vida presente no se pueden comparar con la Gloria que nos espera y que nos ha de manifestarse B) (Rom 8, 35) ¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿A caso las pruebas, la aflicción, la persecución, el hambre, la falta de todo, los peligros o la espada? C) (1 Cor, 28-29) Dios ha elegido lo que es común y despreciado en este mundo, lo que es nada, para reducir a la nada lo que es. Y así ningún mortal podrá alabarse así mismo ante Dios D) (2 Cor 1,3-4) Bendito sea Dios, padre de Cristo Jesús, nuestro Señor padre lleno de ternura, Dios del que viene todo consuelo. El nos conforta en toda prueba, para que también nosotros seamos capaces de confortar a los que están en cualquier dificultad, mediante el mismo consuelo que recibimos de Dios E) (2 Cor 1, 5) Pues la misma medida en que los sufrimientos de Cristo recaen abundantemente sobre nosotros, el consuelo de Cristo también nos llega con mayor abundancia F) (2 Cor 5,1) Sabemos que si nuestra casa terrena o, mejor dicho, nuestra tienda de campaña, llega a desmontarse, Dios nos tiene reservado un edificio no levantado por mano de hombres, una casa para siempre en los cielos G) (2 Cor 12, 10) Por eso acepto con gusto lo que me toca sufrir por Cristo: enfermedades, humillaciones, necesidades, persecuciones y angustias. Pues si me siento débil, entonces es cuando soy fuerte H) (Flp 1, 29) Y es una gracia para ustedes que no solamente hayan creído en Cristo si no también que padezcan por el I) (Flp 3, 21) Pues El cambiará nuestro cuerpo miserable, usando esa fuerza con la que puede someter a si el universo, y lo hará semejante a su propio cuerpo del que irradia su gloria J) (Col 1, 24) Ahora me alegro cuando tengo que sufrir por ustedes, pues así completo en mi carne lo que falta a los sufrimientos de Cristo para bien de su cuerpo, que es la iglesia K) (2 Tim 2, 11-12) Una cosa es cierta: si hemos muerto con El, también viviremos con El. Si sufrimos pacientemente con El, también reinaremos con El. Si lo negamos, también Él nos negara L) (2 Tim 3, 12) De igual manera serán perseguidos todos los que quieran servir a Dios en Cristo Jesús M) (Rom 5, 3-5) Al mismo tiempo nos sentimos seguros incluso en las tribulaciones, sabiendo que la prueba ejercita la paciencia, que la paciencia nos hace madurar y que la madurez aviva la esperanza, la cual no quedara frustrada, pues ya se nos ha dado el Espíritu Santo, y por El amor de Dios se va derramando en nuestros corazones N) (2 Cor 4, 16-17) Por eso no nos desanimamos; al contrario, aunque nuestro exterior esta decayendo, el hombre interior se va renovando de día en día en nosotros. No se pueden equiparar esas ligeras pruebas que pasan aprisa con el valor formidable de la gloria eterna que nos está preparando (Mateo 6-1) Cuídense de hacer obras buenas en publico solamente para que los vean de lo contrario no serán recompensados por el padre del cielo (Santiago 1, 2) Hermanos considérense afortunados cuando les toca soportar toda clase de pruebas