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1093/scan/nsac056
Fecha de Publicación de Acceso Anticipado: 6 de octubre de 2022
Manuscrito Original
1
Centro de Rehabilitación de Precisión para el Dolor de Columna (CPR Spine), Escuela de deportes, Ciencias del Ejercicio y la Rehabilitación, Facultad de Ciencias de la
Vida y del Medio Ambiente, Universidad de Birmingham, Birmingham B15 2TT
2
Centro para la Salud del Cerebro Humano, Universidad de Birmingham, Birmingham B15 2TT, UK
3
Centro de investigación del Instituto Universitario de Geriatría de Montreal, Universidad de Montreal, Montreal, QC H3W 1W5, Canadá
4
Departamento de Psicología, Universidad McGill, Montreal, QC H3A 1G1, Canadá
5
Centro Alan Edwards para la Investigación sobre el Dolor, Universidad McGill, Montreal, QC H3A
6
0G1, Canadá Department of Stomatology, Université de Montréal, Montréal, QC H3T 1J4, Canada
7
Departamento de Anatomía, Universidad de Quebec, Trois-Rivières, QC G8Z 4M3, Canadá
La correspondencia debe dirigirse a Ali Khatibi, Centro de Rehabilitación de Precisión para el Dolor de la Columna (CPR Spine), Escuela de deportes, Ciencias del
Ejercicio y la Rehabilitación, Facultad de Ciencias de la Vida y del Medio Ambiente, Universidad de Birmingham, Birmingham B15 2TT, UK E-mail:
m.khatibitabatabaei@bham.ac.uk.
Resumen
La observación del dolor ajeno facilita el dolor propio en el observador. Los mecanismos de facilitación indirecta del dolor son poco conocidos. Se
monitorearon a 21 sujetos mientras observaban dolor, miedo y expresiones faciales dinámicas neutrales. Se administraron estímulos eléctricos nocivos
en el 33% de las pruebas. Se registraron las valoraciones del Reflejo nociceptivo de flexión (NFR) y de dolor. Tanto las expresiones de dolor como las
de miedo incrementaron las valoraciones de dolor propio (miedo > dolor) y la amplitud del NFR. El aumento de la respuesta al dolor propio tras la
observación del dolor y el miedo involucra regiones cerebrales como la ínsula (INS) (dolor > miedo en la parte anterior), la amígdala, la corteza
cingulada media (MCC), el lóbulo paracentral, el precúneo, el área motora suplementaria y el giro precentral. Estos resultados son consistentes con la
teoría del primado motivacional, donde la facilitación indirecta del dolor implica una intensificación global de las respuestas relacionadas con el dolor
por estímulos de valor negativo. Sin embargo, un análisis de interacción psicofisiológica centrado en la INS izquierda reveló una mayor conectividad
funcional con la MCC anterior en respuesta al estímulo doloroso tras la observación del dolor en comparación con el miedo. Se observó un patrón de
conectividad opuesto (miedo>dolor) en el giro fusiforme, el cerebelo (I-IV), giro lingual y el tálamo, lo que sugiere que las expresiones de dolor y miedo
influyen de forma diferencial en las respuestas cerebrales provocadas por dolor. Los patrones de conectividad distintivos demuestran un mayor efecto
en la observación del dolor en la red de giros insulares, lo que puede reflejar redes parcialmente superpuestas que subyacen la representación del
dolor propio y el ajeno.
Palabras clave: dolor; facilitación indirecta; reflejo nociceptivo de flexión; fMRI; expresión facial emocional.
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Procesamiento anatómico del T1 cerebral fisiológico (PPI). Los tres regresores psicológicos se conectaron con bá
Las imágenes anatómicas se extrajeron del cráneo utilizando la la HRF, y la matriz de diseño incluyó parámetros de movimiento si
herramienta de extracción cerebral (BET) implementada en FSL. Se (seis regresores), LCR medio y señal media de la WM (dos ca
Fig. 2. Activación BOLD al dolor y al miedo>neutral Observación de la expresión facial. La barra de color indica la puntuación Z. El umbral basado en grupos
se corrigió para comparaciones múltiples utilizando GRF (P<0,05). Las coordenadas de los picos se indican en la Tabla 1.
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Tabla 1. Activación cerebral en respuesta a la observación de En el experimento principal se observó un patrón similar cuando las
expresiones faciales de dolor y miedo frente a una expresión neutra
descargas de alta intensidad se aplicaron después de que los
Valor-Z X Y Z Rótulo anatómico estímulos visuales mostraran expresiones de dolor, miedo o
neutrales. Esto confirmó que las descargas de alta intensidad
6.98 48 −42 8 Giro temporal superior dcho.
producían un patrón de activación cerebral que coincidía en general
6.39 −38 −48 −22 Giro fusiforme izdo.
con los estudios previos sobre imágenes del dolor. (Duerden y
5.88 −50 −56 8 Giro temporal superior izdo.
Albanese, 2013). Siguiendo la hipótesis del estímulo motivacional,
5.70 −40 26 −6 Giro frontal inferior izdo.
examinamos la respuesta cerebral al choque tras ambas
5.25 38 −46 −24 Giro fusiforme dcho.
expresiones negativas. Al contrastar la activación provocada por el
4.77 −54 0 −18 Giro temporal medio izdo.
choque tras la observación conjunta de caras de dolor y miedo
4.27 −8 −42 50 Left paracentral lobule
frente a la activación tras la observación de caras neutras, se
3.91 −3 −6 60 Área motriz suplementaria
produjo la activación en la circunvolución poscentral, el SIN
3.52 −2 −4 38 Cingulate gyrus
izquierdo (anterior, medio y posterior, con el pico más alto a la
3.11 23 −5 −20 Amígadala cerebral dcha.
izquierda), tálamo bilateral (pico a la derecha), MTG bilateral,
amígdala bilateral, hipocampo bilateral, fusiforme occipital temporal
A continuación, exploramos si cada expresión negativa izquierdo, giro fusiforme izquierdo, MCC, cortezas sensoriomotoras
observada provocaba respuestas cerebrales más intensas (Figura (con el pico en el lado izquierdo), precúneo bilateral, SMA y
3). El contraste entre la activación para las caras de dolor y para las cerebelo derecho (Figura 5; Tabla 3). Estos efectos reflejan una
caras de miedo reveló una mayor activación para el dolor en el facilitación significativa de las respuestas al dolor por una o ambas
lóbulo parietal superior izquierdo, la parte superior de la corteza expresiones negativas. Por otra parte, nos interesaba comprobar la
occipital lateral, la corteza cuneal, el polo occipital, los cerebros V y hipótesis de la especificidad y ver si la respuesta del cerebro a los
VI derechos y el cerebelo VI izquierdo. Se observó una mayor choques dolorosos tras la observación de expresiones de dolor
activación ante las caras de miedo en el ITG izquierdo y la podía diferir de la respuesta tras el miedo. El contraste de la
circunvolución temporal media (MTG), el IFG izquierdo, la activación evocada por el choque tras la observación de caras de
circunvolución paracingulada bilateral y el ACC, el lóbulo parietal dolor frente a caras de miedo (dolor>miedo) reveló activación en el
superior derecho, la circunvolución poscentral derecha, el INS y el INS anterior izquierdo (que se extiende hasta el IFG), el crus-I
giro de Heschl. bilateral del cerebelo, el lóbulo VI izquierdo del cerebelo, la
circunvolución lingual derecha, el hipocampo posterior derecho, la
Respuestas evocadas por choques corteza fusiforme occipital temporal, la corteza occipital lateral
Tras mostrar cómo responde el cerebro a la observación del dolor, (ambas divisiones inferior y superior), la corteza cuneal izquierda y
el miedo y las expresiones neutras, examinamos cómo responde el la corteza precuneal bilateral (Figura 6; Tabla 4). El contraste de la
cerebro a los choques de alta intensidad en distintas condiciones. El activación evocada por el choque tras la observación de caras de
análisis de los datos de IRMf del localizador funcional reveló que la miedo frente a caras de dolor no reveló una activación significativa.
descarga de alta intensidad activó el SNI bilateral, la amígdala
bilateral, el córtex cingulado anterior y posterior bilateral, el LCP
bilateral (con el punto máximo localizado en el hemisferio izquierdo
contralateral al lugar de estimulación), el precúneo, el cerebelo
bilateral I-IV (con el punto máximo localizado en el cerebelo
derecho), el tálamo izquierdo, el hipocampo bilateral y el opérculo
bilateral.(Figura.4.y.Tabla.2).
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6 Social Cognitive and Affective Neuroscience, 2023, Vol. 18, No. 1
Fig. 3. Activación BOLD en el cerebro para la Observación de expresiones faciales de dolor > miedo (rojo) y Observación de expresiones faciales de miedo >
dolor (azul). La barra de color indica la puntuación Z. El mapa de activación se corrigió para comparaciones múltiples mediante GRF (P < 0,01).
Fig. 4. Activación BOLD en el cerebro en respuesta a estímulos de dolor. La barra de color indica la puntuación Z. El mapa de activación se corrigió
mediante comparaciones múltiples utilizando GRF (P < 0,05). Las coordenadas de los valores máximos se indican en la Tabla 2.
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Discusión
En este estudio, se demostró que la observación de expresiones
faciales relacionadas con el dolor y el miedo facilitaban el
2023
A. Khatibi et al. 7
Tabla 2. Activación cerebral en respuesta a la estimulación metaanálisis (Simon et al., 2006; Jauniaux et al., 2019). Al
dolorosa contrastar el miedo y el dolor frente a expresiones neutras,
observamos activación en el CCM, un área que, según se ha
Valor-Z X Y Z Rótulo anatómico sugerido en estudios anteriores, está implicada en el procesamiento
de estímulos negativos generales como el dolor y la repugnancia
12.08 −32 −24 14 Ínsula izda
(Benuzzi et al., 2008). También se observó una respuesta más
12.76 60 −42 4 Giro temporal medio dcho.
intensa a las expresiones de miedo y dolor en la circunvolución
11.92 −10 −36 60 Precúneo izdo. precentral, el precúneo, corteza prefrontal ventral, el MTG bilateral y
11.53 −60 −52 5 Giro temporal medio izdo. el giro fusiforme, áreas previamente implicadas en el procesamiento
10.73 −1 −6 34 Corteza cingulada anterior de expresiones emocionales dinámicas (Sato et al., 2004). Los
9.90 52 −32 20 Giro temporal superior dcho. resultados también mostraron activación en el IFG, un área que
9.26 38 −44 −26 Lóbulo cerebelo dcho. VI sugiere estar implicada en la interpretación de expresiones faciales
9.08 12 −98 8 Cuneus dcho. emocionales (Budell et al., 2010, 2015). El contraste de las
8.96 −38 −46 −28 Lóbulo cerebelo izqdo. VI expresiones de dolor frente a las de miedo reveló una activación en
7.53 10 −99 2 Occipital dcho. áreas cerebrales posteriores, como la corteza cuneal, que responde
7.47 −4 2 48 Área motriz suplementaria a las emociones negativas (Kumfor et al., 2013), así como en el
7.26 20 −5 −14 Amígadala cerebral dcha. SPL y el cerebelo, áreas que, según los informes, participan en la
preparación para la acción (Schraa-Tam et al., 2012; Engelen et al.,
6.47 50 11 17 Giro frontal inferior dcho.
2018). El contraste entre miedo y dolor reveló la activación del ITG y
6.35 −2 −16 4 Tálamo izq.
el INS, que se sabe que están interconectados con la amígdala
6.29 48 3 35 Giro precentral dcho. (Aggleton et al., 1980) y regiones como el IFG, que se sabe que
responden a la ansiedad inducida por amenazas (Gold et al., 2015).
Estos hallazgos son coherentes con las respuestas cerebrales
distribuidas a las expresiones faciales emocionales, en las que las
Estos resultados apoyan la teoría del primado motivacional (Lang,
expresiones de dolor y miedo se asocian a redes parcialmente
1995), ya que sugieren que la facilitación de las respuestas al dolor
disociables.
no es específica de la observación del dolor. La observación de
expresiones de dolor o miedo puede provocar la activación de una
red en el cerebro del observador que conduce a una percepción Respuestas cerebrales al dolor
elevada del dolor. Sin embargo, el análisis PPI sugiere algunos
Las respuestas cerebrales a las estimulaciones del dolor fueron
cambios diferenciales en la conectividad, que pueden reflejar la
muy coherentes con estudios anteriores (Duerden and Albanese,
activación de distintas vías moduladoras del dolor tras la
2013). Cuando las observaciones del dolor y el miedo se
observación de expresiones de dolor y miedo.
consideraron conjuntamente, el contraste frente a la expresión
neutral reveló una mayor activación provocada por el shock en la
Respuesta cerebral a la observación de red implicada en el procesamiento de la información sensorial y del
expresiones emocionales dolor (Wiech and Tracey, 2009), incluyendo el PCL, el AMCC, el
INS y la amígdala. El contraste de la respuesta cerebral al choque
Las respuestas cerebrales a la expresión emocional (sin choque) tras la observación de dolor o miedo en comparación con la neutra
fueron similares a las señaladas en muchos estudios anteriores y mostró el empleo de redes similares en el cerebro que implicaban
áreas como el INS y el MTG, lo que implica que las respuestas
evocadas por el choque eran
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Fig. 5. Activación BOLD en el cerebro en respuesta a choques dolorosos tras la observación de expresiones faciales de dolor y miedo > y posterior a la
observación de expresiones faciales neutras. La barra de color indica la puntuación Z. El mapa de activación se corrigió para realizar comparaciones múltiples
mediante GRF (P < 0,05). El valor más alto encontrado en el SIN izquierdo se utilizó para el análisis PPI. Las coordenadas de los picos se indican en la Tabla
3.
8 Social Cognitive and Affective Neuroscience, 2023, Vol. 18, No. 1
Figura 6. Activación BOLD en el cerebro en respuesta a descargas nocivas tras la observación de expresiones faciales de dolor y tras la observación de
expresiones faciales de miedo. La barra de color, indica los Z-score. El mapa de activación se corrigió para comparaciones múltiples mediante GRF (P<0.05). Las
coordenadas de los picos se indican en la Tabla 4.
Tabla 4. Activación cerebral en respuesta a descargas tras la observación mediante la observación de otros tipos de expresiones faciales con
de expresiones faciales de dolor contra expresiones faciales de miedo valencia negativa (Por ejemplo, expresión de tristeza;
facial expressions enhances readiness for action and pain per- Roy, S., Roy, C., Fortin, I., Ethier-Majcher, C., Belin, P., Gosselin, F.
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