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El reinado de los Borbones en España durante el siglo XVIII. Desde Felipe V hasta
Carlos IV. Este tema es simultáneo al del siglo XVIII , va después del tema del siglo
XVII y antes del tema sobre la Crisis del Antiguo Régimen en España que empieza
en la parte final del reinado de Carlos IV. El resto de temas de la Edad Media y la
Edad Moderna los puede ver en esta página.
Tras la guerra se firmó el Tratado de Utrech (1713). Por ese tratado Francia
consiguió que se reconociera a su candidato Borbón en el trono de España: Felipe
de Anjou como Felipe V, pero debía garantizar que no se unirían los dos Estados
en un mismo monarca. Desde ese momento tenemos dos ramas de la familia
Borbón que tuvieron casi siempre muy buena relación: la francesa y la española.
Desde ese momento hasta el presente reinará la dinastía Borbón en España, con
las excepción de tres períodos: la Guerra de Independencia, el Sexenio
Democrático (siglo XIX) y la Segunda República más la dictadura de Franco.
Hubo intercambio de territorios:
Austria, por su parte, aceptó a cambio de quedarse con los territorios europeos de
la monarquía hispánica (Países Bajos, Nápoles y Cerdeña)
Saboya se quedó con Sicilia, pero luego se la cambió a Austria por Cerdeña.
La Terranova francesa y los enclaves españoles de Gibraltar y Menorca pasaron al
reino de Gran Bretaña (nombre del reino por la unión de las coronas de Inglaterra
y Escocia durante el siglo XVIII). Además Gran Bretaña adquirió de España dos
derechos de asiento (permisos comerciales por el que la corona otorgaba algún
monopolio a cambio de una comisión): el navío de permiso que permitía a
Inglaterra comerciar con las colonias españolas con un navío de permiso al año, y
el asiento de negros monopolio en la venta esclavos (que Inglaterra mantuvo
hasta la Guerra del Asiento 39-48 en el contexto de la Guerra de Sucesión
austriaca). Algún artículo del Tratado de Utrech sigue vigente, por ejemplo el que
se refiere a Gibraltar. Se mantuvo la paz en Europa durante 20 años. Por otra parte
Prusia se convirtió en una potencia regional, pasando de ser un ducado a un reino
con Federico I de Prusia.
abordamos el temade este ensayo con la finalidad de agrupar algunas delas más
socorridas definiciones sobre lo que es el co-nuco y el hato. Por la influencia
francesa en la parteeste de la isla, primero por el establecimiento de lacolonia de
Saint-Domingue en el oeste y luego por eltraspaso a Francia de la parte española a
finales delsiglo XVIII, consideramos las que serían las institucio-nes paralelas en la
parte oeste, es decir, el lacou y la habitación. Este es un ejercicio de síntesis de
opinio-nes sobre el tema por viajeros franceses, historiadorese investigadores,
cubriendo algunas publicaciones ydocumentos comprendidos entre los años 1764
y 1827.
1Moreau de Saint-Méry, M. L. E.
El pasar de los años muestran como el cultivo de tabaco empieza en el siglo 19.
Para esta época se inicia su desarrollo como una industria en el colonialismo.
Nacen las primeras creaciones de las grandes marcas que hoy en día todos
conocemos como lo son: 1819 Cabañas y Carvajal, 1850 Sancho Panza, 1875
Romeo y Julieta, 1885 La Gloria Cubana entre otras. Es fascinante saber como el
héroe nacional de República Dominicana, Gregorio Luperón, se dedicaba al
comercio del tabaco en Europa. Podemos mencionar que entre sus principales
clientes se encontraba el famoso literario Victor Hugo.
Producción de tabaco en RD
Para 1959 se desarrolla una inestabilidad económica y política en Cuba. Como
consecuencia llevó al exilio de varias familias apoderadas. Como solución a sus
problemas decidieron emigrar a islas cercanas y por preferencia eligieron
República Dominicana específicamente para el cultivo y fabricación del tabaco.
Debido al clima ideal y tierra fértil de República Dominicana se facilitó la
producción masiva del tabaco. Durante 1960 y 1962 se estableció el Instituto de
Tabaco en el país. Con el fin de promover y proteger a la industria del tabaco en
República Dominicana.
Si eso parece estar en contradicción con la existencia de esclavos hasta el siglo xix
en los Estados del sur de los EE. UU., por poner un ejemplo muy conocido, se debe
dejar claro, por un lado, que no hay que confundir modo de producción esclavista
con esclavitud, que es tan antigua como la historia y continuó existiendo en todo
el mundo después de que el esclavismo1 fuera el modo de producción dominante,
sobreviviendo hasta que el movimiento abolicionista la consideró una situación
socialmente inaceptable. Aún hoy en día reaparece en algunos lugares de
África[cita requerida]. Por otro lado, hay que dejar claro que distintos modos de
producción pueden (de hecho, suelen) coexistir al mismo tiempo combinándose
en una formación económico-social concreta.
Clase Social
Para Karl Marx las clases sociales pueden entenderse de dos formas, sea como: 1)
grupos de individuos que se definen por una misma categorización de sus formas
de relacionarse con los medios materiales de producción (particularmente la
forma de obtención de sus rentas), o 2) una conciencia de clase entendida como
la creencia en una comunidad de intereses entre un tipo específico de relaciones
socioeconómicas. Esto se desprende de la breve descripción que es
frecuentemente citada del 18 Brumario de Luis Bonaparte,4 en ausencia de una
exposición dedicada del tópico en el resto de su obra:
Composición Étnica
En las islas Vírgenes danesas, San John, San Thomas, y Santa Cruz, al igual que en
Martinica y Haití, encontramos el desarrollo de la producción agrícola como parte
consustancial del proceso esclavista en la plantación. Los elevados costos de
producción, la constante demanda de alimentos importados, ropas y
medicamentos para mantener alimentada a la fuerza de trabajo esclava llevó a los
dueños de plantaciones a asumir la modalidad de proveer a los esclavos con
tiempo libre y tierras, semillas e instrumento de producción para incrementar la
producción agrícola para el consumo del propio esclavo y la familia. En el fondo,
esta política tenía varios objetivos claros, evitar el cimarronaje, los boicots a la
producción y proveer al esclavo con ciertos incentivos que lo ataran más a la
plantación. Además, libraba a la plantación de la responsabilidad de proveer la
ración de comida a los esclavos. La práctica amplió las posibilidades del esclavo,
pues algunas plantaciones proveyeron los sábados libres para el trabajo agrícola, y
luego con la influencia de las religiones luterana, metodista, Católica Romana, etc.
Se fortaleció la práctica de usar los domingos para el día de culto. (Verene
Shepherd, Hillary McD.Beckles, Caribbean Slavery in the Atlantic War, A Student
Reader. Marcus Wiener Publisher, 2000. P. 723)
La declaración del día libre para los esclavos (sábado) en 1843, introdujo también
este como el día para el mercado. Durante el siglo XVIII, los mercados estaban
muy bien establecidos en las diferentes colonias danesas. Las mercancías que se
vendían, eran repollos, tomates, maíz, huevos, casabes, melones, pescados, leñas,
calabazas, etc. Los mercados estaban abiertos hasta las 8:00. p.m., para la 7.00
p.m. éstos eran alumbrados con velas.
A medida que América fue lentamente descolonizándose del mundo entre el siglo
xix y mediados del siglo xx, las decisiones económicas sobre el mejor modo de
dividir la producción mundial fueron pasando a los grandes grupos empresarios y
financieros. En el año 1855, fueron principalmente las empresas multinacionales,
responsables del 75 % de la producción mundial, las que toman las decisiones
fundamentales sobre la división internacional del trabajo.