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ORAL DE HISTORIA

REFORMA PROTESTANTE Y CONTRARREFORMA CATÓLICA: La


Reforma Protestante fue un movimiento religioso que surgió en
el siglo XVI, liderado por Martín Lutero, que cuestionaba la
autoridad y las prácticas de la Iglesia Católica. Los protestantes
se separaron de la Iglesia Católica y formaron distintas ramas
del cristianismo, como el luteranismo, el calvinismo o el
anglicanismo. La Contrarreforma fue la respuesta de la Iglesia
Católica a la Reforma Protestante, que consistió en una serie de
medidas para reformar su doctrina, su organización y su
disciplina. El Concilio de Trento (1545-1563) fue el principal
órgano de la Contrarreforma, que definió los dogmas católicos y
combatió las herejías protestantes. La Reforma y la
Contrarreforma tuvieron consecuencias políticas, sociales y
culturales en Europa, como las guerras de religión, la
persecución de los disidentes, el fortalecimiento de las
monarquías absolutas o el desarrollo del arte barroco.

ABSOLUTISMO (CENTRALISMO DE LAS MONARQUÍAS): APOGEO


(FRANCIA) Y LIMITES (INGLATERRA): El absolutismo fue un
régimen político que se caracterizó por la concentración del
poder en el rey, que no estaba sujeto a ninguna limitación legal
o institucional. El rey era considerado de origen divino y tenía el
control de todos los aspectos del Estado. El absolutismo se
desarrolló en Europa entre los siglos XVI y XVIII, especialmente
en Francia y España. El apogeo del absolutismo en Francia se
dio con el reinado de Luis XIV (1643-1715), que se hizo llamar el
Rey Sol y que construyó el fastuoso Palacio de Versalles. Luis
XIV anuló el Edicto de Nantes, que concedía libertad religiosa a
los protestantes, y participó en varias guerras que debilitaron
las finanzas del reino. Su ministro Colbert impulsó el desarrollo
económico y comercial de Francia. El absolutismo en Inglaterra
tuvo sus límites debido a la resistencia del Parlamento y de la
sociedad civil, que defendían sus derechos y libertades. En el
siglo XVII, se produjeron dos revoluciones que acabaron con el
absolutismo: la Revolución Puritana (1642-1649), que ejecutó al
rey Carlos I y estableció una república bajo el liderazgo de
Oliver Cromwell; y la Revolución Gloriosa (1688-1689), que
depuso al rey Jacobo II y proclamó la monarquía parlamentaria
con Guillermo de Orange y María Estuardo. En el Estado
absolutista, el gobernante (monarca), se considera la autoridad
máxima, por encima de todas las leyes. La expresión del
derecho romano "princeps legibus solutus", de la que deriva
ese uso de los términos absoluto y absolutismo, se aplica en el
sentido de que el gobernante no está sujeto a la ley y hace que
estas se cumplan en su totalidad bajo su mandato, ejerce su
gobierno sin límites ni restricción alguna más que consigo
mismo. Esta forma de gobierno corresponde a la monarquía
absoluta, expresión de la forma de gobierno por la cual los
súbditos del Estado eran conscientes de ser sometidos a la
autoridad única y soberana de un monarca absoluto.
REVOLUCIÓN INDUSTRIAL (SIGLOS XVIII-XIX): La Revolución
Industrial fue un proceso de transformación económica, social y
tecnológica que se inició en la segunda mitad del siglo XVIII en
Gran Bretaña y que se extendió por Europa y Estados Unidos
haCambio en los Métodos de Producción: La transición de
métodos de producción artesanales y agrarios a métodos
industriales y fabriles. La introducción de maquinaria y la
mecanización de procesos productivos fue fundamental.
Desarrollo de la Maquinaria: Invenciones clave, como la máquina de
vapor, la hiladora mecánica y la lanzadera volante, revolucionaron la
producción textil y otros sectores.

Crecimiento de las Ciudades: El proceso de industrialización atrajo a la


población rural hacia las ciudades en busca de empleo en las fábricas.
Esto llevó a un rápido crecimiento urbano y a la formación de las
primeras grandes ciudades industriales.
Cambio en las Relaciones Laborales: Surgimiento de la clase obrera
industrial. Condiciones laborales a menudo precarias, largas jornadas de
trabajo y luchas por los derechos de los trabajadores.Desarrollo del
Transporte: La mejora de los sistemas de transporte, especialmente el
ferrocarril, facilitó el movimiento de materias primas y productos
manufacturados, permitiendo un mercado más amplio.
Cambio en la Economía: La economía pasó de ser principalmente agraria
y artesanal a una economía industrial y capitalista. El capitalismo
industrial se consolidó con la propiedad de fábricas y la acumulación de
capital.
Innovaciones Tecnológicas: Además de la máquina de vapor, hubo
avances en la metalurgia, química y otras áreas tecnológicas. Estos
avances sentaron las bases para desarrollos posteriores en la Segunda
Revolución Industrial.
Globalización Económica: La Revolución Industrial marcó el comienzo de
la globalización económica, con la expansión del comercio internacional
y el surgimiento de imperios comerciales.
Cambios Sociales: La industrialización también llevó a cambios sociales
significativos, como el surgimiento de una nueva clase media, cambios
en la estructura familiar y el aumento de la alfabetización.
Es importante señalar que la Revolución Industrial no ocurrió de manera
uniforme en todo el mundo y tuvo diferentes impactos y cronologías en
distintas regiones.
La Revolución Industrial fue un proceso de transformación económica,
social y tecnológica que tuvo lugar en la segunda mitad del siglo XVIII en
el Reino de Gran Bretaña y se extendió posteriormente a gran parte de
América Anglosajona. Esta revolución marcó un punto de inflexión en la
historia, modificando todos los aspectos de la vida cotidiana de una u
otra manera.

Algunos de los cambios significativos que la Revolución Industrial


permitió a las sociedades incluyen:

Industrialización y Urbanización: El crecimiento de las fábricas y la


adopción masiva de la maquinaria transformaron las sociedades agrarias
y artesanales en sociedades industrializadas y urbanas. La gente migró
desde las áreas rurales a las ciudades en busca de empleo en las fábricas.

Crecimiento Económico: La producción agrícola y la manufactura se


multiplicaron, y la riqueza y la renta per cápita experimentaron un
crecimiento sin precedentes. Por primera vez en la historia, las
condiciones de vida de las masas comunes comenzaron a mejorar de
manera sostenida.

Nuevas Clases Sociales: Surgieron nuevas clases sociales, como el


proletariado (trabajadores industriales y campesinos pobres) y la
burguesía (dueña de los medios de producción y poseedora de la mayor
parte de la renta y el capital).
Innovaciones Tecnológicas: La Revolución Industrial trajo consigo avances
como la máquina de vapor, los ferrocarriles y la imprenta, que
transformaron la forma en que las personas vivían y trabajaban.
En resumen, la Revolución Industrial cambió radicalmente la estructura
social, económica y cultural de las sociedades occidentales, allanando el
camino hacia la era moderna.
Durante la Revolución Industrial, se produjeron avances tecnológicos que
transformaron radicalmente la sociedad y la economía. Algunos de los
adelantos más significativos incluyen:
Máquina a Vapor: La invención de la máquina de vapor por James Watt
en el siglo XVIII fue un hito crucial. Esta máquina permitió la
mecanización de la industria y la expansión de la producción en fábricas
y minas.
Máquinas de Hilar y Tejer: La creación de máquinas como el telar
mecánico de Jacquard revolucionó la industria textil. Estas máquinas
automatizadas aumentaron la eficiencia en la producción de telas y
tejidos.
Transporte a Vapor: Los barcos a vapor y las locomotoras (como la de
George Stephenson) transformaron el transporte. Los barcos a vapor
permitieron viajes más rápidos y eficientes, mientras que los trenes
conectaron ciudades y regiones.
Uso del Acero: La producción de acero reemplazó al hierro en muchas
aplicaciones. El proceso Bessemer y el horno Siemens-Martin
permitieron la fabricación masiva de acero.
Telégrafo: La invención del telégrafo por Samuel Morse en 1836
revolucionó las comunicaciones. Ahora era posible enviar mensajes a
larga distancia de manera rápida y eficiente.
Ferrocarril: La expansión de las redes ferroviarias conectó ciudades y
regiones, facilitando el transporte de mercancías y personas.
En resumen, estos avances tecnológicos permitieron la industrialización,
la urbanización y el crecimiento económico durante la Revolución
Industrial
LAS PRINCIPALES CIUDADES FUERON
LONDRES
BIRMINGHAM
MACHESTER

En la sociedad industrial capitalista, surgieron dos clases sociales


antagónicas con características distintas:
Burguesía:

Propietarios de los medios de producción: La burguesía era la clase


dominante y poseía fábricas, tierras, minas y otros medios de
producción.
Control sobre la economía: Su riqueza y poder se basaban en la
propiedad y el control de los recursos económicos.
Interés en la acumulación de capital: Buscaban maximizar las ganancias y
expandir sus negocios.
Estilo de vida urbano: Vivían en ciudades, rodeados de comodidades y
lujos.
Ideología individualista: Defendían la libre empresa y la competencia.
Proletariado:
Trabajadores asalariados: El proletariado era la clase trabajadora que
vendía su fuerza laboral a los burgueses.
Dependencia económica: Dependían de los empleadores para su
sustento y carecían de propiedad.
Condiciones laborales precarias: Trabajaban largas horas en condiciones
insalubres y recibían bajos salarios.
Vida en la periferia urbana: Vivían en barrios industriales, a menudo en
condiciones de hacinamiento.
Conciencia de clase: Surgió una conciencia de clase entre los proletarios,
que luchaban por mejores condiciones laborales y derechos.
Estas dos clases sociales representaban intereses opuestos: la burguesía
buscaba mantener su riqueza y poder, mientras que el proletariado
luchaba por mejorar sus condiciones de vida y derechos laborales .
La Revolución Industrial tuvo un profundo impacto en la sociedad y la
economía. A continuación, se presentan algunas de las principales
consecuencias de este período de transformación:

Educación:
Antes de la Revolución Industrial, la educación no era gratuita. Las
familias ricas podían enviar a sus hijos a la escuela, mientras que los
niños pobres tenían acceso limitado a la educación. Sin embargo, en
1833, el gobierno británico asignó fondos para promover la educación en
las escuelas, lo que permitió que los niños de todas las divisiones
socioeconómicas tuvieran acceso a la educación1.
Nuevas Invenciones y Desarrollo de Fábricas:

La Revolución Industrial dio lugar a una serie de innovaciones


tecnológicas, como la máquina de vapor, el telar mecánico de Jacquard y
la producción de acero. Estas invenciones transformaron la producción y
la economía.
Crecimiento de las Ciudades:

El crecimiento de las fábricas atrajo a las personas a los centros


metropolitanos. El número de ciudades con poblaciones de más de
20,000 habitantes en Inglaterra y Gales aumentó significativamente.
Explotación de los Recursos Minerales y Aumento de la Fuerza de
Trabajo:

La Revolución Industrial aumentó la demanda de recursos minerales


como el carbón y el hierro. Además, la fuerza de trabajo se expandió
debido a la creciente industrialización.
Explotación Infantil:

Los lugares de trabajo a menudo estaban mal ventilados, hacinados y


peligrosos. Hombres, mujeres y niños trabajaban en condiciones
insalubres y con salarios de supervivencia.
Roles Familiares:
La industrialización cambió los roles familiares. Las mujeres y los niños
también comenzaron a trabajar en las fábricas para contribuir al sustento
familiar.
Sistema Bancario y de Inversión Altamente Desarrollado:

El crecimiento económico inspirado en las nuevas tecnologías condujo al


desarrollo de un sistema bancario y de inversión más sofisticado

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