre de su esposa, Cariclo.
Es candidato a convertirse en planeta enano.
Glifo: Contiene una "K" estilizada, del nombre griego de "Kirón".
El mito de Quirón
Según se cuenta, Quirón era hijo de Cronos-Saturno y la ninfa Fílira. Ella vivía en una isla de su mismo
nombre, aunque algunos dicen que habitaba en Tracia o en Tesalia. Sea como sea, Cronos se enamoró
de ella, y ambos hicieron el amor. Pero como Rea, la esposa de Cronos, irrumpió en el lecho de los
amantes llena de ira, él escapó rápidamente después de transformarse en caballo.

Fílira quedó embarazada después de este episodio y dio a luz a un niño que era mitad hombre y mitad
caballo. Pero la madre sintió repugnancia a la hora de amamantar al ser que había parido, por lo que
pidió a los dioses que la transformasen en un tilo y le librasen así de ese pesado deber.

Quirón heredó la sabiduría de su padre, así como las capacidades curativas de su madre, ya que es
sabido que el tilo es un árbol cuyas hojas y flores se aprovechan para hacer remedios naturales.
Además, la corteza interior del árbol se usaba como tablilla para escribir y, cortada en tiras, se
empleaba en rituales adivinatorios.

Debido a su origen semidivino, Quirón era el único de los centauros de naturaleza inmortal. Esto será
muy importante en el desarrollo del mito quironiano, como veremos más adelante. Además, es uno de
los centauros que no desciende del malvado Ixión, sino que se afilia al gran dios Cronos, quien gobernó
sobre la tierra durante la Edad de Oro.

Quirón fue uno de los médicos más célebres de la mitología clásica. Su nombre proviene de una raíz
griega que significa "mano", puesto que la imposición de manos era un método curativo reconocido
desde la más remota antigüedad. Además, se sabía que un médico no sólo tenía que usar su
conocimiento para curar al paciente, sino que debía emplear sus manos para administrar ciertos
remedios o sanar las heridas.

Su morada primigenia estaba situada en el monte Pelión, en Tesalia. Se dice de él que era un maestro en
muchas artes, tales como la medicina, la cirugía, la música, la enseñanza moral, o la caza. A diferencia
de la mayoría de los de su especie, Quirón tenía buen carácter y destacó no sólo por sus conocimientos,
sino por haber sido el tutor de algunos de los héroes más importantes de la mitología clásica.

Siendo gran amigo de Apolo, dios asociado a la salud, Quirón fue el maestro de Asclepio o Esculapio,
una divinidad asociada a la medicina.

Otro de sus protegidos fue Aquiles, el hijo de Peleo y Tetis. Peleo y Quirón fueron grandes amigos, y
cuando el primero se enamoró de la ninfa Tetis, el centauro le aconsejó la mejor manera de hacerla
suya. Tetis cambiaba de forma continuamente, pero Peleo la sujetó y no la soltó hasta que ella recuperó
su forma humana.

Se dice que siendo Peleo mortal y Tetis inmortal, ella quemaba las partes mortales de los hijos que
tenían en común, curándolas luego con ambrosía, de manera que obtuvieran la inmortalidad. Esa iba a
ser también la suerte de Aquiles, pero Peleo, enfadado, impidió que el ritual se llevara a cabo de manera
completa.

Así que el cuerpo de Aquiles era inmortal en todas sus partes, excepto una que quedó por cubrir de
ambrosía, su talón. Peleo entregó a Quirón al niño, con el talón quemado, así que el centauro reemplazó
ese talón por el de un gigante recién fallecido que era famoso por su habilidad para correr. Esto selló el
destino de Aquiles, que murió por una herida en esa parte de su cuerpo.
Aquiles fue criado por Quirón, su esposa Cariclo y la madre del centauro, Fílira. En las faldas del
monte Pelión, el héroe aprendió a cazar y a domar a los caballos. Bajo la tutela de su maestro, recibió
también clases de canto y de interpretación con la lira. Quirón educó a Aquiles en el desprecio al
materialismo, en el cultivo de la sinceridad, la moderación y la resistencia, tanto ante el dolor como
ante el asalto de las bajas pasiones. Convirtió así a Aquiles en la personificación del héroe clásico.

La batalla de los lápitas


El centauro estuvo envuelto en las dos grandes batallas donde intervinieron los centauros. La primera
de ellas fue la batalla contra los lápitas, también denominada centauromaquia. La segunda, fue la
batalla de Hércules en la montaña de Foloe. En ambas, el vino provocó la embriaguez de los centauros
que, con su comportamiento salvaje y su enorme fuerza física, provocaron grandes conflictos.

La batalla contra los lápitas tuvo su origen en las bodas de Piritoo e Hipodamía. Él era hijo de Ixión y
de su esposa legítima, Día, aunque según algunos, en realidad era hijo de Zeus. Gobernaba sobre los
magnetes y era buen amigo de Teseo, con quien había competido en el pasado. Hipodamía, por su
parte, era hija de Butes, descendiente del dios del viento, Bóreas. Piritoo era un líder entre su pueblo,
los lápitas, de manera que sus esponsales debían convertirse en una gran fiesta. A esa fiesta, por cierto,
no fueron invitados ni Ares-Marte, ni Eris, puesto que todos recordaban su papel negativo en las bodas
de Peleo y Tetis, que acabaron provocando la Guerra de Troya.

Los lápitas era un pueblo que tenía cierta relación familiar con los centauros, puesto que todos eran
descendientes de Ixión. Ahora bien, los centauros, como sabemos, descendían de Ixión y de la ninfa-
nube, Néfele, a quien aquel había confundido con la diosa Hera. Por su parte, los lápitas, como Piritoo,
eran descendientes de Ixión y de su esposa legítima, Día.

Cuenta el mito que en las bodas de Piritoo e Hipodamía se sirvió vino que no estaba rebajado con agua,
en contra de lo acostumbrado. Los centauros, al oler el vino, rechazaron la leche agria con la que habían
sido convidados y corrieron a beber de aquel líquido rojo de aroma tan agradable. Pero por ser
especialmente sensibles al alcohol, los hombres-caballo pronto entraron en una especie de locura
desenfrenada.

Así, la boda degeneró en una especie de bacanal, en la que cada centauro intentaba seducir a alguna de
las mujeres lápitas, incluyendo a la novia. Dado que ellas no deseaban tener relaciones sexuales con los
hombres-caballo, por razones fáciles de imaginar, y dado que sus esposos, padres y hermanos estaban
allí presentes, la situación se convirtió en una batalla campal.

Los centauros, enloquecidos de lujuria y muy fuertes por naturaleza, se defendieron con bravura. El
propio Piritoo, acompañado por Teseo, rescató a Hipodamía de ser violada por el centauro Euritión, a
quien mutiló como castigo.

Los lápitas fueron más fuertes en esta ocasión, matando a varios hombres-caballo y haciendo huir al
resto. Así expulsaron a los centauros de las faldas del monte Pelión, donde habitaban, pero sufrieron
derrotas posteriores, cuando los centauros ganaron para sí la montaña de Foloe. Uno de los centauros
expulsados en la centauromaquia, fue el propio Quirón, a pesar de la admiración que todos sentían por
él.

Quirón y Folo
La segunda batalla en la que intervino Quirón tuvo que ver con Heracles (Hércules) y se enmarca en
uno de los doce trabajos a los que fue condenado el héroe.

Se cuenta que Heracles enloqueció por culpa de Hera, que quería así vengarse de la infidelidad de Zeus
que había dado origen a su nacimiento. En un ataque de furia provocado por la diosa, Heracles mató a
toda su familia. Pero cuando volvió en sí, al descubrir lo que había hecho, huyó apesadumbrado y se
fue a vivir entre las bestias salvajes.

Su medio hermano Ificles partió en su búsqueda, y le convenció para que acudiera al Oráculo de Delfos
a pedir consejo. La sibila oracular le indicó que debía realizar una serie de trabajos para el hombre que
más odiaba en el mundo, Euristeo. Existen discrepancias en torno al número de trabajos ordenados a
Heracles por Euristeo, pero sea como sea, el héroe acabó realizando doce tareas, que son las siguientes:

1. Matar al León de Nemea y despojarlo de su piel.

2. Matar a la Hidra de Lerna.

3. Capturar viva a la Cierva de Cerinea.

4. Capturar vivo al Jabalí de Erimanto.

5. Limpiar los establos de Augías en un solo día.

6. Matar a las Aves del Estínfalo.

7. Capturar vivo al Toro de la isla de Creta.

8. Robar las yeguas de Diomedes.

9. Robar el cinturón de Hipólita.

10. Robar el ganado de Gerión.

11. Robar las manzanas del jardín de las Hespérides.

12. Capturar al perro Cerbero y sacarlo del Hades.

En primer lugar, Heracles mató con sus propias manos al león de Nemea y usó las garras del animal
para arrancar su dura piel y hacerse con ella un manto en el que las flechas no podían penetrar. Luego
tuvo que enfrentarse a la hidra de Lerna, un monstruo infernal con múltiples cabezas, que se
reproducían al ser cortadas. Gracias a la ayuda de su sobrino Yolao, que iba cauterizando los cortes,
consiguió derrotar al ser. Dado que la sangre de la hidra era venenosa, Heracles mojó en ellas la punta
de sus flechas, algo que será importante más adelante.

Después de capturar a la cierva de Cerinea, que se resistía a ser uncida al carro de Artemisa, Heracles
partió a su cuarto trabajo, capturar al peligroso jabalí de Erimanto.

En el camino hacia esta aventura, Heracles se paró en la cueva de su amigo, el centauro Folo. Como se
discutirá con detalle en el capítulo dedicado a Folo, ambos bebieron vino, cuyo olor atrajo a diversos
centauros que vivían cerca del lugar.

Embriagados por el olor del vino, los centauros atacaron con furia a Heracles, quien tuvo que
defenderse con sus flechas impregnadas en veneno. El héroe luchó con bravura, a pesar de que la
abuela de todos los centauros, la ninfa-nube Néfele, arrojó fuertes lluvias sobre él. Pero una de las
flechas que lanzó, atravesó limpiamente el brazo de uno de los centauros, Élato, y se fue a clavar en la
rodilla de su amigo Quirón.

Compungido, Heracles arrancó la flecha inmediatamente. Quirón se aplicó algunos remedios naturales
sobre la herida, pero comprendió de inmediato que no podría curarla. Con grandes gritos de dolor, el
centauro se retiró a su nueva morada en Malea, donde sufrió terriblemente.

Se cuenta que, a pesar de lo grave de la herida y de la imposibilidad de curarse a sí mismo, Quirón no


podía morir. Así que su dolor era insoportable. De modo que Prometeo se ofreció a tomar la
inmortalidad del centauro, cediéndole su naturaleza mortal. Zeus, apenado, aceptó el arreglo, lo que
permitió a Quirón morir en paz. Otros dicen que el viejo centauro eligió la muerte, no tanto por el dolor
que sufría, sino porque su vida había sido demasiado larga y estaba cansado de ella.
Simbolismo Astrológico de Quirón
Cuenta Robert Graves que tanto los lápitas como los centauros, eran probablemente dos tribus
primitivas de las montañas de Grecia septentrional. Ambas tendrían en común el culto al caballo y
ambas disfrutarían de ciertos ritos orgiásticos cuyo posible significado estaría relacionado con cultos de
fertilidad.

En todo caso, es difícil situar a Quirón en el mismo rango que el resto de los centauros, puesto que,
como hemos visto, ni su origen ni sus actos, se corresponden con otros hombres-caballo. Además, es de
naturaleza semidivina, lo cual añadirá algo de dramatismo a su final.

Pero como todos los centauros, Quirón también participa un poco de la doble naturaleza animal y
humana. Esto es algo que vemos a lo largo de toda su mitología. Por ejemplo, si analizamos el término
"Hipodamía", que es el nombre de la novia en la boda que dio origen a la guerra de los lápitas,
comprobamos que es un término griego que significa "domadora de caballos". Ella es descendiente de
Bóreas, el dios del viento, lo que nos señala de nuevo la conexión que se da entre los caballos y los
vientos.

Se nos dice que Quirón es un sabio, versado sobre todo en el arte de la medicina. Pero también posee
conocimientos filosóficos y sobre otros temas, como la caza. Se puede decir de él que sabe tanto acerca
de los temas más elevados como de los asuntos más básicos para la supervivencia. Se convierte así en
un maestro en el más elevado sentido de la palabra, ya que no es alguien que acumula conocimientos
sobre un solo asunto, sino que puede establecer relaciones entre diversas ramas del saber. Esto hace que
sus enseñanzas sean muy profundas.

Junto a su esposa Cariclo, Quirón es el tutor de algunos personajes importantes. Así que, además de ser
un maestro en el mejor sentido de la palabra, es un mentor. Es decir, alguien que es capaz de cuidar de
otro ser de menor edad, que puede proporcionarle no sólo conocimientos, sino recomendaciones
basadas en su experiencia de vida. En líneas generales, un mentor es un consejero que tiene una cierta
implicación personal con aquel a quien aconseja, puesto que le desea el mayor bien. Así, la zona donde
tenemos a Quirón es un espacio donde podemos tanto enseñar como aprender, pero no de un modo
intelectual, sino exponiendo toda nuestra experiencia.

Ahora bien, algo que se comprueba una y otra vez, es que la forma más común de aprendizaje del ser
humano se produce a través del sufrimiento. Pocas son las personas que desean mejorar, pocas las que
están dispuestas a dar un paso adelante en sus vidas, si no es por la presencia acuciante del sufrimiento.

El ser humano es acomodaticio, prefiere lo malo conocido a lo bueno por conocer. Incluso, aunque esté
ahogándose en sus problemas, siempre buscará la manera de hacer pie en algún lugar para estirar un
poco más el cuello y obtener otra bocanada de aire. Cualquier cosa antes que buscar soluciones.

Esto es algo que desconcierta a aquellos que nunca han trabajado como terapeutas o consejeros (un
trabajo que los astrólogos hacemos de manera inevitable). Estas personas se preguntan ¿cómo se puede
preferir el dolor a la sanación? Generalmente, porque el dolor es algo a lo que nos podemos
acostumbrar, al menos hasta cierto punto. En cambio, la sanación requiere un esfuerzo, requiere valor y
nadie nos da garantías de éxito. Es más fácil vivir en la mediocridad que atreverse a ser grandes.

Solo cuando el nivel de dolor es insoportable, llega el momento en que las personas acuden a terapia, o
visitan al astrólogo. Solo en el momento en que cualquier solución dolorosa es mejor que el sufrimiento
que se padece.

Aquí es donde Quirón nos muestra otra de sus enseñanzas. El dolor impulsa a buscar la curación, y
como decía Joseph Campbell: "allí donde tropiezas y caes, allí está tu tesoro". La herida de Quirón
seguramente le obligó a afinar sus conocimientos como médico. No podemos dudar de que intentó todo
con tal de sanarse, y sin embargo no lo consiguió.

Como ya se ha dicho en un capítulo anterior, los sanadores se hacen sanadores porque están heridos,
porque son conscientes de sus heridas. Por ese motivo, Quirón es el patrón de todos los sanadores,
consejeros, mentores y guías. Porque sólo desde la experiencia del dolor, del fracaso, de la enfermedad,
podemos comprender los males que aquejan a nuestros semejantes. Sólo desde la compasión se puede
realmente empezar a curar.

Quirón nos muestra una zona de nuestra experiencia donde tenemos aquella herida que no se puede
curar, pero que nos impulsa a buscar la curación en todos los lugares posibles. Es aquello que obliga a
las personas a acudir a terapias, a leer sobre la salud, a consultar al astrólogo. Y aunque resulta tentador
ver a Quirón como un elemento problemático, como algo que sería mejor que no existiera, realmente él
es quien nos empuja a salir de la comodidad. Es Quirón quien nos dice que ya basta de seguir con el
agua el cuello, que ya es tiempo de nadar en busca de una orilla segura. O de alzar la mano y pedir
auxilio.

Pero al mismo tiempo, la tragedia de Quirón es que de ninguna manera se puede curar del todo, y aquí
es donde tenemos que aprender a ser humildes. La condición humana es de una complejidad tal, que
muchos problemas no tienen una solución rápida o fácil. Algunos conflictos, ni siquiera tienen
solución.

Tomemos por ejemplo el duelo ante la muerte de un ser querido. Podemos bucear en él durante años sin
encontrar más que dolor y confusión. Podemos también afrontarlo, sea en soledad o con ayuda
profesional. Si lo afrontamos, seguramente llegaremos a un instante de paz donde aceptaremos la
pérdida como parte esencial de la experiencia humana. Pero eso no impide que, de vez en cuando, el
recuerdo de la persona que hemos perdido vuelva a nuestra memoria y aún nos provoque dolor. Eso es
algo que nunca se puede remediar del todo. Como veremos, todos los centauros tienen algún tipo de
herida y, por ese motivo, a pesar de ser medio animales, son muy humanos. Porque todos portamos
heridas. Algunas se cicatrizan y otras no. Pero todas ellas nos empujan a crecer, a buscar la sanación.
Por eso son necesarias.

Astrológicamente, Quirón es un cuerpo que, como todos los centauros, se mueve a caballo entre las
órbitas de dos o más planetas del Sistema Solar. En su caso, se trata de los espacios de Saturno y
Urano, por lo que tiene características de ambos cuerpos. O por decirlo de otro modo, es el mediador
entre el simbolismo de ambos.

Sabemos que Saturno es el señor de los límites, de las estructuras y del tiempo, que es uno de los
mayores límites que tenemos que afrontar como humanos. En cambio, Urano es quien rompe los
límites, quien pone boca abajo el tablero, quien promueve los cambios más radicales. Así que Quirón
nos enseña que en la vida tenemos que aceptar ambas partes y darles un espacio en nuestra experiencia.
Por ejemplo, aceptar que ciertas heridas quizás no tengan solución, y al mismo tiempo, rebelarnos
contra ese pensamiento y buscar el remedio en cualquier lugar en que se pueda encontrar.

En la Carta Astral, Quirón nos muestra aquellos aspectos de nuestro ser que pueden recibir importantes
heridas a lo largo de nuestra vida. También señala la manera en que, elevando nuestra conciencia,
podemos salir de la experiencia del sufrimiento para alcanzar cierta curación. Es un maestro que nos
enseña a ser maestros, o a aceptar las enseñanzas cuando sea necesario. Mostrando nuestras heridas
esenciales, él crea un camino hacia el desarrollo espiritual del ser humano. Un desarrollo que no se basa
en ilusiones, o en fantasías vanas de redención, sino en el trabajo consciente de aquel que busca
elevarse más allá de sus limitaciones. Es un símbolo de madurez y de esperanza, pero de una esperanza
realista, que conoce que todo debe ser intentando, aunque no siempre se obtenga una victoria completa.
Quirón en la Carta Natal
La órbita de Quirón tarda poco más de cincuenta años en dar una vuelta completa a todo el zodiaco, de
manera que el centauro pasa, en promedio, poco más de cuatro años en cada signo. Aun así, y como
sucede con todos los cuerpos de los que se habla en este libro, Quirón tiene una órbita muy elíptica, lo
que hace que, desde la perspectiva de la Tierra, esté más tiempo en unos signos que en otros.
Analizaremos a continuación cómo se expresa Quirón a través de los signos y las casas del tema natal.

Quirón en los Signos


Quirón en Aries

En el signo de Aries, Quirón invita a analizar todos los aspectos que se refieren al sentimiento de ser
una persona individualizada y única. Aquí, las heridas primordiales pueden estar conectadas con el
hecho de que, en algún momento del desarrollo, hubo un rechazo a la forma de ser del individuo.
Quizás la familia o quizás el entorno, le hizo saber que no se le aceptaba plenamente tal como era.
Como la necesidad de aceptación es algo que todos tenemos impreso en nuestro ADN emocional, el
hecho de sentirnos rechazados puede crear una fuerte reacción interna. Por un lado, estarán aquellos
que reaccionen con sentimientos de baja autoestima, por otro, los que cultiven un narcicismo nada sano.

La vida de estas personas es un camino de descubrimiento del propio valor, de apreciación de todo
aquello que nos hace únicos, importantes y amados en nuestra singularidad. Si este proceso no se
realiza con éxito, pueden surgir algunos síntomas, como dolores de cabeza o heridas en esa parte del
cuerpo. También se producirán desencuentros a causa de los problemas ya citados de autoestima o
narcicismo. Sea como sea, estas personas se tienen que atrever a dar pasos en solitario, a crear su propio
camino. Tienen que cultivar el amor propio, pero dentro del respeto y la consideración hacia los demás.
Conociéndose a sí mismos, aprenden a sanar su herida fundamental.

Quirón en Tauro

En el signo de Tauro, Quirón manifiesta una herida esencial que se relaciona con las carencias
materiales. Nos encontramos aquí con personas que quizás tuvieron la sensación de no tener suficiente
de algo, de que les faltó un elemento que fue esencial en su formación. Aunque también podría tratarse
de una carencia de tipo emocional. En este caso, parece que los componentes físicos de la existencia:
comida, ropa, cobijo, seguridad, tienen un mayor peso en la conciencia. Por este motivo, existen en
estos seres una inseguridad esencial que se expresará a lo largo de su vida.

La búsqueda de la estabilidad, de la seguridad, será un tema central para estas personas. Algunos la
intentarán encontrar a través del dinero o de las posesiones materiales. También a través de la
posesividad emocional, o del consumo compulsivo de comida o de placeres sensoriales. Si se observa
detrás de todos estos conflictos, lo que emerge es una necesidad de cubrir necesidades que quedaron
desatendidas en el pasado. Pero un vacío tal en la conciencia no se puede llenar con lo mismo que
causó la carencia inicial. Ninguna cantidad de amor, de comida o de dinero puede completar ese hueco
en el alma. Para estas personas, la sanación pasa por ir un paso más allá de lo material. Teniendo
cubierto lo esencial, ellos deben buscar otro tipo de recompensas vitales, otro tipo de aspiraciones más
elevadas. Convertir la materia en algo bello, a través del arte, puede ser también una meta plausible.
Quirón en Géminis

Las personas que tienen a Quirón en Géminis pueden llegar a sentir que su capacidad de comunicarse o
su comprensión de la realidad inmediata está herida de algún modo. En ocasiones, nos encontramos
ante seres a los que, en algún momento importante de su desarrollo, se les impidió hablar, manifestar
sus ideas o sus emociones. Si esto ocurre en una edad temprana, puede ocurrir que la persona aprenda a
dudar de sí misma, creyendo que sus conclusiones no son tan buenas como las de los demás. También
puede provocar cierta dificultad a la hora de entender los mensajes que reciben de los otros.

En el plano físico, estas cuestiones se manifiestan a través de problemas con la voz, en la garganta o en
el aparato respiratorio en general. Así que cuando estas personas aprenden a confiar en sus propias
percepciones, cuando deciden abrir la boca y empezar a revelar su verdad, comienzan a crear una nueva
forma de vida que ayuda a sanar viejas heridas. Se trata de seres originales, que tienen algún tipo de
maestría y que, superadas las cicatrices iniciales, tienen cualidades para enseñar o para comunicarse
con muchos. En algunos casos, existe aquí un deseo profundo de encontrar almas afines, como gemelos
psicológicos con lo que expresarse abiertamente. Si encuentran a esa persona especial, se sentirán
plenos.

Quirón en Cáncer

La conexión con la familia natal es un tema central cuando nos encontramos con Quirón en Cáncer.
Aquí, el clan es un territorio complejo que nos sitúa frente a ciertas heridas, bien sea porque estas
lesiones han nacido en su seno, bien porque la forma de actuar de la familia incide en estos problemas.
Algunas personas que tienen a Quirón en Cáncer encuentran que no pertenecen del todo a su núcleo
familiar y viven en una especie de extrañamiento de todo lo que les rodea. Quizás se sientan sin raíces,
o quizás el sentimiento de pertenencia sea tan intenso, que pueda convertirse en un lastre que les impide
avanzar.

Cáncer se relaciona con el sentimiento de pertenecer a algo, de estar cobijados bajo un techo que no es
físico, sino emocional. Por eso, si hay una herida esencial en la manera en que estas personas perciben
las relaciones con los de su clan, existirá un sentimiento de falta de seguridad, que puede llevar a vivir
relaciones sentimentales abusivas, o a sentir una soledad que es particularmente dolorosa. Reconciliarse
con la historia familiar, realizar algún tipo de terapia transgeneracional, puede ser de utilidad en
muchos casos. A partir de un sentimiento de pertenencia, es como podemos desarrollar nuestra
individualidad y enfrentarnos a las dificultades de la vida. Aprender a cuidar de nosotros mismos es
más importante que cuidar de otras personas. Es muy recomendable que los individuos que tengan a
Quirón en esta posición estudien con mucho detalle todo lo referente a la situación de Folo en su Carta
Natal.

Quirón en Leo

En el signo de Leo, Quirón se manifiesta a través de todo aquello que nos aproxima a la necesidad de
aceptación por parte de los otros. Aquí, lo que puede estar herida es la capacidad de mostrarnos como
seres auténticos, brillantes y valiosos. De hecho, es en el sentimiento de valía personal donde
percibimos los mayores problemas, ya que en este caso, da la sensación de que el entorno no nos ha
dado suficientes muestras de validación. Lo que provoca esta carencia puede ser, por un lado, una gran
necesidad de reconocimiento, que hace que estas personas necesiten destacar, ser reconocidos y
aplaudidos. Por otro, puede causar una falta de autoestima.

Ambos extremos suelen estar unidos y por ese motivo, sea cual sea el que se manifieste con más
claridad, será un indicio de que el otro está también presente, aunque oculto a la conciencia. Aquí es
apropiado manifestar las capacidades creativas del ser, incluso si esto se realiza de un modo algo
teatral. Jugar con los niños, dedicar tiempo a las actividades más placenteras, dejar que el propio ser se
manifieste sin tapujos, cultivar la generosidad, son vías para sanar la herida quironiana. Desarrollando
los talentos naturales, es como se expresa la grandeza que habita en cada uno de nosotros.

Quirón en Virgo

Cuando Quirón está situado en el signo terráqueo de Virgo, lo que está herido es precisamente todo
aquello que se relaciona, en primer lugar, con la salud física o mental. Se trata de personas que pueden
obsesionarse con la enfermedad, quizá porque estuvieron expuestos a ella desde una edad muy
temprana. También pueden tener un concepto equivocado de sus propias fuerzas que los haya llevado a
descuidar su cuerpo o sus emociones desde el principio. El mandato para no hacer caso al dolor, para
ser fuertes y no quejarnos, es una de las mayores cargas que se puede padecer, puesto que somos seres
vulnerables y tenemos derecho a quejarnos cuando estamos sufriendo.

Quizás el trabajo sea, para estas personas, una vía de escape para no tener que enfrentar sus
sentimientos más vulnerables. O quizás la propia capacidad para trabajar de un modo ordenado y
rutinario, esté dañada. Porque aquí hay una ética de la responsabilidad muy fuerte, que puede llegar a
ser asfixiante con demasiada facilidad. Esto lleva a que las personas no pidan ayuda cuando la
necesiten, o que caigan en patrones de victimismo. Aprender a recuperar las fuerzas, dejarse ayudar,
entender que la laboriosidad es buena, siempre que no sea una coraza emocional que ponemos ante
nosotros mismos, es fundamental para estos seres. Esta es una posición que crea grandes sanadores,
pero para ayudar a otros, primero deben estar bien dentro de su propia piel.

Quirón en Libra

En el signo de Libra, Quirón nos muestra su abanico de temas a través de las relaciones que
establecemos con las personas más significativas. Esto es especialmente cierto en todo lo que se
relaciona con la vida de pareja o con las asociaciones comerciales o laborales más estrechas. Aquí, lo
que está herida es la capacidad de compartir con otra persona. Quizás una excesiva preocupación por
los demás resulte perjudicial para el individuo, o quizás se le acuse justamente de lo contrario. Esto
puede hacer que las relaciones más estrechas se transformen en enemistad e incluso en abierta
rivalidad.

Precisamente, el terreno de las relaciones es un espacio donde los seres humanos sufrimos heridas de
manera habitual, puesto que estamos ante personas que nos tocan en lo más íntimo y que pueden afectar
con cierta facilidad a las partes más vulnerables del ser. Pero también es un espacio donde la sanación,
de producirse, puede ser más profunda y transformadora. Nos encontramos entonces con aquellos que
son capaces de crecer en medio de un vínculo, apoyándose y dando apoyo a la otra parte. Los conflictos
se convierten así en un acicate para que las cuestiones sin desarrollar salgan a la luz y puedan ser
resueltas. Las personas con esta posición se beneficiarán de trabajar sus puntos oscuros en colaboración
con su pareja.

Quirón en Escorpio

En el signo de Escorpio, Quirón se encuentra en una posición bastante delicada. Precisamente, el signo
de Escorpio es uno de los que más se relacionan con las heridas de difícil curación. Aquí, el centauro
puede expresar un daño muy profundo que toca los cimientos del alma. Este daño puede estar
relacionado tanto con la sexualidad como con el abandono, con el rechazo, con la traición, con la
pérdida o incluso con la muerte. No es un lugar cómodo para Quirón, y aun así se trata de una posición
donde puede expresar contenidos de gran alcance para la evolución de la persona.

Atreverse a mirar la causa del daño, entrar en las profundidades del corazón, allí donde la herida está
aún supurando, visitar la parte oscura del ser, son tareas que no todos los individuos serán capaces de
llevar a cabo. Pero si lo hacen, es algo que les reportará un enorme beneficio. Se trata de personas que
pueden ver con claridad las heridas de los demás, e incluso sanarlas, por lo que esta es una posición de
médicos, terapeutas o psicólogos. También de seres con una gran capacidad para ver lo que los demás
ocultan, con una poderosa intuición. Si aprenden a vivir la existencia con algo más de ligereza, quizás
sean capaces de transmitir grandes dosis de amor a sus semejantes. Dejar atrás el miedo al rechazo o a
sufrir algún tipo de dolor emocional, será una de las claves de su evolución.

Quirón en Sagitario

Según algunos autores, Sagitario podría ser el signo en el que Quirón se encuentra en su domicilio, y
esto tiene cierto sentido, ya que la imagen del sanador se relaciona muy bien con los ideales que
propugna este signo. Aquí se vuelve de vital importancia reconocer los propios valores personales y
elevarlos a una dimensión más elevada. Nos encontramos ante personas que tienen la necesidad de
crecer a partir de un ambiente natal algo ortodoxo, donde la religión, la ciencia o las normas, eran un
tema de gran importancia. Por eso, al tiempo que se busca un nuevo tipo de relación espiritual con la
realidad, el ser necesita encontrarla a través de un camino personal. Lo que se da aquí es una auténtica
sed de conocimiento y de experiencia.

Los viajes son también un tema central en esta posición, así como la relación con todo lo que está lejos,
con lo que es diferente o exótico. Visitar otros países puede ser tanto una experiencia traumática como
sanadora. También, estar en contacto con individuos de origen lejano. Aun así, estas son las personas
que buscan con más ahínco lo que es diferente en todos los órdenes. El interés por las terapias
alternativas, por el autoconocimiento o por filosofías exóticas, puede ser una de las formas en que el ser
evolucione. También crecerán enseñando lo que saben, puesto que estamos ante una posición donde se
forman grandes maestros, capaces de compartir no sólo ideas, sino su propio ejemplo vital.

Quirón en Capricornio

Cuando Quirón se encuentra en el signo de Capricornio, la herida esencial puede muy bien estar
relacionada con el mundo profesional o con la orientación social. Quizás sean personas que entregan
gran parte de su tiempo a lograr el éxito y buscan, a través de él, mostrar a los demás lo valiosos que
son. Esta es una posición donde los padres y los antepasados son importantes, así como la tradición
familiar. En cada familia hay unas normas que señalan qué es lo correcto o lo incorrecto para el clan.
La posición de Quirón en Capricornio implica una fuerte adhesión a este contrato familiar, que puede
ser dañina en ciertos momentos. Un excesivo sentido del deber puede ser tan perjudicial como la falta
total del mismo.

Estas personas buscan ser reconocidas por lo que hacen o por lo que poseen, y no por lo que son.
Cambiar el foco de atención de lo externo a lo interno, de los logros materiales a las metas personales,
puede significar un gran cambio en sus vidas. Dejar caer las máscaras sociales, entrar en el espacio
vulnerable del propio interior, será un gran reto. Cuando estas personas se atreven a hacer el viaje hacia
su propia sanación, descubriendo el verdadero sentido de la autoestima, se convierten en líderes que
pueden guiar a otros. Abandonan así los deseos del ego para saciarse cumpliendo los anhelos del
corazón. Entonces descubren que el deber se convierte en pasión y esa pasión arrastra a las masas.
Quirón en Acuario

En el signo de Acuario, Quirón se enfrenta a heridas que tienen que ver con la forma en que el ser se
manifiesta ante el colectivo. Estamos ante personas que necesitan proyectarse ante la sociedad, pero
que en el proceso encuentran algunos problemas de cierto calado. Puede que sufran algún tipo de acoso
por parte de ciertos grupos, quizás a temprana edad, o que sus ideas no sean comprendidas. Con
facilidad caerán en la controversia o serán víctimas de sus propias iniciativas, que a veces están
demasiado adelantadas a su tiempo o son imposibles de llevar a la práctica.

En muchas ocasiones, entre aquellos que tienen a Quirón en Acuario, nos encontramos con idealistas, o
con seres que tienen una percepción muy particular de la realidad. La crítica social llega a ser intensa,
ya que ellos desean mejorar el entorno y creen tener ideas mejores que las de la media. Son seres a los
que les atrae todo lo que es nuevo, lo que puede ser útil para muchos. Algunos viven en una torre de
marfil intelectual, lejos de la masa. Pero precisamente es a través del contacto con muchos,
contaminándose con ideas diversas, aceptando las críticas y construyendo en cooperación con los
demás, como podrían dar lo mejor de sí mismos al colectivo. Son personas que han venido a esta vida
para cambiar las bases de la sociedad, pero que a veces olvidan que el primer paso para cambiar el
mundo consiste en mejorar uno mismo.

Quirón en Piscis

En la posición de Piscis, Quirón se sitúa en una de las zonas más sensibles del zodiaco. Aquí, el
centauro expone a la persona al sufrimiento desde el mismo inicio de la vida. El dolor propio, para
ellos, no es tan fuerte como la percepción que tienen del sufrimiento ajeno. Por eso, estas personas
destacan por su enorme compasión, que a veces es tan poderosa que hiere. No siempre serán
reconocidos en sus buenos deseos y pueden con facilidad excederse en el cuidado o en la atención de
los más necesitados. De algún modo, ellos sienten que, ayudando a los demás, están resolviendo algo
dentro de sí mismos, y no les falta razón.

Como todas las posiciones quironianas, ésta tiene un peligro y también señala una promesa de
salvación. El peligro consiste en perder la propia individualidad en los otros, hundiéndose demasiado
profundamente en el dolor del mundo, o bien dejar que la fantasía haga perder pie a la razón. No es una
posición que esté exenta de ciertos riesgos para la salud a través de las drogas, de la depresión o de la
búsqueda de una espiritualidad vacía. Pero también contiene la posibilidad de desarrollar al máximo la
compasión, la capacidad de sanar y de sanarse. Ayudando a los demás, pero sin perder de vista la
necesidad de cuidar de sí mismo, este individuo puede sobresalir de la masa y encontrar un sentido a su
existencia a través del amor incondicional.

Quirón en las Casas


Quirón en la Casa 1

La posición de Quirón en la Casa primera del cielo es una de las más poderosas para este centauro. Si
además se encuentra en las cercanías del Ascendente, nos encontramos ante personas de fuerte
personalidad quironiana. Aquí existe una conciencia clara de que la vida es un viaje de
autodescubrimiento. Se trata de seres con una fuerte inclinación a buscar soluciones personales para los
problemas que se les presentan. Si tienen heridas, éstas se relacionan con la manera en que aprendieron
a manifestar su individualidad ante el mundo. Cuando esta expresión personal ha sido reprimida en los
primeros años, en ambientes de gran contención, pueden arrastrar ciertos problemas de autoestima que
deberán sanar en su vida adulta.

Algunas personas que portan esta posición de Quirón desean apartarse del mundo para poder vivir
según sus propias reglas, pero realmente es dentro del mundo donde tienen su gran prueba. A la hora de
manifestar sus capacidades deben aceptar que no todos les van a aceptar tal como son y tienen que
aprender a luchar contra ciertos obstáculos. Uno de los riesgos que corren es que sus poderosas
energías les consuman. Pero si perseveran en un trabajo de conocimiento interior, sin duda emergerán
como maestros o guías de otras personas. Pueden ser grandes sanadores, sea física, emocional o
espiritualmente, y necesitan tener clara cuál es su vocación y su camino.

Quirón en la Casa 2

En la Casa segunda del cielo, Quirón señala que existe una herida muy profunda relacionada con la
autoestima. El sentido de lo que uno vale se conforma a lo largo de la vida, pero viene muy
determinado por las experiencias más tempranas. Así que, si la persona no se sintió suficientemente
apoyada en su individualidad, quizás necesite reforzar sus valores en la vida adulta.

Aquí, el sentimiento de lo que es valioso para uno mismo, se vuelve muy importante. Se pueden tener
emociones muy fuertes acerca de las propias opiniones, que a veces lleven a enfrentamientos con el
entorno. Pero reafirmarse en los propios criterios es algo que para ellos tiene un significado muy
profundo, puesto que les pone en contacto con su propia sensación de valía personal. En algunos casos,
los valores se pueden dirigir hacia cuestiones materiales, tales como el dinero o las posesiones, mientras
que en otros, lo que se defiende con tanto vigor, son los valores morales. El aprendizaje consiste en
hacer que esos valores estén en armonía con el resto de la vida.

Quirón en la Casa 3

Si Quirón está ubicado en la Casa 3 de la Carta Natal, nos encontramos con personas que tienen la
capacidad de manifestar sus opiniones de un modo muy vehemente. A veces, estas opiniones son
bastante radicales, o chocan con el ambiente, por lo que se pueden dar algunos conflictos que
provoquen ciertas heridas en el ser. Las críticas que se emiten o se reciben son bastante duras en
ocasiones, y si se dieron en la edad infantil, tendrán un peso en la forma en que se desarrolla la
capacidad expresiva del individuo en la vida adulta. También pueden padecer por problemas con los
hermanos, o por la acción de estos.

No es infrecuente que estas personas tengan ciertos problemas para expresarse en algunos momentos de
la vida. Pueden sufrir fallos en la voz, o dificultades para hacer llegar sus escritos o sus mensajes.
También hay algunos conflictos que pueden surgir en el transcurso de los viajes que se realizan de
forma cotidiana. Como si algo se interpusiera entre el individuo y la expresión de lo que es, o en la
realización de su trabajo. Sanar sus habilidades comunicativas, aprender a decir lo que tienen que decir,
dejar a un lado las críticas o buscar la manera en que éstas no les afecten, son tareas que deben realizar
en esta vida. Cuando resuelven sus problemas, tenemos a excelentes oradores y comunicadores, que
pueden llegar a muchas personas con una voz propia.

Quirón en la Casa 4

En la Casa 4 del cielo, Quirón expresa sus contenidos en todo lo que se relaciona con la familia y los
orígenes. Si está ubicado cerca del Bajo Cielo, la posición de este centauro es bastante destacada y debe
ser tenida muy en cuenta. Sea como sea, nos encontramos aquí con las personas que arrastran algún
tipo de herida relacionada con sus raíces. Quizás la situación en la familia de origen no era la más
adecuada, o tuvieron que lidiar con progenitores desatentos o problemáticos. De todo esto, se deriva
una cierta desconfianza hacia los padres, o el temor a formar una familia propia.

Estas personas tienden a ser muy amables con los demás, y pueden expresar cariño hacia diversos seres.
En cierto modo, están buscando crear una familia que sustituya a aquella en la que sufrieron sus
primeras heridas. Si saben sanar sus conflictos pasados, estos seres pueden crear un entorno muy
favorable para el disfrute de todos. Se trata de personas verdaderamente amorosas y sensibles, que se
han hipersensibilizado por causa de problemas antiguos. Si es preciso, deberían acudir a algún tipo de
terapia psicológica o genealógica.

Quirón en la Casa 5

La presencia de Quirón en la Casa 5 nos advierte acerca de algunas personas de nuestro entorno, ya que
aquí nos encontramos con un problema con los límites. Quizás alguien intentó ir demasiado lejos
demasiado pronto, o quizás el propio individuo carecía de una percepción correcta acerca de los límites
de los demás. En cualquier caso, la sensación es que se necesita restablecer la confianza con los demás,
estableciendo pautas claras y honestas en la relación con ellos.

Estamos ante seres que se protegen mucho, tanto, que pueden tener problemas para relacionarse
normalmente con los demás. Ciertos conflictos con los hijos, o a través de ellos, son también de
esperar. Por ese motivo, la relación con la propia descendencia es algo que se debe cuidar con mucho
detalle. Son personas con gran creatividad, que en el fondo de su corazón tienen unos sentimientos muy
nobles, pero que temen verse expuestos al abuso. Si usan correctamente su creatividad, darán lugar a
obras muy atractivas, o bien pueden encontrar soluciones a problemas que otros no aciertan a resolver.
De este modo, la creatividad es una buena vía de sanación para ellos.

Quirón en la Casa 6

Quirón se encuentra en una posición delicada cuando está en esta posición del cielo. Porque en este
lugar, las heridas que se pueden sufrir se relacionan con el propio cuerpo. No hay nada metafórico en
esta situación quironiana. Se trata de individuos que quizás se han enfrentado a enfermedades o
accidentes desde una edad temprana, o que simplemente tienen miedo de enfermar o de morir. El
problema con esta posición consiste en obsesionarse con la salud y por ese motivo, estas personas
sufren demasiado cuando algo no va bien, pudiendo llegar en algunos casos a la hipocondría.

Pero como toda posición de Quirón, junto a los peligros, están las bendiciones. Así que, si bien aquí se
puede sufrir mucho por la salud propia o por la de los seres queridos, también es cierto que en estas
personas existe una fuerte inclinación a sanar a otros. Nos encontramos entonces con buenos sanadores
físicos, que saben dar a los demás el remedio que necesitan, o al menos la palabra de aliento necesaria.
Si saben emplear esas cualidades, sin duda se convierten en seres que pueden hacer un gran bien a la
sociedad. Todo depende de hacia dónde se dirija la atención, hacia el problema o hacia la solución.

Quirón en la Casa 7

La Casa 7 es un lugar poderoso para tener a Quirón, sobre todo si se encuentra en las proximidades del
Descendente. En esta posición, las relaciones con otras personas adquieren una gran importancia,
especialmente las que tienen un matiz romántico. Existe la posibilidad de recibir algunas heridas en el
transcurso de una relación, o de que el propio hecho de tener una pareja se perciba como algo difícil o
lleno de obstáculos. Por ese motivo, estas personas pueden oscilar entre le deseo de proximidad a otros
y la necesidad de situarse lejos de los demás, buscando la soledad.
Son seres que conectan tan profundamente con las personas importantes de sus vidas, que a veces
resultan heridos con demasiada facilidad. No se pueden descartar que sean víctimas de un divorcio
disputado, o que acaben en los tribunales con un socio comercial. En realidad, cualquier relación
profunda es un reto para ellos, y es precisamente ahí donde deberían empezar a trabajar para solucionar
los conflictos o bien para apartarse rápidamente de las personas que no les hacen bien. Sea como sea,
encontrar un equilibrio con la pareja es un reto esencial para ellos. En caso contrario, desperdiciarán
una gran cantidad de tiempo y de energía.

Quirón en la Casa 8

Ubicado en la Casa 8 del cielo, Quirón manifiesta la importancia que temas como la muerte, la
trascendencia o los misterios de la existencia, tienen para el desarrollo espiritual del ser. Aquí hay una
gran energía que se vuelca en el conocimiento de todo aquello que es oscuro, que es despreciado, o que
requiere una investigación profunda. Se trata de personas con cierta atracción por los temas psíquicos,
por la astrología, o por la psicología profunda.

Su interés por estos temas no es casual ni superficial. Ellos buscan respuestas y sanación para las
heridas que portan en su interior. En ocasiones, se da un efecto paradójico de atracción y repulsión ante
los temas más complejos de la existencia. Pero la fascinación siempre está presente en ellos. Si se abren
a su mundo interior, estas personas pueden ser buenos canalizadores, o quizás encuentren que poseen
habilidad para tratar los problemas psíquicos de los demás. No en vano, esta es una posición de
sanadores, de psicólogos o de consejeros. Una temprana exposición a temas como la muerte, la traición,
el dolor o la pérdida, les capacita para trabajar esos temas con otras personas. Si dejan de lado el interés
mórbido o estético por todo lo oscuro y se centran en el conocimiento de su propia Sombra, sin duda,
pueden ayudarse mucho a sí mismos y a los otros.

Quirón en la Casa 9

Cuando Quirón se encuentra en esta posición del cielo, los temas del centauro se desarrollan en todo
aquello que se relaciona con las creencias centrales de la persona. Aquí se pueden desarrollar algunas
opiniones demasiado extremas, o bien se puede ser víctima de las ideas o de las normas de otros,
basadas en algún tipo de código religioso o moral. Se trata de seres que aman los debates o que los
rechazan de plano, pero que en el fondo, siempre quieren manifestar sus opiniones al mundo. Esta
expresión puede chocar con el entorno con cierta frecuencia.

Son personas que encarnan el arquetipo del eterno estudiante, y por ese motivo, siempre estarán en
movimiento, mental y físicamente. Los viajes resultan ser una parte importante de su experiencia vital,
aunque se pueden esperar todo tipo de experiencias en el transcurso de los mismos. A través de ciertas
crisis espirituales desarrollarán una visión más clara y más profunda de sus creencias, puesto que,
aunque se trata de personas de fe, esa fe necesita ser contrastada con la realidad de la existencia.
Aprender y enseñar lo que saben, será una buena manera de resolver sus heridas interiores.

Quirón en la Casa 10

La aceptación por parte del colectivo puede ser un tema importante para las personas que tienen a
Quirón en la Casa 10 del cielo. Aquí, y sobre todo si Quirón está cerca del Medio Cielo, el centauro nos
invita a observar la manera en que nos proyectamos sobre el mundo que nos rodea. En algún momento,
quienes tienen esta posición, pueden haber sentido el rechazo de los demás, o bien han encontrado
demasiados obstáculos para el desarrollo de sus ambiciones, para su crecimiento personal y profesional.
Por ese motivo, el deseo de éxito puede ser incluso más fuerte que en el común de las personas, y por
ello, estos individuos pueden esforzarse más que nadie, aunque sientan que nada de lo que obtienen es
totalmente satisfactorio. Esa necesidad de encontrar algo que les llene, puede llevar a comportamientos
negativos, como el deseo de dominar a otros, o al contrario, a una actitud servil y amargada. Pero
cuando se entiende que el éxito es algo que cada cual define según sus criterios, y que hay tesoros
ocultos en lo que despreciamos, es cuando nos damos cuenta de que somos más exitosos de lo que
creemos. Lo que importa no es el estatus que se pueda adquirir, sino cómo nos sentimos en el lugar en
el que estamos en este momento. Así, la vida no se vuelve solitaria y pobre, sino expansiva y rica.

Quirón en la Casa 11

Quirón, ubicado en la Casa 11 del mapa natal, predispone a sufrir ciertas heridas en todo lo relacionado
con el mundo social. Estas personas pueden ser dañadas por aquellos que les rodean, sean familiares,
amigos o compañeros de trabajo o de estudio. Quizás sufrieron en la escuela el acoso de otros, o quizás
tengan que soportar ser heridos o engañados por aquellos que se llaman compañeros. En todo caso,
tienen una dificultad esencial para apartarse de los que les dañan y tendrán que mejorar su autoestima
para diferenciar a las personas que les hacen bien de las que les hacen mal.

Cuando reconocen sus diferencias, su propia originalidad y brillantez, estas personas emergen como
líderes de los grupos en los que están. Comprenden entonces que sólo tienen que ser la mejor versión
de ellos mismos para atraer el cariño de los demás. A pesar de todo, sabrán conectar con las personas, y
con el tiempo, pueden desarrollar una sólida conexión con el colectivo. Si dedican sus energías a
cuestiones de tipo social, a ayudar a los más desfavorecidos o a aportar ideas novedosas a la sociedad,
estarán actuando con lo mejor de esta posición quironiana.

Quirón en la Casa 12

En la Casa 12, Quirón manifiesta una tendencia a ahondar en aspectos como la soledad o el
aislamiento. Aquí las personas tienden a permanecer lejos de los demás, porque es una forma de
encontrar la paz y cierto equilibrio interior. A veces, esta soledad pesa mucho en la conciencia del
individuo, y no siempre es algo que se busque de manera intencionada, sino que acontece como una
condena. Largos períodos lejos de lo que se ama, se pueden alternar con etapas donde hay que cuidar a
personas que requieren ayuda.

Esta es una posición donde se debe aprender a canalizar las fuerzas curativas para que sean útiles, no
sólo para el entorno, sino también, y en primer lugar, para el propio individuo. Las heridas están aquí
muy relacionadas con el hecho de tener que anteponer los intereses de otras personas sobre los propios.
Pero también es verdad que esta posición esconde un gran don, puesto que, si la persona sabe abrir su
corazón, sin dejar de protegerlo, puede desarrollar una forma de amor incondicional hacia todos los
seres. Ciertos dones psíquicos pueden estar presentes en ellos, así como la posibilidad de sanar
psicológicamente a otros.

Aspectos a Quirón
Quirón es un cuerpo muy importante en el análisis de la Carta Astral. Cuando un planeta lanza un
aspecto a Quirón, matiza el simbolismo quironiano, de manera que, para algunas personas, se vuelve
más fácil de identificar. Otras, en cambio, sentirán que ese planeta es un punto ciego en su Carta, sobre
todo si se niegan a reconocer sus propias heridas. Como norma general, hay que tener en cuenta que
todo lo que no queremos ver, es justamente lo que más necesitamos ver. Así, el Sol en aspecto a
Quirón, manifiesta que lo que está herido es nuestro principio masculino esencial, aquella parte de
nuestra esencia que recibimos de nuestro padre. Puede que la figura paterna se perciba como la de
alguien débil o ausente. O bien puede que fuera una persona que nos infligió severas heridas
emocionales. Lo que debe ser observado y sanado aquí es la capacidad de brillar, de ser autónomos y de
acceder a nuestra propia conciencia individual. Reconocer los propios méritos y validarnos en nuestras
relaciones. Cuando la Luna es la que hace aspecto a Quirón, estamos ante las heridas que proceden de
la relación con la madre y el principio femenino. Aquí falla la capacidad de percibir los propios
sentimientos y necesidades, por lo que estas personas muchas veces cuidan de manera abnegada, casi
hasta la extenuación, a sus seres queridos. Son seres que están tan ocupados con los sentimientos
ajenos, que ignoran sus propias emociones. Este tipo de conexiones puede provocar el deseo de no
tener hijos, para no soportar más cargas. También ciertos problemas con la alimentación, que es algo
que nos conecta con nuestra madre.

En contacto con Mercurio, Quirón revela en qué medida nuestra capacidad de comunicación puede
estar herida. A veces, estas personas tienen una forma de expresarse que hace daño a los otros y pueden
ser mordaces casi sin darse cuenta. Aquí es común observar tanto a seres que hablan poco o que no
pueden hablar, como a aquellos que necesitan expresarse por todos los medios posibles. En los casos
menos desarrollados, pueden ser embaucadores. Pero también pueden desarrollarse positivamente y ser
aquellos que dan voz a los que no tienen voz, o quienes transmiten conocimientos profundos. En todo
caso, la expresión verbal será un reto importante en sus vidas, así como la necesidad de ordenar sus
ideas y ser coherentes con lo que pregonan. En cambio, a quienes tienen a Quirón conectado con Venus
les resulta fácil ver la belleza donde otros no la encuentran. Para estos seres, existe un valor espiritual
asociado a la hermosura del mundo. Toman riesgos para encontrar el amor y por eso se abren a
experiencias que en ocasiones les hieren. Siguen valores personales, pero son muy sensibles a todo
aquello que signifique conflicto, por lo que rehúyen los problemas. Son seres que ejercen un gran
impacto en los demás, pero que también son fuertemente tocados por las relaciones que establecen.
Aquellos que tienen a Quirón en relación con Marte, pueden haber sido heridos por la violencia desde
una edad temprana. En algunos casos, reaccionarán también con violencia cuando se sientan acosados,
por lo que deben aprender a manejar su propia ira y dolor. Algunos de estos individuos han sido tan
dañados que son incapaces de defenderse, pero precisamente por esto, son peligrosos cuando se sienten
acorralados. Con frecuencia, les cuesta decir "no" a tiempo.

Al entrar en contacto con los planetas sociales, Quirón nos muestra la manera en que hemos sido
expuestos al ambiente por nuestros progenitores y las heridas que puedan haber surgido por esta causa.
En aspecto a Júpiter, Quirón nos indica que quizás el crecimiento, la expansión, es algo peligroso. En
algunos casos, nos encontramos con aquellos que no saben refrenar sus impulsos, con los que caen en
ciertos comportamientos adictivos o que son víctimas de su propia grandiosidad. Suelen ser justicieros
y sienten, en lo más profundo de su ser, que tienen una "misión" elevada que cumplir, o buscan
denodadamente un significado de orden superior al que adherirse. En contacto con Saturno, lo que se
observa es hasta qué punto está asentada nuestra capacidad de aceptar límites y estructuras. Aquí hay
conflictos con el padre, que pudo ser una figura castradora, o bien, estar ausente. Pueden ser personas
que tengan problemas con las normas, o que vivan su existencia con un grado de rigidez demasiado
elevado. Con frecuencia juzgan a los demás y deben aprender a ser más benevolentes con los otros y
consigo mismos.

Cuando Quirón hace aspecto a Urano, provoca un intenso deseo de libertad en el individuo. Cualquier
atadura resulta demasiado estrecha para estas personas, y eso hace que reaccionen de manera intensa
ante los intentos de limitar su actividad. Hay un gran deseo de novedad, pero en ocasiones, actúan de
manera brusca, iniciando relaciones o cortándolas de un modo que desconcierta a los otros. Si es
Neptuno quien tiene conexión con Quirón, genera un acceso privilegiado al mundo del inconsciente.
Los sueños de estas personas son muy vívidos y sus percepciones se mezclan fácilmente con sus
emociones. En ocasiones, desearán aislarse del mundo, mientras que, en otras, tendrán relación con
aquellos que viven en los márgenes de la sociedad. Su compasión puede ser tan grande que roza lo
doloroso. En contacto con Plutón, tenemos a seres que pueden haber sufrido abusos por parte de
quienes tenían poder sobre ellos. Pero también puede que sea la misma persona quien tienda a actuar de
forma abusiva con otros. En los casos menos desarrollados, veremos este tipo de comportamientos; así
como a individuos con complejo de gurú, de chamán o de sanador, que actúan de un modo deshonesto.
Hay cierto amor al peligro y a las pasiones más oscuras. Entre las personas con mayor desarrollo
interior, hay un interés en desarrollar la energía sexual como herramienta de sanación emocional. Son
seres que saben regenerarse tras cualquier herida y pueden ser buenos guías de otros.

Revolución de Quirón
Quirón tarda poco más de cincuenta años en dar una vuelta completa al círculo zodiacal y volver al
lugar que ocupaba en el momento del nacimiento de la persona (lo que astrológicamente denominados
una "revolución"). Ahora bien, este ciclo no es totalmente preciso, ya que, debido a las singularidades
de su órbita, el centauro pasa más tiempo en unos signos que en otros. En términos prácticos, esto
significa que unas personas vivirán la revolución de Quirón un poco antes de los cincuenta y otras, un
poco después de cumplir esa edad. Por eso es importante consultar unas efemérides planetarias a fin de
reconocer el año exacto en que se da este tránsito.

La revolución quironiana nos pone en contacto con nuestras heridas y con la necesidad de sanar todo
aquello que está sin resolver en nuestro interior. Para aquellos que la viven de un modo inconsciente,
puede significar un reencuentro con viejos patrones, o un recrudecimiento de sus síntomas físicos o
emocionales. De algún modo, la vida vuelve a meter los dedos en la llaga, provocando dolor e
incomprensión.

Pero aquellos que hayan abierto los ojos, aquellos que no tengan miedo de observar sus propias
debilidades, encontrarán que este es un tiempo que, sin ser cómodo, trae grandes recompensas. Por un
lado, permite reconocer cuáles son los temas sin resolver dentro de nosotros; por otro, nos provee de
herramientas para sanar. Algunas personas encontrarán a un maestro en este tiempo, o descubrirán que
ellas mismas son su mejor maestro. Otras, quizás por causa de una enfermedad o una depresión,
descubrirán nuevas terapias y una manera diferente de afrontar problemas que llevaban años sin
resolver.

Quirón no es un planeta fácil de llevar, y para aquellos que lo tienen destacado en su Carta, representa
un arquetipo que tienen que aprender a reconocer y a mirar de frente. Pero cuando aceptamos que la
curación es posible, siempre aparecen los medios y las personas que nos pueden ayudar en el proceso.

Esta "crisis de los 50" es un buen momento para poner a punto nuestra salud física y para revisar
nuestras creencias acerca de la madurez. Si hemos glorificado la juventud, huyendo del lento deterioro
natural del cuerpo, lo pasaremos mal. Por eso, muchos buscarán sanar en brazos de una pareja más
joven, o reviviendo alguna afición o deseo del pasado. Pero si se va a la raíz de lo que nos duele, sin
duda podemos resurgir de este momento con una comprensión más profunda de quiénes somos y cuáles
son los retos que nos quedan por afrontar. En la actualidad, los 50 siguen siendo una edad fructífera, en
la que aún tenemos energía y un poso de sabiduría que podemos usar.

Quirón y los eclipses


Los eclipses de Sol o de Luna, tocan la posición natal de Quirón cada nueve años, aproximadamente.
Es difícil que un eclipse caiga exactamente sobre el grado donde tenemos a Quirón, pero para sentir los
efectos de este acontecimiento celeste, basta con que el fenómeno se dé a unos pocos grados de
distancia. Conviene recordar que los eclipses funcionan siempre a lo largo del eje de los nodos de la
Luna, por lo que un eclipse puede actuar del mismo modo por conjunción o por oposición a la posición
natal de Quirón. Esto es válido para el resto de los centauros y otros cuerpos de la Carta Natal.

Como explico en más detalle en mi libro "Eclipses en Astrología", estos eventos astronómicos actúan
reiniciando la energía planetaria. Son como una parada en seco que detiene la actividad cotidiana y que
nos obliga a reordenar nuestras prioridades. En este sentido, y lejos de la idea nefasta que se ha tenido
de ellos durante siglos, son fenómenos muy positivos, que podemos usar para depurar algunos aspectos
de nuestra vida.

Cuando un eclipse toca a Quirón, nos invita a reflexionar acerca de nuestras heridas primordiales.
Probablemente se trate de un momento donde esas heridas salgan a la luz, sea porque algún
acontecimiento nos hace recordar su existencia, sea porque nosotros mismos las llevemos a la
conciencia. De este modo, podemos actualizar el conocimiento que tenemos acerca de ellas, de cómo se
produjeron y de cuáles son los caminos para encontrar su sanación. De hecho, en torno a estos eclipses
pueden surgir oportunidades, sincronías, que para el observador atento suponen un aliento o una pista
para buscar soluciones. Quirón siempre nos invita a buscar respuestas, y puede ser un gran maestro por
vías muy sutiles.

Quirón en sinastría
El centauro Quirón tiene cierta importancia a la hora de analizar la compatibilidad entre las Cartas
Astrales de dos personas (Sinastría). Esto se debe a que si la posición de Quirón indica en qué zona de
nuestra conciencia tenemos nuestras heridas psicológicas más destacadas, no cabe duda de que
reconocer estas heridas puede ser un factor destacado a la hora de conseguir que una relación funcione
o no.

Es importante tener en cuenta los vínculos en los que la posición quironiana de uno toca los ejes o los
planetas más importantes de la otra persona, puesto que esto siempre va a evocar temas relativos a
Quirón, independientemente de cuáles sean los cuerpos involucrados.

Es normal que, en los vínculos más relevantes, ambas personas accedan a sus puntos más vulnerables y
que sean conscientes de la vulnerabilidad ajena. La propia intimidad compartida es un terreno abonado
para que este tipo de encuentros se den. En muchos casos, las personas son poco o nada conscientes de
sus propias debilidades, y menos aún de las heridas de la otra parte. Por ese motivo, el daño que se
provoca en el seno de una unión es especialmente doloroso, ya que el otro tiene un acceso directo a
nuestra parte más sensible. En ocasiones, uno sabe dónde tiene que tocar para provocar el mayor dolor
y hundirá sus dedos en esa llaga cuando esté irritado o se deje llevar por el rencor. Este es un peligro
que se corre cuando no hay una plena conciencia de los temas quironianos y falla la compasión.

Tomar conciencia de la posición natal de Quirón, tanto del propio como del de nuestra pareja, es algo
que puede evitar muchos conflictos, puesto que entendemos cuáles son los mecanismos que empleamos
para herir cuando nos sentimos molestos. Sabremos también dónde le duele a la otra persona, y
evitaremos causar un sufrimiento innecesario. De hecho, el primer mandamiento de la curación, tanto
física como emocional es "no dañar". Evitando profundizar en el daño inconsciente, ya estamos
haciendo mucho para mejorar cualquier relación.

Además, si hay un propósito evolutivo en ambas personas, las dos pueden ayudarse a encontrar
solución a sus enigmas quironianos, o al menos pueden apoyarse en el proceso de sanarlos. Por
supuesto, no todas las parejas son capaces de sanarse entre sí, y en ciertos casos es preciso recurrir a
ayuda externa. Pero al menos, tomar conciencia de cuál es nuestra herida y dónde está el punto débil de
la otra persona, nos puede servir para que las relaciones fluyan con menos dolor e incomprensión.
Folo

Nombre Astronómico: (5145) Pholus

Categoría: Centauro

Región: Entre las órbitas de Saturno y Neptuno

Descubierto por: D. Rabinowitz, el 9 de enero de 1992 (09:01:22 horas), en Kitt Peak (Arizona,
Estados Unidos)

Distancia al Sol (ua): 8,779 - 32,007

Período orbital (años): 92,09

Diámetro (km): 310 x 160 x 150

Notas sobre el descubrimiento: Fue el segundo centauro en ser descubierto. Su superficie es rojiza y
tiene una forma elongada, no esférica

Glifo: Muestra una "P" estilizada, de "Pholus".


El mito de Folo
Folo, cuyo nombre proviene de un término griego que significa "gruta", es un personaje central dentro
de la historia de los centauros. Se cuenta que Folo era un centauro sabio, que habitaba en la Arcadia, en
una cueva en las faldas del monte Foloe. Era hijo de Sileno y de una ninfa del fresno, Melia.

Como ya hemos visto, en su cuarto trabajo, Heracles debía viajar a Arcadia para capturar vivo al jabalí
de Erimanto. De camino hacia su aventura, recaló en el monte Foloe y allí fue agasajado por el
centauro, quien le sirvió carne asada, aunque el héroe la prefería cruda. En medio del banquete,
Heracles tuvo sed y le recordó a Folo que en su cueva se guardaba un cántaro de vino que estaba allí
precisamente para ser abierto en esa jornada. Dicho cántaro de vino había sido entregado por Dioniso a
cierto centauro, con la condición de que sólo fuera abierto en presencia de Heracles. Cuatro
generaciones habían pasado desde entonces, por lo que el vino había envejecido notablemente.

Cuando Folo abrió el cántaro con el vino, el fuerte olor del mismo se esparció por toda la región. Como
ya hemos visto, los centauros reaccionaban de manera violenta en contacto con los vapores etílicos, por
lo que accedieron en masa ante la cueva de Folo. Embriagados, portaban consigo grandes rocas, abetos
que habían arrancado de cuajo, flechas y hachas de carnicero.

Viendo la invasión, Folo se escondió asustado en lo profundo de la caverna, pero Heracles se defendió
con valor. Empezó a lanzar flechas contra los centauros, así que Néfele, la ninfa-nube que era abuela de
todos ellos, hizo que cayera una fuerte tormenta. La humedad resultante logró que la cuerda del arco del
héroe perdiera tensión, por lo que empezó a fallar en sus disparos.

Aun así, Heracles pudo rechazar a las bestias enfurecidas, matando a varias de ellas y dispersando al
resto. Como sabemos, en el incidente, una flecha hirió gravemente a Quirón.

Mientas Heracles perseguía a los centauros, Folo se dispuso a enterrar a los de su especie caídos en la
refriega. Al hacerlo, arrancó una flecha de uno de los cadáveres, preguntándose cómo una cosa tan
pequeña podía matar a seres tan fuertes como los centauros. Estaba entretenido en estos pensamientos,
cuando la flecha se deslizo de su mano y se fue a clavar en su pie, lo que causó su muerte.

Conociendo la noticia, Heracles abandonó la caza de los centauros huidos y se dirigió a Foloe, donde
enterró con grandes honores al desafortunado Folo al pie de la montaña donde estaba su caverna. Se
cuenta que los dioses ubicaron a Folo en el firmamento, en la constelación del Centauro. Junto a él, hay
una copa de vino que forma la constelación de Crater.
Simbolismo Astrológico de Folo
Folo es uno de los centauros mejor estudiados, junto con Quirón, por lo que disponemos de bastante
información acerca de su naturaleza y de la manera en que puede impactar en la Carta Astral. La
manera de comprenderlo mejor será revisando su mito, tal como haremos con todos los cuerpos
planetarios de este libro.

Sabemos que Folo es uno de los centauros que no procede de la unión de Ixión con Día. Esto es
importante, puesto que, como ocurre con Quirón, su naturaleza es diferente a la del resto de los de su
especie. Como veremos, los asuntos de Folo se relacionan directamente con el linaje familiar.

La historia de Folo se enmarca dentro de los doce trabajos de Heracles, y se relaciona con la captura del
jabalí de Erimanto. Los jabalíes son animales que están relacionados simbólicamente con el mundo
ctónico, es decir, con las profundidades. Así que aquí tenemos una primera pista acerca de que el
estudio de este centauro nos obligará a meternos en terrenos subterráneos.

Sabemos que un descanso de su búsqueda, Heracles visita a su amigo Folo. El centauro pertenece más
al mundo sofisticado de los humanos que al terreno instintivo de los centauros, y esto se ve también en
el ofrecimiento que hace de carne asada, en vez de la carne cruda que prefiere el héroe.

Pero el núcleo de toda la historia de Folo y Heracles viene a cuento del vino ancestral de los centauros.
Es un vino que lleva guardado desde hace cuatro generaciones, y que nadie se ha atrevido a abrir, ya
que estaba destinado a Heracles por mandato de Dioniso.

Haré un paréntesis aquí para hablar brevemente de esta importante divinidad. Dioniso es el hijo de Zeus
y una mortal llamada Sémele (un nombre que significa "luna"). Gracias a la intervención de la celosa
esposa de Zeus, Sémele murió accidentalmente a manos del dios cuando estaba embarazada de seis
meses. El propio Zeus, apenado, recogió al feto y lo cosió dentro de su muslo, donde pasó el tiempo
que le restaba. A su debido tiempo, el bebé nació y se le dio el nombre de Dioniso, que significa,
"nacido dos veces".

Dioniso era el dios del éxtasis sagrado, un éxtasis que a veces tomaba la forma de locura y frenesí
orgiástico. Sus compañeras, las ménades, celebraban ritos en los bosques en los que se mezclaba la
enajenación mental producida por el vino, el sexo descontrolado, los arrebatos de violencia, e incluso la
antropofagia.

Hay quien ve en la adoración a Dioniso un culto a la parte más salvaje del ser y sin duda, se relaciona
con la capacidad de dar rienda suelta a todos los instintos humanos. El culto a Dioniso refleja la
necesidad de reconocer convenientemente lo que es salvaje en nosotros mismos, de manera que no nos
domine o nos haga perder la razón, como ocurría con sus seguidoras. En este plano, su adoración se
relaciona directamente con la parte animal de los centauros, quienes sentían gran aprecio por este dios.

Pero el éxtasis ritual tiene también características más elevadas, como ya vimos al hablar de la
conexión entre Quirón y los ritos chamánicos. Precisamente, es a través de ciertas sustancias que
alteran la percepción, como algunos chamanes alcanzan estados alterados de conciencia. De ahí que el
culto dionisíaco tenga también relación con prácticas ancestrales de curación.

Es interesante ver cómo Dioniso, dios del vino y muy querido por los centauros, es aquel deja en la
cueva de Folo un regalo "envenenado" que, a su debido tiempo, causará un grave conflicto. Los
centauros, de hecho, no son buenos candidatos para probar el vino de Dioniso, puesto que el éxtasis que
obtienen a través de él se parece más a la locura salvaje de las ménades que a los viajes curativos de los
chamanes (como Quirón).

Abrir la jarra de vino ancestral requiere una mente fría y una conciencia que haya asumido y sanado la
parte más primitiva del ser. Porque ese receptáculo de vino contiene la esencia de cuatro generaciones,
y es así como llegamos aquí al núcleo central de la historia de Folo, que se relaciona con la herencia
recibida.

Actualmente, el estudio de la dimensión transgeneracional se ha convertido en un foco de gran interés,


puesto que revela aspectos de nuestra psique que vienen heredados de generaciones anteriores. Las
historias de los antepasados, sus logros o fracasos, tienen una gran influencia en la manera en que nos
entendemos y en nuestras propias actitudes ante la vida. Cada persona es el resultado de múltiples
generaciones, y sobre ella se proyectan los deseos y los temores de todo el clan.

Los últimos años nos han traído el redescubrimiento de la importancia del inconsciente familiar, lo que
ha permitido que surjan terapias como Constelaciones Familiares u otras de similar naturaleza, que nos
ayudan a entender y sanar los nudos familiares que hayamos podido heredar. Por eso, el descubrimiento
de Folo es importante, ya que este centauro puede ser una buena guía para analizar los aspectos
transgeneracionales que están actuando sobre nuestra conciencia presente.

No es casual que el vino ancestral de Folo provenga de cuatro generaciones, porque ese es
precisamente el número de pasos genealógicos que se suelen analizar en cualquier contexto
transgeneracional. Más allá de esas cuatro generaciones, las historias familiares se diluyen tanto, que su
poder sobre nuestra conciencia es prácticamente nulo.

Al destapar la jarra de vino, Folo deja salir las historias que no conocíamos, o a las que no habíamos
dado la importancia que merecen. Los secretos familiares son un elemento que genera cicatrices que se
heredan de una generación a la siguiente, y destaparlos, en muchas ocasiones, tiene un efecto
perturbador en las personas. Descubrir que, por ejemplo, un antepasado abusaba de sus hijas, o que el
abuelo robó el dinero de la empresa familiar, o que alguien se quedó con la herencia de otro, o que
hubo alguna muerte ocurrida en circunstancias poco claras, equivale a detonar una bomba que tendrá
efectos perturbadores en nosotros y en toda la familia. Pero, paradójicamente, reconocer estas historias,
por difíciles que sean, acaba siendo un paso liberador. Porque la verdad siempre nos hace libres.

Como este libro no está dedicado a los temas transgeneracionales, no me extenderé aquí explicando la
importancia de conocer todas las historias familiares y la manera en que éstas nos pueden ayudar en el
presente. Pero para aquellas personas que estén interesadas, recomiendo la lectura de mi libro: "Cómo
sanar tu árbol genealógico".

Folo, en la Carta Natal, muestra tanto los secretos escondidos en el árbol genealógico, como los temas
centrales que ocuparon a nuestra familia en las últimas cuatro generaciones. Analizar este símbolo nos
puede dar pistas muy valiosas si estamos desarrollando una investigación transgeneracional. A través
de su posición, podemos reconocer las heridas familiares que hemos recibido, y también podemos
encontrar algunas ideas para sanarlas. Por moverse entre Saturno y Neptuno, nos ayuda a integrar
nuestros límites heredados dentro de un contexto espiritual más amplio, trayendo inspiraciones que son
necesarias para nuestra evolución individual.
Folo en la Carta Natal
Folo sigue una órbita muy elíptica que le hace permanecer por períodos de más de veinte años en
algunos signos y por menos de tres en otros. Por eso, y por su movimiento directo y retrógrado, que
hace que las fronteras temporales no sean precisas, conviene localizar su posición exacta en la Carta
Natal. Véase para ello el Apéndice de este libro.

En ciertos casos, especialmente cuando se demora más de dos décadas en un signo, la posición de Folo
por signo tiene un efecto más generacional que personal. Pero ciertas indicaciones generales de su
posición por signo, pueden ser útiles para el análisis del horóscopo individual. En todo caso, para una
descripción más precisa del efecto de este cuerpo en la Carta Natal, se recomienda prestar especial
atención a su posición por Casa.

Folo en los Signos


Folo en Aries

El último período de Folo en Aries se dio entre 1980 y 1985.

En este tiempo de casi quince años, las personas nacidas con Folo en Aries sienten la necesidad de
recuperar su identidad en medio de las expectativas y las presiones del sistema familiar. Para ellos, el
sentimiento de individualidad puede ser muy fuerte, así como el deseo de independizarse
emocionalmente de todo aquello que suene a pasado. Pero precisamente porque este deseo es tan
intenso, necesitan conocer a fondo las historias de la familia, especialmente aquellas que tienen que ver
con personas que intentaron desarrollar una identidad propia o seguir un camino en solitario. Aquí es
preciso reconocer el valor de estos individuos, aceptando que todos tenemos algo en común con todos
nuestros ancestros, y al mismo tiempo, algo que nos hace únicos y diferentes. Valorar a los pioneros de
la familia, es fundamental para estos individuos.

Folo en Tauro

Folo se movió por el segmento de Tauro entre 1985 y 1988.

Las personas nacidas en este período tan breve tienen el reto de intentar entender las bases materiales
de la historia familiar. La manera en que los antepasados ganaban el dinero, cómo lo gastaban, su forma
de entender la prosperidad, incluso las costumbres alimentarias, son de interés para poder establecer
una conexión saludable con el pasado. Aquí, algunas costumbres pasan de una generación a la
siguiente, y deben ser analizadas para poder actualizar esta relación y crear una forma nueva de vivir en
contacto con el mundo material.

Folo en Géminis

En el signo de Géminis, Folo se ha desplazado entre 1987 y 1990.

En este período de cuatro años en que Folo se encuentra en los territorios celestes de Géminis, el
énfasis está puesto en el desarrollo de la mente y la expresión. La conexión con los antepasados puede
ser más racional que emocional, pero aun desde esa posición, será necesario hacer un trabajo de
reconexión con todos ellos. Aquí hay que prestar especial atención a los antepasados que tuvieron una
vida viajera, y también a los que sufrieron a la hora de expresarse, o bien, destacaron por la forma en
que manifestaban sus ideas. Entender cómo se ha heredado la forma de hablar, los giros lingüísticos e
incluso el idioma, si es el caso, es de gran importancia, porque como sabemos, "el límite de mi lenguaje
es el límite de mis pensamientos".

Folo en Cáncer

Aquí se da el período más corto de Folo en un signo, ya que estuvo en Cáncer menos de tres años, entre
1990 y 1992.

A las personas nacidas con esta posición del centauro, Folo les provee de una intensa conexión con el
pasado familiar. Este vínculo, señala que los antepasados tienen una importante presencia en la manera
en que la persona se reconoce a sí misma. El sentimiento de unión a la familia, la percepción de que el
destino propio está conectado con todo lo que representa la historia del clan, se vuelve importante. Aquí
no hay dificultad para reconocer lo bueno recibido, pero se requiere un cierto trabajo para valorar
patrones y separarse de aquellos que no sean positivos para el momento presente.

Folo en Leo

Entre 1991 y 1994, este cuerpo se desplazó por el signo de Leo.

El paso de Folo por este signo, pese a su brevedad, tiene un cierto impacto en los individuos que nacen
bajo esta influencia. El pasado familiar puede estar aquí recubierto de un brillo que no deja ver toda la
verdad oculta. Se da un sentimiento de cierto orgullo hacia el pasado, quizás porque hay personas
destacadas en el árbol familiar, referentes a los que se tiene encumbrados en un lugar de privilegio. Será
importante que los individuos que hayan nacido bajo esta influencia aprendan a diferenciar entre el
mito y la realidad, humanizando a todos los miembros del clan y valorando lo que cada uno ha aportado
al inconsciente familiar. Ni todo lo que brilla es oro, ni todo lo que está en las sombras, es de poco
valor.

Folo en Virgo

Folo ha estado en Virgo entre 1993 y 1996.

Cuando Folo está ubicado en el signo de Virgo en la Carta Natal, revela una necesidad de entender la
manera en que los antepasados gestionaban asuntos como el trabajo cotidiano, las obligaciones y la
salud. Hay que prestar especial interés a aquellos que tuvieron problemas médicos, o bien a los que
ponían la disciplina y el esfuerzo abnegado como meta en la vida. También es interesante hacer un
reconocimiento a los disidentes, que probablemente se encuentren entre aquellos que padecieron las
enfermedades más graves. De este modo, las personas con esta posición se abren a una vida más sana y
menos neurótica.

Folo en Libra

En el signo de Libra, la última permanencia de Folo se dio entre 1995 y 1999.

Aquí, el énfasis de Folo se sitúa en el terreno de las relaciones de pareja y los vínculos más estrechos.
Conviene revisar todas las relaciones que se dieron en el seno del árbol familiar, puesto que hay
patrones que, o bien por repetición, o bien por un intento de hacer justo lo contrario, han marcado con
fuerza la manera en que el individuo se vincula a otras personas. Aquellos que vivieron relaciones más
dificultosas o los que se quedaron solteros, merecen una atención especial y un lugar muy destacado en
el corazón. Son maestros que nos enseñan cómo mejorar nuestras relaciones presentes, evitando errores
y aceptando sus valiosas enseñanzas.

Folo en Escorpio

La última etapa de Folo en Escorpio se ha dado entre 1999 y 2006.

Para las personas nacidas en este intervalo de tiempo, resultará importante analizar los secretos
familiares relacionados con temas que normalmente son considerados tabú. El sexo, el dinero o la
muerte suelen generar secretos generacionales que estas personas deberían analizar en su árbol
genealógico. Generar nuevas formas de relación con estos asuntos será una de las tareas que se
impondrán si quieren desarrollar todo el potencial de Folo.

Folo en Sagitario

Folo permaneció en Sagitario entre 1914 y 1929 y ha vuelto a este signo desde 2005 hasta 2019.

En el signo de Sagitario, Folo permanece durante unos quince años, por lo que ya estamos hablando de
una influencia mucho más generacional que personal. Aun así, para las personas nacidas con esta
posición del centauro, los temas familiares se relacionan con la manera en que adquieren y desarrollan
el conocimiento. Analizar qué individuos del pasado tuvieron relevancia por su forma de pensar o por
su manera de expresarse, puede ser de gran ayuda para el desarrollo presente. También conviene
aprender de las historias de aquellos que tuvieron un origen extranjero, o que emigraron.

Folo en Capricornio

Folo ha estado en Capricornio en diversos períodos desde 1928 hasta 1952 y ha vuelto en 2018 para un
nuevo ciclo largo, que se extenderá más allá de 2050.

Es en Capricornio donde Folo parece disfrutar por más tiempo, ya que como se ha indicado, su órbita es
muy elíptica. De modo que la influencia que aporta aquí este cuerpo, es más generacional que personal.
Aun así, las lecciones que aporta al individuo se relacionan con la necesidad de entender a aquellas
personas que, en el árbol familiar, tuvieron ambición y deseos de prosperar. Quizás en la familia haya
ejemplos de seres que buscaron conseguir sus objetivos a cualquier precio y pagaron por ello con su
salud o con el deterioro de sus relaciones personales. Estar en sintonía con estas personas nos permite
recuperar su energía volcada en el éxito, pero aprendiendo a no dejar de lado otras cuestiones que
también son importantes. Sanar la relación con los antepasados que triunfaron, pero también con
aquellos que fracasaron, nos permitirá vivir con más ligereza, pero también con más propósito.

Folo en Acuario

Folo estuvo en el signo de Acuario en un largo período entre 1950 y 1971.

Para las personas que han nacido con Folo en estas dos décadas, prevalece la necesidad de dar un paso
más allá de las limitaciones familiares. Para ellos, el pasado puede ser una etapa a dejar atrás, mirando
con más fuerza hacia el futuro. Pero precisamente, es el conocimiento del pasado lo que nos impulsa
con más fuerza hacia delante. Ellos han traído una nueva forma de entender los vínculos familiares y
han sido capaces de crear modelos alternativos, pero no deberían dejar de mirar atrás para que los
aciertos y los errores de los antepasados sean la clave para su aprendizaje presente.

Folo en Piscis

Folo estuvo en el signo de Piscis entre 1970 y 1981, aproximadamente.

En las personas nacidas en esta década, Folo ha podido tener un impacto importante en la manera en
que se manejan los secretos familiares. Aquí se vuelve importante reconocer qué es lo que permanece
oculto en el árbol generacional, sacando a la luz todo aquello que intenta ser escondido por el miedo, la
vergüenza o por una moral ya caduca. Reconocer todas las historias de los antepasados, tanto aquellas
que se esconden como las que no, será esencial para estas personas. Mirar a los ancestros con
compasión, será una forma de sanar.

Folo en las Casas


Folo en la Casa 1

Folo se convierte en un punto focal del sistema de centauros cuando se ubica en la Casa 1 del cielo, y
más si está situado en las cercanías del Ascendente. Aquí, la familia y su historia tienen un gran peso
sobre la conciencia de la persona. Esto se puede manifestar tanto de forma evidente como oculta,
puesto que no todos los individuos con esta posición saben ver con objetividad a su clan. Aquí, la
persona es, más que en ninguna otra posición, un producto de sus ancestros, alguien que está
profundamente marcado por todo lo que le precede. La conexión con el pasado es muy intensa y tiñe de
un modo muy destacado ciertos acontecimientos y decisiones de la vida presente. Por eso, realizar un
estudio genealógico se vuelve muy importante.

La individualidad es algo que tiene importancia en la familia. En algunos casos, porque esa
individualidad ha sido reprimida a lo largo del tiempo. En otros, al contrario, porque se dio una gran
importancia a lo particular de cada uno. Si hubo individuos del pasado que quisieron vivir de un modo
autónomo, separado del clan o de la sociedad, conocer cuál fue su destino es algo de vital importancia.
No porque se vaya a repetir necesariamente, sino porque es la manera de superar cualquier "maldición"
oculta que esté pendiendo sobre nuestras cabezas. La gran tarea de las personas con Folo en la Casa 1
es ser ellas mismas, aceptando todo lo que han recibido de la familia y agradeciéndolo, pero dando un
paso más allá. Pagar un precio por ser uno mismo, es algo que no podemos aceptar. De hecho, el
destino de estos seres es forjar un camino propio, pero reconociendo el valor de todos los que les han
precedido.

Folo en la Casa 2

La posición de Folo en la zona de la Casa 2 revela que lo más importante dentro del sistema familiar,
son los valores. Tener un concepto claro de lo que es importante y lo que no, lo que resulta moralmente
correcto o incorrecto, es algo muy destacado en esta familia. Por ese motivo, la persona recibe una
instrucción ética muy precisa desde que tiene uso de razón, tanto por medio de palabras como a través
de los hechos. Salirse de este patrón puede ser un problema, tanto si se hace por un acto de rebeldía
como si la intención es construir un sistema propio de valores.
Aquí también es importante el dinero, y las historias en torno a él abundarán en la familia. Quizás
porque fue un recurso escaso, o porque algunas personas del clan se valoraban por su mejor o peor
posición socioeconómica. Sea como sea, el manejo del dinero tiene un fuerte componente aprendido, y
tanto si es para darle importancia como para quitársela, el individuo debe aprender a reconocer los
modelos familiares implícitos en cada acción. El desarrollo máximo del potencial de este centauro nos
invita a reconsiderar los valores familiares, recuperando aquellos que estén en consonancia con nuestra
conciencia actual, pero dejando de lado los que puedan estar caducos. Algo similar ocurre con las
creencias asociadas al dinero.

Folo en la Casa 3

Cuando Folo se sitúa en la Casa 3, los temas relacionados con la comunicación y la comprensión de la
realidad tienen una fuerte carga generacional. Gran parte de los patrones mentales de la persona se
insertan en las raíces del árbol familiar, por lo que no es extraño que muchas veces acaben teniendo el
mismo tipo de pensamientos que un antepasado especialmente relevante. Como suele suceder con todos
los centauros, esta conexión puede ser también una fuente de problemas, ya que no todos los esquemas
de pensamiento son constructivos, ni todos están actualizados para recoger las inquietudes y las
características del mundo actual. Por ese motivo, es muy importante analizar las formas de pensar y de
expresarse que se dan en la familia, para pasarlas del inconsciente a la consciencia.

Los hermanos, y en ocasiones los primos, son de gran importancia con esta posición de Folo. Resulta
de interés descubrir cuáles son las dinámicas ocultas que se dan con los hermanos, no sólo en la
generación actual, sino los que se daban en pasadas generaciones y que se puedan estar repitiendo en el
presente. En algunos casos, la persona carecerá de hermanos y sentirá esta falta como una herida. En
otros, la relación con ellos será fuente de conflictos. Hay que recordar que, entre hermanos, el orden es
muy importante, y que cada uno de los miembros de este escalón genealógico deberían situarse en el
lugar que le corresponde por nacimiento. Además, un reparto desigual en las herencias o un interés no
equilibrado por parte de los padres, pueden dar lugar a problemas. Si existe algún secreto familiar,
puede estar relacionado con estos conflictos entre hermanos, o bien con alguien a quien nadie quiso dar
voz.

Folo en la Casa 4

Si hay una posición donde Folo destaca con mayor fuerza que en otras, aparte de las cercanías al
Ascendente o al Medio Cielo, es sin duda, ésta. Aquí nos encontramos en la casa natal de la familia,
donde todos los temas relacionados con los antepasados se revelan con mayor claridad. Así que no hay
que dudar de que, para estas personas, la familia es un tema central en sus vidas. De hecho, conocer a
su familia es una forma de conocerlos a ellos, bien sea por afinidad o por necesidad de diferenciación.

Porque aquí la familia, las historias del pasado, los ancestros, son tan poderosos, que pueden llegar a
ser asfixiantes en algunos casos. Uno es el fruto de su árbol, pero el fruto, para poder germinar, necesita
separarse también del árbol. Por este motivo, tomar cierta distancia, estudiar los temas familiares con
algo de objetividad, ayudará a entender mejor ciertas decisiones o determinados acontecimientos de la
vida. Conocer la historia del lugar de origen puede ser también una fuente de información muy válida
para la persona. Sea como sea, el sentimiento de pertenencia al clan es demasiado intenso y debería ser
revisado con cuidado, para tomar lo mejor y deshacernos de aquello que pueda manifestarse como una
carga.

Folo en la Casa 5
Cuando Folo está ubicado en la Casa 5 del mapa natal, hay un tema pendiente con respecto al amor y la
generosidad que tiene un efecto evidente en la vida de la persona. Quizás hubo individuos del clan
familiar que tuvieron problemas para amar, o quizás la apertura emocional de algunos trajo algún tipo
de conflicto. En los casos más positivos, la capacidad de compartir sentimientos era algo común entre
los miembros del sistema y aquí la persona vendrá equipada con una buena cualidad que compartir con
los demás.

Las relaciones entre padres e hijos son de gran importancia con esta posición de Folo. A veces, los hijos
son fuente de orgullo, pero en otras ocasiones puede haber conflictos no resueltos con respecto a esta
relación. Si hay algún secreto o conflicto típicamente asociado a Folo en la Casa 5, es la paternidad no
reconocida en algún punto del árbol genealógico, o bien la existencia de hijos adoptados. La creatividad
también es un tema destacado, porque quizá haya personas dentro de la historia generacional que no
pudieron desarrollar sus capacidades creativas. Sea como sea, es recomendable que los individuos que
tengan esta posición de Folo actualicen sus sentimientos con respecto al arte, la paternidad o
maternidad y en relación con sus propios hijos, si los tienen. Todo lo que resolvemos hacia atrás, hacia
los antepasados, se proyecta sobre nuestros descendientes como una bendición.

Folo en la Casa 6

La presencia de Folo en la Casa 6 revela que estamos ante un sistema familiar donde las obligaciones
son muy importantes. Aquí hay normas estrictas acerca de lo que se debe hacer y lo que no. La
disciplina se convierte en algo muy valorado, que marca la diferencia entre ser un miembro aceptable
del clan o una oveja negra del rebaño. La atención está puesta en ser personas que trabajan duro y que
hacen las cosas bien. También en que los niños sean amables, educados y limpios, más que espontáneos
y juguetones.

El conflicto surge cuando algún miembro del clan decide no seguir unas normas tan estrictas, cuando se
atenta contra la higiene o contra las buenas costumbres. También los niños rebeldes o enfermizos traen
conflictos a la familia. Aquí es donde se producen los nudos genealógicos, pero es justo a estas
personas, a las ovejas negras, a quienes uno debe reconocer y honrar en primer lugar. Como la salud es
un tema central en esta familia, los secretos suelen estar relacionados con la enfermedad, sobre todo si
esta es humillante o lleva aparejado un estigma social. Convertir las normas en deseos ayuda a estas
personas a relajar toda la carga generacional centrada en la eficacia y la pulcritud. Pero no por ello hay
que despreciar los regalos que nos trae la disciplina bien entendida.

Folo en la Casa 7

En la Casa 7 del cielo, Folo muestra su simbolismo en todo lo relacionado con las relaciones de pareja.
Aquí, los vínculos matrimoniales, las relaciones estables, son objeto de escrutinio, y deberían ser
analizadas en todos los niveles del árbol genealógico. Es posible que la persona intente repetir modelos
anteriores en sus relaciones presentes, o bien que haga un esfuerzo consciente por hacer justo lo
contrario que sus antepasados, lo cual no siempre termina bien.

Para poder construir relaciones estables y sanas, es preciso reconocer todos los vínculos del pasado,
valorando lo que tenían de positivo y descartando lo negativo. Apreciar que cada pareja del árbol fue
importante para que uno esté en este mundo, es el primer paso para aceptar nuevos patrones de relación
basados en el respeto y el amor. También es interesante analizar a las personas solteras, sobre todo a
aquellas de nuestro mismo sexo y especialmente si nuestras propias relaciones de pareja resultan
dificultosas. Si hay secretos en este árbol familiar, seguramente tengan que ver con problemas ocultos
en las relaciones, o con infidelidades. También puede haber algún conflicto legal oculto, o problemas
societarios. Sacar a la luz estas historias del pasado tendrá un efecto beneficioso en el presente.

Folo en la Casa 8

Situado en la Casa 8 del cielo, Folo está en una posición bastante delicada. Si este es el centauro de los
secretos y las historias familiares, cuando se ubica en esta casa marcada por la transformación, revela
que en el árbol familiar hay temas complejos que no siempre han sido abordados de manera correcta
por las personas que han formado parte del clan. Llegar hasta el fondo de algunas historias es una tarea
complicada, porque se impone un muro de secretismo en torno a temas como la sexualidad, la muerte o
el manejo del dinero. Pueden haber existido incluso luchas de poder entre distintas personas de la
familia.

Pero precisamente por la naturaleza compleja de todos estos temas, es por lo que se requiere un análisis
detallado y desapasionado de todo lo que rodea a la historia familiar. Si ha habido conflictos por
infidelidades, mal reparto de herencias, abusos sexuales, problemas de orientación sexual o dominación
de unos sobre otros en el pasado, es tiempo de que todos esos temas sean comprendidos y sanados. El
gran tabú cuando hablamos de esta casa, es la muerte, así que también corresponde analizar y sanar el
destino de todos aquellos que fallecieron a edad temprana, o en circunstancias poco claras. En resumen,
esta es una posición de Folo que requiere muchos reajustes y quizás un trabajo de sanación
transgeneracional realizado con un profesional. Recuperando las historias pasadas, dando espacio al
perdón y la reconciliación, es como se supera el dolor ancestral y se renace a una nueva vida.

Folo en la Casa 9

Cuando Folo está situado en la Casa 9, revela la necesidad de realizar investigaciones profundas acerca
de la genealogía propia. Esta es una posición donde se puede investigar con seriedad no sólo los temas
que competen al sistema del que se procede, sino que se pueden obtener claves de gran alcance que
pueden ser útiles para otras personas. En esta situación, es muy recomendable aprender acerca de los
temas genealógicos y profundizar en su estudio hasta donde se pueda.

Aquí es importante analizar la existencia de personas de origen extranjero en el linaje familiar, o bien
de emigrantes. El nexo de unión entre un país y otro, entre una cultura y otra, es un tema recurrente en
la familia, puesto que viajar a otro lugar y establecerse en él, requiere una serie de reajustes internos
que tiene un profundo efecto en las generaciones siguientes. En ocasiones, estas personas son viajeros
empedernidos, o sienten una atracción especial por lugares lejanos. Tampoco se puede descartar que
algún antepasado estuviera especialmente involucrado en temas como el comercio, la religión o la
educación superior. Si hay algún secreto familiar, quizás haya que buscarlo entre los primos, los tíos o
entre antepasados de origen lejano. Reconocer a todos los que emigraron o a aquellos de los que hace
mucho que se perdió la pista, es muy sanador.

Folo en la Casa 10

Esta es una posición importante para Folo, sobre todo si está ubicado en las cercanías del Medio Cielo.
Aquí, los temas que trae el centauro están muy relacionados con la vida profesional y con la manera en
que la familia trataba su reputación social. En este árbol familiar, probablemente se daba gran
importancia a la forma en que se desarrollaba el trabajo, a ser firmes y constantes en la persecución de
unas metas. Ascender socialmente, crecer económicamente, ser personas fiables, parecen ser temas
muy relevantes. Como es lógico, no todos los miembros del clan cumplieron las expectativas, y por ese
motivo, resulta interesante analizar las vidas de aquellos que se salieron de la norma.
Las personas mayores son importantes dentro de esta familia y se les tiene en cuenta. No se puede
descartar que exista alguien de mayor rango, al que todos reverenciaban. Sea como sea, tenemos que
analizar nuestra forma de acometer los temas profesionales, el sentimiento de haber triunfado o
fracasado en la vida, a la luz de las normas familiares. Aceptar los dones positivos, el estímulo familiar,
la seriedad en los propósitos, pero sin caer en los extremos de una formalidad exagerada o una
laboriosidad que deje de lado aspectos más lúdicos de la vida, es algo central para estas personas. Si
existe algún secreto en esta familia, quizás esté relacionado con aquellos que fracasaron, o que tras una
máscara de seriedad y éxito, guardan más de un fantasma en forma de fracaso afectivo escondido bajo
llave.

Folo en la Casa 11

Cuando una persona tiene al centauro Folo situado en la Casa 11, los temas sociales se revelan como un
importante punto de conexión con el pasado familiar. Estamos ante sistemas donde era muy importante
estar en contacto con el entorno, tener amigos, socializar. La familia ha sido un espacio donde múltiples
influencias estaban presentes, donde los vecinos o los conocidos podían entrar y salir, o donde se vivía
con la sensación de que el colectivo estaba ahí para apoyarnos y sostenernos.

En medio de tanta variedad, puede existir una sensación de que la familia se diluye en el ambiente, de
que las normas internas son las normas de la sociedad. Esta falta de cohesión puede dar lugar a sistemas
familiares donde falta un verdadero calor interior, una unión fuerte entre las personas. Todas las
relaciones son amistosas, pero ninguna es afectivamente profunda. Pero precisamente lo que se busca
en la familia es esa profundidad, esa conexión que, si bien en algunos momentos puede ser agobiante,
en otros es necesaria, pues la familia es el refugio donde nos cobijamos cuando soplan los vientos más
duros. Será importante aprender a crear ese calor en la familia propia o en el contacto con los amigos
íntimos. Aquí, si hay secretos familiares, estarán relacionados con la influencia o el papel de ciertos
conocidos de la familia. O con escándalos sociales que fueron ocultados bajo una alfombra de silencio.

Folo en la Casa 12

La situación de Folo en la Casa 12 es bastante compleja, ya que, en este lugar del horóscopo, el
centauro no manifiesta sus temas de un modo evidente. Este es el lugar donde el inconsciente familiar
se vuelve realmente inconsciente, y no resulta fácil traer sus contenidos a la luz. Aun así, hay mucho
que se puede hacer con esta posición. En primer lugar, entender que es preciso esforzarse en
comprender, y esto incluye hacer muchas preguntas a los familiares de mayor edad, actualizar
conocimientos y buscar información acerca de las trampas y los tesoros que encierra cada familia.

De hecho, una de las dificultades que se suele dar en esta posición consiste en enfrentar ciertos secretos
que se han transmitido de una generación a la siguiente. Como todos los secretos familiares son tóxicos,
es preciso poner luz sobre los acontecimientos traumáticos vividos por los antepasados. Sobre todo, es
necesario investigar la historia de aquellos que vivieron enfermedades o que estuvieron recluidos.
También de quienes sufrieron problemas psicológicos o emocionales. De este modo, reconociendo esos
relatos y honrando a esos antepasados, se puede transformar el propio destino. Esta es una de las
posiciones de Folo donde se recomienda hacer una investigación genealógica seria, especialmente si se
halla cerca del Ascendente.

Aspectos a Folo
Los aspectos a Folo nos ayudan a matizar el simbolismo generacional de este cuerpo. Por eso, cuando
el Sol se encuentra en aspecto a Folo, revela la necesidad imperiosa de llevar los temas familiares a la
conciencia. Aquí nos encontramos con personas que pueden tener una percepción muy positiva de su
linaje, rozando el orgullo. Independientemente del nivel económico o social de la familia, la persona
siente que su clan es algo valioso, sobre todo en la parte masculina. Esto es evidente cuando el aspecto
en cuestión es una conjunción o un aspecto fluido. En el caso de los aspectos tensos, este orgullo será
más difícil de alcanzar, pero puede sobrevenir tras un período de investigación genealógica. Cuando es
la Luna quien hace aspectos fuertes a Folo, manifiesta la necesidad de refrescar nuestra memoria
generacional. Aquí, las mujeres son las que transmiten el linaje, o quienes tienen más peso en la manera
en que nos relacionamos con el pasado. Aun así, hay que esperar ciertas fluctuaciones emocionales a
medida que se abra la jarra de vino ancestral.

Cuando es Mercurio quien hace aspecto a Folo, revela la necesidad de usar la mente racional para
entender las historias familiares. Aquí nos encontramos con las personas que gustan de hablar de sus
antepasados o de las historias de su infancia, sobre todo si existe también una conexión con el Sol. De
la cualidad de los aspectos, dependerá el hecho de que esa visión del pasado sea más o menos
constructiva. En cambio, si es Venus quien contacta con el centauro, expresa la capacidad de ser
receptivos a las historias del clan familiar. Aquí las mujeres son importantes, y a través de ellas se
conforma una imagen muy clara de lo femenino. Existe cierto placer en investigar acerca de la familia,
coleccionando recuerdos y objetos heredados de los antepasados. Marte, en contacto con Folo, tiende a
dar valor a la parte masculina del clan, o a aquellas personas que tuvieron una actitud determinada y
valiente en la vida. También predispone a cierta animadversión contra algunos antepasados,
especialmente con aspectos tensos. Aun así, uno puede reconocer la fuente de su energía más vital a
través de este vínculo.

En contacto con Júpiter, Folo revela la naturaleza más creativa, inspiradora y productiva de la familia.
Con aspectos positivos, se puede reconocer el ansia de crecimiento o el voluntarismo en las historias de
nuestros ancestros. Aunque con aspectos más tensos, pueden surgir asuntos como la dificultad de
reconocer límites, o el no saber parar. En cambio, Saturno sí que nos ayuda a establecer esos límites.
En algunos casos, puede traer una visión algo sombría del pasado familiar, centrada en los perdedores o
en los que vivieron bajo represión. Pero también representa un impulso para ser firmes, determinados y
serios en nuestros propósitos.

Si Folo está en contacto estrecho con los planetas transpersonales, manifiesta la necesidad de asimilar
el legado familiar dentro de un contexto espiritual más amplio. Así, cuando está en aspecto con Urano,
desarrolla su simbolismo en el área de los cambios y la evolución personal. Aquí, la información
generacional llega de manera sorprendente y puede significar un terremoto en la manera en que la
persona percibe a su familia. En el caso de que la conexión se dé con Neptuno, puede ser necesario un
proceso de desvelamiento que permita separar lo real de lo ilusorio. Los sueños o el desarrollo creativo
pueden ayudar a incorporar toda la historia del clan. Al fin, si es Plutón el planeta que hace conexiones
con Folo, nos muestra la manera en que los antepasados manejaron el poder y las influencias. Ahora
mismo, la persona debe recoger los aprendizajes recibidos del clan y aceptar que ha de deshacerse de
todo lo superfluo. Sólo así, podrá emerger como un individuo renovado.

Revolución de Folo
El centauro Folo tarda un promedio de 92 años en dar una vuelta completa al firmamento, lo que
astrológicamente se denomina una "revolución". Se podría suponer, por tanto, que son pocas las
personas que pueden vivir un ciclo completo de Folo, pero esto no es del todo cierto.

Como sucede con otros centauros, la órbita de Folo es muy elíptica, lo que significa que pasa mucho
más tiempo en unos signos que en otros. Así que podemos esperar cierta variabilidad en cuanto al
momento concreto en que se produce este retorno. Eso sí, de darse, será siempre a una avanzada edad.
En todo caso, aunque el ciclo completo de este planeta sea demasiado largo para la mayor parte de las
personas, sí que se pueden experimentar algunas partes del mismo.

La primera cuadratura de Folo hacia su lugar natal se produce en torno a los 23 años, mientras que la
segunda se dará hacia los 69. Estos son dos momentos en que afrontamos, por primera y por última vez,
los temas relacionados con nuestra herencia ancestral. En ambos casos, quizás la actitud sea un tanto
antagónica, puesto que la cuadratura siempre nos sitúa frente a aquello que nos resulta difícil de
resolver, pero que tampoco se puede pasar por alto. Es un aspecto de "incomodidad saludable", que
ayuda a que pongamos en contexto todo lo que hemos recibido.

Entre ambas cuadraturas, se da el momento de la oposición, en torno a los 46 años de edad. Aquí, no
cabe duda de que los temas generacionales se convierten en un asunto muy relevante de la vida. Hay
que tener en cuenta que, en este punto de la existencia, acabamos de pasar por la revolución de Urano
en oposición a su lugar natal (entre los 42 y los 44 años de edad), y estamos muy cerca de vivir la
revolución de Quirón (hacia los 50 años). Así que este es un ciclo donde podemos encontrar cierta
claridad en torno a la herencia generacional y cómo integrarla en el conjunto de nuestra vida. Para
algunas personas, puede significar un tiempo de rebeldía con el pasado, pero para otros es un momento
de integración que puede ser muy productivo.

Para conocer el momento exacto de cada parte del ciclo de Folo, es necesario recurrir a unas efemérides
del planeta, o bien a servicios de cálculo astrológico como los que se recomiendan en el Apéndice.

Folo y los eclipses


Los eclipses son momentos de reinicio planetario, en los que la energía del cosmos vive un instante de
pausa. La parte más positiva de estos procesos, es que nos pueden servir para reorganizar nuestra rutina,
para abandonar todo aquello que ya no nos sirve, y para abrir las puertas a nuevas experiencias.

En el caso de que un eclipse, solar o lunar, toque la posición natal de nuestro Folo, nos está indicando
que ese momento de reinicio energético está marcando un punto de inflexión en la manera en que
manejamos nuestra energía generacional. Estos instantes, que se producen cada nueve años
aproximadamente, pueden ser apropiados para iniciar algún tipo de terapia transgeneracional, o para
ampliar nuestro conocimiento de la historia familiar.

También es posible que surja algún tipo de información transgeneracional "de la nada". Por ejemplo, un
familiar de mayor edad puede revelar un dato esencial acerca del pasado, aparentemente de un modo
casual. Si es así, conviene seguir esa pista, puesto que nos muestra un camino de conocimiento que está
esperando a ser recorrido. Los eclipses también pueden ser útiles para realizar algún ritual psicológico
de liberación del pasado. En resumen, cualquier eclipse que toque a Folo nos da oportunidades de
conocer y sanar aspectos de nuestra dimensión transgeneracional.

Folo en sinastría
Aunque Folo está muy centrado en mostrarnos diversos aspectos de nuestra herencia familiar, no
podemos pasar por alto su importancia a la hora de analizarlo sinástricamente. Esto es algo muy lógico,
ya que cada persona, aporta a una relación los aprendizajes que ha recibido en su familia de origen. De
hecho, la tendencia natural de la mayoría de los seres humanos es la de repetir ciertos patrones
aprendidos en el hogar. Algunos de estos patrones serán más sanos que otros, pero sea cual sea el
esquema, siempre es recomendable pasarlo por el filtro de la conciencia.

De este modo, podemos elegir continuar con él, si nos parece apropiado, o abandonarlo si no lo es. Así
que el análisis de la posición de Folo en ambas Cartas Astrales puede ser un factor muy interesante para
sacar a la luz todos esos temas familiares ocultos que puedan estar actuando sobre la relación. Si la
posición de Folo de una persona está tocando un planeta o ángulo de la Carta de la otra persona, hay
que prestar mucha atención para evitar que cualquier costumbre familiar se interponga en una relación
que debería ser lo más fresca y consciente posible.

Una guía para entender cómo conecta Folo con los planetas de la Carta Natal de la pareja, se puede
extraer del apartado ya dedicado a los aspectos de este cuerpo.
Neso

Nombre Astronómico: (7066) Nessus

Categoría: Centauro

Región: Entre las órbitas de Saturno y Neptuno

Descubierto por: D. Rabinowitz, el 26 de abril de 1993 (06:45:46 horas), en Kitt Peak (Arizona,
Estados Unidos)

Distancia al Sol (ua): 11,854 - 37,423

Período orbital (años): 122,30

Diámetro (km): 60

Notas sobre el descubrimiento: Es el tercer centauro descubierto. Se sabe que su superficie tiene un
color rojizo muy oscuro, que lo diferencia del resto de los centauros.

Glifo: Muestra una "N", de "Nessus".


El mito de Neso
Neso es uno de los centauros que proceden directamente de la unión de Ixión y Néfele, aunque hay
quien dice que sus padres eran Sileno y Melia.

En todo caso, sabemos que Neso fue uno de los centauros que salió con vida después de la guerra con
los lápitas y se estableció en el río Eveno para ayudar a cruzar a las gentes a cambio de dinero. Según
decía, tenía autorización de los dioses para hacerlo, debido a su rectitud moral.

Se cuenta que cierto día, Heracles y su esposa Deyanira llegaron a la orilla del río. Ambos llevaban tres
años casados, pero por causa de un desgraciado accidente que había supuesto la muerte de un niño, él
había sido forzado al exilio.

Al llegar a este punto, tenemos varias versiones de la historia, que difieren en los detalles, pero no en lo
esencial.

Hay quien dice que Heracles cruzó por sí mismo el río, pero cuando el centauro le exigió de todos
modos un pago, el héroe le indicó que podía cobrarse cruzando a Deyanira. Según otras versiones, el
hombre-caballo Neso tomó a Deyanira sobre su lomo y la cruzó, mientras Heracles esperaba su turno.

Sea como sea, mientras cruzaba al otro lado, Neso sintió un fuerte deseo hacia la mujer. De manera
que, al llegar a la orilla opuesta, o bien a mitad del río, intentó violar a Deyanira. Como es de suponer,
ella gritó, pidiendo auxilio a su marido.

Heracles, al ver lo que estaba sucediendo, lanzó una de sus flechas, que portaba el veneno obtenido de
la sangre de la hidra de Lerna. Con gran precisión, la saeta se clavó en el corazón del centauro y lo hirió
de muerte. Aun así, mientras agonizaba, Neso tuvo tiempo de decirle a Deyanira que debía recoger su
sangre, así como el semen que había derramado en su intento de agresión.

Según dijo Neso, uniendo ambos elementos, Deyanira podría disponer de una pócima mágica que
aseguraría la fidelidad eterna de Heracles. Deyanira no dudó en hacer caso de Neso, y secretamente,
guardó la sangre y el semen del centauro que, satisfecho al ver la acción de la mujer, falleció.

Siguiendo el relato de Diodoro Sículo, tiempo después, Heracles pidió a su esposa que le diera ciertas
prendas de ropa para vestirse de manera correcta, ya que quería realizar determinados sacrificios a los
dioses. Como ella temía que el héroe estuviera enamorado de otra mujer, untó las ropas de Heracles con
la pócima. Así, cuando Heracles se las puso, resultó envenenado con la sangre del centauro Neso y
murió en medio de horribles sufrimientos.

Un autor romano, conocido como el "Seudo-Higinio", abunda en la tragedia contando el episodio de la


siguiente manera. Cuando Deyanira impregna la ropa con la pócima, una gota de la misma cae en el
suelo. A continuación, entrega las prendas a un criado para que las lleve ante Heracles.

Una vez que el criado ha partido, la gota que ha caído en el suelo comienza a quemar la piedra como si
se tratara de un potente ácido. Cuando Deyanira, horrorizada, se da cuenta de que en la sangre del
centauro estaba el veneno de la hidra, ya es tarde, puesto que Heracles ha recibido el encargo. Así,
Deyanira conoce de antemano cómo va a ser la muerte de su esposo y no puede hacer nada por evitarlo.
Simbolismo Astrológico de Neso
El nombre de Neso parece estar relacionado con una palabra que se traduce como "pato". Sin duda, es
una buena denominación para un ser que vive entre el agua y la tierra. Neso se nos presenta entonces
como alguien que está a mitad de camino entre la emoción y el inconsciente (el agua), y el mundo
material consciente (la tierra). Esto cuadra muy bien con la posición astronómica de este cuerpo celeste,
entre Neptuno y Saturno.

Neso es, como hemos visto, uno de los pocos centauros que sobreviven a la guerra con los lápitas. Se
establece junto al río Eveno y dice, a cualquiera que le quiera escuchar, que los dioses han reconocido
su nobleza. Como premio, le han dado el cargo de ayudar a los caminantes que han de cruzar el río.
Pero en esto, sólo podemos creer su palabra, ya que ningún relato confirma este favor de los dioses.

La versión de que el pago por el cruce de Heracles es que Neso lleve a Deyanira sobre su lomo resulta
interesante. Por un lado, es extraño que, si el héroe cruza por sus propios medios, ofrezca como peaje
que el centauro realice el esfuerzo de cruzar a su esposa. De alguna manera, esta forma de narrar la
historia lleva a pensar que Heracles está ofreciendo a su esposa al centauro. O al menos, que el centauro
entienda que, si ha de cobrarse con algo, será con el cuerpo de Deyanira. Si fuera así, podríamos
entender que la naturaleza animal de Neso se sienta justificada a la hora de intentar la violación de la
mujer.

Esta versión de la historia también da una explicación alternativa a la venganza de Neso. Si Heracles ha
cruzado sin pagar peaje, si ha engañado al centauro para hacerle creer que podría tomar a Deyanira
como pago, y si lo que obtiene al final es una flecha clavada en su corazón, resulta razonable que quiera
castigar al héroe. Aquí, más que de una venganza, estaríamos hablando de un acto de justicia más allá
de la muerte.

Pero la versión más extendida del mito es la que dice que Neso se ofrece a llevar a Deyanira y que
decide cobrar su trabajo abusando de ella. Se aprovecha de que Heracles ha quedado en la orilla
contraria del río y por tanto es doblemente culpable. Porque hay que recordar que el propio Neso ha
engañado a Heracles diciendo que los dioses le han premiado por su rectitud moral, motivo por el cual,
le ha confiado a su esposa.

Por este motivo, Neso, que es uno de los pocos centauros destacados que desciende del malvado Ixión,
resulta estar más cerca de la parte animal que de la humana. En esto, es similar a todos los centauros de
esta línea familiar, en los que prevalece la parte instintiva sobre la racionalidad.

Agrediendo a Deyanira, el hombre-caballo actúa guiado por la parte más baja de su naturaleza, y sólo
cuando ve que su muerte es inminente, recurre a la astucia propia de un humano malvado. Su venganza
se servirá en plato frío, haciendo que sea Deyanira el brazo ejecutor y buscando causar el mayor
sufrimiento posible. Como podemos suponer, el sufrimiento de Deyanira será psicológico y moral,
mientras que el de Heracles es evidentemente físico.

Hay que dedicar un comentario a la muerte de Heracles y a la motivación de su esposa. Es evidente


que, por malvada que sea la mentira de Neso acerca de la naturaleza de la pócima, su treta no habría
tenido ningún éxito si Deyanira no se hubiera dejado llevar por los celos. Se comprueba aquí que, si el
centauro ha tenido éxito en su venganza, es precisamente por haber apelado a la parte menos
evolucionada de Deyanira, a aquella que considera que Heracles sólo puede ser suyo y de nadie más.
De este modo, la acción de Neso tiene el valor de manifestar algo que ya estaba implícito en la relación
de Deyanira y Heracles, la probable infidelidad de él y los comprobados celos de ella.

El símbolo astrológico de Neso es bastante complejo, puesto que representa una evolución desde lo
instintivo hacia una mente calculadora, capaz de trazar planes a largo plazo y cuyo resultado final no
siempre se puede presenciar o disfrutar. Por ese motivo, tenemos que apreciar el valor de este cuerpo
celeste más allá de que el centauro nos resulte poco atractivo o incluso detestable. El símbolo de Neso
apela a algo más profundo.

Porque más allá de que veamos a este centauro como un mensajero de los dioses que aplica una suerte
de justicia a través de la venganza, o más bien como un ser malvado, que busca provocar el mayor daño
posible, Neso nos habla de resultados que se buscan y se obtienen a largo plazo. La evolución del
centauro desde su parte instintiva a su vertiente humana, revela una conciencia que es capaz de sacar a
la luz aquello que está oculto, o que contribuye al restablecimiento del orden en el mundo.

Neso es la demostración de aquella frase que dice que "dios escribe recto con renglones torcidos". Neso
es el instrumento por el cual, Heracles y Deyanira reciben un castigo probablemente merecido, aunque
demasiado cruel. Aun sirviéndose de un ser innoble, los dioses consiguen que la verdad, por
desagradable que sea, y la justicia, por dura que resulte, acaben venciendo. Quizás, la afirmación de que
Neso había sido reconocido por los dioses, no sea tan falsa como parecía en un principio.
Neso en la Carta Natal
Como sucede con Folo, el centauro Neso tiene una órbita bastante irregular desde el punto de vista de
la Tierra. La consecuencia de este movimiento es que se demore en algunos signos durante más de
treinta años, mientras que otros los recorre en apenas tres. De este modo, el paso de Neso por Aries o
Tauro, tiene un componente más generacional que personal, al contrario de lo que sucede cuando se
mueve por Libra o Escorpio. Esto debe ser tenido en cuenta en la interpretación.

Neso en los Signos


Neso en Aries

Neso estuvo en Aries entre 1911 y 1940. Volverá a este signo en 2032.

Aquí, Neso tiene un componente de tipo generacional, por lo que no se debería interpretar de un modo
estrictamente personal. Para esta generación, el centauro trae un mensaje acerca de la validez o no de la
justicia, tomada como algo personal. Si buscan una respuesta inmediata de los cielos, una especie de
justicia universal, los individuos nacidos en este ciclo pueden sentir que no siempre la divinidad les
hace caso, lo que les puede causar una cierta desesperación. Los actos apresurados en busca de justicia
o de verdad, pueden traer consecuencias poco agradables. No hay una visión a largo plazo.

Neso en Tauro

Este centauro pasó por el signo de Tauro entre 1938 y 1963.

Como sucede en el caso anterior, Neso ha estado demasiado tiempo en este signo como para que pueda
considerarse su influencia en un plano estrictamente personal. Para estas personas, el concepto de la
justicia divina se relaciona con todo lo que se puede conseguir de un modo material, concreto. Así, la
prosperidad que se da a lo largo de su vida, es un resultado natural a sus desvelos. Los resultados se
buscan a largo plazo, acompañados de cierta paciencia antes de obtener los resultados. Se trata de
personas que saben esperar la recompensa de sus duros esfuerzos.

Neso en Géminis

El paso de Neso por Géminis se prolongó entre 1961 y 1976.

Durante los años en que el centauro se mueve en este signo, influye en el colectivo trayendo un
sentimiento de que el mundo mental y la capacidad de comunicación son elementos que pueden
restablecer la justicia y el orden en el universo. El énfasis se pone aquí en los estudios, en el desarrollo
de las ideas como medios para crecer y obtener resultados a largo plazo. Se trata de una generación que,
de manera general, siente que es justo prosperar a través del esfuerzo intelectual y de la expresión de la
individualidad.

Neso en Cáncer

Neso estuvo en Cáncer entre 1974 y 1982.


Para las personas que tienen a Neso en el signo de Cáncer, la idea de justicia se relaciona con
sensaciones emocionales bastante intensas. Aquí estamos ante individuos que pueden sentir que el
mundo no les trata con equidad, o que sus esfuerzos no tienen la misma recompensa que los de las
generaciones que les preceden. En este colectivo humano, que engloba a muchos individuos, persiste la
idea de que todo lo que se obtiene, se relaciona con las conexiones familiares o con la capacidad de
desarrollar vínculos provechosos con otros individuos. Existe una cierta paciencia a la hora de esperar
resultados.

Neso en Leo

Neso se movió por los terrenos de Leo entre 1982 y 1986.

Aquí, Neso empieza a moverse en períodos de tiempo que muestran una influencia claramente personal
del centauro. Entre estos individuos, predomina la sensación que la justicia se obtiene a través de su
propia valía. De un modo valiente y generoso, ellos creen que el mérito personal es importante, y se
esfuerzan por desarrollar planes que den buenos rendimientos en el futuro. Aun así, existe cierta prisa
por obtener resultados, por lo que se pueden desilusionar si no obtienen pronto lo que desean. También
pueden ser víctimas de sí mismos si creen que todo lo que hacen debe servir para su beneficio personal.
Serán más felices si aprenden a ser generosos con todo lo que obtienen.

Neso en Virgo

Entre 1986 y 1990, Neso se movió por el signo de Virgo.

Cuando Neso está en el signo de Virgo, tiende a crear la sensación de que la justicia es algo que sólo se
logra con un esfuerzo muy persistente y dedicado, poniendo todo el empeño en cada pequeño detalle.
Estas personas pueden sentir que sus desvelos sólo obtienen recompensa si están dirigidos hacia metas
muy concretas. En todo momento, ven los objetivos como algo lejano, que nunca se termina de
alcanzar, pero por lo que merece la pena luchar sin descanso. Si aprenden a reconocer cada pequeño
logro como un paso más, válido por sí mismo, harán que la vida sea más beneficiosa para ellos.

Neso en Libra

Entre 1989 y 1992, este centauro se desplazó en los terrenos de Libra. Este es el período más breve que
Neso pasará en un signo para todas las personas que estamos vivas en este momento.

Aquí, Neso invita a buscar resultados a largo plazo en todo lo que se vincula con las relaciones más
cercanas. Libra es un signo que se asocia a la justicia y, de algún modo, puede hacer que las personas
con esta posición busquen ser justicieras de un modo muy particular, que no siempre coincide con los
códigos legales o con las normas sociales. Ellos creen que todo se debe regir por ciertas leyes, y se
sorprenden cuando comprueban que la vida no siempre es justa, y que la coherencia no es lo que más
abunda en la sociedad. Estas personas están desarrollando nuevos patrones en sus relaciones
personales, pero no deberían engañarse con respecto a temas como los celos o la infidelidad, que
siempre están presentes y que tienen un efecto emocional muy profundo en la psique.

Neso en Escorpio

Neso estuvo en Escorpio entre 1992 y 1995.


En el signo de Escorpio, Neso nos muestra una de sus facetas más complejas. Estas personas corren el
riesgo de aceptar la parte menos favorable del personaje mitológico, y si no aprenden a mirar la vida en
un sentido amplio, pueden acabar tomando revancha con aquellos que hayan podido actuar de un modo
que ellos consideran inapropiado. Hay un cierto tono justiciero en esta posición, como ocurre con el
caso de Libra, pero aquí la justicia se percibe como reivindicación de las propias ideas y como castigo a
quienes han hecho daño al nativo. Es una visión algo parcial, que se beneficiará del hecho de que otras
partes de la Carta les ayuden a tener una mayor amplitud de miras.

Neso en Sagitario

Entre 1995 y 1999, Neso estuvo transitando por el signo de Sagitario.

Para los nacidos en este período temporal, el simbolismo de Neso tiene unas repercusiones bastante
amplias. Ellos pueden llegar a entender que los esfuerzos o desvelos que realizan en cada momento
deberán tener una recompensa más adelante. Con el tiempo, los individuos nacidos en esta franja
temporal, sentirán que existe una lógica en la manera en que el universo reparte sus beneficios e
incorporarán esas ideas en un contexto espiritual y filosófico más amplio. Habrá que esperar a que estos
seres maduren para que, a la luz de sus experiencias, sepan encajar las crisis de este siglo XXI dentro de
un sentimiento de justicia universal.

Neso en Capricornio

Neso se movió por el espacio de Capricornio entre 1999 y 2005.

Las personas que han nacido en este intervalo temporal, son individuos que crecerán con la sensación
de que sólo el trabajo duro da frutos a largo plazo. Para ellos, la vida es un campo de entrenamiento
donde están dispuestos a dar lo mejor de sí mismos. Creen que alcanzar las posiciones más elevadas es
algo que se encuentra en su destino. Pero las circunstancias servirán para medir el verdadero valor de
cada cual. Es de esperar que aquellos que no logren sus metas eviten culpar al destino o a la mala
suerte. Para los más evolucionados, la percepción de que cada cual debe ser un guía, un orientador de
los demás, les ayudará a superar cualquier dificultad y les pondrá en el camino del verdadero éxito. Así,
sentirán que la vida es verdaderamente justa con quien lo merece.

Neso en Acuario

Entre 2005 y 2015, Neso se ha movido por el signo de Acuario.

Los seres que han nacido bajo esta influencia generacional de Neso, apenas están viviendo los primeros
años de su vida en el momento de escribir estas líneas. Lo más probable es que se trate de personas que,
cuando lleguen a la edad adulta, sean capaces de trabajar en equipo para obtener resultados a largo
plazo. Para ellos, la justicia se construye a partir de una visión progresista y optimista de la vida. Creen
que, si construyen un mundo más igualitario y respetuoso con todas las opciones vida, habrá más
justicia para todos. Su confianza en la bondad intrínseca del ser humano, es notable.

Neso en Piscis

Neso ha entrado en Piscis en 2014 y estará en este signo hasta 2034.

Esta es la posición de Neso en el momento de escribir este libro, así que nos queda un tiempo para
saber cómo influirá el centauro en los niños y niñas que están naciendo justo ahora. Se puede esperar
que esta influencia, de carácter más generacional que personal, active en ellos un sentimiento de justicia
más cercano a la espiritualidad que a los puros afanes materiales. Es posible que sepan que, sólo desde
la conexión con los sentimientos más nobles y caritativos, el mundo podrá transitar a través de los
tiempos que se avecinan. Si estos seres saben encontrar lo mejor de esta energía, construirán una
sociedad donde el amor, y no el poder, rinda resultados a largo plazo.

Neso en las Casas


Neso en la Casa 1

Cuando Neso se sitúa en la primera casa del cielo, y especialmente si está cerca del Ascendente, aporta
un matiz muy personal a la manera en que se siente o se ejerce la justicia divina. Aquí nos encontramos
con personas que sienten que los resultados de sus actos deben amoldarse a su particular visión de la
realidad, y cuando esto no ocurre, se sienten enfadados con otras personas o con la vida en general.

Cuando realizan una tarea o un trabajo, ellos quieren tener resultados rápido, y siempre buscan que
aquello que hacen esté enfocado a su propio beneficio. Si se trata de personas de mentalidad poco
desarrollada, no tendrán reparos en hacer lo que sea para obtener lo que anhelan. Pero cuando estamos
ante mentes más elevadas, buscarán con sus desvelos un resultado inmediato a sus actos. No siempre lo
encontrarán, pero siempre lo perseguirán desde una perspectiva muy personal, valorando lo que
obtienen según sus propios parámetros mentales.

Neso en la Casa 2

En la Casa 2, Neso se sitúa en una posición donde se vuelve importante entender la justicia como algo
que se alinea con los valores personales. Aquí nos encontramos con seres que creen fuertemente en la
importancia de la equidad en todos los ámbitos de la vida, y la conectan con sus creencias más
profundas. De este modo, se sienten más seguros.

Cuando hacen un esfuerzo, quieren ver los resultados en el ámbito material. Si triunfan u obtienen lo
que desean, sentirán que todo es justo y correcto. Pero en caso contrario, pueden estar resentidos, e
incluso fantasear con la venganza. Por ese motivo, ponen en juego todo lo que sienten, todo lo que les
define, en pos de sus objetivos. Alineando sus valores personales con sus iniciativas, pueden tener
éxito, pero deben aceptar que no siempre la vida les entregará todo lo que piden.

Neso en la Casa 3

Cuando Neso se sitúa en la Casa 3, expresa sus contenidos en el área de la mente y de la expresión. Es
una situación donde se intentan lograr grandes resultados usando estos dos medios, y cuando se
obtienen, se genera una enorme satisfacción. El problema surge cuando los desvelos no logran generar
esos efectos, ya que la persona se pierde en razonamientos que buscan la explicación a su aparente
fracaso. Incluso, hablará de ello con otros, buscando una respuesta inalcanzable, ya que la justicia
universal no es algo que pueda ser totalmente comprendido por nuestra mente limitada. En definitiva,
buscan entender con su mente algo que no cabe dentro de la misma.

No se puede descartar que haya conflictos con hermanos o con primos con esta ubicación del centauro.
Como en todos los casos, es el individuo el que elige la manera de utilizar la energía de este cuerpo.
Quizá espere que los hermanos actúen de un modo adecuado a sus pensamientos, lo que le llevará a
más de una frustración. O bien puede asumir que cada quien es dueño de su destino, entendiendo que la
justicia universal no opera de acuerdo a nuestros pequeños deseos. Si entiende esta disyuntiva, vivirá
con menos peso. Aun así, se trata de personas que quieren resultados rápidos que se manifiesten en su
día a día, cosa que no siempre van a conseguir.

Neso en la Casa 4

Esta es una posición de cierto privilegio para Neso, sobre todo si está cerca del Bajo Cielo. Aquí, el
centauro nos muestra de qué manera es necesaria la integración del mundo familiar en nuestra
percepción de cómo se ejecuta la justicia. Hay un cierto tono karmático en esta situación, puesto que
existe la posibilidad de que se haya recibido algún tipo de bendición o maldición familiar, en la cual, el
individuo no parece haber tenido ninguna responsabilidad.

Las tareas que se ejecutan en el hogar, los esfuerzos que se ponen a contribución del bienestar de la
familia, obtienen resultados a largo plazo y, si el individuo tiene la paciencia y la persistencia
adecuadas, traen una satisfacción muy profunda. Los antepasados, las personas de mayor edad, incluso
los jefes o superiores, tienen una influencia en la manera en que se percibe qué es lo correcto o lo
incorrecto. El sentimiento de que se hace justicia vendrá mediatizado por esas figuras a las que se dota
de cierta autoridad moral.

Neso en la Casa 5

En la Casa quinta del cielo, Neso se relaciona con la parte más luminosa, creativa y generativa del ser.
Se da entonces un fuerte contraste entre las energías oscuras y complejas del centauro con las
características de esta posición. Por este motivo, podemos encontrarnos con personas que saben
esforzarse y obtener excelentes resultados con relativamente poco esfuerzo, pero que no siempre
valoran correctamente lo obtenido.

Si desean tener resultados rápidos o que la suerte les sonría siempre, pueden sentirse algo desanimados,
ya que lo que consiguen nunca está a la altura de sus ideales. Pero si saben valorar lo que la vida les
trae como recompensa a sus desvelos, sin duda encontrarán mucha satisfacción aun en los pequeños
regalos de la existencia. Aquí es importante entender que la generosidad desinteresada, suele traer
resultados positivos a largo plazo que deben ser reconocidos como tales.

Neso en la Casa 6

Cuando se ubica en la Casa sexta del cielo, Neso nos muestra cómo los pequeños esfuerzos cotidianos
traen resultados que pueden ser justamente valorados por la persona. Si el individuo se alinea con la
parte más positiva de este símbolo, encontrará que todo lo que hace de manera cotidiana tiene
resultados apreciables a medio y largo plazo. Aunque estas recompensas sean pequeñas, ellos ven en
ellas la mano de la justicia divina actuando en su existencia.

Pero cuando la persona vive en la parte menos desarrollada de Neso, nos encontramos con aquellos que
critican continuamente los pequeños o grandes contratiempos que la vida les presenta. Estos individuos
desearían que todo fuese fácil y perfecto, y creen merecer una vida libre de cualquier conflicto. Pero
cuando estos surgen, emerge en ellos la sensación de que han sido estafados por algún ser superior. O
bien critican sin piedad sus condiciones actuales, sin valorar todo lo positivo que también les llega de
manera cotidiana. Como en todos los casos, vivir en un extremo o en otro de la energía de Neso
depende de cada cual, del grado de conciencia que queramos desarrollar.
Neso en la Casa 7

En la posición de la Casa 7, y especialmente cuando se halla cerca del Descendente, Neso destaca como
uno de los centauros más importantes de cualquier natalidad. Se trata de una posición en la que se
tiende a vivir los temas relacionados con la justicia y la justa recompensa a través de las relaciones más
comprometidas. Esto será muy evidente en el caso de los vínculos de pareja, pero también en las
sociedades comerciales o en las amistades más íntimas.

Estos individuos pretenden que todos sus desvelos hacia el otro reciban una justa recompensa, al
menos, según sus propios deseos. En algunas ocasiones, recibirán ese premio, pero en otras, no será así.
De todos modos, lo más importante será aprender a aceptar que la justicia universal no es algo
inmediato, ni se acomoda a los deseos del ego. Es un proceso atemporal y alejado de cualquier
interpretación humana. Si algunos aspectos lo indican, esta es una posición donde se corre cierto
peligro en caso de separación matrimonial o de conflicto laboral. La otra parte puede actuar de un modo
vengativo, o puede ser el nativo quien desee tomar revancha. Esta actitud vindicativa no suele traer los
mejores resultados.

Neso en la Casa 8

Ubicado en la Casa 8, Neso expresa su potencial a través de actos esforzados que pueden, o no, obtener
un resultado en esta vida. En muchas ocasiones, las personas con esta posición del centauro pueden
sentir que todo aquello que hacen carece de resultados concretos, o que lo que obtienen no está a la
altura de lo que creen merecer. Esto los puede llevar a sentir un sordo rencor que no siempre se
manifiesta claramente. Aquí nos encontramos con las personas que sienten que la vida les ha estafado,
que no se merecen lo que reciben.

Pero más allá de esta sensación, estos individuos tendrán que reconocer que, en muchas ocasiones, lo
que esperan no es el fruto de sus desvelos, sino que confían en exceso en aquello que los demás les
pueden proporcionar. En la medida en que sepan desarrollar sus proyectos por sí mismos, desarrollarán
la mejor parte de esta posición, que consiste en su capacidad de ir a lo más profundo, escondido y
difícil, para obtener de ello, algo de provecho.

Neso en la Casa 9

Si Neso aparece en la Casa 9 natal, revela la necesidad de alcanzar una comprensión más amplia de
todo lo que se relaciona con la justicia y con el resultado a largo plazo de los esfuerzos. Aquí nos
encontramos en una buena posición del centauro, o al menos, en una de las menos difíciles. Estas son
las personas que entienden que el mundo es un territorio de aprendizaje, donde deben desarrollar al
máximo todo su potencial y donde existe una ley suprema de causa y efecto.

Ellos se dedican a reconocer todos los pormenores de esa ley de causa y efecto y pueden incluso educar
a otros para que entiendan cómo opera en sus vidas. Saben mirar a largo plazo, tienen paciencia y
aprecian cada logro. Cuando los resultados no son los esperados, les viene bien tener un marco
filosófico o moral que les ayude a superar el golpe. Sea como sea, están en la mejor posición para
superar cada obstáculo y encontrar, a largo plazo, un resultado mejor tras cada intento.

Neso en la Casa 10

Cuando Neso se sitúa en la Casa 10, y especialmente si está cerca del Medio Cielo, adquiere un cierto
protagonismo en la Carta Natal. Esta es una posición donde las personas están muy orientadas a creer,
fruto de un sentimiento de justicia, que todo lo que obtienen en la vida se relaciona con sus acciones.
No se trata de seres que dejen todo a la suerte, sino de individuos que trabajan duramente para obtener
los mejores rendimientos de acuerdo a un sentimiento de redistribución universal.

La vida laboral es un ámbito donde se empeñan con gran energía. Saben que, si dan todo de sí,
obtendrán resultados a sus esfuerzos. Así que pueden esperar el tiempo necesario para recibir las
recompensas, especialmente si otros aspectos de la Carta señalan que se trata de seres laboriosos y
pacientes. En todo caso, quienes tienen esta posición del centauro, poseen la capacidad de ver la parte
más positiva de cada resultado, comprendiendo que todo se produce de acuerdo a un plan superior. Pero
si trabajan duro para lograr lo que desean, esperarán, de modo natural, los mejores efectos.

Neso en la Casa 11

Si Neso está situado en la Casa 11 del cielo, se encuentra en una posición donde los esfuerzos del
individuo tienen una profunda conexión con lo colectivo. Las personas con esta ubicación del centauro
sienten que tienen que desarrollar sus esfuerzos y alcanzar los resultados en compañía de otros, o ante
la mirada de los demás. Esto añade una nueva dimensión al simbolismo de este cuerpo, puesto que nos
orienta a entender que lo que obtenemos, no es sólo para nosotros, sino que debe tener un impacto en el
entorno.

Si las cosas no salen como se desea, quizás culpen a los demás, o sientan vergüenza de haber fracasado
en público. Pero no deberían tener esa actitud, sino que sería más provechoso para ellos comprender la
motivación profunda de sus actos. Desarrollar actividades con los demás, o para ellos, requiere una
cierta dosis de generosidad y un desprendimiento ante los resultados. Cuando estos individuos
comprenden que hay una justicia universal que opera más allá de los deseos de su ego, adquieren la
paciencia necesaria como para ir más allá de lo inmediato. Si ponen sus miras en lo más alto, llegarán
mucho más lejos que la mayoría.

Neso en la Casa 12

La posición de Neso en la Casa 12 es una de las que mejor predispone a aceptar resultados a largo
plazo. Aquí nos encontramos con individuos que saben que todo lo que tiene un auténtico valor, se hace
esperar. Aun así, cabe la posibilidad de que no siempre se alcancen los éxitos que se desean, y por
mucho que la persona intente avanzar, algunas metas parecerán estar siempre a la misma distancia que
al comienzo. Para ellos, siempre hay algo lejano, remoto y deseable que se les escapa entre los dedos.

En todo caso, para estos individuos, la manera en que se desarrolla la existencia posee un orden
implícito que les resulta vagamente conocido. Pueden sumergirse en él, quizás de no de un modo
racional, pero sí profundamente emocional. De este modo, alcanzan una comprensión muy elevada
acerca de la justicia divina y cómo ésta se manifiesta en el plano terrestre. En los planos superiores de
esta posición, nos encontramos con seres que viven de manera apacible con los designios del destino,
rindiéndose a cada paso a lo que sienten que es un poder superior. Pueden ser grandes maestros y
siempre dejan una huella positiva en el mundo.

Aspectos a Neso
No es fácil asumir el papel más positivo de la energía de Neso, puesto que se requiere una visión muy
amplia y una buena dosis de paciencia antes de obtener los resultados deseados. Pero cuando este
cuerpo se encuentra en aspectos fuertes con los planetas, tenemos una mayor capacidad para integrar
ese simbolismo en nuestra vida. Esto es especialmente cierto cuando Neso se encuentra en aspecto al
Sol. En estos casos, los temas relativos al centauro se hacen muy patentes en la existencia de la persona.
Estos son los seres que pueden asimilar mejor los reveses de la vida, así como sacar el mejor partido de
sus triunfos. Aunque quizás no sean los individuos más pacientes del mundo, están en sintonía con un
poder superior que, si saben dejar de lado las trampas del ego, les sitúa en la mejor posición para
comprender los vaivenes del destino. En cambio, cuando es la Luna quien aspecta a Neso, lo que prima
es el sentimiento de que todo lo que sucede, los resultados de los actos, causa un profundo efecto
emocional. Así que, si no hay una cierta dosis de objetividad en estas personas, pueden identificarse en
exceso con los resultados inmediatos de sus afanes, perdiendo de vista el hecho de que todo lo que
ocurre obedece a un plan mayor. De todos modos, ellos acaban por reconocer que cada cosa ocurre en
el momento correcto, siguiendo ciertos ciclos que no siempre nos es dado conocer.

Cuando está en aspecto a Mercurio, el centauro nos ayuda a comprender y expresar mejor todos los
temas que se relacionan con su simbolismo. Así, podemos analizar con más objetividad el resultado de
nuestros esfuerzos, dándoles un sentido dentro de un contexto filosófico más amplio. Si es Venus el
que aspecta a Neso, nos muestra la manera de asimilar su energía de un modo abierto y poco
traumático. Aquí existe la posibilidad de expresar los anhelos por la justicia y por un futuro mejor de un
modo más suave y armónico que si está en contacto estrecho con Marte. En el caso de que sea el
planeta rojo quien aspecte a Neso, nos encontramos con que su simbolismo puede ser expresado de un
modo algo impaciente, lo que no casa bien con las características del centauro, que requiere algo más
de tiempo en su acción. De este modo, puede predisponer a reacciones algo airadas cuando las cosas no
salen como se espera, o a tener un concepto demasiado particular acerca de lo que es justo o no.

En cambio, Júpiter nos acerca a una visión más amplia de la energía de Neso, permitiéndonos
comprender los grandes temas que se ocultan tras el éxito o el fracaso de nuestros deseos. Esta
conexión es muy oportuna para situar a la conciencia en sintonía con la justicia divina. Saturno
expresa los símbolos de Neso de un modo restrictivo. Aquí pueden surgir algunos de los temas más
complejos del centauro. Aceptar que no todo lo que intentamos tenga el mejor resultado, es algo que no
suele ser común. Sin embargo, Saturno nos otorga un aura de seriedad y de compromiso que puede ser
útil para manejar las peores situaciones, evitando el riesgo de caer en la desesperación.

Cuando Neso conecta con Urano, manifiesta la parte más rebelde de la energía de este centauro. Aquí
nos encontramos con aquellos momentos en que el ser se manifiesta contra el destino y busca salirse
con la suya. Es la zona de nuestra experiencia en que buscamos soluciones inmediatas y que se
acomoden a nuestros deseos, pero también puede ser un punto de inflexión donde aprendamos a ver
todas las experiencias con amplitud de miras. Neptuno, en cambio, tiende a nublar algunas de las
percepciones que Urano nos trae con tanta perspicacia. Este planeta nos puede confundir con la misma
facilidad con que abre nuestra imaginación para proporcionarnos otra visión de la justicia divina. Todo
depende del grado de conciencia de la persona. El grado de conciencia es también importante cuando
Neso conecta por aspecto estrecho a Plutón, ya que puede dar tanto la sensación de que podemos
manipular el destino como la confianza en que, tras cada caída, nos podemos levantar, que la mano de
la divinidad siempre nos ayuda a salir adelante.

Revolución de Neso
Nadie va a vivir una revolución de Neso, entendiendo como tal, el retorno del centauro al lugar exacto
que ocupaba en el momento del nacimiento. Los 122 años de su período orbital no lo hacen posible.
Pero la mayor parte de las personas sí que experimentarán el paso de este cuerpo por el lugar opuesto a
su posición natal, y con toda seguridad, la primera cuadratura.
Esta primera cuadratura, que se da en torno a los 30 años de edad, genera una primera confrontación
con los temas del centauro. Aquí es donde sentimos que nos urge encontrar respuestas al hecho de que,
a veces, por más que nos esforcemos, algunos proyectos salen bien y otros no. No hay que perder de
vista que este aspecto coincide en el tiempo con el primer retorno de Saturno. De manera que viene a
reforzar una cierta sensación de desazón en cuanto al futuro, pero también la promesa de que, si
actuamos de un modo serio y paciente, antes o después, los frutos llegarán.

La oposición de Neso a su lugar radical se da en torno a los 61 años, de promedio, aunque debido a la
órbita de este centauro, esa edad puede variar sustancialmente. Sea como sea, es un retorno que se da en
un momento de mayor madurez, donde algunas lecciones han sido aprendidas y asimiladas. Ahora es
más fácil comenzar a comprender las grandes fuerzas que actúan sobre nuestra vida, y aunque nunca se
alcance una comprensión plena, el ser está más dispuesto a alinearse con el propósito divino. Esto, al
menos, es lo que se puede esperar de las personas más desarrolladas.

Para los que viven en la inconsciencia, es un período de desánimo y cierta desesperanza, donde incluso
pueden tener deseos de venganza ante aquello o aquellos que le han perjudicado en su desarrollo.
Entender que hay que dar pasos adelante, que hay que abrir la mente a una visión más calmada y
orientada al perdón, es algo que puede hacer más felices los últimos años de la vida.

Neso y los eclipses


Cuando Neso es tocado por algún eclipse, solar o lunar, nos permite reconstruir nuestra percepción de
este centauro. Para las personas que lo viven de manera inconsciente, sin saber que el eclipse está
afectando a este punto, podemos esperar que se produzcan algunos tropiezos que les hagan dudar de la
justicia divina, o del justo premio a sus esfuerzos. Incluso pueden padecer por algún acto de venganza
de la que sean víctimas, o quizás sean ellos mismos quienes quieran tomar revancha contra alguien.
Esto nunca dará un buen resultado.

Pero para aquellos que se anticipan a los acontecimientos, el eclipse les trae la conciencia que el ser
humano debe inclinarse ante designios que le superan, alineándose con el perdón y la paciencia. Es un
buen momento para proyectar a largo plazo, para crear posibilidades que no tendrán resultados más que
en un tiempo futuro. Si estos planes se hacen con la humildad necesaria para entender que todo está
sujeto a lo que nuestra divinidad interior busca para nosotros, sin duda esos planes traerán grandes
recompensas. Esto es, verdaderamente, alinearse con el plan divino.

Neso en sinastría
Neso es un centauro que tiene ciertas implicaciones en el mundo de las relaciones personales. Por un
lado, refleja aquellas partes de la relación donde necesitamos sentir que se hace justicia con nuestras
emociones, pero no en el corto plazo, sino de un modo más panorámico y dilatado en el tiempo. Neso
señala dónde puede fallar una relación si las personas que la conforman no se sienten correctamente
valoradas. Pero también nos puede mostrar, en un plano positivo, qué puede salir reforzado cuando la
valoración y el amor, son mutuos.

Tampoco se puede dejar de lado la parte más indómita de este centauro. Como en el relato mitológico,
Neso busca la satisfacción de sus deseos y se siente herido cuando se le impide tomar lo que considera
suyo. Así que, en un plano más negativo, puede manifestar aquellas áreas de la relación donde
queremos obtener algo del otro sin que importen los medios. Cuando este deseo no es reconocido como
tal, o cuando la parte más inmadura de la personalidad sale a relucir ante la imposibilidad de obtener lo
que quiere, pueden surgir arrebatos de ira o cierto espíritu de venganza.

Es importante que, en una relación, se enfoquen estos temas, que suelen provenir de carencias infantiles
o de asuntos sin resolver con alguno de los progenitores. Actuando sobre estas áreas inmaduras,
poniendo luz en ellas, podemos mejorar sensiblemente los vínculos y evitar mucho dolor.
Asbolo

Nombre Astronómico: (8405) Asbolus

Categoría: Centauro

Región: Entre las órbitas de Júpiter y Neptuno

Descubierto por: J. V. Scotti y R. Jedicke, el 5 de abril de 1995 (09:26:20 horas), en Kitt Peak
(Arizona, Estados Unidos)

Distancia al Sol (ua): 6,8145 - 29,118

Período orbital (años): 76,15

Diámetro (km): 80

Notas sobre el descubrimiento: Se sabe que ha sido objeto de un impacto reciente en su superficie
(hace menos de 10 millones de años), ya que muestra señales de hielo blanco. Los centauros suelen
tener una superficie de hielo oscuro más antiguo.

Glifo: Presenta una "A", de "Asbolus".


El mito de Asbolo
Asbolo es uno de los pocos centauros que posee, junto a Quirón, cierta sabiduría innata. En los mitos
griegos, se dice de él que es una especie de vidente o augur. La especialidad de este centauro consistía
en interpretar el vuelo de las aves, que era una forma de adivinación reconocida en el mundo antiguo.

El término "asbolo" parece provenir de una raíz griega que se podría traducir como "del color del
hollín" o "polvo de carbón".

Al parecer, gracias a sus capacidades, Asbolo adivinó que los centauros acabarían entrando en guerra
contra los lápitas como consecuencia de los sucesos de la boda de Piritoo e Hipodamía. De este modo,
intentó alertar al resto de los de su especie para que no acudieran a la celebración, sin éxito.

Tal y como relata Ovidio en sus "Metamorfosis", Asbolo (llamado aquí Ástilo) le dijo a Neso que él no
necesitaría huir de aquella batalla, sino que estaría a salvo hasta el día en que Heracles le clavara una
flecha, lo cual, como ya sabemos, acabó ocurriendo en las orillas del río Eveno.

Cuando Heracles visita a Folo y éste abre la jarra de vino que traerá la desgracia a los centauros,
Asbolo está presente y hay quien dice que fue él mismo quien comandó al grupo de centauros que
asaltó la cueva del monte Foloe.

Hay quien dice que Asbolo fue crucificado por las flechas de Heracles en la terrible refriega que siguió
a este asalto. Así, encontró el mismo final que el sabio Quirón y el desgraciado Folo.
Simbolismo Astrológico de Asbolo
Asbolo representa un simbolismo bastante interesante que, aunque en primera instancia no parezca
adecuado para todas las personas, sí que puede conectar con todos nosotros en algún aspecto.

Se dice de él que sabe leer el vuelo de las aves y obtener información acerca del futuro por ese medio.
De nuevo, al hablar de los centauros, nos encontramos el simbolismo del viento, expresado ahora a
través de estos seres que viven en el aire, a merced de las corrientes, los pájaros.

Asbolo realiza predicciones acerca de dos batallas en las que intervendrán los de su especie, la de los
lápitas y el conflicto en la cueva de Folo a cuenta del vino ancestral de los centauros. Resulta llamativo
que, conociendo lo que va a suceder, y aconsejando a sus congéneres que eviten el conflicto, él mismo
acaba participando en ambos.

La pregunta que surge entonces es ¿por qué? Ante esa pregunta surgen al menos dos posibles
respuestas, que aluden a la doble naturaleza, animal y humana, de este centauro.

Desde la perspectiva animal, podemos pensar que Asbolo, en ambas ocasiones, fue presa de sus
instintos. Acudió sin valorar el peligro, tanto a las bodas de Piritoo e Hipodamía, como al convite de
Heracles. No evitó ninguna de esas dos contiendas, como habría aconsejado la prudencia. Aspirando el
aroma del vino, quedó embriagado como cualquier otro centauro y perdió la cordura, convirtiéndose
entonces en una auténtica bestia capaz de violar o de matar.

Bajo esta explicación, Asbolo no puede escapar de un destino que conoce perfectamente porque la parte
animal ha prevalecido sobre la humana. El instinto ha ganado a la razón.

Pero si lo miramos desde la perspectiva humana, ¿por qué habría de acudir a un lugar donde sabe que
corre un serio riesgo de hacer lo que no desea, o de morir, como acaba ocurriendo?

Quizás Asbolo decidió luchar y morir con sus compañeros de un modo deliberado. Quizás entendió que
debía compartir el destino de los centauros, puesto que, a fin de cuentas, él era uno de ellos. ¿Qué
sentido tendría sobrevivir al noble Folo o al sabio Quirón, cuando él no era mejor que ellos?

Esta actitud es la que se puede observar entre los humanos cuando a veces se ven sometidos a
circunstancias extremas, en las que la sociedad entera se derrumba. Mientras unos huyen e intentan
ponerse a salvo, el pensamiento de otros ante la inminencia de un holocausto o en medio de una
tragedia colectiva es el siguiente. ¿De qué sirve la salvación individual cuando el colectivo al que uno
pertenece se extingue? ¿Merece la pena seguir viviendo cuando todos los seres que amas van a perecer?
¿De qué le sirve a Asbolo quedar con vida cuando todos los centauros van a ser exterminados? ¿Tiene
sentido vivir el resto de su existencia en soledad?

En el mito de Asbolo observamos, como en todas las historias de los centauros, una paradoja. El animal
que habita en él no puede evitar sentirse atraído por aquello que será su perdición, puesto que está
gobernado por el puro instinto. Pero su naturaleza humana tiene miras más elevadas. Es capaz de
sintonizar con el destino de su especie, de entregarse a él. Asbolo podría salvarse y no lo hace, porque
no puede y porque no quiere. Y ambas razones están operando al mismo tiempo.

Astrológicamente, Asbolo expresa la manera en que nos relacionamos con todo aquello que llega a
nosotros de un modo intuitivo. No todas las personas son profetas, pero todos los seres estamos
dotados, en mayor o menor grado, con el don de la intuición. Claramente, aquellos que tienen a Asbolo
ubicado en una posición destacada de su Carta Natal, sea porque está en conjunción con los ángulos, o
en las cercanías de un planeta, pueden tener estas cualidades intuitivas o proféticas más desarrolladas.
Pero también se puede activar esta capacidad a través de los tránsitos sobre este cuerpo.

Asbolo trae un toque de intensidad y de cierta acidez al carácter. Ser capaz de ver el futuro y al mismo
tiempo, saberse incapaz de evitar ese destino, es algo que puede crear un aura de intensidad trágica en
las personas. Esto es especialmente cierto cuando Asbolo está en posiciones importantes de la Carta
Natal. Los individuos marcados por esta posición son serios y quieren ser tomados en serio.

De la manera en que desarrollemos el simbolismo de este centauro, dependerá si actuamos como el


animal que, aun sabiendo el peligro, se lanza a por él, o bien tenemos la mente clara para tomar la
mejor decisión en cada momento.

Como sanador, Asbolo nos muestra que el camino para cicatrizar las heridas puede ser el de seguir
nuestra intuición. Quizás los momentos en que este centauro está activo, o cuando decidimos
conscientemente sintonizar con su simbolismo, es cuando sentimos que se nos puede revelar algo
oculto, algo que es el origen o la probable solución a nuestros males. Escuchar los augurios de Asbolo
puede evitar que entremos en una guerra que quizás nos sea desfavorable.

Asbolo no tiene por qué traer la tragedia a nuestra vida. Pero sí nos puede advertir acerca de dónde está
el peligro o la oportunidad. Será nuestra conciencia la que nos indique cómo actuar a partir de la
información que este centauro nos regala.
Asbolo en la Carta Natal
Abolo es uno de los centauros al que no se le puede atribuir una evolución tan definida como se puede
ver en el caso de Folo o el propio Quirón. Aquí, se requiere que cada uno de nosotros complete la
historia original, o por ser más precisos, que encuentre un final alternativo. ¿Qué hubiera pasado si el
centauro profeta hubiera hecho caso de sus propias profecías? ¿Qué hubiera pasado si hubiera
completado la evolución desde la parte animal a la plenamente humana? ¿Cuál habría sido su destino si
hubiera habitado entre los humanos a pesar de la muerte de su especie? La respuesta la tenemos que
construir a través de la posición natal de nuestro propio Asbolo interior.

Asbolo en los Signos


Asbolo en Aries

Cuando el centauro Asbolo se encuentra en el signo de Aries, manifiesta su poder de transformación en


todo lo que se relaciona con la propia identidad. Tenemos aquí a las personas que saben predecir o
visualizar la manera en que va a transcurrir su vida. En el mejor de los casos, son seres conscientes de
sí mismos, que pueden analizar sus propios pasos y conocer adónde les conducen. Tienden a guardarse
para sí mismos sus intuiciones, que se refieren por lo general a asuntos que sólo a ellos les competen.

Ahora bien, puede que se conviertan en personas demasiado serias o ensimismadas con lo que les es
propio, hasta el punto de no tener en cuenta las percepciones que otros les puedan aportar. Aquí, el
problema de ser demasiado unilateral en la percepción del futuro, puede pasar factura al individuo.
Tampoco se puede olvidar que algunas personas vivirán con la energía más baja de este centauro. Así,
tendrán buenas intuiciones acerca de hacia dónde deben dirigir sus pasos, pero no les harán caso, o
correrán en busca de su destino, aunque éste sea fatal. Tanto cuando se actúa por exceso, como cuando
se hace por defecto, encontraremos problemas.

Asbolo en Tauro

En el segmento celeste de Tauro, Asbolo se comunica con todo aquello que nos conecta con la realidad
material más inmediata. Las personas con esta posición del centauro, tienden claros destellos acerca de
cómo deberían desarrollar su vida práctica. Las ideas que se generan suelen ser realistas. Las visiones,
manifiestan formas simples de atender los problemas, o anticipan el resultado más previsible de
cualquier proceso natural.

Estas personas pueden encontrar cierto placer en desarrollar su intuición, o tienen destellos de sabiduría
que se relacionan con todo aquello que les genera placer y satisfacción sensorial. Conectados con los
aspectos más tangibles, ellos ven antes que nadie cómo sacar el mejor provecho de cada ocasión,
expresando en la vida cotidiana todo aquello que es agradable y digno de ser disfrutado. Pueden
fácilmente compartir esas intuiciones con las personas que aman.

Asbolo en Géminis

En Géminis, Asbolo nos presenta la imagen de alguien que tiene impresiones intuitivas muy rápidas.
Aquí nos encontramos con individuos que pueden captar muchas imágenes mentales acerca de los
posibles resultados de sus acciones. En ocasiones, estas intuiciones pueden ser acertadas, pero en otras,
quizás tengan un matiz demasiado mental y sean producto más del razonamiento que de la pura
intuición. En ocasiones, la mente de estos seres se mueve a tal velocidad, que no son capaces de
entender que lo que sienten, no es otra cosa que el resultado lógico de sus movimientos previos.

Aun así, estas personas tendrán un gran interés en compartir sus ideas, y pueden atraer la atención de
otros en este sentido. Muchas de sus intuiciones pueden tener una naturaleza dual, manifestando no
sólo el resultado más positivo de un acto, sino también las posibles derivadas negativas del mismo. De
este modo, en ocasiones oscilan entre varios extremos. Pero si son capaces de entender sus propios
procesos mentales y disciernen entre lo que es pura intuición, que no siempre está conectada con la
mente, con la propia acción de ésta, pueden tener destellos de inspiración muy destacables.

Asbolo en Cáncer

Cuando Asbolo se encuentra en el signo de Cáncer, revela la necesidad de manifestar sus intuiciones en
un ámbito bastante reducido. Aquí es el mundo familiar, o el ámbito de los contactos más cercanos, el
lugar donde se encuentran y se expresan las ideas que surgen de manera espontánea. Para estas
personas, resulta difícil dar a conocer lo que sienten íntimamente ante un público amplio, o en el ámbito
laboral o social.

Todas las percepciones que trae Asbolo a estos individuos están teñidas por un aura de tipo afectivo.
Por eso, a veces, sus sensaciones se mezclan con lo que desean, o con lo que temen, por lo que es
preciso hacer una labor de clarificación mental de todo lo que surge en su interior. Además, estas
intuiciones pueden estar enfocadas hacia los temas domésticos y a los problemas familiares. Cuando no
siguen estas percepciones interiores, sienten que su familia o sus seres más queridos pueden sufrir
algún tipo de problema. Abrir el abanico de temas, aprender a discernir entre percepciones y temores,
será muy apropiado para ellos.

Asbolo en Leo

En el signo de Leo, Asbolo da una dimensión muy luminosa a todo lo que se relaciona con la
creatividad y las nuevas ideas. Todo lo que surge como intuición, es percibido por estas personas de un
modo radiante y magnético. No es extraño que otros puedan sentirse atraídos por lo que ellos
manifiestan cuando están poseídos por estas energías creativas. Pero del mismo modo que estas ideas
llenan de claridad su mente, también es cierto que se trata, por lo general, de imágenes relacionadas con
su propio yo, con su propio potencial. Junto a esto, puede existir una cierta propensión a la teatralidad,
a la grandeza, en todo lo que imaginan o perciben de manera interior.

Si estos individuos son capaces de compartir lo que perciben, si tienen la capacidad de manifestar sus
capacidades creativas con otros, incluyéndolos en sus visiones, seguramente se abrirán a una
perspectiva más amplia. Ciertamente, hay un cierto grado de generosidad en la manera en que
manifiestan estas ideas, así que es apropiado intentar sentir no sólo lo que es lo mejor para ellos, sino
para el colectivo.

Asbolo en Virgo

Cuando Asbolo se encuentra en el signo de Leo, las percepciones de carácter intuitivo se relacionan
claramente con aspectos del día a día. Estas son las personas que pueden tener ciertas intuiciones acerca
de cómo realizar las tareas, o quizás sean aquellos que encuentran inspiración mientras realizan su
trabajo cotidiano. Sea como sea, estos individuos tienen una clara dirección hacia lo concreto, lo
material y lo que puede dar resultados en el corto plazo.

No se puede esperar de estas personas grandes percepciones de carácter universal, ni destellos de


filosofía que provienen de una fuente desconocida. Cuando sienten algo, cuando hay una corazonada,
suele estar enfocada a lo más inmediato, a lo pequeño y a lo que se realiza de manera repetida. Por eso,
sus habilidades prácticas pueden ser altas, si otras indicaciones del horóscopo así lo indican, ya que
tienen siempre la idea correcta de qué hacer a continuación en medio de una serie de actividades.
Cuando algo falla, encuentran rápidamente una solución que se puede aplicar fácilmente, y si no se les
hace caso, de algún modo, ellos sienten que lo presentían. Así, estas personas son los mejores a la hora
de dar una orientación material a sus percepciones intuitivas.

Asbolo en Libra

En el signo de Libra, las percepciones de Asbolo se relacionan con todo aquello que nos conecta con la
vida que se comparte con las personas más significativas. Aquí, el centauro crea percepciones que tiene
que ver con los demás, o con las relaciones personales. Es común que los individuos con esta posición
tengan intuiciones que les conectan con los otros, o que les muestran los conflictos ocultos, o las
soluciones a sus problemas de pareja.

En algunos casos, estos individuos podrían también percibir lo que la otra persona está pensando, o
adelantarse a algunos de sus movimientos. De este modo, se sienten más conectados con ellos. No
siempre sus ideas serán atendidas, ni sus intuiciones encontrarán eco en las personas que más aman.
Pero si por lo menos son capaces de aplicárselas a ellos mismos, podrán hacer algo positivo con ellas.
De este modo, podrán transformar el destino fatal de Asbolo y mejorar sus vínculos con los demás.

Asbolo en Escorpio

Cuando Asbolo se ubica en el signo de Escorpio, encuentra una de las posiciones donde actúa con más
fuerza. Aquí las percepciones intuitivas son particularmente intensas, con fuertes imágenes que inundan
la mente en los momentos más inesperados. Esas imágenes suelen tener una profunda carga emocional,
que conecta con rincones no siempre bien conocidos de la propia psique. De este modo, junto a lo
intenso de las mismas, se genera a veces un estado emocional que no siempre es el más adecuado para
su correcta comprensión.

También puede suceder que estas percepciones intuitivas estén relacionadas con antiguas heridas, o con
la suerte de aquellos que han hecho daño a la persona. O bien pueden tener algún tinte trágico. Sea
como sea, lo más apropiado con esta posición del centauro, es asentar esas sensaciones en la realidad
material. Averiguar hasta qué punto concuerdan con aquello que es tangible y comprobable. Además,
hay que aprender a no dar excesiva importancia a las sensaciones más desagradables, sino aceptarlas
con cierta calma. Aun así, esta es sin duda una de las posiciones zodiacales donde el centauro es más
certero, sobre todo si está en aspecto a algún planeta importante.

Asbolo en Sagitario

En el signo de Sagitario, Asbolo conecta a la intuición con la mente superior. En esta posición nos
encontramos con personas que tienen percepciones que pueden ser de largo alcance, sea en lo personal,
en lo colectivo o en lo espiritual. Aquí los individuos tienden a sentir ideas que les conectan con algo
que es más elevado que ellos, o bien tienen destellos de ciertas realidades importantes que conviene no
pasar por alto. En estos casos, las percepciones intuitivas pueden ser de interés para otros, y ellos no
tendrán reparos en compartirlas cuando sea preciso.
Sagitario es un signo que se acomoda bastante bien a la energía de los centauros, y en el caso de
Asbolo, puede servir para que se expresen las mejores cualidades de este cuerpo. No en vano, las
revelaciones del personaje mítico estaban relacionadas con su clan, y si ellos, y él mismo, hubieran
hecho caso de éstas, probablemente habrían salvado la vida. En la práctica, esto significa que se deben
tener muy en cuenta las ideas que surgen en la mente de las personas con esta posición. No sólo son
conceptos importantes, sino que tienen consecuencias de calado.

Asbolo en Capricornio

Cuando Asbolo se encuentra ubicado en el signo de Capricornio en la Carta Natal, nos encontramos
con individuos que tienen percepciones que les ayudan en su desempeño profesional. No es infrecuente
que tengan ideas que pueden catapultarles en la escala social, y harán bien en hacer caso de todo
aquello que surge espontáneamente en su mente.

Capricornio es un signo que, de manera natural, está orientado hacia el estatus. Pero también, cuando
desarrolla la parte más elevada de su energía, tiende a crear líderes, individuos que sobresalen entre la
masa para guiar a los demás. Asbolo tiene en estos casos, una cualidad profética que se desempeña en
los ámbitos grupales, en la persecución de metas bien definidas. Las ideas que surgen tienen que ver
con la mejor manera de conseguir lo que se desea, pero también con el modo más preciso de guiar a
otros a mayores cotas de éxito. Si estas personas saben usar bien sus intuiciones, podrán prosperar con
cierta facilidad, encontrando oportunidades allí donde otros no son capaces de ver más que problemas.

Asbolo en Acuario

Asbolo en el signo de Acuario manifiesta todo aquello que se relaciona con los afanes humanitarios y la
búsqueda incansable por la libertad. Las personas con esta posición son capaces de tener percepciones
que les impulsan a buscar más allá de los límites conocidos. Pueden, si otros factores predisponen a
ello, tener ciertas sensaciones que los llevan a elevarse espiritualmente por encima de la media.

Si son capaces de escuchar su latido interior, son personas que pueden tener ideas que ayuden a la
mejora de la sociedad en su conjunto. Incluso aunque sus miras no sean demasiado altas, siempre
tendrán una buena idea para mejorar el mundo que les rodea. Las ideas que les llegan de improviso
están relacionadas con conceptos elevados, con la necesidad de crecer y de elevarse por encima de los
afanes cotidianos. Si ven coartada su libertad, estos seres pueden sentir con fuerza cuál es el mejor
camino hacia la independencia. En su mejor expresión, Asbolo aporta aquí grandes ideales y la manera
más creativa de hacerlos realidad.

Asbolo en Piscis

En el signo de Piscis, Asbolo encuentra un espacio donde puede manifestar una buena parte de sus
dones. Esta es una posición muy dada a la ensoñación, a la percepción de realidades y de ideas que
tienen algo de nebuloso, o de romántico. Las bellas ilusiones se mezclan con los sentimientos más
humanitarios, lo cual no siempre es una buena combinación. Porque para ser útil, una percepción tiene
que poder ser expresada en la realidad tangible en la que vivimos, y eso no siempre ocurre aquí.

De todos modos, si estas personas consiguen desarrollar la mejor parte de esta energía, sin duda pueden
tener grandes inspiraciones, ideas creativas que nadie más es capaz de tener. Sus sueños están teñidos
de cierto aire profético, que deja, al despertar, un poso nostálgico. Gran parte de lo que llega de
improviso a su conciencia, hunde sus raíces en el más profundo reino del inconsciente. Por eso, todas
sus sensaciones internas están mezcladas con emociones de difícil descripción. Si saben separar el
grano de la paja, descubrirán que, gran parte de lo que sienten que puede suceder, acaba sucediendo.
Otra cosa es que confíen en sí mismos para hacer caso de lo que han percibido.

Asbolo en las Casas


Asbolo en la Casa 1

Cuando Asbolo está en la Casa primera del cielo, y especialmente cuando está ubicado muy cerca del
Ascendente, el centauro se sitúa en una posición donde manifiesta su simbolismo con mucha fuerza.
Aquí es común que las personas tengan una intensa vivencia interior. Las percepciones, las emociones
cargadas de significado, se dan con cierta frecuencia y pueden sumir al individuo en la reflexión. ¿Debe
hacer caso a lo que siente, o más bien debe ser cauto con lo que quizás sólo sean fantasías o
ensoñaciones?

La respuesta más común en estos casos suele ser la de prestar atención a lo que se siente. La intuición
es tan poderosa que resulta difícil no tenerla en cuenta. Pero para saber cuál es la fuente de tales
percepciones, conviene consultar la naturaleza del signo donde se ubica Asbolo. No todas las
sensaciones merecen atención, y no todas provienen del ser superior, sino que algunas solamente
vienen motivadas por los propios miedos o costumbres. Sea como sea, estas personas pueden sentir que
todo lo que sienten les atañe de un modo muy personal, aun cuando aparentemente afecte a otros. Este
carácter individual de los sentimientos intuitivos, es muy destacada aquí.

Asbolo en la Casa 2

En la Casa 2, Asbolo se relaciona con todo aquello que nos conecta con aquello que es valioso para el
individuo. De este modo, el centauro, cuando se ubica en esta casa del mapa natal, indica una cierta
capacidad para despertar la intuición acerca de lo que merece ser apreciado. Existe la posibilidad de que
se den buenas percepciones acerca de qué hacer con el dinero, o de cómo encontrar la mejor manera de
disfrutar de aquello que se posee.

Por este motivo, esta posición de Asbolo es propia de individuos que encuentran oportunidades de
inversión allí donde otros no ven nada. O bien, son capaces de desarrollar al máximo las ocasiones que
se les presentan, siempre que sea en ámbitos orientados a la vida práctica. Pero cuando esas
percepciones intuitivas no se aprecian en lo que valen, cuando no se hace caso de la vocecita interior, lo
que se cosecha es el fracaso o el error. Aquí, como en cualquier otra posición, Asbolo puede ser víctima
de sí mismo, siempre que no haga caso de su propia intuición.

Asbolo en la Casa 3

Si el centauro se ubica en la Casa 3 del cielo, expresa su naturaleza en todo lo que se relaciona con el
mundo de la mente y de la expresión. Así que estas personas pueden tener una capacidad intelectual
bastante destacada, sobre todo cuando haya otras indicaciones en el mismo sentido en el resto de la
Carta Natal. La mente puede funcionar muy rápido, y las ideas surgen con facilidad, manifestando
nuevas formas de resolver las pequeñas pruebas de la vida cotidiana.

Quizá no tengan grandes destellos de inspiración, ni reciban ideas de calado espiritual, pero estas
personas sí que tienen soluciones a mano, que surgen de un modo fresco e inmediato cuando son
necesarias. También hay aquí una cierta habilidad para expresar esas ideas, para dar a conocer lo que
sienten o lo que intuyen. Como el centauro del mito, ellos saben manifestar lo que les surge por dentro.
Pero a diferencia de él, es de esperar que sean capaces de hacer caso de lo que les llega. No sea que
terminen del mismo modo.

Asbolo en la Casa 4

Cuando Asbolo se sitúa en la Casa 4, y sobre todo si está cerca del Bajo Cielo, manifiesta su poder en
el área de la familia y las relaciones con el entorno más cercano. Aquí es frecuente tener percepciones
intuitivas acerca del bienestar de los seres queridos. Así que nos encontramos con personas que tienen
una legítima preocupación por los que más aman y que, en muchos momentos, reconocen en su interior
si los otros están bien, o si van a acercarse a algún peligro.

El problema con esta posición consiste en confundir los propios miedos con auténticas percepciones
intuitivas. Sólo un trabajo de discernimiento a lo largo del tiempo puede servir para diferenciar unas de
otras. Pero siempre habrá que tener cierta calma a la hora de hacer caso a la intuición. Aun así, ellos
querrán ayudar a sus seres queridos, y si lo hacen respetando la libertad de cada cual, harán bien.

Asbolo en la Casa 5

Si Asbolo se sitúa en la Casa quinta del cielo, expresa la necesidad de tener en cuenta todo lo que se
siente en el área del amor, las relaciones y el cuidado de los hijos. Aquí nos encontramos con las
personas que saben cuándo un romance tiene futuro o no, casi desde la primera mirada. A veces, saben
que alguien está, de alguna manera, predestinado para ellos, y no dudan en seguir esa intuición hasta
sus últimas consecuencias. También abundan las percepciones acerca de los hijos que puedan tener, o
del carácter de los mismos, mucho antes de tenerlos.

Además, estas personas pueden tener ciertas intuiciones de carácter creativo. Así que si se trata de seres
con inquietudes culturales o expresivas, sin duda vivirán destellos de inspiración que pueden
engrandecer sus obras, hacerlas más interesantes, o de un carácter más diferenciado. Esta es una
posición muy positiva para autores, artistas o creadores de cualquier índole. Una cierta cualidad
luminosa acompaña a estos seres, proporcionándoles un aura de carisma, luminosidad y fuerza en sus
palabras.

Asbolo en la Casa 6

Ubicado en la Casa 6, Asbolo nos pone en contacto con todo aquello que se realiza de manera
cotidiana. Estas son las personas que sienten con facilidad cuál es el mejor método para realizar
cualquier pequeño gesto en el trabajo. Encuentran con facilidad la ruta más corta para realizar las tareas
con el menor esfuerzo posible. O bien, tienen una cierta habilidad para detectar los problemas de salud
de los demás, e incluso para encontrar el remedio a sus males. Sin duda, es una buena posición para
sanadores, pero también para aquellos que trabajan en equipo.

Las intuiciones acerca del desempeño laboral se juntan en estas personas con una cierta modestia a la
hora de expresar todo aquello que llega a su mente. En algunos momentos, pueden pensar que no se les
tomará en serio, o que lo que sienten con tanta claridad en su interior, quizá carezca de valor para los
demás. Harán mal en guardarse para sí sus ideas o sentimientos. En cualquier ambiente de trabajo, estos
seres acabarán siendo apreciados por lo que valen, ya que deben hacer lo contrario que el centauro
mitológico: expresar lo que sienten y guiarse por esa intuición.

Asbolo en la Casa 7
Cuando Asbolo se ubica en esta casa cardinal, y sobre todo cuando está cerca del Descendente,
adquiere un gran protagonismo dentro del conjunto de los centauros natales. Estas son las personas que
suelen tener revelaciones acerca de sus seres más queridos, de todos aquellos que están próximos a
ellos. Para estos individuos, cualquier sensación que se tenga acerca de la pareja o de los amigos más
íntimos, adquiere un carácter bastante importante.

En muchas ocasiones, ellos sienten cuándo una relación tiene futuro o no, incluso en los primeros
compases de la misma. O saben con cierta facilidad qué pueden esperar de la otra persona. No sólo se
trata de seres que pueden analizar bien sus vínculos, es que en su interior hay una fuente de sabiduría de
origen desconocido que les guía más allá de sus propios deseos. Por eso, el mayor peligro con esta
posición consiste en dejarse llevar por el enamoramiento y no hacer caso de lo que realmente sienten
por dentro. Si aprenden a no dejarse engañar por los sentimientos más arrebatados, sin duda dispondrán
de una buena guía para desenvolverse en sus relaciones íntimas.

Asbolo en la Casa 8

En la Casa 8, Asbolo tiene una fuerza especial. Aquí es de esperar que las percepciones intuitivas
tengan bastante intensidad. No todo lo que se siente es de carácter positivo, ni agradable para los
sentidos, y en algunos momentos, ciertas sensaciones interiores pueden causar alguna zozobra
emocional. Incluso es probable que estas personas tengan una capacidad demasiado poderosa para
reconocer aquello que puede causar daño, tanto a ellos mismos, como a los demás.

La fuente de la que surgen estas sensaciones es demasiado profunda para ser reconocible. Así que no
hay manera de tornar los malos presagios en buenos, sino que la persona debe aplicarse en intentar
evitar el mal, o al menos, en paliarlo en la medida de sus posibilidades. Sea como sea, sus consejos
pueden ser bien recibidos si los expresan de manera positiva, como una ayuda y no como una
admonición. En especial, estos seres sufren por el mal que pueda ocurrir a aquellos que aman y tienen
que aprender a separar sus miedos de su auténtica fuente de inspiración interior. En todo caso, y si
Asbolo está en una posición fuerte, cercano a algún planeta importante, nos encontramos con auténticos
augures y profetas, o bien con individuos que conectan con otros planos de realidad, con médiums o
canalizadores.

Asbolo en la Casa 9

Cuando Asbolo se encuentra en la Casa 9, revela su simbolismo en los terrenos de la mente superior y
el proceso de aprendizaje. Esta es una ubicación donde las ideas que proporciona el centauro pueden
tener cierto valor tanto para el individuo como para las personas que le rodean. Esas personas pueden
tener ciertos destellos de inspiración que les hacen crear conceptos de un modo ciertamente
sorprendente. Si confían en su fuente interior, y si otros aspectos de la Carta Natal se relacionan con la
Casa 9, estamos ante seres que tienen ideas iluminadoras, conceptos creativos que facilitan la vida de
todos.

Como hay en ellos un deseo de compartir lo que perciben, no corren el riesgo de cumplir con el destino
del Asbolo mitológico, sino que serán capaces, si lo desean, de expresar sus ideas a los demás. Hay,
como se ha dicho, un tono pedagógico en ellos, por lo que buscan a gentes que escuchen lo que están
percibiendo, que atiendan a sus intuiciones. En el caso de contar con algún altavoz público, estas
personas podrían ayudar a mejorar el rumbo de la sociedad si se lo proponen. Aquí, Asbolo se
encuentra en una de las mejores y más fáciles posiciones de todo el conjunto de casas.

Asbolo en la Casa 10
Asbolo, ubicado en la Casa décima y sobre todo, si está cerca del Medio Cielo, se encuentra en una
situación muy destacada dentro del mapa natal. Aquí es donde nos encontramos a las personas que
tienen fuertes percepciones acerca de cuál es su papel en la vida, especialmente en el terreno
profesional. Será fácil que sientan adónde tienen que dirigirse en sus esfuerzos, qué proyectos merecen
la pena y cuáles no.

Si saben aprovechar estas intuiciones, gastarán menos energías en asuntos que no interesan, y
desarrollarán al máximo sus mejores dones. También es posible que estos seres sean capaces de
manifestar sus sensaciones a otros, guiándoles con la misma precisión que lo harían consigo mismos.
La ubicación de Asbolo en esta posición tiene una naturaleza muy social, que si bien está orientada al
beneficio propio, puede ser también de utilidad para los demás. Con una capacidad perceptiva orientada
a las metas, estos seres harán bien en hacer caso de lo que sienten y a diferencia del centauro
mitológico, vivir sólo aquellas experiencias que contribuyan a su desarrollo y bienestar.

Asbolo en la Casa 11

En la Casa undécima del cielo, Asbolo vuelca todas sus percepciones en el colectivo. Estas son las
personas que tienen ideas que pueden ser útiles para aquellos que les rodean, y sienten que deben
compartir con ellos todo aquello que sienten en su interior. Lo harán en especial con su grupo de
amigos, con los más cercanos, pero también pueden usar las redes sociales, los medios de
comunicación u otros recursos para hacer llegar su mensaje.

Las ideas de estos individuos están siempre relacionadas con el progreso de todos. Son conceptos que
buscan mejorar la sociedad, y ellos sienten, en lo más profundo de su ser, que tienen las claves para
llevar a cabo los cambios, grandes o pequeños, que son necesarios en cada momento. Otra cosa es que
se les atienda o que ellos mismos tengan razón en todo lo que argumentan. Pero como lo que expresan
es algo sentido en lo más profundo de su ser, lucharán por hacerse oír. Lleguen a muchos o a pocos, su
audiencia se beneficiará de todo lo que ellos perciben y desarrollan en su interior.

Asbolo en la Casa 12

En la última casa del mapa astrológico, Asbolo nos pone en contacto con la fuente más profunda de la
intuición, el mundo inconsciente. Aquí nos encontramos con personas que tienen fuertes percepciones
intuitivas que nacen de lo más hondo de su ser, especialmente si el centauro está cerca del Ascendente.
En ocasiones, las emociones estarán tan mezcladas con sus sensaciones, que les resultará difícil separar
ideas de sentimientos. Se genera así una amalgama que, si bien tiene mucha fuerza en su conciencia,
resulta difícil de expresar.

Cuando estos individuos sienten algo con mucha intensidad, se ven invadidos por las dudas acerca de la
complejidad de lo que sienten. De este modo, en demasiadas ocasiones, escogen el silencio, privando
así a los otros del fruto de su intuición. Ellos tienen una gran simpatía por los más desfavorecidos, por
los que sufren, pero aunque encuentren la manera de aliviar su sufrimiento, con frecuencia se sienten
incapaces de hacerles llegar su mensaje de aliento. Cuando lo consiguen, pueden hacer mucho bien. Sus
ideas, sus sensaciones, que tienen un cariz humanitario, sensible y altamente espiritual, no deberían
quedar guardadas en su interior.

Aspectos a Asbolo
La posición de Asbolo natal se relaciona con la capacidad de reconocer y valorar nuestra propia
intuición. Actuando como el centauro del mito, sólo estamos aceptando una parte de este simbolismo, y
por eso, tenemos que aprender a usar la parte más evolucionada de Asbolo, a fin de que sus juicios nos
sean de verdadera utilidad. Así, la posición natal de los planetas en aspecto a Asbolo, nos ayudará a
matizar esta energía. Por supuesto, si es el Sol quien aspecta a Asbolo, nos está indicando la necesidad
de prestar atención a la intuición, que puede ser muy poderosa. Este es uno de los lugares en que
Asbolo se muestra de un modo verdaderamente profético, especialmente en aspectos como la
conjunción o la oposición. Esto no quiere decir que no se deba hacer un cierto trabajo para afinar las
facultades intuitivas, pero se parte de una base muy buena. En el caso de que sea la Luna el planeta en
contacto estrecho con Asbolo, tenemos a las personas donde la intuición se mezcla fácilmente con la
emoción. Aquí es fácil tener sintonía con todo aquello que afecta a la familia o a los seres queridos.
Pero también es cierto que se trata de pensamientos que vienen y van, y que normalmente no se
afianzan en la conciencia.

Cuando conecta con Mercurio, Asbolo permite expresar las percepciones con cierta claridad. Estas
personas tienen un acceso intelectual a todo lo que les llega interiormente, y pueden conectar con otros
gracias a esta cualidad. En cambio, cuando es Venus el planeta tocado por aspecto estrecho a Asbolo,
hace que las percepciones estén muy marcadas por el sentido estético. Todo aquello que es feo o
desagradable, tiende a pasarse por alto. De modo que estas personas actúan como el Asbolo mitológico,
ignorando conscientemente todo aquello que no concuerda con su sentido de lo que es apropiado. El
caso opuesto ocurre con Marte en aspecto a Asbolo, ya que lo que suele ocurrir en estos casos, es que
se presta especial atención a lo que es doloroso o problemático. Estas personas tienden a tener un poso
de formalidad, a tomarse la vida demasiado en serio, y perciben aquellos presagios negativos que flotan
en el ambiente.

En conexión con Júpiter, Asbolo puede adquirir ciertos aires de grandiosidad, sobre todo si estamos
hablando de una conjunción o una oposición estrecha. Aquí las percepciones intuitivas tienen la
capacidad de incrementar la conciencia, siendo una de las posiciones donde el centauro actúa más con
la parte humana que con la mitad animal. Pero también se puede producir una cierta inflación en el
arquetipo, dando lugar a personas que se sienten dotadas más allá de sus capacidades y que pueden
presumir de profetas, magos o adivinos, sin serlo. Esto no suele ocurrir si es Saturno el planeta que
está conectado con Asbolo, ya que precisamente, en estas personas, el sentimiento de que sus
percepciones no valen tanto como creen, puede ser la tónica dominante. Como en el caso de Marte, se
trata de individuos serios, que observan con mucho cuidado todo lo que sienten interiormente y pueden
dar demasiada importancia a los aspectos más negativos de su mente.

Aspectando a Urano, Asbolo actúa de un modo eléctrico, trayendo fuertes inspiraciones que llegan y se
van sin que la persona sea capaz de entender cuál ha sido la chispa que ha originado la tormenta.
Guiados por estas ideas, ellos pueden provocar cambios fuertes en los otros o en sí mismos. Mas
compleja resulta la interacción entre Asbolo y Neptuno, puesto que ambos son intuitivos, pero cada
uno a su manera. Neptuno es más vaporoso, más poético y menos literal que Asbolo, de modo que
aporta un toque más romántico, pero también menos definido a las percepciones intuitivas. Por último,
Plutón en aspecto a Asbolo introduce elementos muy poderosos a la acción del centauro. Por un lado,
cierta predisposición a contemplar lo más oscuro de la existencia. Por otro, cierta tendencia a usar la
propia intuición como una herramienta para controlar a los demás. Si estas personas aprovechan el
potencial de este aspecto para profundizar en su propio inconsciente, quizás se libren de los aspectos
menos positivos de esta unión planetaria.

Revolución de Asbolo
Asbolo tienen un período de revolución relativamente breve, en comparación con otros centauros, lo
que hace posible que muchas personas puedan vivir un ciclo completo del planeta. Al retornar a su
posición natal en torno a los 76 años de edad, una persona suficientemente despierta espiritualmente
hablando, puede tener una percepción muy afinada de lo que significa haber vivido y de lo que puede
esperar del próximo capítulo del viaje del alma.

Estos ciclos de revolución abren la conciencia a nuevas revelaciones, pero para la mayor parte de las
personas, probablemente sea un momento de cierta tristeza o desazón. Enfrentados a la última etapa de
la vida, los temores no resueltos salen a la superficie, empañando lo que podría ser el inicio de una
hermosa despedida. Como suele ocurrir, la manera de afrontar esta etapa depende de cómo haya sido
nuestra existencia. Para esto, analizar los aspectos de Asbolo a los planetas natales, es de gran ayuda.

La mitad del ciclo de Asbolo nos sitúa muy cerca de la oposición de Urano a su lugar natal. Este es un
momento, en la cuarentena, donde se aviva la percepción de qué caminos se deben tomar en la vida y
cuáles no. Sin duda, se trata de un momento donde la intuición puede ser de gran ayuda, si nos dejamos
aconsejar por el centauro.

Asbolo y los eclipses


Los eclipses, tanto solares como lunares, que se dan en las cercanías de este centauro, pueden ser
reveladores a la hora de conectar con nuestras habilidades psíquicas. En estos momentos en que el Sol,
la Luna y el eje nodal se alinean cerca de Asbolo, es probable que surjan ciertas percepciones de
carácter premonitorio que deberían ser tenidas en cuenta.

Observar las señales, como hacía Asbolo al interpretar el vuelo de los pájaros, ayudará a entender qué
nos depara el destino, o cuál es el mejor curso a seguir en nuestra acción. También puede ser un buen
momento para conectar con este cuerpo, reconociendo nuestra propia fuente de sabiduría interior. Para
aquellos que vivan alejados de sus propias percepciones intuitivas, un eclipse puede actuar como un
despertador que, a través de sensaciones que surgen aparentemente de la nada, los lleve a comprender
que hay mucha más vida en su interior de lo que ellos quieren creer.

Asbolo en sinastría
Este centauro no es excesivamente importante a la hora de juzgar una sinastría. Su simbolismo, que está
más orientado hacia el conocimiento personal y hacia el futuro, no se alinea del todo con las
necesidades de una relación, que deberían estar más centrada en lo que se comparte en el día a día.

Aun así, aquellas personas que tengan a Asbolo ubicado en un lugar importante de la Carta, pueden
tener ciertas percepciones acerca de sus relaciones sentimentales que quizás sean de ayuda. Si los
planetas de una persona tocan a la posición de Asbolo de la otra, también pueden tener un efecto
positivo a la hora de despertar o afianzar su propia capacidad intuitiva.
Cariclo

Nombre Astronómico: (10199) Chariklo

Categoría: Centauro

Región: Entre las órbitas de Saturno y Urano

Descubierto por: J. V. Scotti, el 15 de febrero de 1997 (02:51:15 horas), en Kitt Peak (Arizona,
Estados Unidos)

Distancia al Sol (ua): 13,099 - 18,545

Período orbital (años): 62,93

Diámetro (km): 252

Notas sobre el descubrimiento: Se trata del mayor centauro conocido, que además tiene la
particularidad de poseer dos anillos. Posiblemente contenga agua en forma de hielo en sus anillos.
Debido a su tamaño es un candidato a convertirse en planeta enano. Además, es uno de los centauros
cuya órbita es más estable.

Glifo: Presenta una "C", de "Chariklo".


El mito de Cariclo
Existen algunas dudas acerca de la naturaleza y el origen de este personaje mitológico. Por una parte, es
descrita como una ninfa del río, mientras que para otros autores se trata de una centáuride. Conocemos
una historia, relatada por Píndaro, que cuenta que Cariclo es hija del dios solar Apolo. Lo que es seguro
es que Cariclo es la esposa de Quirón, con quien tuvo, entre otros hijos, a la ninfa Ocírroe.

De Ocírroe se dice que no sólo heredó de su padre una gran dosis de sabiduría, sino que le había sido
conferido el don de la profecía. Ocírroe, cuyo nombre significa "corriente rápida", usaba sus
capacidades de forma frívola, revelando secretos de los dioses que no debían ser conocidos por los
mortales. Por ese motivo, fue transformada en yegua.

Según otras versiones, Ocírroe tuvo una relación con Poseidón, dios del mar y de los caballos. O bien,
con Eolo, el viento. Sea como sea, quedó embarazada y se avergonzó tanto que se escondió para que su
padre Quirón no la encontrara. Al dar a luz, pidió a los dioses convertirse en otro ser, por lo que fue
metamorfoseada en yegua y colocada en el firmamento, formando la constelación de Pegaso. Ahora
bien, la transformación no fue completa y al revés que los centauros, ella conservó las piernas de mujer,
mientras que la parte delantera del cuerpo era de animal. Sea como sea, a partir de ese momento pasó a
llamarse Hipa ("yegua") o Melanipa ("yegua negra").

Volviendo a Cariclo, ella fue responsable, junto a su esposo Quirón, de la educación de varios héroes
mitológicos. Uno de ellos fue Jasón. Otro de sus protegidos fue Aquiles, hijo de Peleo y Tetis. Aquiles
fue cuidado por la pareja con la ayuda de la madre de Quirón, Fílira.

Se dice que Cariclo solía estar en compañía de la diosa Atenea, hasta el punto de que ésta le permitía
montar en su carro. Así que cierto día en que ambas diosas se estaban bañando desnudas en la fuente
Hipocrene, acertó a pasar por allí Tiresias, quien según Apolodoro, era hijo de Cariclo.

La diosa Atenea se enfureció al descubrir que Tiresias la había visto desnuda, pues era una virgen
pudorosa. Así que, como castigo, cegó al desdichado Tiresias.

Cariclo salió entonces en defensa de su hijo, a lo que Atenea replicó que cualquier mortal que ve a un
dios en contra de la voluntad de éste, debe perder el don de la vista. Para compensar a su amiga, Atenea
concedió tres dones a Tiresias.

El primero fue regalarle un bastón con el que podía caminar como si tuviera vista. El segundo, consistió
en abrir y purificar los oídos de Tiresias, de manera que pudiera entender el lenguaje de los pájaros.
Este don es el equivalente a otorgarle la capacidad profética. El tercero, que conservaría todas sus
capacidades incluso después de muerto.

Entre los hijos que se atribuyen a Cariclo están otro varón, Caristos, y dos mujeres. Una de ellas sería
Ocírroe-Melanipa, como ya hemos visto. La otra hija de Cariclo fue, según algunos, Endeis, la madre
de Peleo. Según otros, su hija no era otra que Tetis, la esposa de Peleo. Sea como sea, Aquiles, hijo de
Peleo y Tetis, sería nieto o bisnieto de Cariclo y Quirón. Quizá por eso se dice que Aquiles tenía
excelentes cualidades como jinete, y que incluso era capaz de hablar con los caballos.
Simbolismo Astrológico de Cariclo
En el caso de Cariclo, nos encontramos con un personaje mitológico del que realmente no conocemos
su auténtica naturaleza. ¿Es una ninfa o una centáuride? Realmente, es la esposa de Quirón y ya sólo
por ello, merece ser tenida en cuenta en nuestro análisis.

Siendo la compañera de Quirón, la Cariclo cósmica se mueve entre las mismas órbitas que su esposo:
Saturno y Urano. Desde allí, y con un ciclo algo más largo que el de él, 63 años, marca una etapa muy
interesante en la vida humana.

Si Quirón, a través de su revolución, se puede relacionar con la crisis que sobreviene en la cincuentena,
Cariclo nos muestra el paso de la segunda a la tercera edad. Esto antecede al ciclo de Asbolo, que con
su sabiduría, nos ayuda a entender los nuevos desafíos de esa etapa de la vida. En algunos casos, este
paso viene acompañado por el movimiento de Neso por oposición a su lugar natal, que nos permite
conocer cómo nuestros desvelos encajan con justicia en el gran plan universal.

Cariclo se caracteriza por su aspecto maternal. No sólo tiene hijos propios con su esposo, sino que
además ayuda a criar a los hijos de otros. Todo esto lo hace con aparente desprendimiento y
generosidad.

La confusión acerca de si Aquiles era nieto de Cariclo por vía de Tetis, o bisnieto, por vía de Endeis y
Peleo, carece de importancia, porque lo que se pretende decir, de un modo u otro, es que el héroe
pertenece al linaje de Cariclo y Quirón. Esto explica el hecho de que posea una conexión espiritual con
los caballos.

Frente al orgullo de criar a un héroe como Aquiles, alguno de sus hijos naturales le trae ciertos
disgustos. Ocírroe no solamente cae en el error de dar más información de la que le es permitida, sino
que queda embarazada de quien no debe.

Algo que es común en la educación de los hijos es que debemos aceptar que ellos no siempre se van a
comportar del modo que uno desearía. Aun así, el caso de Ocírroe nos muestra una parte negativa del
arquetipo de Cariclo (y también de Quirón). Si ella se hubiera sentido aceptada a pesar de sus errores,
quizás no hubiera necesitado refugiarse en las estrellas. Admitir que nuestros hijos van a dar sus
propios pasos en la vida, que han de cometer sus propias equivocaciones, es difícil, pero necesario.

En este sentido, el episodio más importante relacionado con Cariclo es el daño que sufre su hijo
Tiresias. De nuevo, vemos que el arquetipo de los centauros está relacionado con algún tipo de herida,
y la herida que se presenta aquí con toda su crudeza, es la ceguera de su hijo. No hay nada que sea más
doloroso para una madre que la enfermedad o la discapacidad de un hijo, y seguramente ella hubiera
preferido cargar con ese castigo antes que Tiresias.

Como ya hemos leído, esta ceguera está causada nada menos que por la mejor amiga de Cariclo, la
diosa Atenea. Por este motivo, el dolor para ella debe ser aún mayor, si cabe.

La solución que encuentran ambas, Cariclo y Atenea, es compensar a Tiresias, dándole ciertos dones
entre los que se incluye la visión profética. Ya hemos conocido a otro profeta, Asbolo, y sabemos que
el don de ver el futuro no siempre es un regalo. Pero cuando una persona pierde la visión, se agudizan
otros sentidos, y esa sensibilidad nueva de Tiresias le será de utilidad en su vida posterior.
Astrológicamente, Cariclo nos habla de las heridas maternales, pero también de la manera en que ese
daño puede ser compensado o superado. No todas las personas tendrán hijos, pero sí hay una parte de
nuestro ser que conecta con la energía parental. Es aquella donde sentimos que algo que hemos creado
es como un hijo nuestro. Puede ser una obra, puede ser un proyecto, o incluso un sueño. Todo lo que
creamos, sea en el plano mental o en el mundo físico es, de alguna manera, nuestro retoño.

Pero todas las creaciones tienen sus complicaciones, del mismo modo que es muy difícil que un hijo no
decepcione a sus padres en algún momento. Los dolores de la creación no se refieren sólo a las
contracciones del parto, sino que se relacionan también con el deseo irrealizable de que todo lo creado
sea perfecto, y que al ser mostrado al mundo, no sufra daño ni perjuicio alguno.

Cariclo nos señala un camino de sanación a través del dolor y la renuncia. Saber que aquello que hemos
creado debe seguir su camino no es fácil, pero es una conciencia que nos ayuda a crecer de un modo
más ligero. Podríamos decir que Cariclo nos muestra una doble cara. Lo que sucede cuando no aceptas
algo de tus hijos (Ocírroe), o lo que acontece cuando decides ayudar y buscar la mejor solución para
ellos (Tiresias).

Este centauro expresa cómo nos relacionamos con nuestras creaciones o con nuestros hijos, y de qué
manera podemos ayudarles a crecer, a enfrentarse a sus propios conflictos. Se trata por tanto de
abandonar el sueño de que nuestros hijos o creaciones nos pertenecen, o deben ser siempre el reflejo de
los deseos de nuestro ego. De este modo, cada ser o cada creación, puede madurar y afrontar el mundo
con valentía, sin vergüenza y aceptando sus propias limitaciones. La evolución que propone Cariclo nos
ayuda a ser más generosos, más compasivos y más desprendidos con todo lo que surge de nosotros, o
con los seres que traemos a este mundo.
Cariclo en la Carta Natal
Cariclo tiene un ciclo algo superior al de su consorte mitológico, Quirón, pero su movimiento se
encuadra perfectamente dentro de los márgenes de la esperanza de vida media en los países
desarrollados. A continuación, analizamos el significado que se puede atribuir a cada una de las
posiciones natales de este cuerpo.

Cariclo en los Signos


Cariclo en Aries

La posición de Cariclo en el signo de Aries permite que la persona tenga una percepción muy
individual acerca de todo aquello que produce. Para estos individuos, todo lo que crean es algo suyo y
sólo suyo, que compartirán con aquellos que de verdad puedan valorarlo. Estas reticencias se deben a
que existe un temor oculto a que lo que hacen no sea tan bueno, o que no reciba los comentarios
elogiosos que desearían recibir.

Cuando tienen hijos, actúan de una manera parecida, creyendo que los fracasos, pero sobre todo los
triunfos de éstos, son algo que se les debe imputar a ellos mismos y no a los propios vástagos. Si estas
personas evolucionan para manifestar la parte más elevada de este símbolo, emergen como seres
capaces de dar al mundo creaciones muy personales, de alto valor y originalidad. También aprenderán a
respetar y amar las peculiaridades de sus hijos, entendiendo que cada ser es único e irrepetible. En este
plano de conciencia, ellos expresan la fuerza de un individuo que sabe aportar al mundo algo valioso
desde su propia identidad.

Cariclo en Tauro

Las personas que tienen a Cariclo en Tauro tienden a educar a sus vástagos en el amor por las cosas
sencillas pero agradables. Ellos viven apreciando todo lo que es placentero para los sentidos, y
necesitan transmitir ese sentimiento de apreciación a aquellos que más aman. Cuando consiguen
encontrar algo que les resulta agradable, quieren compartirlo. Sus hijos son para ellos una creación
hermosa. Pero también pueden ser demasiado indulgentes con ellos.

A la hora de crear algo, o de dar una respuesta creativa a algún problema, lo hacen basándose en el
sentido común. Por eso, muchas veces sus argumentos son irreprochables, aunque también pueden
pecar de cierto conservadurismo en sus opiniones. Saben crear cosas bellas, o transmitir palabras
agradables a los demás, y cuando la fealdad asoma su cabeza, la rechazan por completo. Si consiguen
aceptar que no todo lo que construyen será igualmente valorado por todos, desarrollarán la parte más
positiva de esta energía. Son seres que saben cuidar a los demás de un modo cariñoso y nutricio.

Cariclo en Géminis

Cuando Cariclo se sitúa en la porción geminiana de la Carta Natal, está expresando contenidos que nos
permiten racionalizar nuestra relación con aquello que creamos. Estas son las personas que saben crear
desde la mente, poniendo ideas prácticas a contribución de los demás. Están bien dotados para mostrar
lo que surge de su interior, puesto que tienen la capacidad de manifestar sus creaciones de un modo
atractivo para los otros. En general, tienen una actitud ambivalente ante sus creaciones, puesto que por
un lado pueden sentirse halagados cuando tienen éxito, pero quizás no soporten tan bien el fracaso.

Si tienen hijos, sienten una profunda conexión intelectual con ellos, y pueden ser padres muy
dialogantes. Pero también tendrán que aceptar que, sin una conexión emocional profunda, algunos de
los actos de sus vástagos les pueden causar alguna desazón. Esa conexión emocional la tendrán que
buscar en otras zonas de la Carta. En las personas más evolucionadas, existe una compenetración muy
fuerte con los hijos, de manera que pueden comprenderse mutuamente con facilidad. Ellos saben cuidar
dando ideas, apoyo y aliento verbal a las iniciativas de sus retoños.

Cariclo en Cáncer

Si Cariclo está en el signo de Cáncer, expresa sus contenidos de un modo muy cercano a la familia, a la
tradición y al pasado. Estas personas tienden a sentir una unión muy fuerte con aquello que crean y
pretenden que todo esté asociado con lo que se ha heredado de tiempos pretéritos. Sus producciones
están marcadas por un sello algo conservador. Pero también sienten una conexión emocional muy
fuerte con todo lo que producen. Por ese motivo, experimentan de un modo muy hondo tanto el éxito
como el fracaso.

Como padres, están muy conectados con sus hijos, y desean crear un ambiente donde toda la familia se
reúna bajo el mismo techo. Ellos saben cuidar de un modo muy amoroso, pero también pueden ser un
poco asfixiantes en algunos momentos. Están tan unidos a sus retoños que sufren mucho cuando las
cosas no les van bien, así que se requiere un cierto desapego. Comprender que los hijos han de pasar
por sus propias experiencias, y que no todo lo que viven es mérito o demérito de la educación recibida,
es un reto. Cuando estas personas aprenden a amar con desprendimiento, son buenos padres y guías,
que dan cariño y oportunidades. También actúan así con sus creaciones, cuidándolas al máximo, hasta
que salen de sus manos para llegar a otras personas.

Cariclo en Leo

Con Cariclo en el signo de Leo, todos los temas relativos al orgullo se vuelven importantes. Esta es una
posición donde es común sentirse demasiado unidos a nuestras creaciones, por lo que algunas personas
pueden estar muy tentadas a elevarse o a dejarse caer en función del resultado aparente de sus
esfuerzos. Aquí, hay una gran generosidad para compartir lo que se crea con los demás de un modo
expansivo y lleno de buenas intenciones. Pero el ego va muy unido al éxito o al fracaso de las
iniciativas, y se puede sentir mucha vergüenza ante la opinión de los demás, si ésta no es favorable.

Estas personas tienen un elevado concepto de sus hijos y, por lo general, esperan mucho de ellos. Si son
capaces de desarrollar la parte más elevada de este símbolo, descubrirán que pueden enseñarles a ser
individuos abiertos, confiados y exitosos. Pero también les educarán para que acepten los pequeños o
grandes desafíos del fracaso. Aprender a levantarse, no sentir un apego exagerado por los aplausos, ni
un gran temor ante los abucheos, es algo que pueden transmitir a sus retoños. Estas personas saben
cuidar con generosidad, enseñando a los que están bajo su cuidado a manifestar la parte más elevada de
su naturaleza. De este modo, ayudan a entender que el éxito es algo muy personal, que cada uno debe
valorar por sí mismo.

Cariclo en Virgo

Cuando Cariclo se sitúa en el signo de Virgo, expresa sus contenidos de un modo muy orientado hacia
lo cotidiano, a los pequeños éxitos o fracasos que se dan en el día a día. Estas personas enseñan a sus
hijos a tener una actitud muy servicial, orientada a cumplir las tareas y a cuidar los detalles. Pueden
educar en la pulcritud y en la higiene, pero tampoco deberían desanimarse si sus criaturas, de vez en
cuando, fallan al intentar alcanzar los altos estándares que ellos les exigen.

En todo aquello que crean o producen, ellos intentan afinar todos los detalles, hacer algo que se
aproxime a la perfección. Como nunca lo van a lograr, harán bien en ir aprendiendo a soportar los fallos
que acompañan a cualquier obra. Si son capaces de aligerar en algo su obsesión por el detalle,
aprenderán a disfrutar creando. De hecho, estas personas saben producir buenas ideas o elementos
prácticos, ya que todo lo que hacen está bien pensando y tiene una utilidad. Por ese motivo, no es difícil
que tengan cierto éxito, lo que les debería animar a soportar los pequeños errores que de vez en cuando
se producen. Estos seres saben cuidar a partir de detalles prácticos, donde manifiestan el amor que
sienten por sus hijos o por sus creaciones.

Cariclo en Libra

Con Cariclo en el signo de Libra, es habitual que las personas tengan cierta predisposición a considerar
a sus hijos como un reflejo de sí mismos. Por ese motivo, sienten que los éxitos o los fracasos de éstos
son algo que les atañe de manera directa. En los casos menos desarrollados, vemos a aquellos que
reniegan de los errores de sus vástagos, como si no tuvieran nada que ver con ellos, mientras que se
apropian con demasiada facilidad de sus aciertos. También tienen una fuerte conexión con todas sus
creaciones, que sienten como algo demasiado próximo a ellos, muy asociado a su ego y su autoestima.

Pero cuando la energía de este cuerpo se expresa en su mejor versión, manifiesta la capacidad humana
de generar creaciones enmarcadas por la belleza y el buen gusto. Aquí están aquellos que sienten que
todo lo que sucede con lo que han producido, o con sus hijos, está dentro de lo correcto, enmarcado en
un sentido de la justicia universal. Comprenden que cada suceso, bueno o malo, es en realidad un paso
más en el camino, que debe ser aceptado como algo natural. Ellos saben cuidar entendiendo que la otra
persona es alguien diferente, dándole su espacio y reconociendo su propia capacidad de desarrollo.

Cariclo en Escorpio

Con Cariclo en el signo de Escorpio, la energía de este cuerpo se manifiesta a través de una visión muy
emocional acerca de los hijos. Estas personas pueden sentir que todo lo negativo que sucede con sus
vástagos se relaciona con fallos personales, y quizás tengan una percepción demasiado parcial de las
capacidades de sus retoños. En general, tienden a sentirse también muy conectados con sus creaciones,
ya que han surgido de lo más profundo de su ser. Así que, si son atacadas o fracasan, lo viven como un
daño personal. Incluso es posible que deseen tomar revancha ante quienes atacan a sus hijos o a sus
obras.

En cambio, cuando se desarrolla la mejor parte de esta energía, observamos a aquellos que se sienten
conectados con lo que hacen, porque han buceado muy dentro de sí para generar esas creaciones. Pero
al mismo tiempo, tienen el desprendimiento suficiente como para comprender que, una vez que algo
sale de sus manos, tiene que tener vida propia. Con sus hijos, aprenden también a soltar, a no sentirse
tan concernidos con sus éxitos ni sus fracasos. Ellos saben cuidar enseñando el valor de las emociones
profundas, conectando con su fuerza interior y mostrando cómo superar los malos momentos,
renaciendo de las propias cenizas.

Cariclo en Sagitario

Si Cariclo está situada en el signo de Sagitario, manifiesta la energía de este cuerpo en todo lo que tiene
que ver con el pensamiento superior, la enseñanza y el desarrollo personal. Aquí nos encontramos con
los padres que saben ser buenos educadores de sus hijos, que les inculcan valores espirituales o
morales, y que se esfuerzan para que ellos tengan un desarrollo intelectual muy alto. En ocasiones,
pueden ser demasiado exigentes, ya que quieren lo máximo y no siempre van a ver colmadas sus
expectativas.

De hecho, pese a ser una buena posición para Cariclo, estas personas pueden fallar si conectan el éxito
de sus hijos con sus propias aspiraciones, o con sus sueños no cumplidos. Aceptar que los hijos son
algo que no nos pertenece, es una de las enseñanzas fundamentales de esta centáuride, y aquí también
se corre el riesgo de no verlo con claridad. En todo caso, estamos en personas que saben cuidar
haciendo que sus retoños lleguen lo más lejos posible. Cuando crean algo, sus obras tienen un tono
elevado, didáctico y estimulante. De este modo, atraen el interés de personas que están dispuestas a
aprender con ellos.

Cariclo en Capricornio

Ubicada en el signo de Capricornio, Cariclo manifiesta el orgullo que se siente por aquello uno que crea
o por las ideas que se tienen. Estas personas desean que sus conceptos o sus soluciones creativas les
reporten algún tipo de beneficio o mejora socioeconómica. Esto se debe a que ven la parte práctica de
cualquier concepto, y creen que una buena idea debería ser siempre recompensada. El problema puede
surgir cuando esa recompensa no llegue, o cuando sean incapaces de asumir que sus ideas no son las
mejores en todos los casos.

Con sus hijos, ellos actúan de una manera similar, esperando que el éxito los acompañe siempre. Pero
pueden resentirse cuando éstos fracasan en algo. Aprender a desarrollar compasión por ellos es una
buena forma de poner en práctica lo mejor de esta posición. Así, cuando las cosas no salgan tan bien
como desearían, podrán dar buenos consejos y reorientar el camino de sus vástagos hacia un desenlace
mejor. Entendiendo que cada persona es un aprendiz y, al mismo tiempo, un guía de otros, estos
individuos expresarán mejor el simbolismo de este cuerpo en su vida. En vez de buscar recompensas
para su ego, pueden desarrollar una mayor generosidad y apertura hacia todo lo que les rodea. Ellos
cuidan mostrando todas las potencialidades y transmitiendo un sentido de propósito a los seres que
aman.

Cariclo en Acuario

En el signo de Acuario, Cariclo expresa sus contenidos a través de una cierta facilidad para soltar
aquello que se crea o se produce. Estas personas pueden tener bastante desapego por sus obras, de
manera que en cuanto las sacan a la luz, tienen mucha facilidad para entregarlas a los demás. Cuando
tienen una idea, necesitan contarla a todos los que quieran escuchar. Cuando un proyecto está en su fase
final, sienten que deben compartirlo con el colectivo. En ocasiones, este desapego puede ser excesivo, o
incluso demasiado prematuro, por lo que necesitan aprender a cuidar y proteger sus creaciones.

Con sus hijos, actúan de una manera similar. No tienen miedo de que enfrenten la realidad, y tanto si
triunfan como si fracasan, aceptan que es algo que compete a sus retoños y no a su propia acción. De
nuevo, pueden actuar de manera apresurada, y deben tener cuidado de no dejar que sus hijos se
enfrenten demasiado pronto con el mundo. En los mejores casos, estas personas saben cuidar
enseñando a sus retoños a ser libres, independientes y solidarios.

Cariclo en Piscis
En el caso de que Cariclo esté en el signo de Piscis, nos encontramos con las personas que tienen una
conexión muy profunda con todas sus creaciones. Ellos pueden tener ideas y desarrollar conceptos que
nacen de lo más profundo de su mente inconsciente. Si son capaces de proyectarlos al colectivo, de
expresarlos a los demás, sin duda pueden causar un impacto por la originalidad de sus creaciones.
Existe aquí un cierto sentido estético en lo que se produce y una fuerte conexión emocional con lo
creado. El gran problema, como ya se ha sugerido, es que sepan expresar lo que surja y que lo hagan de
un modo que los demás puedan entender.

La unión que tienen con sus hijos es muy grande, sobre todo en lo emocional, aunque quizás deban
afrontar los cuidados de alguno de sus vástagos durante un tiempo superior al normal. Se trata de
personas compasivas, que sufren mucho cuando sus hijos no obtienen el éxito que ellos creen que
merecen, y pueden actuar, desde la sombra, empujando la carrera o los proyectos de sus retoños. Sea
como esa, ellos saben cuidar de un modo muy entregado, compasivo y atento. Si aprenden a no sufrir
en exceso por aquellos que aman, ni por sus propias creaciones, sin duda pueden aportar algo muy
positivo al mundo.

Cariclo en las Casas


Cariclo en la Casa 1

Las personas que tienen a Cariclo en la Casa primera del cielo, y especialmente si lo tienen ubicado
cerca del Ascendente, manifiestan el potencial de este centauro con toda su fuerza. Ellos tienen una
fuerte unión con todo lo que crean, o con sus hijos, y esperan que sean un buen reflejo de su propia
naturaleza. De hecho, en ocasiones pueden interferir demasiado en la vida de los hijos, o en la forma en
que se de desarrollan sus producciones, una vez que han salido de sus manos.

Las personas con una visión menos elevada de este símbolo, intentarán influir en exceso, porque en el
fondo son incapaces de separarse de aquello que han creado. Sienten que deben avergonzarse si sus
creaciones fallan. Por eso, incluso pueden llegar a negar la paternidad de algo que ha salido de sí
mismos. En cambio, en las personas más desarrolladas, surge el deseo de crear algo que sea autónomo,
que pueda crecer y desarrollarse por su cuenta. Estos individuos saben cuidar muy bien de sí mismos,
convirtiéndose en sus propios padres o madres. Sienten un legítimo orgullo por todo lo que surge de
ellos, pero tienen la suficiente distancia como para dejarles expresar sus propias potencialidades.

Cariclo en la Casa 2

Cuando Cariclo se ubica en la Casa 2, nos encontramos con las personas que tienen un elevado
concepto del valor de sus creaciones. Si son padres, sienten que sus hijos son extremadamente valiosos,
y si bien este es un sentimiento común entre los padres, en este caso se da en mayor medida. Algunos
querrán que sus hijos tengan un trato especial, o les infundirán creencias erróneas acerca de su real
capacidad. Estos padres son proclives a avergonzarse de sus hijos si estos no están a la altura que
esperan. También se puede dar el caso de que la persona otorgue un valor exagerado a aquello que
hace, o al contrario, que minusvalore sus producciones.

En los casos más equilibrados, encontramos a los padres que saben dotar a sus hijos de una sana
autoestima, enseñándoles a valorarse por sus cualidades internas. Ellos educan a sus vástagos para que
aprendan a lidiar con sus propios errores, aprendiendo de ellos, pero sin que signifiquen una mancha en
su trayectoria. También se tratará de personas que conceden un valor correcto a lo que producen, y que
saben conectar sus creaciones con su sistema de creencias. Estos seres cuidan de todo aquello que
consideran verdaderamente valioso.

Cariclo en la Casa 3

En el caso de que nos encontremos con Cariclo en la Casa 3 del cielo, estamos ante personas que ponen
una gran cantidad de esfuerzo mental en sus creaciones. Aquí están los que saben expresar lo que
piensan, dándole una salida creativa a sus reflexiones. Pueden ser buenos propagandistas de sí mismos,
empeñados en que los demás reconozcan sus cualidades. Pero también pueden tener cierta capacidad
para expresar correctamente por qué los demás deben seguir sus planes o comprar su producto. La
mayor o menor ética de sus procedimientos se observará en el conjunto de la Carta Natal. También son
seres que saben cuidar a los otros a través de la palabra, estando en contacto con aquellos que los
necesitan.

Como padres, suelen dialogar mucho con sus hijos, aunque también pueden ahogarlos con su cháchara,
o intentar llevar cualquier conversación a su terreno. A veces, pretenden realizar su tarea como padres
de un modo demasiado racional y deberían tener en cuenta la parte emocional del vínculo. Pero si se
trata de personas con un cierto nivel de desarrollo, sin duda tendrán bastante facilidad para comprender
los motivos de sus vástagos, ayudándoles a lograr sus metas de un modo productivo y realista.
Hablando con ellos, abren espacios para la confianza mutua que siempre traerán buenos resultados.

Cariclo en la Casa 4

En la Casa 4 del cielo, Cariclo está en una posición bastante poderosa, especialmente si está cerca del
Bajo Cielo. Esta es una zona donde la paternidad o la maternidad se vuelven muy importantes en la
vida del individuo. Si tienen hijos, estas personas tienen la necesidad de cuidarlos con especial
intensidad, lo cual, en algunos casos, puede ser contraproducente. Ellos esperan que sus criaturas estén
fuertemente conectadas con la familia, con las tradiciones, con el hogar, así que quizás sufran cuando
sus retoños decidan alzar el vuelo y tomar un camino propio.

También es una posición muy apropiada para las personas que producen y crean desde el hogar, o que
lo hacen amparados por algún tipo de tradición familiar. Sea como sea, en los casos en que este cuerpo
ofrece sus mejores cualidades, lo hace a través del cuidado y el cariño hacia los hijos o hacia las propias
creaciones. El hogar es un refugio estable en el que se construye la familia o la obra personal. Si
hablamos de hijos, estos pueden estar seguros de que siempre habrá un techo que les cobije en caso de
necesidad.

Cariclo en la Casa 5

Cuando Cariclo está situada en la casa 5, estamos en un territorio donde la creatividad se vuelve
extremadamente importante. Estas son las personas que tienen la capacidad de construir mundos casi de
la nada, y por eso pueden tener el reconocimiento de los demás y cierto éxito en las artes o en la
ciencia. Sea cual sea el ámbito donde se muevan, estos seres encuentran soluciones con facilidad y
pueden entregarlas a los demás de un modo totalmente generoso. Aun así, buscarán un reconocimiento
por sus méritos y si no lo obtienen, se frustrarán.

Es tal el poder creativo de estas personas, que no temen equivocarse de vez en cuando, ya que saben
que siempre podrán resolver el error con una solución más ingeniosa. A la hora de relacionarse con sus
hijos, son seres luminosos, que siempre están satisfechos de sus vástagos, a los que enseñan a ser
personas abiertas y generosas. El orgullo que sienten es tal, que incluso cuando los hijos no sean dignos
de mérito, ellos serán capaces de ver su parte más positiva. Mientras esto se desarrolle dentro de los
límites del amor paternal, no habrá problema. Con esta energía, los hijos pueden contar con todo el
apoyo de los padres, aunque deben saber que se espera de ellos que sean motivo de orgullo para los
progenitores.

Cariclo en la Casa 6

Cariclo, ubicada en la Casa 6 del cielo se manifiesta en los pequeños detalles, en la manera en que se
realizan las tareas cotidianas. Aquí nos encontramos con padres que están preocupados de que sus hijos
sean laboriosos, limpios y honrados. Expresan el amor a través del cuidado de la salud. Educarán a sus
vástagos para que cumplan todas las obligaciones que se espera de ellos, y se avergonzarán fácilmente
si éstos les fallan. A estas personas, les falta la capacidad de reconocer la parte más lúdica, divertida y
creativa de la paternidad. Como desean lo mejor para sus retoños, en ocasiones les fuerzan en exceso
para que destaquen, sin comprender que una parte de la educación, consiste en el juego.

En los casos más elevados, nos hallamos ante personas que saben educar con firmeza, pero sin rigidez.
Son también buenos trabajadores, que cuidan al detalle todo lo que crean, y que pueden dedicar muchas
horas a perfeccionar sus producciones. Si además aprenden que la perfección nunca se alcanza, y que
pueden entregar lo que han creado sin avergonzarse por sus pequeñas fallas, serán bastante felices. Del
mismo modo, si sus hijos no son tan perfectos como ellos desearían, descubrirán que en la imperfección
también hay belleza. Estos seres pueden encontrar buenas soluciones a problemas de salud. También en
el análisis del rendimiento de un equipo humano o de una máquina.

Cariclo en la Casa 7

Al ubicarse en la Casa 7 del cielo, Cariclo está en una posición bastante destacada dentro de la
natalidad. Esto es más cierto aún si su posición le lleva a estar muy cerca del Ascendente (algo que
puede ocurrir también en los últimos grados de la Casa 6). Aquí, observamos a personas que están
conectadas con sus hijos como si fuesen casi una pareja. Esto, como es lógico, no suele ser nada
positivo. Por ese motivo, deben aprender a reconocer que, si bien, pueden sentir una unión muy grande
con sus vástagos, estos deben ocupar el papel que les corresponde.

Cuando estos seres cuidan de sus seres queridos, los tratan de tú a tú, con mucha cercanía, y a veces les
viene bien desarrollar una cierta distancia. Aun así, se trata de personas bastante conectadas con sus
criaturas o sus creaciones, que consideran como una parte indisoluble de su ser. Si desarrollan la mejor
parte de esta posición, encontrarán satisfacción dejando que ellos sean como quieran ser. También
permitirán que sus obras se alejen de sus manos una vez acabadas. La parte más hermosa de esta
posición, es la capacidad de conectar con el otro como aquella parte de uno mismo que le completa y le
hace crecer.

Cariclo en la Casa 8

En la Casa 8 del cielo, Cariclo nos muestra la manera en que muchas personas se sienten unidas a sus
hijos o a sus creaciones, de un modo muy profundo y emocional. Aquí se observan los casos de
aquellos que tienen intensas relaciones con aquello que producen. Esta intensidad afectiva se manifiesta
en todo momento, y hace que a veces, cuando un hijo comete un error, la persona se sienta interpelada
como si eso fuera responsabilidad suya. En estos casos, ellos conectan con la parte más oscura de este
símbolo, y pueden incluso caer en el enfado o el rencor. También en el deseo de control o en el abuso
de poder.

Pero cuando estos individuos buscan conocer la energía más profunda de este símbolo, entienden que,
aunque el proceso creativo sea algo complejo, también hay un momento en que debemos soltar aquello
que hemos producido. En el instante en que alguien aprende a dejar marchar, sin apegos, aquello que ha
creado, se aligera. El propósito de tener hijos, de tener ideas, de dejar fluir nuestra creatividad, es
generar algo que trasciende a nuestra vida. Estos seres aprenden a cuidar cuando aprenden a soltar.

Cariclo en la Casa 9

En la Casa 9 del cielo, Cariclo nos muestra de qué manera los padres a veces se proyectan en sus hijos,
ya que, en esta posición, resulta difícil que no haya un deseo muy profundo por hacer que los hijos
vuelen alto. Estas son las personas que eligen los mejores colegios o que, al menos, intentan que sus
vástagos tengan todas las oportunidades para llegar a su máximo potencial. Nada malo hay en ello,
siempre que acepten que en algún momento sus retoños les decepcionarán de un modo u otro. Cuanto
mayores sean las expectativas, mayores pueden ser los desengaños.

En cambio, cuando las miras se ponen únicamente en dar lo mejor y aceptar las imperfecciones de los
descendientes, esta posición puede dar lo mejor de sí, creando la impronta de unos padres que impulsan
a sus hijos hacia delante. Aquí, el cuidado se demuestra ofreciendo lo mejor, educando y siendo además
de padres, maestros y mentores. De este modo, cuando estas personas desarrollan una idea, o
construyen u proyecto, también buscan manifestarlo de un modo elevado, conectado con el mundo y
con todo lo que es novedoso. Sus obras educan a los demás, y tanto si triunfan como si fracasan, se
viven como un éxito por la intención puesta en ellas.

Cariclo en la Casa 10

A la hora de expresar sus cuidados, las personas con Cariclo en la Casa 10 tienen un especial cuidado
en que estos redunden en el crecimiento social y laboral de sus vástagos. Esta es una posición muy
poderosa para este cuerpo, especialmente si está cerca del Medio Cielo. Para estos individuos, los hijos
pueden ser una prolongación de sus deseos o de sus anhelos no cumplidos. Por este motivo, a veces dan
demasiada importancia tanto a sus triunfos como a sus fracasos. Ellos cuidan dando oportunidades y
creando las posibilidades para el éxito.

También nos encontramos aquí a las personas que desean brillar a través de sus creaciones e ideas. Si
éstas les reportan el éxito y el estatus que desean, se sentirán muy reconfortados. Pero también deberían
estar preparados para que no todo salga como les gustaría, pues esto también ocurrirá a veces. En todo
caso, desarrollando la mejor versión de esta energía, asumirán que todo lo que crean debe estar puesto a
contribución del colectivo. Con sus hijos, deben aceptar que tomen su propio rumbo en la vida, sin
interferencias. Así entienden que la definición de éxito o fracaso incumbe a cada persona, no a las
expectativas que los demás tengan sobre ellos.

Cariclo en la Casa 11

En la Casa 11, Cariclo se expresa a través de nuestras conexiones con los demás. Aquí, las creaciones
se convierten en una forma de unir al ser con el colectivo, elevándole o dejándole caer en función del
recibimiento que éstas tengan en la sociedad. Pero si el grado de dependencia de la opinión ajena es
menor, nos encontramos con los seres más evolucionados, aquellos que son capaces de entender que
todo lo que construyen debe estar puesto a contribución de la mejora del grupo.

En los tipos más elevados de esta energía, están los que saben cuidar del colectivo. Los que sienten que
sus hijos no son sólo suyos, sino que pertenecen a la humanidad. Pueden convertirse en buenos padres
y madres, que saben actuar como maestros y como guías, mostrando un camino donde los éxitos y los
fracasos son sólo escalones en el desarrollo de la conciencia.

Cariclo en la Casa 12

Cuando Cariclo se encuentra en la Casa 12 del cielo, se halla en una posición donde la persona debe
interiorizar todo el simbolismo de este cuerpo. Aquí, hay una conexión espiritual muy fuerte con todo
aquello que se crea, por lo que las obras pueden ayudar al desarrollo personal y social. Se tratará, en el
mejor de los casos, de creaciones que conectan la mente con el corazón, y que pueden tener una forma
hermosa, que llega con facilidad a las personas más sensibles. Es una posición donde el cuidado se
otorga a través de la preocupación por los seres más indefensos, por los enfermos o por los necesitados.

Aun así, habrá personas que no estén preparadas para elevarse a esas cimas espirituales. Estos
manifestarán la energía de Cariclo de un modo confuso, apegándose en exceso a sus creaciones o a sus
hijos. En estos casos, encontramos a los padres que no saben cortar el cordón umbilical a tiempo,
puesto que están unidos a sus vástagos por nudos genealógicos, relaciones confusas, incapacidad o
problemas de salud. Pasar de esta energía a la que se explicó al principio de este apartado, es algo que
depende únicamente del individuo.

Aspectos a Cariclo
Los aspectos de Cariclo a los planetas natales muestran zonas de nuestra conciencia donde sentimos la
necesidad de evolucionar en nuestra forma de cuidar y de cuidarnos. La energía maternal de Cariclo se
despliega en todos los planetas de un modo particular. Por ejemplo, en contacto con el Sol, este cuerpo
manifiesta la necesidad de desarrollar una forma de cuidado alejada del ego. Aquí los conflictos
esenciales se relacionan con vivencias donde la energía paterna era demasiado intensa, impidiendo un
correcto desarrollo de la personalidad. Se trata de individuos que sienten que han de superar a su padre
y, o bien se quedan siempre por debajo, o caen en el extremo del orgullo. Transformar estas tendencias
en una sana autoestima, que se proyecte sobre los demás, será su reto. En cambio, Cariclo tiene una
gran importancia cuando está en conexión con el arquetipo materno por excelencia, la Luna. Aquí la
herida primordial puede ser bastante intensa, con sentimientos de carencia, o bien con la sensación de
que la madre era un ser que influyó excesivamente en el desarrollo. Manejar correctamente la energía
de este cuerpo implica desarrollar una conciencia adecuada de lo que significa cuidar a los demás: estar
atentos a sus necesidades, pero también dejar que afronten sus propias batallas.

Cariclo en aspecto estrecho a Mercurio, manifiesta que la manera en que se reconoce o se expresa el
cuidado ha sido dañada en algún punto del desarrollo. Quizá la persona no tuvo la capacidad de
exteriorizar sus necesidades en la infancia, bien porque no se le permitió, bien porque nadie estaba
atento a sus palabras. En todo caso, comprender la verdadera naturaleza del cuidado, de la atención a
uno mismo o a los demás, se presenta como un reto de madurez para estos seres. Si Cariclo está en
aspecto a Venus, representa una forma de cuidados que no está exenta de cierta necesidad de
reconocimiento. Aquí, la persona necesita recibir tanto como da, o incluso más. En sus mejores
aspectos, esta relación revela la necesidad de cuidar lo más hermoso de cada cual, de sus mejores
cualidades o de sus encantos físicos. Ahora bien, cuando Cariclo conecta con Marte, revela la
necesidad de encontrar un estilo de cuidado menos prejuiciosa. Este aspecto nos invita a mirar a los
demás de un modo menos crítico, y sobre todo menos enfocado en la competitividad exacerbada.
Aceptar los fracasos de los hijos, es un gran reto.

En aspecto con Júpiter, Cariclo expresa la necesidad de entender hasta qué punto los cuidados sirven
para ayudar a crecer a los demás y a uno mismo. No son pocas las personas que caen en el error de
intentar ahogar el desarrollo de alguien a base de mimarlo en exceso. Permitir un crecimiento ordenado
supone aceptar que cada cual debe cometer sus propios errores y disfrutar con sus propios aciertos.
También podemos encontrar aquí a aquellos que son demasiado permisivos con los otros, dejando a sus
hijos sin la suficiente preparación a merced de un entorno peligroso. En contacto con Saturno, este
cuerpo tiende a mostrar su cara más restrictiva. En estos casos, puede existir un sentimiento de carencia
que se arrastra desde el inicio de la vida y que puede afectar a cada relación que se establezca. Estas
personas pueden ser demasiado severas con los errores de los demás, generando una perspectiva de que
todo lo que les sucede, es merecido. La evolución positiva de este aspecto debería ir hacia el
fortalecimiento de las estructuras de las personas que están a nuestro cargo.

Cuando Cariclo hace aspecto a Urano, revela una forma de cuidar y de proteger a los que están a
nuestro cargo que es novedosa, experimental y a veces paradójica. No es una conexión muy cómoda
para este cuerpo, pero bien llevada, puede ayudar a que no se creen relaciones de dependencia. El
énfasis aquí está puesto en dotar de libertad y de autonomía a los que cuidamos. En cambio, Neptuno
tiñe a Cariclo de un cierto aire nebuloso y complejo. Aquí podemos ver a aquellos que cuidan
abnegadamente de otros, para luego echarles en cara todos sus desvelos. Aprender a amar de un modo
desinteresado es algo que está dentro de sus capacidades, pero para ello, tendrán que hacer las paces
con su pasado y no exigir nada al futuro. Al fin, en contacto con Plutón, este cuerpo puede actuar de un
modo demasiado enérgico. En estos casos, hay que ser conscientes de que estar en una posición de
cuidar o ser cuidados no nos sitúe en medio de ciertos juegos de poder. Aceptar que los retoños o las
creaciones tienen vida propia, relaja el anhelo de control.

Revolución de Cariclo
El ciclo de revolución de Cariclo es similar al de su planeta compañero, Quirón, sólo que un poco más
largo. Con casi 63 años de promedio, este cuerpo es uno de los que nos señala el camino entre la
madurez y la lenta entrada en la tercera edad. De hecho, la fecha en que se da su retorno está bastante
próxima a la edad de jubilación en muchos países desarrollados. Hasta no hace mucho tiempo, ese era
también el límite de la vida, que ahora se ha alargado en un par de décadas como promedio.

Cariclo se presenta en toda su magnitud en el momento en que muchas personas viven plenamente su
etapa como abuelos. Aquí, las lecciones que recibimos se relacionan, en primer lugar, con la manera en
que nuestros hijos nos proyectan a nosotros en sus propios hijos. Esto es así porque una persona
aprende a ser padre o madre observando el modelo parental que ha recibido en su hogar. Este modelo,
mejorado y matizado por la pareja, es el que luego se volcará sobre los hijos propios. La transmisión
genealógica, que en el caso de Folo se daba hacia atrás, hacia el pasado, ahora se da hacia el futuro,
señalando los errores y los aciertos de cada cual.

También es importante indicar que los abuelos suelen ser una versión más relajada y menos estricta de
los padres, liberada de las presiones y urgencias de la juventud y plena de experiencia vital. Los
abuelos pueden desarrollar el amor más desinteresado, siempre que hayan vivido plenamente la vida y
hayan desarrollado al máximo su conciencia.

Para aquellos que ya están próximos a culminar su vida laboral, también es un tiempo de reflexión.
¿Qué dejan atrás? ¿Cuál es su legado en los socios, los compañeros, los superiores o los subordinados?
¿Están dispuestos a donar sus conocimientos en su última etapa profesional? ¿Actuarán con
generosidad, convirtiéndose en mentores de los más jóvenes? Son cuestiones que permiten abordar esta
etapa con un sentimiento de consumación que puede abrir las puertas a una jubilosa jubilación.

Cariclo y los eclipses


Los eclipses traen una oportunidad de renovación a los temas que trata este cuerpo. Si estamos en una
posición donde tenemos que hacernos cargo de otras personas, o bien somos nosotros quienes
recibimos el cuidado, Cariclo nos aconseja que revisemos a fondo la situación. Nuestras actitudes, lo
que entregamos y lo que obtenemos, son esenciales a la hora de tener una buena relación con las
personas que están a nuestro cargo o que se hacen cargo de nosotros.

Como la Cariclo mítica, podemos aprender de nuestros errores pasados y ayudar a que los demás
puedan creer a nuestro lado. Es el mejor regalo que les podemos dar, y los eclipses, tanto solares como
lunares que se dan en las cercanías de este cuerpo, nos permiten revisar todos estos asuntos.

Para las personas con un nivel de conciencia más bajo, quizás este sea un tiempo de grandes retos, en
los que tienen que enfrentarse a seres que no agradecen sus desvelos, o que no siguen el camino que
ellos desearían. También puede ser un momento donde tengan que lamentarse por estar bajo la tutela de
otros. Pero para las personas que estén desarrollando su conciencia, un eclipse sobre Cariclo trae la
promesa de una nueva relación con los otros y con ellos mismos.

Cariclo en sinastría
Cariclo puede ser un cuerpo interesante a la hora de realizar un análisis profundo de carácter sinástrico.
Hay que tener en cuenta que, en una relación, los aspectos de la atención al otro y el cuidado mutuo,
son bastante importantes. La manera en que nos relacionamos con la otra persona hunde sus raíces en la
forma en que fuimos cuidados por nuestros progenitores.

Así, Cariclo en una relación, expresa la manera en que podemos sentir que la otra parte nos atiende,
pero también cómo nos enseña y nos protege. Todos somos maestros de todos, y en un vínculo, ambos
individuos cumplen ese papel con el otro. Si hay planetas importantes o ángulos de la Carta en contacto
con la posición de Cariclo de la otra persona, se puede esperar que ésta, hasta cierto punto, ejerza los
roles de cuidador y mentor.

También hay que asumir aquí que los triunfos o fracasos de la pareja pueden tener un impacto sobre
nosotros. Aceptar que cada cual es dueño de su destino, y por tanto, el primero que ha de afrontar o
disfrutar las consecuencias de sus actos, es un tema muy relevante cuando hay planetas personales
implicados con la posición de Cariclo en la Carta Natal de la pareja.
Hilónome y Cílaro
Nombre Astronómico: (10370) Hylonome

Categoría: Centauro

Región: Entre las órbitas de Urano y Neptuno

Descubierto por: D. C. Jewitt y J. X. Luu, el 27 de febrero de 1995 (10:05:40 horas), en Mauna Kea
Hilo (Hawaii, Estados Unidos)

Distancia al Sol (ua): 18,910 - 31,393

Período orbital (años): 126,14

Diámetro (km): 75

Glifo: No hay consenso sobre el glifo de este centauro. El más evidente, una "H" sobre un círculo, se
puede confundir fácilmente con el glifo de Urano.

Nombre Astronómico: (52975) Cyllarus

Categoría: Centauro

Región: Entre las órbitas de Urano y Neptuno

Descubierto por: N. Danzl el 12 de octubre de 1998, en Kitt Peak (Arizona, Estados Unidos)

Distancia al Sol (ua): 16.254 - 35.971

Período orbital (años): 133,44

Diámetro (km): 70

Glifo: No hay consenso sobre el glifo de este centauro. En todo caso, no puede mostrar una "C", puesto
que se confundiría con el de Cariclo.
El mito de Hilónome y Cílaro
Hilónome es, después de Cariclo, la centáuride más conocida de la antigüedad. Aun así, es poco lo que
se puede decir, mitológicamente hablando, de ella. Apenas hay una referencia a Hilónome en la
"Metamorfosis" de Ovidio, dentro del relato de la batalla entre los centauros y los lápitas que se
desarrolla en un capítulo del libro duodécimo de la obra.

Aquí se nos cuenta la historia de Cílaro, un centauro del que se elogia su belleza y fortaleza, que es
destacable tanto en su mitad humana como en la animal. De entre todas las lo que pretendieron, sólo
una ganó su corazón, la centáuride Hilónome, cuyo nombre se podría traducir como "pasto de los
bosques".

Ovidio se recrea un instante en medio de la descripción de la centauromaquia, para decirnos que ella es
hermosa y delicada, tan limpia que se baña dos veces al día. En su vida en común, Cílaro e Hilónome
caminaban siempre a la par, vagaban juntos por los montes y alcanzaban a la vez la entrada de las
grutas. Juntos acudieron a las bodas de Piritoo e Hipodamía y, en medio del conflicto, juntos
guerrearon.

En un momento de la batalla, una jabalina se clavó en el pecho de Cílaro, alcanzando su corazón. En


cuanto se extrajo el arma, el centauro expiró. Pero Hilónome intentó conservarlo con vida, calentando
su cuerpo y respirando sobre la boca de él. Al ver que todo intento de salvar a su esposo era
infructuoso, la centáuride susurró unas palabras al oído de Cílaro y tomando la jabalina, se arrojó sobre
ella, muriendo en el acto. Este fue el final de la compenetrada pareja.
Simbolismo Astrológico de Hilónome y Cílaro
En el matrimonio entre Cílaro e Hilónome, encontramos una descripción de lo que podría ser la pareja
ideal. Él es un ser hermoso, que además posee cierta nobleza, lo que le sitúa por encima del común de
los centauros. Ella, por su parte, destaca por ser bella y además limpia. Este último debía ser un rasgo
llamativo entre las centáurides, ya que Ovidio lo destaca.

¿Quién puede ser la pareja ideal de un centauro ideal? Evidentemente, una centáuride que esté a su
altura. Esto, que parece algo natural, tiene sin embargo un significado relevante.

En muchas ocasiones nos encontramos con personas que añoran tener una pareja, y que al ser
preguntadas acerca de las virtudes que desean encontrar en ese compañero ideal, listan una serie de
características, todas ellas muy elevadas.

Ahora bien, ante la pregunta de ¿qué puedes tú ofrecer a esa pareja ideal? vemos que, en no pocas
ocasiones, la persona se queda en silencio, puesto que ni conoce sus verdaderas cualidades, ni se ha
ocupado de trabajar en ellas. Ocurre, en esos casos, que uno busca a alguien sin entender que esa
persona soñada también debería poder encontrar algo atractivo en uno. En caso contrario, ¿por qué nos
iba a querer? Para conseguir algo valioso, uno mismo tiene que ser valioso.

La historia de los dos centauros nos muestra esta verdad esencial. Muchas centáurides pretendieron al
bello y fuerte Cílaro, pero sólo ganó su corazón: aquella que estaba a la altura de él, aquella que tenía
cualidades similares a las suyas.

Además, el relato abunda en detalles interesantes, que nos hablan del paso que sigue al encuentro de
alguien que está a nuestra altura. Este paso consiste en vivir una vida en sintonía con esa persona. Se
nos dice que ambos centauros caminan siempre juntos, que disfrutan en sus paseos y que llegan a la vez
a sus metas. En otras palabras, aparte de amarse, son compañeros.

Fuera del mito, en una relación real, no siempre se tienen las mismas metas, ni se comparten al cien por
cien los mismos intereses. Pero la parte en que una pareja es un dúo de personas que se tratan como
compañeros pide que, al menos, uno apoye las metas particulares del otro y viceversa. Sólo así se puede
ir lejos en una relación. No todo se puede compartir, pero todo se puede apoyar.

Como se puede observar a partir de los datos astronómicos de ambos cuerpos, Cílaro e Hilónome
cumplen los requisitos para ser considerados "afines". Ambos orbitan entre Urano y Neptuno, ambos
tienen unas dimensiones muy parecidas y ambos tienen un ciclo similar de larga duración. Por si fuera
poco, en los últimos años, ambos cuerpos orbitan en segmentos opuestos del cielo, mirándose
continuamente a los ojos, por así decir.

Llegamos así al capítulo esencial de la historia de estos dos enamorados, que es, como en el caso de
otros centauros, el momento de su muerte. Una de las palabras clave cuando hablamos de centauros es
el concepto de "herida", puesto que todos, de un modo u otro, acaban recibiendo algún tipo de daño que
es irreparable. Resulta interesante ver cómo la herida de Cílaro, que es mortal de necesidad, incita a su
esposa a buscar el medio de mantenerlo con vida.

Aquí observamos una de las leyes naturales que se dan en las relaciones humanas. La energía
masculina, más combativa, es acogida en sus momentos de mayor debilidad por la energía femenina,
que intenta restaurar el orden. En la energía de Cílaro vemos el sentido del combate, en la de Hilónome,
el valor del sacrificio.

Astrológicamente, ambos centauros se relacionan con dos aspectos de las relaciones comprometidas.
Cílaro nos presenta la parte activa de una relación, el impulso combativo o creativo que hace que los
vínculos puedan crecer y desarrollarse. En momentos de crisis, Cílaro es quien defiende la integridad de
la relación frente al mundo. Hilónome nos habla de los sacrificios que se han de llevar a cabo en
cualquier relación y en la existencia en general. También del potencial restaurador que uno puede
desarrollar en beneficio de la otra persona. En cada posición, Hilónome nos muestra que, entregando
algo, conseguimos algo. Esto, en realidad, es una forma de redención.

La herida esencial que estos cuerpos pueden sanar, se identifica con nuestra capacidad para
relacionarnos de un modo íntimo con otro ser humano. En las relaciones, podemos recibir algunas
heridas, o podemos causar daño. Se trata de un tipo de herida que es particularmente dolorosa, puesto
que nos toca en zonas demasiado íntimas del alma. Pero este daño, que es hasta cierto punto
irremediable, puede ser sanado, tanto en soledad como en compañía.

Ambos centauros deberían analizarse siempre de modo conjunto, puesto que revelan dos partes de la
naturaleza relacional de cada persona. Aunque en las páginas que siguen se detallan sugerencias de
interpretación para cada uno de ellos, ya que analizar todas las combinaciones sería inabarcable, es
aconsejable lanzar una mirada conjunta sobre ambos.

Además, como se ha dicho, se da el caso de que tanto Hilónome como Cílaro, se mueven actualmente
en zonas opuestas del cielo, lo que representa un desafío interesante. Sería muy tentador pensar en esta
relación como la de dos personas completamente idénticas. Como hemos visto, esto no es del todo así.
Ellos están unidos, pero muestran dos caras de la energía que une a los seres humanos. En su oposición
astrológica, muestran que tanto lo masculino como lo femenino deben conjugarse contando con sus
polaridades.
Hilónome en la Carta Natal
Como sucede con algunos otros centauros, el movimiento de Hilónome es tan lento, y al mismo tiempo,
tan irregular a lo largo de los signos que, en muchos casos, hay que hacer un análisis más generacional
que personal. Es en el caso de la posición por Casa donde podremos individualizar mejor nuestra
experiencia con esta centáuride.

Hilónome en los Signos


Hilónome en Aries

Hilónome estuvo en Aries entre 1930 y 1948.

La generación que nació con Hilónome en Aries vivió la experiencia del sacrificio del propio yo en
nombre de la relación. Se trata de personas que, de un modo genérico, tuvieron que atemperar el deseo
imperioso por unirse al otro y aprender el valor de la paciencia y el lento cortejo. Como recompensa,
obtuvieron la capacidad de sentir una más paciente y comprensiva conexión con la pareja

Hilónome en Tauro

Esta centáuride permaneció en Tauro entre 1946 y 1962.

Aquí el simbolismo de la centáuride se relaciona directamente con la necesidad de sacrificar aquello


que nos conecta con las satisfacciones más inmediatas, con el placer o con lo material. La redención
que trae este cuerpo nos ayuda a encontrar el amor a través de una percepción más espiritual de la
belleza. También una más profunda conexión con las emociones más básicas, sean el deseo o la abierta
sexualidad.

Hilónome en Géminis

Hilónome estuvo en Géminis entre 1960 y 1973.

En este ciclo, el simbolismo generacional de Hilónome se expresa a través de una necesidad de


sacrificar la mente y la capacidad expresiva en favor de una mayor unión en el plano emocional. La
redención llega a partir de la posibilidad de encontrar nuevas formas de expresar el amor desde el
sentimiento, que generan un crecimiento espiritual y moral muy destacado.

Hilónome en Cáncer

El paso de Hilónome por Cáncer se prolongó entre 1971 y 1981.

Cuando Hilónome pasa por Cáncer, refuerza la necesidad de reconocer hasta qué punto tenemos que
renunciar a conceptos antiguos acerca de cómo deben ser las relaciones personales. Lejos de estar
involucrados en uniones estrechas, las personas de esta generación viven la experiencia de manifestar
nuevas formas de vincularse. Lo que obtienen como redención es una mayor capacidad para triunfar en
el mundo laboral o en las propias ambiciones.
Hilónome en Leo

El paso por Leo de Hilónome se dio entre 1980 y 1988.

Para las personas nacidas en este espacio de tiempo, Hilónome trae el mensaje de que es necesaria
cierta renuncia a los deseos de brillo individual. Ellos tienen que aprender que, para lograr una
profunda unión con el otro, es preciso dejar de lado las necesidades más personales en aras de una
unión más profunda y generosa. La redención que les llega a través de esta renuncia es la conexión con
los demás de un modo libre y pleno de oportunidades de crecimiento.

Hilónome en Virgo

Hilónome estuvo en Virgo entre 1987 y 1994.

Los nacidos en este período tienen que afrontar las renuncias de Hilónome a través de todo lo que se
relaciona con el trabajo cotidiano o con las costumbres adquiridas. También en temas como la crítica
exacerbada. Si son capaces de reducir esta última y de ser menos esclavos de las obligaciones, con toda
seguridad descubrirán el regalo de redención que trae la centáuride, en forma de emociones profundas y
una conexión amorosa y espiritual con la pareja.

Hilónome en Libra

Esta centáuride permaneció en Libra entre 1993 y 2000.

Para las personas que han nacido entre estos años, con Hilónome en el signo de Libra, la renuncia
consiste en aprender a apoyarse menos en la otra persona. Adquiriendo hábitos más individuales,
despojándose de toda ayuda innecesaria, permiten que se desarrolle una conexión donde se puede
construir un sentimiento personal. Siendo dos, ellos pueden conseguir que la unidad favorezca la
autodeterminación de cada cual. Paradójicamente, nada une más que el sentimiento de ser libre en
compañía del otro.

Hilónome en Escorpio

Hilónome estuvo en Escorpio entre 2000 y 2006.

Aquellos que han nacido bajo esta posición de Hilónome tienden a sentir la necesidad de sacrificar
parte de sus emociones más profundas, o de su deseo de vivir demasiado tiempo en su mundo interior.
Para ellos, renunciar a sus ansias de revancha cuando se sienten heridos es algo bastante difícil, pero no
imposible. Por ese motivo, al hacerlo, desarrollan un sentimiento de profunda redención que les conecta
con la vida de un modo más sencillo y más orientado al disfrute.

Hilónome en Sagitario

El tránsito de Hilónome por Sagitario se prolongó entre 2006 y 2015.

Aquellos que han nacido bajo esta configuración desarrollarán un deseo de redención que les permitirá
conectar de un modo sencillo, directo y cotidiano con los seres que más aman. Para alcanzarlo, tendrán
que sacrificar un poco las miras más elevadas o situadas a más largo plazo. Cuando cambian el futuro y
los sueños, por el presente y las realidades, empiezan a sentir de qué manera este cuerpo puede llegar a
transformar sus relaciones.

Hilónome en Capricornio

Hilónome está en Capricornio entre 2015 y 2026.

Las personas que han nacido bajo esta posición de Hilónome, tendrán que aprender a sacrificar parte de
sus ambiciones o de sus deseos de crecimiento. También deberán limar un poco su orgullo o sus ganas
de promocionarse dentro del colectivo. Cuando descubren las emociones más sencillas, cuando
conectan con los valores de la familia y el cuidado de los seres queridos, encontrarán un camino de
redención que mejorará sus relaciones de un modo notable.

Hilónome en Acuario

Esta centáuride transita por Acuario a partir de 2025 y hasta 2039.

Para los nacidos bajo esta configuración, debemos esperar que se desarrollen sentimientos de redención
basados en la relación generosa y cálida con aquellos que aman. Recibirán mucho si están dispuestos a
sacrificar algo de frialdad calculada, o de energía volcada en lo colectivo, que en lo que atañe a la
pareja.

Hilónome en Piscis

Hilónome visitó Piscis entre 1914 y 1931 y lo hará de nuevo a partir de 2038.

Aquellos que van a nacer con esta posición de la centáuride, tendrán que aceptar ciertos sacrificios que
tienen que ver con su capacidad de amar de un modo abnegado. Ellos aprenderán a mirar también por sí
mismos, a desarrollar relaciones realistas y cercanas. La redención que pueden alcanzar estará
relacionada precisamente con aceptar la dedicación de la otra parte, con dejarse ayudar, y con tener a
quien aman, cerca de ellos. Rechazando los sueños por las realidades, crecen.

Hilónome en las Casas


Hilónome en la Casa 1

En la Casa 1 de la Carta Natal, Hilónome está en una posición destacada, por lo que se debe tener en
cuenta su simbolismo con cierta atención. Si además se ubica cerca del Ascendente, la potencia de esta
centáuride se ve multiplicada. Aquí hay una cierta necesidad de sacrificar el deseo de alcanzar
resultados inmediatos en la relación con la otra persona. Para estos seres, la propia individualidad, o
ciertas aristas de la misma, es algo que tiene que ser sacrificado en aras de lograr una unión más
perfecta. Como es lógico, no todos aceptarán de buen grado lo que pide Hilónome, ya que el sacrificio
es algo que no es bien aceptado en nuestra cultura.

Pero cuando se desarrolla este simbolismo hasta sus últimas consecuencias, comprendemos que, para
que haya una unión entre dos personas, ciertamente se ha de renunciar a una parte de los deseos
individualistas y a la presión por obtener resultados inmediatos. Comprender los ritmos de la otra parte,
sus necesidades, es algo que forma parte del proceso de construir una relación madura con el otro. La
redención que se alcanza cuando se llega a esa comprensión, permite disfrutar de una conexión muy
íntima con la otra persona, pudiendo llegar a estados donde realmente se percibe la fuerza del amor en
su estado más puro.

Hilónome en la Casa 2

En la Casa 2 del cielo, Hilónome nos habla de todos los sacrificios que hay que hacer en el ámbito de
los valores y las posesiones materiales. Quizás tengamos que reconsiderar la importancia que le
estamos dando a aquello con lo que tanto disfrutamos, y que no siempre se relaciona con las vivencias
emocionales compartidas. Demasiado apego por el dinero, o por los placeres que el dinero puede
comprar, pueden poner en riesgo nuestras relaciones. Por otro lado, una excesiva simpatía a ciertos
valores, que quizás no hayan sido correctamente analizados, puede ser también peligrosa.

Aquí hay que tener cuidado, puesto que, si bien los valores personales son algo a cuidar, en muchas
ocasiones tenemos valores que desconocemos, y nos dejamos guiar ciegamente por ellos de un modo
que puede no ser positivo. Reconocer todo lo que es valioso en nosotros y en el otro, es una forma de
sintonizar con el alma profunda de la relación. Dejar de lado valores caducos, o cierto apetito
desmedido por los placeres materiales, puede ser una de las claves para llevar con éxito nuestra relación
con Hilónome. Lo que surge como redención a medida que avanzamos en este camino, es una forma de
afectividad más profunda, donde los placeres externos se convierten en satisfacción interior, y donde la
otra persona se nos abre de un modo emocionalmente más confiado.

Hilónome en la Casa 3

Situado en la Casa 3, Hilónome nos pone frente a la tesitura de que sean nuestras ideas o la forma de
expresarlas, lo que pueda crear conflicto, tanto dentro de la pareja como cara al exterior. Quizás, una
parte del sacrificio que tenemos que vivir, se manifieste a la hora de tener que suavizar ciertos
conceptos, o de ser capaces de escuchar a la otra parte y aunar pensamientos con ella. No son pocas las
personas que desean tener una conexión completa con la pareja, compartiendo todas las ideas. Pero esto
no suele ocurrir, ni siquiera en las relaciones más comprometidas.

Entender que el otro es diferente, es un requisito importante para que una relación pueda prosperar.
Para ello, quizás tengamos que limar algunas de nuestras ideas más radicales, o quizás tengamos que
aprender a moderar nuestro lenguaje. Hablar un idioma común, que sea fácilmente comprendido por
ambos, es una tarea que lleva tiempo y que no se puede improvisar. No siempre las palabras significan
lo mismo para las dos personas, y no siempre se puede dar por sentado que somos comprendidos o que
comprendemos. Renunciar a una comunicación perfecta, pero trabajar por mejorar la comunicación en
el día a día, es una tarea que requiere dejar de lado ciertos sueños. Pero la recompensa que llega con el
tiempo, es precisamente que la conexión se vuelve más profunda y con menos interferencias.

Hilónome en la Casa 4

Ubicada en la Casa 4, y sobre todo si se halla cerca del Bajo Cielo, Hilónome nos muestra un
simbolismo poderoso, que no siempre se comprende correctamente. La Casa 4 es un lugar donde
conectamos con el pasado, con la tradición, y también con sentimientos de protección que se parecen
más a los que se desarrollan entre progenitor e hijo, que entre una pareja adulta. Por ese motivo, lo que
nos pide Hilónome en esta posición es un gran sacrificio, que consiste en renunciar al ideal inconsciente
de que nuestra relación va a compensar las carencias del vínculo que teníamos con nuestros padres.

Aquí hay que aprender que nuestra pareja no es un padre o una madre destinado a nuestra protección o
a nuestro cuidado, sino un adulto con el que tenemos que desarrollar una relación basada en la
igualdad. Las relaciones, más que verticales, tienen que ser horizontales, y esta posición de la
centáuride nos pone cara a cara con esta realidad. Ni siquiera las normas del pasado, ni los esquemas
heredados de la familia, tienen el poder de resolver los conflictos que puedan surgir en la relación.
Sacrificando estos sueños infantiles, nos abrimos a la redención que promete este cuerpo, que consiste
en desarrollar vínculos más maduros, donde cada cual se hace responsable de sí mismo.

Hilónome en la Casa 5

Cuando Hilónome se encuentra en este segmento de la Carta Natal, se halla en una posición ciertamente
complicada. Porque aquí, lo que se nos pide, es renunciar precisamente a los sueños románticos que
para muchas personas son la clave de cualquier relación. Esta es una situación de la centáuride que
requiere de cierto realismo. Porque como sabemos, la diferencia entre estar enamorados y amar, es
similar a la de estar soñando o estar despiertos. Querer a alguien porque es luminoso, porque le vemos
bajo su mejor cara, porque evitamos observar sus puntos oscuros, es propio del enamoramiento. Pero
aceptar las luces y las sombras tanto propias como ajenas, eso es amar.

En esta posición de Hilónome, tenemos que entender que el amor no es un juego, por más que el
sentido lúdico pueda y deba estar presente. Amar es una tarea que requiere esfuerzos y sacrificios, que
requiere trabajo, y no siempre es agradable. El premio que se obtiene con esa visión madura del amor,
es sentir una comunión plena con la otra persona. Pero también algo más que eso, nos permite entender
que una relación siempre construye algo para el mundo, que es un terreno fértil para crear y para ser
generosos. Sólo con esa idea, que nace de cierta renuncia a los sueños románticos, se puede ser
realmente feliz en una relación.

Hilónome en la Casa 6

Si nos encontramos con Hilónome en la Casa 6 del cielo, tenemos que afrontar el hecho de que hay
ciertas normas, costumbres o formas de actuar que no nos ayudan a la hora de desarrollar una relación.
Aquellas personas que dan mucha importancia al trabajo, a las rutinas, al perfeccionismo en todo lo que
hacen, deberán sacrificar una parte de sí mismos para poder formar un vínculo significativo.

En la actualidad, cuando las personas dedican tanto tiempo al trabajo, parece difícil tener tiempo para el
amor. Pero si no somos capaces de sacrificar una parte de esa eficiencia para desarrollar una unión más
perfecta con aquellos que amamos, realmente estaremos perdiendo una parte muy importante de nuestra
vida. Por eso, la renuncia que se nos pide aquí, tiene que ver con dejar a un lado la rutina, las
ocupaciones que no aportan nada de valor, las horas de más dedicadas al trabajo, y entregar algo de ese
tiempo a la relación. Así, cuando se alcanza la redención prometida por este cuerpo, lo que se logra es
una unión muy profunda con aquellos con los que amamos. Las emociones que se pueden sentir
entonces superan cualquier descripción y nos llenan de felicidad.

Hilónome en la Casa 7

En la Casa 7, y sobre todo cuando está situado cerca del Descendente, Hilónome se presenta en una de
las posiciones más fuertes de todo el mapa natal. Cuando se ubica aquí, nos pone frente a una realidad
de la que no podemos escapar. Aquella persona con la que tenemos una relación significativa es un ser
diferente a nosotros, no una continuación de nuestra individualidad. Esto, que parece evidente, no lo es
en muchas ocasiones, porque muchos individuos esperan que la otra persona se comporte como lo
harían ellos. O que desarrolle ideas similares. O que comprenda sus intenciones de una manera casi
telepática. Aquí, Hilónome nos despierta a la dura realidad de que, para estar con otra persona,
debemos asumir que hay un abismo entre su ser y el nuestro.
Por supuesto, construir una relación es, en gran medida un trabajo de tender puentes. Pero para poder
hacer eso, tenemos que sacrificar la fantasía de que el abismo no existe, porque sí existe. Aceptando la
diferencia del otro, abriendo canales para el entendimiento, desarrollando el diálogo, la comprensión y
la compasión, es como nos hacemos cargo del simbolismo de Hilónome. Desde ahí, es relativamente
fácil alcanzar la redención prometida, que aquí consiste en poder ser quien se es sin necesidad de
renunciar a uno mismo, pero en conexión respetuosa con la otra persona.

Hilónome en la Casa 8

Cuando esta centáuride se sitúa en la Casa octava del cielo, nos está mostrando una cara muy compleja
de su simbolismo. En muchas ocasiones, una pareja tiende a cerrarse mucho en sí misma, buscando
emociones profundas que sólo pueden encontrarse en la otra persona. No es infrecuente que, sobre todo
en los primeros compases de la relación, la vida sexual sea el centro de casi todas las vivencias. Pero
con el paso del tiempo, estas fuerzas tienen que atemperarse para dar cobijo a otros aspectos no menos
importantes del vínculo. Aprender a vivir una relación, supone también aceptar que de vez en cuando se
pueden experimentar sentimientos menos profundos.

Por otro lado, en ciertos momentos es fácil caer en ciertos juegos de poder con la otra parte. Se trata de
aspectos que deben ser limados si queremos que nuestras relaciones funcionen mejor. A medida que
vamos sacrificando ciertas partes emocionalmente demasiado intensas, o nuestras ansias de controlar al
otro, empezamos a descubrir que la otra persona sigue siendo valiosa para nosotros. La redención que
se alcanza cuando se renuncia a ejercer el poder o el control, es precisamente el que seamos más
valorados, más amados.

Hilónome en la Casa 9

Situada en la Casa 9, Hilónome nos pide que analicemos hasta qué punto estamos demasiado unidos a
nuestras ideas, o al modo en que hacemos las cosas. Por otro lado, en muchas relaciones se da el caso
de que una de las partes, sea por edad o por conocimientos, se erige como mentor de la otra parte.
Aunque este sentimiento puede tener una base real, nunca podemos olvidar que cada persona tiene algo
importante que aportar, y que el conocimiento intelectual no es lo único valioso en un individuo.

El sacrificio que nos pide Hilónome en este caso, consiste en entender que nadie está por encima de
nadie, y que si bien podemos enseñar aquello que sabemos a nuestra pareja, esto no nos sitúa en un
escalón superior. También nos informa que ciertas ideas que abrazamos con demasiada fuerza, sean
estas filosóficas, religiosas o espirituales, quizás deban ser pulidas en contacto con la otra parte. No
todo lo que nos parece evidente lo es, y no toda verdad es una verdad absoluta. Aprendiendo a bajar el
listón de nuestras exigencias intelectuales, entendemos que la otra persona también tiene mucho que
aportar. El premio a este sacrificio consiste en abrir los canales para una comunicación más directa.

Hilónome en la Casa 10

En la Casa 10, Hilónome expresa su simbolismo en las áreas donde la pareja se relaciona con el
ambiente, con la sociedad, o con las aspiraciones laborales o económicas. Al ser un cuerpo que nos pide
realizar ciertos sacrificios, resulta evidente que una parte de esas aspiraciones debe ser sacrificada en
aras de una mayor compenetración con la pareja. No son pocas las personas que ponen por delante sus
propias ambiciones antes que el desarrollo de una unión, o por encima del cuidado de la familia. Pero
este cuerpo nos está solicitando que echemos una mirada más próxima a todo aquello que está dentro
de nuestro hogar.
Por supuesto, no se trata aquí de renunciar por completo a la carrera o a los deseos de éxito material. Lo
que nos dice Hilónome es que debemos limar aquellos aspectos de nuestra vida laboral, o de nuestros
deseos de crecimiento, que puedan colisionar con el desarrollo armonioso de la pareja. Dedicar muchos
esfuerzos a lo externo y pocos a lo interno, no nos ayudará a ser más felices. Si lo hacemos, habrá que
preguntarse el por qué. Qué es lo que nos llena tanto, y por qué no somos capaces de equilibrar esa
parte de nuestra vida con lo que podemos sentir en compañía de los seres que amamos. Con un justo
balance entre profesión y familia, llega la redención en forma de amor más comprometido y tierno.

Hilónome en la Casa 11

Cuando nos encontramos con Hilónome en la Casa 11 del cielo, tenemos que asumir que, para que una
relación funcione y nos dé satisfacciones, necesitamos dejar espacio para la libre expresión de cada uno
de sus miembros. En muchos casos, las uniones se convierten, con el paso del tiempo, en una especie
de amistad con momentos de intimidad sexual. Y aunque esto pueda tener sus elementos positivos,
tampoco conviene olvidar que una pareja es algo más que un amigo con ciertos derechos. Es alguien
con quien compartir emociones profundas, alguien que de vez en cuando nos debería sorprender y a
quien deberíamos sorprender.

La parte lúdica y luminosa de las relaciones, no se debe perder jamás. Esa chispa de romanticismo o de
juego que es necesario para volver a encender la llama del cariño. Si hemos dedicado muchos esfuerzos
a la parte más amistosa, o al contacto con amigos, o con la sociedad en general, quizás deberíamos
sacrificar algo de todo eso para volver a despertar el amor de pareja. Recuperar los detalles románticos,
crear ocasiones en que la otra persona pueda brillar, son algunas de las cuestiones que se nos piden
aquí. La recompensa que se obtiene es una relación más rica, donde podemos llegar a sentir verdadera
admiración hacia la otra parte, siendo correspondidos en el proceso.

Hilónome en la Casa 12

Si Hilónome se sitúa en la Casa 12 del cielo, nos encontramos con las personas que deben renunciar a
ciertos ideales en torno al amor. Para ellos, quizás la unión debiera ser algo extraordinario, fuera de este
mundo, y pueden empeñarse en encuentros que realmente no tienen nada que ver con un vínculo real.
Bajar a la tierra, aprender a convivir, aceptar los pequeños defectos de la otra parte, es una tarea que
resulta dura para ellos, especialmente si tienen más planetas ubicados en la Casa 12 natal.

Pero cuando alguien decide dejar de lado las ilusiones, lo ideal, para centrarse en lo real, es cuando pasa
del mundo de los sueños a la realidad despierta. Cuando se evitan los amores con personas que no están
disponibles, o que tienen graves problemas, es cuando se abre la puerta a encontrar a seres que
realmente quieren y pueden estar con nosotros. Es en ese momento cuando se alcanza el premio a estos
sacrificios, que no es otra cosa que poder vivir una relación real, poder experimentar las pequeñas
alegrías o los pequeños conflictos cotidianos. Descubrir así la grandeza y las imperfecciones reales de
otro ser humano.

Aspectos a Hilónome
Los aspectos a Hilónome nos muestran la manera en que podemos acceder a la comprensión plena de
este cuerpo. Gracias a ellos, sentimos qué parte de nuestro ser debe ser sacrificada en aras de una
redención posterior. Generalmente, se trata de ciertas facetas de nuestra individualidad que han crecido
en exceso, dificultando el desarrollo correcto de los vínculos con otras personas. Así, cuando el planeta
tocado por un contacto estrecho con Hilónome es el Sol, lo que debe ser objeto de análisis, es la manera
en que manifestamos nuestra individualidad. Si existe una tendencia a expresar nuestro yo de un modo
algo exuberante, Hilónome nos invita a entender que otras partes del ser necesitan obtener su espacio.
También debemos comprender que hay que dejar brillar a los demás de vez en cuando. Otorgándoles
protagonismo, limamos las partes más narcisistas de nuestra individualidad y mejoramos sensiblemente
las relaciones. Cuando se trata de la Luna, necesitamos sacrificar aquello que nos conecta de un modo
muy exagerado con nuestra madre, o con aspectos como la nutrición o la memoria del pasado. Dejar de
proyectar aspectos parentales en la pareja es una tarea que todos debemos llevar a cabo, antes o
después. Aquí, lo que se suele proyectar, y debe ser sacrificado, es ver al otro como una proyección de
nuestra madre.

Si es Mercurio el planeta que toca a este cuerpo, vemos a aquellos que deben aprender a sacrificar una
parte de su mente o de su capacidad expresiva, que puede estar fuera de control. De este modo, no
ahogaremos las cualidades mentales del otro. Cuando es Venus, se trata de nuestra parte más conectada
con los placeres, o bien aquella que nos permite abrirnos en exceso a los demás. Probablemente,
tengamos que hacer una reflexión acerca de qué tipo de personas estamos dejando entrar en nuestra
vida. Si en cambio, es Marte el planeta afectado, estamos ante la necesidad de sacrificar un poco de
nuestra naturaleza más combativa, rebelde o impositiva. También de nuestras prisas o ansiedades con
respecto a las relaciones.

En el caso de que sea Júpiter el planeta que está en conexión con Hilónome, lo que debe ser
sacrificado en parte, es nuestro deseo de crecer sin límites, o ciertos apetitos que parecen no ser
saciados con nada y que nadie puede saciar. Si es Saturno, en cambio, son precisamente los límites lo
que debe ser sacrificado, de modo que nos atrevamos a crecer y conectar sin tantas restricciones. Aquí
hay que sacrificar cierta seriedad excesiva, o la tendencia a la tristeza o el pesimismo.

Cuando es Urano el planeta que viene marcado por un contacto muy estrecho con esta centáuride, lo
que debe ser sacrificado es el deseo de realizar cambios bruscos, de crear turbulencias cada cierto
tiempo. O el apresuramiento excesivo. Si es Neptuno, son los sueños o las fantasías que no tienen base
real. En cambio, cuando se trata de Plutón, Hilónome nos pide que sacrifiquemos nuestros deseos de
control o nuestras ansias de poder. También los comportamientos adictivos. Todo ello, en aras de
construir relaciones más sólidas con los demás y con nosotros mismos.

Revolución de Hilónome
Como Hilónome tarda un período muy largo en retornar a su posición natal por tránsito, ninguna
persona puede esperar llegar a vivir los 126 años que tarda en producirse este suceso. Pero muchas sí
que vivirán la mitad de ese ciclo que tiene un promedio de 63 años, pero que, debido a la excentricidad
de la órbita de este cuerpo, se puede dar a diferentes edades según el momento del nacimiento.

Sea como sea, el momento en que llegamos al tránsito de oposición de Hilónome sobre el lugar que
ocupaba en el momento del nacimiento, quizás tengamos que enfrentar algún tipo de renuncia
importante en nuestra vida. El tipo de renuncia vendrá casi siempre indicado por la posición natal de
esta centáuride, pero marcará un antes y un después en nuestras relaciones personales. Esta renuncia
traerá una redención posterior, que indicará a las claras si se ha hecho lo correcto, ya que vendrá en
forma de mejora en los vínculos que hayamos establecido.

Hilónome y los eclipses


En relación a los eclipses, cuando estos se dan en las cercanías de nuestro Hilónome natal, nos obligan
a reconsiderar nuestra actitud hacia el sacrificio personal. Si somos personas poco dadas a realizar este
tipo de actos, y el eclipse llega sin que seamos conscientes de su conexión con Hilónome, es muy
probable que vivamos acontecimientos que nos obliguen a un sacrificio obligatorio y no deseado. Esta
expiación será necesaria, pero sólo se podrá apreciar en toda su dimensión con el paso del tiempo.

Pero si existe una conciencia sobre la naturaleza de este cuerpo, podemos aceptar que hay partes de
nuestro ser que deben dejarse a un lado para que las relaciones fluyan mejor. Incluso sería
recomendable hacer un pequeño sacrificio simbólico, una forma de psicomagia, que ayude a liberar
aquella parte de nosotros mismos que deba ser limada. Contribuyendo al proceso, este se hace menos
doloroso, e incluso puede ser satisfactorio desde el principio.

Hilónome en sinastría
Como es fácil suponer, el potencial de Hilónome en un estudio de sinastría es muy importante, ya que
revela un potencial relacionado con la capacidad de hacer sacrificios en el contexto de una relación.
Este potencial, que es necesario evocar en algunos momentos, puede ser bastante relevante si uno de los
planetas de la otra persona, o alguno de los ángulos de su Carta, tocan a la posición de nuestra propia
Hilónome. En el caso de que esto suceda, podemos estar ante una relación que requiere cierta dosis de
abnegación por nuestra parte, que vendrá determinada por el planeta en cuestión. Como es lógico, esto
debe ser analizado en las Cartas Natales de ambas personas.

Por ejemplo, si es el Sol, puede ser un sacrificio del ego. Si se trata de la Luna, de la parte más nutricia
de nuestro ser, y si es Mercurio, será la mente o ciertas formas de expresión. Cuando hablamos de
Venus o Marte, son nuestros principios básicos femeninos o masculinos, los que han de sufrir algún
tipo de sacrificio. Si se trata de Júpiter, será nuestra capacidad de expansión, y si es Saturno, nuestros
límites. Con Urano, será nuestro sentido de la ruptura o de la búsqueda de libertad. En el caso de que se
trate de Neptuno, estamos ante un sacrificio de las ilusiones, y si hablamos de Plutón, quizás nos
estemos enfrentando a sacrificios relacionados con la forma en que se ejerce el poder.

Ahora bien, como la otra parte del símbolo de Hilónome se relaciona con la redención, seguramente se
tratará de sacrificios que aportarán algo positivo a la relación, y que nos permitirán redefinir nuestra
propia identidad, podando algunos aspectos menos desarrollados o inmaduros del ser. Por supuesto,
esta información debe ser contrastada con el conjunto de la sinastría y con la posición de Cílaro en
ambas personas.
Cílaro en la Carta Natal
Del mismo modo que Hilónome sólo se puede analizar de un modo generacional, debido al largo
período de este cuerpo, Cílaro también debe ser estudiado del mismo modo. Para poder conocer la
influencia del centauro en la Carta individual, es más efectivo analizarlo a partir de su posición por
Casa.

Cílaro en los Signos


Cílaro en Aries

El centauro Cílaro estuvo en Aries entre 1991 y 1996.

Las personas nacidas en este período de tiempo pueden tener una percepción muy personal de la
energía de Cílaro, ya que se trata de uno de los ciclos más cortos de este centauro. Aquí lo que se
intenta defender a toda costa es la propia individualidad dentro de la relación, o bien, a la relación
frente al mundo. Estas personas pueden tener una actitud decidida a la hora de posicionarse contra todo
aquello que amenace sus vínculos, y lo harán de un modo algo agresivo, si lo consideran necesario.

Cílaro en Tauro

La estancia en Tauro se prolongó entre 1995 y 2002.

Cuando este cuerpo se halla en el signo de Tauro, actúa desarrollando una cerrada defensa de todo
aquello que se relaciona con los bienes materiales de la pareja. Aquí nos encontramos con las personas
que saben cuidar lo que se posee, pero también con los que sienten que tienen que proteger sus propios
bienes frente al apetito de la persona con la que comparten su vida. Dependiendo del mayor o menor
grado de desarrollo de este símbolo, es posible encontrarse con individuos que actúan de un modo algo
egoísta, pero también con aquellos que saben cuidar lo que es común, y además, disfrutar de ello.

Cílaro en Géminis

Entre 2001 y 2010, Cílaro se movió por el segmento zodiacal de Géminis.

En esta posición, es de esperar que cuando estos individuos alcancen la madurez, vayan desarrollando
un deseo de defender la parte más intelectual de la relación. Frente a opiniones externas, o en el peor de
los casos, frente a maledicencias, ellos intentarán oponer una franca resistencia. Es probable que den
mucha importancia a todo lo que se piensa en conjunto, a compartir opiniones dentro del vínculo. Si
esto no es posible, pueden surgir las tensiones. Aprender a aceptar las diferencias de criterio, será una
de los retos de esta generación.

Cílaro en Cáncer

Cílaro está en Cáncer entre 2010 y 2022.

Es muy probable que estos individuos defiendan con ardor los aspectos más hogareños de las
relaciones. Para ellos, será importante tener un espacio común donde cobijarse de las inclemencias de la
vida, y lo defenderán con uñas y dientes frente a cualquiera que suponga una molestia. Los valores
tradicionales pueden volver a repuntar entre ellos, quizás como una forma de protegerse contra las
complejidades del mundo que les tocará vivir.

Cílaro en Leo

Cílaro se moverá en el signo de Leo entre 2021 y 2039.

Para las personas que van a nacer con esta configuración, se puede prever una fuerte implicación en
defensa de la parte más lúdica, amorosa y magnética de la relación. Es probable que ellos se rebelen
contra cualquiera que intente reducir el placer compartido con el ser amado, o la capacidad de generar
juntos nuevas experiencias creativas.

Cílaro en Virgo

Este cuerpo sólo se moverá en terrenos de Virgo a partir de 2038.

Resulta difícil saber cómo usarán este símbolo las personas que nazcan en próximas décadas, pero es de
esperar que tengan el deseo de defender todo aquello que se comparte de manera cotidiana con la
pareja. En los pequeños detalles, en las acciones prácticas, intentarán trazar una línea entre lo que
comparten con alguien especial y el resto del mundo.

Cílaro en Libra

Cílaro permaneció en el signo de Libra entre 1928 y 1949.

En el signo de Libra, lo que Cílaro defiende con fuerza es el propio vínculo. Estas son las personas que
entienden, con más claridad que otras, que las relaciones deben tener un espacio propio, que sólo puede
se desarrollará bajo cierta capa de protección frente a todo lo que está fuera de ella. En algunos casos,
esta defensa se vivirá de un modo demasiado combativo, que no permite la entrada de ninguna
influencia externa. Pero cuando la energía se expresa en su mejor versión, nos encontramos con seres
que saben proteger aquello que aman y disfrutar con el proceso. Se trata de una posición donde el
centauro actúa en ocasiones de un modo más genérico que individual.

Cílaro en Escorpio

La estancia de Cílaro en Escorpio, se dio entre 1949 y 1964.

Este tiempo en el territorio de Escorpio influye en las personas nacidas en este período generacional,
dándoles un cierto celo para defender la intimidad de la relación frente al mundo. Aquí es frecuente
sentirse atacado por las opiniones de los demás, o por las intromisiones de terceras personas. Por este
motivo, ellos sienten una especial inquina contra los que ejecutan estas molestas acciones. En los casos
más desarrollados, nos encontramos con personas que saben defender la intimidad de la pareja,
cuidando que las vivencias afectivas y sexuales que se den en su seno, queden a resguardo del mundo
exterior.

Cílaro en Sagitario
Cílaro se movió por los terrenos de Sagitario entre 1964 y 1974.

Aquellos que han nacido bajo esta influencia generacional, tienen la tendencia a defender los aspectos
más elevados del vínculo que compartan con otras personas. Para ellos, una relación debe tener cierta
influencia en el desarrollo personal de cada uno de los individuos que la componen. De este modo,
cuando algo pone en peligro ese crecimiento, cuando hay factores que se oponen, pueden ejercer una
considerable presión para eliminar el obstáculo. En los casos menos desarrollados, nos encontramos
con seres que quieren defender el aspecto más ortodoxo de las tradiciones en lo que a la pareja se
refiere, quizás por temor a la fragilidad actual de los vínculos.

Cílaro en Capricornio

Entre 1974 y 1980, Cílaro estuvo situado en Capricornio.

En el signo de Capricornio, Cílaro ayuda a que las personas nacidas bajo su influencia tengan una clara
postura de defensa de aquello que se comparte con la otra persona bajo la forma de proyectos
conjuntos. Estos individuos sienten que cualquier idea o negocio que se mantiene en común debe ser
cuidado a toda costa frente a las acechanzas del mundo exterior. Ellos pondrán mucho de su parte para
que estos proyectos prosperen, siempre que el vínculo se mantenga.

Cílaro en Acuario

Acuario fue el segmento del cielo donde Cílaro estuvo entre 1981 y 1985.

Para los nacidos en este momento, la sensación que se tiene es que es preciso defender la capacidad de
crecimiento de ambos, su poder para expresar toda la originalidad del vínculo. En este sentido, ellos
quieren generar espacios donde se pueda conectar con el colectivo, con amigos o con la sociedad en
general, pero respetando las potencialidades de los miembros de la relación. En los casos más
desarrollados, Cílaro se manifiesta del modo más apacible posible, puesto que ellos sienten que, si no
hay una apertura a lo que está fuera de la relación, no resulta posible crecer. Cuando este desarrollo no
es tan positivo, puede haber luchas internas en busca de una mayor dosis de libertad.

Cílaro en Piscis

En el signo de Piscis, Cílaro se movió entre 1986 y 1990.

Para las personas con Cílaro en Piscis, la necesidad de defensa gira en torno a todo aquello que afecta a
los sentimientos más profundos de la pareja. Los momentos de romanticismo compartido, el cuidado
que cada uno vuelca en el otro, la capacidad de sanar las heridas mutuas, son aspectos que para estas
personas son de la máxima importancia. Por eso, se rebelarán contra aquellos que intenten coartar estas
posibilidades. En algunos casos, estas personas se alzarán contra la otra parte si esta no está a la altura
de sus ideales o de sus fantasías. Pero cuando el desarrollo del ser es elevado, hay una profunda
compasión hacia las debilidades de la otra persona.

Cílaro en las Casas


Cílaro en la Casa 1

Cílaro se halla en una posición fuerte cuando se encuentra ubicado en la casa primera del cielo, y sobre
todo si está a pocos grados de distancia del Ascendente. Cuando se halla en estas posiciones, podemos
esperar que tenga una cierta relevancia dentro del conjunto de los centauros natales. Para las personas
que tienen a Cílaro situado en esta zona, resulta muy importante desarrollar una defensa muy clara de lo
individual frente a lo compartido.

Esto se puede expresar tanto dentro de la propia relación, como en el trato con las personas externas a
ella. Dentro del vínculo, ellos se sienten amenazados cuando su personalidad, sus peculiaridades, o sus
intereses, están siendo atacados o invadidos por la pareja. Hacia el exterior, les resulta necesario poner
ciertos límites frente a la intromisión de otros. Si estos límites, tanto internos como externos, son sanos,
pueden ser muy positivos. Pero hay que cuidar que no se conviertan en una forma fácil de esconder la
propia soberbia.

Cílaro en la Casa 2

Cuando Cílaro está situado en la Casa 2 del cielo, aquello que se defiende con más fuerza es todo lo
que se considerado valioso dentro de la relación. Para estas personas, es necesario manifestar ante el
mundo qué logros se están consiguiendo de manera conjunta o qué posiciones económicas se han
alcanzado. De este modo, si encuentran alguna oposición o ataque a esas ganancias o éxitos, pueden
defender con fiereza lo que consideran suyo.

En los casos más destacados, están las personas que saben que en una relación se debe aprender a
reconocer los propios valores, así como dar espacio a que los valores del otro se desarrollen
correctamente. Estos son los seres que defienden aquello que es valioso en el vínculo, pero no sólo en
el plano material, sino en lo emocional y en lo espiritual. Saben que dando importancia a lo que tienen
en común, a sus mejores aspiraciones, pueden crecer en compañía del ser amado.

Cílaro en la Casa 3

En la Casa 3, Cílaro manifiesta la necesidad de defender aquello que se piensa y los medios de los que
se dispone para expresarlo. En algunos casos, esta defensa se realizará dentro del vínculo, dando mucha
preponderancia a los propios criterios, y quejándose amargamente cuando la otra persona opina de
manera diferente. Pero cuando se supera esta fase inicial, la relación puede evolucionar hacia el respeto
de las ideas de cada cual, hacia la libre expresión de los criterios y al respeto mutuo.

Cuando esta defensa se hace hacia el exterior, ellos desean que la palabra de su pareja sea escuchada,
que las ideas que tienen juntos, sus proyectos, sus aspiraciones, sean respetadas. Si este respeto no se
encuentra, entonces actuarán de un modo más activo, alzando la voz o usando argumentos más
contundentes. Sea como sea, para ellos, tanto las ideas como la posibilidad de expresarlas, es algo que
debe ser defendido a toda costa, tanto dentro de la pareja, como cara al exterior.

Cílaro en la Casa 4

Ubicado en esta posición Cílaro manifiesta la necesidad de cuidar y proteger el lugar físico donde
convive la pareja. El hogar es un templo que no puede ser profanado por nadie externo, ya que para
estas personas, es el refugio más seguro frente a todas las inclemencias de la vida cotidiana. Ellos
necesitan tener un lugar, tanto físico o emocional, donde resguardarse y compartir las emociones de
manera abierta y sincera.

La vida familiar se vuelve muy importante aquí, por lo que es de esperar que estas personas pongan un
gran celo en cuidar a los suyos, tanto a los antecesores como a los hijos. Nada puede afectar a aquellos
que aman, y será fácil que actúen de un modo que roza la agresividad cuando sientan que estas
personas sufren algún tipo de peligro. Cuidando a sus seres queridos, sienten que están aportando su
grano de arena a la relación.

Cílaro en la Casa 5

Cuando Cílaro se encuentra en esta zona del cielo, manifiesta la necesidad de desarrollar una defensa de
aquello que mantiene a la pareja enamorada. Estas personas son las que desean vivir un romance
continuo, y se alzan en armas contra cualquier elemento que amenace con enturbiar esa sensación
idílica. Como el romance no puede ser mantenido de la misma manera al inicio de una relación que
después de un tiempo, harán bien en usar sus energías para reactivar la pasión.

De este modo, en vez de luchar contra la otra persona, o contra el mundo que los aparta al uno del otro,
aprenderán a defender sus propios impulsos, sus propias necesidades de conexión magnética con la otra
parte. Además, ellos son grandes defensores de los hijos que se tengan en común, y pueden poner
mucho de su parte para que la experiencia de la paternidad sume elementos positivos al desarrollo del
vínculo que mantienen.

Cílaro en la Casa 6

En la Casa 6, Cílaro está ubicado en una zona donde necesita defender todo lo que forma parte de la
vida cotidiana dentro de la pareja. Ellos son los que sienten que los pequeños rituales de cada día son
importantes. Así que cuando algo amenaza con desequilibrar esa base rutinaria que les da seguridad
dentro de la relación, se levantan contra los cambios o las novedades, intentando volver a lo que se
consideraba bueno y tranquilo. Los pequeños detalles, los cuidados físicos, el amar con hechos y no
con palabras, es algo muy valioso para estas personas.

Cuando aprenden a tener una visión más amplia de las relaciones, comprenden que ciertos cambios son
necesarios de vez en cuando y que el pasado no siempre es la mejor referencia para el futuro. De este
modo, aprenden a defender las buenas rutinas, que son aquellas que refuerzan el amor, y no las que
simplemente dan seguridad y certidumbre. Además, cuidando la salud y la alimentación de los suyos,
sienten que los defienden frente a enemigos externos, y en muchas ocasiones, tienen razón.

Cílaro en la Casa 7

La Casa 7 es una posición poderosa para este centauro. Este es el espacio donde vivimos las relaciones
más comprometidas, y precisamente es Cílaro quien defiende la energía compartida con otra persona.
Si además, este cuerpo se halla cerca del Descendente, nos encontramos en una situación aún más
fuerte. Para estas personas, lo que se debe defender es la propia relación en todos sus aspectos. Frente al
mundo, ellos actuarán con firmeza ante cualquiera que quiera atacar a la pareja, al vínculo que se
comparte.

Ahora bien, hay que tener cuidado cuando las cosas se tuercen dentro de la propia pareja, porque
entonces, ellos querrán defender la unión incluso si ésta ya no funciona. O bien, pueden intentar que
todo vuelva a ser como antes, cuando ya no es posible. En estos casos, pueden transformar el amor en
odio. Como es lógico, esto dependerá de otros factores de la Carta (por ejemplo, una fuerte presencia de
tensiones en la Casa 7), y del grado de desarrollo de la persona.

Cílaro en la Casa 8
Ubicado en la Casa 8, Cílaro está en una posición de cierto poder, aunque no siempre es un poder
fácilmente reconocible. Aquí nos encontramos con las personas que sienten la necesidad de defender
todo lo que es íntimo en la pareja. Para ellos, está claro que hay ciertos actos, o ciertas demostraciones
emocionales, que sólo pueden hacerse de puertas para adentro. Así que el simple hecho de que otros
presencien estas acciones, les molesta. Por eso, se sienten amenazados cuando se conocen sus actos, o
cuando su vulnerabilidad emocional es puesta ante el escrutinio público.

Ellos necesitan defender todas las parcelas de su intimidad, y tienen que encontrar un espacio protegido
para poder expresar sus emociones más profundas. Cuando defienden este espacio, pueden abrirse tanto
afectiva como sexualmente. Además, esta posición tiene la particularidad de que es un espacio donde se
defienden con fuerza los bienes de la pareja, su dinero o su trabajo.

Cílaro en la Casa 9

Cuando Cílaro está situado en la Casa 9, hay una cierta tendencia a defender el espacio intelectual de la
pareja. Estas personas están muy dispuestas a dar rienda suelta a sus ideas, a sus intereses y a sus
proyectos. Se moverán adonde haga falta, recurrirán a las instancias que sean necesarias, con tal de
proteger la integridad de lo que creen. Esta defensa de las propias ideas, que puede ser en ocasiones un
poco exagerada, se realiza tanto hacia el interior de la pareja como frente al resto de la sociedad.

En algunos casos, nos encontraremos con personas que no quieren dar su brazo a torcer en aquellos
temas que son de su máximo interés. Discutirán con su pareja por mantener sus puntos de vista, que
consideran superiores o mejor fundamentados. En otros, intentan crear con su pareja un frente
intelectual común frente a los demás. Pero cuando llegan a un nivel de comprensión más elevado, se
hacen conscientes de que lo que tienen que defender es el propio crecimiento de ambos como seres
humanos. En cuanto aprenden a proteger su desarrollo personal frente a quien les quiera frenar, están
haciendo uso de la mejor energía de Cílaro.

Cílaro en la Casa 10

En la Casa 10, Cílaro se encuentra en una posición de cierta fuerza. Aquí nos encontramos con las
personas que son capaces de defender con fuerza los proyectos compartidos con la pareja. Si están
llevando a cabo alguna acción, si tienen una empresa en común, o si tienen ambiciones
socioeconómicas, ellos se alzarán contra cualquiera que imponga algún impedimento al éxito de ambos.

En algunos casos menos desarrollados, nos encontramos con las personas que tienden a dar más valor a
su propio éxito profesional antes que al desarrollo de una unión emocionalmente rica. Ellos defenderán
con fuerza sus ansias de triunfo, socavando aspectos muy importantes de la relación. Pero en los casos
más positivos, lo que se observará es un fuerte deseo de prosperar en comunión con la otra persona.
Estos individuos entienden que el éxito debe ser de ambos, incluso aunque no se dediquen a los mismos
asuntos. Quieren llegar juntos a la meta, y disfrutar de la medalla.

Cílaro en la Casa 11

Cuando encontramos a Cílaro en la Casa 11 del cielo, estamos ante una posición donde el centauro
reclama su espacio propio frente a los demás y frente al colectivo. Estas suelen ser personas de ideas
propias, que saben mantener de un modo muy firme. Estas ideas, que tienen en muchas ocasiones un
tinte progresista, se convierten en un elemento a defender con fuerza. En algunos casos, menos
evolucionados, lo harán dentro de la propia pareja, con quien disputan la supremacía en cuanto a
originalidad o valentía.
Pero cuando desarrollan lo mejor de esta posición, se trata de individuos que han comprendido que lo
que una pareja genera dentro de sí se tiene que convertir en inspiración para los demás. Aquí, ellos
defenderán su capacidad para compartir ideas, para entretejer acuerdos, para crear nuevas posibilidades.
Cualquier persona que intente apartarlos de este camino de generosidad, tendrá su firme oposición. Son
personas que sienten que una pareja debe estar volcada con la sociedad, a través de causas humanitarias
y de progreso.

Cílaro en la Casa 12

En la Casa 12, Cílaro se sitúa en una posición donde lo que se defiende, son los propios sentimientos
dentro de la relación. Aquí nos encontramos con personas que tienen un cierto grado de idealismo, y
que querrían cuidar que la relación se mueva siempre por los terrenos del romance y las emociones más
tiernas. En ocasiones, se lamentan cuando esos ideales se pierden. Pero también deben aprender a
renovar los sentimientos a medida que la relación va evolucionando con el tiempo.

Si la otra persona tiene algún problema, ellos harán todo lo posible para resolverlo, y se levantarán
contra cualquiera que cree sufrimiento a su pareja. En el fondo, son seres muy compasivos, pero que
saben que la mejor forma de serlo, es con la defensa activa de aquello que es objeto de su compasión.
En los mejores casos, nos encontramos con individuos que lo dan todo por la otra persona, llegando al
máximo sacrificio, si fuera preciso.

Aspectos a Cílaro
Los aspectos que los planetas de la Carta Natal realizan sobre Cílaro, permiten comprender mejor cómo
actúa el simbolismo de este cuerpo. Como ocurre con todos los centauros, recomiendo analizar sólo los
aspectos más fuertes, especialmente la conjunción y la oposición, y siempre dando prioridad a aquellos
que estén dentro del orbe más estrecho posible. De este modo, cuando el Sol es el planeta que se
encuentra en aspecto con Cílaro, manifiesta la necesidad de defender la propia identidad ante el mundo
y ante la pareja. Estas personas necesitan ser ellos mismos en cualquier situación y por ese motivo, se
abren ante aquellos que les respetan y les aprecian. Desarrollando este símbolo, se genera una unión
muy sólida. En cambio, cuando es la Luna la que tiene conexión con Cílaro, lo que se defiende es la
propia esencia emocional del sujeto. Aquí, lo importante es que los sentimientos sean respetados, así
como todo aquello que conecta al ser con la imagen de la madre o con la familia. Los aspectos nutricios
del vínculo, también son defendidos.

Si es Mercurio quien aspecta a Cílaro, tenemos a las personas que son ardientes defensores de sus
conceptos. Ellos saben expresar con claridad lo que piensan, y si otros elementos de la Carta así lo
indican, pueden entrar fácilmente en debates para que sus ideas sean aceptadas en lo que valen.
Defenderán también las ideas de su pareja si desarrollan correctamente este aspecto. Cuando estamos
ante una conexión con Venus, es nuestra capacidad de disfrutar, de sentir y de saborear lo bueno, lo
que es objeto de defensa. Cualquier persona que intente sabotear ese disfrute, sentirá la ira de Cílaro
sobre sí. En el caso de Marte, Cílaro se encuentra muy reforzado, y puede llevar a ciertos
comportamientos agresivos cuando la integridad del vínculo o la de la pareja, estén en peligro. Estos
individuos son ardientes defensores de aquello que aman, pero pueden ser demasiado aguerridos en
ocasiones.

Júpiter, en aspecto a Cílaro, revela hasta qué punto tenemos que combatir para poder crecer en
compañía de la pareja. Aquí todo vale, con tal de que se nos permita desarrollar todo nuestro potencial.
En cambio, cuando es Saturno el planeta que aspecta a Cílaro, nos encontramos con aquellos que
tienen que luchar para que las estructuras que crean no sean derruidas por el otro, o por la sociedad en
oposición a la pareja. Será importante definir qué queremos crear y cómo, para que esta energía sea
realmente provechosa.

Cuando es Urano quien aspecta a Cílaro, nos presenta una de sus caras más guerreras. Aquí la persona
necesita encontrar una meta por la que luchar, y ésta puede ser la defensa de su propia libertad. No es,
por tanto, la mejor posición para alguien que quiere comprometerse seriamente en una relación, a
menos que lo haga con alguien que sepa respetar su independencia. En el caso de que sea Neptuno
quien tenga el aspecto fuerte a Cílaro, aquello por lo que se lucha está muy relacionado con los sueños
románticos. Estos son los individuos que lo dan todo con tal de no dejar de vivir el romance en sus
vidas, y se defienden ciegamente contra el ataque del tedio o del materialismo dentro de la relación. Por
último, cuando Cílaro aspecta a Plutón, la lucha se puede dar en torno a posiciones de poder. Esta es
una situación de cierto peligro, puesto que se desea mantener el control a toda costa, y si la otra persona
no hace concesiones, no podemos esperar ningún buen resultado. La parte positiva de esta situación
puede ser la de defender la capacidad de la pareja de renovarse tras cada conflicto o fracaso.

Revolución de Cílaro
Cílaro es un viajero lento, por lo que nadie puede esperar a vivir un ciclo completo de este cuerpo. De
todos los centauros tratados en este volumen, es el que posee un período más largo, 133 años. Así que
lo máximo que podemos aspirar a vivir es la oposición a su lugar natal, que se producirá, de promedio
en torno a los 66 años. De todos modos, como posee una órbita muy excéntrica, algunos lo vivirán
antes y otros después de esa fecha, dependiendo de cuándo hayan nacido.

Este tránsito por oposición, nos sitúa, en el momento preciso en que ocurre, cara a cara con los temas
de Cílaro. ¿Qué es lo que tenemos que defender para que nuestras relaciones sigan adelante? ¿Qué
peligros corren nuestros vínculos? Éste es un tiempo donde estos temas salen a la superficie y deben ser
examinados.

Como en cualquier tránsito, cuando este se vive desde la inconsciencia, emerge como un problema,
como algo que nos causa sufrimiento. Pero si ponemos luz sobre él, se revela como una oportunidad de
aprendizaje, de crecimiento, que redundará en un desarrollo más armonioso de nuestra relación.

Cílaro y los eclipses


Los eclipses afectan a Cílaro y a la pareja de este cuerpo, Hilónome, en un período de tiempo no muy
largo. Esto se debe a que los eclipses solares y lunares se desarrollan a lo largo de un eje que se va
moviendo lentamente por el firmamento. Como Cílaro e Hilónome se mueven en la actualidad en una
ubicación cercana a la oposición, es normal que, si un ciclo de eclipses afecta a uno, antes o después, lo
haga también con el otro.

Cuando un eclipse, sea lunar o solar, se da sobre Cílaro, nos muestra la necesidad de entender cuál es
nuestra lucha presente y qué es lo que merece ser protegido en nuestra vida de pareja. En ocasiones,
derrochamos energía defendiendo posiciones que no nos conducen a ningún resultado positivo. De este
modo, cuando Cílaro es activado por el eclipse, nos está indicando que debemos realizar algún tipo de
reflexión acerca de cómo estamos usando su simbolismo. ¿Luchamos contra el otro o en compañía del
otro?

Las personas que son ignorantes del evento, lo pueden vivir como una pequeña crisis que les impulsa a
actuar de un modo defensivo o agresivo. Esto será visible en temas relacionados con la vida de pareja, o
en la relación de la pareja con el colectivo que la rodea (familia, amigos, trabajo, etc.). Pero si el eclipse
se experimenta de un modo consciente, la reflexión de la que se habla en el párrafo anterior, puede
tener lugar. Así, escogemos cuáles son las batallas que merece la pena luchar y cuáles no. Por supuesto,
la naturaleza de esas batallas tiene que ver con el simbolismo personal de Cílaro, tal como se expresa en
la Carta Natal.

Cílaro en sinastría
Como sucede con Hilónome, Cílaro es un centauro bastante importante en un estudio sinástrico. Revela
la manera en que defendemos nuestras relaciones, o el modo en que nos defendemos incluso dentro de
la relación cuando nos sentimos atacados. De este modo, nos da una información muy valiosa acerca de
cómo manifestar esas energías agresivas de un modo constructivo.

Cílaro manifiesta los puntos débiles de nuestro ego, aquello que nos hace saltar como un resorte. O
bien, desde una perspectiva más elevada, los actos de valor que podemos ejecutar para defender a la
persona amada. De manera que, si conocemos la posición de nuestro Cílaro natal, podemos convertir la
energía más baja de este cuerpo en otra más positiva para nosotros y para los demás.

También es de interés saber cómo está ubicado el centauro en la Carta Natal de nuestra pareja, de modo
que podamos entender ciertos mecanismos agresivos que puedan surgir. Cualquier planeta propio o
ajeno que toque a la posición de Cílaro en la Carta de la pareja, dará importancia a este símbolo que,
bien administrado, puede ser muy positivo.
Los centauros en la Carta de Jiddu
Krishnamurti
Jiddu Krishnamurti, uno de los líderes espirituales más influyentes del siglo XX, nació en la ciudad de
Madanapalle, en India, en un tiempo en que su país formaba parte del Imperio Británico. Existen
algunas controversias sobre su fecha de nacimiento, pero la que se suele aceptar entre la comunidad
astrológica es la del 12 de mayo de 1895, a las 00:30 horas de la mañana.

Su padre era un trabajador de la administración colonial británica y pertenecía a la casta superior, los
brahmanes. Pero, más que por su padre, Jiddu sentía veneración por su madre, Sanjeevamma, que
falleció cuando él apenas contaba diez años de edad.

El niño Krishnamurti sufrió malaria siendo aún muy pequeño, una enfermedad que le acompañó
durante años, ya que tuvo diversos brotes de la misma. Se le consideraba como un joven demasiado
soñador y poco aplicado, e incluso se llegó a pensar que podía tener algún tipo de discapacidad
psíquica. Como consecuencia de estos hechos, sufrió castigos físicos regulares, tanto en la escuela
como en casa.

Es en esa época temprana cuando desarrolla una conexión muy profunda con la naturaleza, que le
acompañó toda la vida. Según su propio relato, comenzó a tener experiencias psíquicas desde pequeño,
como el hecho de ver a una hermana o a su propia madre después de muertas.

El padre de Jiddu estaba relacionado con la Sociedad Teosófica, una agrupación espiritual fundada en
torno a la obra de Madame Blavatsky y de las supuestas enseñanzas de ciertos maestros espirituales que
enviaban sus mensajes desde otra dimensión. Esto hizo que Jiddu tuviera contacto con personas de la
organización en la ciudad de Adyar.

Cuenta la historia que cierto día, Charles W. Leadbeater, uno de los líderes de la Sociedad, observó a
Jiddu, cuando contaba 14 años de edad. Leadbeater, que aseguraba tener la capacidad de ver el aura de
las personas, quedó maravillado por la energía que irradiaba el joven, siendo "la más maravillosa aura
que había visto, sin una sola partícula de egoísmo en él". Lo que siguió a continuación fue la adopción
del muchacho por parte de la Sociedad, que vio en Krishnamurti a la reencarnación del buda Maitreya.

Otra de las líderes del grupo, Annie Besant, adoptó al muchacho, que sin duda vio en ella a una madre
sustituta. Aunque el padre de Jiddu intentó recuperar la custodia, la perdió en los tribunales, lo que
permitió que la Sociedad tutelara a Jiddu durante los años siguientes, sometiéndole a un duro
entrenamiento para poder convertirse en el líder espiritual que todos querían que fuera. Según quienes
le conocieron en aquel tiempo, Jiddu actuaba con completa obediencia a los líderes, siendo como un
recipiente vacío donde todos proyectaban sus expectativas. Se fundó para él, la Orden de la Estrella de
Oriente, que pronto recibió sustanciosas donaciones desde Europa y Estados Unidos.

Muy pronto, Krishnamurti viajó por toda Europa bajo los auspicios de la Sociedad. Pasó largo tiempo
en Londres, donde sufrió el racismo y se vio afectado por la soledad y la añoranza de su país natal.

A los 27 años de edad, y mientras estaba en Estados Unidos, lejos del control de los dirigentes de la
Sociedad Teosófica, Krishnamurti sufrió una especie de despertar espiritual, que transformó su visión
de la realidad.

Pocos años después, anunció públicamente su renuncia a ser considerado como un semidios. Disolvió
la Orden de la Estrella de Oriente y ordenó que los bienes recibidos fueran devueltos a sus donantes.
Conviene aclarar que, entre estos bienes, se incluía un castillo en Holanda y miles de hectáreas de
terrenos. Esto provocó la animadversión de algunos miembros de la Sociedad Teosófica, pero sirvió
para que Krishnamurti pudiera volar solo y comenzar su auténtica carrera como maestro, caracterizada
por una imagen pública de humildad y desapego.
Krishnamurti escribió muchos libros, que aún hoy son considerados como piezas de gran valor
espiritual por millones de personas en todo el mundo. Se dice de él que era un ser dotado de cierto
magnetismo y que poseía un gran sentido del humor. Aunque siempre negó haber tenido vínculos
sentimentales, se sabe que mantuvo algunas relaciones estables a lo largo de su vida, como veremos.

Su ideario rechazaba cualquier culto a su persona, enseñando al ser humano el valor de la libertad, la
necesidad de llevar una conducta honesta y el rechazo a las religiones organizadas. Para él, cada
persona debía encontrar su propio camino en la vida y su propia conexión con lo infinito. Falleció en
1996, cuando contaba 90 años de edad.
Carta Natal y centauros de Jiddu Krishnamurti
Astrológicamente, la Carta de Krishnamurti nos muestra un Sol en Tauro, con la Luna en Sagitario y el
ascendente ubicado en el signo de Acuario. Su Sol en Tauro en la Casa 3, nos presenta a alguien que
sabe dialogar, que es un pensador, aunque en ocasiones, algo lento, como ocurría en sus años infantiles.
Este Sol se halla en oposición a Urano en la Casa 9, mostrando la capacidad de Krishnamurti de traer al
mundo ideas revolucionarias, que no siempre son bien aceptadas

El ascendente en Acuario es también bastante revelador en este sentido. Krishnamurti no era una
persona que sintiera temor a mostrarse como alguien exuberante, distinto y con cierto toque enigmático.
Para él, lo no convencional era lo normal y podía representar con facilidad el papel que se le asignó en
sus primeros años, el de un líder espiritual ubicado por encima del bien y del mal.

Varios planetas pueblan su casa 5: Venus, Júpiter y Marte, lo que da cuenta de su carácter jovial y de su
capacidad para enamorarse con facilidad. También nos dan una pista acerca de su magnetismo
personal. Y Mercurio, junto al Bajo Cielo, revela una persona que tiene una profunda conexión con sus
orígenes, algo que nunca perdió en sus años adultos.

La posición Lunar es llamativa, ya que se muestra como un planeta algo distanciado del resto y
haciendo oposiciones a los ubicados en su Casa 5. Esta Luna en Sagitario nos señala a alguien
apasionado, guiado por emociones intensas, pero que también puede ser distante en ocasiones, ya que el
luminar se halla en la Casa 11. Era sin duda, una persona muy amistosa, que cultivaba un gran número
de contactos, como así fue, tanto con políticos, como con líderes espirituales e incluso con actores y
actrices de Hollywood. Pero las oposiciones de esta Luna también señalan cierto rechazo a que se
conozca su vida íntima.

En esta Carta, llama la atención la carencia de Cuadraturas entre los planetas. Esta es una característica
de las personas que piensan que la vida es muy fácil y que, de hecho, se crían en un ambiente de
excesiva comodidad. Aunque los primeros años de Krishnamurti no fueron fáciles, debido a la muerte
de su madre, su adopción por parte de la Sociedad Teosófica le permitió disfrutar de una existencia
bastante más acomodada que la que hubiera tenido en su país natal. Los individuos con esta carencia
tienden a no dar importancia a los problemas cuando surgen, hasta que esos problemas crecen y se ven
desbordados por ellos. Quizás esta sea una de las causas que expliquen el hecho de que necesitara
romper con todo para poder llevar una vida más simple, personal y auténtica.

Quirón
Longitud: 2 LIB 58
Casa: 8
Folo
Longitud: 5 TAU 49
Casa: 3
Neso
Longitud: 5 PIS 22
Casa: 1
Asbolo
Longitud: 3 LEO 52
Casa: 6
Cariclo
Longitud: 27 CAP 48
Casa: 12
Hilónome
Longitud: 15 CAP 36
Casa: 11
Cílaro
Longitud: 10 LEO 26
Casa: 6

Tabla 2. Centauros de Jiddu Krishnamurti

Observando el conjunto de su Carta, vemos que no hay ningún centauro que, en principio, llame la
atención por su cercanía a ningún ángulo de la misma. Hilónome se halla en oposición amplia a Marte
y Folo se encuentra en situación similar hacia Saturno. Así que estos son los centauros que deberíamos
analizar en primer lugar. A continuación, y para tocar todos los cuerpos analizados en este libro,
estudiaremos el resto. La posición de sus centauros natales se detalla en la Tabla 2.

Folo se encuentra situado en el signo de Tauro, en la Casa 3 y en oposición a Saturno. Como este
planeta nos relaciona con la memoria ancestral de la familia, podemos entender que, para Krishnamurti,
esta conexión con el sistema familiar tenía un cariz algo complejo. Sabemos que su padre era muy
severo con él, lo que conecta con la oposición a Saturno. También, que sentía una necesidad constante
de volver a la India, a pesar de que su vida estuviera establecida en Estados Unidos. Krishnamurti no
puede ser entendido como maestro si no es a través de su origen étnico, de todas las enseñanzas
recibidas del sistema social en el cual su familia estaba involucrada, lo que incluía tanto la tradición de
la India como la influencia del Imperio Británico. Esto le dio las herramientas, no sólo para
comunicarse, sino para expresar su conocimiento de un modo persuasivo.

Otro aspecto interesante con esta posición de Folo en la Casa 3, tiene que ver con su hermano
Nityananda. En los años en que fue separado de la familia, su única compañía fue su hermano menor,
hasta el punto de que fue para él un apoyo fundamental. Desgraciadamente, su hermano falleció a una
edad muy temprana.

Al analizar a Hilónome, tenemos que ver a esta centáuride en relación con Marte en la Casa 5, a quien
se opone. Hilónome está situada en la Casa 11 del cielo natal de Krishnamurti. Aquí observamos una
paradoja. Por un lado, tuvo relaciones con diversas mujeres, pero nunca se comprometió abiertamente
con ninguna. En cierto modo, durante toda su vida intentó mantener una imagen pública en sintonía con
la educación que había recibido en la Sociedad Teosófica y con las expectativas puestas sobre él,
incluso muchos años después de dejar esta institución. El sacrificio de los ideales románticos (Casa 5),
de mostrarse ante el mundo como un hombre con una vida íntima similar a la de cualquier otro varón,
es algo que muestra un cierto grado de deshonestidad por su parte, no hacia las mujeres con las que
vivió, sino ante la sociedad que le admiraba como un santo célibe.

Aquí, podemos aventurar que Krishnamurti falló en cierto modo, ya que, para estar a la altura del reto
de Hilónome, hubiera sido más eficaz desprenderse del aura de maestro espiritual de masas (Casa 11) y
asumir ante todos, su plena condición humana. Esto, probablemente, habría engrandecido su figura aún
más.

Podemos analizar aquí también la posición de Cílaro, puesto que es un cuerpo que siempre conviene
tener en cuenta junto a su compañera Hilónome. En este caso, Cílaro está en la Casa 6, lo que se
relaciona con la vida que Krishnamurti desarrollaba en su rancho de Ojai, en California. Allí se
dedicaba al cultivo de la tierra, en compañía de la mujer con la que en ese momento estuviera
compartiendo su vida. Esta existencia, dedicada a los pequeños asuntos de la vida cotidiana, fue algo
que defendió siempre ante el mundo. A pesar de su fama y su vida viajera, sabemos que siempre
retornaba a este lugar, donde vivía una vida sencilla, cocinando para todos y fregando los platos.

Quirón se encuentra en la Casa 8 y en el signo de Libra. Esto nos lleva de nuevo al tema de la pareja y
la manera en Krishnamurti vivía sus relaciones. Aquí tenemos poca información, puesto que existe un
velo de silencio acerca de la intimidad del personaje. Pero podemos intuir que tanto la vida de pareja,
como los sentimientos tan profundos que surgen en el contexto de una relación comprometida, debieron
ser campos donde tuvo que lidiar con bastantes conflictos personales. Aceptar que una unión conlleva
cierto grado de compromiso, dejar que alguien accediera a su intimidad, fueron aspectos que sin duda
tuvieron un gran impacto en su existencia. Resulta interesante observar cómo, alguien que hablaba del
amor libre de ataduras, estuviera al mismo tiempo relacionándose con mujeres en vínculos bastante
estrechos.

Hoy en día es conocido que Krishnamurti tuvo una relación de más de 25 años con una de sus
ayudantes, Rosalind Rajagopal. Una mujer casada que se vio obligada a abortar en tres ocasiones. Esta
relación acabó en una agria disputa legal, en la cual, la mujer fue acusada por el círculo de
Krishnamurti de quedarse con dinero o propiedades de él (Casa 8). Según la hija de Rajagopal, nadie
estaba dispuesto a aceptar que el maestro no fuera célibe. Esto se aplica, en especial, a todo el círculo
de mujeres adineradas que, consciente o inconscientemente, estaban enamoradas de él y que le proveían
con donaciones. Porque es un hecho que Krishnamurti, a pesar de disolver la Orden de la Estrella de
Oriente, nunca despreció el dinero, ni la compañía de personas adineradas, sobre todo mujeres, que le
proporcionaban generosos ingresos.

Es evidente que, tanto la intimidad sexual como el manejo que otros hacían de su dinero, o su manera
de vivir del dinero de otros, fueron temas conflictivos en la vida de Krishnamurti, por más que sus
seguidores intenten ocultarlo. Al parecer, les cuesta comprender que él era un ser humano, no la
encarnación de un dios, y por tanto sujeto a las mismas contradicciones que cualquiera de nosotros.

El centauro Neso, que se ubica en la Casa 1 y en el signo de Piscis, resulta relevante dadas las
dimensiones del personaje. Para un líder espiritual, el concepto de justicia universal, de retribución, es
muy importante, y resulta evidente que Krishnamurti tenía una idea muy personal acerca de estos
temas. Para él, asuntos como el karma debían ser observados desde una perspectiva algo diferente, en la
cual, el tiempo juega un papel.

Según sus palabras, como entre la causa y el efecto transcurre el tiempo, el efecto nunca será similar a
la causa que lo originó y, por tanto, generará una causa nueva. Para él, la mente humana puede romper
con este ciclo a través de la transformación interior. Esto le aleja de la creencia popular de que las
consecuencias del karma son muy difíciles de evitar. También es verdad que, como Neso, se aprovechó
un poco de su estatus para satisfacer sus propias necesidades afectivas, y que lo hizo en un entorno
oculto, o con personas que no eran totalmente libres, lo cual viene muy bien reflejado por la posición
del centauro en la Casa 1 y en el signo de Piscis.

Asbolo está situado en el signo de Leo y en la Casa 6. Este maestro no es conocido por ser alguien
dedicado a la profecía, y por tanto no estamos ante un centauro que sea relevante en su vida. Pero si lo
queremos ver por el lado creativo, observamos que una parte importante de la labor creativa de
Krishnamurti estaba relacionada con la vida cotidiana, pero al mismo tiempo, generando una suerte de
magnetismo personal. El aura que rodeaba a este maestro era la de un santo laico, que proyectaba su
inspiración sobre los demás, y seguramente contribuyó a cambiar las vidas de muchas personas. En este
sentido, seguramente encontró la parte más elevada de Asbolo. Pero también, como vemos, ocultó
ciertas zonas de su vida, de manera que su estatus como maestro no quedara manchado.

Por último, Cariclo en la Casa 12 y en el signo de Capricornio, nos habla de la manera en que
Krishnamurti se relacionaba con todas sus creaciones. Él deseaba generar un impacto en el público
(Capricornio), y es de esperar que, en cierto modo, su ego estuviera unido al éxito o fracaso de su
misión. Sea como sea, si fue o no capaz de trascender este apego, es algo con lo que sólo se puede
especular, pero de haberlo hecho, sería un tanto positivo que anotar en su marcador.

Sabemos que no tuvo hijos, pero sí que tuvo una relación muy estrecha con la hija de Rajagopal, a
quien crio de un modo muy atento y cariñoso. Sea como sea, esta "paternidad" se llevó siempre en
secreto (Casa 12), como todo lo que se relacionaba con la vida íntima del maestro.

Cabe preguntarse qué hubiera sucedido si Krishnamurti hubiera vivido toda su existencia con total
transparencia. Sin duda, habría perdido el favor de algunas de sus seguidoras más acaudaladas, lo que
habría mermado el alto tren de vida que tenía. Pero al mismo tiempo, hubiera ganado en credibilidad.
Sea como sea, estos hechos no invalidan, a mi juicio, el valor espiritual de algunas de sus ideas, ya que
hay que separar a la persona de su obra.

Como vemos a través de este ejemplo, los centauros nos permiten profundizar en determinados
aspectos de la personalidad que, de otro modo, podrían quedar diluidos en el amplio espectro de los
símbolos planetarios. Los centauros deben ser estudiados, como ya se ha dicho, en el contexto de toda
la Carta Natal, sin concederles una importancia excesiva, pero aceptando que pueden ser fuentes
válidas de conocimiento acerca de diversos aspectos de nuestra vida.

Por encima de todo, creo que los centauros nos muestran un camino de crecimiento interior que, como
ya hemos comprobado, nos lleva desde la parte menos desarrollada de nuestro ser a ciertas alturas
espirituales que todos podemos alcanzar si nos lo proponemos. Hace falta valor para afrontar cualquier
proceso de transformación, y es el mismo proceso quién nos muestra, a lo largo del sendero, que sí
podemos mejorar nuestra existencia. Así que, si afrontar el conocimiento que aportan estos cuerpos
requiere valentía, también podemos estar seguros de que recogeremos los frutos recibiendo un
conocimiento extremadamente valioso.

Te invito a que estudies el impacto de estos cuerpos en tu vida y que reflexiones acerca de sus
lecciones. Con toda seguridad, encontrarás en ellos a unos buenos consejeros que mejorarán tu
existencia y la elevarán al nivel que mereces. Ese es mi deseo.
Apéndice. Obtener tu Carta Natal
con los Centauros
Existen diversos paquetes de software astrológico que permiten calcular la Carta Natal con la posición
de todos los centauros. Afortunadamente, en los tiempos de Internet, podemos contar con servicios
gratuitos on-line que nos permiten poder trazar una Carta sin necesidad de costosas aplicaciones.

Dentro de la multiplicidad de servicios astrológicos de Internet, te aconsejo que hagas uso del más
completo y profesional que se puede encontrar hoy en día, la web astro.com.

Astro.com es una página que pertenece al grupo Astrodienst AG, fundado en 1980 por el doctor en
física Alois Trendl. Actualmente tiene su sede en Zollikon, Suiza, y ofrece servicios astrológicos de
gran calidad, tanto gratuitos como de pago.

Para usar los servicios gratuitos de astro.com debes entrar en su página web, seleccionar el idioma
español en la cabecera, y hacer clic en el enlace de "login".

Aquí puedes crear una cuenta nueva, haciendo clic en "Crear un perfil de usuario registrado gratuito",
lo que te permitirá añadir los datos de varias personas, o simplemente puedes "Crear un horóscopo
inmediatamente, como usuario invitado". Esta segunda opción es la más recomendable, por ser la más
rápida.

Haciendo clic en ella, la página te solicita que completes tus datos personales: nombre, apellidos,
género y, sobre todo, tus datos de nacimiento, es decir, la fecha, la hora y el lugar. Haciendo clic en
"continúe" accedes a los servicios de astro.com.

Aquí debes buscar la opción "Horóscopos gratuitos" y dentro de ella, selecciona el apartado
denominado "Extensa selección de cartas", que permite realizar todo tipo de cálculos astrológicos.

Busca la casilla de selección llamada "Tipo de carta". Haciendo clic, se abre un desplegable que te
permitirá seleccionar la técnica que desees. Asegúrate de seleccionar la primera: "Carta Natal".

Desplázate al final de la página, donde se encuentra la sección de "Objetos adicionales". Busca el


recuadro "Entrada manual", e introduce esta línea de datos (son los números que corresponden,
astronómicamente, a cada uno de los centauros tratados en este libro, separados por comas):

2060, 5145, 7066, 8405, 10199, 10370, 52975

Por último, haz clic en el botón "Cliquee aquí para ver la carta" y obtendrás la Carta Natal con todos los
centauros, así como sendas tablas gráficas. En la primera, a la izquierda, está la ubicación de cada uno
de los planetas, puntos y centauros, así como los aspectos que realizan entre sí. A la derecha, en un
recuadro más pequeño, está la distribución de todos estos puntos y cuerpos entre los cuatro elementos y
las tres cualidades (cardinal, fijo o mutable).

A partir de aquí, es muy fácil empezar a estudiar la posición de los centauros en tu Carta Natal, o en la
de la persona que desees.
También puedes obtener la posición actual de tus centauros ingresando los mismos números y
seleccionando la opción: "Carta Natal y Tránsitos".
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