Cuando el grupo de arque�logos irrumpieron en la c�mara funeraria donde descansaba la momia, vitorearon muy alegremente porque finalmente hab�an logrado desmantelar todas las trampas mortales que la pir�mide ocultaba. Sin embargo, poco sospechaban que quien m�s se alegraba de su logro era la momia, ya que las trampas de la pir�mide no eran para prevenir que los asalta tumbas entraran a llevarse sus tesoros, si no para impedir que ella saliera, as� que ahora podr�a escapar f�cilmente a destruir la humanidad
Si te gust� este cuento y te gustar�a ayudarme a mantener 365 Microcuentos en
l�nea, puedes dejarme una propina en PayPal.me/helderz o a trav�s de CashApp $Helderz ademas, no olvides de seguirme en: Google Play Store: 365 Microcuentos Twitter: @365Microcuentos Facebook: @365Microcuentos Instagram:@365Microcuentos