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La Revolución Gloriosa en 1688-1689

Las principales causas de la Revolución Gloriosa fueron las siguientes:


• La voluntad del rey Jacobo II Estuardo de imponer un estilo de gobierno absolutista,
basado en la teoría del derecho divino de los reyes.
• El intento del rey de re implantar el catolicismo en Inglaterra, lo cual generó gran
descontento entre la mayoría de sus súbditos, que eran protestantes.
• La voluntad de la mayoría de los integrantes del Parlamento de imponer límites al poder
real y de defender la Iglesia anglicana.
• Las ambiciones de poder de la hija del rey, María, y de su esposo Guillermo de Orange,
sumados a sus deseos de defender el protestantismo.

La Revolución Gloriosa fue una incruenta revolución que tuvo lugar en Inglaterra en 1688-1689,
que depuso a Jacobo II, en favor de su hija María II y su marido Guillermo III, príncipe de Orange.
La revolución transformó la monarquía absoluta de los Estuardo en una monarquía constitucional y
parlamentaria.

Jacobo II no tardó en perder el buen nombre que había heredado de su popular hermano, Carlos II:
fue demasiado duro a la hora de reprimir la rebelión encabezada por su ilegítimo sobrino, el duque
de Monmouth, en 1685; casi agotó todos los recursos humanos y monetarios a su alcance, con el fin
de crear un ejército permanente, y colocó a católicos en el gobierno, en el ejército y en las
universidades.

En 1688 ordenó que se diera lectura a la Declaración sobre la Indulgencia en todas las iglesias, que
garantizaba la libertad de culto a católicos y disidentes. Este impopular acto, junto con el
nacimiento de un heredero en junio de ese mismo año, que aseguraba la sucesión católica, impulsó a
los rivales de Jacobo a invitar al protestante Guillermo de Orange a ocupar el trono. Guillermo
estaba casado con María, la hija de Jacobo, y contaba con el apoyo del pueblo. Cuando Guillermo
llegó a Torbay (el 5 de noviembre) y comenzó a avanzar hacia Londres, Jacobo huyó a Francia con
su familia. Guillermo obtuvo el control temporal del gobierno, y en febrero de 1689 les fue
ofrecida, a él y a María, la corona con la condición de que aceptaran la Declaración de Derechos,
que se convirtió en el Bill of Rights. Dicho proyecto de ley otorgaba la sucesión a la hermana de
María, (Ana), en caso de que María no tuviera hijos, impedía el acceso al trono de los católicos,
garantizaba elecciones libres y convocatorias frecuentes del Parlamento, y declaraba ilegal la
existencia de un ejército permanente en época de paz.

La Revolución Gloriosa tuvo éxito, sin derramamiento de sangre: el Parlamento era soberano e
Inglaterra próspera. Fue una victoria de los principios whig, ya que, si los católicos no podían ser
reyes, ningún monarca podía ser absoluto.

Aquéllos que se negaron a jurar lealtad a Guillermo y María fueron denominados jacobitas. Los
jacobitas eran más numerosos entre los católicos de las Highlands escocesas y de Irlanda. Estas dos
regiones fueron sometidas, pero el precio a pagar fue muy alto: la matanza de Glencoe en Escocia y
la batalla de Boyne y una mayor represión de los católicos en Irlanda.

CONSECUENCIAS FINANCIERAS:
La credibilidad fiscal del gobierno inglés creada por la Revolución Gloriosa desencadenó una
revolución en las finanzas públicas. El elemento más destacado fue la introducción del
endeudamiento a largo plazo por parte del gobierno, ya que dicho endeudamiento dependía
absolutamente de la credibilidad fiscal del gobierno. Para crear una deuda creíble a largo plazo, el
Parlamento asumió la responsabilidad de la deuda, y la deuda financiada por el Parlamento se
convirtió en la Deuda Nacional, en lugar de ser sólo la deuda del rey. Para reforzar la credibilidad,
el Parlamento se comprometió a destinar los futuros ingresos fiscales al servicio de la deuda e
introdujo nuevos impuestos según fuera necesario (Dickson 1967, Brewer 1988). Una deuda
pública creíble constituyó la base del Banco de Inglaterra en 1694 y el núcleo del mercado de
valores de Londres. La combinación de estos cambios se ha denominado Revolución Financiera y
fue esencial para la aparición de Gran Bretaña como Gran Potencia en el siglo XVIII (Neal 2000).
Aunque la Revolución Gloriosa fue fundamental para la Revolución Financiera en Inglaterra, la
afirmación de North y Weingast (1989) de que la Revolución Gloriosa aumentó la seguridad de los
derechos de propiedad en general, y por tanto estimuló el crecimiento económico, sigue siendo
una cuestión abierta. Una de las dificultades es cómo poner a prueba la cuestión. Un aumento de
la credibilidad de los derechos de propiedad podría hacer que los tipos de interés disminuyeran
porque la gente está dispuesta a ahorrar más; sin embargo, los tipos basados en los alquileres de
las propiedades inglesas no muestran ningún efecto de la Revolución Gloriosa, y los tipos de un
banquero londinense en realidad aumentaron después de la Revolución Gloriosa.

Por el contrario, unos tipos de interés elevados podrían indicar que la Revolución Gloriosa
aumentó el espíritu empresarial y la demanda de inversión. Desgraciadamente, los tipos elevados
también podrían significar que la expansión del endeudamiento público permitida por la
Revolución Financiera desplazó la inversión. North y Weingast (1989) apuntan a una expansión
general de la intermediación financiera, lo que se ve respaldado por estudios como el de Carlos,
Key y Dupree (1998), que descubren que el mercado secundario de acciones de la Royal African
Company y de la Hudson’s Bay Company se volvió más activo en la década de 1690.

Sin embargo, distinguir entre el desplazamiento y el aumento de la demanda de inversión


depende de establecer si la cantidad global de inversión empresarial cambió, y eso sigue sin
resolverse debido a la dificultad de construir una medida agregada de este tipo. Los posibles
vínculos entre la credibilidad creada por la Revolución Gloriosa y el desarrollo económico siguen
siendo una cuestión abierta.

Las principales consecuencias de la Revolución Gloriosa fueron las siguientes:


• La abdicación incruenta de Jacobo II y la asunción en su lugar de su hija María II y de
Guillermo de Orange, yerno del rey depuesto y hasta entonces estatúder de las Provincias
Unidas. Los nuevos monarcas debieron comprometerse a mantener el protestantismo y a
dar plenos derechos legislativos al Parlamento.
• La eliminación definitiva de la monarquía absolutista en Inglaterra, que fue reemplazada
por una monarquía parlamentaria, en la que el Parlamento comparte el poder con el rey.
• La proclamación de la «Declaración de los Derechos», documento que hoy en día es uno
de los pilares de la sociedad británica.
• La tolerancia hacia todos los protestantes no anglicanos.
• El inició un período de libertades, equilibrio de poderes y fomento del comercio y la
industria, creando así las condiciones para el inicio de la Revolución Industrial.

Importancia de la Revolución Gloriosa


A pesar de haber ocurrido hacia fines del siglo XVII, la Revolución Gloriosa está relacionada con
una serie de revoluciones que sacudieron el mundo atlántico entre fines del siglo XVIII y principios
del siglo XIX. A diferencia de otras revoluciones, tuvo un carácter fundamentalmente incruento, ya
que provocó muy pocas víctimas, salvo en Irlanda y Escocia.
La Revolución Gloriosa dio origen a la democracia parlamentaria como sistema político, el
cual sigue vigente en Gran Bretaña. En esta forma de gobierno, el Parlamento tiene plenas
facultades legislativas y el rey, escaso poder.
La Revolución Gloriosa, al deponer a los Estuardo, acabó con toda posibilidad de que el catolicismo
fuera restablecido en Gran Bretaña y aseguró, por lo tanto, la primacía del protestantismo.
Fue también la última invasión exitosa de las islas británicas hasta la actualidad.

https://enciclopediadehistoria.com/revolucion-gloriosa/
https://leyderecho.org/revolucion-gloriosa/#Consecuencias_financieras

REVOLUCIÓN AMERICANA (1775)

Se produjo tras la Guerra de los Siete Años que Inglaterra había mantenido con Francia (entre
1756 y 1763). Este conflicto generó una crisis financiera del Estado que la Corona intentó paliar
recurriendo al forzoso concurso económico de los colonos en forma de nuevos impuestos.
Uno de estos impuestos fue la Stamp Act o "Ley del timbre" (1765), sello que gravaba la
adquisición de documentos oficiales y la prensa. La oposición de las colonias a lo que consideraban
una tasa abusiva obligó a la Corona a retirarla. Sin embargo, más tarde, en 1767, fueron
establecidos otros impuestos (Townshend Acts) que gravaban el papel, el vidrio, el plomo y el té.

Ante la violenta reacción de los colonos, la Corona decidió retirar todas las tasas, salvo la del Té,
hecho que provocó el llamado "Motín del Té" acontecido en el puerto de Boston (1773).

La respuesta a tales hechos por parte de la Corona se concretó en las llamadas "Leyes Coercitivas"
de 1774, denominadas por los colonos "Leyes Intolerables", que se aplicaron a la colonia de Mass-
achusetts y que supusieron, entre otras consecuencias, la clausura del puerto de Boston.
En septiembre de 1774 se celebró un Congreso en Filadelfia (Pensilvania) que impulsó la
colaboración de las colonias frente a las acciones británicas. Todavía no se defendía la
independencia respecto a la metrópoli y la reunión se limitó a una serie de reivindicaciones
expresadas a través de una Declaración de Derechos y Agravios.

El 4 de julio de 1776, los 56 delegados del Congreso Continental de Filadelfia firmaron la


Declaración de Independencia de los Estados Unidos de América del Norte. Estos estaban
constituidos en ese momento inicial por los territorios de los actuales estados de Carolina del
Norte, Carolina del Sur, Connecticut, Delaware, Georgia, Maryland, Massachusetts, New
Hampshire, Nueva Jersey, Nueva York, Pensilvania, Rhode Island y Virginia.

Los grandes ideólogos del proceso –Franklin, Jefferson y Adams– recuperaron las doctrinas de
filósofos como Locke, Montesquieu y Rousseau que hablaban del derecho de la humanidad a la
vida, la libertad, la búsqueda de la felicidad y la propiedad.
La lucha armada se dotaba así de una justificación moral de gran envergadura, en la que los
derechos naturales inherentes a la persona se situaban por encima de todo. Pero, aunque los
Padres Fundadores bebían de las ideas de aquellos pensadores europeos, el paso que daban era
verdaderamente revolucionario y único en la historia. Por vez primera, se convertían en ley unos
principios que en el Viejo Continente hasta ese momento solamente habían sido asumidos por las
minorías ilustradas y se encontraban todavía muy lejos de verse plasmados en la realidad de los
países donde se habían generado.

A lo largo de casi ocho años, la Guerra de Independencia presentó diversas alternativas y se


decidió en escenarios muy diferentes. Dentro del bando de los independentistas, nunca dejarían
de mostrarse profundas y debilitadoras disensiones. Sin embargo, estas se veían compensadas por
las victorias en los campos de batalla, a pesar de que en algunas etapas fueron los ingleses los
que llevaron ventaja. En 1778, la guerra alcanzó carácter internacional debido a que Francia –rival
tradicional de Gran Bretaña– decidió apoyar a los rebeldes americanos. Un año después, la España
borbónica seguía asimismo sus pasos.

En septiembre de 1787, se promulgaba la Constitución de los Estados Unidos de América. La


primera gran revolución que abría las puertas del mundo contemporáneo organizó en ella una
sociedad basada en los principios fundamentales de la democracia. Su sistema de separación y
equilibrio de poderes hacía realidad lo que los pensadores políticos de la Ilustración habían
imaginado como aspiración de difícil cumplimiento. Una aspiración que, en menos de dos años,
agitaría Francia en la revolución más famosa de todos los tiempos.

CONSECUENCIAS:
- Desde el punto de vista económico, los Estados Unidos de Norteamérica se liberaron de las
trabas mercantilistas que les imponía la metrópoli cuando eran colonias y se lanzaron a un proceso
de expansión económica y territorial (conquista del Oeste) que los llevó a convertirse en una gran
potencia.
- Desde el punto de vista social, la burguesía asumió el liderazgo de una moderna sociedad de
clases mientras otros estados permanecían anclados todavía en la sociedad estamental.
- Desde el punto de vista internacional, surgió el primer ejemplo de descolonización. En cuanto al
carácter internacional del conflicto hay que distinguir entre dos casos:
• Para Francia la guerra implicó un considerable gasto y la agudización de la crisis del Antiguo
Régimen. Seis años después de concluido el conflicto americano estallaría su propia
Revolución.
• España se anexionó extensas áreas del sur de Norteamérica, pero por otro, asistió
impotente a la propagación de las ideas revolucionarias en sus territorios ultramarinos.
Décadas más tarde perdería la mayor parte de sus colonias.
- Desde el punto de vista político-ideológico, se consumó la primera revolución de carácter liberal
que permitió hacer realidad las ideas más avanzadas de la Ilustración. La Constitución de 1787 fue
la primera escrita de la historia.
La República Federal que articuló el nuevo Estado llevó a la práctica la división de poderes de
Montesquieu:
• El legislativo recayó en el Congreso (dividido en dos cámaras: el Senado y la Cámara de
Representantes).
• El judicial descansaba sobre el Tribunal Supremo.
• El ejecutivo fue encarnado por el Presidente de la República, el primero de los cuales fue
George Washington.
http://www.claseshistoria.com/revolucionesburguesas/revolucionusaconsecuencias.htm
REVOLUCIÓN FRANCESA 1789

La Revolución Francesa trajo las ideas de libertad, igualdad y democracia a la Europa continental
y desencadenó una profunda e irreversible transformación histórica.

La revolución comenzó en 1789 y algunos historiadores han rastreado el final de la revolución


hasta el derrocamiento de Robespierre, su líder más radical en 1794, otros hasta la toma del poder
por Napoleón Bonaparte en 1799 y otros hasta la derrota final de Napoleón Bonaparte en la
batalla de Waterloo en 1815. De 1789 a 1815 Francia se transformó por la revolución.

Comenzó con el derrocamiento de la monarquía y pronto se convirtió en un reino de terror


revolucionario. El Rey y la Reina y muchos de la aristocracia fueron ejecutados y hubo ejecuciones
masivas de oponentes políticos. Se hicieron intentos de exportar la revolución al resto de Europa
cuando los ejércitos franceses se desplazaron al este y obligaron a los monarcas a renunciar al
poder, concedieron libertad y tierra a los siervos y reclutaron a miles de personas comunes y
corrientes en el ejército francés para ayudar a llevar el mensaje de igualdad y liberación. Luego
comenzó un período de guerras internacionales contra Gran Bretaña y las viejas potencias de
Europa que finalmente condujo a la derrota final de las fuerzas francesas en la Batalla de Waterloo
en 1815. Para las ciencias sociales, la Revolución Francesa es importante para representar el
triunfo de la afirmación liberal de que todos los seres humanos son esencialmente iguales y que
todos tienen derecho a la libertad y a la libre elección. Junto con la Revolución Sin Sangre de
Inglaterra de 1688 (Revolución Gloriosa), que estableció de manera irreversible el principio de una
monarquía constitucional limitada, la Revolución Industrial, que cobró impulso a mediados del
siglo XVIII, y la Revolución Americana de 1776, este acontecimiento marcó el comienzo de la
transformación social, económica y política de las sociedades occidentales y ayudó a crear la era
de la modernidad, la democracia, el desarrollo económico y la igualdad jurídica para todos los
ciudadanos.

La Revolución Francesa inició cuando las masas ciudadanas, empobrecidas y sometidas, se


opusieron al poder feudal, desobedecieron la autoridad de la monarquía y encendieron la mecha
del cambio histórico.
Así, derrocaron el gobierno aristocrático y emprendieron la caótica construcción de una sociedad
basada en los derechos fundamentales de todos los seres humanos.

Las causas de la Revolución Francesa fueron:


• El rigor del absolutismo. El absolutismo daba a los reyes todo el poder político, legal y
económico, sin que se les pudiera contradecir en ningún sentido, lo cual les hizo también
responsables de los desastres económicos que ocurrieran, fuera o no realmente su
responsabilidad.
• Las desigualdades del régimen feudal. Se estima que de los 23 millones de habitantes de la
Francia de la época, apenas 300 mil pertenecían a las clases privilegiadas de la aristocracia
o del clero. La gran masa restante era pueblo llano con menores derechos y posibilidades.
• La miseria y marginación del pueblo llano. Las condiciones de vida del pueblo llano eran
paupérrimas: hambre, marginación, enfermedad, trabajo esclavizante y ninguna
perspectiva de ascenso social o de mejoría.
• Las ideas de la Ilustración. Las ideas respecto a la igualdad entre los hombres y la fe en la
razón de filósofos y escritores como Voltaire, Rousseau, Diderot o Montesquieu, influyeron
enormemente sobre la mentalidad de la época, forjando las aspiraciones a un sistema
social más moderno y menos influenciado por la Iglesia y la religión.

Las consecuencias de la Revolución Francesa fueron:


• Fin del orden feudal. Se acabó con la monarquía y con la separación de la sociedad en
clases fijas e inamovibles: aristocracia, clero y siervos. Así, renació la república como
sistema de gobierno en Occidente.
• Proclamación primera de los derechos humanos universales. El lema de libertad, igualdad
y fraternidad condujo a la redacción de la primera ley de derechos humanos sin distinción
de raza ni credo ni nacimiento.
• Influencia en las colonias americanas. Las colonias americanas de Europa vieron en la
Revolución Francesa un ejemplo a seguir y sus ideales marcaron huella en sus propios
procesos de independencia.
• Ascenso del bonapartismo. El ascenso de Napoleón Bonaparte y su imperio francés, así
como las guerras europeas que le sucedieron, pusieron fin a este período histórico.

https://concepto.de/revolucion-francesa/#ixzz7gfa8PzcH
https://concepto.de/revolucion-francesa/#ixzz7gfa3nyTA

REVOLUCIÓN ESPAÑOLA 1808

El conflicto se desarrolló en plena crisis del Antiguo Régimen y sobre un complejo trasfondo de
profundos cambios sociales y políticos impulsados por el surgimiento de la identidad nacional
española y la influencia en el campo de los «patriotas» de algunos de los ideales nacidos de la
Ilustración y la Revolución francesa, paradójicamente difundidos por la élite de los afrancesados.

Napoleón decidió invadir España aprovechando la debilidad de Carlos IV (1788- 1808), un rey
dominado por su esposa, María Luisa de Parma, y por el primer ministro, Manuel Godoy.

La excusa fue la negativa de Portugal a secundar el bloqueo continental contra Inglaterra


decretado por Napoleón (ver t49). El emperador prometió a Godoy un reino en el Sur de Portugal
y a Carlos IV el título de «emperador de las Américas» a cambio de dejar que sus tropas pasaran
por territorio español.
Los franceses invadieron Portugal y se instalaron en varias ciudades españolas. El temor a que los
franceses se apoderaran de España hizo que en marzo de 1808 los seguidores del príncipe
Fernando organizaran el motín de Aranjuez. Godoy fue destituido y Carlos IV abdicó en su hijo
(Fernando VII).
En abril de 1808 se produjeron las abdicaciones de Bayona: Napoleón requirió la presencia de la
familia real española y obligó a abdicar a Fernando y a Carlos.
El 2 de mayo, el pueblo de Madrid se sublevó contra la presencia de las tropas francesas. Tras la
represión, el alcalde de Móstoles declaró la guerra a Napoleón, y pronto se extendieron por todo
el país las Juntas de Gobierno para organizar la resistencia. Había comenzado la guerra de la
Independencia.

En 1810 se disolvió la Junta Central y se reunieron en Cádiz unas Cortes no estamentales que
asumieron la soberanía nacional. Dominadas por los liberales, las Cortes de Cádiz abolieron los
señoríos y la Inquisición, la tortura y las pruebas de limpieza de sangre para acceder a los cargos
públicos.
La Constitución de 1812 fue la obra más importante de las Cortes de Cádiz:
• Se promulgó el 19 de marzo de ese año.
• En ella se reconocieron la soberanía nacional, la división de poderes y el sufragio
indirecto.
• Representó la adaptación de las ideas liberales a la situación española, y sirvió de modelo
para posteriores constituciones, no sólo de España sino de otros países europeos.

También en 1812, España inició con la ayuda de las fuerzas británicas dirigidas por el duque de
Wellington (1769-1852) una gran ofensiva contra las tropas francesas, venciéndolas en Arapiles
(Salamanca), lo que obligó a José Bonaparte a huir de España.
En 1813, el ejército hispano-británico al mando de Wellington triunfó en las batallas de Vitoria
(julio) y San Marcial (agosto). Napoleón retiró sus fuerzas de España y, por el tratado de Valençay,
devolvió el trono a Fernando VII

CONSECUENCIAS
Consecuencias Demográficas: Se estima que murieron más de 200.000 hombres en el bando
francés y entre 300.000 y 500.000 en el bando español con más de 470 batallas e infinitas
escaramuzas

Consecuencias Económicas y materiales: Se produjeron pérdidas totales en agricultura, el


comercio se colapsó, una deuda pública enorme, hambrunas y crisis de subsistencia. Algunos dicen
que la guerra fue el causante de una industrialización tardía respecto a Europa.
Se destruyeron una cantidad de infraestructuras enorme por parte de franceses y británicos como
manera de dañar a España sumado a los desperfectos de la guerra.
Consecuencias Políticas: Primera eliminación del Antiguo Régimen en España, La Constitución de
1812, Exiliados políticos, los afrancesados, Se desmorona el imperio colonial que inician su
proceso de independencia
dejando a España como potencia de segundo orden.

Consecuencias Sociales: La nobleza y el clero se debilitaron y creció el poder de la burguesía

El impacto de la Revolución Americana y de la Revolución Francesa provocó la crisis del


movimiento ilustrado en España, como en otros países. Pero fue sobre todo la guerra de la
Independencia la que causó el colapso del reformismo y de muchos de los avances conseguidos en
el siglo XVIII.

REVOLUCIONES LIBERALES 1848

Sus causas fueron:


• Economía. Las revoluciones liberales estallaron cuando se produjeron crisis de subsistencia
y las encabezaron miembros de un grupo social: la burguesía. La burguesía se ha
enriquecido gracias al comercio y a los talleres artesanales, pero carece de privilegios como
los que tiene la nobleza o el clero.
• Sociedad. Los burgueses quieren acabar con el Antiguo Régimen para tener los mismos
derechos que la nobleza y compartir el pago de impuestos. Los desclasados o clases bajas
urbanas también querían acabar con el Antiguo Régimen porque su prosperidad dependía
de la prosperidad de la burguesía.
• Política. Los burgueses quieren acceder al poder político, hasta entonces reservado a la
nobleza. Como sufren las decisiones injustas de algunos monarcas, también están en
contra del poder absoluto del rey y quieren que lo comparta con ellos a través de un
parlamento en donde están los representantes de la burguesía.
• Ideología. Con las revoluciones liberales se reivindican los llamados derechos humanos de
primera generación que se refieren a derechos políticos e ideológicos centrados en la idea
de libertad (1). El parlamentarismo inglés fue el origen de lo que hoy llamamos liberalismo,
mientras que en la Francia del siglo XVIII apareció la ilustración. Entre la élite intelectual
francesa se desarrolló la ilustración que defendía el racionalismo (el uso de explicaciones
no religiosas) y admiraban los avances científicos Los ilustrados criticaron al absolutismo y
al Antiguo Régimen. En Francia se defendieron las ideas de libertad individual con Voltaire,
de división de poderes con Montesquieu y de voluntad popular con Rousseau.

En febrero la insurrección, protagonizada por sectores pequeño-burgueses, obreros y estudiantes


forzó la abdicación de Luis Felipe y la proclamación de la IIª República bajo un régimen de acusado
matiz social que implementó las siguientes medidas: sufragio universal masculino (frente al
censitario), libertad de prensa, libertad de asociación y derecho al trabajo.

El gobierno provisional contó por primera vez con miembros socialistas (Louis Blanc) que implantó
la jornada laboral de 10 horas. Además, con el fin de mitigar el paro obrero (más de 100.000
desempleados solo en el distrito de París) fueron creados los Talleres Nacionales, impulsados
desde el Estado, si bien constituyeron un fracaso y fueron clausurados tras pocos meses de
funcionamiento.

En junio la revolución se radicalizó y la pequeña burguesía que había estado del lado de las clases
obreras se alió con la alta burguesía. La lucha contra el absolutismo se transformó en una lucha
interclasista entre burgueses y obreros que se saldó con una fuerte represión (más de 1.500
ejecutados). Tras la aprobación de la Constitución fue nombrado presidente de la República Luis
Napoleón Bonaparte, sobrino de Napoleón, quien en 1852 se proclamó emperador con el nombre
de Napoleón III, dando al traste con la mayor parte de las reivindicaciones revolucionarias e
inaugurando el Segundo Imperio francés.

Imperio Austríaco
Se produjo la caída y huida de Metternich y el emperador Fernando I hubo de aceptar la
formación de una Asamblea Constituyente. Las reivindicaciones nacionalistas se unieron a las
liberales, especialmente en Hungría y Chequia, que lograron cierta autonomía dentro del Imperio.

Alemania
La revolución en Alemania también tuvo una marcado signo nacionalista. Federico Guillermo IV de
Prusia hubo de aceptar una Constitución de base censitaria.

Italia
La revuelta estuvo cargada de significado nacionalista y sirvió -pese a su fracaso- de punto de
partida en el proceso de unificación.
En Nápoles se implantó una monarquía constitucional que sustituyó al absolutismo; en los Estados
Pontificios la sublevación hizo huir al Papa y se constituyó una república; el reino de Lombardía-
Véneto se sublevó contra los austríacos y en el reino del Piamonte se creó una monarquía
constitucional que se convirtió en el motor de la unidad italiana.

Aunque las revoluciones de 1848 fracasaron, su experiencia influyó poderosamente en las


ideologías obreras del siglo XIX.

Socialmente
Los distintos grupos que se unieron en los inicios de la revolución se alejaron luego al defender
distintos objetivos:
• Una buena parte de la pequeña burguesía, temerosa de una revolución social, abandonó su
alianza con el proletariado y se unió a la gran burguesía, aunque a lo largo del siglo XIX las
diferencias entre ambas fueron bien patentes y se materializaron en las luchas políticas
entre moderados y radicales.
• El proletariado comenzó a adquirir conciencia de clase y, si bien actuó
desorganizadamente, se constituyó como un movimiento autónomo desgajado de los
intereses burgueses.

• Los campesinos, una vez conseguida su liberación del régimen señorial, se condujeron de
forma muy moderada y su objetivo en el futuro sería preservar las conquistas conseguidas.
Políticamente
A pesar de ese aparente fracaso, los hechos acontecidos en 1848 supusieron el inicio de una
progresiva democratización (sufragio universal) y la incorporación a la lucha política de la clase
trabajadora.
Las revoluciones que estallaron en Europa en la primera mitad del siglo XIX como la denominada
revolución de 1848, fueron movimientos de carácter políticos, sociales y nacionalistas:
1. Político, destinados a reformar en sentido democrático la constitución del Estado, por la mayor
participación del pueblo en el gobierno.
2. Sociales, en procura de un mejoramiento de la clase proletaria, sumida en la miseria por la
brusca implantación del maquinismo en la industria, lo que trajo la desocupación de miles de
obreros, reducción de los salarios y un mayor rigor en las condiciones de trabajo.
3. Nacionales, tendientes a conseguir la unión (surgieron las unificaciones) y la independencia.

La revolución de 1848, tuvo una gran repercusión no solo en Francia y Europa, sino en el mundo.
Este movimiento significó:
1. El triunfo del sistema Republicano en Francia, así como el establecimiento del sufragio universal.
2. La aparición de las ideas socialistas, por obra de Carlos Marx, que en su célebre obra «El
capital», ha revolucionado los conceptos de capital, trabajo y riqueza, dando así origen a las
llamadas luchas de clases (entre el capitalismo y el Proletariado), agudizadas en los tiempos
actuales.
3. Las ideas socialistas han influido, grandemente, en la conquista de derechos favorables a la
clase trabajadora.
4. La vigorización del anhelo nacionalista y de unificación de algunos pueblos. Aspiraciones que
lograron su feliz realización años después.

Revolución Mexicana (1910)

Causas sociales
A. Ausencia de Legislación Laboral
No existía una legislación que protegiera a los obreros y campesinos. Las huelgas estaban
prohibidas y se sancionaban severamente a quienes osaban pedir mejores salarios o la reducción
de la jornada inhumana de trabajo que, en muchos casos, alcanzaba a las 12 horas. Los mas altos
cargos estaban desempeñados por norteamericanos, debiendo los mexicanos contentarse con los
empleos más modestos.
B. La Pobreza Campesina.
Los trabajadores ganaban miserables salarios de 25 centavos diarios, iguales que a fines de la
colonia, no obstante que los precios de los artículos que consumían se habían elevado al triple. Al
mismo tiempo sufrían la expoliación en las “tiendas de raya”, en las que el propietario de la
hacienda vendía el jabón, el maíz, el aguardiente embrutecedor y toda otra mercadería que
necesitase, a precios muchos mas altos que los del mercado. Como el jornal era exiguo, el
campesino se iba endeudando y así se arraigaba a la tierra como los siervos de la Edad Media. De
otro lado, los trabajadores vivían en casuchas de adobe o ramas de un solo cuarto, sin ventana y
con piso de tierra.
C. La división social
La pirámide social mexicana estaba conformada por diversas clases sociales, entre las cuales había
una marcada diferencia. En los rangos más altos estaban los grandes latifundistas, los caudillos
políticos, los miembros del alto clero y los empresarios extranjeros y nacionales. Seguían los
pequeños burgueses y en la base, se encontraban los campesinos y obreros, que vendían en
condiciones infrahumanas.

Causas Políticas
A. La dictadura de Porfirio Díaz
Porfirio Díaz llego al poder por primera vez en 1876, alcanzando la bandera de la no reelección. En
el transcurso de los años hizo caso omiso de esta promesa electoral y busco una y otra vez su
reelección presidencial. Con astucia, sagacidad y menosprecio de las aspiraciones ciudadanas logro
gobernar durante 7 periodos, un caso realmente insólito e intolerable. La base de estas sucesivas
reelecciones no fue el derecho, sino la fuerza; no fue la prosperidad de los 15 millones de
habitantes, sino de un pequeño grupo de privilegiados, en nombre del significativo y engañoso
lema: “Paz, orden y progreso”. En mas de 30 años de tiranía y centralismo porfirista los poderes
legislativo y judicial estuvieron subordinados al ejecutivo. La división de los poderes, la soberanía
de los estados, la libertad de los ayuntamientos y los derechos de ciudadano solo existían escritos
en la carta magna. Imperaba la ley marcial. La justicia, lejos de proteger al débil, servia para
legalizar los despojos del mas fuerte. Los jueces, en vez de encarnar la justicia se convertían en
agentes del Ejecutivo. Las cámaras legislativas no tenían otra voluntad que la del dictador. Los
gobernantes de los estados, nombrados por él, designaban e imponían a las autoridades
municipales
B. Oposición al Dictador
La oposición a la prolongada dictadura estuvo representada por diversos sectores descontentos,
los que anhelaban inquietudes de renovación social, como el incipiente movimiento anarquista
“Regeneración” que atacaba al régimen; los círculos liberales que realizaron un congreso y
evolucionaron al comunismo anárquico y llevaron a cabo varias tentativas insurreccionales que
luego fracasaron; y el Partido Liberal Mexicano, cuyo programa clandestino, lanzado en 1906,
incitaba al pueblo a revelarse contra la dictadura, abogaba por la libertad de sufragio y la no
reelección continuada.

Varios son los resultados positivos de la revolución mexicana. Destacan entre ellos:
a. El cambio de la propiedad de la tierra. A principios de la década del 40, más de la mitad de la
población rural pertenecía a los ejidos (aldeas) y poseía más de la mitad, de la totalidad de las
tierras cultivables. También hubo un considerable aumento en el número de pequeños granjeros
independientes.
b. Las conquistas sociales. Se estableció, en 1915, el descanso dominical obligatorio, y la jornada
máxima de 8 horas de trabajo. En 1916, se reconoció el derecho de huelga y se fijaron las nuevas
relaciones de trabajo, entre patrones y obreros. En su época, estas disposiciones eran las más
avanzadas del mundo. La constitución de 1917 estipulo la jornada de trabajo de 8 horas, como
máximo. Quedaban prohibidas las labores insalubres o peligrosas para las mujeres en general y
para los jóvenes, menores de 16 años. Quedo también prohibido el trabajo el trabajo nocturno
industrial. Los establecimientos comerciales no podían laborar después de las 10 de la noche.
c. La expropiación de las compañías petroleras puede haber tenido poca justificación económica,
pero fue de una gran importancia sicológica para ayudar a eliminar el sentido de inferioridad
nacional.
d. Produjo un cambio profundo y vigorizante en la conciencia nacional. Los mexicanos
prerrevolucionarios habían encontrado sus valores en los elementos culturales europeos. Los
conservadores habían peleado por preservar las actitudes e instituciones del imperio español y los
reformadores habían tratado de introducir los del liberalismo occidental.
e. La nueva conciencia nacional encontró expresión en la obra de artistas y escritores. México fue
la escena de un renacimiento que tenia algo en común con el gran Renacimiento europeo.
La tesis de que la Independencia mexicana se inspiró en las ideas de la

Ilustración y la Revolución francesas ha sobrevivido muchas décadas.

REVOLUCIÓN RUSA 1917

La Revolución rusa de 1917 no solo acabó con un imperio de 300 años, sino que transformó de
arriba a abajo el sistema político y económico del país dando origen al primer sistema comunista
de la historia y tuvo una influencia enorme sobre el resto del mundo.

A principios del siglo XX Rusia era un país atrasado, enormemente desigual, con grandes masas de
población muy pobre y una pequeña élite muy rica. Sufría una profunda crisis económica y estaba
gobernado por una monarquía absolutista (liderada entonces por el zar Nicolás II)
extremadamente impopular.
Por si fuera poco, el país entró en 1914 en la I Guerra Mundial, un conflicto en el que sufrió
grandes derrotas y donde murieron alrededor de 1,7 millones de sus ciudadanos.

La situación de opresión y pobreza a la que estaba sentenciado el campesinado ruso desde hacía
ya mucho tiempo, sosteniendo con sus vidas el mando absolutista de la monarquía zarista.
Las sucesivas derrotas de la Primera Guerra Mundial que Rusia sufrió, sumadas al hecho de que,
al momento de ingresar al conflicto, todos los partidos se mostraron a favor excepto el Partido
Obrero Socialdemócrata.
Además, el fracaso en el intento por sostener el ritmo de producción ruso durante la guerra
desató una crisis económica y social que se tradujo en hambruna, escasez de mercancías, y
colapso de las estructuras del Estado, lo cual condujo a ciertos primeros niveles de organización
popular autónoma.
La llegada del invierno de 1917, uno de los más cruentos de esas épocas, en las peores
condiciones posibles para el pueblo ruso.

Fuente: https://concepto.de/revolucion-rusa/#ixzz7gfqX27zN

Se entiende por la Revolución Rusa al conjunto de eventos históricos ocurridos en la Rusia a


principios del siglo XX (1917). Consistió en el derrocamiento del régimen monárquico zarista y la
construcción de un nuevo modelo de Estado de tipo leninista republicano.

Este luego se convirtió en la República Socialista Federativa Soviética de Rusia. Conocida también
como la Rusia soviética o la Rusia comunista, esta última sería corazón de la posterior Unión de
Repúblicas Soviéticas Socialistas (URSS).
Comúnmente, la Revolución Rusa comprende dos distintos momentos de este proceso histórico,
ambos en 1917:
• La Revolución de Febrero. Puso fin al gobierno del Zar Nicolás II y conformó un gobierno
provisional.
• La Revolución de Octubre. Vladimir Lenin y sus compañeros del Partido bolchevique,
derrocaron el gobierno provisional e instauraron un gobierno de tipo soviético (el
Sovnarkom o Sóviet de Comisarios del Pueblo), reestructurando así al país para colocar los
cimientos de la venidera Unión Soviética.

Fuente: https://concepto.de/revolucion-rusa/#ixzz7gfqOKWce

CONSECUENCIAS

• La caída de la monarquía zarista y el inicio de la historia comunista de Rusia, que duraría


hasta la caída de la URSS en 1991.
• El inicio de la Guerra Civil Rusa, que enfrentó por el mando del Estado al bando
bolchevique (rojo) contra el movimiento antibolchevique (blanco) entre 1918 y 1921, con
victoria del bando rojo.
• Se produjeron cambios culturales significativos en Rusia, sobre todo en lo que respecta al
rol de la familia tradicional burguesa, permitiéndose el aborto legal, el divorcio y la
despenalización de la homosexualidad (aunque volvió a prohibirse en 1934). Esto también
se tradujo en mejorías sociales para las mujeres. También se aprobó el triple principio de la
laicidad, gratuidad y obligatoriedad de la educación formal.
• Transformación de las viejas estructuras feudales heredadas de la Rusia zarista, lo cual
condujo a un lento proceso de modernización que, inicialmente, sometió a poblaciones
enteras a la hambruna, resultando en millones de muertes, especialmente en los años de
1932-1933, cuando se produjo el Holodomor ucraniano.
• Surgimiento del estado policial leninista, que inspiraría a la venidera Unión Soviética.

Fuente: https://concepto.de/revolucion-rusa/#ixzz7gfqei6KZ

Revolución Alemana (noviembre 1918)

En noviembre de 1918 estalló una revolución –también conocida como los sucesos de Kiel– que se
extendió por toda Alemania. Esta situación provocó la abdicación del káiser Guillermo II y con
ello la proclamación de la República de Weimar.
Todo comenzó a finales de la Gran Guerra en el puerto del Mar del Norte alemán de Kiel, donde la
Marina alemana planeaba enviar un último ataque contra la Royal Navy británica en el Canal de
la Mancha.
Los preparativos para hacerse a la mar causaron enseguida un motín entre los marineros, que
únicamente querían evitar ser sacrificados innecesariamente en el último instante de la I Guerra
Mundial; motín que se transformó en una revolución general que acabó en pocos días por
derrocar a la monarquía y a la creación de la República de Weimar –régimen político de Alemania
comprendido entre 1918 y 1933–.
Los marineros de las grandes bases navales alemanas simpatizaban con las doctrinas socialista y
anarquista, y tenían muy reciente el ejemplo ruso de la Revolución de Octubre de 1917, que
había demostrado que un motín armado podía determinar serias consecuencias políticas.
Los sondeos de paz del Káiser eran conocidos por los marineros y representaban también una
señal clara de que se acercaba el inevitable fin de la contienda. Ante ello, los marineros
rechazaban toda idea de lanzarse a una operación casi suicida sólo para salvar el honor de sus
oficiales, alargar innecesariamente la guerra y reducir las posibilidades de lograr un acuerdo de
paz.
El motín se propagó pronto a los marineros destinados en tierra, que desobedecieron a sus
oficiales y se negaron a embarcar en las unidades preparadas para la ofensiva.
Aunque el motín pudo ser sofocado, porque el resto de unidades navales no se adhirieron, el alto
mando se vio obligado a postergar su plan original de ataque al desconfiar de la obediencia de las
tripulaciones.
El levantamiento marinero en Kiel fue, en definitiva, una rebelión contra el gobierno imperial y
los marineros implicados fueron reprimidos y encarcelados.
Sería Friedrich Ebert, presidente de la nueva república tras las elecciones alemanas de enero de
1919, quien reprimió de forma sangrienta la revolución.

REVOLUCIÓN CUBANA 1959


La Revolución Cubana fue uno de los eventos más importantes de la
historia política contemporánea de América Latina y el Caribe. Consistió en la sublevación contra
el régimen dictatorial de Fulgencio Batista en 1953, por parte de un movimiento guerrillero
izquierdista cubano llamado Movimiento 26 de julio, encabezado por Fidel Castro.

La Revolución Cubana fue uno de los eventos más importantes de la historia política
contemporánea de América Latina y el Caribe. Consistió en la sublevación contra el régimen
dictatorial de Fulgencio Batista en 1953, por parte de un movimiento guerrillero izquierdista
cubano llamado Movimiento 26 de julio, encabezado por Fidel Castro.

Las causas de la Revolución pueden resumirse en:


• El descontento popular. La corrupción del régimen de Batista no tenía parangón en la
historia de la isla, lo que se traducía en el enriquecimiento de una élite cada vez más
pequeña, asociada a los casinos y a la venta de licor, así como a los intereses
norteamericanos.
• El derrocamiento del Partido del Pueblo Cubano. Los militantes de la “generación del
centenario” eran del partido ganador de las elecciones de 1952 y expulsado del poder por
el golpe militar de Batista. Esto los impulsó a acciones radicales que luego darían pie a la
guerrilla.
• La intervención norteamericana en Cuba. Las políticas intromisivas de EEUU en Cuba
databan de hacía décadas, ya que el país norteamericano había intervenido en la propia
emancipación cubana de España, reservándose luego importantes cuotas de poder dentro
de su gobierno, directa o indirectamente. Esto engendró un sentimiento
antinorteamericano que empujó a ciertos partidos hacia el comunismo.

La Revolución Cubana sirvió de inspiración para otros movimientos revolucionarios en distintos


continentes. Ademas, una vez establecida en el poder y fundado el Estado socialista, colaboró con
las causas revolucionarias de África y América. En algunos casos envió contingentes armados,
como en Angola, Congo y Bolivia.
Además, este proceso revolucionario instauró la dictadura comunista cubana, que aún perdura
intacta a pesar del bloqueo económico con que los Estados Unidos la castigan desde mediados del
siglo XX. A partir de la adhesión o la crítica al régimen cubano, pueden dividirse política, social e
ideológicamente todos los intelectuales de la época y de las posteriores.
Fuente:
https://humanidades.com/revolucion-cubana/#ixzz7gfw
5a4J1

REVOLUCIONES DE 1989

Conocidas también como El otoño de las Naciones, las revoluciones de 1989 fueron una serie de
olas revolucionarias que inundó toda Europa central y oriental. Durante el otoño de 1989, tuvo
como producto el derrocamiento de los estados socialistas soviéticos en unos pocos meses.
Estas revoluciones generaron un cambio significativo en el equilibrio del poder en todo el mundo e
influyeron en el final de la Guerra Fría y los inicios de la Post-Guerra Fría. Las revoluciones de 1989
se conformaron del alzamiento de múltiples multitudes en contra de los partidos comunistas.

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