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REVISTA DE
´
GASTROENTEROLOGIA
´
DE MEXICO
www.elsevier.es/rgmx
ARTÍCULO DE REVISIÓN
a
Departamento de Cirugía, Facultad de Medicina, Universidad Nacional Autónoma de México, Ciudad de México, México
b
Clínica de Cirugía Hepato-Pancreato-Biliar, Hospital General de México «Dr. Eduardo Liceaga», Ciudad de México, México
c
Clínica de Gastroenterología, Hospital Médica Sur, Ciudad de México, México
d
Unidad de Terapia Intensiva, Hospital Médica Sur, Ciudad de México, México
e
Departamento de Terapia Intensiva, Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición «Salvador Zubirán», Ciudad de México,
México
PALABRAS CLAVE Resumen El síndrome compartimental abdominal se define cuando 2 o más compartimentos
Síndrome anatómicos tienen una presión intraabdominal con valor sostenido > 20 mmHg, asociado a una
compartimental falla orgánica. La incidencia es del 2% y la prevalencia del 0 al 36.4%.
abdominal; Se realizó la búsqueda bibliográfica en diferentes bases de datos. Se incluyeron artículos
Hipertensión publicados desde 1970 al 2018, en inglés o español, con el fin de proporcionar los conceptos,
intraabdominal; clasificaciones y manejo integral en el abordaje del síndrome compartimental, para tratar y
Presión evitar complicaciones severas en los pacientes asociados a dicha entidad.
intraabdominal; La medición de la presión intravesical es el método estándar para el diagnóstico. El trata-
Tratamiento; miento se basa en la evacuación de contenidos intraluminales, identificar y tratar las lesiones
Manifestaciones intraabdominales, mejorar la complianza de la pared abdominal, y la óptima administración de
clínicas fluidos y perfusión tisular. La laparotomía es generalmente seguida de un cierre temporal de
la pared abdominal de 5 a 7 días después de la cirugía. La reconstrucción es realizada de 6 a
12 meses después de la última operación.
Se debe diagnosticar e intervenir antes del daño orgánico ocasionado por el síndrome compar-
timental abdominal. Con frecuencia la lesión renal puede progresar, siendo este un parámetro
para considerar la descompresión abdominal. Contar con un biomarcador de daño temprano
sería ideal. El tratamiento quirúrgico es exitoso en la mayoría. Un enfoque multidisciplinario es
necesario para los cuidados intensivos y necesidades reconstructivas del paciente, por lo que
∗
Autor para correspondencia. Dirección Clínica de Cirugía Hepato-Pancreato-Biliar. Servicio de Cirugía general. Hospital General de México
«Dr. Eduardo Liceaga»: Dr. Balmis No. 148 Col. Doctores, Delegación Cuauhtémoc. Ciudad de México C.P. 06720. Teléfono: +27892000.
Correo electrónico: emontalvoj@gmail.com (E.E. Montalvo-Jave).
https://doi.org/10.1016/j.rgmx.2020.03.003
0375-0906/© 2020 Asociación Mexicana de Gastroenterologı́a. Publicado por Masson Doyma México S.A. Este es un artı́culo Open Access bajo
la licencia CC BY-NC-ND (http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/).
Cómo citar este artículo: Montalvo-Jave EE, et al. Síndrome compartimental abdominal: conceptos actuales y manejo.
Revista de Gastroenterología de México. 2020. https://doi.org/10.1016/j.rgmx.2020.03.003
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es preciso seguir trabajando para definir e implementar estrategias que mitiguen la calidad de
vida del paciente.
© 2020 Asociación Mexicana de Gastroenterologı́a. Publicado por Masson Doyma México S.A.
Este es un artı́culo Open Access bajo la licencia CC BY-NC-ND (http://creativecommons.org/
licenses/by-nc-nd/4.0/).
Cómo citar este artículo: Montalvo-Jave EE, et al. Síndrome compartimental abdominal: conceptos actuales y manejo.
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Síndrome compartimental abdominal 3
incidencia de SCA varía entre el 0.5 y 58.8%2,5,9,10 . En los hipotermia (< 33 ◦ C), un pH < 7,2 y la reanimación con
pacientes con antecedente de trauma, las tasas de inciden- > 5,000 ml de cristaloides en 24 h2 .
cia aumentan hasta el 14%2 . Estos factores de riesgo independientes son esenciales
La prevalencia de SCA varía del 0 al 36.4% en pacientes para muchos otros, como quemaduras, heridas y pancreati-
con daño visceral6 , y del 0.9 al 36.4% en pacientes sometidos tis, que requieren reanimación con líquidos y, por lo tanto,
a laparotomía por trauma abdominal1,6 . pueden inducir SCA2 .
Con base en la clasificación de la WSACS, se reporta una
incidencia del 23 al 27% en HIA grado I, del 9 al 14% en grado
Fisiopatología
II, del 2 al 3% en grado III y del 1 al 2% en grado IV6,7 . A mayor
grado de HIA incrementa el riesgo de mortalidad8 .
La PIA está determinada por 2 elementos: el volumen
La mortalidad asociada a SCA es elevada; en 2 artícu-
intraabdominal y la complianza de la pared abdominal5 .
los recientes se reporta una mortalidad del 47.1% y 53.1%,
Tanto el SCA como la HIA resultan de la alteración en la per-
respectivamente2,6 .
fusión tisular causada por un aumento de la presión dentro
del volumen establecido de un compartimento anatómico1,2 .
Etiología y factores de riesgo El efecto que tiene el SCA sobre diversos sistemas es
amplio.
Se ha reportado que la HIA es un factor importante de mor- En el sistema nervioso central, conlleva una disminución
talidad con un riesgo relativo (RR) de 1.85, aun cuando de la perfusión sanguínea cerebral aunado a un incremento
no tenga desarrollado el SCA11 . Existen varios factores de de la presión intracraneana al inducir estasis venosa2,14 .
riesgo asociados al desarrollo de HIA; sin embargo, es difí- A nivel cardíaco, el aumento en la PIA tiene conse-
cil predecir qué pacientes desarrollarán HIA. En general, cuencias, entre ellas, una disminución del retorno venoso
el aumento de la PIA puede resultar de la disminución de causado por la compresión de la vena cava inferior y por lo
la complianza de la pared abdominal, un aumento en el tanto repercute en la elevación de la presión intratorácica
volumen del contenido abdominal, o una combinación de (PIT). Se produce alteración en la función cardíaca debido
las dos1 . Los principales factores de riesgo de HIA y SCA se a una compresión del corazón secundaria a una elevación
resumen en la tabla 1 1,5,6,12---14 . diafragmática14 ; como la fuga capilar que genera edema,
Los factores de riesgo independientes para el SCA por lo tanto se manifiesta en un estado de hipovolemia14 .
son la transfusión masiva (> 10 concentrados de eritroci- La PIA alta también puede aumentar la resistencia vascular
tos por 24 h), un índice de masa corporal (IMC) > 30 kg/m2 , sistémica al comprimir la aorta y la circulación esplénica, lo
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que da como resultado una poscarga aumentada y un volu- bacteriana puede provocar sepsis o choque séptico si el SCA
men sistólico reducido generando una disminución neta en no se reconoce y se trata de manera inmediata, provocando
el gasto cardíaco con la hipotensión resultante1 . un rápido deterioro clínico o la muerte del paciente1 .
El aumento del síndrome de permeabilidad se ha corre- La disfunción renal también es común en el SCA y se
lacionado en pacientes con persistencia de inflamación manifiesta como oliguria cuando la PIA es > 15 mmHg o como
sistémica en su defecto para reducir la pérdida trans- anuria cuando la PIA es > 30 mmHg1,5 . La HIA reduce el flujo
capilar de albúmina; puede representar un tercer golpe plasmático renal y la tasa de filtración glomerular mediante
(complicación) después de la lesión inicial y la lesión por la compresión de la arteriola renal (la resistencia vascu-
isquemia-reperfusión. Existen marcadores novedosos, como lar de los vasos renales aumenta hasta un 500% si la PIA
el índice de fuga capilar, el agua pulmonar extravascular y es > 20 mmHg)2 y la circulación venosa y de los túbulos
el índice de permeabilidad pulmonar, que pueden ayudar en mismos1,14 , dando como resultado una activación del sistema
el control de la administración de fluidos de manera dirigida renina-angiotensina (vasoconstricción de los vasos renales)
a las necesidades individuales en cada paciente, ya que la y niveles séricos elevados de hormona antidiurética (ADH)
fuga capilar es una condición inflamatoria que resulta de y aldosterona (efectos antidiuréticos). Esta empeora el SCA
una vía común que incluye la isquemia-reperfusión, la gene- por un aumento adicional de la HIA y una disminución adi-
ración de metabolitos tóxicos de oxígeno, lesión de la pared cional de la perfusión renal1,2,14 .
celular y lesión enzimática que conlleva una pérdida de la Reconociendo el papel fundamental de la reanimación
función de la barrera endotelial capilar14 . con líquidos en la patogénesis de la HIA y el SCA, se debe
A nivel pulmonar, el aumento de la PIA conduce a la ele- evitar la reanimación de gran volumen con cristaloides en
vación del diafragma, lo que reduce el volumen torácico, la pacientes con o en riesgo de presentar SCA5 .
capacidad residual funcional y la distensibilidad, al tiempo Una PIA elevada podría ocasionar hipoperfusión hepática,
que aumenta la presión intrapleural1,5,14,15 . La atelectasia ya que evoca una reducción del flujo sanguíneo a través de
por compresión resultante incrementa el espacio muerto la vena porta de hasta el 35%1,2 . La insuficiencia hepática
fisiológico2 . El desajuste de la relación ventilación-perfusión se manifiesta a través de la eliminación alterada del lac-
resultante a menudo causa un empeoramiento progresivo tato en plasma, lo que resulta en una acidosis metabólica.
de la hipoxemia, la hipercapnia y la acidosis, que pueden Además, los aumentos en los niveles de lactato sérico depri-
requerir soporte con ventilación mecánica invasiva1,2,5,14 . men el pH del suero, lo que puede provocar una disminución
Incrementos en la presión pico, meseta y alveolar aumentan de la contractilidad miocárdica. La acidosis láctica también
el riesgo para desarrollar barotrauma y volutrauma alveolar. puede causar dilatación arteriolar sistémica, lo que deprime
La isquemia asociada con la hipoxia tisular puede provo- aún más la presión arterial sistémica, afecta la respiración
car la liberación sistémica de citocinas proinflamatorias, celular y aumenta aún más la producción de ácido láctico,
resultando en acumulación de neutrófilos y producción de creando de manera efectiva un ciclo de retroalimentación
radicales libres de oxígeno a nivel pulmonar. Estos mecanis- que acelera el deterioro fisiológico1 .
mos están implicados en el desarrollo de lesión pulmonar
aguda y el síndrome de dificultad respiratoria aguda1,2,14,15 .
La presencia de HIA dará lugar a la hipertensión pulmonar Clasificación
a través de un aumento de la presión intratorácica y por con- De acuerdo con su patogénesis, el SCA se clasifica como
siguiente una compresión directa al parénquima pulmonar y primario si la HIA resulta de una lesión o enfermedad
los vasos, dando lugar a una disfunción ventricular izquierda intraabdominal (lesión de órganos parenquimatosos como
y derecha2,16 . bazo o hígado, rotura de un aneurisma aórtico abdominal,
La mala perfusión intestinal resultante de la disminución pancreatitis, hemorragia retroperitoneal)2,12,13,17 .
de la circulación esplénica, la lesión renal aguda secundaria El SCA secundario se define como una HIA causada por
a disminución del flujo sanguíneo glomerular y la disminu- una patología extraperitoneal o sistémica, como sepsis o
ción del retorno venoso como resultado de la compresión quemaduras graves2,12,13,17 .
de la vena cava inferior pueden llevar a acidosis sistémica y El SCA terciario es una enfermedad recurrente des-
colapso cardiovascular1 . pués del tratamiento inicial exitoso del SCA primario o
Tanto la presión venosa central como la producción uri- secundario2 .
naria no reflejan la potencial depleción de volumen de
los pacientes con SCA2,16 . Por lo tanto, el índice de volu- Manifestaciones clínicas
men diastólico final del ventrículo derecho es el diagnóstico La presentación clínica generalmente incluye un abdomen
de elección para obtener una impresión de la situación tenso, distendido, disnea, ortopnea, dolor abdominal, sen-
intravascular2,16 . sación de plenitud, hipotensión o hipertensión, hipercapnia
Una alteración de la microperfusión de la mucosa resulta y oliguria2,3 .
en la elevación del lactato sérico, lo que disminuye el pH, y Por el contrario, se ha descrito que el paciente ventilado
causa isquemia mesentérica2 . La isquemia intestinal puede presenta edema y distensión abdominal2 .
manifestarse como edema intersticial y/o íleo, los cuales
aumentan el volumen intraabdominal y empeoran el SCA. Se
ha reportado que después de 60 min de PIA sostenida mayor Diagnóstico
de 25 mmHg, el flujo sanguíneo de la mucosa se altera,
incluso en pacientes bien reanimados, y se ha demostrado El requisito más importante para el diagnóstico y trata-
que permite la translocación de bacterias intraluminales miento del SCA es la medición de la PIA, que puede medirse
a través de la barrera mucosa dañada. Esta translocación de manera directa o indirecta, intermitente o continua16 .
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Síndrome compartimental abdominal 5
El reconocimiento temprano de la HIA es el primer paso tomografía computarizada también son pruebas poco espe-
esencial para la prevención del SCA. La PIA debe medirse cíficas para detectar el aumento de la PIA13,15,16 .
en pacientes con 2 o más factores de riesgo (tabla 1)1 . En Kreis et al., 2013, recomiendan que a todos los pacientes
tales casos, la PIA debe ser monitoreada a intervalos de 4 en terapia intensiva posterior a una cirugía abdominal aguda
a 6 h, con monitorización de la PIA por hora restringida a o posterior a una reanimación hídrica deberá medirse la PIA
pacientes que sufren de disfunción orgánica grave3 . al menos cada 6 h22 .
La medición de la PIA se puede determinar indi-
rectamente por medio de catéteres intravesicales o
intragástricos, entre otros18 . La medición de la presión
Tratamiento
intravesical es el método estándar para determinar la pre-
sencia de SCA o de HIA por medio del método modificado El manejo médico y el quirúrgico han sido descritos como el
de Kron, dada su simplicidad, confiabilidad, facilidad de tratamiento en el SCA y no tienen por qué ser mutuamente
uso y reproducibilidad, con los beneficios adicionales de excluyentes.
bajo costo, poco invasivo, riesgos de complicación mínima La WSACS publicó un algoritmo de tratamiento, que se
y simple1---3,5,16,7,19 . basa en 5 columnas: (1) evacuación de contenidos intralu-
La presión intravesical se mide mediante la instilación minales, (2) evacuación de lesiones intraabdominales que
de 20 ml de agua estéril o solución salina en la vejiga a ocupan espacio, (3) mejora de la complianza de la pared
través de un catéter urinario conectado a un manómetro abdominal, (4) óptima administración de fluidos y (5) perfu-
a cero en el nivel de la línea axilar media. El procedi- sión óptima2,3,5,7 .
miento debe realizarse con técnica estéril para prevenir
infecciones iatrogénicas del tracto urinario. La instilación Evacuación de contenidos intraluminales
de más de 50 ml en el catéter aumenta artificialmente la El primer paso de la evacuación endoluminal puede ser la
PIA medida. Esta técnica está contraindicada en aquellos inserción de drenaje por sonda nasogástrica o rectal, que
con antecedentes de cistectomía, lesión vesical traumática ha demostrado ser eficaz para reducir la PIA2 .
o empaquetamiento pélvico1 . Para evitar la distensión abdominal, los procinéticos
Se han descrito variaciones de la técnica original, entre como la metoclopramida y la eritromicina o la neostig-
ellas, utilizar un transductor de presión conectado a un sis- mina son ampliamente utilizados. Para el tratamiento del
tema de llave de paso, técnica de tubo en U y la que emplea estreñimiento inducido por opioides, la metilnaltrexona
un conjunto Y3 . puede ejercer efectos procinéticos. Si el paciente no res-
De acuerdo con la WSACS, la PIA debe expresarse en ponde, se debe considerar la descompresión del colon
mmHg y las mediciones se realizan al final de la espiración, mediante endoscopia2 .
con el paciente en posición supina completa y en ausencia
de contracciones del músculo abdominal1,15 .
Lesiones ocupantes de espacio
La medición directa de PIA es teóricamente el método
Las lesiones ocupantes de espacio se observan comúnmente
más preciso, pero requiere acceso al compartimento
después de una cirugía abdominal mayor, pancreatitis o
peritoneal, incluyendo los riesgos asociados con los procedi-
trauma. Además, la sobrecarga de líquidos durante la rea-
mientos abdominales invasivos. Por lo tanto, estas técnicas
nimación temprana puede dar como resultado un cambio de
no son ampliamente útiles en el cribado de HIA1 .
fluido hacia la cavidad peritoneal. Además del hecho de que
Las mediciones de presión de la vena cava inferior han
estas lesiones conllevan el riesgo de infección secundaria,
demostrado una buena correlación con las presiones obte-
pueden causar o contribuir al aumento de PIA en la UCI2 .
nidas a través de otros métodos validados. La presión
Para los grados I y II de HIA, el soporte con líquido ayuda
intragástrica es un medio alternativo para medir indirec-
a mantener la perfusión y esto contrarrestará los efectos
tamente la PIA y se obtiene mediante manometría de tubo
negativos de la HIA23 . Una técnica invasiva para lograr la
nasogástrico u orogástrico1,5,16,19---21 ; sin embargo, las medi-
reducción de volumen intraabdominal es el drenaje percu-
ciones intermitentes obtenidas con esta técnica pueden
táneo con catéter o paracentesis de gran volumen2,5 . Sin
ser poco confiables debido a los efectos de confusión del
embargo, pueden surgir dificultades técnicas con dichos
aumento de presión causado por las contracciones gástricas.
métodos incluyendo infección secundaria a ascitis, perfo-
El monitoreo continuo de la presión usando un balón intra-
ración del intestino u otras estructuras intraabdominales,
gástrico puede ser útil para superar esta limitación. Aunque
incluyendo las estructuras vasculares24 .
esta técnica supera los efectos de confusión de las contrac-
ciones gástricas, otros factores, como la administración de
alimentos enterales, pueden confundir las mediciones; un Aumento de la complianza de la pared abdominal
efecto que no está suficientemente caracterizado en la lite- El bloqueo neuromuscular es una maniobra de rescate para
ratura. Se han descrito otras técnicas novedosas que utilizan disminuir la PIA mediante un aumento de la complianza de la
catéteres especializados con microchips incrustados para pared abdominal. Sin embargo, debe evitarse el uso habitual
medir las presiones intravesical, rectal o intrauterina, pero de sustancias relajantes debido a sus efectos secundarios
son menos rentables que las técnicas más simples descritas (atelectasia, neumonía, etc.)1,2,25 .
anteriormente1 . El bloqueo neuromuscular tiene una utilidad clínica limi-
La sensibilidad y valor predictivo positivo de la explo- tada en el tratamiento definitivo de la HIA y es ineficaz para
ración física oscilan en un 40-60%1---3 . El uso del perímetro el tratamiento del SCA verdadero. No obstante, puede ser
abdominal es igualmente inexacto. Estudios de imagen como útil como una medida temporal cuando el manejo quirúrgico
la radiografía simple de abdomen, ecografía abdominal o definitivo no está disponible o no es factible1 .
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Síndrome compartimental abdominal 7
sistémica, síndrome de disfunción multiorgánica, fistulas e absorbibles, y cierre con tejido autólogo cubierto con injerto
íleo postoperatorio41 . de piel sobre una base de tejido granulado47 .
La laparotomía es generalmente seguida de un cierre De manera simultánea el paciente debe ser mantenido en
de la pared abdominal temporal a fin de crear un espa- la Unidad de Terapia Intensiva buscando la mejor perfusión
cio funcional peritoneal para disminuir la probabilidad de titular sistémica y por ende del compartimento abdominal,
recurrencia del SCA. Se debe tomar en cuenta que ni el sis- a través del uso de líquidos de manera racional, buscando
tema VAC evita las recurrencias. Por lo tanto, el médico debe la dosis óptima con base en el método preferido en cada
estar alerta y dar un seguimiento de los pacientes para veri- unidad (invasivos y no invasivos)48 , el uso adecuado de
ficar que no exista incremento de la PIA42 . Estos pacientes vasopresores que permitan tener una presión de perfusión
requieren al menos una, y con frecuencia varias reexplora- adecuada y el manejo del apoyo mecánico ventilatorio como
ciones antes del cierre abdominal definitivo, muchos de los claves fundamentales, este último basado en una vigilan-
cuales se pueden realizar en la UCI bajo sedación profunda. cia adecuada con la medición de presiones intraabdominal
Para aquellos que son incapaces del cierre abdominal en su y esofágica que permita mantener una relación adecuada
primera reexploración, existen varias opciones en cuanto de las presiones generadas por el ventilador que disminu-
a su manejo, como las técnicas de extensión fascial, las yan la posibilidad de daño inducido por el mismo, basados
técnicas de separación de componentes o sin refuerzo de en la protección pulmonar con volúmenes bajos, PEEP (por
malla (biológico o sintético), y malla temporal seguida de sus siglas en inglés: presión positiva al final de la espira-
un injerto de piel de espesor dividido43 . ción), óptimo para la situación de PIA que permita la mejor
El realizar una laparotomía descompresiva asociada a un distensibilidad pulmonar y en caso necesario poder reali-
cierre abdominal temporal con malla de politetrafluoroeti- zar maniobras de reclutamiento alveolar que mantengan el
leno expandido (PTFEe) en pacientes con un SCA ante una intercambio de gases de manera adecuada. Esto comple-
pancreatitis aguda grave permite una reducción de la PIA y mentado por medidas de confort para el paciente a través
constituye un procedimiento terapéutico a tener en cuenta; del uso de sedación y analgesia que deberá ser ajustada de
asimismo, este tipo de cierre abdominal temporal permite acuerdo con el momento en que se encuentre el paciente
una reconstrucción precoz de la pared abdominal44 . Las prin- (abdomen abierto vs. cerrado, manejo inicial médico, etc.),
cipales ventajas de la malla de PTFEe son: ausencia de llegando a ser necesario en ocasiones la relajación muscular
adhesiones que facilitan la formación de fístulas, resistencia para favorecer el control estrecho de la PIA49 .
del material a la tracción a la que es sometida con elevadas
presiones, posibilidad de reexplorar la cavidad abdominal a
través de la propia malla, cortándola y volviéndola a suturar, Conclusiones
y, por último, permite realizar una aproximación progresiva
de la malla para facilitar el posterior cierre definitivo de la En la actualidad, consideramos que estamos aún con la
pared abdominal45 . falta de un diagnóstico oportuno de SCA. Idealmente, debe-
El momento de la reconstrucción de la pared abdomi- mos ser capaces de diagnosticar oportunamente el SCA para
nal es generalmente de 6 a 12 meses después de la última intervenir antes de la aparición del daño orgánico. Con fre-
operación, para permitir disminuir la inflamación. La recons- cuencia la lesión renal persiste y puede progresar a una
trucción consiste en la extirpación del injerto de piel, lisis insuficiencia renal aguda, siendo este uno de los principales
de las adherencias, restaurar la continuidad gastrointestinal parámetros para considerar la descompresión abdominal. Al
si hay una ostomía, y el cierre de la fascia frontal46 . igual que en otros sistemas u órganos, el contar con un bio-
Una revisión reciente de la literatura reveló que es posi- marcador de daño fácilmente identificable y temprano será
ble el cierre de la fascia abdominal en el 72% de los pacientes lo ideal.
con CTA. Curiosamente, la tasa de cierre fue significati- El tratamiento quirúrgico del SCA en la mayoría de los
vamente menor en pacientes sépticos en comparación con casos es exitoso, y restaura a la mayoría de los pacien-
pacientes no sépticos (por ejemplo, trauma). Si la técnica tes con un estado funcional adecuado. Múltiples terapias
de CTA elegida era un método dinámico que combinara coadyuvantes son a menudo necesarias para optimizar los
la presión negativa con la retracción fascial (por ejem- resultados en un determinado grupo de pacientes crítica-
plo, mediante la implantación de malla), la tasa de cierre mente enfermos.
aumentó al 82%2 . Un enfoque multidisciplinario es generalmente necesario
Para el sistema VAC, que consiste en una esponja en para cumplir los cuidados intensivos, convalecencia y nece-
forma de araña, se ha informado una tasa de cierre fas- sidades reconstructivas de los pacientes, siendo altamente
cial secundaria del 89%. A pesar del éxito de las técnicas de recomendable seguir trabajando para definir e implemen-
CTA basadas en el vacío, corren el riesgo de desarrollar una tar estrategias que mitiguen contra la calidad de vida de la
fístula enterocutánea2 . población afectada. Se requieren estudios de investigación
El cierre primario tardío sin la presencia de tensión es clínica y en ciencias básicas, para mejorar el estudio integral
la forma de cierre definitivo de elección en el abdomen del SCA.
abierto. El riesgo de aparición de infección, fístulas entero-
cutáneas y problemas de la herida disminuyen si se realiza
un cierre primario. Sin embargo, la morbimortalidad en el Consideraciones éticas
cierre primario se asocia a un cierre en presencia de ten-
sión en la fascia46 . En caso de que el cierre primario no se No se involucraron pacientes en la redacción de este
pueda realizar, las opciones de cierre definitivo incluyen pró- artículo, por lo que no se solicitaron consentimientos infor-
tesis permanentes, que comprenden mallas absorbibles y no mados. Los pacientes que se mencionan en el manuscrito
Cómo citar este artículo: Montalvo-Jave EE, et al. Síndrome compartimental abdominal: conceptos actuales y manejo.
Revista de Gastroenterología de México. 2020. https://doi.org/10.1016/j.rgmx.2020.03.003
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8 E.E. Montalvo-Jave et al.
corresponden a los pacientes involucrados en el estudio del in critical ill patients. Anaesth Intensive Care. 2012;40:
artículo citado. 79---89.
No se consideró necesaria la autorización por parte del 11. Malbrain ML, Chiumello D, Pelosi P, et al. Incidence and pro-
comité de ética debido a que no se involucraron pacientes gnosis of intraabdominal hypertension in a mixed population of
o modelos animales en la realización de esta investigación critically ill patients: a multiple-center epidemiological study.
bibliográfica Crit Care Med. 2005;2:315---22.
12. Holodinsky JK, Roberts DJ, Ball CG, et al. Risk factors for
Los autores declaran que este artículo no contiene infor-
intra-abdominal hypertension and abdominal compartment
mación personal que permita identificar a los pacientes, syndrome among adult intensive care unit patients: a sys-
debido a que no se involucran pacientes. tematic review and meta-analysis. Crit Care. 2013;17:R249,
http://dx.doi.org/10.1186/cc13075.
Financiación 13. Roberts DJ, Ball CG, Kikpatrick AW. Increased
pressure within the abdominal compartment: intra-
abdominal hypertension and the abdominal compartment
Los autores declaran que no se recibió ningún tipo de finan-
syndrome. Curr Opin Crit Care. 2016;2:174---85,
ciación para este estudio. http://dx.doi.org/10.1097/MCC.0000000000000289.
14. Cullen DJ, Coyle JP, Teplick R, et al. Cardiovascular, pulmonary,
Conflicto de intereses and renal effects of massively increased intra-abdominal pres-
sure in critically ill patients. Crit Care Med. 1989;17:118---21.
No existe ningún conflicto de intereses que divulgar. 15. Rastogi P, Iyer D, Aneman A, et al. Intra-abdominal hyper-
tension and abdominal compartment syndrome: pathophysio-
logical and non-operative management. Minerva Anestesiol.
Agradecimientos 2014;80:922---32.
16. De Laet IE, Malbrain M. Current insights in intra-abdominal
Se agradece a los médicos cirujanos Ericka Hazzel Contreras hypertension and abdominal compartment syndrome. Med
Flores y Alan I. Contreras Treviño su apoyo técnico editorial. Intensiva. 2007;31:88---99.
17. Biancofiore G, Bindi ML, Romanelli AM, et al. Intra-abdominal
pressure monitoring in liver transplant recipients: a prospective
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18. Blaser AR, Sarapuu S, Tamme K, et al. Expanded measu-
1. Maluso P, Olson J, Sarani B. Abdominal compart- rements of intra-abdominal pressure do not increase the
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syndrome. Crit Care Clin. 2016;32:213---22, http://dx.doi. center observational study. Crit Care Med. 2014;42:378---86,
org/10.1016/j.ccc.2015.12.001. http://dx.doi.org/10.1097/CCM.0b013e3182a6459b.
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