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Los pavimentos de concreto hidráulico están diseñados para soportar esfuerzos de flexión.

Tienen
sistemas de transferencia de cargas, que son dovelas que comunican losas entre losas.
Las juntas de transferencia son barras lisas de acero que permiten transmitir la carga entre losas de
concreto.
El procedimiento para transferir cargas en juntas en pavimentos de hormigón consiste en cortar el
hormigón endurecido entre un tercio y un cuarto del espesor de la losa. Esto crea una sección más
débil que el resto, por la que parte el hormigón contorneando los áridos gruesos y creando una
superficie rugosa.
Los dowels son adecuados para la solución en la transferencia de cargas en losas apoyadas sobre el
terreno, tales como:
 Carreteras
 Pistas de aterrizaje
 Pavimentos urbanos
El mejoramiento de la transferencia mejora la capacidad estructural del pavimento y reduce el
potencial de escalonamiento
Colocación de Barras de Traspaso de Carga
Las barras de traspaso de carga se colocan en juntas y grietas transversales, en donde se haya visto
o medido una deficiente transferencia de carga, entre la losa de aproximación y la losa de salida
transversal. Es decir, un movimiento diferencial entre estas losas debido a las cargas de tránsito. Su
objetivo es aumentar la eficiencia de la transferencia de carga, al enlazar los trozos contiguos, de
modo tal que se distribuya la carga uniformemente. El mejoramiento de la transferencia mejora la
capacidad estructural del pavimento y reduce el potencial de escalonamiento. Su configuración
geométrica, el número de barras a colocar por pista y el tipo de acero a utilizar se determinan
principalmente en función a las cargas de tránsito que estará expuesto el pavimento y se especifican
en el proyecto de RPH.

Transferencia mediante engranaje de los áridos a uno y otro lado de la junta


Este procedimiento se realiza mediante un corte en el hormigón endurecido que abarca entre un
tercio y un cuarto del espesor de la losa. Ello crea una sección más débil que el resto, por la que
parte el hormigón contorneando los áridos gruesos y creando una superficie rugosa.
El mecanismo de engranaje de los áridos funciona de manera adecuadoasiempre y cuando la
abertura de las juntas sea menor a 0,5mm. Para valores superiores, la eficacia de la transferencia de
cargas comienza a disminuir, pudiendo considerarse inexistente cuando la abertura es superior a
1mm. Además, los áridos deben tener una cierta resistencia al desgaste para soportar las fricciones
que se producen al paso de las cargas.
Por ello, un engranaje de áridos correcto suele ir asociado a una distancia corta entre juntas, la cual
depende a su vez de las variaciones de temperatura en el pavimentos, sobre todo en aquellas que
se producen de forma cíclica a lo largo de un día (temperaturas diurnas y nocturnas). En el caso de
descensos importantes durante la noche, las losas tienden a adoptar una forma convexa
(combándose hacia arriba), alzándose así sus bordes y aumentando las deflexiones que se
producen al paso de las cargas. Ello dificulta que existe una transferencia de cargas adecuada.
transferencias de cargas juntas
Transferencia mediante la disposición de pasadores en las juntas
Los pasadores son barras de acero liso, de 500 mm de longitud y 25 mm de diámetro
aproximadamente. Los pasadores se sitúan a la mitad del espesor de la losa.
En lo que respecta a su uso, para el funcionamiento adecuado de estos es necesario que al menos
la mitad de su longitud tenga un recubrimiento antiadherente, y que se coloquen lo más paralelos
posibles entre sí, a fin de no bloquear los movimientos de apertura y cierre de la junta en las
variaciones de temperatura.
Dadas las restricciones que supone la transferencia por engranaje, los pasadores representan una
mejor alternativa para niveles de tráfico elevados. No es de extrañar, por tanto, que en países
europeos, tales como Alemania o Austria, los pavimentos de hormigón sometidos a tráficos elevados
cuenten con pasadores como mecanismos de solidarización de losas en juntas. Asimismo, ejemplos
como el caso de la variante de Torrejón de Ardoz en España no hacen más que constatar el hecho
de que los pavimentos con pasadores mantienen una elevada transferencia de carga a lo largo de su
vida útil, siempre que estos cumplan la normativa y se coloquen adecuadamente.
Se estima que la separación óptima entre juntas en firmes con pasadores es de 5 metros, aunque se
puede dotar de distancias mayores. Por otra parte, los pavimentos sin pasadores ofrecen resultados
satisfactorios cuando las losas de hormigón no superar la los 4,5 metros y cuentan con capas de
base no erosionables. Os dejamos un vídeo que muestra la ejecución en obra de juntas mediante
pasadores en un firme de hormigón.

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