5 cosas que Debe Saber Sobre la Oración

Usted siempre encontrará en la Biblia que los profetas hallaban

fortaleza en su vida de oración. La oración es el lugar en el que la
presencia de Dios se manifiesta.
¿Alguna vez ha experimentado un tiempo en el que era difícil para
usted permanecer en la presencia de Dios, o en adoración? Muchas
personas hoy en día en la iglesia de Cristo se han vuelto insensibles
a Su presencia. Esto sucede porque no están en un estado de
constancia y perseverancia en oración.
5 cosas que usted necesita saber sobre la oración:
1. La oración no está basada en sentimientos. Es una
actitud, un estado mental.
Usted tiene que entender que el Espíritu Santo está en usted, Dios
es omnipresente. Aún cuando usted no lo sienta, debe reconocer
Su presencia. A medida que vaya madurando en su caminar con
Dios aprenderá a no depender de sus sentimientos. En cambio
aprenderá a apoyarse en el saber que Dios siempre está ahí.
Usted no ora porque siente, usted ora porque sabe. Sabe que está
en la presencia de Dios independientemente de lo que esté
pasando.
2. La oración hace que usted esté alerta
“Velad, pues, en todo tiempo orando que seáis tenidos por dignos
de escapar de todas estas cosas que vendrán, y de estar en pie
delante del Hijo del Hombre.” – Lucas 21:36

El Espíritu le revelará la verdad sobre cosas que están ocurriendo y

cosas que vendrán. Es por eso que cuando usted está en un estado
de oración constante nada es repentino para usted. El estar viendo
y escuchando en el Espíritu le prepara para las cosas que han de
venir. Usted estará espiritualmente listo para cualquier batalla que
enfrente.
Recuerde, el éxito del enemigo está ligado a una iglesia que no está
viendo o en sintonía con el Espíritu Santo.
En la Biblia las cinco vírgenes insensatas tenían las mismas
lámparas que las otras cinco. Eso quiere decir que en un momento
dado ellas estaban preparándose. Pero se volvieron insensibles
porque no estaban vigilantes. Si hubieran estado vigilando hubieran
llenado sus lámparas con aceite.

“Velad, pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro

Señor. Pero sabed esto, que si el padre de familia supiese a qué
hora el ladrón habría de venir, velaría, y no dejaría minar su casa.
Por tanto, también vosotros estad preparados; porque el Hijo del
Hombre vendrá a la hora que no pensáis.” – Mateo 24:42-44

3. La oración es el lugar donde Dios desata poder.

No hay límite al poder que se obtiene a través de la oración. La
oración puede invalidar lo que los hombres hayan dicho en contra
suyo.
Aquellos que tienen una vida de oración, aquellos que ayunan,
tienen el poder para controlar situaciones.
Hay territorios que el diablo ha robado en su vida y la única manera
de recuperarlos es orar para hacerlo. Usted no puede tener una
vida de oración casual, usted tiene que estar sobrenaturalmente
comprometido. La oración requiere que usted tenga un encuentro.
Cuando usted ora, algo tiene que pasar, algo tiene que cambiar.
4. La oración le da autoridad espiritual.
Hay tres maneras en que las personas ganan autoridad; por Dios,
siendo delegados y la autoridad espiritual. Cuando la autoridad no
es delegada y cuando no va de acuerdo con su llamado, es
autoridad espiritual dada. La única manera de ganar autoridad
espiritual es a través del ayuno y la oración. Conectándose con
Dios, construyendo una relación con Él, entre más se acerque a Él,
más Él se acercará a usted. Dios recompensa a quienes tienen una
relación con Él.

5. La oración es un lugar de refugio.

Se nos manda a estar constantemente llenos, cómo nos
mantenemos llenos del Espíritu? Orando en el espíritu en todo
tiempo. Cuando usted está en oración constante está en la
capacidad de traer lo sobrenatural a lo natural. Pero la oración es
también un lugar de refugio, fuerza y el lugar secreto del Altísimo.

16
Estad siempre gozosos.
17 18
Orad sin cesar.
Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con
vosotros en Cristo Jesús.
19
No apaguéis al Espíritu.
20
No menospreciéis las profecías.
21
Examinadlo todo; retened lo bueno.
22
Absteneos de toda especie de mal.
23
Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro
ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la
venida de nuestro Señor Jesucristo.
24
Fiel es el que os llama, el cual también lo hará.