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Argumentar
El diccionario de la Real Academia España define argumentación de la siguiente manera: aducir y alegar. Un
argumento es la estructura de un razonamiento determinado. Compuesto por partes para llegar a una
conclusión. Una vez se plantea una idea principal y una posición con respecto a esta, el autor de un ensayo
debe plasmar una serie de argumentos que refuercen su posición.
La cantidad o extensión de los argumentos no es limitante, pero deben estar bien sustentados y, sobre todo,
mantenerse dentro de la línea discursiva que se está manejando en el ensayo. La correcta estructuración de un
razonamiento acerca de un tema brinda continuidad lógica y precisa a un ensayo, sea cual sea su índole o
temática.
Demostrar
Demostrar es probar. A través de la teoría expuesta en los argumentos, el ensayista trata de probar que su idea
o razonamiento es comprobable, y por tanto, una verdad. Una vez planteada una idea y posición, se debe hacer
lo posible por manifestar que tal posición es comprobable o considerable y, por lo tanto, puede ser considerada
una verdad.
Aquí entra la importancia de la demostración en el ensayo. Al ser un contenido de cierta profundidad, tanto el
autor como el lector no se deben subestimar entre sí. La principal herramienta para demostrar y probar una
posición frente a un tema es el argumento. La correcta disposición de estos logrará construir una sólida defensa
sobre el punto de vista en cuestión.
Persuadir
La persuasión es la consecuencia de un razonamiento bien elaborado, demostrable y por tanto, convincente. El
lector es seducido por la habilidad del ensayista que supo estructurar su teoría de una manera ordenada y
sistema. La persuasión en el ensayo es la capacidad de seducir al lector e influir en sus creencias y opiniones
sociales y personales acerca de un asunto.
El ensayo se puede valer de recursos literarios para lograr este cometido; no obstante, no es una novela o un
trabajo de ficción, por lo que no debe depender enteramente de estos. La efectividad persuasiva en un ensayo
depende ya de la capacidad expositiva, argumentativa e incluso narrativa de su autor, sumado a su prestigio o
renombre como tal. En cualquier caso, si el fin de un ensayo es cambiar la opinión de su lector frente a algo, el
autor debe hacer todo lo posible para lograrlo sin ser tedioso o aleccionador.
Si los dotes virtuosos están ausentes, la correcta exposición de ideas y estructuración de argumentos puede ser
suficiente para que un lector se vea persuadido y esté dispuesto a reflexionar sobre los contenidos y su propia
mirada sobre estos.
Potencial y alcance
Debido su concepción y estructura formal, los ensayos pueden ser utilizados como un instrumento de gran
alcance y potencial local, e incluso mundialmente. Los contenidos más susceptibles a ser tratados en ensayos
que puedan dar la vuelta al mundo suelen ser manifiestos políticos o sociales.
La exposición de ideas con respecto a fenómenos y escenarios cuyas consecuencias se vean repetidas en
distintas sociedades también demuestra el alcance de un ensayo, y su intención de servir como instrumento de
reacción o cambio.
Por ejemplo, no es de sorprender que grandes reacciones multitudinarias frente a situaciones específicas puedan
haber partido de la mera presentación, argumentación y defensa de una serie de ideas y posiciones contrarias a
un sistema hegemónico.
El ensayo funciona entonces como un texto con cualidades literarias, descriptivas y reflexivas. Así mismo, es un
instrumento para la persuasión y la búsqueda de reacciones individuales o masivas sobre temas o situaciones
del presente político y social del mundo.
Características de un ensayo:
No tiene una extensión obligatoria
El ensayo es un texto completamente personal
El ensayo va dirigido a un público general
A pesar de ser un texto personal y para el público general, el ensayo debe ser riguroso
Es un escrito en prosa que aborda un tema significativo escogido por el autor.
Su finalidad es explorar un tema y expresar las ideas, los puntos de vista y las opiniones del autor, por
lo cual es argumentativo y puede ser también persuasivo.
Debe ser específico y abordar una temática clara y no muy amplia.
Puede tratar sobre una gran cantidad de temas, dentro de disciplinas como la política, la economía, la
literatura o la filosofía.
A menudo está escrito con fines académicos o para sumar conocimiento en un área específica del
saber.
Su estructura es flexible, ya que el autor usa una forma libre para abordar la temática de interés. Sin
embargo, suele tener una introducción, un desarrollo y una conclusión.
Libertad en la elección: el autor goza de total libertad a la hora de escoger el tema, el enfoque y el
estilo.
Extensión: puede variar según el tipo de ensayo, sin embargo, suelen ser más breves que un trabajo de
investigación.
Son expositivos: debido a que son necesarias la exposición y explicación de forma clara y concisa de
las ideas que lo motivan.
Son argumentativos: en el sentido de que utilizan razones, motivos que evidencian las hipótesis que
maneja el autor.
Son reflexivos: puesto que no pretenden ofrecer resultados concluyentes, sino abrir un camino para la
reflexión sobre un tema.
Finalidad: tienen como propósito la demarcación de un punto de vista particular.
Estructura: aunque tiene una estructura básica (introducción, desarrollo y conclusión), puede
adaptarse a las necesidades del ensayista.
Análisis: pueden partir tanto del método inductivo como del deductivo, esto es, de lo particular a lo
general, o de lo general a lo particular.
Coherencia y la cohesión en un ensayo
La coherencia y la cohesión son aspectos fundamentales en la redacción de un ensayo. Aquí hay algunas pautas
para garantizar la coherencia y la cohesión:
1. Coherencia temática: Todos los puntos y argumentos presentados deben estar relacionados con la tesis
central del ensayo. Cada párrafo debe contribuir de manera significativa a la comprensión global del
tema.
2. Uso adecuado de conectores: Utiliza palabras y frases de transición para conectar las ideas entre sí y
garantizar una transición fluida entre párrafos y secciones del ensayo. Algunos ejemplos son “además”,
“por lo tanto”, “en conclusión”, entre otros.
3. Consistencia en el estilo y tono: Mantén un estilo de escritura consistente a lo largo del ensayo,
utilizando un tono apropiado para el tema y la audiencia. Evita cambios bruscos en el tono o el estilo
que puedan distraer al lector.
4. Coherencia gramatical: Asegúrate de que las estructuras gramaticales utilizadas sean coherentes en
todo el ensayo. Presta atención a la concordancia verbal y nominal, así como al uso correcto de
pronombres y referencias.
5. Repetición controlada: Si bien la repetición excesiva puede ser contraproducente, un uso controlado de
ciertas palabras clave o conceptos puede contribuir a la cohesión del ensayo al enfatizar los puntos
importantes y ayudar a mantener el enfoque temático.
6. Orden lógico: Organiza tus ideas de manera lógica y secuencial para que el ensayo fluya de manera
natural. Comienza con una introducción que establezca el contexto y la tesis, desarrolla tus
argumentos
en el cuerpo del ensayo en un orden lógico y concluye de manera satisfactoria, resumiendo los puntos
clave y reafirmando la tesis.
Al prestar atención a estos aspectos, puedes mejorar la coherencia y la cohesión de tu ensayo, lo que facilitará la
comprensión por parte del lector y fortalecerá la efectividad de tu argumentación.
Desarrollo
Es la parte del ensayo en la que se exponen las ideas principales y en la que el autor argumenta o da sus puntos
de vista. Se trata de la sección más extensa de un ensayo. Corresponde a la exposición pormenorizada de los
argumentos, las referencias, el análisis y la reflexión crítica sobre el asunto abordado. El autor expone y analiza
el tema que ha escogido en profundidad. Plantea sus ideas y argumentaciones basándose en otras fuentes tales
como revistas, entrevistas, libros e incluso fuentes online. Es la parte más amplia, pues ocupa el 80% del
ensayo. Además, es necesario sintetizar y resumir todo el contenido, pues aunque sea la parte más amplia, no
debe ser tediosa. Es en el desarrollo donde el autor, presenta sus ideas principales, las cuales deben ser
argumentadas mediante explicaciones secundarias y estar fomentadas en datos concretos obtenidos de las
diferentes fuentes de información y de sus propias valoraciones y opiniones. Es importante que todas las ideas
expuestas queden bien entrelazadas y que el ensayo tenga coherencia Para plantear argumentos que defienden
el punto de vista del ensayista se usan diferentes recursos para argumentar, como pueden ser:
i. Ejemplos
ii. Comparaciones
iii. Definiciones
iv. Datos estadísticos de organizaciones reconocidas
v. Datos históricos
vi. Citas textuales y paráfrasis de otros autores
vii. Se debe hacer un análisis de cada uno de estos recursos
Conclusión
Es la parte del ensayo que brinda al lector las interpretaciones finales de lo expuesto, resumiendo o repasando
los puntos principales y la postura del autor. En esta última parte se espera que el ensayista retome los aspectos
más relevantes del texto y presente una síntesis de él, con el objetivo de reafirmar su posición de una manera
clara. También es fundamental generar una última reflexión en el lector. El autor expone las conclusiones a las
cuales llegó, definiendo y validando su punto de vista. la parte en la que se resume la idea o las ideas más
importantes del texto, es decir, aquellas que el autor quiere destacar por encima de otras. En la conclusión, el
escritor mostrará claramente cuál es su postura y enumerará los argumentos más importantes dados en el
desarrollo. Dentro de las diferentes partes de un ensayo, la conclusión es fundamental porque es la que invitará
a los lectores a querer saber más cosas del tema.
Bibliografía
Todo ensayo debe contar con un apartado final de referencias bibliográficas, esto es, un listado de los materiales
que se citaron a lo largo del texto. También se puede ofrecer una bibliografía, donde el autor ofrece una lista
con todas las fuentes consultadas en el proceso de investigación y elaboración del escrito que no han sido
citadas. Esto se recomienda presentar las referencias bibliográficas que respalden todos los argumentos
anteriores que generalmente se redactan en formato de Normas AP.
¿Qué lleva la introducción del ensayo?
El ensayo suele dar flexibilidad a los autores para entregar la información en sus textos. No obstante, hay
ciertas características comunes a las introducciones que nos sirven como modelo para orientarnos a la hora de
redactarlas. Estas son:
Exposición de la idea central del escrito. El autor debe anunciar el tema que va a tratar. En los ensayos
argumentativos o de naturaleza filosófica, se debe indicar la tesis o argumento que se desea sostener.
Contextualización del tema. En ocasiones resulta útil que la introducción relacione el tema a tratar con una
problemática amplia. Mencionar antecedentes y contextualizar el ensayo puede facilitarle al lector la
comprensión de lo que va a leer.
Guía de la estructura o los objetivos del ensayo. Muchos ensayos señalan desde la propia introducción cuál es la
estructura del texto cuando este contiene varias partes. De ese modo, el autor aclara al lector lo que este
encontrará en cada sección.
De manera similar, hay autores que aprovechan la introducción para establecer los objetivos que tiene su
escrito o incluso para mencionar sus motivaciones y lo que procura lograr al difundir sus argumentos.
Enfoque y estilo. Los autores tienen la oportunidad de indicar desde qué punto de vista o bajo qué premisas
abordan el tema. Esto permitirá delimitar el asunto que se tratará y desde qué perspectiva. En cuanto al estilo,
cada vez es más común que los lectores aprecien la brevedad y la claridad en los textos. La introducción de un
ensayo debe apenas presentar un tema, no cubrirlo a cabalidad, ya que podría confundir a quienes leen
¿Qué lleva el desarrollo de un ensayo?
A lo largo del desarrollo, la parte más larga del ensayo, tendremos que intentar dar respuesta a cada una de las
preguntas que nos hemos hecho durante la introducción. Es importante argumentar y contrastar la información
que se va aportando de diferentes fuentes, y, en caso de tratarse de un ensayo académico, es fundamental
exponer la información, nunca dar la opinión subjetiva. Comparación de situaciones: iniciaremos nuestro
discurso hablando de cómo era la situación antes, es decir, analizando si se valoraban igual los títulos
académicos, averiguando por qué el edadismo es un problema creciente hoy en día, etc.
Análisis de la situación actual: en general, a lo largo del desarrollo deberías hacer un breve análisis del contexto
social actual y de su relación con la situación laboral actual. Es fundamental aportar datos contrastados de
fuentes de confianza. Gracias a este análisis, podrás determinar si la situación es realmente tan grave cómo
parece y podrás argumentar por qué en los últimos años este problema solo ha ido aumentando. Testimonios:
además de la información que saques de diferentes fuentes, también te recomendamos aportar el testimonio de
alguna persona afectada y otro de un experto. Esto no solo le dará más peso a tus argumentos, sino que te
ayudará a dibujar una imagen más clara del futuro y lo que este puede deparar a las personas afectadas por el
problema.
¿Qué lleva una conclusión?
Ha llegado el momento de echar la vista atrás y ver si hemos cumplido con nuestro objetivo. ¿Hemos podido
demostrar que el edadismo es un problema nacional que debería preocuparnos a todos? ¿Cómo está la situación
en nuestro país comparada con la de otros países? ¿Cómo se desarrollará este conflicto? ¿Hay alguna posible
solución? A lo largo de la conclusión daremos respuesta a nuestras dudas y acabaremos con una frase
impactante o con el planteamiento de una nueva pregunta que deje a los lectores interesados y que sienta los
cimientos de una posible futura investigación.
Ejemplo de ensayo
‘La importancia de narrar historias a los niños
La lectura es una de las capacidades que distinguen al ser humano y forma parte fundamental de
la alfabetización de todo individuo. Aprender a leer es un proceso que comienza en la primera
infancia y suele darse en la escuela y en el hogar. En esta línea, se ha comprobado que leer o
narrar cuentos a los niños y niñas en etapas tempranas es un hábito que los ayuda a aprender a
leer y a escribir.
Estimular a los niños es un compromiso de padres, madres y adultos a cargo de las infancias. La
lectura o las narraciones orales a niños y niñas son actividades estimulantes que pueden darse
como parte de un juego, durante un viaje o antes de ir a la cama, entre otras situaciones. Se trata
de actividades que no solo mejoran el desempeño del niño en su proceso de alfabetización, sino
que también ayudan a su desarrollo social y emocional.
Entre los principales beneficios de esta práctica, se suele destacar que ayuda al desarrollo de la
atención y la concentración; contribuye a la capacidad de imaginación; calma la ansiedad; permite
expresar emociones; fortalece el vínculo del niño con el padre, madre o adulto que lee; amplía su
vocabulario; fomenta la escritura, e induce a la reflexión, entre muchas otras ventajas.
Frente a este panorama, resulta importante que las personas adultas generen el tiempo y el
espacio necesarios para la lectura, y ayuden a que el niño pueda encontrar en esta actividad un
foco de distensión y entretenimiento, y no una obligación. Para esto, se sugiere tener libros en las
casas, descubrir qué tipos de narraciones le interesan al niño y dejar de lado las tecnologías que
puedan entorpecer el momento de encuentro.’
Bibliografía:
Martínez, C., García Balus, N., Tuñon, I. (2023). Libros e infancias. Carencias y desigualdades
sociales. Pontificia Universidad Católica Argentina (UCA).
Escribir un ensayo es arte de convencer
Escribir un ensayo argumentativo que tenga el poder de convencer es todo un arte. El autor debe
saber plasmar su propio estilo, de seducir al lector con sus ideas y en especial en la manera en
que transmite esas ideas.
Tradicionalmente se afirma que el ensayo tiene la finalidad de convencer al lector de los
argumentos que alli se presentan. Sin embargo, técnicamente, el ensayo es solo el reflejo de lo
que su autor piensa. Es el engranaje interno de sus pensamientos sobre prácticamente cualquier
tema que se le pueda ocurrir.
En el exposición natural de lo que el autor cree verdadero o al menos, digno de ser tomado en
cuenta, y sumado al estilo con lo que haga escribiéndolo, el lector decidirá si se deja o no
convencer. El ensayista se muestra tal como es. O mejor dicho, «tal como piensa» y ya dependerá
del lector, que parte acepta o rechaza de las ideas que el ensayista le propone.
Tipos de ensayo
El ensayo se clasifica según el área del saber al que pertenezca y la metodología que emplea en su escritura.
Ambas clasificaciones no son excluyentes.
Según el área del saber, un ensayo puede ser:
o Ensayo literario. Es un tipo de ensayo que utiliza recursos literarios para abordar el punto de vista del
autor sobre alguna temática determinada dentro del campo de las letras. Es una obra subjetiva y
detallada. Es un escrito en prosa en el cual un autor desarrolla sus ideas sobre un tema determinado.
A diferencia de los ensayos académicos o científicos, el ensayo literario añade un propósito estético. En
virtud de ello, el ensayo literario no obliga a la complejidad de una monografía académica o científica.
Sí obliga, en cambio, a la originalidad, al cuidado en el lenguaje y a la belleza formal, es decir, al
cuidado del estilo literario.
Ejemplos:
Ensayo El laberinto de la soledad, de Octavio Paz.
Ensayo De los caníbales, de Michel de Montaigne (padre del género del ensayo).
“Así son salvajes esos pueblos como los frutos a que aplicamos igual nombre por germinar y
desarrollarse espontáneamente; en verdad creo yo que mas bien debiéramos nombrar así a los que por
medio de nuestro artificio hemos modificado y apartado del orden a que pertenecían; en los primeros
se guardan vigorosas y vivas las propiedades y virtudes naturales, que son las verdaderas y útiles, las
cuales hemos bastardeado en los segundos para acomodarlos al placer de nuestro gusto corrompido; y
sin embargo, el sabor mismo y la delicadeza se avienen con nuestro paladar, que encuentra excelentes,
en comparación con los nuestros, diversos frutos de aquellas regiones que se desarrollan sin cultivo. El
arte no vence a la madre naturaleza, grande y poderosa.” De los caníbales (1562), Michel de
Montaigne
o Ensayo científico. Es un tipo de ensayo en el que el autor da su postura u opinión sobre alguna
temática dentro del área de las ciencias. Suele incluir información objetiva y comprobada, así como
argumentos claros y precisos. Texto argumentativo destinado a la reflexión de temas científicos y que,
en virtud de ello, demanda rigurosidad en los datos ofrecidos, así como en el análisis de la
información. A diferencia del ensayo literario, el científico no persigue propósito estético alguno, sino
garantizar una comunicación eficaz. Los ensayos científicos suelen ir argumentados a la luz de
referencias a teorías, experimentos, tablas, etc., que sirven para la exposición de una hipótesis o
refutación. Al igual que los ensayos académicos en general, los ensayos científicos exigen la
presentación de una bibliografía o fuentes de consulta.
Ejemplo:
Ensayo Ecuaciones del campo de la gravitación, de Albert Einstein.
o Ensayo académico: Es un tipo de ensayo que se realiza dentro de comunidades intelectuales, escolares
o universitarias. Suele usar un vocabulario formal y ser de tipo expositivo, además de ser riguroso
metodológicamente Corresponde a la exposición y argumentación en torno a un tema de interés para
la comunidad académica. Bajo un orden discursivo lógico y con base bibliográfica, los ensayos
académicos siempre deben incluir las fuentes consultadas (bibliografía y otras fuentes). El ensayo
académico sirve para evaluar a los alumnos en cuanto al manejo de fuentes, sus conocimientos sobre
la materia y su capacidad de argumentación y crítica. Aunque los ensayos académicos no tienen
propósitos estéticos, no se riñen con la búsqueda de la elegancia discursiva. Para los investigadores
experimentados, los ensayos académicos son ejercicios para poner a prueba los alcances y límites de
un proyecto de investigación (por ejemplo, tesis de maestría o doctorado).
Ejemplos:
Ensayo La orgía perpetua: Flaubert y Madame Bovary, de Mario Vargas Llosa.
Ensayo Cultura popular: de la épica al simulacro, de Néstor García Canclini
“Un primer uso que importa analizar es el de quienes ven en las culturas populares locales la reserva
última de ciertas tradiciones que podrían jugar como esencias resistentes a la globalización. El
reavivamiento de nacionalismos, regionalismos y etnicismos en esta última curva del siglo xx pretende
reducir el trabajo histórico de la construcción y readaptación incesante de las identidades a la simple
exaltación de tradiciones locales.” Cultura popular: de la épica al simulacro (2007), de Néstor García
Canclini.
o Ensayo filosófico. Es un tipo de ensayo que expone una temática filosófica y reflexiona sobre ella.
Incluye las observaciones y los puntos de vista del autor. Es un estudio científico que examina cómo
funcionan los sistemas biológicos en organismos vivos.
Ejemplo:
Un ensayo fisiológico podría analizar cómo el ejercicio afecta la función cardíaca midiendo la
frecuencia cardíaca y la presión arterial antes, durante y después del ejercicio. Otro ejemplo podría ser
estudiar cómo ciertos alimentos afectan la digestión midiendo la absorción de nutrientes en el tracto
gastrointestinal.
o Ensayo sociológico. Es un tipo de ensayo que aborda una temática relacionada con la sociología o el
estudio de las sociedades humanas. El autor expone información clara y chequeada, y ofrece sus
reflexiones y perspectivas al respecto. Un ensayo sociológico examina cómo las estructuras sociales y
las interacciones entre individuos influyen en el comportamiento humano y en la sociedad en su
conjunto. Ejemplo:
Un ensayo sociológico podría analizar cómo las redes sociales impactan en la percepción de la imagen
corporal entre adolescentes, utilizando datos de encuestas y entrevistas para comprender cómo la
exposición a determinados tipos de contenido influye en la autoestima y los hábitos alimenticios. Otro
ejemplo podría ser un estudio sobre la movilidad social y económica en una comunidad específica,
investigando cómo factores como la educación, el género y el origen étnico influyen en las
oportunidades de éxito y el acceso a recursos.
o Ensayo histórico. Es un tipo de ensayo que aborda una temática dentro del campo de la historia. El
autor brinda información sobre el tema de interés y ofrece sus reflexiones y argumentaciones. Un
ensayo histórico analiza eventos, personas y tendencias del pasado para comprender su impacto en el
presente. Ejemplo;
un ensayo histórico podría explorar cómo la Revolución Industrial transformó la sociedad y la
economía en el siglo XIX, examinando los cambios en las condiciones laborales, la urbanización y las
relaciones de clase. Otro ejemplo podría ser un estudio sobre las causas y consecuencias de la Guerra
Fría, destacando cómo las tensiones geopolíticas entre Estados Unidos y la Unión Soviética moldearon
las políticas internacionales y la cultura global durante gran parte del siglo XX.
.
o Ensayo expositivo. Es un tipo de ensayo en el que el autor busca dar a conocer y explicar de forma
clara y detallada una temática para que sea comprendida por el lector. Este tipo de ensayo no tiene
como fin ofrecer argumentos u opiniones del autor sobre el tema. Es un tipo de ensayo que tiene
como objetivo presentar información de manera objetiva y clara sobre un tema específico. En un
ensayo expositivo, el autor se enfoca en proporcionar información de manera lógica y estructurada, sin
expresar opiniones personales ni argumentos persuasivos.
Ejemplo:
Un ensayo expositivo podría abordar el tema del cambio climático, proporcionando datos científicos
sobre sus causas, efectos y posibles soluciones. Otro ejemplo podría ser un ensayo expositivo sobre la
Revolución Industrial, que describe los eventos clave, las innovaciones tecnológicas y las repercusiones
sociales y económicas de este período histórico.
o Ensayo argumentativo. Es un tipo de ensayo que se basa en un punto de vista o postura sobre un tema
determinado. El autor plantea argumentos sólidos que funcionan como base para defender sus ideas y,
eventualmente, influir sobre la opinión del lector. Es un tipo de ensayo que presenta un argumento o
punto de vista sobre un tema específico y proporciona evidencia para respaldarlo. En un ensayo
argumentativo, el autor presenta una tesis clara al principio y luego desarrolla y defiende su posición a
lo largo del ensayo, refutando posibles objeciones y mostrando por qué su punto de vista es válido.
Ejemplo, un ensayo argumentativo sobre la pena de muerte podría presentar argumentos a favor y en
contra de esta práctica, utilizando datos estadísticos, estudios de casos y principios éticos para
respaldar cada posición. Otro ejemplo podría ser un ensayo que discute la legalización de las drogas,
presentando argumentos sobre los beneficios potenciales para la salud pública, los costos sociales y
económicos asociados y las consideraciones éticas.
o Ensayo crítico. Es un tipo de ensayo en el que se describe un hecho, fenómeno u objeto para dar una
opinión sobre él. Es un texto subjetivo y, para su redacción, el autor debe conocer a fondo el elemento
que analiza, que puede ser una película, un libro, un tema particular, entre muchos otros. Un ensayo
crítico analiza y evalúa un tema, obra de arte, libro, película u otro tipo de contenido desde una
perspectiva crítica. En un ensayo crítico, el autor no solo describe el trabajo, sino que también emite
juicios de valor basados en evidencia y argumentos sólidos, ofreciendo una perspectiva informada y
reflexiva sobre el tema en cuestión.
Ejemplo:
Un ensayo crítico sobre una novela podría examinar temas como la estructura narrativa, el desarrollo
de los personajes, los mensajes subyacentes y la relevancia social o política del texto. Otro ejemplo
podría ser un ensayo crítico sobre una película, que analiza elementos como la dirección, la
cinematografía, el guion y las actuaciones de los actores, y luego ofrece una evaluación fundamentada
en criterios objetivos y subjetivos.
o Ensayo analítico. Es un tipo de ensayo en el que el autor realiza un análisis exhaustivo sobre un
determinado tema o texto. Busca determinar los elementos que forman parte de un todo y explicar las
relaciones que mantienen entre sí. Un ensayo analítico puede basarse, por ejemplo, en el análisis de
una novela o un poema. Un ensayo analítico se centra en descomponer un tema complejo en partes
más pequeñas para comprender mejor su funcionamiento y significado. En un ensayo analítico, el
autor busca profundizar en los elementos clave del tema, identificar patrones o relaciones entre ellos y
llegar a conclusiones fundamentadas en la evidencia presentada.
Ejemplo:
un ensayo analítico sobre una obra literaria podría examinar temas, motivos, símbolos y técnicas
narrativas utilizadas por el autor para transmitir un mensaje o tema específico. Otro ejemplo podría
ser un ensayo analítico sobre un fenómeno social, donde se desglosan datos estadísticos,
investigaciones y testimonios para comprender las causas y consecuencias del fenómeno en cuestión.
¿Cómo hacer un ensayo?
1. Elegir una temática. Es importante que el tema elegido genere interés y motivación en el autor,
para que pueda desarrollar y exponer los argumentos y puntos de vista propios. El tema a abordar
debe ser acotado y simple, para poder realizar un ensayo claro y consistente. Cuanto más
delimitado, mejor.
2. Investigar sobre el tema. Se debe recurrir a fuentes calificadas para conocer acerca del tema de
interés. Esto le permitirá al autor emitir un juicio u opiniones que serán la base del ensayo. Según
la temática elegida, se deberá averiguar en qué sitios es oportuno investigar. Pueden ser tanto
fuentes virtuales (bases de datos, enciclopedias en línea, sitios web oficiales) como soportes físicos
(libros, revistas, periódicos). También es importante recopilar estudios o ensayos previos sobre
cuestiones similares, que ayudarán a entender los distintos enfoques del tema elegido. Si se trata
de un ensayo académico, será necesario identificar y consultar fuentes esenciales sobre el tema.
3. Desarrollar un punto de vista. Una vez investigado el tema, el autor debe armar sus argumentos y
puntos de vista, que luego buscará transmitir al lector. Es fundamental que estos argumentos sean
originales y que generen motivación en el autor. Escribir una lluvia de ideas, acerca de lo que
queremos decir. En otras palabras, verter en un papel todas las ideas que tenemos en la cabeza,
asociadas al tema en cuestión, sin atender al orden.
4. Realizar un esquema. Luego de recopilar la información, y teniendo claras las principales ideas del
ensayo, se podrá realizar un esquema sintético para ordenar los puntos más importantes.
Organizar estas ideas como un esquema siguiendo una estructura discursiva coherente.
5. Redactar el borrador a partir del esquema preliminar. Si es necesario hacer un ajuste, hazlo con
libertad. Durante la redacción del ensayo, se deben incluir la información, los datos duros y las
opiniones personales de forma breve y clara. Se utilizará toda aquella información que dé sustento
a los argumentos y que ayude en el armado de las conclusiones. Para redactar un ensayo, se debe
utilizar una correcta puntuación y ortografía, a fin de lograr un escrito claro y coherente.
6. Revisar y corregir el ensayo. Dejar reposar el borrador uno o dos días y volver a él para corregirlo
y mejorarlo. Una vez redactado el ensayo, se debe releer para hacer las correcciones o
modificaciones finales que se consideren necesarias. También se debe confirmar que no hayan
quedado errores gramaticales o de ortografía.
7. Pasar en limpio el borrador. Para definir la mejor estructura de un ensayo es útil pensar en las
diferentes secciones como posibles respuestas a una serie de preguntas que podría hacer el lector,
como:
¿Qué?. Consiste en la primera pregunta que debe responder el ensayo, idealmente, después de la
introducción. ¿Qué evidencia demuestra la veracidad del tema?
¿Cómo?. Consiste en aseverar si la tesis planteada resiste los posibles contraargumentos u objeciones
que podría cuestionarse el lector.
¿Por qué?. Consiste en justificar la interpretación del autor en un contexto más amplio que el
explayado a lo largo del ensayo.
En base a las respuestas el autor podrá organizar los contenidos y elaborar la introducción, el desarrollo (que
puede estar dividido en breves capítulos o secciones, según amerite el tema) y la conclusión. De esta manera, se
asegurará que el lector pueda decodificar la tesis de manera rápida y ordenada.