Está en la página 1de 4

TÉCNICAS BÁSICAS DE LABORATORIO

QFAR 1103
1er semestre 2024

LAVADO Y SECADO DE MATERIAL DE LABORATORIO.


El lavado de instrumentos de laboratorio tiene un impacto directo en los resultados de las
investigaciones de laboratorio, por lo tanto, la limpieza y descontaminación de los equipos son de
suma importancia.
Para asegurar la eficacia de los procesos de laboratorio, es fundamental contar con material de
laboratorio que esté completamente limpio y libre de suciedad, grasa u otras impurezas residuales
que puedan contaminar tanto los procesos activos como las muestras, lo cual podría conducir a
resultados incorrectos.
La limpieza eficaz de los instrumentos de laboratorio requiere cuatro componentes que son:
tiempo, temperatura, acción química y acción mecánica. Estos factores son interdependientes y
cada uno aporta un beneficio único al proceso de limpieza. Los factores se ajustan en función del
tipo específico de limpieza requerido, el protocolo de la instalación aprobado o las limitaciones
físicas de la misma.
Todo material debe estar limpio y, en la mayoría de los casos, seco antes de ser empleado en
algún trabajo de laboratorio.

I. LAVADO.

El lavado, enjuague y orden del material de laboratorio debe hacerse inmediatamente después
que haya terminado de usarlo; de esta manera se conoce la naturaleza de la suciedad. Se ha
observado que al postergar por mucho tiempo el lavado del material de laboratorio, los residuos
pueden secarse, cristalizar, formar costras, oxidarse, carbonatar al aire, polimerizar, resinificarse,
etc. haciendo mucho más difícil su limpieza. Es frecuente que por este motivo se peguen llaves,
tapones y uniones esmeriladas que hacen difícil la separación de las piezas.
Es recomendable usar los intervalos de tiempo que dispone durante la sesión de trabajo, para
lavar el material que se ha utilizado, de esta manera, gran parte de la suciedad cede a presión del
chorro de agua de la llave.
Lo primero que se debe hacer para limpiar un objeto es quitar, con un implemento adecuado de
plástico o de madera la mayor cantidad que sea posible. En esta operación se debe evitar el
empleo de espátulas de acero o artefactos similares, que rayen la superficie del vidrio y lo hacen
más susceptible a trizaduras. Para evitar que las baguetas de vidrio dañen el vitrificado del
material de porcelana o rayen las paredes del material de vidrio, es preciso cubrirlas con un
pequeño capuchón de caucho o de goma.
La limpieza se ayuda con escobillas o hisopos de nylon, crin u otras fibras, evitando que el alambre
toque el vidrio. También es eficaz el empleo de arena fina, que por rodamiento no raya el vidrio y
hace saltar las adherencias molestas.

1
Docentes:
Docentes:
Aconcha,kLoyola,
Aconcha, kLoyola,PNavarrete,
PNavarrete,ARamírez.
ARamírez.
TÉCNICAS BÁSICAS DE LABORATORIO
QFAR 1103
1er semestre 2024

Las sustancias que ensucian el material pueden ser:


a) Solubles en agua: sustancias inorgánicas y algunas orgánicas (alcohol, acetona, glicerina,
etc.)
b) Solubles álcalis: sustancias grasas
c) Solubles en ácidos: metales y ciertas sales insolubles en agua.
d) Solubles en disolventes orgánicos: Aceites, resinas, alquitranes.
e) Solubles en mezclas oxidantes: Resinas.

Si no se sabe cuál es el disolvente adecuado, se deberá ensayar en el siguiente orden.


1. Agua.
2. Soluciones alcalinas y detersivas: Las sustancias grasas y resinas ceden con bastante
facilidad en soluciones jabonosas que contengan un abrasivo que no raye el vidrio. El
polvo se puede introducir directamente en el material y humedecer con un poco de agua o
bien puede aplicarse directamente en la superficie sucia con la escobilla húmeda, que ha
sido hundida en el polvo, luego se frota la superficie del vidrio hasta que la suciedad ceda.
Si es necesario se puede repetir la operación.
Otra alternativa, es una mezcla hidroalcohólica amoniacal, que se obtiene al mezclar
amoniaco comercial concentrado con etanol, en relación 1:1.
También se obtienen buenos resultados con sulfato trisodico al 15%, a las que se agrega
una pequeña cantidad de polvo abrasivo. para mayor efectividad de la solución, el lavado
se realiza a 70°C.

3. Ácidos minerales: Los carbonatos metálicos, óxidos, hidróxidos, sales básicas y sustancias
de carácter mineral suelen ser solubles en ácido clorhídrico.
4. Solventes orgánicos: Los aceites, plásticos, resinas y alquitranes son solubles en solventes
orgánicos. Los más usados en el laboratorio son éter de petróleo, benceno, tolueno,
tetracloruro de carbono, éter etílico, etanol, metanol y acetona.
En los casos en que se use alguno de estos solventes orgánicos, tenga presente que:
➢ Por ser solventes altamente inflamables, observe las normas dadas de seguridad en el
laboratorio.
➢ Estos solventes una vez empleados en la limpieza de residuos, pueden ser destilados
para usarlos nuevamente.
5. Soluciones fuertemente oxidantes: Hay sustancias de elevado peso molecular (polímeros,
resinas, proteínas, etc.) que requieren para su eliminación de sustancias oxidantes
energéticas.
a) Mezcla sulfocrómica: Es esencialmente de anhídrido crómico ( CrO 3) y ácido sulfúrico
concentrado. Antes de usar la mezcla sulfocromica en la limpieza, los recipientes deben
tener la menor cantidad posible de agua e impurezas orgánicas. Se introduce una porción
de mezcla sulfocrómica en el recipiente, se humedecen las paredes con la mezcla y la
mayor parte de ella se regresa a la botella de tapa esmerilada. Después de dejar reposar
por un corto tiempo y darle una rotación ocasional para humedecer las paredes, el

2
Docentes:
Docentes:
Aconcha,kLoyola,
Aconcha, kLoyola,PNavarrete,
PNavarrete,ARamírez.
ARamírez.
TÉCNICAS BÁSICAS DE LABORATORIO
QFAR 1103
1er semestre 2024

recipiente se lava con agua. Si después de este tratamiento queda un solido negro,
agregar otra porción de mezcla sulfocrómica y calentar lendamente a la llama hasta que
comienza a desprender humos. Bajo estas condiciones, se oxidan la mayoría de las
sustancias orgánicas.
La mezcla sulfocrómica se torna verde cuando ha perdido su poder oxidante, se debe a la
reducción del cromo IV de color café rojizo a Cromo III de color verde. Esta solución no es
posible de regenerar y debe desecharse.
En el empleo de la mezcla sulfocrómica tiene ciertas limitaciones. Unas variedades de
vidrio experimentan fenómenos de impregnación con sales de cromo, interviniendo
posteriormente en algunas determinaciones de tipo analítico. Tampoco es recomendable
la mezcla sulfocrómica en la limpieza de placas de vidrio porosas y crisoles filtrantes por el
fenómeno mencionado anteriormente.

b) Mezcla Sulfonítrica: Consiste en ácido sulfúrico concentrado al que se agrega nitrato de


sodio o de potasio, nitrito de sodio o potasio. Esta mezcla puede reactivarse después de
su agotamiento por adición de más cristales de sal, siempre que esta no se haya diluido
excesivamente por su uso. Se emplea cuando no es recomendable el uso de la mezcla
sulfocrómica.
Terminada la primera limpieza del material de vidrio y de porcelana, se los enjuaga con
agua corriente y al final con agua destilada. Es preferible enjuagar varias veces con
pequeñas cantidades de agua destilada que una sola vez con mucha cantidad.
Se reconoce un material de vidrio limpio cuando el agua de enjuague escurre por las
superficies húmedas como una película uniforme y continua. Los crisoles y cápsulas de
porcelana deben presentar un aspecto liso y brillante o al menos aspecto de ausencia total
de impurezas.
En caso de que en el enjuague el agua no escurra libremente sino se reúna en gotas en la
superficie del vidrio, indica que existe una película extraña en ella y es preciso repetir una
vez más el proceso de lavado.

II. SECADO DEL MATERIAL DE VIDRIO Y DE PORCELANA

Para evitar contaminar o ensuciar el material lavado no se debe secar con paños, toalla
absorbente u extremo del delantal.
El secado de material en el laboratorio se puede llevar a cabo por los siguientes procedimientos:
a) Secado por simple escurrimiento: Los materiales a secar se deben acomodar boca abajo,
cuando el diámetro de la boca lo permite, sobre alguna superficie limpia o en soportes
desecadores, inclinados o verticales, que permitan el libre escurrimiento del agua a
temperatura ambiente. En algunos casos, el secado se ayuda aprovechando el calor de los
radiadores.
b) Secado en estufa de desecación: Lo más adecuado para el secado es disponer de una
estufa desecadora; evita el polvo y es más rápida porque se elige una temperatura

3
Docentes:
Docentes:
Aconcha,kLoyola,
Aconcha, kLoyola,PNavarrete,
PNavarrete,ARamírez.
ARamírez.
TÉCNICAS BÁSICAS DE LABORATORIO
QFAR 1103
1er semestre 2024

superior a la de ambiente. La estufa de desecación está provista de bandejas que


presentan orificios, o bien de rejillas, con el objeto de que el aire caliente circule por el
interior, arrastre el vapor de agua y salga por la parte alta de la estufa. No es
recomendable cubrir las bandejas con papel filtro o llenar la estufa con material que
impida la libre circulación y renovación del aire en el interior. En las estufas, el material
debe ponerse boca arriba para que salga la humedad, de modo contrario al secado por
simple escurrimiento.
Cuando el material de vidrio se necesita usar rápidamente, se escurre toda el agua posible
y se enjuaga con 3 o 4 cm3 de alcohol, de modo que éste moje todo el objeto para que
arrastre el agua; después se elimina el alcohol y se calienta o se inyecta aire caliente con
un tubo.

4
Docentes:
Docentes:
Aconcha,kLoyola,
Aconcha, kLoyola,PNavarrete,
PNavarrete,ARamírez.
ARamírez.

También podría gustarte