UNIVERSIDAD NACIONAL INTERCULTURAL DE LA AMAZONIA

FACULTAD DE EDUCACIÓN INTERCULTURAL Y HUMANIDADES

ESCUELA PROFESIONAL DE EDUCACION PRIMARIA BILINGÜE

TEMA

CUENTOS REGIONALES

ESTUDIANTE: PATRICK GERMAN MONTALVAN PASQUEL

CURSO: TALLER DE TEATRO Y ARTES PLASTICAS

DOCENTE: ZAMARA ELAINE PONCE BARDALES

CICLO: III

GRUPO: I

Manantay – Perú

2023
 UN ENCUENTRO INESPERADO

Hace algunos años, decidí ir a trabajar en la

madera, ya que un amigo me dijo para ir a
trabajar por allá un tiempo. Durante mi
estadía en ese trabajo, escuché rumores sobre
el Chullachaqui, un ser misterioso y travieso
que se decía que habitaba en lo más
profundo del bosque.

Un día, mientras andaba por el bosque, me

encontré con un sendero estrecho y poco
transitado. Sentí una extraña sensación de intriga y curiosidad, así que decidí
seguirlo. A medida que avanzaba, los sonidos de la selva se volvieron cada vez
más silenciosos, como si el bosque estuviera conteniendo la respiración.

De repente, me encontré en un lugar libre solo

rodeado de árboles grandes. Fue entonces
cuando lo vi un ser pequeño, con una
apariencia algo extraña, era el Chullachaqui.

El Chullachaqui me observó y comenzó a jugar

conmigo, escondiéndose detrás de los árboles y
haciendo pequeños ruidos para desconcertarme.
Sentí un poco de temor porque era algo que no
vi en ninguna parte.

A medida que pasaba el tiempo, el Chullachaqui parecía cada vez más cómodo
con mi presencia, porque sentía que se acercaba cada vez más. En algún
momento llegué a sentir que quería que lo siguiera, pero como estaba algo
atemorizado decidí regresar al campamento.

Después de un tiempo, no sentí nada raro en el trabajo todo transcurría con

normalidad y pude completar el tiempo de trabajo con normalidad, pero lo
extraño paso cuando ya era tiempo de regresar a nuestros hogares. En pleno
camino de regreso logré oír algunas voces que venían desde el bosque, y cuando
en un momento decidí voltear a ver, pude observar que ese misterioso ser nos
estaba observando y me miro y sentí que se despidió de mí.
 UNA LUZ EN LA OSCURIDAD

Hace algún tiempo, decidí

aventurarme en un viaje a una
comunidad que estaba rio
arriba. Y estando ahí los
lugareños de esas zonas me
contaron varias historias sobre
las criaturas que existían por
esas zonas, pero había una
criatura mágica que me llamo la
atención y era la Lamparilla,
cuya luz brillante y cálida
guiaba a los viajeros perdidos
de regreso a casa.

Una tarde, mientras caminaba por el bosque, me encontré con un sendero

cubierto de hierba y rodeado de árboles altos y antiguos. A medida que
avanzaba, el bosque se iba oscureciendo cada vez más hasta que me agarro
la noche en pleno bosque, estaba perdido ya que no conocía ese lugar y
sabia como regresar.

De repente, una pequeña luz comenzó a brillar en la distancia. Me acerqué

en silencio ya que no sabía lo que era, y mientras más me acercaba, más
sentía que la luz se iba alejando como si estuviera invitándome a seguir su
luz para encontrar el camino de regreso a casa. Me sentí atraído por su
resplandor y decidí confiar en ella.

A medida que la seguía, sentía que me estaba guiando hacia la salida del
bosque para que pudiera encontrar el camino. Después de un tiempo, la Luz
me condujo a un sendero en el bosque donde pude ver las luces de la
comunidad a lo lejos. Y en ese momento me di cuenta que la luz ya había
desaparecido, me sentí confundido por todo lo que había pasado, pero
gracias a ese suceso pude encontrar el camino para regresar.
 UN VIAJE TURBULENTO

Un día decidí aventurarme

en un viaje con algunos
pescadores. Y en una de
las conversaciones que
tuvimos me contaron
sobres una criatura
fascinante que era la
Yacumama, una serpiente
gigante que habitaba en los
ríos más profundos y
oscuros de la región.

Un día, mientras navegábamos por un río serpenteante, sentimos una

extraña vibración en el agua. De repente, sentimos que algo golpeo fuerte
el bote en donde estábamos en el rio se empezó a ver unas fuertes oleadas
que parecía que intentaba voltear el bote.

Todo paso en un buen rato, pero si nos dejo un buen susto y mas a mi que
no estaba familiarizado con esas cosas, ya después de que toda había
pasado las personas que iban conmigo me dijeron que todo lo que había
pasado era causado por la yacumama la serpiente gigante de la que me
habían hablado durante el viaje.

Yo me quede sorprendido y con muchas dudas al respecto por que no podía

crear que algo así fuera cierto ya que la yacumama es un ser mitológico de
la región y casi nadie lo ha podido ver.
 LA MUJER DEL RIO
Yo trabajaba en la pesca desde ya hace
algunos años, me embarcaba rio arriba en
busca de un lugar donde instalarnos para
poder empezar con la pesca del día,
navegando un buen rato llegamos a un lugar
que se veía bien para empezar a trabajar.
Una vez llegamos al lugar nos instalamos y
nos preparamos para empezar a trabajar al
día siguiente temprano. Ya llegando el día
siguiente empezamos temprano a trabajar,
agarramos las trampas y empezamos a
templarlas en el rio para recolectar los peces, templamos varias trampas para sacar muchos
peces y las dejamos ahí para esperan que caigan los peces.
Al día siguiente me dirigí con mi canoa a revisar todas las trampas para sacar los peces,
revisando una por una hasta que llegue a una que estaba atajada y no podía revisarlo, así que
decidí sumergirme para poder desatorar la trampa y en eso pude apreciar a una bella mujer y me
asuste así que decidí salir del agua rápidamente y deje la trampa sin revisar.
Al llegar la noche, cuando me dispuse a dormir me
sentía algo nervioso pero igual agarre sueño, ye n
pleno sueño me paso algo que puede ni creer yo,
aquella mujer que había visto al sumergirme en el
agua estaba ahí y me dijo que quería que me fuera
con ella y que a cambio de eso me daría una buena
pesca como recompensa, y que al tercer día me
llevaría con ella.
Al día siguiente me levante confundido por todo lo
que me había pasado, me levante agarre mi canoa y
me dirigí a revisar mis trampas, y al hacerlo me
lleve una gran sorpresa todas mis trampas estabas
llenas de peces tal y como me había dicho aquella
mujer, yo me puse contento por todo lo que había
recolectado ese día.
En el segundo día todo paso igual, tuve una pesca y en eso me puse a pensar en lo que me había
dicho aquella mujer que me daría una buena pesca hasta el tercer día y que ese día me llevaría
con ella en eso me llene de preocupación por que todo estaba pasando así, en eso decidí
contarles a mis compañeros todo y ellos también se preocuparon y entre todos decidimos que
regresaríamos ese día antes que llegue el tercer día donde ella me llevaría.
Alistamos todas nuestras cosas y emprendimos el viaje de regreso durante el viaje pude sentir
que el rio me llamaba y ese sentimiento no desapareció hasta que por fin llegué al puerto donde
desembarcamos.