CODESA (Corporación Costarricense de Desarrollo) fue una entidad creada en

Costa Rica por la Ley N.º 5122 de 1972. Operaba como una empresa de capital
mixto con características de una sociedad anónima.
Su objetivo principal era promover el desarrollo económico del país
mediante el fortalecimiento de las empresas privadas costarricenses
dentro de un régimen de economía mixta.
Durante su existencia, CODESA tuvo un papel relevante en la economía nacional.
Algunas de las grandes empresas bajo su paraguas incluían:
1. CATSA (Central Azucarera del Tempisque S.A.): La mayor central
azucarera del país.
2. CEMPASA (Cementos del Pacífico S.A.): Abastecía el 70% del mercado
nacional de cemento.
3. ALUNASA (Aluminios Nacionales S.A.): Proveía el 30% del mercado de
aluminio.
4. ALCORSA (Algodones de Costa Rica S.A.): La principal desmotadora de
algodón en el país.
5. Cementos del Valle: Otra cementera que inicialmente fue fundada por
particulares y luego adquirida por CODESA.
6. TRANSMESA (Transportes Metropolitanos S.A.): La empresa de transporte
público más grande en el Valle Central.
7. FERTICA (Fertilizantes de Centroamérica): Una planta de producción de
fertilizantes.
8. FLEMAR (Fletes Marítimos S.A.)
9. Tempisque Ferry Boat: Una empresa de transbordadores.
10. DAISA (Corporación para el Desarrollo Agroindustrial S.A.)
Además, CODESA también tenía participación en otras empresas asociadas,
como CABSHA (una empresa de chocolates), LACSA (una línea aérea “nacional”),
SANSA (otra línea aérea), Aceros Técnicos (una metalúrgica), Fibras Nacionales
S.A. (una textilera), Asociación Bananera Nacional (una corporación de
productores de banano) y Cafetalera Industria del Valle (un ingenio de café).
Aunque CODESA tenía amplias potestades y operaba como un ente
autónomo, su historia también está marcada por controversias y desafíos en
su gestión.
¿Por qué se disolvió CODESA?

CODESA se disolvió debido a una serie de factores y circunstancias. Aunque fue

una entidad importante en la economía costarricense, enfrentó desafíos y
controversias durante su existencia. Algunas de las razones clave para su
disolución incluyen:

1. Crisis Económica: CODESA operaba en un contexto económico complejo.

La crisis económica de los años 80 afectó a muchas empresas, incluidas
las que estaban bajo su paraguas. La falta de rentabilidad y la dificultad
para mantener operaciones sostenibles contribuyeron a su declive.
2. Ineficiencias y Gestión Problemática: A lo largo de los años, CODESA
enfrentó críticas por su gestión ineficiente y problemas de corrupción. La
burocracia y la falta de transparencia afectaron su funcionamiento y su
capacidad para adaptarse a los cambios económicos y tecnológicos.
3. Privatización y Liberalización: En la década de 1990, Costa Rica adoptó
políticas de privatización y liberalización económica. Esto implicó la venta
de empresas estatales y la apertura del mercado a la competencia.
CODESA no pudo adaptarse a este nuevo entorno y perdió relevancia.
4. Cambios Políticos y Prioridades: Los cambios en la administración
gubernamental y las prioridades políticas también influyeron en la decisión
de disolver CODESA. Las nuevas políticas favorecieron la participación del
sector privado y redujeron el papel del Estado en la economía.
En resumen, la disolución de CODESA fue el resultado de una combinación de
factores económicos, de gestión y políticos. Aunque su legado sigue siendo objeto
de debate, su historia refleja los desafíos inherentes a la gestión de empresas
estatales en un entorno cambiante.
A lo largo de sus 25 años de existencia las pérdidas de CODESA fueron
estratosféricas. En su último año de operación (1997) sus pérdidas se
calcularon en cientos de millones de dólares de aquella época.
El legado de CODESA se puede resumir en pocas palabras: empobrecer al
pagador de impuestos, el cual fue obligado a pagar la cuenta final.

Impacto de la disolución de CODESA

La disolución de CODESA tuvo un impacto significativo en los trabajadores y
empleados que estaban vinculados a las empresas bajo su administración.
Algunos de los efectos más destacados fueron:
1. Pérdida de Empleos: La mayoría de las empresas controladas por
CODESA se encontraban en sectores clave como la producción de
cemento, azúcar, aluminio y transporte. Con su disolución, muchas de estas
empresas enfrentaron dificultades financieras y, en algunos casos, cerraron
sus operaciones. Esto resultó en la pérdida de empleos para miles de
trabajadores.
2. Incertidumbre Laboral: Los empleados de CODESA y sus subsidiarias
enfrentaron incertidumbre sobre su futuro laboral. La privatización y el cierre
de empresas significaron que muchos trabajadores no sabían si podrían
mantener sus empleos o si tendrían que buscar nuevas oportunidades
laborales.
3. Reubicación y Reentrenamiento: Algunos empleados tuvieron que ser
reubicados o reentrenados para adaptarse a las nuevas condiciones del
mercado laboral. Aquellos que trabajaban en industrias específicas, como la
producción de cemento o aluminio, tuvieron que buscar empleo en otros
sectores.
4. Beneficios y Derechos Laborales: La disolución de CODESA también
afectó los beneficios y derechos laborales de los empleados. Algunos
perdieron beneficios como seguros médicos, pensiones y otros incentivos
que solían estar vinculados a su empleo en las empresas controladas por
CODESA.
5. Impacto Social y Comunitario: Las empresas bajo CODESA a menudo
tenían una presencia significativa en las comunidades locales. Su cierre o
reducción de operaciones afectó no solo a los empleados, sino también a
las comunidades que dependían económicamente de estas empresas.
En resumen, la disolución de CODESA tuvo consecuencias laborales y
sociales importantes. Aunque algunos trabajadores pudieron encontrar
nuevas oportunidades, para muchos fue un período de desafíos y
adaptación