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LA IMPORTANCIA DEL PUDOR

La siguiente es una obra presentada para resaltar la importancia de vestir con


pudor en la iglesia y en los demás lugares donde nos encontremos. Esta
situación aplica tanto como para varón y hembra, sin embargo, en este caso
será representada en su totalidad por mujeres y sus vivencias experienciales.
- La obra no representa una historia bíblica, sin embargo, si se puede
encontrar como se resalta la pulcritud y el decoro de la vestimenta.
- La cita bíblica que acompaña y es la idea central del texto es: 1 Timoteo
2:9-10.
- Las acciones representadas por (*) significan acciones a realizar.

Personajes:
Principales
- Mujer nueva
- Mujer antigua que acompaña
- Mujer que murmura principal
Extras
- Mujer que murmura extra-1
- Mujer que murmura extra-2

Guion
Mujer nueva: *Entra caminando desde la puerta, pero de manera lenta y
nerviosa*
*Se sienta en las sillas de adelante* *y actúa de forma nerviosa*
Mujeres que murmuran: *Empiezan a hablar desde adelante en voz baja*
Mujer principal: Ushh ¿ya vieron a la nueva que llegó? Esa vestimenta ¿En
donde cree que está?
Mujer 1: Uy si, esa ropa es por allá para la calle, no para la iglesia.
Mujer 2: Uy si, y no me imagino como debe ser su forma de ser.

Cambio de escena
Mujer antigua: *Se le acerca a la mujer nueva y se sienta a su lado*
¿Cómo estás? ¿Es la primera vez que vienes?
Mujer nueva: Si, es mi primera vez, aunque me siento un poco incómoda
Mujer antigua: ¿Por qué?
Mujer nueva: Porque yo veo a las otras personas y se visten muy diferente a
mí, además también me doy cuenta de que me miran como si fuera un bicho
raro.
Mujer antigua: Tu no te preocupes por eso, verás, aquí venimos a conocer,
conversar y a adorar a Dios. Si, la vestimenta es importante, pero ninguno de
aquí está aquí por ser el más santo del mundo, al contrario, también hemos
pasado por cosas difíciles y así como tú, una vez yo también llegué aquí con
una vestimenta como la tuya.
Mujer nueva: Muchas gracias, me reconforta escuchar eso.
Mujer antigua: Descuida, cada que vengas yo estaré aquí para acompañarte
en este camino.

*Salen caminando, sin embargo, las mujeres que murmuran las ven y vuelven a
lo suyo*
Mujer principal: Uy y esa hermana qué? Jum, definitivamente aquí hay gente
que no sabe a lo que viene.

Cambio de escena
Mujer nueva: *Llega caminando a su casa y toma un espejo*
De verdad me veo tan mal como para que me miren de esa forma? Para que
me juzguen con solo la mirada? Creo que no quiero volver, aunque necesito
ayuda, no puedo creer que a donde voy a buscar ayuda también me juzguen.

Cambio de escena
*La mujer nueva y la mujer antigua se encuentran en la calle*
Mujer antigua: Hola, Dios te bendiga
Mujer nueva: Hola ¿Cómo estás?
Mujer antigua: Bien gracias a Dios, y tu?
Mujer nueva: Bien
Mujer antigua: ¿Irás a la iglesia hoy?
Mujer nueva: La verdad, no lo sé…
Mujer antigua: ¿Por qué lo dices?
Mujer nueva: No me siento muy cómoda, no tengo ropa adecuada y las demás
mujeres me miran raro.
Mujer antigua: No te preocupes por eso, no tienes que cambiar porque las
demás te miran raro, recuerda que tu vas buscando a Dios, no a las demás
personas, no quiere decir que no sean importantes, pero tu buscas algo mucho
más importante, a un Dios que no te juzga y estoy seguro que puede hacer un
cambio muy bonito, ya verás, Él puede hacer de un costal el vestido más
hermoso del mundo.
Mujer nueva: Está bien, te lo agradezco.
Mujer antigua: Bueno ¿Vamos a la iglesia?
Mujer nueva: Si, vamos.

Cambio de escena
*Pasaron 2 meses*
Mujer nueva: *Llega caminando con un vestido y su cabello arreglado, vestida
pulcramente se acerca donde las mujeres que murmuran acompañada de la
mujer antigua*
Mujer principal: Vaya, la muchacha cambió toda su vestimenta y hasta se le
ve más alegre.
Mujer nueva: Dios te bendiga!!
Mujer principal: Amén. Te ves bien, mucho mejor que antes.
Mujer nueva: Si, gracias a Dios, Él me cambió la forma de vestir, de hablar y
hasta de ser, gracias a Él soy mucho más feliz.
Mujer antigua: Vamos, hay que ir a casa.
Mujer nueva: *Se dirige a la mujer principal, estrecha su mano y le dice Dios te
bendiga*
*Las mujeres se van*
*Las mujeres que murmuran dicen a una voz*
Señor, perdonanos.

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