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DERECHO INFORMÁTICO
MÓDULO X
GRUPO TRES:
Delitos Informáticos en Propiedad Intelectual
ESTUDIANTES:
Alison Arce Hernández
Karol Molina Mata
Pilar Porras Mondol
Ricardo Azofeifa Castillo
PROFESOR:
José Francisco Salas Ruiz
Agosto, 2021
INTRODUCCIÓN
Tiene su origen en los años setenta en Alemania, muy relacionado con la creación
de las computadoras y el desarrollo del internet. Nace de la necesidad de regular a
nivel legal cualquier comportamiento criminal realizado mediante una
computadora, como medio material. El acceso a la información que se crea
mediante el internet, crea la necesidad de proteger datos y generar seguridad a
los usuarios.
1
Julio Téllez Valdés. Derecho Informático, Cuarta edición. D.F. México 2009.
interrelaciona, tiene sus propios principios y una aplicación especializada por lo
que requiere de leyes especiales y particulares.
Para lo que el presente trabajo atañe, tenemos la tarea de investigar lo que son
propiamente los delitos informáticos en materia de propiedad intelectual. Lo cual,
como mencionamos anteriormente, está muy relacionado con la rama del derecho
penal, es por esto que actualmente estos delitos informáticos se encuentran
regulados dentro del Código Penal. Por lo que consideramos necesario hacer una
breve introducción sobre lo qué son los delitos informáticos, y ya entendiendo la
generalidad de lo que abarca este concepto en la actualidad, ver qué
repercusiones tiene propiamente en el campo de la propiedad intelectual.
DELITOS INFORMÁTICOS
Esto sin duda da como regla general que los bienes jurídicos protegidos, serán los
mismos que los delitos reinterpretados o que se les ha agregado algún elemento
nuevo para facilitar su persecución y sanción por parte del órgano jurisdiccional
competente.
Por otro lado, otra vertiente doctrinaria supone que la emergente Sociedad de la
Información hace totalmente necesaria la incorporación de valores inmateriales y
de la información misma como bienes jurídicos de protección, esto tomando en
cuenta las diferencias existentes, por ejemplo, entre la propiedad tangible y la
intangible.
La propiedad recae sobre dos tipos de bienes, los tangibles, como es el caso de
los bienes muebles e inmuebles, y los intangibles como la propiedad intelectual.
2
González Guerra, Carlos. Delitos Informáticos Investigación criminal, marco legal y peritaje, 2018, p 8.
Esto por cuanto la información no puede ser tratada de la misma forma en que se
aplica la legislación actual a los bienes corporales, si bien, dichos bienes tienen un
valor intrínseco compartido, que es su valoración económica, es por tanto que la
información y otros intangibles son objetos de propiedad, la cual esta
constitucionalmente protegida.
Así, una conducta sólo puede relacionarse con una pena cuando resulta del todo
incompatible con los presupuestos de una vida en común pacífica, libre y
materialmente asegurada. Así inspira tanto a la criminalización como a la
descriminalización de conductas.
En conclusión, no se afecta un solo bien jurídico, sino una diversidad de ellos. Por
tanto, se puede decir que esta clase de delincuencia no solo afecta a un bien
jurídico determinado, sino que la multiplicidad de conductas que la componen
afectan a una diversidad de ellos que ponen en relieve intereses colectivos.
En tal razón, se considera que este tipo de conductas criminales son de carácter
netamente pluriofensivo. Un ejemplo que puede aclarar esta situación, es el de un
hacker que ingresa a un sistema informático con el fin de vulnerar la seguridad
éste y averiguar la información que más pueda sobre una determinada persona,
esto en primer lugar podríamos decir que el bien jurídico lesionado o atacado es el
derecho a la intimidad que posee esa persona al ver que su información personal
es vista por un tercero extraño que sin autorización ha vulnerado el sistema
informático donde dicha información está contenida.
Pero detrás de ese bien jurídico encontramos otro un bien colectivo que conlleva a
un ataque a la confianza en el funcionamiento de los sistemas informáticos. Es
decir, de intereses socialmente valiosos que se ven afectados por estas nuevas
figuras, y que no solo importan la afección de bienes jurídicos clásicos.
“Los autores de escritos de toda clase, los compositores, los pintores, los
dibujantes, gozarán durante toda su vida el derecho exclusivo de vender,
hacer vender, distribuir sus obras en todo el territorio de la República y
ceder su propiedad en todo o en parte”
De esta manera, la ley tutelaba una nueva forma de propiedad, protegiendo las
creaciones intelectuales de las personas y sus derechos como autores. Dicha
tutela tenía una doble dimensión 1- los derechos morales del autor relativos a la
originalidad, integridad, titularidad, etc; (corpus mystucum) y los rendimientos
económicos derivados de su explotación (corpus mechanicum). Esta protección se
mantuvo en el marco del derecho privado hasta que progresivamente, los avances
de la tecnología en materia de copia, reproducción y distribución de los soportes
comenzaron a suponer un grave peligro para la indemnidad de la creación
intelectual. Desde la década de los sesenta del siglo pasado hasta la actualidad,
ha sido la historia de la reacción técnica y jurídica frente a una creciente
vulnerabilidad del derecho.
Por su parte, respecto al ciberespacio, hay autores que afirman que éste modifica
no solamente la tecnología de copiado sino también el poder de la ley para
proteger la copia legal.3 Estos dos casos las realizan de forma simultánea y
además, a grandes velocidades. La Internet no solo permite copias perfectas de
originales digitales a costos muy bajos o casi inexistentes, sino que además,
amenaza con imponer una tarea casi imposible a quienes se encargan de imponer
3
Flores Prada, Ignacio. Criminalidad Informática, 2012 p 132.
el cumplimiento de la ley, en cuanto a localizar y castigar a aquellos
ciberdelincuentes que violan los derechos de autor.
1. Cada parte adoptará las medidas legislativas y de otro tipo que resulten
necesarias para tipificar como delito en su derecho interno las infracciones
de la propiedad intelectual, según se definan en la legislación de dicha
Parte, de conformidad con las obligaciones asumidas en aplicación del Acta
de París de 24 de julio de 1971 por la que se revisó el Convenio de Berna
para la protección de las obras literarias y artísticas, del Acuerdo sobre los
aspectos de los derechos de la propiedad intelectual relacionados con el
comercio y del Tratado de la OMPI sobre la propiedad intelectual, a
excepción de cualquier derecho moral otorgado por dichos Convenios,
cuando esos actos se cometan deliberadamente a escala comercial y por
medio de un sistema informático.
2. Cada Parte adoptará las medidas legislativas y de otro tipo que resulten
necesarias para tipificar como delito en su derecho interno, las infracciones
de los derechos afines definidas en la legislación de dichas Parte, de
conformidad con las obligaciones que ésta haya asumido en aplicación de
la Convención Internacional sobre protección de los artistas e intérpretes y
ejecutantes, los productores de fonogramas y los organismos de
radiodifusión (Convenio de Roma), del acuerdo sobre los aspectos de los
derechos de propiedad intelectual relacionados al comercio y del Tratado de
la OMPI sobre las obras de los intérpretes y ejecutantes y los fonogramas, a
excepción de cualquier derecho moral otorgado por dichos Convenios,
cuando esos actos se cometan deliberadamente, a escala comercial y por
medio de un sistema informático.
3. En circunstancias bien delimitadas, cualquier Parte podrá reservarse el
derecho a no exigir responsabilidad penal en virtud de los apartados 1 y 2
del presente artículo, siempre que se disponga de otros recursos efectivos y
que dicha reserva no vulnere las obligaciones de los instrumentos
internacionales mencionados en los apartados 1 y 2 del presente artículo.
1- Falsificación de marca.
2- Venta, almacenamiento y distribución de productos fraudulentos.
3- Venta, adquisición y ofrecimiento de diseños o ejemplares idénticos a una
marca ya inscrita.
4- Identificación fraudulenta como distribuidor
5- Utilización fraudulenta de indicaciones o denominaciones de origen.
6- Representación pública, comunicación o puesta a disposición del público,
sin autorización de obras literarias o artísticas.
7- Comunicación o puesta a disposición del público de fonogramas,
ejecuciones o interpretaciones o emisiones, sin autorización.
8- Inscripción registral de derechos de autor ajenos.
9- Reproducción no autorizada de obras literarias o artísticas o fonogramas.
10- Fijación, reproducción y transmisión de ejecuciones e interpretaciones
protegidas.
11- Impresión de un número superior de ejemplares de una obra.
12- Publicación como propia de obras ajenas.
13- Adaptación, traducción, modificación o compendio sin autorización de obras
literarias o artísticas.
14- Venta, ofrecimiento, almacenamiento, depósito y distribución de ejemplares
fraudulentos.
15- Arrendamiento de obras literarias o artísticas, o fonogramas sin autorización
del autor o representante.
16- Fabricación, ensamble, modificación, importación, exportación, venta,
arrendamiento o distribución por otro medio, de aparatos o mecanismos
decodificadores.
17- Alteración, evasión, supresión, modificación o deterioro de las medidas
tecnológicas efectivas contra la reproducción, el acceso o la puesta a
disposición del público de obras, interpretaciones o ejecuciones, o
fonogramas.
18- Fabricación, importación, distribución, ofrecimiento o tráfico de dispositivos,
productos, componentes o servicios para la evasión de medidas
tecnológicas efectivas contra la comunicación, la reproducción, el acceso, la
puesta a disposición del público o la publicación de obras, interpretaciones
o ejecuciones o fonogramas.
19- Alteración, distribución, importación, transmisión o comunicación de
información sobre gestión de derechos.
Ello en parte explica que en la Sección VIII del Código Penal, de los Delitos
informáticos y conexos, no exista un ilícito penal específico para el tema de los
derechos de la propiedad intelectual.
Jurisprudencia
Es innegable que todo evoluciona y con ello las diferentes formas de infringir el
marco jurídico de propiedad intelectual cometiendo lo que se conoce en una
especie de actos de "piratería intelectual", los cuales son muy distintos entre sí, e
incluso se pueden clasificar en base a distintos.
En razón de esa evolución constante es que creemos importante analizar la
jurisprudencia que se ha venido creando alrededor de este tema que va tomando
fuerza con el crecimiento tecnológico.
- En el Voto N° 2134-95 de las 15:00 horas del 2 de mayo de 1995, de la
Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia se indica; “La
propiedad intelectual es un derecho real, en virtud de que supone un poder
jurídico ejercitado por una persona determinada, para aprovechar los
beneficios personales y patrimoniales producto de su creación, pudiendo
oponer ese derecho erga omnes.”
Es decir, el derecho a la protección de la propiedad intelectual es un derecho
constitucional que reconoce nuestra Constitución Política.
- Procedencia de la pena de prisión por tenencia o depósito de fonogramas
ilegítimamente reproducidos Voto No. 410-F-93 de las 15 horas del 22 de
julio de 1993. Sala Tercera de la Corte Suprema de Justicia. “Tampoco era
indispensable que se acreditara en autos el que las compañías dedicadas
al negocio de reproducción de música [...] tienen protegidos los derechos
que se reclaman, puesto que lo que interesa es que el imputado no estaba
autorizado para dedicarse a la actividad referida. Por todo lo expuesto se
declara sin lugar el recurso."
Es escasa la jurisprudencia que se refiere a la pena de prisión por este tipo de
delitos, sin embargo este voto creó un precedente.
-
CONCLUSIÓN
BIBLIOGRAFÍA