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DEFINICIÓN
Una aleación se define como una mezcla homogénea de un metal con uno o
más elementos diferentes, tanto metálicos como no metálicos.
Por ejemplo, el hierro colado o hierro fundido es una aleación de hierro (metal)
y carbono (no metal), mientras que el bronce es una aleación de cobre y estaño,
ambos metales.
Cada metal en estado puro puede presentar propiedades útiles, tales como
buena conductividad eléctrica, buena resistencia a la temperatura y a la
corrosión química, alta dureza y resistencia mecánica, incluso combinar varias
de estas propiedades en un mismo metal.
Las propiedades concretas que tendrá una aleación son muy difícil de predecir.
No es simplemente la suma o la resta de elementos, por lo que el diseño de
nuevas aleaciones requiere de mucho ensayo e investigación.
Ejemplos de aleaciones
Entre las aleaciones más importantes a nivel industrial y más comunes en la vida
cotidiana, podemos citar los siguientes ejemplos:
Acero: aleación de hierro y carbono hasta un máximo de 2% de carbono
y, por lo general, menores cantidades de otros elementos.
Acero inoxidable: es un tipo de acero al que se le añade mínimo un
10.5% de cromo, y generalmente también níquel y otros elementos para
aumentar la resistencia a la corrosión química.
Bronce: aleación de cobre como metal base y entre un 3 y un 20% de
estaño como aleante.
Cuproníquel: aleación de cobre y níquel.
Cuproaluminio: aleación de cobre y aluminio.
Amalgamas: aleaciones de mercurio con otros metales. Estas aleaciones
suelen tener consistencia pastosa.
Alpaca: aleación de cobre (45 – 70%), zinc (8 – 45%) y níquel (15 – 26%).
Latón: aleación de cobre y zinc.
Peltré: aleación de estaño con cobre, plomo y antimonio.
Oro 18k: aleación de oro (75%) y otros metales como cobre, níquel o
zinc.
Oro blanco: aleación de oro y un metal blanco como plata, paladino o
níquel.
Plata de ley: aleación de plata con otro metal, generalmente cobre.