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Un pasaje de chilito en los andes mágicos

Cierto día, cuando regresaba de una visita que hice a un amigo que vivía al otro lado del río yana mayo, cargadito mi costal con mis

ropas y algunas miilkapas que me hizo mi amigo filli marchaba con destino a la selva, había estado un buen tiempo en ese lugar, de

repente escuche detrás de mí los pasos de un caballo que venia medio galopado, cuando me alcanzó me fijé bien, el jinete era un

hombre gringo de barbas color castaño, paro su caballo, me saludó y me pregunto sobre a donde me dirigía, - le dije que estaba yendo

pishqosh, ´- también voy para allá me dijo, propuso llevarme en su caballo, pues como ya estaba medio cansado, acepté para que me

llevara. En el trayecto, me comentó que él era el cura de pumacuchu, un pueblo que queda a 2 horas de camino desde pishqus,

conversamos sobre muchas cosas en el trayecto, cuando llegamos al pueblo me invito a que algún día le visite en su parroquia, luego

de un corto tiempo de días de haberme quedado en el pueblo, cierta mañana, cuando iba de pasada por la plaza del pueblo, vi a una

muchacha muy linda vestida con su pintaybata y su monilla, me sonrió y me hizo algunos ademanes de coqueteos como llamando mi

atención, ella se acercó y me dijo que hacia un joven tan apuesto como yo en ese lugar, en ese instante su hermosura me cautivo y yo

quede enamorado de la muchacha, le pregunté su nombre y ella me dijo que se llamaba paula, ese día estuvimos conversando algunas

cosas, pero yo tenía que seguir mi camino con destino a la selva, en el trayecto de mi viaje iba pensado mucho en paula, sobre que
estaría haciendo en ese momento, que sería de su vida, me preguntaba constante mente sobre si la volvería a ver algún día otra vez,

pensaba que si en mi próximo viaje la encontraría en el mismo lugar o quizá para entonces ella ya se haya ido o ya haya formado su

familia, y así, ya había emprendido varios horas mi camino, y ya era de noche, vi que esa noche iba a ser luna llena, decidí seguir mi

camino de noche, cuando ya eran aproximadamente las 11 de la noche, en eso, detrás de una gran roca nomas salió paula haciendo un

ademan de asustarme, salto diciendo buuu, te asusté - dijo y yo embargado por la gran alegría de verla le pregunté que me pelliscara si

me encontraba en un sueño, ella se huajaylló diciendo que me estuvo siguiendo de lejitos nomas y que ya cansada de seguirme decidió

acercarse, me dijo que dejara de seguir mi camino y me propuso que le hiciera un juramento en ese lugar, que cada luna llena nos

encontrariamos ahí en el mismo lugar junto a la roca de lo contrario mi vida correría peligro, sentí un gran espanto cuando me fijé en

sus pies y tenia patas de gallina y desde ese entonces, cada luna llena me encuentro con ella, cada luna llena junto a la roca, porque si

desobedeciera mi vida corre peligro.

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